Bala XIX


Chaka estaba terriblemente disgustado.

Pese a la creencia popular de sus compañeros de trabajo, él no era un estúpido. Simplemente jugaba a su papel de estúpido porque disfrutaba de hacer cabrear a sus colegas, o enemigos, así que él sabía algo había pasado entre el jefe Bando y Ginji.

¿Qué ocurrió exactamente en esa oficina? Chaka no estaba del todo seguro, pero cuando llegó en ese momento, esos dos parecían estar a punto de matarse. Y como Chaka no era un estúpido, él no creía una mierda sobre que Ginji lo acompañara al club de striptease que frecuentaba, por órdenes de Bando, para asegurarse de que él no hiciera una cagada.

La verdad sobre esa repentina orden de vigilancia era que, o Bando estaba tan cabreado que no quería tener cerca a Ginji por esa discusión en la última guarida Yakuza, o le tenía miedo. Chaka miró de reojo a su obligado compañero, él tenía su usual expresión de 'háblame-y-éstas-muerto' en su rostro.

Sí, probablemente era la segunda opción.

Desafortunadamente, las chicas del club también parecían tenerle miedo a Ginji, Chaka no podía culparlas, y evitaban subirse a bailar al escenario que estaba cerca de él. Pero como esa masa gigante de amargura estaba a su lado, Chaka no podía disfrutar correctamente de las chicas… y eso le estaba irritando.

Él tenía que deshacerse de Ginji, y tenía que hacerlo rápido antes de que los echaran a ambos del club.

Por esa razón, Chaka decidió pagarse, de nuevo, un baile en un cuarto privado. Su propio cuarto privado, que Rowan le había regalado. Ese hombre sí que sabia como tratar bien a sus clientes.

Luego de solicitar el baile y dirigirse hacia su cuarto, Chaka ingresó para después colocar rápidamente una mano sobre el marco de la puerta, bloqueando el acceso a Ginji. "Alto ahí grandote, este baile es solo para uno."

Ginji lo miró con una ceja ligeramente alzada, como si él estuviera viendo a una mosca que aterrizó atrevidamente en su mano. Ese cabrón. "El jefe Bando dijo que- "

"Ta-ta-ta-ta!". -Chaka lo interrumpió, moviendo rápidamente su mano frente su rostro, como si estuviera espantando a un mosquito. "Se lo que dijo el jefe, yo estaba ahí, pero me importa una mierda. La nena sexy de aquí la pagué yo, así que ella moverá su lindo trasero solo para mí. Tú puedes ir a pasear por ahí, haciendo lo que mejor sabes hacer."

Ginji no dijo nada.

"No me refiero a cortar personas en pedacitos, sino a asustarlos y provocarles pesadillas."

De nuevo, él no obtuvo ningún tipo de respuesta.

"Pero…". -Continuó Chaka." Sí tanto insistes en quedarte, vigila que nadie venga a molestarme mientras disfruto de mi espectáculo privado, ¿quieres?". -Y sin esperar respuesta, él le cerró la puerta en la cara a Ginji.

Chaka esperó durante un momento mientras sacaba su pistola, sí ese imbécil intentaba entrar, él le pegaría un tiro. Lamentablemente, Ginji pareció aceptar la idea de quedarse vigilando afuera.

Chaka chasqueó la lengua y guardó su arma, al menos se pudo liberar temporalmente de esa molestia. Él se volteó a ver a la bailarina, ella lo estaba observando en silencio, pero claramente confundida por lo que acababa de suceder.

"¿Qué? ¿Éstas esperando una invitación?". -Dijo Chaka, un poco cabreado, para luego aplaudir dos veces, sobresaltando a la chica. Excelente, ese siempre era un buen comienzo. "¡Venga, a mover ese lindo culo operado que tienes ahí!"


Aunque Gretel se sintió mal por dejar a su hermano con el extraño espécimen conocido como Bao, ella no podía dejar a Rock a solas con Revy, ya que ella no confiaba lo suficiente en Revy como para dejarle a cargo la seguridad de Rock. De hecho, Gretel sospechaba seriamente que Rock estaba en lo correcto al señalar a esa mujer como su principal fuente de sus problemas.

Debido a esto, Gretel terminó acompañando a los dos adultos hacia el infame Little Pidgeons. Luego de un corto viaje en auto, ellos habían llegado al club. Pero ellos no pudieron dar ni un paso hacia el establecimiento cuando Revy detuvo a Rock.

"Aclaremos esta mierda.". -Dijo Revy, cruzada de brazos y con una expresión seria en su rostro. "Si vas a entrar conmigo al jodido club, hay unas reglas absolutas que debes seguir y obedecer."

Rock asintió. "Correcto."

"No hablaras con nadie si yo no lo hago primero.". -Dijo Revy, levantando uno de sus dedos.

"Sí."

"Y tampoco vas a mirar a nadie, y con eso me refiero a las jodidas bailarinas arriba del escenario."

"Lo entiendo."

"…No estas escuchando nada de lo que estoy diciendo, ¿cierto?"

"Me perdí en 'aclaremos esta mierda'.". -Admitió Rock, solo para luego ser agarrado por los hombros y sacudido con violencia.

"¡Presta atención, bastardo!"

Gretel observaba inexpresivamente el intercambio entre esos dos. Para tratarse de un asunto tan serio, ellos seguro estaban relajados como para hacer tonterías. Pero, por otro lado, Gretel entendía la costumbre de Rock de hacer cabrear a Revy, ella era demasiado fácil de provocar y sus reacciones eran bastante divertidas.

"Entonces…". -Dijo Gretel, para intentar detener a Revy antes de que ella desnucara a Rock. "¿A quién buscamos exactamente?"

Afortunadamente para Rock, su intervención funcionó y Revy lo soltó. "Pues al dueño del club."

"Dar más detalles no te matará, Anego."

"Tsk, a eso iba. Reconocerán a Rowan fácilmente, es un negro con peinado afro y que usa un traje horrible…". -Revy hizo una pausa por un momento. "Tal vez deberías mantenerte alejado de él, mocosa, al hijo de puta de Rowan le gusta traficar con pornografía infantil y esas mierdas snuffs."

"Qué!?". -Exclamó Rock. "Entonces ella no-!"

"Descuida, Boss.". -Interrumpió Gretel, mostrándole una sonrisa torcida. "No es la primera vez que me encuentro con personas así."

Rock hizo una mueca, claramente disgustado. "Aun así, no me gusta la idea de que te acerques a ese tipo."

"Sí te hace sentir mejor, si Rowan intenta ponerle un dedo encima, le daré una paliza."

"Aww, gracias Anego, estoy feliz de que te preocupes por mí, pero no es necesario. Simplemente lo mataré y ya está."

Revy volvió a chasquear su lengua. "¿Quién se preocupa por ti? Y no, no puedes matarlo. Rowan es un cliente regular de la compañía Lagoon."

"Me conformaré con la paliza, entonces."

"De acuerdo, venga, entremos de una jodida vez.". -Revy se volteó a ver a Rock y clavó un dedo puntiagudo en su pecho. "Y nada de embobarse viendo el culo de otras mujeres."

"Eso es un poco injusto.". -Se quejó Rock. "No puedes llevarme a un club de striptease y pedirme que no vea nada. ¿Qué clase de hombre haría eso?"

"Entonces te quedarás en el jodido auto, imbécil."

"Sí, los dos sabemos que eso no va a pasar.". -Dijo Rock. Él apartó la mano de ella y comenzó a caminar rápidamente hacia la entrada. "Chop-Chop señoritas, no tenemos todo el día."

"¡Estoy hablando en serio cabrón, pobre de ti si te pillo mirando a las bailarinas!"

Gretel sonrió divertida. Revy estaba siendo bastante directa, pero Rock parecía no darse cuenta, o bien fingía no hacerlo simplemente para hacerla cabrear. Y lo segunda opción parecía lo más probable. Por supuesto, ella tampoco podía dejar pasar esa oportunidad. "¿Eso significa que solo quieres que Boss te mire a ti?"

"… ¿Y qué?

"Esfuérzate, Anego."

"Cállate, perra."


La primera impresión que tuvo Rock sobre el club Little Pidgeons al entrar, fue que el lugar era hervidero de caos. La música era demasiado fuerte, las luces lo desorientaban un poco y había un extraño humo de quien-sabe-que flotando en el aire.

El establecimiento estaba repleto de personas, en su gran mayoría hombres, sentados cómodamente en sillas y mesas ubicadas muy cerca del escenario y disfrutando del espectáculo. También había otras chicas trabajaban como camareras, con ropa igualmente reveladora, transportando bebidas alcohólicas en bandejas a quien lo pidiera.

Y eso que era plena tarde… todavía faltaban algunas horas para que el anochecer.

Pero Revy fue capaz de guiar a Gretel y a él a través del club repleto de gente sin ningún problema.

Luego de unos minutos, ellos encontraron al dueño del local, sentado en un gran sillón, charlado y riendo con las dos mujeres a las que él abrazaba. Lamentablemente para Rowan, Revy cortó su entretenimiento al exigirle hablar con él en privado.

Pero en Little Pidgeos no había una oficina, o cualquier otro lugar tranquilo y silencioso, para tener una conversación seria. Así que cuando Rock solicitó un lugar como ese, Rowan le ofreció dos opciones; el camarín donde se preparaban las bailarinas, o un cuarto donde se hacían bailes privados.

A modo de broma, Rock eligió la primera opción para tener la oportunidad de ver a las chicas cambiarse, solo para recibir al instante un codazo en las costillas, por parte de Revy, que lo dejó sin aire. Rowan aceptó tener la pequeña reunión allí, ignorando la agresiva reacción de ella.

Sin embargo, a pesar de las protestas y disgusto de Gretel, Rock decidió dejarla afuera del camarín. Rock sabía que la niña era perfectamente capaz de defenderse, y él creía en la palabra de Revy sobre darle una paliza a Rowan si él intentaba algo, pero aun así, Rock no quería que Gretel estuviera cerca de ese hombre.

"Bueno, bueno, Revy.". -Dijo Rowan, él ignoró la mirada penetrante que le dirigía Gretel y cerró una pequeña cortina a modo de puerta. "¿Finalmente tus ganas de sacudir tu culo arriba de mi escenario pudieron más que tus ganas de matar gente, nena?"

"Nada de eso, solo estamos aquí por negocios.". -Contestó Revy.

Rock no sabía si ella aún seguía molestándolo por su pequeña broma fallida en el Yellow Flag, o como venganza por elegir el camarín como sala de reuniones, porque Revy había decidió sentarse justo frente a él, en un pequeño taburete que le trajo una bailarina, y ahora ella se cruzaba de piernas cada tanto…de una manera deliberadamente lenta y sugerente.

Pero, consciente de esto, Rock no tenía la menor intención de detenerla.

"Aunque la idea de que tus bailes aquí, me parece un buen negocio.". -Comentó él, por fin quitando su atención de las piernas de Revy. "Quiero decir, serias muy popular y el club se llenaría enseguida."

"Así que admites que quieres verme bailar y mover mi culo en un escenario?"

"Yo pagaría por ver eso.". -Replicó Rock, y él no estaba del todo bromeando.

Rowan asintió con entusiasmo y le puso un mano en el hombro. "Escucha al hombre, Revy, él está en lo correcto. La gente pagaría mucho por verte…por cierto, ¿Quién carajos es este tipo? "

"Otro imbécil más que conozco, eso es lo que es."

"Otro imbécil?". -Rock hizo su representación de herido-preocupado, con sus manos sobre su pecho. "Y yo había pensado que era el único para ti, nena, estoy devastado."

"Vete a la mierda, y no me llames nena."

"En cualquier caso mi nombre es Rock, y ella está en lo correcto, Rowan. No estamos aquí para disfrutar de un baile de tus chicas…aunque quizás más tarde podría- "

"De ninguna jodida manera.". -Cortó Revy, dirigiéndole una mirada helada. "Vete olvidando de eso."

Rock soltó una pequeña risa y continuó con la explicación. "Estamos aquí por un negocio de la señorita Balalaika."

Al instante de oír ese nombre, la expresión amigable de Rowan fue reemplazada por una de miedo. El hombre retrocedió unos pasos y sacó una pistola. "¡Oh, diablos no!". -Exclamó Rowan, apuntando a Rock. Revy inmediatamente sacó sus propias armas. "¡No te atrevas a moverte, Two Hands, o le voy a pegar un tiro a este idiota!"

"...Por qué yo? Quiero decir, ni siquiera tengo un arma,"-Se quejó Rock. Él no sabía si sentirse feliz por ya no tener miedo al ser apuntado a la cabeza por una pistola, o sentirse triste por esa misma razón."Revy es la peligrosa aquí."

Mientras tanto, Revy chasqueó su lengua con molestia. "Tranquilo, Rowan…"

"Está bien, lo admito. PUEDE que yo haya estado vendiendo un poquito de droga últimamente, ¡Pero no planeo ser competencia de ella ni nada de eso! Es solo que a veces los clientes piden un poco y- "

"No estamos aquí por eso, mierda.". -Le cortó Revy, ahora rechinando sus dientes. "Si Sis quisiera matarte, ella ya lo habría hecho. ¡Así que guarda esa puta arma o te la voy a meter en el culo!"

El hombre parpadeó un par de veces y luego bajó su arma, Revy hizo lo mismo un segundo más tarde. "Oh…".

"Sí, oh.". -Dijo Rock, inexpresivo. Él sacó de su bolsillo una pequeña fotografía. "Nosotros solo queremos información sobre este hombre."

Rowan, ahora un poco más tranquilo, se acercó para inspeccionar de cerca la fotografía. "Joder, el hijo de puta es grande…"

"Es lo que dijo tu madre anoche.". -Dijo Revy, parecía que ella aún estaba un poco cabreada por el anterior incidente.

"Deja a mi madre en paz, perra. Mamá Pigeon era una santa."

"En realidad.". -Dijo Rock. "Me refería al otro hombre, el rubio."

"¡Ah, te refieres al buen Chaka!"

"Lo conoces?"

"Bueno, un poco, sí. Él apareció varias veces por aquí.". -Rowan sonrió. "El hombre no tiene problemas en soltar dinero, por eso tiene su propio cuarto privado."

"Se lo compró?". -Preguntó Revy, alzando una ceja.

"Nah, yo se lo regalé por ser un cliente tan entusiasta. En todas las veces que él vino a mi club, solicitó un espectáculo privado de S/M."

"Todo un fanático, eh…Aunque no entiendo que le ven a eso del sadomasoquismo. Quiero decir, ¿Cómo puedes ponerte cachondo golpeando a otro, o ponerte cachondo siendo golpeado?"

"Ja! No sabes una mierda sobre el sexo, Rock.". -Dijo Revy, sonriendo. "El S/M no es son solo golpes e insultos, es un arte que requiere una mano firme para darle a tu pareja la justa dosis de sufrimiento como para hacerla gozar."

"¡Diablos sí!". -Exclamó Rowan, alzando sus dos pulgares con aprobación. "Two Hands sabe de lo que habla, ella hizo varios espectáculos S/M aquí, y ahora esas chicas solo quieren trabajar con ella."

"Oi, no vayas contando esas cosas, pendejo."

"¿Cuál es el problema? Eres toda una experta con los látigos ¡Es una vergüenza que no estes orgullosa de eso, nena!"

"¿Quién dijo que no estoy orgullosa? Simplemente no quiero que vayas hablando sobre mis negocios pasados, así que mejor cierra el pico, estúpido."

"…Sube tu culo a mi escenario y tenemos un trato."

"Vete a la mierda, Rowan… no volveré a caer en eso."

Rock carraspeó, un poco incomodo por hacia donde tomó rumbo la conversación." Bueno, aun y cuando esa es una información muy interesante, necesito saber si ese hombre, Chaka está aquí, y en caso de que no lo este, necesito saber en qué horarios viene."

"Hoy están de suerte, Chaka llegó un poco antes que ustedes.". -Rowan frunció el ceño. "Y ahora que lo recuerdo, ese tipo grande también está aquí."

Rock y Revy intercambiaron miradas, ellos estaban en el lugar correcto. Ella se puso de pie. "¿En qué cuarto están ahora mismo?"

"Aguarda un segundo, Two Hands. No sé qué clase de trabajo estás haciendo para Balalaika, ni me interesa saberlo…". -Rowan la señaló acusadoramente con su dedo. "Pero no quiero un jodido tiroteo y que destruyas mi club."

"…Por que todo mundo insiste en echarme la culpa de los tiroteos? Yo no hago nada."

"¿Qué no haces nada? ¿Estas bromeas, chica? Bao me ha contado suficientes historias tuyas sobre tu maldita mala costumbre de comenzar tiroteos por cualquier cosa, y no quiero esa mierda en mi club. ¿Lo entiendes, perra? Rompe algo, o mata alguien y se lo diré a Dutch."

Rock no pudo evitar sonreír. Revy, en cambio, puso los ojos en blanco. "Lo que sea, guíanos hasta ese tipo, tenemos que hablar con él sobre un par de cosas."


No era la primera vez que Ronnie sentía dudas sobre las ordenes de su jefe.

Por supuesto, tampoco era la primera vez que él mataba a alguien siguiendo dichas ordenes, pero esta misión en particular le daba mala espina. Tres o más guaridas de Yakuzas repletas de cadáveres, varios de ellos desmembrados, hacían que sus alarmas internas se disparasen.

Ronnie podía ser todo un hijo de puta, no se podía llegar tan lejos en la mafia, en cualquier mafia, sin ser un hijo de puta. ¿Pero quién diablos era tan enfermo y psicópata, aparte de la jodida Sawyer The Cleaner, como para descuartizar a sus enemigos?

Para él, era más humano simplemente pegarle un tiro en la cabeza a su objetivo en vez de cortarlo en pedacitos.

Si fuera decisión suya, Ronnie dejaría de lado todo el asunto. Había muchos más clientes a los cuales venderles la mercancía. Eso era lo bueno del negocio de la venta de drogas y armas, siempre había más clientes.

Pero si algo había aprendido en sus años al servicio de Verrocchio, era que él nunca debía cuestionar ni desobedecer las órdenes. No si quería evitar recibir una golpiza o terminar muerto, como muchos otros idiotas que se atrevieron a cuestionar las órdenes del jefe. Pero eso no evitaba que Ronnie tuviera dudas al respecto.

Él contuvo un suspiro mientras se bajaba del auto en el que él y otros dos hombres habían llegado. Había otro auto que los acompañó, con otros cuatro hombres. Todos ellos se bajaron y se reunieron junto a Ronnie en la entrada del club.

"¿Cuál es el plan, Jaws?". -Preguntó uno de sus hombres, Emilio.

"No me llames así, idiota. Y el plan es entrar, encontrar a los tipos que hicieron cabrear al jefe, y matarlos.". -Respondió Ronnie, forzando un tono de voz relajado. "Lo de siempre."

"¿Y cómo sabemos a quién tenemos que matar?"

"Tu dime, tú los viste."

"Los vi de espaldas, cuando ya se estaban alejando."

Ronnie se volteó a verlo, intentando reunir la poca paciencia que era capaz de generar. "Dijiste que viste a un tipo grande y a un tipo rubio."

"Sí, pero en Roanapur hay un montón tipos grandes, y también un montón tipos rubios.". -Replicó Emilio.

"Entonces mataremos a cualquier imbécil de dos metros de altura, y a cualquier otro imbécil que sea rubio.". -Dijo Ronnie, con irritación. "¿Qué pasa con esta charlatanería? Normalmente dices 'si' y pasas a la acción. ¿Hoy te despertaste maricón o qué?"

"Simplemente quiero estar seguro de a quien vamos a matar. No quiero cagarla y que Verrocchio se cabree conmigo por matar a un tipo equivocado."

"El jefe no se cabreará por eso, Verrocchio ha cometido muchas equivocaciones antes."

"…Aunque pienso que no sería malo disfrutar un poco de las chicas de Rowan.". -Sugirió otro, Luciano. Los demás hombres asintieron al estar de acuerdo.

Ronnie lo miró inexpresivamente. "Estamos aquí por un trabajo serio. ¿Cuál es tu problema?"

"Estamos a punto de entrar a un jodido club de striptease. ¿Aprovechar la oportunidad de ver a chicas sexys bailando con poca ropa es un problema para ti?". -Dijo Luciano, alzando ambas cejas. "Me parece que el que hoy se despertó maricón eres tú, Jaws."

Los demás hombres se rieron, haciendo cabrear aún más a Ronnie.

"Váyanse a la mierda y dejen de llamarme así, imbéciles.". -Gruñó Ronnie. Ese estúpido apodo se lo había puesto la hija de puta de Two Hands hace años, como burla a sus aparatos dentales, y desde entonces todo mundo lo llamaba así. "Bien, podrán ver a las jodidas chicas de Rowan. Pero eso solo será después del trabajo, y si es que no mueren primero."

"Oye, decir eso es de mala suerte…"

"No me importa, todos ustedes son solo personajes secundarios."

"Pero- "

"A nadie le importan los personajes secundarios. Ahora venga, que no pienso estar todo el puto día aquí."