Interludio

Meses atrás.

Me encontraba en una oficina sentado en una mesa rodeado de mucha gente millonaria, estábamos leyendo unos papeles de un juego que revolucionara en el mundo de los juegos.

Sword Art Online el primer VRMMORPG.

—Así que quieres que invirtamos en este proyecto.

Le pregunte a Kayaba Akihiko que se encuentra en frente de la mesa rectangular, mirándonos de su lugar a nosotros.

—Si, necesitamos inversionista para terminar este proyecto. —respondió él con una sonrisa.

—Nunca pensé que alguien me llamaría para invertir en un juego.

Hablo un señor de cabello y ojos castaño con leves canas en su cabello, y una barba modesta.

Es Yamagawa Koji, el que controla la Región de Chūbu.

Otras personas asintieron con el mismo pensamiento de Yamagawa.

Incluso yo, nunca me imaginé que se comunicarían conmigo para invertir en un juego.

Me levante de mi silla.

—Lo pensare, tengo negocios que atender, cuídense señores.

Me retire de la oficina.

NerveGear, una tecnología interesante.

—¿Sucedió algo Jefe?

Pregunto Takada que me había llevado a este lugar.

—Una inversión para un juego de Realidad Virtual llamado Sword Art Online.

Takada arqueo una ceja. —¿Piensa invertir?

—Sera anónimo, prefiero prevenir que lamentar si algo peligroso ocurre en este proyecto.

Pasaron los meses y el juego Sword Art Online salió en modo beta, conseguí uno para probarlo.

Lleve el NerveGear a mi cabeza para comenzar el procedimiento para la inmersión al mundo de Sword Art Online.

Luego de hacer eso mire el mundo virtual un poco sorprendido.

Me arrodille para agarrar el pasto.

—Interesante.

Podía sentir el pasto como si fuera algo verdadero, aunque sea algo digital.

Camine los alrededores para ver más cosas.

—¡Groah!

Escuche el rugido de un lobo cuando me adentre en el bosque.

[Lobo Terrible]

[Nivel 1]

[12/12 HP]

Puedo ver la información arriba del lobo.

—No tengo un arma para atacarlo.

—¡Groah!

El lobo comenzó a correr para morderme.

Dio un fuerte salto donde agarre las extremidades del lobo para mandarlo a volar golpeando fuertemente con un árbol.

[11/12 HP]

—Tengo que hacer 11 veces para que mueras, mejor agarro la piedra.

Lanzando la piedra con fuerza donde dio directo en su cabeza vi que no hizo daño.

—Qué raro.

Como esto es un juego busque si había comandos para invocar un inventario.

—Aunque suene muy estúpido; Inventario.

Nada salió después de decir eso.

El lobo comenzó a atacarme devuelta.

Agarre sus extremidades para lanzarlo a un árbol donde perdió devuelta 1 hp.

Comencé a decir inventario en diferentes idiomas para fallar.

El lobo había perdido ya 8 hp, en los intentos de sacar el inventario.

[Lobo Terrible]

[Nivel 1]

[3/12 HP]

Decidí mover mis brazos hasta que apareció el menú cuando moví mi brazo derecho en vertical.

—… El lobo ya está por morir, bueno al menos ya descubrí como sacar el menú.

Viendo el inventario había lo básico para un aventurero novato, armadura de cuero y una espada de acero.

Saque la espada de acero del inventario que salió holográficamente llegando a mi mano izquierda.

—Ahora debo descubrir como sale una habilidad especial… suponiendo, debo canalizar la energía en la espada… pero como lo hago.

Tengo mucho que investigar en este juego.

Iba a dar un ataque diagonal cuando de repente la espada comenzó a brillar.

Corte a la mitad al lobo matándolo.

—Supongo que se activa automáticamente las habilidades de espada de acuerdo con los comandos escrito en la programación del juego.

¿Habrá un corte torbellino?

Decidí el camino del ermitaño en este bosque, buscare cualquiera cosa para aprender.

Pasando un tiempo después.

22 de agosto del 2022.

Me encontraba caminando en el [Pueblo de los Inicios] una ciudad que cubre el 26% de la superficie del primer piso de este lugar llamado Aincrad.

He visto a muchos NPC como también a jugadores divirtiéndose en esta ciudad.

Pasando a los jugadores mire de reojo a una persona que me miraba.

Un adolescente o tal vez un joven adulto, ya que no puedo adivinar correctamente la edad de una persona en un juego virtual donde pueden tener otra apariencia.

Tiene cabello y ojos negros con la ropa inicial del juego, se encontraba comiendo en el comedor se encontraba mirándome.

Mi apariencia es distinta a la realidad, tengo el cabello rojizo y ojos marrón, incluso si esa persona conoce a alguien a esta apariencia se encuentra equivocado que sería esa persona conocida.

Decidí acercarme para hablar con él.

—Hola, tengo curiosidad del porque me observa.

Llegando a él, lo salude con formalidad.

La persona bebía con tranquilidad su café, hasta que comenzó a responder.

—Hola, lo siento si te incomode es que me parecías familiar a alguien.

Respondió con vergüenza mientras se rascaba con su dedo índice su mejilla.

—Veo, me llamo Mura; de esta forma puede quitarse esa incomodidad de no ser la persona que te equivocaste.

Asintió él. —Me llamo Kirito, un gusto conocerte Mura.

Dimos un apretón de mano finalizando nuestros nombres.

—Viendo tu lenguaje corporal, de seguro eres un adolescente. Me sorprende que tomes una apariencia de un joven adulto.

Esto sorprendió a Kirito que termino escupiendo su café a mi persona.

—¡Lo siento! ¡Lo siento! ¡Fue sorpresivo que adivinaras eso!

Me limpie del café que cayó en mi cara. —No te preocupes es entendible eso, tengo 15 años para dejar de lado tu sorpresa.

—Tengo 13 años, así que soy más joven que tú.

—Incluso si te dijera que cumplí los 15 años hace una semana, sigue siendo igual más joven que mí, pero aun así porque alguien tan joven estaría en este juego de realidad virtual, ¿nadie te cuida?

Empezó a toser de repente. —Si tengo… esta mi madre y mi hermana menor. —respondió mirando a otro lado.

—Así que nadie te vigila…

Di una mirada en blanco.

—¡Se cuidarme! —Se levanto de su asiento gritando.

—¿Con que? ¿Tallarines instantáneo?

—Ugh… —Se sentó malhumorado en su silla.

—No es buen alimento para tu salud.

—Ya lo se. —siseo Kirito. —Actúas como mi hermana menor.

—Al menos es algo bueno que te indique que comer eso es malo para tu salud.

Comencé a pedir un café a la mujer NPC que atendía el comedor. Llegando a los segundos el café que había pedido.

—¿No deberías estar en tu escuela?

Comencé a preguntarle su vida personal mientras bebía el café.

—¿No sería lo mismo para ti? —Kirito devolvió mi pregunta.

—En mi caso no tengo que ir, ya que mis ocupaciones son atender mis negocios.

Mostro sorpresa. —No eres demasiado joven para estar administrando negocios.

Escuche su confusión, como le había dicho mi edad era normal decir eso.

—Si, pero era la única forma de perder mi tiempo, igual pienso estudiar en algún momento cuando todo esto este equilibrado, no me gustaría perderlo todo así que manejo con mucho cuidado los negocios, igual tengo a alguien de confianza que administre los negocios, así que solo toca ver si no hay un mal manejo de su parte para no perder nada.

Termine mi café de un solo sorbo.

—Creo que es momento de irme, hay una reunión que tengo que asistir en media hora.

—Ser un empresario suena molesto. —contesto divirtiéndose.

—Un poco. —sonreí al responder.

Deslice mi mano para sacar el menú y llegue al botón de desconectarse.

—Nos vemos otro día.

—¡Claro! —Kirito sonrió mientras levantaba la taza de café que no tenía nada.

Solo asentí y me desconecté.

Minutos antes.

Me encontraba bebiendo un café en el comedor cuando de repente mire a una persona de cabello rojizos y ojos marrones.

Su forma de caminar y esa mirada apática me resultaba familiar, se parecía a mi hermano mayor Saito-nii que se fue de casa hace dos años.

Parece que se dio cuenta de que lo miraba porque se dirigía a este lugar.

Terminamos hablando por un rato hasta que se desconectó.

—Enserio se parecía a Saito-nii.

Fue mi último comentario ante de desconectarme de SAO.

Viernes 23 de septiembre del 2022. —

Llegamos a una posada por la fuerte ventisca que detuvo el tráfico. Atrás nos siguió otro coche negro que se detuvo por el mismo motivo.

Bajando del coche mire de reojo a las personas que bajaban del otro coche.

Las hermanas Nakano y Uesugi Fuutarou.

—No sabía que las hijas del Señor Nakano son sus compañeras, Jefe.

Dijo Takada, el conductor que me trajo hasta aquí.

Sigue caminando a la posada para pedir una habitación, me daba completamente igual su comentario.

—Hola, una habitación para una persona porfa.

La señora recepcionista asintió con una sonrisa. —Si es por una noche son 2000 yenes, vienen incluido todo el servicio que puede ver en la imagen de atrás.

Mire a la imagen y eran los servicios comunes de una posada. —Gracias.

Pague y me dieron la llave de mi habitación.

Regrese con Takada.

—Deberías regresar al hotel.

—¿No necesita que lo lleve hasta al campamento?

—Descuida, puedo encargarme de eso.

Takada asintió. —¡Hola, señoritas Nakano, es gusto verlas con buena salud!

Suspiro.

—¿Lo conocemos? —pregunto confundida Ichika.

—No, pero ustedes son huéspedes del Hotel de mi Señor.

Takada me termino señalando.

Enserio que problemático.

—¡¿Eehh?!

Todas ellas quedaron perpleja incluso Fuutarou que no reside en el hotel.

—El hotel… donde vivimos… el dueño es él. —dijeron lo mismo las hermanas Nakano.

Note un pequeño desagrado hacia mi persona.

—No deberías haber dicho eso, es problemático ahora.

—Lo siento Jefe.

Se inclino con cara de arrepentimiento.

Suspiro. —Mejor ándate.

—¡Si!

Se retiro lo más rápido que podía dejando una pequeña corriente de aire pasando por el camino que había escapado.

—No tengo idea si castigarlo ahora por lo que hizo.

Comencé a retirarme a mi habitación.

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Otra vez ese sentimiento.

—¿Miko te encuentras bien?

Me pregunto Hana con preocupación por mi repentino desliz de botar la almohada.

—Si Hana, tengo más sueño de lo que pensaba.

Respondí lo más calmada y tranquila que podía.

—Si es así, vamos a dormir.

Asentí lo que dijo Hana.

Nos encontrábamos hospedado en la posada ya que el bus no podía seguir avanzando con la fuerte ventisca.

Así que esa persona que tiene un monstruo oni en su espalda se encuentra también en la posada… no podré dormir bien por ese sentimiento de temor acechándome.

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Más tarde en la noche.

Me encontraba caminando en el alrededor de la posada viendo el exterior la caída de nieve.

Hasta que sentí la presencia de alguien.

—Me sorprende que sigas huyendo de mí, cuando no he hecho algo contigo.

Hable en voz alta para que esa persona me escuchara.

Pero parecía que no quería hablar conmigo.

—Está bien, puedes irte Miko Yotsuya, por alguna razón tienes tanto miedo de mí.

La persona nombrada se fue.

—Bueno al menos sé que los estudiantes están hospedado aquí, así que no tengo que ir en taxi para llegar al campamento.

Me quede mirando el exterior y la luna por varios minutos hasta que regrese a mi habitación.

Sábado 24 de septiembre del 2022.

Había llegado la mañana y mi viaje fue devuelta en el autobús.

Mire de reojo a Miko Yotsuya que seguía teniendo miedo de mi pero que ocultaba a la perfección a su amiga Hana, bebiendo el cartón de jugo mientras respondía los comentarios de Hana.

No puedo llegar a una respuesta correcta del miedo que tiene a mí, nunca la conocí hasta llegar a la preparatoria.

Lo único que puedo pensar es en algo descabellado como ojos espirituales capaz de ver mi alma y por esa razón me tiene miedo.

¿Es posible eso?

Tendré que averiguarlo llegando al campamento.