Dentro de Chaldea conviven todo tipo de personalidades, algunas amables, otras un poco conflictivas, de lo cual no cabe duda es que muchas de ellas tuvieron algún tipo de rivalidad, ya debido a la política impuesta por sus masters, han aprendido a llevarse bien, o tolerarse hasta cierto punto, es algo de lo cual se tiene que trabajar y algunos lo llevan mucho mejor que otros.

- Shishou es tan estricta como siempre, a pesar de todos estos siglos, no ha cambiado su método de enseñanza… - Cu estaba saliendo de uno de los entrenamientos de Scáthach y la reina del valle de las sombras era bastante dura como siempre, ahora el peliazul deseaba relajarse un poco. – Nada que una buena cerveza no pueda arreglar.

- Hola Cu~ - Y mientras estaba en su camino una vez suave y femenina le interrumpió pero que a sus oídos era como un demonio, eso lo paralizó.

- ¿M-Medb? ¿Qué diablos haces aquí?

- ¿Qué más? Estaba esperando a que terminaras con esa bruja para poder tener tiempo contigo ahora, ahora vamos a comer juntos. – Pidió ella de forma coqueta, el Lancer tenía que hacer algo al respecto, librarse de ella antes de que sea demasiado tarde.

- Bueno, esto, yo… ¡Adiós! – Y sin ideas, decidió huir.

- ¡Alto ahí! – La pelirrosa no pudo hacer nada para detenerlo, acabó por gruñir. – De nuevo se me escapó… estoy feliz porque llegué a este lugar con muchos de mis queridos Cus, pero solo uno de ellos me hace caso, aunque sea obligado pero me pone feliz… aunque quisiera que hubiera una forma en la que pueda llevarme mejor con este Cu… ya sé qué hacer.

Haji se encontraba comiendo junto a Mash, luego de un pequeño viaje para recoger materiales, era lo menos que podían hacer.

- Buen trabajo Mash.

- No es nada senpai, además el doctor y Da Vinci están agradecidos, así que todo salió bien.

- Es cierto. – En ese momento vieron a Medb que se acercó. – Medb, buen día.

- Igualmente master. – Agitó su mano con desgano. – Tengo una petición qué hacerle.

- … ¿Qué tipo de petición? – La Rider sonrió.

- Quiero acercarme a Cu de forma intima~ - Expresó de forma coqueta, tanto él como Mash se vieron al rostro.

- ¿Quieres aprovecharte de él? – Preguntó, ofendiendo a la pelirrosa.

- En serio me ofende mucho que piense de esa forma, solo quiero formar buenas migas con él ¿acaso no es una de sus políticas? La de ser como una familia.

- Eso es verdad, pero…

- Master, ahora soy su servant, no pienso aprovechar mi posición de mala forma, aunque sea una reina, estoy hablando con sinceridad, por favor, ayúdeme. – El pelinegro sentía que ella hablaba con sinceridad.

- Muy bien, haré algo.

- Gracias master~ - Medb se sentía feliz pero había algo por dentro. – (Perfecto, si esto sale bien, Cu se enamorará de mí y tendré mi harem de Cus~)

- ¿Me ayudarás en esto Mash?

- Claro senpai, si Medb-san va en serio, es lo menos que puedo hacer.

- yay~ son buenos amigos, ahora espero que me expliquen el plan. – Ella se sentó en la mesa.

- Muy bien, lo que haremos es…

- Je, que amable por parte de master el darme este día para ir a su mundo para una bebida, no hay nada mejor que una cerveza. – Cu se había cambiado a su ropa casual, encontrándose cerca de la habitación del pelinegro, ahí le vio junto a Mash. – Ey master, ya estoy aquí ¿partiremos?

- Claro, solo espera un momento que alguien más no acompañará en este viaje. – Respondió él, Cu enarcó una ceja.

- ¿Quién?

- Ya estoy aquí~ - Y esa voz fue de la que menos esperaba, cierta chica de cabello rosa llevando una blusa azul corta que dejaba ver su abdomen y una falda café corta con botas y un gorro. – Oh Cu, que sorpresa~

- … Master, lo siento pero debo irme. – Quiso huir pero Haji usó un sello de comando para paralizarlo. - ¡Eso no es justo!

- Tampoco lo es que debas huir, Medb amablemente me pidió acompañar en esta salida, así que deberías aceptarlo.

- Así es Cu, hablé con master de antemano, además prometo que no haré nada malvado, lo juro por mi honor de reina. – Le hizo ojitos, Cu sabía que era mejor no confiar en sus palabras, pero quizás con Haji y Mash cerca, no haga de sus mañas.

- Muy bien, pero estaré vigilando.

- Gracias, juro que nos divertiremos demasiado. – Con todo resuelto, se tomaron de las manos y Haji los transportó, apareciendo en una calle cerrada, de ese modo llegaron a Tokio, Medb observó todo con asombro. – Wow, así que es Japón, es mejor de lo que pensaba.

- Entonces master ¿A dónde iremos? – Preguntó Cu, no muy alegre por la presencia de la Rider.

- Iremos al bar como deseas, incluso a comer un delicioso yakiniku, pero antes, parece que Medb tiene algunos planes ¿no?

- Así es. – La pelirrosa tomó la palabra. – Junto a master hicimos una lista de cosas que podemos realizar para divertirnos, seguro lo disfrutarás bastante Cu. – A pesar de lo que dijo, el peliazul no se veía como tal animado al respecto.

- Esto… senpai, hay que ir. – Mash buscó salvar la situación, el pelinegro asintió, de ese modo los cuatro comenzaron a caminar por las calles, la pelirrosa llamó la atención de algunos hombres que la veían, su belleza realmente resaltaba.

- Mira a esa chica, es bien hermosa.

- Va acompañada pero parece que ninguno de esos es su pareja.

- Habría que pedirle si tiene novio.

- Jeje ¿Qué dices Cu? Parece que tienen interés en mí. – Ella deseaba saber la reacción de este, el Lancer simplemente soltó un bostezo.

- Bien por ti… - Eso molestó a Medb que hizo un puchero.

- Entonces Medb-san ¿Cuál es el primer sitio? – Preguntó Mash, eso alegró a la Rider.

- ¡Un salón de belleza! – Y estaban frente al establecimiento, Cu sacó la lengua en asco.

- ¿En serio? Este es un lugar de mujeres ¿y la cerveza?

- Cu, deberías apreciar mejor el cuidado de tu piel, entonces master ¿hiciste la reservación?

- Así es. – Haji había usado nuevamente los fondos de Chaldea ya que en sí es algo caro, sabía que a Roman le daría un aneurisma al saberlo pero todo sea por ella. – Nos recibirán dentro.

- Excelente~ entremos. – Los cuatro entraron, el sitio era bastante pulcro y lleno de mujeres, incluso hombres que llevaban sus caras brillantes como si las hubieran encerado, Cu deseaba huir de ese sitio, entonces uno de estos hombres que actuaba de una forma muy afeminada se acercó a ellos.

- Hola queridos~ ¿tienen reservación?

- Claro, a nombre de Shimamura Haji. – Respondió él, este revisó la computadora.

- Aquí están, un tratamiento para cuatro, hoy es su día de suerte porque es el día especial de mascarilla de aguacate.

- Oh, eso suena lindo, dirígenos lindura. – Respondió Medb, el encargado asintió y los llevaron, Cu tuvo que ir contra su voluntad y entró a una sala separada, ahí estaba un hombre musculoso.

- Hola guapo, soy Sansón y seré tu masajista el día de hoy.

- ¿Masajista?

- Ahora, quítate esa ropa cariño.

- U-Un momento, yo puedo hacer esto, no lo hagas. – Y atrás solo se pudo escuchar sus gritos mientras lo desnudaban y lo que sufrió fue lo que llamó tortura más que un masaje. Mientras tanto Medb era tratada por una mujer que acariciaba su espalda.

- ¿Cómo se siente?

- Divino, el masaje es casi tan bueno como el que mi sirviente personal me hacía.

- ¿Sirviente personal?

- Esto, perdón, una amiga. – Corrigió Medb rápidamente. Al final todos salieron, llevando batas.

- ¿Cómo te sientes Cu? – Preguntó Haji, el peliazul se sujetaba la espalda.

- Jamás pensé que mi cuerpo pudiera doblarse de formas como las que viví…

- Que siga el tratamiento. – Fueron a la siguiente sala que ahora sería un tratamiento de la piel, los sentaron con toallas sobre sus ojos y empezaron a aplicar crema, en el caso de Mash y Medb, les pintaron sus uñas y lavaron sus cabellos igual, al final todos terminaron bien arreglados, viéndose en espejos.

- Wow… senpai, no pensé que pudiera verme así. – Mash estaba asombrada por lo linda que se veía.

- Que bien, la verdad es que toda chica debería cuidar su imagen, así que te ves bastante linda. – Respondió él, eso puso roja a la Shielder.

- Cu ¿Qué dices? ¿No me veo fabulosa? – La Rider hizo una pose.

- Ya estoy aburrido ¿a qué horas vamos por la cerveza? – Preguntó, Medb simplemente puso un rostro molesto. Al final terminó el tratamiento y salieron del salón de belleza. – Finalmente ¿Ya iremos al bar?

- Alto ahí Cu. – Medb lo interrumpió. – Sé muy bien que ustedes los guerreros celtas aman el alcohol y todo eso, pero tienes que probar cosas nuevas, por eso no iremos a un sucio bar.

- ¡Que! Si la razón por la que acepté venir aquí es para beber. – Exclamó molesto.

- En cambio, podemos comer algo más ¿no es así master? – Medb nuevamente había cambiado los planes, ahora en vez de un bar, fueron a una hamburguesería.

- ¿Qué es este sitio? – Preguntó él.

- Según investigué, es un sitio donde van las chicas populares y parece que es comida orgánica y libre de gluten, perfecta para mantener mi figura. – Respondió ella, Cu simplemente se tuvo que tragar su orgullo, todos sus planes habían sido arruinados por Medb, esperaba encontrar una forma de vengarse, entonces se le ocurrió algo al ver el menú.

Una vez pidieron, fueron a sentarse y esperar, Medb observaba al Lancer con una sonrisa sin decir nada, no cabe decir que le hizo sentir incomodo. Al final trajeron su comida las cuales eran hamburguesas, abrieron sus cajas y comenzaron a comer, Cu las sentía insípidas pero había pedido algo adicional, en ese momento empezaría.

- Oye Medb.

- ¿Sí? – Ella volteó a verle.

- ¿Quieres probar de la mía? – Preguntó, eso ilusionó a la pelirrosa.

- Claro, es un placer. – Tomó la hamburguesa del lancer y le dio un bocado. – Oh, es de Cu… tiene un sabor singular ¿de qué la pediste? – En ese momento este sonrió.

- Es una hamburguesa común, pero con un aditivo… ¡Con queso!

- ¡Queeeee! – La pelirrosa quedó aterrada al saber lo que contenía la hamburguesa, en ese momento algo comenzó a ascender por su garganta, cubriéndose la boca. – Urrgh. – Corrió rápido al baño.

- ¡Jajajajaja! – Cu empezó a reír frenéticamente. - ¿Vieron eso? Ella iba a vomitar al saber que tiene queso.

- Cu, eso no estuvo bien. – Respondió Haji de forma seria, eso cayó a Cu.

- ¿Qué hice? Ella se lo merece.

- No es eso. – Respondió Mash, igual de molesta. – Medb-san realmente se esforzó por hacer todo esto para que todos nos divirtamos, se sentó con nosotros haciendo el plan, más que nada quería hacerte feliz.

- Eso es cierto. – Haji le explicó lo que hicieron ese día y la ilusión que le daba a la Rider el salir. – Fue sincera con lo que sentía y así se lo pagas.

- … Oye master, no estarás diciendo esto para que me haga sentir mal. – Nadie dijo nada, el peliazul al final soltó un suspiro. – Bien… supongo que hice algo malo.

- Es mejor que te disculpes con ella ¿entendido?

- Sí… - En ese momento Medb estaba afuera, no quería que le vieran en un estado tan poco estético, además de ello, se encontraba llorando.

- ¿Por qué? Pensé que Cu iba a divertirse con lo que planeé, él sabe muy bien que odio el queso por lo que me pasó… como puede ser tan malo *sniff* - La puerta se abrió, saliendo el lancer, al darse cuenta, Medb se limpió el rostro rápidamente, aunque el maquillaje se le había corrido.

- Esto Medb… se te corrió el maquillaje.

- N-No es nada… - Escondió su rostro pero Cu la sujetó. - ¿Eh?

- Escucha… tsk. – Se le complicaba hablar en aquel momento. - … Lo que hice estuvo mal… no debía darte de comer queso, sé muy bien por el trono que eso fue lo que te mató y…

- Es verdad, lo sabes muy bien, y a pesar de todo… lo que hice, porque realmente deseo llevarme bien contigo.

- Maldición… no lo repetiré nuevamente así que escucha atentamente, yo… lo siento. – Ella abrió los ojos.

- ¿Eh? ¿Qué dijiste?

- ¡Que lo lamento! – Se disculpó. – No estuvo nada bien.

- … ¿En serio lo lamentas?

- Master me hizo ver que no fue lo mejor de mi parte, así que… si realmente quieres que trabajemos juntos, quizás yo… pueda poner de mi parte.

- Cu… - Medb no dudó en abrazarlo en aquel momento. - ¡Gracias, te amo!

- ¡O-Oye, no me abraces así de repente, además te ves fea con el maquillaje corrido!

- Jeje, lo sabía, estamos unidos por el destino, espero que podamos tener una gran relación. – Por detrás Mash y Haji observaron todo con sonrisas en sus rostros.

- Es bueno que lo resolvieran ¿no es así senpai?

- Sí, todos somos familia, así que hasta los peores enemigos pueden ser los amigos del mañana. – Siguieron viendo a la pelirrosa que no soltaba para nada a Cu.

De nuevo en Chaldea, Cu terminó otra sesión de entrenamiento y estaba agotado, solo deseaba beber alcohol.

- Cu~ traje una toalla. – Medb estaba ahí, el Lancer podía haberla ignorado o huir como hacía siempre, pero en vez de eso, extendió la mano para tomar la toalla.

- Gracias… Medb. – La Rider estaba sombrada, para luego sonreír.

- Jeje~ trabajaré duro para que me aceptes… (Y luego serás todo mío jeje…) – Fueron al comedor. Los enemigos pueden llevarse bien con algo de tiempo y eso se comprueba de cualquier modo, Cu quizás tardaría en aceptar a Medb pero haría su mejor esfuerzo, y ella también, aunque sea por los motivos equivocados.

Rex Imperius: Gracias por leer, espero estés disfrutando del fic.

Bueno, ya aquí tuvimos de protagonistas a Cu y Medb, ella intentando lo posible por acercarse a él y pues no le resulta, igual es que él le hizo una mala jugada, al menos lo intentará pero llevará tiempo, ya veremos que cosas pasarán para el siguiente cap. Saludos.