Capítulo XI

Intimidad

O de cuando Draco comprobó su avance

Tenía que decirlo, sabía que tenía que decirlo todo, por ello fue que después de haber comido la barra de chocolate, todavía estando en el piso de su habitación con Moony abrazándolo de un lado y Sirius del otro, pensó en cómo podría comenzar a explicar todo lo que había estado rondando por su mente todo ese tiempo, todo ese mes. -No estoy bien- fue lo primero que decidió decir porque era más que obvio que no lo estaba y los mayores se habían percatado de ello, así que no había manera de poder seguir ocultándolo.

- ¿Qué sucede Harry? - preguntó Moony aun dándole caricias en el hombro.

-Estoy triste- esa había sido su definición, eso encapsulaba todo lo que estaba sintiendo, -estoy triste, demasiado, me despierto en las mañanas y... ni siquiera sé para qué... sólo me despierto porque sé que tengo que hacerlo, sé que tengo que ir a la escuela, sé que estoy con ustedes, pero... mis padres lo eligieron por sobre de mí, quiero entenderlos, pero no puedo, pero tampoco los odio o les tengo rencor guardado, sólo... no entiendo porque lo hicieron. Quiero regresar a mi vida, regresar a lo que tenía, me gusta estar con ustedes, pero... no quiero molestarlos... no vivo aquí, me hubiera gustado vivir aquí, pero yo tengo una casa, una donde no he podido ir y... tal vez ellos lo hicieron para que no sufriera de nuevo algún ataque o algo por el estilo, pero... quiero estar en casa, quiero estar con ellos. Dudley cada vez que lo veo en la escuela no hace más que echarme en cara lo "bien" que lo pasa con mis padres, no he hablado con ellos en todo este mes y... también siento tanta ira que no sé ya cómo lidiar con ella, Hermione y Ron me han dado mi espacio y, me molesta que me dejen solo pero también me molesta estar con ellos... no quiero estar con nadie, pero siento que si estoy solo por mucho tiempo no hago más que hundirme en todo esto que pienso... porque he estado pensando en muchas cosas y por más que lo intento los pensamientos positivos tardan más en llegar, me ha sido casi imposible pensar en algo bueno, algo que me sirva para decir "tengo que seguir adelante", no tengo ganas de nada, sólo quiero llorar todo lo que pueda, quiero gritar todo el tiempo. Maldigo cada que puedo, todo el tiempo, siento demasiada tristeza dentro mía y por más que me desahogo no puedo con ello. Los pensamientos son peores a cada momento y si duermo es peor. No he podido dormir, no he querido dormir... si lo hago tengo miedo de que ya no pueda tener la fuerza suficiente para abrir los ojos... sé que estoy exagerando todo y que sólo me comporto como un niño mimado, pero...

-No lo haces- le detuvo de pronto Sirius poniendo su mano en la cabeza del menor, -no estas exagerando nada Harry.- comentó tomando algo de aire para hablar, -sé que esa sensación la sientes peor cada día, como si un peso enorme se pusiera en tus hombros y no te dejase avanzar como quieres- explicó viendo al chico quien aún encontraba más interesante el tapete debajo de él, -no es fácil Harry, pero tampoco es algo que debas hacer solo, es demasiado difícil salir de esa sensación solo, para ello necesitas el apoyo de todo aquel que esté contigo.

-También, -continuó Moony- tuviste que habernos comentado eso, no eres una molestia Harry ni un niño mimado, está bien que nos sintamos tristes de vez en cuando, es completamente normal, pero el problema está en que, si dejas que esa tristeza se haga más grande, va a ser muy complicado lidiar con ella después. -dijo buscando la mirada del chico, sonriendo de forma sutil. -Vamos a ayudarte con eso, puede que algunas cosas no te gusten y otras creas que son demasiado complejas, pero tendrás que poner todo de ti para poder sentirte mejor, ¿de acuerdo?

-Pero...

-No hay muchos peros que nos hagan cambiar de opinión Harry, necesitas ayuda y vamos a dártela, no creo que puedes hacernos desistir de eso. -Siguió hablando el castaño, acercando un poco más al chico para darle a entender también por el contacto físico que estaba con ellos.

-Claro que Peter siempre puede ayudarnos con este tipo de situaciones, después de todo se supone que él es el especialista en el tema. - Comentó Sirius recargándose mejor en la base de la cama, -pero creo que por el momento es mejor que los tres lidiemos un poco con esto, claro al menos por hoy o mañana, ya después hablaremos con él, ¿te parece Harry?

-Pero no quiero ser molestia también para Peter. - se quejó en voz baja.

-No es molestia y también digamos que Canuto tiene una amenaza sobre su cabeza que involucra a nuestro querido y apreciado colagusano.

-¿Cómo? - preguntó de pronto interesado en eso.

-Peter me dijo que si alguien de los que conocemos pasaba por una situación difícil y no le comentaba nada, era muy probable que jugara demasiado con mi mente y me haría pasarlo muy mal. -Explicó haciendo incluso una mueca de desagrado.

-Eso y lo amenazó con destrozar su motocicleta – Completó el castaño con una risa baja. – Por ahora Harry, primero date un baño, intenta relajarte un poco en lo que preparamos la comida, te pones algo cómodo con lo que te sientas a gusto y bajas con nosotros, mientras también buscaré algo que me comentó en su momento el psicólogo de la familia que quizá podría ayudarte en lo que vamos a hablar con él. ¿De acuerdo?

Soltó un suspiro al escuchar eso, asintiendo. -De acuerdo.

-Muy bien, entonces ya teniendo todo claro vamos a apresurarnos Sirius, creo que, todavía hay mucho que hablar con Harry- comentó poniéndose de pie para jalar al otro y que lo imitara, saliendo así de la habitación.

Si, aún había mucho de que hablar.

Había una cosa que Harry no tenía del todo clara y era la pregunta de, ¿qué pasaría ahora que había comenzado a hablar de su problema? Ya había hablado con las personas más importantes, a su parecer y por el momento, así que no veía razón por la cual comentarlo a terceros, pero la necesidad de explicarle a una persona que ya había escuchado todos sus desvaríos le estaba atacando la mente a más no poder. Por eso el hecho de que su celular siguiese mostrando ese último mensaje que incluso ya había olvidado que tanto llevaba ahí seguía sonando tan amenazante como cuando llego.

"¿Sigues vivo Potter?, pude ver la motocicleta de Sirius cuando iba camino a clases, supongo que es lo más que podemos esperar de él, porque claro, es un adulto responsable que considera más adecuado ir por su ahijado quien, por cierto, pudo haberse sentido realmente mal en motocicleta que en auto como cualquier otra persona medianamente responsable... y conociéndote seguramente habrás ido tan perdido en tus ideas locas que ni siquiera te percataste del pésimo estado en que la llevaba, ¡Dios!, al menos podrías decirle que si la lava de vez en cuando se verá en mejores condiciones de lo que ya se encuentra, tiene que disimular un poco o ya por lo menos intentar llegar al estándar de los Black, si es que quiere que lo sigan tratando como uno. Pero, en fin, descendencia, son siempre un problema. Regreso a mi primera pregunta cuatro ojos, ¿sigues vivo?"

¿Era necesario decir que no esperaba un mensaje de esa longitud?, ni siquiera Hermione se explayaba tanto para mandarle algún mensaje corto o cuando le explicaba algún tema de alguna clase que se hubiese saltado, como solía pasar muy recientemente. Por eso ahora se encontraba de nuevo sentado en la cama, una vez hubo salido del largo baño que se dio por órdenes de Moony, y con tristeza y lo que quieran pero no iba a retar a Moony por muy mal que estuviese, sin saber que contestar en realidad, porque era claro que Malfoy seguía siendo Malfoy, no por nada el comentario acerca de Sirius, pero también era cierto que podía interpretarlo como su manera de buscar que se sintiese bien y olvidase un poco todo lo que le preocupaba, pero eso no quitaba el hecho de que no sabía que escribir como respuesta y la presión la seguía sintiendo al ver todavía el mensaje en la pantalla, no podía ignorarlo pero tampoco podía contestarlo.

-Venga ya Potter, no seas cobarde- se regañó al percatarse de cómo se encontraba, no había nada de malo en contestarle, -o de no contestarle- se dijo de nuevo tomando una vez más el aparato, maldiciendo por lo bajo, tomando los escasos cinco minutos de valor que acababa de tener para poder contestar el mensaje.

"Sigo vivo, Sirius fue por mí, recibir algo de aire fresco a una buena velocidad me ha ayudado a aclarar un poco mis ideas, también su motocicleta no se encuentra tan sucia, así que no creo que sea una deshonra para los Black... he hablado con ellos, estoy en espera de una de las charlas más largas e incomodas que voy a tener hasta ahora, así que... gracias, supongo, por escuchar y eso... nos veremos después en la escuela, tengo que bajar ahora con ellos."

Y decidido a no volver a dudar o a torturarse con lo de contestar otro mensaje decidió apagar el celular, era lo mejor, además no era como que lo hubiese estado usando mucho últimamente, sólo lo dejaba sonar en ocasiones y en otras solo lo llevaba por costumbre porque cuando se daba cuenta, la batería se había agotado. Por ello lo lanzó de nuevo a la cama junto con la toalla que aún intentaba secar su cabello, acercándose a la ventana para observar el árbol que había más cerca del panorama, de cierta forma ver algo de movimiento en un lugar tan verde, que poco a poco iba adquiriendo un color seco, le daba ciertas energías para poder continuar con todo aquello que aún le atormentaba.

-¡Cachorro!- y bien pudo quedarse perdido en esa imagen por unos minutos más, por horas incluso, pero sabía que tenía que atender al llamado si en realidad estaba en busca de un progreso, pero sabía que no estaba preparado para la charla tan larga que iban a tener. Suspiro, iba a tener que bajar de un momento a otro y más valía que fuera pronto.

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Tal como lo había supuesto, la charla en la mesa había sido demasiado larga para él, le habían preguntado cosas que estaba seguro ni siquiera se había llegado a plantear, tenían muchas dudas, pero lo había dejado exhausto mentalmente y no podía imaginarse como iba a terminar después de las charlas que fuese a tener con Colagusano, porque ya eran un hecho de que las tendría.

Se dejó caer en la cama con otro suspiro saliendo de su garganta, su cuerpo dolía, se sentía demasiado pesado, cerró los ojos un momento sin importarle el hecho de que no se había tapado con las cobijas, que sólo se había dejado caer sin ninguna fuerza o energía restante. Junto a él, aún en su mano llevaba una libreta, un diario le había dicho Sirius, ni siquiera sabía si era buena idea darles rienda suelta a sus pensamientos con cuestiones de un bolígrafo y papel, pero al parecer de los otros dos era una buena forma de deshacerse de todos los malos pensamientos que podrían atosigarlo a lo largo de los días.

-¿De verdad va a funcionar esto?- se preguntó levantándose de forma demasiado perezosa, observando el diario negro, se veía demasiado sencillo, simple, le gustaba y la idea de llenarlo con tantas ideas que no tenía ni pies ni cabeza no le llamaba demasiado la atención. Lo abrió de manera lenta, observando las hojas medio amarillentas, -papel reciclado- no quería rayarlas, no quería escribir nada. Siguió observando las hojas, pasando por varias, algunas tenían pequeñas manchas, otras parecían tener algunos rayones de alguien, como si hubiese querido dejar pequeños dibujos. -Seguramente era de Sirius- se dijo cerrando el diario, dejándolo de nuevo a un lado suyo, suspirando de nuevo. No quería hacerlo, pero sabía que tenía que, era la opción que le habían dado y tenía que tomarla. A final de cuentas cada pensamiento volvía al mismo punto, si quería mejorar aunque fuese un mínimo iba a tener que hacer un esfuerzo por todo aquello que no creyera adecuado. -Al carajo con todo- dijo por fin, poniéndose de pie para ir en busca de su mochila, después de todo la había dejado olvidada en el primer rincón de su habitación, buscando en cuanto la tuvo un bolígrafo o algo que le funcionara para escribir. -Esto servirá- dijo sacando por fin un bolígrafo rojo, era suficiente para escribir cualquier cosa que saliese, iba a intentarlo y si no lograba conseguir nada iba a forzarse a hacerlo, quizá todo se debía a que por fin había hablado con alguien, con más personas, con alguien.

Lunes

Sabía que tenía que darle espacio, sabía que no podía simplemente empezar a atosigar cuando las cosas estaban tomando un rumbo distinto, después de todo él era un Malfoy y necesitaba cuidar de las apariencias, por eso era que él aún era la persona con la cual se debía de tener cuidado, aún era tachado como el chico más egocéntrico del lugar, incluso aquel que parecía regir la mafia que existía en Hogwarts con los alumnos y algunos profesores, pero no quitaba el hecho de que había estado tentado de saber que estaba haciendo Potter o al menos que era lo que podría estar planeando en ese momento, después de todo era con el chico que había estado trabajando más de la cuenta y del que se había encargado de mantener lejos del alcance de cualquiera que osara en siquiera fijarse en él, porque era Draco Malfoy, aquel que siempre conseguía lo que quería y lo que quería en ese momento mientras bajaba del auto era saber que demonios había estado haciendo el atolondrado chico miope como para no mandarle ni un maldito mensaje. Incluso se había dejado llevar por sus emociones y el portazo que había dado en el auto ya le había ganado por lo menos un regaño de su padre apenas lo viera. -Las apariencias Draco, son lo más importante en este mundo- se dijo imaginándose a su padre frente a él citando las mismas palabras que ya le había dicho por lo menos una centena de veces, mismas que había comenzado a mandar al diablo cuando se interponían entre sus metas, como la de ese momento. Pero ya tendría tiempo después para reñirse mentalmente y prepararse para la reprimenda que le esperaba.

Suspiró de nuevo al estar ya frente a su casillero, los susurros a sus espaldas era algo a lo que estaba acostumbrado y estaba seguro por su apellido que aumentarían de un momento a otro, eso claro si es que lograba su meta la cual estaba seguro de lograr. -Un Malfoy consigue lo que quiere.

-Lo cual es casi siempre- dijo una voz a su lado mientras se cruzaba de brazos a verlo con una sonrisa burlona en su rostro, -¿mala mañana?

-Mal año incluso- dijo como saludo al recién llegado, -has llegado temprano Nott.

-Siempre llegó temprano Draco, es a Blaise a quien le gusta llegar cerca de la hora de entrada.

-Le gusta dormir más, al menos esa es la excusa que siempre nos da. Buenos días a ambos- saludó la chica mientras acomodaba las correas de su bolso. -¿Ha ido todo bien con el indefenso Potter?

-Me sorprende Pansy que hayas esperado hasta esta mañana para preguntarme sobre eso, pensé que mi celular estaría a reventar de mensajes tuyos.

-¿De amenaza o de sana curiosidad?- preguntó con una risa de por medio.

-Ambas, más de la primera que de la segunda.- Contestó cerrando su casillero y quedándose recargado en el mismo.

-Supuse que era un tema delicado que no podía tratarse directamente en mensajes- contestó con un movimiento suave de mano.

-También faltaste a dos clases, eso deja mucho a la imaginación. – secundó el otro chico.

-Fue un momento de confesión extremo, por así decirlo. – Comentó el rubio, notando las expresiones de ambos por lo que supo tenía que aclarar más la oración para que no se hiciesen ideas que no eran. -Está pasando por un momento complicado y decidió contarme todo ello y...

-Y la razón por la cual te golpeo la otra vez, ¿no es así?- preguntó la chica.

-Algo así... supongo que al menos ahora no tengo que darle tanto espacio.

-Me sorprendes Draco, te estás portando realmente "amable" con alguien sin ningún interés- dijo Nott mostrándose incluso un poco sorprendido por eso.

-Pero si hay un interés de por Medio Theo, Draco quiere llevarse al buen niño de Potter a la cama- dijo Pansy cubriendo una risa con la palma de su mano.

-Lindo lenguaje para una dama de sociedad- se burló el rubio para después negar. -No niego que el interés es ese, pero también el pequeño Potty es una especie de enredo mental que llama mi atención.

-La tuya y la de algunos otros, he escuchado que con el aire que ha estado soltando últimamente algunas chicas han comenzado a verlo interesante. -Comentó Theo.

-Claro, porque ver a alguien cabizbajo, malhumorado y maldiciendo a los mil cielos y demonios todo el tiempo es bastante atractivo ¿no?

-Aunque lo dudes Draco, parece ser que eso les gusta a algunas. -Comentó la chica alzando los hombros. -Incluso tú has dicho que se ha visto distinto.

-Si, pero no para sentir que ya puedo besar el piso por donde pasa.

-Pero si eso ya lo hacías, no me puedes mentir con eso cuando tu mirada siempre estaba pegada a ese trasero suyo que parece te hace babear- comentó el recién llegado que saludó a los otros con la mano -supongo que hablamos de como Potter ya ha engatusado a nuestro rubio favorito- dijo Blaise

-¡Mira!, Blaise incluso ha llegado más temprano, puedo asegurar que también se muere por saber que ha pasado entre ustedes dos- dijo Pansy de nuevo riendo una vez más en voz baja.

-No ha pasado gran cosa,- dijo Draco de nuevo imitando el movimiento de Pansy de alzar los hombros, -hemos hablado, me ha contado sus problemas y de cuanta mierda tiene en esa cabeza suya, ha sido todo, también puede que lo haya convencido de que regrese a los entrenamientos con nosotros.

-Llegas tú Blaise y las malas palabras parecen comenzar a nacer en nuestro vocabulario- se quejó Nott, viendo de nueva cuenta a Draco, - ¿le has convencido o lo has forzado?

-¿De verdad crees que lo forzaría?- preguntó fingiéndose ofendido.

-Lo harías- dijo Blaise.

-Definitivamente- Dijo Nott.

-Es muy lo tuyo- concluyó Pansy.

-Son igual de rastreros que yo, así que no pueden reclamarme nada- dijo finalmente cruzándose de brazos y adoptando esa postura suya que dejaba en claro que no iba a aceptar otra respuesta.

-Si tú lo dices- dijo Nott acomodando su mochila. -¿No deberías de ir a ver como está tu damisela en apuros?

-Sabes que también te agrada, has sido el primero en preguntarme porque había faltado a los entrenamientos.

-Sólo me había acostumbrado a su presencia, así podías dejar de ser tan mierda con nosotros. -Se defendió.

-Lo dicho, cuando Blaise hace su aparición comenzamos con las malas palabras, yo quiero decir unas también- se burló la chica.

-Eres una dama de la alta sociedad Pansy, no puedes rebajarte al nivel de estos idiotas- dijo Draco levantando su dedo índice, igual que lo hacía la madre de la chica.

-¿Sabes qué Draco?, vete a la mierda. – Dijo nuevamente con una risa.

-¡Pansy!, ¿qué forma de hablar son esas?, ¿es eso lo que te ha enseñado tu madre?- dijo Blaise con burla.

-No, mi madre me ha enseñado a cerrarles la boca, trío de idiotas.

-A la mierda entonces- dijo Blaise.

-A la mierda- dijo Draco.

-A la mierda- continuó Pansy, observando detenidamente a Theo quien solo suspiro.

-Supongo que a la mierda también. -dijo por fin en un tono resignado.

-Somos las serpientes más finas que puede haber- comentó el rubio con una risa.

-Siempre, ah, por cierto Draco- llamó Blaise- mientras entraba pude ver como tu animalillo llegaba también, no se le veía con muy buen aspecto y sus dos niñeras ya lo estaban fulminando con preguntas, así que supongo que te va a tocar levantarle el ánimo.

-Estoy seguro que algo de nuestro humor puede ayudarle- sugirió la chica.

Al escucharle decir eso se quedó pensando un momento, bien podía ir por él y tratar de salvarlo de aquel interrogatorio, pero también estaba el hecho de que se moría por saber que había pasado con el otro, que había sido de él todo el fin de semana y si al menos había logrado hablar con sus tutores de lo que le estaba pasando. -Ya lo arrinconaré en el descanso, no quiero perder más clases de momento y menos si nos toca con Snape, ya bastante bronca me ha echado mi padre por lo del viernes.

-Entonces ya sabemos que hay que hacer cuando se acabe el primer periodo- dijo la chica- iremos a salvar al animalillo de Draco, lo sacaremos de las fauces de sus niñeras para que lo dejen en paz.

-Tú lo dices porque quieres enterarte de todo.

-¿Y tú no Theo?, estoy segura que todo lo que conlleve a problemas mentales y problemas emocionales te llama la atención, es una buena forma de verlo en primera persona.

-Bien, bien, primero lo alejamos de esos dos y después podemos experimentar con él. – dijo Blaise.

-¿Y quién les ha dado permiso para experimentar con mi animalillo?

-¿No nos dejarás hacerlo Draco?- preguntó el moreno.

-Te ayudaremos a traerlo con nosotros- secundó la chica.

-También tengo algo de interés- dijo después de analizar las palabras de Pansy.

-¿Saben que les digo?, que les den- dijo el rubio para tomar camino al aula, escuchando las risas de los otros tres que comenzaron a seguirlo, tenía que admitir que el plan de Pansy podía funcionar y podía darle buenos resultados.

En clases

Claro que para poder llevar a cabo el plan de la chica tenía que esperar un momento demasiado largo para su gusto, tener que soportar las clases de la Profesora Sprount y después seguir con Binns, el único profesor que podía dormir a un salón completo. De cualquier forma, estaba tratando de aprovechar el cambio de clase y clase para ver al chico y mantenerse tranquilo con lo que Crabbe y Goyle le decían. También Pansy ayudaba con sus escasos "han tratado de hablar un poco con él, pero no parece decir nada", "ha dicho algo de estar bien", "los ha mandado lejos", "ha pedido que lo dejen solo", nunca sabía cómo conseguía esa información, pero ahí estaba, le llegaban las noticias y eso lograba calmarle los nervios que comenzaba a sentir, porque por lo poco que había visto al chico la idea de que había logrado un avance no llegaba mucho a su mente.

Incluso Blaise y Nott habían tratado de captar algo, pero no era mucho mejor de lo que Pansy conseguía y quizá fue por eso que logró mantenerse despierto en la clase de historia, por la poca desesperación que comenzaba a sentir con respecto a no saber nada de Potter, pero tenía el consuelo que faltaba poco ya para poder "secuestrarlo", que eran las palabras que Pansy había usado, no él. Así que se obligó a mantenerse tranquilo un rato más, sólo lo suficiente para tratar de pensar en que sería lo primero que le diría al chico. Aunque tenía que admitir que cuando se trataba de ese chico en específico sus planes nunca funcionaban como lo esperaba, justo como en ese momento donde ahora se encontraba buscando al fantástico, nótese el sarcasmo, trío de oro para poder llevarse con él al chico de lentes, pero lo dicho, sus planes no funcionaban exactamente al pie de la letra cuando de ese chico se trataba.

-Al menos puedes estar seguro de que no eres el único que lo está buscando- escuchó la voz de la chica a un lado de él, fijándose al parecer en una dirección en específico, misma que también le llamó la atención, porque en la mesa donde siempre se podía encontrar al trío de oro ahora se veía solo a Granger y a Weasley buscando por los alrededores, manteniéndose sentados pero buscando a alguien y era bastante obvio quien era ese alguien.

-También podemos decir que eso nos facilita las cosas. – Dijo Blaise comenzando a ver también por los alrededores, -solo tendremos que esperar a que se aparezca de nuevo para abrazar a Draco una vez más como si se tratase de un salvavidas.

-Vamos, algo de tierno tuvo esa escena al menos, pudimos ver el lado de príncipe azul de Draco al no soltarlo- dijo Pansy entrecruzando sus dedos y levantando las manos a la altura de su rostro a modo de mofa.

-En realidad era bastante obvio que Potter necesitaba apoyo en ese momento, - empezó a decir Nott acomodándose mejor a un lado del rubio, -no creo que alguien decida llegar de buenas a primera a abrazar a alguien de esa manera si no lo necesita. -Explicó viendo al blondo fijamente, -mientras venía hacia acá vi pasar a la chica Weasley y a Lovegood, las escuché decir algo con respecto a que Potter les pidió que lo dejaran solo, venían del campo de futbol, tal vez se encuentre ahí... sería buena idea que fueras solo, de alguna formas eres con el que mayor contacto ha tenido, nosotros solo lo pondríamos incómodo.

-Como normalmente suelen hacer, especialmente dos de ellos, -contestó señalando a los otros dos que estaban frente a él, -supongo que puedo ir a verlo.

-Draco, es bastante obvio que quieres ir a verlo, has estado demasiado inquieto en clases, hazte un favor y más importante aún, haznos un favor a nosotros y ve a calmar tus nervios con él, que falta poco para que empieces a contagiarnos tu desesperación- impulsó Blaise dándole un ligero empujón para después tomar a la chica del brazo y llevarla al lugar que siempre solían ocupar, siendo seguidos después por Theo.

Si algo tenía que admitir era que al menos los chicos lo apoyaban, a su manera medio extraña a veces, pero lo hacían, por ello fue que comenzó a tomar camino hacía donde Nott le había mandado y con algo de suerte podría tener una charla más amena de la que tuvo dos días antes, pero era algo de lo que no podía estar seguro.

Campo de fútbol

Sabía perfectamente que de nuevo había explotado con la persona incorrecta o mejor dicho con las personas incorrectas, había tratado de decirles a Ron y a Hermione que lo dejaran solo pero los chicos parecían no entender su simple petición, por ello había terminado huyendo a la primera oportunidad, por ello no había permitido ni siquiera que Ginny o Luna le dijeran algo, solo las había pasado de largo, había pasado mucho tiempo entre tanta gente que necesitaba con urgencia un momento a solas, su fin de semana no había sido malo pero tampoco podía haberse tomado como el gran avance para poder estar de nuevo con tantas personas a la vez, también había optado por escribir algo, lo que fuera que sintiese en el momento que decidiera hacerlo y justo en ese instante era el momento para poder hacerlo al menos con la mayor tranquilidad que podía tener. También el hecho de que se estaba pasando nuevamente la hora de la comida lo estaba pasando por alto, era algo con lo que no quería lidiar por el momento y no contaba con el apetito suficiente como para poder probar bocado, su estómago seguía reacio a eso así que él tampoco quería forzarlo.

-Demasiado solitario, ¿no lo crees?- escuchó que le preguntaron y estaba pensando ya en que maldición podría lanzar para que de nuevo lo dejaran solo pero ninguna llegaba a su cabeza, también tenía que ver el hecho de que se fueron todas las opciones al ver de quien se trataba. -Pott... Harry.

-Draco, pensé que no te vería hasta el entrenamiento- comentó tratando de relajar su cuerpo, cerrando la pequeña libreta para dejarla sobre sus piernas. -Después de que no te viera en la mañana...

-Supuse que necesitabas algo de espacio- comentó quedando a un lado del chico para después tomar asiento a su lado. -También pensé en que no era el momento adecuado para acercarme o que tú lo harías primero.

-Puede que hayas fallado en lo segundo. – dijo con un ligero toque de risa.

-Pude imaginarme eso al verte aquí, en las gradas, solo y sin ningún alimento al parecer- dijo medio en broma, medio en regaño.

-No he tenido mucho apetito que digamos- dijo a modo de excusa, -pero he desayunado bien, Moony no me ha dejado salir de casa hasta que me acabara el desayuno completo.

-No pones una buena expresión al hablar de eso, no creo que sea tan malo.

-Lo es si hablamos del hecho de que me preparó lo mismo que le prepara a Sirius, tampoco ha dejado que yo cocinara. -se quejó sintiéndose un poco más tranquilo a comparación de cómo empezó el día.

-Quería asegurarse que comieras adecuadamente, al parecer ha notado que no te has estado alimentando bien.

Soltó un suspiro al escucharlo, negando con la cabeza, pasando una de sus manos por su alborotado cabello, -lo había estado intentando pero... simplemente no me daba hambre... solo tenía sueño y... aún me siento cansado ¿sabes?, tampoco es como que con dos días haya podido cambiar algo muy notorio, pero... lo estoy intentando.

-Entonces has hablado con ellos, ¿ha ido todo bien en la charla?- preguntó inclinándose un poco para ver mejor al ajeno.

-... Ha sido complicado...- comentó viendo de nuevo al rubio, la misma sensación que lo había embargado en esos cinco minutos de valor que tuvo para ir corriendo a abrazarlo y contarle todo lo estaba llenando de nuevo, -me dijeron que tuve un ataque de ansiedad...

Al escucharlo se sorprendió, no pensó que el otro ya hubiese llegado a ese nivel, lo había visto en algún momento con su tío, pero había sido cuando la situación se había tornado mucho más seria, -¿un ataque de ansiedad? Te... ¿te ha costado detenerlo?

Asintió al momento que desviaba su atención al campo de futbol, -me ha costado... de hecho no sabía ni que me estaba pasando, Moony y Sirius entraron justamente cuando estaba demasiado inmerso al parecer, ni siquiera me percaté de en que momento entraron a mi habitación, solo fui consciente cuando ya tenía a Moony frente a mí... ha sido horrible. -Se sinceró bajando ahora la mirada a la libreta que aún seguía sobre sus piernas. -Pero... Moony sabe una forma de detenerlo, me la dijo cuando me estaba pasando y me la dijo después, cuando estuve tranquilo para poder recordarla por si me volvía a pasar.

-Es bueno tener un plan bajo la maga entonces- dijo al terminar de escuchar al otro asintiendo a las partes que él consideraba adecuadas para hacer ese movimiento. -¿Te han dicho algo más sobre eso?, ¿o ya tienen algún plan?

Se quedó callado un momento al escuchar la pregunta, asintiendo de forma lenta, -hay uno... es Peter, también Sirius habló con mis padres, ellos han decidido ir por mis cosas mañana- se quedó callado unos segundos después de eso, jugando un poco con la tapa de la libreta, -no se que han decidió hacer con Dudley pero... ha sido una charla demasiado...

-Pesada seguramente ¿no?- preguntó buscando no darle oportunidad al otro de completar la oración, era bastante obvio que le costaba encontrar una palabra que definiera lo que había sucedido. -Al menos ahora sé que mi tío no es tan vago como me lo pinta mi madre.

-Sirius es...

-Sirius es Sirius, eso lo tenemos más que claro tú y yo- comentó viendo de nueva cuenta a Harry señalando por fin lo que tanto estaba llamando su atención desde un principio. -Supongo que eso es también parte del plan.

-... Algo así.

-Bueno, al menos estás mucho mejor que el viernes y habrá que creer que podrás estarlo a partir de ahora, a paso lento quizá.

-Paso muy lento- aseguró con una risa baja, -puedes estar tranquilo, hoy iré a entrenar, no olvido tu amenaza.

-Hablamos de una recompensa Potter, no confundas las cosas- comentó mostrando de nuevo su actitud altiva, misma que vaciló un poco al sentir como el nombrado se acercaba más a él, como si estuviese buscando recargarse en él.

-Hablamos de eso Malfoy, llámame Harry.- Comentó tratando de disimular un poco la cercanía que él mismo había provocado.

-Si vas al entrenamiento entonces te llamaré así, mientras tanto seguirás siendo Potter.- Su risa sonó más de lo que había esperado, aunque no fue del todo ruidosa para el resto o para los pocos que se encontraban por los alrededores. Al menos por el momento había comprobado que se había preocupado de más y que al parecer ahora existía una relación mucho más íntima entre ellos dos que no había pensado avanzara tan pronto.

Y en realidad no se quejaba.

-Suena a un buen trato- comentó dejando que la tensión que su cuerpo estaba obteniendo se fuese disipando poco a poco, le ayudaba, quizá se debía al hecho de que en verdad Malfoy se había vuelto su puente, su pilar para poder soportar todo o malo que le estaba pasando o si no al menos olvidarlo de momento.

-Sólo hago buenos tratos Potter.

-Lo creo, la filosofía de negocios de los Malfoy ¿no?

-Exactamente – no lo veía directamente, ni siquiera estaba observando completamente a los alrededores, solo estaba viendo hacia el campo, dejando que su brazo se moviera, dejando que se acomodara lo mejor posible alrededor de la cintura del chico, porque, si el otro había tenido la osadía de acercarse tanto a él solo porque si, él también podía abrazarlo en parte y además servía para que los rumores comenzaran a correr, rumores de que Harry Potter definitivamente no estaba disponible. -Aún tienes que comer algo para antes de que vayas al entrenamiento.

-... Lo sé, lo sé, supongo que si no lo hago no me dejarás entrar ¿no es así?

-No, te dejaré entrar pero haré que el Quirrel te mande a la sección del chapoteadero o te mandaré con Pansy y no obtendrás tu recompensa.

-Eso es cruel Draco, incluso para ti.

-Y puedo ser más cruel todavía - dijo girando un poco su rostro para quedar más cerca del chico, para darle un beso corto y escueto en la mejilla. - Pero no hay necesidad de que los sea aún. Iré con los chicos, parece que estabas en medio de algo cuando llegué, así que aprovecha el tiempo que te queda para terminarlo y, nos veremos al final de clases.

-Podrías quedarte.

-Podría, pero si estabas haciendo lo que me imagino, necesitas el tiempo a solas. - Concluyó poniéndose de pie de forma lenta, incluso él sabía que lo estaba haciendo demasiado lento, solo para recuperar su porte y regresar con los chicos, sabiendo perfectamente que la mirada de Harry estaba sobre de él. Sus avances habían funcionado, sus avances eran buenos y sólidos, así que muchas amenazas ya no había.

Mientras veía que se alejaba, que también espero hasta que el chico diese la vuelta para salir completamente del campo tomo algo de aire, se sentía tranquilo, se sentía con las ideas más claras, por ello fue que se decidió a abrir la libreta, a escribir algo completamente decente, sabía que no podía simplemente empezar a pensar en versos, no era algo que le llamara la atención, pero si podía escribir simples ideas. Y mientras trataba de darle orden a alguna de ellas solo podía ir viendo como las frases se unían en el papel. "Te llevas mis problemas", "apareces cuando lo necesito", "a veces tu sarcasmo es la mejor manera de hacerme reír" y aunque sabía que se podía leer demasiado cursi e incluso él de alguna forma se sintió ridículo no pudo evitar poner en algún punto "Draco" Porque eso lo encapsulaba todo, Draco. Así que si, así se llamó su primera página, fue su inicio, la primera página dedicada al rubio y sabía, por muy infantil que se sintiera que seguramente no sería la última. Ya después haría una página para sus padres, para Sirius y Moony, para Ron y Hermione, incluso alguna para cada uno de sus acosadores y también una para Dudley, pero por ahora solo podía pensar en Draco, el Príncipe de las serpientes. Y claro, las serpientes también tendrían una página para ellos solos.

Se lo merecían.

Lunes en la tarde

El entrenamiento, no era mucho, no era gran cosa, eso lo sabía bien, era algo que ya había hecho mucho tiempo, entonces, con esa lógica suya, no entendía como podía sentirse tan nervioso por ir de nuevo, -Vamos Potter, ya lo has hecho antes, no es algo nuevo, ¿qué pasa contigo? - y se recriminaba, todo lo que podía, porque no entendía porque ahora se estaba comportando tan nervioso, siendo que ya había hecho cosas más íntimas. Y como supo que no podía quedarse más tiempo sentado y pensando en todas las posibles cosas que pudiesen pasar decidió entrar por fin a la piscina de la escuela, rogando porque al menos no fuese tan obvio, a veces no entendía como era qué estando tan triste, tan deprimido, aún se sintiese tan nervioso y tuviese la capacidad de sonrojarse a más no poder.

-Parece que estás nervioso - escuchó que dijeron a un lado de él, aún se estaba preparando mentalmente para poder entrar al lugar, todavía no estaba listo, pero ya las serpientes habían hecho su aparición.

-Un poco... creo... tiene unas semanas que no había venido. - Comentó viéndole un momento para después dirigir su mirada a la puerta una vez más.

-Estoy segura que Draco no va a comerte o algo... a menos que tú lo quieras por supuesto – dijo Pansy con una sonrisa que era por demás burlona.

-No creo que eso le ayude a animarse para entrar Pansy.

-Es una broma solamente, además Potter sabe bien como es nuestro humor, ¿no es así? - preguntó dirigiéndose al chico de lentes.

-Si... bueno, me acostumbré un poco.

-Deja ya de pensarlo tanto - comentó Blaise colocándose a un lado de él, rodeándole los hombros con uno de sus brazos. - También extrañábamos verte, Draco aún no llega, pero nos pidió que si te veíamos antes nos aseguráramos de que comiste algo. Lo hiciste ¿cierto?

-Es importante que hayas ingerido algún alimento, no inmediatamente antes de entrar a nadar, pero si con el tiempo suficiente para poder hacer bien la práctica - comentó Theo acercándose a la entrada para poder ingresar de una vez.

-También si no lo hiciste tenemos que decirle al entrenador para que no deje que entres. - Secundó Pansy entrando detrás de Nott.

-Lo hice, lo hice - aseguró entrando detrás de los primero dos, sintiendo también como Blaise le empujaba un poco para hacerlo. - Me advirtieron de que tenía que hacerlo, así que lo hice.

-¿Cuándo? - preguntó el moreno que aún le rodeaba los hombros.

-Tuve una clase libre, Snape fue llamado a la oficina del director por un asunto que no podía esperar, aproveché para poder ir a comprar algo a la cafetería.

-Eso fue hace... ¿cómo dos horas? - preguntó Nott quien no se encontraba tan alejado.

-Si, más o menos.

-Es un buen tiempo, supongo que tienes nuestra aprobación. -Finalizó Pansy antes de detenerse, - iré a cambiarme, no tarden mucho, también recuerden que hay que empezar con el calentamiento mientras Draco llega.

-Lo sabemos, lo sabemos Pansy, también estuvimos presente cuando lo dijo - comentó Blaise siguiendo su camino hacia los vestidores. - Mujeres, a veces son complicadas.

-Tediosas, problemáticas, insistentes, molestas, ¿quieres que te dé más sinónimos de ellas? - preguntó Nott a modo de broma.

-No gracias, con esos son más que suficientes.

Y con esa broma tan corta y la interacción anterior fue que Harry pudo relajarse de nuevo, los nervios aún los sentía, pero podía controlarlos con un poco más de facilidad.

En cuanto llegó al vestidor decidió tomarse su tiempo, aún tenía que calmar el gran tumulto de pensamientos que comenzaban a surgir y también quería quedarse solo por un poco más, comenzaba a preocuparle en algún momento que se hubiese acostumbrado demasiado a estar solo, pero también había llegado a la resolución de que en realidad no podría ser algo tan malo. Pudo escuchar como Nott y Blaise hablaban entre ellos, como trataban de incluirlo en la conversación donde tuvo que contestar con las menores palabras posibles, pero se sentía agradable de cierta forma, incluido, sin sentirse del todo atosigado. Tanto se encontraba pensando en esa sensación que no noto realmente en que momento los otros dos habían salido, tampoco le dio mucha importancia, estaba comenzando a sentirse estable, tranquilo, incluso podía llegar al mayor pensamiento y decir que se sentía en paz y no había mejor sensación de momento.

-Llegaste a tiempo Potter.

Al menos claro hasta que escuchó la voz de Draco, con eso volvió a sentirse un poco alterado.

-Dije que lo haría y antes de que preguntes, si, si comí algo antes de venir. - Comentó viendo como el otro solo hacia un movimiento de cabeza a modo de afirmación,

-Si no lo hacías...

-Ibas a dejarme fuera de la práctica, lo sé, ya me lo dijeron. ¿De verdad tienes que dejarme encargado?

-No tendría que hacerlo si yo mismo hubiese visto que consumías algo para no quedarte sin energías.

-Sobreprotector. - Dijo entre dientes.

-Es característica de parte de los Black, así que no te quejes Potter – dijo acercándose a él por la espalda, lanzándole una toalla, - deja de perder el tiempo, hay que entrenar, además - empezó a decir acercándose todavía más con la intención de hablarle al oído - no puedes negar el hecho de que te gusta que alguien te cuide, sin estar sobre ti todo el tiempo claro.

¿Qué si los nervios regresaron?, si, lo hicieron y mucho, pero eso no lo detuvo para poder girarse y darle una sonrisa al rubio. - Bueno, no lo niego, ya me has dejad encasillado ¿y ahora qué?, ¿me dirás que en realidad Cedric tiene más coraje para hacer lo que ambos sabemos quieres hacer?, ¿vas a perder de manera tan miserable Draco? - y la burla llegaba, porque estar con las serpientes algo le había enseñado.

-Aún no es tiempo Potter, además, - dijo acercándose más al chico, rozando apenas sus labios, - ¿quién te asegura que no hare más de lo que Cedric hizo contigo? - terminó de decir para separarse de nuevo. - Eres mío durante el entrenamiento Potter, así que no pienses que puedes provocarme y salir ileso de eso, date prisa, llevas mucho tiempo aquí. - Con eso se dio la vuelta para terminar de cambiarse, dejando a Harry maldiciendo un poco en su intento de coqueteo.

-Soy malo en esto – se dijo de nuevo muy bajo, cuidando que el otro no lo escuchara, después de maldecir un poco más terminó de cambiarse, ya se imaginaba el entrenamiento que le esperaba porque no, su mente no iba a ir a lo que podría pasar después no iba a dejarla, porque no iba a ser sano en ese momento, ni en ningún otro seguramente, pero no, no lo haría.

Así fue como ambos salieron del vestidor, tomando camino a los carriles disponibles, viendo como las demás serpientes ya se encontraban terminando su calentamiento. Antes de meterse a la piscina se dio cuenta como el resto salía, al menos los de su mismo año, el resto de los integrantes del club ya tenía sus tareas asignadas. Fue una conversación corta, donde no hubo más de diez palabras por cada uno de los integrantes, una conversación que terminó tan pronto que no se dio cuenta de que ya estaba dentro del agua. Y el entrenamiento fue tan serio, donde Draco le tomaba un poco de la cintura para ayudarle a corregir su postura, donde se acercaba de más para hablar con él, donde, aunque hubo roces no hubo segundas intenciones, solo un entrenamiento centrado, cansado, pero hasta cierto punto revitalizante y no pudo poder algo mejor.

Fue un entrenamiento donde sintió que simplemente era hasta peso muerto, donde también sintió que todo lo que pasaba fuera del agua no importaba, no era nada importante, donde se reclamó un poco a sí mismo por haberse perdido tanto tiempo de eso y donde pudo ver, como, aunque no lo hacían de manera directa; las serpientes se enfocaban en él por momentos, cuando Draco no veía, cuando veía, cuando hablaba con él y cuando no lo hacía alguien más le preguntaba algo. Jamás se hizo la pregunta de si estaba bien y eso lo agradeció, porque sentía que aún era demasiado pronto para esa pregunta, porque aún no iba a saber que decir, que respuesta era la correcta y agradecía infinitamente que eso lo comprendieran. Fue un entrenamiento pesado, liberador, cansado pero necesario y cuando por fin salió, en todo el lapso que se desconectó un poco de su propio ritmo ya se encontraba arrinconado de nuevo, pero con Draco encima de él.

-Has estado distraído. - le dijo sin ninguna intención de separarse.

-Estaba pensando en muchas cosas.

-Tienes que dejar de pensar en tantas cosas.

-No es como que pueda hacerlo, no es como que pueda apagar mi cabeza o voz interna.

-Puedes hacerlo - comentó reafirmando su brazo que se encontraba a un lado de la cabeza de Harry, colocando el otro en la cintura ajena.

-También, creo que no quiero, necesitaba pensar. - Comentó haciendo todo lo que podía para no bajar la mirada al brazo que ahora le apresaba más, quería seguir viendo a Draco al rostro.

-¿Y en que tanto pensabas? - preguntó acercando su rostro un poco más.

-En cómo Cedric te llevó demasiada ventaja, estás perdiendo Draco.

-Te lo estás ganando Potter – dijo con un ligero tono molesto.

-Además, vine al entrenamiento, tú y yo teníamos un trato. Y por lo que recuerdo, un Malfoy siempre cumple sus tratos, cuestiones de negocios y eso.

-Lo hacemos – dijo finalmente para poder deshacerse de la distancia entre ambos, comenzando a besarlo de forma lenta y sutil, un beso ligero que buscaba avanzar, pero no por sus medios. Y tuvo que sonreír cuando sintió como Potter también lo abrazaba, como buscaba subir la intensidad del beso. Aunque antes de dejarle pasar a otro nivel se separó de nuevo, teniendo los brazos del más bajo sobre sus hombros. - He cumplido.

-No estoy satisfecho – dijo quizá sonando un poco desesperado, por ello fue que comenzó el beso de nuevo, buscando pegarse más al otro, todo lo que pudiese, porque lo necesitaba, porque quería hacerlo.

Y aunque todo eso pudo haberse prolongado más, pudo haber pasado a lago más intenso sin llegar a ser obsceno, cuando las manos de Draco comenzaron a descender un poco más y Harry comenzó a sentir que ya la distancia era inexistente fue que tuvieron que parar, no por gusto, no por aire, no por vergüenza, no, todo fue por la toalla que Blaise les había lanzado.

-¡Esperen a estar solos carajo! - les gritó luciendo molesto. - ¡Uno quiere cambiarse tranquilamente, sin tener que escuchar sus cursilerías!

-Tengo que estar de acuerdo con eso - comentó Nott mientras terminaba de abotonarse la camisa y dándoles la espalda.

-¡Jodete Blaise!, ¡Nosotros tenemos que soportar que estes así con todas las chicas que quieras! - contestó en respuesta tomando la toalla y lanzándola de nuevo a su propietario, incluyendo incluso el dedo medio.

-También tengo que estar de acuerdo con eso. - Dijo Nott de nuevo mientras guardaba las cosas en su mochila.

-¡De que puto lado estás Theo! - le gritó de vuelta Blaise.

-¡Del lado donde me dejen cambiarme en paz y no tenga que soportar tantas muestras cursis! - contestó alzando la voz también, incluso dejando caer la mochila. -¡tú también Draco, tanto te quejas de Zabini y estás haciendo lo mismo!

-¡Jódanse los dos!; ¡para que mierdas no se apuran! - gritó de nuevo el rubio.

-¡Jódete tú Draco y Potter también!, ¡vayánse siquiera a lo más alejado carajo! - gritó Blaise de nuevo.

Y seguramente iban a poder seguir peleando, gritándose el uno al otro pero la risa de Harry fue suficiente para detenerlos. - Lo siento... por eso – dijo aun tratando de controlarse, - pero ver a las serpientes que siempre son tan educadas... y con estatus es demasiado divertido. - Terminó de decir viendo a los chicos, colocando una mano en su estómago para calmar las risas.

-¡Jódete Potter! - gritó de vuelta Blaise ya más tranquilo.

-Si Potter, que te den – dijo Nott incluso sonriendo un poco, porque si, admitía que habían sido demasiado infantiles.

-Yo me encargaré de eso, ¿ya puedes dejarnos solos? - preguntó Draco viendo primero a Harry y después a los otros dos.

-Si, si, ya, solo no te tardes demasiado o el entrenador sospechara - comentó Blaise tomando su mochila al igual que Nott dispuestos ya ambos a salir.

Harry sabía que no haría mucho, posiblemente se seguirían besando, lo comprobó cuando Draco volvió a acercarse a él, sin decirle nada, solo besándolo de nuevo, tratando de regresar a su posición anterior. Y sinceramente todo eso le había gustado, por un lapso tan corto olvidó que se sentía triste, porque en ese momento ya no lo estaba. Y cuando Draco se separó de él también lo supo.

-Regresemos al punto de que voy a hacer algo más de lo que hizo Cedric contigo. - comentó dándole un beso rápido.

-Te creo, pero no podrás llegar a tanto. - Contestó sin separarse del todo de él. -No hay que tardar.

-Me conformaré con lo que pueda hacer. - Ambos sabían que los besos serían demasiados, que los roces volverían, pero no había más.

Pero el hecho de que posiblemente Remus y Sirius le preguntaran después que había pasado para tener los labios hinchados no le preocupaba.