Luego del problema en la librería, el equipo hizo su regreso a la pequeña casa de Jekyll y esta vez con Hans acompañándoles, acomodándose de forma rápida con su propia habitación, siempre un escritor prefiere su soledad.
- Parece que se siente en casa. – Expresó Rika.
- Que haga lo que quiera, por ahora estoy agotada. – Expresó Mordred. – Nos hemos movido de ahí para allá, al menos deseo un descanso.
- Temo que no será posible. – Informó Jekyll en ese momento. – Tenemos un nuevo problema, Jack el destripador volvió a aparecer. – Al escuchar eso, Atalante se puso seria.
- ¿Otra vez? Ya van muchas ocasiones que aparece y siempre me causa problemas, lo peor es que no puedo recordarlo.
- Eso habla del ataque que tuvimos recién llegando ¿lo recuerdas Mash? – Preguntó Haji.
- Ciertamente, pero toda imagen de este servant es confusa, como si fuera parte de su Noble Phantasm el no recordar nada al respecto de su aspecto.
- Si gusta pelear dentro de las sombras, entonces hay que agarrarle con la guardia baja, seguro podrás hacer eso Atalante. – la Archer se puso tensa.
- S-Si, haré mi mejor esfuerzo. – Sonrió forzosamente, No quería hacerlo realmente pero no es que tuviera otra opción.
- Sé que puede molestar salir una vez más luego de venir pero esto es importante. – Comentó Jekyll Rika hizo ademán de restarle importancia.
- Es nuestro trabajo luego de haber llegado aquí, no es que tengamos de otra, de igual forma no nos molesta demasiado, si podemos ir ahora, pues vamos.
- Buena suerte, eso daría un respiro de paz a la gente de Londres. – Comentó Jekyll antes de que salieran. Volviendo a las frías calles llenas de neblina, tuvieron que avanzar una vez más.
- Realmente deseo terminar esto rápido así que apresuremos el paso. – Sugirió Mordred. – Hora de correr.
- Entonces Mash-chan, sujétame. – Rika se sujetó de Mash mientras que Haji lo hizo con Mordred.
- Arre como el viento Tiro al Blanco. – Exclamó Haji mientras empezaron a moverse, si podían llegar a la zona donde bien se avistó a Jack y detenerla, sería lo ideal, aunque tampoco sería muy fácil, Medea Lily pudo ver figuras mientras volaba.
- Encontré enemigos. – Informó, sacaron sus armas para atacar.
- No se detengan, destruyan únicamente para abrir paso. – Comentó Haji.
- El asunto es que todos se interponen en el camino. – Mordred destrozó a tres marionetas que buscaron atacar con sus brazos giratorios, Atalante disparó múltiples flechas para inhabilitar a dos homúnculos mientras que Vlad empaló a tres mechas con su lanza.
- Ha de ser algo muy importante que se encuentra en este camino como para encontrar bastantes enemigos retrasándonos. – Expresó el Lancer.
- Hay que despacharlos a todos de una vez, Atalante, prepárate. – La Archer asintió ante las ordenes de su master, este activó su tercera skill con la cual ganó más fuerza y su barra estaba llena, de tal modo ejecutó su NP, disparando las flechas al aire.
- ¡Phoebus Catastrophe! – Los proyectiles golpearon a todos los enemigos en ese momento que fueron derrotados por la lluvia de proyectiles, dando paso libre para continuar.
- Adelante. – Boudica sacó su carroza para moverse con mayor velocidad, Haji y Mordred subieron encima de este y fueron más rápidamente con los demás servants llegando por detrás.
- Lograron eliminar a todos los enemigos, a su paso, podrán llegar hasta la señal del servant. – Comentó Roman. – Tienen suerte si es que solo la encuentran.
- Tampoco es que sea tan fácil, ya vimos como fue el primer encuentro, ataca por atrás y en puntos ciegos, eso dificultará un poco las cosas. – Comentó Haji.
- Necesitaremos que los ataques sean a larga distancia si queremos tener una oportunidad. – Pensó Rika.
- Puede ser la mejor opción, por cualquier caso, estaremos analizando desde aquí, mucha suerte. – El doctor se despidió mientras siguieron su camino, para su suerte, no encontraron nada más como enemigos.
Llegaron hasta el destino, el humo era más denso en esa zona y vieron manchas de sangre en el suelo, como tal, varios cadáveres de policías yacían ahí.
- Hizo todo un desastre. – Expresó Mordred. – Realmente no se guarda nada.
- Aquí lo tenemos. – Vieron a la niña que estaba al frente sosteniendo sus dos cuchillas, su mejilla derecha estaba manchada de sangre luego de haber apuñalado a un policía.
- Esto es aburrido, todos estos policías no son suficiente para satisfacernos, necesitamos mejor carne.
- Ey asesina, estamos aquí. – Retó Mordred, esta volteó a verles entonces sonrió.
- Son ustedes, esperaba ver cuando volverían, realmente estamos agradecidos.
- Si tienes tiempo para hablar como los marcianos de Toy Story, seguro lo estarás para pelear. – Expresó Haji, la Assassin sonrió.
- Estábamos esperando este momento. – Se puso en movimiento, dirigiendo su ataque hacia el grupo sin antes esconderse en la neblina, miraron alrededor.
- Puede aparecer en cualquier momento… - Comentó Rika.
- Es cierto… - Escucharon una voz ajena, a su costado vio a un hombre de cabello azulado, vistiendo un ropaje blanco, se hizo a un lado.
- Esa ropa… eres caster. – Expresó la pelinaranja.
- Parece que lo dedujiste, pues sí, soy un caster que iba de paso, por sí acaso, puedes llamarme P. – Expresó este. – Como he seguido sus pasos por un tiempo, ya sé que observaron esa nota dejada por aquel científico que murió a manos de Mephisto.
- Eres un buen adivino ¿y bien? ¿Esto igual es obra suya?
- Si hablas de la aparición de Jack, es correcto, yo y mis otros dos colegas estamos detrás del humo demoniaco, todo con tal de conseguir nuestros fines.
- Pues eso no será para siempre, vamos a detenerlo.
- Eso espero ver, ya les aseguro que no será nada fácil, pues contamos con cierta bendición que nos proporciona una fuerza extra.
- El grial.
- Exacto, debido a mi naturaleza curiosa, es un material de investigación bastante extravagante, me gustaría analizarlo un poco más.
- Pues eso lo veremos, a ver si podrás seguir adelante después de esto. – Rika buscó golpearlo pero el caster P detuvo su ataque con una sola mano.
- Si pensaste que podrías herirme, estás equivocada.
- Ya veo, entonces esquiva eso. – Vlad buscó atacarlo por detrás pero este desapareció y reapareció a un lado.
- Un ataque sorpresa, simple pero efectivo, en mi caso, no tanto.
- Si así lo quieres, podríamos continuar.
- Gracias… pero no gracias, solo estoy observando, su verdadera amenaza yace en ese sitio. – Regresando a la batalla contra Jack, Mordred buscaba atacarla pero se escondía una vez más.
- Maldición, por donde saldrá.
- Aquí estamos. – Buscó ir por la cabeza desde el punto ciego en la altura de la Saber pero esta antepuso Clarent para bloquear el ataque y saltar por atrás, en ese momento Atalante estaba en el punto de mira.
- ¡Hazlo Archer!
- E-Eso haré. – Tensó una flecha, apuntó a la Assassin y deseaba disparar pero nuevamente comenzó con las dudas, no podía soltarla si eso significaba lastimarla. – (Maldición, por qué…)
- ¡Atalante! – Medea Lily la avisó al ver que Jack ahora iba tras ella, la Archer bloqueó el ataque con su arco mientras la alejaba.
- ¿Qué haces? ¿No piensas atacarnos?
- N-No puedo…
- Jeje… eres presa fácil para nosotros. – Jack volvió a atacar a Atalante, lo hacía con fuerza y fiereza a lo que la Archer solo podía bloquear, Arturia buscó apoyar en ese momento pero entonces un rayo se interpuso en su camino.
- ¿Qué fue eso? – Preguntó, viendo ahí al caster P de pie.
- No permitiré que nadie intervenga en esta pelea, solamente observen.
- Tu… - Antes de que la Saber hiciera algo, Haji metió mano. – Master.
- Creo que es mejor hacer lo dice y observar, igual esto es importante para Atalante, es su pelea. – Comentó, ella no estaba muy de acuerdo pero solo pudo seguir las órdenes del pelinegro. Continuaba bloqueando cada ataque de Jack sin devolver los golpes, se sentía acorralada.
- ¿Acaso nos tienes miedo? Podemos sentirlo.
- N-No es eso… es un asunto mío.
- Puede que nuestros recuerdos sean difusos pero si sabemos algo, tenemos cierto conocimiento de una Onee-san Archer que quiso cuidarnos, fue amable pero al final nos dejó morir, eres tú ¿verdad?
- ¡No es cierto! No quise dejarlos morir.
- Parece que dimos en el blanco. – Jack sonrió. – Entonces nos dejarás matar todo lo que queramos, no puedes hacernos daño.
- P-Pero eso no está bien, siguen siendo niños, deben jugar.
- Debes saber sobre nosotros, no tenemos hogar, solo deseamos volver a nuestro lugar de origen, si para ello debo seguir matando hasta alcanzar mi deseo, lo haremos. – Jack pateó a Atalante en el estómago, doblándola y perdiendo aire, de forma seguida usó uno de sus cuchillos para apuñalar en el brazo a la Archer la cual gritó, la sangre empezó a surgir al retirar este y de forma seguida cortar por la espalda para derribarla, soltó su arco el cual fue pateado por la Assassin, ahora quedando encima de ella. – Deseamos volver, por eso hacemos esto ¿Cómo serás ahí dentro?
Jack ya estaba a punto de apuñalar a la Archer en el vientre cuando un disparo la alejó, Haji tuvo que intervenir para que luego Mordred tomara las riendas de la pelea y ahora contraatacara en ese momento, el pelinegro vio a Atalante.
- Fuiste demasiado lejos sin atacar.
- Master… lo siento, pero no pude… mi cuerpo no me permite atacarla…
- Eso lo entiendo, a pesar del voto de castidad que hiciste, siempre deseaste tener niños. – Expresó el pelinegro. – Sé muy bien que es algo que no puedes evitar, los amas demasiado pero debes verlo de la otra forma, es un enemigo, buscará matarte y eso es algo innegable ¿no fue así la primera vez?
- … Es cierto, pero…
- Si lo que deseas realmente es salvarla, pelear contra ella es la única opción, no pienses que estás matando, busca el lado positivo, que la salvarás del propósito para el cual está hecha ¿no deseas ser una familia para ella?
- Es verdad… quiero ser su familia, darle lo que no ha tenido por mucho tiempo… ese fue mi pensamiento en ese momento y no ha cambiado desde entonces.
- Pues sabes lo que tienes qué hacer. – Aplicó la skill de su código místico para curar momentáneamente a la Archer. – No sigas dudando y haz lo que debas de hacer.
- … Si. – Asintió Atalante. Jack seguía entretenida con Mordred chocando ambos aceros.
- Esto es divertido. – Sonrió la Assassin, lo será aún más cuando acabe con tu vida.
- Eso crees pequeña mocosa. – La Saber alejó a Jack en ese momento, dando unas cuantas vueltas en el aire, aterrizó sobre un poste de luz y buscó impulso para ir con toda velocidad pero una flecha la detuvo, Mordred sonrió en ese momento. – Te tardaste… Archer de rojo.
- Lo siento, pero ya estoy mejor. – Comentó ella con seriedad, mirando a Jack.
- Así que deseas continuar Onee-san, veamos si tienes lo necesario para detenernos.
- Lo tengo y más. – Comenzó a disparar flechas, Jack fue al frente, desviando los proyectiles con sus armas y buscando atacar al esconderse una vez más en la neblina, la Archer cerró los ojos. – (Debo agudizar mis otros sentidos… no depender únicamente de la vista) – Intentó seguir con sus orejas a ver si hallaba una señal del paradero de la Assassin, entonces escuchó algo a su izquierda. - ¡Ahí!
Bloqueó un ataque que iba directo a su costado, Jack lo vio con asombro antes de ser alejada y aterrizar unos cuantos metros.
- Lograste bloquearnos.
- Confío bien en mis instintos, soy una cazadora de Artemisa después de todo.
- Veamos si puedes detener esto. – Jack empezó a brillar y el humo se puso más denso, desapareciendo entre este, Atalante miró a todos lados. – Maria the Ripper.
- Tsk. – Atalante pudo ver como Jack se movía a mayor velocidad y cortes finos empezaron a aparecer en sus brazos y piernas. – Si así quieres hacerlo, entonces solo debo rodear toda la zona.
Disparó al aire múltiples flechas las cuales comenzaron a caer al suelo, eso crearía un momento en el que Jack tendría que concentrarse más en esquivar los proyectiles que en atacar, tal plan tuvo resultado cuando la Assassin se detuvo, ahora la tenía en la mira.
- ¡Ahí estás! – Disparó dos flechas, Jack las bloqueó pero de forma continua Atalante se acercó y la golpeó en el estómago, siendo mandada a volar contra un vehículo el cual se estrelló contra su espalda. - ¡master!
- Claro. – Haji activó su segunda skill del código místico y de la misma forma la tercera skill de Atalante, ahora tenía todo listo para el ataque final, se iluminó y entonces apuntó con todo a Jack.
- No lo hago para otra cosa que no sea salvarte… ¡Phoebus Catastrophe! – Las flechas volaron e impactaron a la zona donde estaba Jack, siendo todo cubierto de flechas hasta levantar polvo, ya entonces no hubo algún otro movimiento.
- Parece que lo hicimos. – Señaló Haji, Jack estaba en el suelo, muchas flechas estaban clavadas en su cuerpo, escupiendo sangre, Atalante se acercó hacia ella.
- Lo hiciste… pudiste derrotarnos… - la Archer se agachó para abrazarla. – ¿Eh?
- Quizás no pueda darte lo que realmente quieres, pero lo que sí puedo hacer es proporcionarte un nuevo comienzo, puedo ser la familia que deseas.
- ¿Familia?
- Es cierto. – Haji se acercó. – Si no deseas estar sola nuevamente, entonces acepta venir conmigo, tendrás muchos amigos.
- … Eso nos gustaría. – Lo tomó como un sí, Haji hizo el proceso para purificarla y de tal modo desaparecer, ahora era su servant.
- Lo hiciste bien. – Felicitó a la Archer.
- En parte es debido a usted, me dio el valor para enfrentar ese estigma que tenía… no tengo nada más para agradecerle.
- Interesante… - Comentó el Caster. – Una lástima la perdida de Assassin pero obtuve algo de esto, nos estaremos viendo pronto, la pelea será inevitable. – Desapareció después de eso sin que pudieran hacer algo para evitarlo.
- Ya seguro lo enfrentaremos en el futuro. – Comentó Rika, en ese momento Atalante le comentó algo a Haji.
- Esto… master, espero no sea molestia pero ¿la sacaría?
- … Claro. – El pelinegro sacó en ese momento a Jack la cual estaba al frente.
- Servant Assassin, somos Jack, espero nos cuides. – Antes de decir algo más, Atalante la abrazó. - ¿Eh?
- Que suave~ guhehehehe~ realmente los niños son lo mejor…
- Atalante… - Medea Lily se llevó la mano a la frente.
- ¿Onee-san?
- Eso, dime Onee-san, prometo que te cuidaré todo lo que quieras, jugaremos, te daré dulces y nunca más estarás sola jejejeje~ - La Archer estaba sonando como toda una pervertida en ese momento, Haji escondió una risa.
- Madre, esta Onee-san no me suelta. – Le habló al pelinegro.
- ¿Madre? No importa, aprendí algo y es que Atalante es lolicona. – La batalla terminó, al menos el problema de Jack ya no será algo más en Londres pero sigue existiendo mucho más, algo que se sabría más adelante.
El Redentor 777: Bueno, ya se verá pero es que si habrá más por delante así como molestar a Mordred jaja.
Camilo Navas. Rika empieza a dudar realmente y la verdad es que seguir el guión que ambos hermanos decidieron hacer se estará volviendo más complicado, ya veremos todo esto para más adelante.
Escanor13Zama: Gracias por leer la historia, espero la sigas disfrutando.
Bueno, ya vimos este enfrentamiento definitivo contra Jack, Atalante tuvo que reunir mucho valor para pelear y al menos se logró, al igual que está complacida de tenerla de aliada, su amor por los niños no tiene límites jaja, ya seguiremos con más de la singularidad, hasta el próximo cap. Saludos.
