Los nombres de los personajes que utilizo en esta historia; no son de mi pertenencia sino de RUMIKO TAKAHASHI. La historia si es mía y queda prohibida su copia total o parcial.
LOVE SONG
Capítulo 2
No era normal que se le hiciera tarde, sin embargo, ese día había sido la excepción. Sesshomaru, tomó su chaqueta, las llaves de su motocicleta y se dirigió a casa de Bankotsu para el ensayo, sabía que ese día, Sara llevaría a dos de sus amigas y aunque la idea de tener público no le era molesto, si le irritaba que la presencia de esas chicas, pudieran afectar el desempeño de su vocalista. Aunque si lo consideraba, no tenía por qué preocuparse, la chica tenía talento y era disciplinada cuando se trataba de ensayar, no lo negaba, ella era increíble.
Debía admitirlo, el dejarla tener invitadas fue un gesto guiado meramente por aprecio, porque si, apreciaba a Sara y más que eso, ya que desde el momento de conocerla, lo primero que llamó su atención fue su claro talento para la música pero no dejaba de lado su belleza pues fue un aspecto de ella, que lo atrapo desde el principio. Después de conocerla, fue solo cuestión de tiempo para que ese interés en ella creciera al grado de permitirle tocarlo o incluso abrazarlo, simplemente porque Sara le gustaba, lo suficiente como para dar el siguiente paso, que justamente, tenía planeado hacer después de su primer concierto. No era sorpresa que entre ellos existía atracción, así que no sería nada del otro mundo cuando Bankotsu y su hermano se enteraran.
Cuando Sesshomaru por fin llegó al sitio del ensayo, con la mente enfocada en llegar, se dirigió al final del pasillo y por las voces que se escuchaban al fondo, supuso que esas dos chicas ya estaban ahí, así que soltando un suspiro de resignación abrió la puerta para entrar al estudio. Dio al menos tres pasos para poder levantar la mirada, ya no se sentía tan convencido de tener visitas, pero esa idea rápidamente desapareció de su mente cuando vio frente a él, la perfecta imagen de una chica.
Estaba recargada en una silla, lucía un par de jeans ajustados que marcaban sus firmes piernas, el corte llegaba a su cintura acentuando sus candentes caderas, una blusa roja con escote sencillo, adecuado para su cuerpo delgado y una chaqueta de piel negra que la hacía lucir perfectamente sexy. Pero aunque la ropa era llamativa, lo que verdaderamente había capturado su atención, fue su radiante belleza, pues la chica con la que cruzo sus ojos, le regaló lo que fue quizás, la mirada más seductora que había visto antes.
Sus ojos eran expresivos, sus labios rojos y cabello largo color café fueron simplemente los aspectos que lo cautivaron al instante. Fue así que, guiado por sus instintos, Sesshomaru no se percató que la dirección de sus pasos ya era hacia ella, la misteriosa chica que por algún motivo, moría por conocer.
Ya estaba a un par de pasos de llegar, incluso ella parecía estarlo esperando pero fue gracias al inesperado abrazo de Sara que su conciencia regresó a su cuerpo, como si hubiera estado perdido en un trance.
Si bien, admitía que hace tiempo había dejado que Sara lo abrazara o se colgara de su brazo, como en ese momento, solo basto ver la sorpresa en los ojos de esa chica para querer apartar a su amiga, pero… ¿Por qué? Nunca antes había sentido el deseo de justificarse con nadie, mucho menos con una extraña. Un hermosa, hermosa extraña.
Pasó saliva e intentando no despreciar el gesto de Sara, simplemente le dirigió una mirada para que posteriormente, con un toque de sutileza, la apartara de su brazo. El gesto no pasó desapercibido para la chica pero antes de que sucediera algo más, afortunadamente y como siempre, Inuyasha intervino para quejarse.
- ¡Por fin llegas! – reprochó molesto.
- Es inusual que llegues tarde ¿Paso algo? – cuestionó Sara sin apartarse de él.
- Nada en realidad. – respondió sin más, concentrando su mirada en aquella chica de cabello castaño, que por alguna razón, parecía incomoda.
- ¿Y lo dices así? – gruñó Inuyasha – La próxima vez comenzaremos a ensayar sin ti. – el joven desvió su mirada a Inuyasha y después de levantar una ceja, ignoró su comentario.
- ¡Ya basta! – dijo Sara - Lo bueno es que ya estás aquí. Y llegas en buen momento, estaba haciendo las presentaciones, solo faltabas tú.
Sesshomaru no hizo ningún gesto, pero sin apartar sus ojos de la chica, esperó ansioso a saber cuál era su nombre.
- Ellas son mis dos mejores amigas, Kagome y Rin. Chicas, él, es…
"Rin" resonó en su cabeza mientras perdido en ella, sintió el impulso de acercarse.
- Es un gusto – adelantó la chica de cabello azabache.
- Sí, es un gusto. – dijo Rin, seguido de su amiga.
Por un momento Rin, comenzó a sentirse nerviosa pues el joven, no apartaba sus ojos de ella y aunque eran hermosos y de un brillante color ámbar, había algo en ellos que la hacían sentir temblar. Pero más que eso, no entendía porque Sesshomaru aún no decía nada.
Entonces, fueron los ojos azules de Bankotsu, quienes alertas como siempre, advirtiendo la actitud de Sesshomaru, lo incitaron a cambiar de actitud, limitándose a solo responder un frio:
- Un placer – que desconcertó no solo a Rin sino a todos los presentes.
Y así, desviando la mirada, se apartó para acomodarse en su lugar. Tomó su guitarra y soltando un suspiro, comenzó a revisar que estuviera afinada.
Si, tal vez Bankotsu le había ayudado a percatarse que su actitud estaba siendo extraña, porque efectivamente, solo era una chica, una hermosa chica, no debía ser para tanto, no como para sentirse hechizado de manera en que no le prestara atención a nadie más. Si, tal vez, admitía que parecía agradable y su manera de hablar reflejaba ser una chica dulce, sin embargo, no podía decir más de ella, la acababa de conocer, por lo tanto debía tratarla como lo que era. Una extraña.
- Ah… creo que ya nos atrasamos demasiado con el ensayo, si no comenzamos ahora se hará tarde – adelantó Sara, con la intención de despistar la actitud de Sesshomaru – Me encantaría que pudieran escuchar todo el ensayo pero tengo entendido que debes llegar temprano a casa, ¿No es así Rin?
- Ah, si…
- Bueno, entonces empecemos de una vez. Vamos chicos – indicó a sus amigos quienes compartiéndose una mirada, se acomodaron en sus lugares.
- Ustedes pueden quedarse aquí, tomen asiento, pónganse cómodas y por favor, no hagan otra cosa más que disfrutar del show – dijo sonriente, guiñando un ojo a sus amigas.
- De acuerdo – respondieron al unisonó devolviendo la sonrisa.
Las chicas tomaron asiento, esperando pacientes que la banda se acomodara para comenzar, mientras tanto Rin, soltando un suspiro intentó con todas sus fuerzas parecer tranquila, pues por alguna razón, ese extraño momento con Sesshomaru, la había hecho sentir nerviosa, preguntándose el por qué, de su actuar. Entonces sus pensamientos fueron interrumpidos por Kagome.
- Son muy guapos, ¿No lo crees? – susurró juguetona, acercándose a Rin.
- ¿Ah? Si… si – respondió distraída.
- Quizás por eso Sara no quería presentárnoslos aun, los quería a todos para ella – burló.
- Si, supongo.
- Aunque… si debo decir que, lo guapo no es lo más importante porque, ósea, ¿Qué sucede con ese tipo? – indicó refiriéndose a Sesshomaru.
- ¿Por qué?
- Fue extraño, ¿No lo crees? Al principio me pareció bastante interesado cuando Sara nos presentó, pero de un momento a otro simplemente nos dio la espalda, ¿Qué le pasa?
- Bueno… - suspiró – Tal vez no quería que Sara malinterpretara las cosas.
- ¿Sara? ¿Por qué?
- ¿Viste como Sara lo saludo? Fue completamente diferente a Inuyasha y Bankotsu.
- ¡Cierto! En cuanto lo vio, se abalanzo sobre él, ¿Crees que estén saliendo?
- Es lo más probable – respondió Rin intentando ocultar su decepción, mientras que Kagome, analizando lo sucedido, llegó a una conclusión.
- ¡No lo creo! – soltó segura – Si observaste bien, seguro recuerdas que fue Sara quien lo abrazó. Él, en ningún momento correspondió al gesto, estoy segura que simplemente fue amable, ya que si estuvieran saliendo, la abría abrazado o incluso, hasta la hubiera besado, pero no lo hizo. Lo más probable es que Sara esté interesada en él, y no la culpo.
Rin no pudo decir nada, los detalles que su amiga había planteado eran verdad, es así que después de sentir un aire de esperanza, la voz de Sara a través del micrófono las invadió, haciendo que ambas chicas, dejaran su conversación.
- Bien, este es nuestro primer ensayo con público, así que espero que nuestras hermosas espectadoras, queden sorprendidas. – después, volteo su mirada a sus amigos para asegurarse que estuvieran listos, y recibiendo su confirmación, se volvió para indicar que canción tocarían – Somos "Shikon no Tama" y esto es "Decode"
Dicho eso, Bankotsu, chocando en tres tiempos sus baquetas, indicó el momento para que comenzaran a tocar.
Tanto Rin como Kagome, sabían por mención de Sara que las canciones que usualmente tocaban, eran Covers de sus bandas de Rock favoritas, por lo tanto, la canción que tocarían seria de la banda "Paramore" pero lo cierto es, que las chicas no estaban muy familiarizadas con el género, por lo tanto, fue una sorpresa cuando el sonido de la guitarra fue lo primero que inundo la habitación.
Un escalofrío que recorrió su espalda, la hizo voltear con asombro directo a Sesshomaru, pues sus manos acariciaban las cuerdas de su guitarra con tal agilidad, que provocó en Rin una sensación de placer. Si bien, el sonido de las notas era maravilloso, la manera en como Sesshomaru tocaba iba más allá del talento, ya que no solo sus manos sentían la música, sino también todo su cuerpo, mostrando de manera discreta lo mucho que disfrutaba tocar. La chica no pudo evitar un suspiro, preguntándose al mismo tiempo, ¿Cómo es que lograba verse tan sexy con esa guitarra?
Mientras tanto, Sesshomaru seguro de sus movimientos, intentó a toda costa no mirar a la chica, pues algo le decía que si volvían a cruzar sus ojos, cometería la estupidez de equivocarse. Desafortunadamente, sus impulsos le ganaron y levantando la mirada encontró frente a él, a la hermosa chica que los observaba con fascinación. Tal vez su expresión se debía a que nunca había estado en una tocada de Rock, pero era cierto que existían diferentes maneras de recibirlo, ya sea como ella, con suma emoción o como su amiga, que parecía querer taparse las orejas.
Sea cual fuera el motivo, no pudo evitar sentirse complacido por la manera en como lo veía específicamente a él, pues parecía que la chica, había quedado impregnada de su manera para tocar la guitarra.
Los alardes e intentos de sobresalir no eran lo suyo, sino más bien de su hermano, pero la verdad es que, había sido inevitable no mostrarse superior al momento de la canción donde debía tocar un solo. Y en efecto, había conseguido lo que deseaba pues la encantadora castaña, había quedado deslumbrada.
Sesshomaru no era el tipo de hombre que se impresionara con facilidad, sin embargo ella, lo había logrado, sin necesidad de hacer otra cosa más que expresar sus emociones por medio de esos hermosos ojos cafés. Estaba claro y aunque aún no lo admitiría, sabía que durante esa canción había existido una conexión entre ambos.
Tal vez, estaba alucinando o tal vez, era consecuencia de su insistente mirada pero Rin, podía jurar que ese momento, justo cuando la guitarra debía lucirse, Sesshomaru no observó ni una sola vez sus notas, en realidad sus ojos, habían estado enfocados completamente en ella. Si, quizás era una locura pero solo había bastado compartir esa mirada, para sentir dentro de su pecho una conexión entre ambos.
Y en efecto, ninguno de los dos estaba equivocado, esa conexión que habían sentido era real, sin embargo, las circunstancias de los sucesos que pronto sucederían, los harían dudar de lo que ese día sintieron cada uno por el otro.
Las canciones no dejaron de sonar, los miembros de la banda eran estrictos, así que simplemente, Sara, como vocalista, anunciaba el nombre de la siguiente canción y sin descansar la tocaban, esto para simular un concierto real y que de esa manera tomaran la condición necesaria para dar un buen show, así mismo, el repertorio que habían recopilado era bastante variado, incluyendo en sus covers, canciones de bandas como: Maneskin, Red Hot Chili Peppers, The Overdressed Monkeys, así como un poco de SawanoHiroyuki nzk, Black Stones y Nightmare.
Aunque la mayoría de las bandas de quienes habían tomado las canciones, sus vocalistas eran hombres, Sara no tenía ningún tipo de problema a la hora de cantarlas, pues tenía una voz potente y lo suficientemente rasposa para acoplarlas perfectamente a su estilo, consiguiendo un resultado realmente fantástico.
Finalmente, el ensayo terminó, para fortuna de Kagome pues hacía tiempo le habían empezado a doler los oídos, en cambio, para la castaña, fue todo lo contario pues se encontraba extasiada por la emoción, así que cuando Sara preguntó su opinión, no dudó en expresar el increíble talento que habían demostrado así como el fabuloso show que habían compartido.
- ¿De verdad les gustó? – cuestionó Sara, con ilusión.
- ¡Claro! ¡Fue increíble! Me encantaron las canciones y… la manera en como pusieron su estilo en cada una – agregó eso último mirando involuntariamente al joven de chaqueta negra.
- Fue un placer Rin – adelantó Inuyasha, con una sonrisa coqueta.
- Gracias por tu sincera opinión – dijo Bankotsu, poniéndose en pie.
- No me esperaba que conocieras las canciones – indagó Sara – Nunca fuiste fan del género ¿O sí?
- Bueno… no las conocía todas, solo las dos primeras y en realidad, si me gusta el Rock, simplemente que no suelo escucharlo muy seguido. – explicó sonrojada.
- ¡Ya veo! ¿Y tú que dices Kagome? ¿Disfrutaste el show? – cuestionó burlona, pues se había percatado de la incomodidad de su amiga.
La azabache había entendido su intención, pero no diría la verdad, al menos no frente al sexy muchacho de chaqueta roja.
- Al igual que Rin, ¡Me encanto! Incluso llegó a interesarme el peculiar sonido del bajo. – dijo coqueta dedicándole una mirada al joven.
- ¿De verdad? – preguntó Inuyasha.
- Así es.
- ¡Eso es genial! y ¿Tú que dices Rin? ¿Te gusta el sonido del bajo?
Sesshomaru, giró los ojos, sabía que su hermano comenzaría a alardear, así que dando la vuelta e ignorando a todos, tomó asiento para comenzar a retomar algunos acordes que había sentido flojos, pero claro, sin perder de vista a la chica.
- ¡Te equivocaste! – pronunció Bankotsu, colocándose a lado de su amigo.
- ¿Qué? – exaltó molesto.
- Justamente en los acordes que estas tocando.
Sesshomaru, se limitó a responder, pues por un momento había creído que nadie se había percatado pero como siempre, el imbécil de Bankotsu lo había notado. Bajó la mirada y regresó a lo que estaba, esperando que el tipo comprendiera su silencio y lo dejara tranquilo, sin embargo, el moreno continuó hablando.
- Me sorprendió, ¿Sabes? Nunca creí que te pusieras nervioso tocando frente a un público tan pequeño. – añadió juguetón.
- ¿De qué demonios estás hablando?
- De tus pequeñas equivocaciones.
- ¡Cierra la boca! – gruñó – No me equivoque por nervios, si no… - dijo dando un vistazo a la chica – ¡Por imbécil! – concluyó suspirando, y apartando la vista.
Bankotsu no indagó más, sabía que su amigo no confesaría haberse equivocado por estar coqueteando con la chica, aun así, no dejaría pasar la gran oportunidad de burlarse de él.
- Bueno… - suspiró – En eso estamos de acuerdo, eres un imbécil.
El joven peli plateado frunció el ceño y después de ver la estúpida sonrisa de su amigo, continúo en lo suyo.
- Puedo darte clases – sugirió Inuyasha a la azabache.
- ¿De verdad?
- Claro que si… a las dos, si gustas Rin.
- Ah, bueno… – dudó nerviosa, volteando nuevamente a donde estaba Sesshomaru.
- Realmente no veo a Kagome y mucho menos a Rin, tocando un instrumento – comentó Sara – Lo siento amigas pero… nunca las vi con talento para la música. A menos que me lo hayan ocultado durante todo el tiempo de conocernos.
- Bueno, pero nunca es tarde para intentar – añadió Bankotsu colocándose junto a Sara.
- No, no – adelanto Rin – Sara tiene razón, ella es la artista, nosotras somos… chicas comunes.
- No hay nada de malo en ser común – confesó Inuyasha – Aunque no creo que tú lo seas Rin. Si disfrutaste tanto de nuestro ensayo, debe existir algo de músico dentro de ti. – Rin soltó un par de risitas. – Pero para descubrirlo, necesitas estar cerca de un ambiente musical, ¿Por qué no vuelven a venir mañana? – propuso coqueto, sorprendiendo a todos.
- Yo estaría encantada – respondió Kagome.
- Ah, no lo sé… no queremos ser una molestia. – dijo sincera, pues aunque todos las habían recibido bien, la actitud que había demostrado Seshomaru, era lo que le impedía sentirse completamente cómoda.
- ¡Vamos! No fueron una molestia ¿No es así Bankotsu?
- Claro, por mí no hay problema.
- ¡¿Lo dicen en serio?! – cuestionó Sara con ilusión, pues la idea de tener a sus amigas un día mas con ella, la llenaba de alegría.
- Sí, es más, ¿Por qué no vienen todos los días? Aun debemos decidir que canciones tocar el día del concierto y su opinión puede ayudarnos en mucho. – sugirió Inuyasha, enfocando sus ojos dorados en Rin.
La castaña lo dudó por un segundo, no porque no quisiera, en realidad, la propuesta era tentadora pues si asistía a todos los ensayos, tendría la oportunidad de ver a Sesshomaru pero no estaba segura si él, estaría totalmente de acuerdo, pues desde haber terminado el ensayo, no se había acercado ni un solo momento a conversar como todos.
- No voy a mentir, me encantaría – confesó – Sin embargo, creo que todos los miembros de la banda, deben estar de acuerdo ¿No lo creen? – propuso mirando directamente al joven de cabello plateado.
- Solo es cuestión de preguntar – mencionó Sara acercándose a Sesshomaru.
- ¡Sesshomaru! – habló sonriente – ¿Qué dices si… mis amigas?
- No tengo problema, si ellas desean venir – interrumpió, mirando directamente a Rin, pues había entendido sus indirectas palabras.
Si bien, no era parte de la conversación que todos tenían, estaba al pendiente de lo que se hablaba y lo cierto era que, la idea de ver a la chica en cada ensayo antes del concierto, no era una mala idea, en realidad, la propuesta de su hermano, realmente le había gustado.
- Parece que todos estamos de acuerdo – añadió Inuyasha con triunfo en la voz.
- Yo estaría encantada, ¿Qué dices Rin? – preguntó Kagome, deseando que su amiga aceptara.
Un sentimiento extraño invadió el pecho de la chica, tal vez no era lo correcto, pues aunque no fueran novios (cosa que aún no era confirmada) sabía que a Sara le interesaba Sesshomaru, y aun así, algo más fuerte que ella, le incitaba a aceptar, pues todo su cuerpo deseaba tener la oportunidad de verlo todos los días.
- Bueno… - suspiró - Entonces aquí estaremos – afirmó segura, al mismo tiempo de compartir una mirada con Sesshomaru.
Comentarios de la autora:
Debo confesarles que cuando estaba escribiendo el primer capítulo, me tardé aproximadamente un mes en terminarlo así que, prácticamente, estamos en tiempo normal de actualización jajaja ¡es broma! Pero si, efectivamente me he tardado más, y es que además de estar lidiando con un par de problemas personales, también es porque como lo notaron, he trabajado un poco más en la redacción y en la gramática (espero que si se note) todo para mejorar la calidad de mis Fics y así lo puedan leer con fluidez.
Por otro lado, agradezco muchísimo a todas las que comentaron el primer capítulo, Marcela R, SatarMoon 15, JackelB, Eissy Dee, Rinmy Taisho, Setsuna-sama.x, lucip0411, MikeRyder16 y marysanty899. Me emocionó muchísimo ver a cuantas personitas les interesó este nuevo Fic, de verdad, les agradezco mucho su constante apoyo.
Ahora, hay algo que deben saber.
Datos de la historia:
Las canciones que se mencionarán en los capítulos, ya fueron revisadas a detalle, solo para comprobar que los instrumentos que mencioné (los que toca cada personaje) se utilicen en estas y que en especial, sea la guitarra quien se luzca. Les aclaro, yo no conozco de música, y aun así, tengo en cuenta que no se utiliza solo una guitarra para tocar una canción, o que no en todas se utilizan solo tres instrumentos sin embargo, recuerden que es ficción, así que no me juzguen, solo disfruten de la lectura. Por cierto, están invitadas a escuchar las canciones de las bandas que se mencionaran a lo largo de los capítulos, ya que además de verificar que sean buenas, también son de mis favoritas. Por cierto, también incluí un par que pertenecen a algunos animes que me gustan, aunque eso, tal vez si lo hayan notado.
En fin, nuevamente les agradezco muchísimo, no se les olvide dejarme sus Reviews, amo leer sus opiniones. Nos leemos en el siguiente capítulo, les mando un fuerte abrazo.
