Capítulo VIII:

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CRÓNICAS DE UNA INFIDELIDAD

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Las chicas de Itachi.

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―Sakura―

La pelirrosa tembló al oír esa voz detrás de ella, apretó la copa de cristal entre sus manos y volteo despacito observándolo. Los ojos negros del hombre la recorrieron y una torcida sonrisa se formó en sus labios al llegar esos ojos verdes.

―Madara― Sonrió nerviosa ―Buenas noches― Tartamudeo y supo que había quedado roja cuando sintió sus mejillas arder.

―Tranquila, pequeña― Hablo aproximándose más a ella y la pelirrosa retrocedió unos pasos chocando con la mesa que adornaba el banquete de esa noche ―No entiendo aún como te dejaste convencer por ese mocoso de engañarme― La reto serio.

―Tío Madara―

El Uchiha mayor retrocedió alejándose de la chica y observó a su sobrino predilecto a unos pasos de ambos.

―Sasuke― Lo saludo ―Estaba conociendo a la bonita chica de tu hermano―

―Itachi no es ni novio― Corrigió de prisa la pelirrosa ganándose una mirada furiosa por parte de Sasuke ―Permiso, voy a salir a tomar aire― Se excuso.

Sasuke intentó seguirla pero Madara lo detuvo tomándolo del brazo y evitando que alcanzara a la pelirrosa.

―Tú y tu hermano deberían tener mucho cuidado con esa mocosa― Sasuke frunció el ceño sin entender sus palabras ―No les conviene a ninguno de los dos―

―Eso lo decido yo― Hablo serio soltándose de su agarre ―Y mi hermano no tiene nada que ver con ella―

La carcajada de Madara lo interrumpió.

―Sabía que a ti y a tu hermano les gustaba compartir― Se burlo ―Pero no pensé que compartieran también la novia―

Sasuke apretó los puños furioso, respiro profundo intentando tranquilizarse y no romperle la nariz de un golpe a su tío.

―Madara― Lo llamo aproximándose a él y sonrió de lado ―No te le vuelvas a acercar a mi mujer― Lo amenazó.

Al Uchiha mayor se le borro la sonrisa.

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―Cumplí mi parte del trato― Hablo la pelirrosa observando a la hermosa mujer frente a ella ―Traje a Itachi― Mencionó ubicándose a su lado.

Mikoto sonrió volteando a verla. Estaban en el jardín de la gran mansión de los Uchihas, las farolas iluminaban el lugar y la música llegaba muy bajito a sus oídos.

―Estas bellísima, Sakura― La alabo al verla vestida con uno de sus diseños ―Gracias por traerme a mi hijo―

La pelirrosa sonrió de lado.

―Izumi se ve muy bonita― Susurro ―¿También la chantajeaste para que viniera? ― Bromeó y es que en esas semanas que había estado trabajando para Mikoto, Sakura le había agarrado mucha confianza.

La pelinegra largo una carcajada dando media para volver a sala de estar con sus invitados.

―Espero pronto volver a tener a mis dos nueras en casa― Comentó divertida ―Y quizás un nieto―

Sakura palideció ante esa última idea. Definitivamente no estaba en sus planes ser madre pronto.

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Serian cerca de las dos de la mañana cuando ya la mayoría de los invitados se empezaron a retirar de la gran casa de los Uchiha. Itachi había echo las pases con su padre y Mikoto sonrió complacida al lograr que todos los hombres en su familia volvieran a estar en armonía.

―¿Te llevo a casa, pequeña?―

Sakura sonrió de lado negando con la cabeza y observó a Izumi a unos metros de ambos. En toda la noche la castaña no se le había acercado, ni a ella, ni a Itachi.

―¿Haz hablado con Izumi? ― Le preguntó observándolo a los ojos, Itachi negó con la cabeza.

―Ella ya no quiere estar conmigo― Hablo serio ―Fue ella quien decidió dejarme― Comento observando a su ex novia de reojo ―Y estoy seguro que ya no me quiere―

―¿Y entonces porque no ha dejado de observarnos en toda la noche?― Preguntó divertida.

Itachi frunció el ceño confundido y sintió ese aroma a cerezas cada vez más cerca. La pelirrosa pasó una de sus manos por la nuca del Uchiha para acercarlo a ella, se mordió el labio inferior nerviosa y se aproximo a sus labios a besarlo.

―Sakura― La reto serio.

―Ya cállate―

Sakura sonrió de lado antes de besarlo, paso su lengua despacito por su labio inferior y lo apretó de la nuca enredando sus dedos en el largo cabello azabache. Itachi sonrió entre sus labios cuando vio la cara de su pequeño hermano de reojo, paso ambas manos por la cintura de la chica apretándola contra su pecho y la acercó a él disfrutando lo que probablemente sería el último beso con su ex cuñada.

―Ya casi la tienes― Bromeó la pelirrosa al ver a la castaña salir furiosa de la casa ―Ve por ella, yo me pido un Uber―

Itachi sonrió acariciando la mejilla sonrojada de la pelirrosa, se aproximó a su rostro y deposito un pequeño beso en su mejilla.

―Gracias, Sakura―

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―¿Qué haces tú aquí?― Pregunto incrédula al verlo de pie en la puerta de su departamento ―¿Cómo entraste? ― Volvió a preguntar y él la observó de pies a cabeza, llevaba solo un remeron holgado color blanco y estaba segura que se le traslucían los pezones porque hacía mucho frío ―Sasuke― Chillo al ver que él no pensaba contestarle.

El Uchiha sonrió de lado, galán como siempre. Aún llevaba el traje con el que lo había visto en la fiesta.

―Escucha― Suspiro ya cansada ―Si viniste a hacerme un reclamo por lo de tu hermano―

―No― La interrumpió y la pelirrosa frunció el ceño ―Vine porque ya me tienes harto― Hablo serio y la vio abrir la boca enojada de seguro para reprochar ―Me vas a perdonar― Ordeno.

Ella largo una risita burlona y entorno la puerta sin cerrarla del todo en una clara señal que no iba a dejarlo entrar a su hogar.

―Bien― Bufo ―Yo también puedo ser un caprichoso―

Sakura entrecerró los ojos y lo vio quitarse el saco del traje y la corbata, ambas prendas cayeron al suelo del pasillo del edificio.

―¿Qué crees que estas haciendo?― Chillo al verlo desabotonarse la camisa y trago grueso al ver sus pectorales desnudos.

―Vas a hablar conmigo por las buenas― Susurro dejando caer la fina camisa blanca al suelo ―O por las malas― Sonrió desabrochando el cinturón del pantalón y bajando la cremallera del mismo.

―Sasuke― Lo reto abriendo la puerta cuando el Uchiha se quito los zapatos y las medias ―Te pueden ver mis vecinos― Chillo enojada.

―¿Entonces me dejaras pasar? ― Pregunto bajándose los pantalones y solo quedo en bóxer en medio del corredor.

Sakura agradeció que aún fuera de madrugada y sus vecinos no anduvieron deambulando por el pasillo.

―No― Contesto intentando sonar lo más convincente posible pero la realidad era que desde que el Uchiha menor se había comenzado a quitar la ropa su cerebro ya no funcionaba correctamente.

―Bien― Suspiro apoyando ambas manos en el elástico del bóxer ―No me dejas más opciones― Hablo divertido bajándose el bóxer y quedando completamente desnudo ante ella.

Sakura lo miro sonrojada y desvió la vista de prisa evitando ver su miembro desnudo.

―Si muero de neumonía será tu culpa― La acuso temblando de frío.

Sakura agudizó el oído al escuchar las llaves abrir la puerta de junto, avanzo unos pasos saliendo al corredor del edificio y observó a ambos lados preocupada que alguien viera a su muy atractivo ex novio desnudo en medio del pasillo del edificio. Suspiro cansada cuando la puerta vecina se abrió y tomó a Sasuke de la muñeca obligándolo a ingresar al departamento. En ese mismo momento su vecina, una señora mayor de unos setenta años salía del departamento vecino con su pequeño chihuahua color negro.

―Buenos días― Saludo nerviosa la pelirrosa recogiendo de prisa la ropa de Sasuke que estaba regada en el suelo.

―Buen día, jovencita― Sonrió la anciana a modo de saludo y la pelirrosa ingreso de prisa al departamento lanzando la ropa sobre el sillón.

―¿A caso estas demente? ― Chillo cerrando la puerta detrás de ella y trato de enfocar su vista en los ojos de Sasuke pero fue inevitable ver como su miembro comenzaba a engrosarse, él sonrió orgulloso.

―Puedes verlo todo lo que quieras― Se burlo y Sakura lo miro furiosa quedando roja de la vergüenza ―Aunque me gustaría más tenerlo dentro de ti― Susurro aproximándose a ella.

Apoyo ambas manos en la cintura de la chica y la acercó a él, Sakura tembló entre sus manos cuando sintió ese costoso perfume envolverla.

―Sakura― La llamo, ella levanto la vista y observó esos hermosos ojos negros ―Yo te amo―

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