Tu jodido ángel guardián.

Advertencia: Esta es una historia se va a desarrollar con diferentes puntos de vista o POV´s porque así me imaginé la historia y así la escribí. Cualquier cosa que no entiendan estan los reviews o en mis mensajes privados igual pueden enviarme sus dudas. Los nombres de los personajes son de la grandiosa Stephenie Meyer, pero de idea original y de mi autoría. Contiene temas sexuales… muy sexuales y explícitos que ninguna mamá quisiera que su hijita leyera, lenguaje vulgar y fuerte, final lacrimógeno (pañuelos se venden por separado).

Así que No es apto para menores de edad.

Reviews:

cary: gracias por leerme y comentar! :3 nos leemos pronto! Saludos!

Dacil23: gracias! :3 uuuy poco a poco va conociéndola y créeme como es lo excita! xB besos, nos leemos pronto!

Hanna Daz: uuuy y ahora que lo leas, te va a encantar más Hanna jajajajja xD créeme a ti no te gusta, yo tuve que sacar mi parte macho para sacarle las ideas ajajjajajaj saludos! Nos leemos pronto! :3

pili: ay gracias pili! :3 nos leemos pronto! :B

Adry: :3 muchas gracias adry! Abajito, antes del cap, pongo lo de facebook jejej xB gracias por el cumplido! :3 nos leemos pronto! :B

mary baltazar: jajajja sii, le dolió jejej xD saludos!

Diana: ajajjaja ya sabes! ;) me gusta sorprender jajajjaja xD tu dime si este no es lo que esperabas jejejej xD saludos! Nos leemos pronto!

Keit Cullen: :3 gracias! Saludos y nos leemos pronto! :)

Me preguntaron si esto tenia página en Facebook, y se puede decir que si, además promociono la historia a través de diversos grupos jejejje la página de Facebook es muy nueva, pero la pueden buscar como Facebook (punto) com (barra) pages (barra) Marie (guion corto) Edwards, de todas formas la página esta en mi perfil de fanfiction, cuando quieran jejejje

Ahora sí! Gracias por todo, sin más aquí el siguiente cap. Espero lo disfruten:

Bella POV.

Recuerdo que cada año, desde que cumplí los cinco, le pedía a santa un hermano, no me importaba en ese entonces si era mayor o menor, o si era niña o niño, solo pedía alguien que cuidara de mí, me protegiera en la escuela y que jugara conmigo. Charlie nunca jugaba conmigo, ni siquiera sabía cómo tratar a una niña de cinco años, pero lo intentaba. Había veces en las que no podía estar conmigo y me dejaba a cargo de Lupe. Ella tampoco sabía cómo tratar a una niña de cinco años, así que pedía un compañero, para pasar las tardes solitarias con quien estar.

Ahora, tan bizarro e irónico como suele ser el destino, tenía a un hombre de treinta años, de cabello medianamente largo, desaliñado y descuidado, con barba de candado abúndate y fea, llevando a todos lados unos lentes oscuros, su pinta de vendedor ambulante que no cambiaba nunca y lo más destacado, su personalidad. En serio lo odiaba por ser molesto y también podía decirse que era jodón, y mal humorado, y mal hablado; pero ese hombre, mi "jodido ángel guardián" (como se auto llamaba) era quien el destino había puesto en mi camino, para "cuidar" de mí, "protegerme" y "jugar conmigo".

Todo parecía ser que el destino le gustaba molestarme.

—… ¡ah no, señorita mimada, eso sí que no! — dijo estirándose, pero yo fui más rápida y tome el control.

El jodido ángel estaba muy cómodo, tirado en mi sofá, viendo mi tele, con la panza de perro callejero subiendo y bajando, satisfecho al terminarse mi comida y no pude aguantarme. Y solo llevábamos veinticuatro horas conviviendo. Mi fin de semana no pudo arruinarse mejor…

El día siguiente del accidente, sábado, había amanecido hermoso, el sol entrando por mi ventana, la brisa acompañándolo, el sonido de los pajaritos… y la estruendosa música rap de Masen.

Abrí los ojos de golpe y me levanté irritada de la cama, me puse mi albornoz y salí a gritarle desde afuera.

¡apaga eso, es temprano, deja dormir! — él solo le bajó para que pudiera escuchar su risa, antes de volver a subirle. Más alto. — ¡idiota!

Entonces me lleve las manos a la boca. Yo nunca insultaba, jamás. Siempre me guardaba las cosas para mí misma, insultando en mi mente y una que otra vez asesinando igual, pero nunca insultaba en voz alta.

Ya sin poder conciliar el sueño, y viendo mi abandonada bicicleta estática, tome mi iPod y puse música relajante para hacer ejercicio. Una hora después, completamente sudada y orgullosa de mi misma, tomé un merecido baño en mi tina, tratando de olvidar que aun con dos puertas cerradas el rap seguía escuchándose.

Para cuando Lupe tocó mi puerta yo estaba hambrienta, la seguí hasta el comedor y me senté en mi lugar habitual. Ella trajo mi fruta y mi jugo de naranja. Le sonreí en agradecimiento.

¡Lupe estoy muerto! — gritó Masen entrando a mi comedor a los minutos, como si fuese su casa. Tarde me fije que estaba completamente sudado, sin camisa, con los pants a mitad de su cadera y oliendo a Hugo Boss, con hombre y sudor. — ¡Muac! — dijo dándome un beso en la mejilla. Todo el sudor en una parte de mi cara, con su cabello medio largo cayendo como una cortina, igualmente sudado y su barba raspándome al darme el beso. — ¡uy pero que genio! — se burló al verme cerrar los ojos al sentirlo todo sudado. — ¡uy, gracias Lupis! — ella, sonriendo, aceptó el beso en su mejilla y yo torcí los ojos. — ella si los aprecia, fíjate. — yo volví a torcer los ojos, esta vez más exagerado para que lo viera. — amargada. — dijo con la boca llena.

Cada día, desde que vivo aquí, papá nunca llegaba temprano a desayunar. Siempre se tomaba los sábados de descanso… hasta el mediodía. Así que estaba acostumbrada a desayunar en silencio, a veces leyendo un libro otras haciendo mi tarea del día anterior. Ahora tenía a un neandertal como acompañante.

Era impresionante como podía comerse tres platos de huevos revueltos, tocinos y hot cakes sin atragantarse y masticando como si no hubiese un mañana; claro, Lupe estaba encantada con alguien que no solo pedía fruta y jugo para desayunar.

Terminé de comer, ignorándolo lo mejor posible y le agradecí a Lupe, me levante de mi lugar y me dirigí a la sala.

Estaba inmersa en mi revista JAMA* cuando un muy entusiasta ¡aquí estas! Se escuchó desde la puerta.

Primero mis mañanas…

Luego mis silencios en el desayuno…

Y ahora mis tranquilas lecturas de medicina.

Juro que iba a matar a este hombre.

¡¿ahora qué quieres?! — casi solloce, irritada por que no podía dejarme ni un momento a solas. Se tomaba su trabajo de guardaespaldas muy enserio.

Él parecía realmente sorprendido cuando se fijó que había alguien en la sala.

No te busco a ti, — dijo confundido. — buscaba a esta jodida signorina**. — no entendí hasta que apuntó a la tele.

Entrecerré los ojos y levante la revista para seguir leyendo. Él se acercó al control remoto y se acostó, aun sudado y sin camisa, en el sofá que estaba a lado mío y se puso a ver la tele, zappiando hasta que encontró las luchas libres.

Juro que trate de aguantarme sus luchitas y sus gritos, pero todo tenía un límite…

Y eso nos lleva aquí:

— ¡Oh, sí! ¡Claro que sí, vas a ver…! — dije cambiando de canal.

— ¡oye, estaba viendo eso! — se quejó al ver que ponía una película romántica en lugar de su sucia y vulgar lucha libre. — no estoy jugando señorita mimada, dame eso. — Sonriendo con suficiencia lo volví a cambiar — Estoy. Perdiendo. Mi. Maldita. Paciencia. Chica. Jodona. Dame. Eso. — e intentó arrebatármelo y yo lo escondí detrás de mí. — ¡ja! ¿Crees que tu pequeña espalda me va a detener? — entonces se levantó, todo músculos duros, alto y sudado, tronando sus dedos y sonriéndome con malicia. - ¡oh Diablos!...

Entonces mi verdadero ángel guardián apareció, llevando en su boca medio sándwich y viéndonos con la ceja alzada, interrogante, mientras Masen me mal miraba y se apartaba a regañadientes de mi.- ¡Ja!

— ¿acaso es la única jodida tele que tienen en esta maldita mansión? — preguntó irritado al verme sonreír y acomodarme en el sofá.

Charlie y yo asentimos.

— malditos ricos codos. — Charlie se sentó a mi lado cuando Masen se fue, terminando su sándwich y aun con la ceja interrogante.

— tu nunca ves tele, ¿Por qué ahora? — me preguntó sin rodeos al verme con el control en la mano.

Jamás, en los dieciocho años que llevamos juntos, me había interesado ver televisión. Jamás me llamaron la atención los programas infantiles y de adolescente escuchaba, más que veía, las noticias antes de irme a la escuela.

— marcando territorio, supongo. — dije encogiéndome de hombros. — ha perturbado todo desde la mañana… ¿de verdad es necesario tenerlo aquí en la casa? — pregunté sin poder evitar mi descontento. Él asintió con pesar. — ¿y tiene que lucir así todo…? — no pude describir con exactitud su apariencia. Era todo… músculos, sudor, hombre, macho, depredador, agresivo.

Mi padre jamás llego a lucir como él. Jamás. Mi padre era limpio, casi nunca usaba barba y siempre iba trajeado, perfumado y presentable…

Algo en mi cabeza hizo ding y sonreí con malicia.

— ten papi, hora vuelvo. — Me levante del sofá, dándole a mi papá el control remoto y salí de la sala apresuradamente.

Tomé el teléfono que teníamos en la cocina y marque el número que tanto necesitaba y tan bien recordaba. El tono de llamada sonó tres veces antes de que contestaran.

¿Isabella?

— ¡Paolo! ¿Estás disponible hoy por la tarde? — mi sonrisa de malicia solo creció más ante la anticipación.

para ti princesa siempre. — sonreí. — ¿Qué te harás, rayos, mechas, un corte? Ya se acercan los eventos pre elecciones, ¡que emoción! — - sí, hurra…- — ¿seré tu maquillista, manicurista y todo lo que termine en ista para dejarte bellitsima, verdad amor?

— claro que si Paolo, como la vez pasada. — Él soltó un gritito de emoción. — iré a verte en unas cuantas horas, apártame el resto de la tarde… porque tendrás mucho trabajo. — y colgué.

Lupe me veía con los ojos entrecerrados cuando me di la vuelta, le regale mi sonrisa más inocente y ella solo bufo y siguió cocinando el almuerzo. Murmurando cosas como nadie aprecia mi cocina y un día de estos me iré, lo juro. O cosas como esas que solo reforzaban mi teoría que ella se había alegrado de que Neanderthal Masen haya llegado a esta casa.

Salí de la cocina y subí las escaleras de dos en dos hasta llegar al cuarto de Masen. Toque tres veces, y recordé la vez que lo asuste y se cayó de la cama.

¿Qué mierda quieren ahora? — y algo golpeó la puerta.

— ¡oye! Es madera fina. — dije tomando el pomo y tratando de abrir, pero él le había puesto seguro.

¿Qué quieres niña jodona? — y otra vez se escuchó como algo chocaba con la puerta.

— decirte que en la tarde salgo a la plaza, no tengo que agregar que tu vienes conmigo.

Espere su contestación pero solo recibí como respuesta un tercer golpe sordo en la puerta. Reí por mi maldad.

Y aquí estábamos, tres horas después, en el Time Warner Center, junto a un irritado y nada feliz señor Masen.

niña jodona y sus mierdas de mimada… — murmuraba entre dientes cada que me detenía en una vitrina y miraba, y solo por molestar entraba y me probaba cosas sin comprar. Eso lo hacía más irritable.

— ¿te puedes apurar? Hay un partido de futbol que quiero ver. — yo me voltee a verle con la mirada más inocente y pura que pude hacer.

— ¿enserio? — él asintió lentamente, viéndome desconfiado.

—… si… — dijo alargando la i. — así que apúrate. — entonces sonreí.

Al ver la hora en mí reloj, y ver que ya era hora de ir con Paolo, me emocione tanto que solté un gritito y él me miro como si estuviera loca.

— ¡sígueme! — no le di tiempo a pensar mi orden, simplemente lo tome de la mano y lo lleve hasta Paolo.

— ¡Isabella! — dijo Paolo al verme en la recepción. Me tomó de los brazos y me abrazo efusivamente.

— ¡HEY, HEY, HEY! — dijo Masen desde atrás de mí, tomando a Paolo del cuello de su chaqueta y alejándolo de mí. — no tiene permiso de manosearla.

Paolo y yo lo miramos como si estuviera loco.

— Paolo, — dije con cansancio. — este es el señor Ma…

— ¡Arnold Sylvester Masen Schwarzenegger! — casi gritó e hizo un saludo militar. Yo lo mire con una ceja levantada por lo obviamente ridículo e infantil que sonaba su "nombre" y obviamente él decidió ignorarme y continúo. — guardaespaldas oficial de la señora Swan. Contratado para matar a cualquier persona que se le acerque demasiado. Tiene suerte que hay gente aquí o usted estaría en el piso, muerto.

Y mi carcajada de hiena drogada contagio a Paolo y a la recepcionista. Masen estaba estoico, mirando al frente cual soldado de Inglaterra. Por un momento me lo creí, hasta que vi su vena saltada en el cuello… de seguro diciéndome cosas para nada agradables internamente.

— Bueno Señor Masen Schwarzenegger — dijo mi estilista una vez que se recuperó de la risa. Yo aún respiraba entrecortadamente, con dolor evidente en el estómago. — mi nombre es Paolo Stan, contratado para peinar, maquillar y CONSENTIR a la señorita Swan.

— sí, ya me imagino las formas de consentir a la señora Swan. — Paolo empezó a reír de nuevo.

— claro que si guapo, también te puedo consentir a ti si gustas. — y le guiño un ojo. — por el mismo precio de preferencia, ya que me hiciste reír. — y le tocó el brazo, haciendo que Masen se apartara bruscamente.

¿Cuánto tiempo vas a tardar aquí Mimada? — se agachó a mi altura y me susurró al odio, estremeciéndome involuntariamente. Esta vez olía a Hubo Boss con hombre y sin sudor.

Le hice una seña para que se agachara un poco más para que yo le hablara al oído.

el tiempo que le lleve a Paolo acabar con toda esa melena, señor Schwarzenegger. — dije susurrándole al odio, sin querer pegando mis labios. Él me miro entre irritado y algo que no podía distinguir, pero le ponía los ojos más oscuros.

Cuando Paolo lo invitó a sentarse en lugar de a mí, y entendió el porqué de nuestra visita al estilista, se rio fuertemente y salió de la estética dando zancadas. Yo lo seguí, casi corriendo y lo detuve tomándolo del pecho una vez que llegue a él.

— ni de coña me cortaran el pelo Niña Jodona. — dijo empujándome fácilmente a un lado, pero caminando como una persona normal. — ¡que se vayan a la mierda tú y Paola! — gritó para que todos voltearan a verme.

Paolo no era gay… era bi.

— ¡si, como tu dinero porque estas despedido! — contra ataque. Él se detuvo y después de unos segundos, tal vez dos minutos, se dio la vuelta mal humorado.

— si no me gusta cómo queda, hare un jodido trasplante de pelo con tu maldita cabeza. — eso solo me hizo reír más. — y no estoy jugando. Te dejare tan pelona como el coño de la Spears — eso no me dio ni tantita gracia.

Odiándome más que nunca, y empujándome de nuevo, caminó hasta la estética. Cinco minutos después, yo estaba viéndome fijamente al espejo, sonriendo con satisfacción y relajándome en las manos de María. El pasante a Schwarzenegger estaba gruñendo, irritado y mirándome desde el reflejo del espejo con odio, frustrado en las manos de Paolo.

— ¿pero qué desastre te has hecho en el cabello? — dijo Paolo acariciándole las hebras del cabello y él trataba de no apartarse. — y esa barba… ven, ven.

Aun me veía con odio a través del espejo, y aun renuente lo siguió y con los dientes apretados dejo que Paolo le lavara el cabello.

— ya, ya está. No dolió, ¿o sí? — yo solo me reía de su mirada de sufrimiento. — ahora, empecemos. — dijo volviéndolo a sentar en frente del espejo. Su cabello chorreaba y en ningún momento dejo de verme con odio.

Por un momento lo compadecí, tal vez pensando que a él le gustaba tener el cabello largo y la barba sucia, pero luego recordé que él no tuvo compasión conmigo al no dejarme disfrutar de mi sábado y no quise pensar en mis demás sábados, y días, que él me estaría molestando en las mañanas, en las tardes y en las noches.

Así que mientras él me vía con más con odio, yo le sonreía más ampliamente.

Para cuando María termino conmigo, él todavía tenía la mitad del cabello sin forma y todavía así le faltaba la barba…

— ahora vuelvo Paolo. Déjalo di-vi-no. — dije burlándome de él y saliendo de la estética antes de que empezara a insultarme.

Me fui a las tiendas que había visitado con Masen y con más paciencia que tiempo, compre todo lo que me había gustado, blusas, sandalias, tacones, vestidos - porque ya empezaba la temporada de eventos - pensé con irritación. Al terminar mi shopping, con cuatro bolsas en cada mano que Masen terminaría cargando, me dirigí a mi tienda de perfumería por el nuevo perfume que había pedido la semana pasada, pagué y miré mi reloj.

Ya había pasado el suficiente tiempo como para que al menos ya estuviese listo su cabello, así que me fui de nuevo hacia la estética.

Carla abrió la puerta para mí, al verme con tantas bolsas en las manos y me dirigió al privado donde estaban atendiendo a Masen. Pensando en el milagro que deberían de estar haciendo con él, sonreí con satisfacción y entre.

Las bolsas hicieron un sonido seco al caer al piso y estuve cien por ciento segura de que mi perfume pasó a mejor vida. Mi boca ya no tenía esa sonrisa burlona, es más mi mandíbula debería de estar, de seguro, a lado de las bolsas en el suelo y mi cara debería de estar perpleja y asombrada.

No podía reaccionar, simplemente estaba haciendo el peor oso de mi vida al quedármele viendo a Masen así, pero es que juraría que si no es por la ropa de vendedor ambulante, yo… yo…

— ¿podrías dejar de verme la mierda así? No soy un jodido pedazo de carne.

Continuara…


JAMA: Journal of the American Medical Association.

Signorina: señorita en italiano.

Espero les haya gustado. ¿Qué les pareció el cap? xD a que no se imaginaban a Masen asi de descuidado? xD como creen que haya quedado ahora?! xB

Agradecimientos:

Muchas gracias a todas (tanto Fanfiction como Facebook y hasta mis lectoras fantasmas jejeje xB) por leerme y dejarme sus reviews, no saben cómo me encantan! :3 también por agregarme como favorita y alertas:

A mis más de 150 chicas en Facebook que me comentan y me dan like! :3 También A: KoibitoNina; Danielitaavahen; pili; Danny Fer D'Rathbone; Puchipu; Dushakis; Sky Twicullen; TheYos16; VampireQueenR18; . .Night; ; Sidney Uchiha Hale Malfoy; DanielaMc1; Zary65; DarkWardObsession; xxxprincessauraxxx; cullen calcetines; beky09; IxaFreakBedoya; Crepusculo-Total; bbluelitas; covaric; ; Nadiila16; alondrixcullen1498; Anilu-Belikov; Little Whitiee; Nayleth Mayerlyn; Diana; annielopsa; Anme28; ashleyswan; krisvampire; karen medina; Vero Grey Cullen; Hanna Daz; SolitariaCullen; Bangerz; Danys PAttinson; Diana; NaNYs SANZ; Sindey Uchiha Hale MAlfoy; elena robsten; phoenix1993; kimberly zapin; isdur; whitiee; Nadiia16; Heart on Winter; semivampiro; guest; Grecia Anastacia; Romina512; Lyd Macan; cinsygonzalez; Hanna Daz; RoseCaoba; isa Kathe; pili; mahely; Aru1313; LeviCullen; ashleyswan; chovitap; Issa Swan De Cullen; eli1901; Maayraaykalebb; ztrella znxez; ; GATITHA VAMPIRICA; Glam09; WEN LISS; miki03; ; BeLeNxiiiZzz; NS-jasper; Lady Etain Engel; lalyrobsten; marcelw; Lore562; anekka; yeray; NaNYs SANZ; Loca anonima; .750; Littleponny123; FerHdePattinson; Tanya Masen Cullen; Zafirocullen22; MarielaArgent; vampire1312; emily-FC; Diablillo07; mmavic81; susana vazquez; Aliz Cullen; sarita1234; Anayka16; Casandra D´Everlak; sandy56; Natsumi Miu Royama Godo; AAPD1095; EsteVas; Naty de Mikaelson; Gaby Rivera; ; Liza de Cullen; AdriZuMe Cullen; gears5233; Stefanny Cullen-Swan; caritoreh; rjanavajass; ang3lpop; keit Alice Cullen Masen; Maciel Vulturi de Salvatore;

Muchísimas gracias.

Nos vemos en el siguiente cap.

Las amo.