Pirámide de Tutangatón...
El antiguo ejército gatuno avanza a pasos agigantados con la construcción de la Pirámide. Tutangatón está sentado en su trono, el cual está ubicado detrás de su tumba con una luz que se proyecta desde la pirámide hacia los cielos... Y el soberano egipcio juega con el adorno de su corona, sin saber el poder de lo que tiene entre manos.
A unas calles de la Pirámide están los humanos escondidos dentro de casas cercanas, estando a la expectativa al ver aquella luz en el cielo...
Phoebe: ¿Alguna teoría de por qué no nos cruzamos con ningún soldado gatuno en el camino, Dennis?
Dennis: No por el momento, debemos estar listos para lo que sea así que no dejen de cuidarse la espalda mutuamente.
Phoebe: Bueno, yo tengo la tuya
Dennis: Gracias
Lorne: Viejo, ¿Cómo vamos a entrar ahí?
Harley: ¿No es obvio? Con explosiones, ¿No es así viejo encapuchado?
Los miembros de La Orden ignoran a los hermanos destrucción, dando a entender que estos han estado molestándolos por todo el camino.
Estelle: Es solo natural el preguntar, ¿Realmente estamos seguros de que este Tutangatón tiene las mismas intenciones que Señor Gato y su planeta? Es decir, tiene más de dos mil años.
Dennis: Es una duda razonable pero lo que posee en su corona es muy importante como para simplemente dejarlo en paz
Fiona: Además mira lo que están construyendo, si dejamos que terminen esa cosa será aún más grande que el cuartel de Señor Gato antes de que lo destruyéramos.
Phoebe: ¿Tú que piensas Millie?
Millie: Pienso que... No es mi lugar hablar de gatos por lo que preferiría saber lo que piensas tú Coop...
Los jóvenes voltean hacia Burtonberger, quien está mirando por la ventana la Pirámide, de forma pensativa...
Dennis: ¿Coop?
Coop: (se da vuelta) Sigo creyendo lo mismo, su historia no cambia nada. Nada en lo absoluto... Lo que están haciendo está mal, y hacían lo mismo en ese entonces. Dos mil años y no han cambiado en lo más mínimo, pero ya verán.
Líder de La Orden: Tener que acabar con un tirano gatuno será menos imposible que acabar con dos.
Dennis: Es bueno que estén separados y no hayan acercado soldados de un bando al otro.
En ese momento entran los Abuelos junto a los Agentes del Área 102.
Abuelo: Y no están planeando en hacerlo, revisamos los alrededores exhaustivamente.
Abuela: Solo hay gatos usando ropa antigua y lanzas.
Dennis: Entonces sabemos qué hacer. (toma la radio) Cuando te diga envía a todos por los laterales de la Pirámide, y nosotros concentraremos fuego por el frente.
Gato Desahuciado: (por radio) Recibido, a tu señal.
Dennis: (se da vuelta) ¿Ustedes están listos?
Dennis se da vuelta para encontrarse con Coop y Fiona uniendo los puños frente a él.
Fiona: Burtonberger, Munson y Chan
El joven sonríe al verlos así y también une su puño, pero se tira para atrás al percatarse de algo.
Dennis: Espera, ¿Todavía crees que mi apellido es Chan?
Coop: ¿No lo es?
Dennis: Te estás convirtiendo en un peor amigo cada semana que pasa, ¿Lo sabes?
Coop: Okay, auch... Pero eso no responde nuestra pregunta.
Dennis: Es "Lu", fin del misterio.
Fiona: Burtonberger, Munson y Lu... Agh no tiene el mismo ritmo.
Dennis: Lu, Munson y Burtonberger.
Coop: Oye.
Dennis: No hay tiempo que perder, ¡Nisi terrae!
Líder de La Orden: ¡Nisi terrae!
La Orden: ¡Nisi terrae! ¡Nisi terrae! ¡Nisi terrae! ¡Nisi terrae!
Coop, Fiona, y todos los demás en el edificio se unen al canto de La Orden, generando muchísimo ruido, el cual comienza a ser percibido por los felinos antiguos cercanos a la Pirámide, poniéndolos en alerta mientras los gritos se escuchan cada vez más fuerte. Empiezan a cubrir el frente de la estructura, apretando sus armas mientras el cántico sigue sonando a lo lejos...
Pero de repente comienzan a sonar los mismos gritos a los costados y nomás darse vuelta ven gente corriendo hacia ellos. Los felinos rápidamente corren y apuntan sus lanzas hacia ellos, frenándoles el paso y generando peleas dispersas alrededor de la estructura, viéndose despistados cuando el mayor grupo de frente, armados con armas de electricidad ante las cuales sucumben los antiguos soldados gatunos.
Los humanos arrancan el duelo con ventaja, dejando en el suelo a sus enemigos con cada disparo, forzándolos a retroceder y pudiendo acercarse cada vez más a la entrada de la Pirámide, hasta que más súbditos de Tutangatón salen portando escudos, plantándose en frente de la formación, y avanzando mientras dan estocadas con las lanzas, cerrando la distancia entre ellos cada vez más.
Pero cuando la ventaja parece haber sido perdida la Sra. Munson, quien esperó hasta último momento, choca contra los gatos, rompiendo la formación de escudos, aunque sea al costo de recibir algunos cortes.
Sra. Munson: ¡Hngh! ¡Disparen!
Los chicos meten más disparos de electricidad entre las filas hasta que más escudos se asoman entre estas evitando ser derribados con facilidad, hasta que Los Agentes del Área 102 agarran escudos del suelo y hacen lo mismo que la anciana para romper las barreras, esta vez evitando los cortes.
La apertura de las defensas fuerza un gran choque entre los humanos y el ejército de Tutangatón, ya no son dos lados enfrentados, sino un combate donde cada individualidad cuenta...
Dennis está disparando un fusil de electricidad mientras Phoebe hace lo mismo cubriéndole la espalda. El muchacho nota esto y aprovecha la cobertura para agarrar un escudo, ponerlo sobre el cañón de su arma y disparar hasta romper y derretir el medio, envolviendo el fusil con el escudo, cubriéndose de las lanzas al mismo tiempo que abre fuego. La chica nota lo que hizo y aprovecha los disparos para hacer lo mismo y ambos siguen combatiendo.
Por otro lado, Lorne y Harley están peleando cuerpo a cuerpo con los felinos al haber sido desarmados, pero Estelle aparece disparando, permitiendo que los chicos agarren escudos y se pongan alrededor de ella mientras continúa dejando en el suelo a los soldados gatunos antiguos.
La Sra. Brannigan recibe un arañón en la cara, pero se recompone y, enojada, le roba una lanza a un felino, teniendo un duelo con otros 3 felinos, a los cuales les gana al golpearles con el mango de su arma los dedos, para luego golpearlos en la cabeza. Al darse vuelta ve a más enemigos corriendo hacia ella, pero se encuentran con Burt, Henry y la Mamá de Dennis cubriéndola, también habiendo robado lanzas.
Coop y Fiona por su parte pelean espalda con espalda, cada uno portando un escudo y una pistola de electricidad, cerca de Millie quien, de forma insegura, se pone en posición de pelea, pero ninguno de los felinos la ataca. No solo eso, sino que pasan por al lado de ella y aún así no le hacen nada con tal de seguir atacando a los demás, entre ellos a Los Abuelos que están más al fondo disparando, pero cuando los felinos se acercan demuestran ser capaces más allá de su edad, agarrando las lanzas luego de esquivar estocadas, y respondiendo con culatazos.
Burtonberger y Munson son derribados al recibir escudazos por parte de varios felinos en fila, Wanda intenta chocarlos, pero son más de 10 por lo que la arrojan a un lado. El grupo de soldados gatunos antiguos se acerca al joven apuntándole con una lanza, haciéndolo notar que la mayoría de los felinos que están peleando están también tratando de llegar a él. En ese entonces La Orden aparece y contrarresta las lanzas con sus espadas, ayudando a Coop y Fiona a levantarse. Estos se miran mutuamente hasta que la rubia le da un puñetazo a un gato detrás de su pareja.
Fiona: ¡¿Entonces ahora tienes guardaespaldas?!
El muchacho sigue mirando a su alrededor, pero le devuelve el favor a la chica al también golpear a un gato que estaba detrás de ella.
Coop: ¡No guardaespaldas, sino aliados!
Coop mira al Líder de La Orden y asiente con la cabeza, el hombre repite la acción y comienzan a pelear. Espadazos, escudazos, disparos de electricidad a los que se suman Dennis y Phoebe, luego Lorne y Harley junto a Estelle, luego los adultos del grupo, los Abuelos, e incluso el Gato Desahuciado hace presencia junto a Dunston y Mildred, creando una formación propia con los escudos robados, estando rodeados, pero no pudiendo ser atacados por los antiguos soldados gatunos que están sucumbiendo a pesar de sus mejores esfuerzos...
En la Pirámide...
Tutangatón sigue sentado en su trono, pero agachado con sus manos sosteniendo su montón, pensativo... Recordando el mundo que conocía y cómo este dejó de existir hace ya miles de años, y recordando a la Princesa mientras mira su estatua a lo lejos... Hasta que empieza a oír ruidos de batalla desde afuera.
Sin entender lo que sucede el gato antiguo sale caminando de la Pirámide desde uno de los pisos superiores, asomándose por una ventana y presenciando cómo se ha desatado nuevamente un gran combate entre humanos y felinos alrededor de la estructura, volteando hacia la estatua de su antigua dueña sin poder creer lo que está viendo...
Sigue boquiabierto y con los ojos abiertos en grande, completamente shockeado hasta que entre el combate divisa a alguien le es muy familiar, Coop. Al fijar su vista en él se enfurece rápidamente y empieza a dar unos pasos hacia atrás... Para empezar a correr y saltar desde las alturas directamente al centro del combate.
El felino no despliega alas como Sr. Gato y se basa en calcular su caída, apuntando directamente con las garras de sus pies al cuello del descendiente de su archinémesis.
Mildred: ¡Cuidado!
La mujer salta al frente de su hijo, poniéndose en el medio y recibiendo una de las garras en el hombro, y otra en la pierna. Tutangatón da una vuelta en el aire y la suelta, arrojándola al suelo, sorprendiendo a todos por la entrada del felino, sobre todo a Millie quien lo observa escondida detrás de la Sra. Munson.
Burtonberger y algunos miembros de La Orden instintivamente van a ayudarla a pesar de lo mal que se llevan con la mujer.
Coop: Vas a estar bien...
Mildred: Por supuesto.
Coop: ¿Por qué hiciste eso?
Se asoman 2 antiguos soldados gatunos, pero Mildred agarra a Coop de la cara y lo quita del medio para dispararles.
Mildred: Escucha, apesto como madre... Lo sé. Pero sí tengo valores de camaradería, hacemos esto para proteger a la gente.
Líder de La Orden: Nosotros también.
El encapuchado le da la mano y ella la acepta para levantarse, terminando con las supersticiones mutuas que tenían La Orden y Los Agentes del Área 102, estando ahora en la misma página y volviendo al combate.
Tutangatón está parado en el medio de los humanos sin ninguna preocupación de que su ejército no pueda llegar a él, los chicos ven el amuleto que lleva en su corona... Y Lorne y Harley son los primeros en correr para quitárselo, pero el felino antiguo golpea al menor de los hermanos, lo agarra del brazo y lo estrella contra el mayor, salta con dos patadas a la cara de este derribándolo al suelo y cae con fuerza sobre su estómago. Wanda lo ataca furiosa pero el gato alienígena salta con un rodillazo en el mentón, la agarra de los pelos y también la derriba.
En ese momento Coop intenta dar un puñetazo, pero Tutangatón le agarra la muñeca antes de que conecte, pero solo le sostiene el brazo. Burtonberger intenta moverlo, pero por más que haga fuerza el felino no lo suelta, y comienza a mirarlo sin parpadear, con mucho odio, hasta que termina por soltarlo y dejar que siga de largo, enfrentándose a Dennis, Phoebe y Fiona, saltando por encima del primero para patear el pecho de la segunda estrellándola contra la tercera. Dennis lo agarra de la cola, pero el gato la mueve y le pega en la mano como si fuera un látigo y le termina dando un puñetazo.
Tutangatón nuevamente se planta y, esta vez teniendo la atención de todos, comienza a saltar entre aquellos que lo atacan intentando quitarle su corona, pero no son rivales para él. Salta entre arañones de persona a persona hasta quedar en el suelo, en donde la Sra. Munson intenta aplastarlo, pero el gato salta con una patada a su rostro y se impulsa con un puñetazo hacia Burt culminando en una patada doble a él y a Brannigan. Coop intenta golpearlo nuevamente pero el felino salta por encima de él y le da una patada en la espalda provocando que siga de largo.
El felino no se agita, hasta que oye un sonido familiar cuando los miembros de La Orden desenfundan sus espadas, provocando que entrecierre los ojos y, antes del primer espadazo, tome una lanza del suelo y bloquee los ataques de los encapuchados, tirando estocadas, desarmándolos y girando el arma en su mano para crear distancia. El felino sigue rotando la lanza evitando que se le acerquen, pero la frena de golpe justo en frente del rostro de Burtonberger, quien se queda quieto e iracundo al ver su destreza, pero el antiguo felino, de forma burlona, le da un golpe con la parte sin filo del arma.
Los miembros de La Orden aprovechan la oportunidad y le saltan encima, tratando de quitarle el adorno de su corona, sin dejar al felino levantarse, hasta que este se enoja y salta, toma un escudo y se cubre de los espadazos y los disparos de electricidad antes de arrojarlo en la cara del Líder del grupo. El felino salta encima de este y empieza a golpear a todos los que intentan acercarse, Phoebe recibe una patada de espalda, Estelle un puñetazo, Dunston un latigazo en la cara, Henry un arañón, cayendo uno a uno así hasta que Coop logra encestar una patada, pero el felino le agarra la pierna, clavando sus garras.
Coop: ¡Agh!
Para luego dar un giro y arrojar al muchacho al suelo haciendo que ruede en este. El chico se acomoda, se agarra fuerte la pierna y mira a Tutangatón, comenzando a gruñir mientras lo ve, y este se queda quieto mirándolo, procediendo a acomodarse la corona, levantar su mano y tantearlo para que venga a él. Burtonberger no lo piensa 2 veces, se levanta y comienza a correr con todo lo que tiene mientras Tutangatón hace lo mismo, dirigiéndose a su Pirámide.
Millie: ¡Coop! ¡Espera!
El felino siente esa voz familiar, pero al ver a Coop aún detrás suyo sigue su recorrido. Ambos pasan entre humanos y antiguos soldados gatunos batallando como si nada, solo esquivan a los que se cruzan en el medio, pero ningún felino se mete en el camino del joven, incluso mientras sube las escaleras para entrar a la gran estructura, por donde sigue corriendo por los pasillos detrás del felino egipcio, sin percatarse de que los demás gatos del antiguo ejército que están allí no lo persiguen, al contrario, están dejándolo pasar.
Tutangatón sigue hasta llegar a una puerta de piedra, cerrándosela al muchacho en la cara, haciendo que este se frene y la golpee, pero permitiéndole percatarse de los gatos que tiene detrás, quienes ahora sí le están apuntando con sus lanzas, dejándole como única opción el entrar a la habitación en donde se escondió el antiguo soberano...
Nuevo Cuartel Gatuno...
Sr. Gato está observando el panorama desde su nueva habitación mientras sus soldados gatunos instalan cámaras y una pantalla grande. Pero uno más entra apresurado para informarle sobre el combate, señalando la pirámide desde lejos...
El felino se mantiene inexpresivo, hasta que se da vuelta y levanta una mano, ordenando que no haya ningún tipo de interferencia...
