Titulo: Fucking Rich people
Rating:T a M
Disclaimers: Naruto no me pertenece. Si me perteneciera hubieran visto mas el background de los Hyugas, Naruto seria mas protagonico, los Akatsuki tendrían su spinoff, el equipo siete comprenderán que nunca debieron de defender a Konoha, terminarían la guerra e huirían junto con Kakashi.
Capitulo 1
Ubicación: Los angeles, California, USA.
7:00 am
El aeropuerto se encontraba lleno como de costumbre, la gente hablaba mientras se tomaba su café sentados mientras esperan su vuelo. Su pasatiempo favorito era ver a la gente correr mientras llevan sus maletas de mano para llegar a la puerta donde saldría su vuelo. Volteo a ver a su hermana menor que se encontraba de mal humor que estaba sentada a dos lugares de ella con los brazos cruzados y la mirada fija en la pantalla de su celular. Hasta ella se estaba poniendo nerviosa de solo verla.
-Necesito un café.
Lo que temía, ella sabía que no debía de comprar los vuelos a las siete de la mañana.
¿Alguien le hizo caso?
No, claro que no. Natsu los compro porque eran los mas baratos y porque no quería escuchar a Iroha quejarse de la hora que tendría que ir por ellos. Como ninguno de ellos estaría a lado de Hanabi las seis horas de vuelo, nadie pensó en las consecuencias.
-Neji y Ko están en eso-mascullo.
-Me urge un cigarro, mi mano grita por un cigarro.
Un Hyuga de mal humor en la mañana era lo más normal de ver. Neji sin cafeína en su cuerpo no era humano. Su padre solia decir que cuando estaban de mal humor estaban Hyugaros. Era una especie de broma local.
Una Hyuga Hanabi de mal humor es un mal augurio. Todas las mañanas frías en Boston era lo mismo: Hanabi siempre peleaba con alguno de sus primos o tíos pero un pequeño sorbo a su taza de café la hacían regresar a su parte humana. El café era una parte muy importante para los Hyugas, inclusive se podría decir que era el elixir de la vida y juventud. Hinata se limitó a respirar profundo recordando las clases de meditación que había tomado a lo largo de su corta vida para tranquilizarse. Estaba empezando a tener su dolor de cabeza matutino, con sus dedos toco su frente para mitigar el dolor.
-Odio estos viajes exprés-escucho quejarse a su hermana menor.
-Una visita cada cierto tiempo a Los Ángeles no está de más Hanabi, sabes que papá nos extraña-dijo mientras masajeaba su frente.
-Aun tengo vagos recuerdos de aquella noche-murmuro la castaña.
Aquella noche hace catorce veranos ningun Hyuga le gustaba recordar era uno de los motivos por el cual no vivían con su progenitor. Esa noche quedó tatuada en el alma de cada uno de ellos. A veces pensaba que los problemas siempre seguian a los Hyugas.
Ser Hyugas significaba poder y conocimiento, no solo era el apellido poco común.
Suspiro exasperada; no le dio tiempo para darle una respuesta a su hermana cuando un vaso blanco de café aparece frente a ella. Levanta la cabeza para buscar con su mirada a un joven un par de años mas grande que ella con los mismos ojos grises que los caracterizaba. Sonrió al ver a su primo Ko.
-Un café con leche de almendra con dos de azúcar splenda mas de regalo un rollo de canela- se lo entrega en las manos de Hinata mientras sonríe- ¿llegue a tiempo antes de tu dolor de cabeza?
-Eres mi héroe.
-¿Y el mío dónde está? Necesito un par de cigarros y cafeína- alegó su hermana menor.
Hinata pudo percibir a simple vista la vena de su frente donde su enojo se hacía cada vez más notorio. Ko, siendo uno de sus primos mayores, para ellas era prácticamente su figura paterna desde que se fueron a vivir a las afueras de Boston; las tenía demasiado mimadas y si podía les cumplía cada capricho mientras estuviera a su alcance. Hasta cierto punto Ko era el que evitaba las peleas matutinas entre Hanabi y el que se le atravesara en la mañana. Tokuma solia decir que Ko era el mediador de las peleas y a veces Hinata estaba de acuerdo con el.
- ¿Acaso tengo que ir yo misma a conseguir el café antes de meterme en un vuelo de seis horas?¿A quien se le ocurrió comprar el vuelo a las ocho de la mañana?-continuo alegando la castaña.
A Natsu. That bitch, se hizo la inocente cuando se quejó Neji por la hora. La respuesta de su prima solo fue decir que no era su problema.
-Eres menor de edad y no puedes fumar aun-le contesto Ko, a lo cual la menor solo gruño.
Hinata dio una mordida a su rollo de canela discretamente. La edad nunca habia sido un problema, ella recordaba su primer cigarro fue en el invernadero con Neji ambos de catorce años; esa noche su primo le hizo prometer que solo fumarian cuando estuvieran juntos. Normalmente lo cumplía, a veces no
-El café viene en camino, Neji te pidió un expreso con dos shots y un burrito de taco bell.
-Así me gusta, que sigan las órdenes.
Hinata tomó un gran sorbo a su café mientras esperaba que hiciera el efecto. Unos segundos más y empezaría a sentir la magia de el elixir oscuro, cerró sus ojos para poder detectar el delicioso aroma del café y su rollo de canela. Dios existia y se hacía presente en ese momento. Abrió los ojos solo para darse cuenta que tenía de espectadores a su par de primos sonriendo.
-Bienvenida al mundo real, Hinata.
-Malditos, ustedes ya tomaron su dosis de café y desayunaron.
-Nuestras órdenes salieron antes que el de ustedes- explicó Neji evadiendo la mirada de Hinata.
Hinata solto un bufido, ella sabia cual era la realidad detras de esa mentira; ninguno quería estar cerca de una Hanabi recién levantada con hambre y sin su taza de cafe. Los malditos la abandonaron sabiendo que ella tenia mas paciencia que ellos.
Para que quieres enemigos si con la familia era más que suficiente.
-Miedosos.
Los dos jóvenes sonrieron discretamente ante su respuesta. Su enojo fue momentaneo, Hinata no podía estar más de cinco minutos molesta con ellos más cuando llevaron un rollo de canela de cinnabon. La conocian demasiado bien. Neji se sentó a su lado de dejándole solo el espacio libre a Ko a lado de Hanabi, la cual estaba dando su segunda mordida al taco. Si Hinata pudiera leer la mente sabría que la Ko estaba maldiciendo en alto-especificamente a Neji- vio como es que él trago saliva y tomo asiento.
Neji volteo a ver a Hinata, su mirada preocupada le hizo comprender el tema que quería hablar. No había necesidad de cruzar palabras, los ojos grises que los caracterizaban como familia expresaban más de lo que su primo quería decir. Hinata le dio un sorbo a su café, ese viaje exprés de cuatro días había sido los más bizarro, dejando a un lado su visita a casa de su abuelo de noventa y ocho años diciéndoles leperadas, todo había sido poco común. El entrenamiento exhaustivo que tuvieron en el dojo los hizo perder unos cuantos gramos fue lo más normal del viaje.
Muy en el fondo sabía Hinata que ella era la única que podía sacar la información antes que su hermana lo hiciera.
-Entonces Ko ,¿cuando nos pensabas decir que nuestros papás tenían a unas putas como novias?
Demasiado tarde, Hanabi habló antes que todos.
-Que tal si cambiamos la pregunta por: ¿desde cuando papa y el tío Hizashi tienen novias?
Un súper poder de Hanabi era hacer las preguntas directas-aparte del super poder de golpear a todos- el súper poder de Hinata era endulzarlas y hacer las preguntas más sutiles.
-¿Desde cuándo tienen unas putas latinas como novias? ¿Qué son, colombianas?-
Damn, Hanabi cambió su mood de estoy tranquila a soy Polly Gray en Peaky Blinders. El nerviosismo de Ko y su tic en sus ojos delataban su sospecha. Lo sabía desde hace tiempo.
-Fuck you! No puedo creer que no me dijeras.
Neji diciendo maldiciones era una versión más suave a comparado del tío Hoheto. Él seguía sentado al lado de Hinata tratando de estar tranquilo. Ko no decía nada, como si Neji ni Hinata hubieran aplicado la ley del hielo antes.
-La casa es vieja Ko- explico Hinata mientras se sonrojaba.
Sabía que Ko dormía como piedra una vez que su cabeza tocara la almohada ya no escuchaba algún ruido, a comparado con Neji y Hinata que desde que son niños escuchaban hasta el más mínimo sonido. El psicólogo les había dicho que mientras crecieran iban a superar sus miedos, que podrían dormir más tranquilos y más horas. No había sucedido y en ese viaje lo confirmaron. La idea de tomar ansiolíticos y alguna benzodiacepina sonaba tentador.
-Oír que tu padre tiene el pene muy grande y escuchar los gemidos de sus respectivas no fue de nuestro agrado. En realidad, fue traumático-confeso Hinata.
Debio de considerar tomar algo para caer como piedra.
El sonrojo de Ko fue mayor que el de Hinata. Otra característica de os Hyugas- especificamente de Ko y de Hinata- era que se sonrojaban fácilmente. Si hubiera un concurso para saber quien era el que se sonroja más el primer lugar seria para Hinata. El segundo lugar seria para Ko. Por lo visto, hablar de sexo causaba que Ko tornara a un nuevo nivel de enrojecimiento.
Hablar de sexo era divertido y hasta cierto punto educativo, pero hablar de la vida sexual de tu padre eso era otra cosa. Hinata escuchó un suspiro cansado por parte de Neji, lo miro a los ojos y supo exactamente qué pregunta haría. Conocía tan bien a su primo, que podía apostar solo esperaba que no fuera tan directo.
-¿Era una orgía o era un trío?
Oh god, si hizo la pregunta.
Un tono de rojo mas y Ko podría hacerse pasar por un foco de navidad.
Ella entendía a Neji, la primera noche solo escucho que se movía la cama e intentó volver a recuperar el sueño pero los gemidos y las nalgadas que se escuchaban le fue imposible regresar a los brazos de morfeo. La segunda noche fue peor, eran las dos de la madrugada cuando se escuchó los gritos de una sola mujer con descripciones gráficas de como quería que la penetraran por mas de una persona. No tenia que ser genio para saber a que se referia la mujer, esa noche se salieron tanto Neji como Hinata de sus respectivos cuartos, cada uno con su almohada y su sabana se fueron a dormir en el Dojo.
Era una de las ventajas que tu casa tenga uno, siempre podias huir de las actividades sexuales de tu familia y esconderte ahí.
La tercera noche fue las más traumática, fueron tres horas seguidas de gemidos y gritos de más de dos mujeres. Esa noche Hanabi los acompaño en el Dojo después de la primera hora que escucho. La cara de miedo y asco en la menor causo un poco de gracia, todo fue divertido hasta que los gritos subieron un par de decibeles.
-¿Crees que tengan una relación con varios, como poliamor?-las preguntas de Hanabi siempre eran directas, sin filtro.
Habian encontrado una nueva forma de pasar el tiempo en el aeropuerto: hablando de la vida sexual de sus padres. Si la gente los escuchara pensarian que estaban locos, y talvez tenian razón.
-¿Usaran condones? Safo, yo no quiero darles la plática de enfermedades de trasmisión sexual.
-Habla Ko, no estamos enojados contigo.
Ella dio un sorbo más a su café, lo iba a necesitar. Intento animar a Ko para que confesara, después de todo el traidor no les había dado alguna pista de las actividades nocturnas que tenían sus respectivos padres. Hinata observo su celular, aún tenían cuarenta minutos para que se declarara culpable de este acto. Lo vio y sintió un poco de lastima por él, Ko se debía de preocupar por Neji y Hanabi: ellos no iba a tener piedad al interrogatorio. Principalmente de Hanabi, que era la más salvaje de todos los Hyugas. Tokuma solía decir que Hanabi era una combinación de Natsu y de Hoteto, solo que a la decima potencia. Y todos los Hyugas, pensaban lo mismo en silencio.
-Habla por ti Hinata, yo si estoy enojada con él
Oh snap! Si, la guerra había comenzado y Hanabi lo tenía acorralado.
Quien quiera que sea la pareja de vida de la menor, rezaban por su pobre alma. Especialmente rezaba su padre y el tío Iroha.
-Traidor.
Solo una palabra salio de la boca de Neji y fue dura. Él siempre habia visto como una gran figura a Ko por ser el próximo maestro de Byakugan. Sería difícil de remediar para el pobre Ko, Hinata volvio a sentir un poco de lástima por él.
Eran las consecuencias de su traición.
-No tenía que ser yo quien les tenía que decir- se excusó su primo mientras se pasaba su mano por su corta cabellera castaña. No tenía escapatoria y tendría que darles respuestas en ese viaje de seis horas.
-Somos Hyugas y queremos respuestas- dijo Neji mientras se cruzaba de brazos.
-Son humanos, tienen necesidades fisiológicas-volvió a decir Ko.
-Eso lo entiendo y yo también las tengo, pero no significa que ando teniendo relaciones sexuales extremas cuando voy a casa de mi papá.
Neji y Hinata se miraron a los ojos, ambos sabían que la mejor para hacer el trabajo sucio era Hanabi. Vieron que dio un último sorbo a su café la menor de las Hyugas y miro el celular que traía en mano. Hinata y Neji desviaron la mirada hacia la pantalla que tenían enfrente de ellos.
Vuelo 512 de Los Angeles internatioal Airport a Logan international Airport cambio a puerta 6.
Ko se relajo notando que no era el centro de atención por unos breves minutos. No le sorprendería a Hinata que Ko hubiera sudado mas de lo normal.
¿Por qué estamos de acuerdo que Los Ángeles hace un calor infernal?
Hinata podria enlistar las cosas que no extrañaba de California y lo podia resumen en cuatro palabras: crimen organizado, sol, calor e incendios.
-Tenemos veinte minutos para hacer nuestras necesidades fisiológicas y acercarnos a la puerta seis-se burlo Neji, se levantó de su lugar y sonrío- ¿Quieres ir al baño antes Hinata?
Que le causara gracia la situación a Neji era una buena señal. Especialmente para Ko. Aunque Neji quisiera enojarse por más tiempo con él no podía, después de todo Ko los habia ayudado desde siempre, incluso aquella trágica noche roja de verano que pasó.
Vio como era que Ko y Hanabi se adelantaban a la puerta seis para esperar el momento de abordaje.
-Hanabi debe de aprender a cerrar la boca -escucho que le decía su primo mientras caminaban hacia el baño. Hinata noto que le llegaba justo al hombro de él, así que para poder verlo a los ojos tuvo que girar levemente su cabeza a la izquierda. El cuello largo y elegante de Neji lo hacían parecer fuera de ese mundo-Estuviste muy seria todo el interrogatorio, se que quieres decir algo.
Ella exhalo.
-Mamá falleció hace años, nunca pensé que papá fuera una especie de celibato todo este tiempo-se atrevió a decir aquellas palabras que las había traído rondando en su mente. Después de todo, aquellas noches que pasó durmiendo en el Dojo con su primo casi hermano ninguno se dirigió la palabra; no sabían qué decir en esa situación tan vergonzosa- Tenemos mínimo diez años viviendo fuera de casa, solo quiero que sean felices.
-Yo también busco eso para papá pero no quiero volver a escuchar a alguien que quiere que la penetre mas fuerte-la cara de Neji palideció más de lo que normalmente estaba su piel- Este fin de semana acabo de desbloquear un nuevo nivel de pesadillas que tendré.
Hinata solto una risa discreta, por primera vez en cuatro días habia reido en alto. Neji la mira y por una extraña razón Hinata noto que estaba menos tenso, inclusive calmado. Con su mano derecha le dio unas palmaditas en su cabello y le sonrió
- Tendremos que hablar con nuestros papás de esto la siguiente ocasión que vengamos.
-Estoy pensando en rentar un cuarto de hotel-musito la pelinegra.
-Definitivamente apoyo la noción-hizo una breve pausa antes de entrar al baño volteando a verla-No sabía que nuestros papás les gustara el dirty talk.
-Agh Neji, me causaras náuseas.
La risa de Neji tiene un efecto parecido a las feromonas, el sonido y la vibración de este son música para los oídos de todas las damas que se encuentran cerca. Sabía que él robaba más que miradas y suspiros de la población femenina hasta en algunos casos masculina. Su cabello largo y hermoso, sus ojos grandes y grises, su nariz chica y masculina que junto con su mentón hacían resaltar lo atractivo que era.
Natsu estaba celosa de su definición mandibular, lo comparaba con los Cullens y Neji odiaba eso.
Vuelo 512 a Logan international Airpor esta abordando…
Hinata estaba esperando a Neji en la tienda que estaba frente a los baños cuando escuchó que su vuelo estaba iniciado el procesos de abordaje para los pasajeros. Hizo una mueca y se empezó a cuestionar por el bienestar de él. Sus opciones eran bizarras y cómicas.
¿Le habrá dado diarrea nerviosa? Porque no entendía su tardanza para salir del baño.
Y en ese momento recordó que no se había aplicado su tratamiento capilar. Jamás se habían quedado dormidos, los Hyugas eran puntuales siempre. Pero existe una primera vez para todos, y sucedió el día que se tenían que regresa a Boston. Fue toda una odisea llegar al aeropuerto.
Ella se acercó a la caja registradora para pagar su almohada de viaje cuando golpeó ligeramente con su hombro a una persona. Pudo detectar el olor a limpio pero su nariz reconoció la esencia de madera con ligero toque de cítricos y curiosamente a mar. Ya había olido antes ese aroma, pero no recordaba a quién y en donde. Un problema que siempre había tenido es su automática respuesta ante personas nuevas, una manía que es difícil de quitar: disculparse por todo.
-Disculpe…
Ojos oscuros conocen los grises; miedo y sorpresa sintió en aquel momento. Su mente, su nariz y su vista reconocieron a la persona; por un segundo estaba segura que él también pudo reconocer su esencia. La miró como si se conocieran de antes, sus pupilas se dilataron por un momento y tan rápido como paso regresaron a la normalidad.
-Hn…
Su corazón le latía mas de lo normal, estaba segura que le bajó la presión del miedo. No la reconoció, jamás la reconocería. Su corta respuesta y su indiferencia le rectificaron que no era posible que supiera de ella. Era sorprendente como una persona la podía hacer recordar su pasado junto con la adrenalina que pasaron hace años, el miedo de morir, el miedo de perder algún familiar y el mayor miedo que tenía: que los descubrieran.
Que saliera todo a la luz.
Gracias a la vibración de su celular para notificarle que tenía mensajes pendientes fue como regreso a la normalidad-a excepción de su taquicardia-se acerca con pasos lentos a la caja registradora para hacer el pago. Mientras la mujer le cobraba ella mete su mano al bolsillo de su pantalón buscando su celular para ver los mensajes, es ahí cuando nota que sus manos aún le temblaban y supo que necesitaba a Neji.
Siempre necesitaba a Neji, él entendería la situación.
Vio los múltiples mensajes que tenia pero se enfocó en el más importante para leer que era el de su primo, encuentra un mensaje de él donde explica que la estaba buscando. Aparentemente, para matar el tiempo Neji fue a comprar un libro para leer durante el viaje. Lo único que pudo pensar Hinata fue una palabra.
Geek.
Más tranquila y viendo a su alrededor se encamina a la puerta seis. Estando más cerca ahí es donde ve a Neji con una mujer que jamás había visto, Hinata se detiene en seco y observa la escena que tiene a unos pasos de ella. Todo indicaba que a las ocho de la mañana, Hyuga Neji, podía enamorar a cualquier persona. Ve sus labios moverse y nota en ese preciso momento como es que la mujer- de unos cuarenta años -rubia de unos pechos grandes y muy buenas cirugías plásticas le da una tarjeta de presentación, probablemente con su número telefónico.
Neji serio, as always, sólo asiente con su cabeza mientras la mujer se va. Cuando ve que la mujer se alejo lo suficiente, Hinata se acerca hacia él con sus labios apretados para contener la risa.
Si algo odiaba Hyuga Neji de si mismo, era este tipo de situaciones.
-Ni se te ocurra-la amenazo. Hinata soltó una carcajada discreta.
-¿Acaso era una cougar?
Definitivamente Neji era un Hyuga, ese sonrojo lo delataba y lo confirmaba. Hinata no pudo evitarlo más y rio fuerte que ocasionó que el sonrojo se extendiera hasta sus orejas. Gracias al destino, ese pequeño momento familiar le hizo olvidar el miedo que había sentido hace unos minutos, se acercó a Neji lo abrazo y antes de darle un beso en la mejilla se aseguró que la mujer no estuviera a la redonda.
-Perderemos el vuelo, Romeo. Vamos a casa-bromeo.
-No le digas a los demás-suplico el castaño con una mirada mordaz.
-No te preocupes, tu secreto y tus fetiches están a salvo conmigo.
Pudo apreciar sus mejillas rosas mientras le tomaba la mano para guiarlo a la puerta seis. Esos pequeños momentos era todo un deleite para ella. La hacían olvidar lo que había vivido y lo que la estaba estresando. La hacían calmarse más que un cigarro.
-Aparte no es tu culpa ser guapo-empezó a decir la pelinegra mientras caminaban por la multitud de gente-He visto como a Tokuma se le lanzan la mayoría de las mujeres cuando es domingo de mercado.
- A veces odio a las mujeres- refuta Nej mientras se acercan a la puerta seis.
Cada uno empieza a sacar sus pases de abordar con su identificación, la mejor parte de ser los últimos en abordar era que la fila era corta.
-Hanabi ha mandado varios mensajes diciendo que no nos perdona si la abandonamos con Ko.
-Siempre amenazando mi hermana- dijo Hinata.
Se mordió el labio por los nervios mientras estaban en la fila. Por su mente pasaban muchas preguntas ¿Cómo le diría a Neji que se encontró con una persona que tenían ocho veranos sin ver?
Estaba atemorizada, no le podía decir nada aún.
No ha pasada nada malo.
Se lo repetía una y otra vez hasta que ella misma se lo creyera. Después de un tiempo, cuando estaban acercándose para mostrar su identificación, llego a la conclusión que le diría la verdad una vez que estuviera en Boston.
-¿Te sentaras a lado de Ko?-pregunto para evadir sus propios pensamientos.
-Perder la oportunidad de estar a lado de Hanabi, claro que te lo cedo ese momento con tu hermana.
-God damn it Neji!-maldijo.
A pesar de sus veintitrés años seguían siendo niños, ella pone su mano derecha frente a él para hacer el mejor trato de la historia. Neji la mira desafiante.
-Estoy con la bestia por estas seis horas y tu te encargas de sacar toda la información del traidor ¿Qué te parece? ¿Es un trato?
-Señorita Hyuga, usted tiene un trato- Neji con su mano derecha toma la mano de ella -A esto yo le llamo trabajo en equipo
Cuando la azafata les pide sus pases abordar con sus respectivas identificaciones Hinata nota la ola de nervios y sonrojos de las señoritas que trabajaban en la aerolínea. Estaba acostumbrada a ver esa clase de reacción, Neji voltea a verla y le dice muy serio.
-Ni el diablo hace este tipo de acuerdos.
-Estoy segura que el diablo le teme a Hanabi.
Después de unos minutos que casi pierden el vuelo, Hinata y Neji subieron las escaleras traseras. No fue sorpresa para Hinata que Natsu les comprara los boletos más baratos y por lo tanto los últimos. Escucho un suspiro cansado por parte de Neji y rápidamente al entrar vio a Hanabi que se encontraba del lado derecho pegado al baño con su cara de enojo. Probablemente estaba enojada por haberla -según ella- casi abandonado. Tres lugares delante a ella, se encontraba Ko en el asiento pegado al pasillo con un libro en sus manos. A lado de él se encontraba un espacio vacío donde suponía que era el lugar de su primo, pero para desgracia de él, era que había una señora de unos treinta y cinco años de edad justo a lado del lugar de Neji.
La pelinegra vio la cara de desagrado de Neji al ver que estaría compartiendo el vuelo a lado de una mujer.
-Podemos cambiar de lugar-sugirió Hinata mientras se esforzaba por no reírse- Solo recuerda que con la que te tienes que enojar es con Natsu, ella fue la que compró los vuelos y eligió los asientos.
-Si me preguntas son las peores vacaciones que he tenido-Hinata se rió sutilmente mientras se ponía su mano derecha sobre sus labios para evitar hacer más escándalo, vio como Neji levantó su ceja izquierda antes de hablar- No quiero sentarme a lado de ese demonio.
-¡Reina del infierno para ti, plebeyo!-escucho que dijo su hermana menor mientras le lanzaba la almohada de viaje que traía con ella. Su hermana tenía buena puntería y buen brazo izquierdo, le había dado directamente a la cabeza de Neji haciendo que varios pasajeros los voltearan a ver-En esta familia no respetan jerarquías.
Neji levantó la almohada del piso para luego entregárselo en las manos a Hinata después de esto camino a su asiento con una mirada de enojo y fastidio hacia la menor de los Hyugas. Hinata estaba apunto de tomar asiento cuando escucho decir a su primo en voz baja pero suficiente claro para que cierta Hyuga lo escuchara.
-Que dios te dé fuerzas para tolerarla.
-¡Te escuche!
Hinata acomodo su bolsa de mano y sacó su gameboy advance que traía preparado para el largo viaje. ¿Era un vejestorio?
¡Claro que lo era!
Era una reliquia y lo había encontrado en una venta de garaje hace un par de días cerca de su casa. La mejor compra de su vida, por cincuenta dólares compró un gameboy advance en excelentes condiciones y tres juegos del cual dos eran de pokemon y uno era de zelda.
Favor de tomar sus asientos, estamos apunto de despegar.
Tomó asiento y fue cuando vio que no tenía cinturón, le hablo a la aeromoza que estaba cerca para explicarle la situación.
Bad luck Hinata. No iba estar en un asiento sin cinturón ¿y si había turbulencia?
No, not today.
-No tengo cinturón- le explicó a su hermana, mientras veía que el asiento a lado de ella que se encontraba vacío tampoco tenía -Ahora veo porque estos asientos son los mas baratos, si pasa algo seriamos los primeros en morir.
La aeromoza se acercó rápidamente a la mayor de las Hyugas, disculpándose por la inconformidad que pasaban. Les informo que esos lugares no se debían de vender por el problema del cinturón y que era la primera tenian ese problema, la solución que les daba en ese momento era cambiarla de lugar.
-No te preocupes Hinata, ve…
-Hn pero…
-No pasa nada, prefiero tener dos lugares vacíos para poder extender mis piernas.
Hinata se levantó de su lugar, acto seguido tomó su bolsa de mano y siguió a la aeromoza; mientras pasaba por los lugares se detuvo a explicarles la situación a ambos Hyugas. Ella sonrió tímidamente, para tener más de veinte años sus primos eran demasiado sobreprotectores y se preocupaban más de lo que deberían por ella. Mientras caminaba por el pasillo se ponía nerviosa cada paso que daba, se estaba acercando más a los primeros lugares de la clase económica y seguía sin ver algún lugar vacío, la aeromoza levanta la cortina que hace la división entre primera clase y la clase económica indicando que pasara.
Oh shit!
¿Su lugar estaba en primera clase? A lo lejos podía sentir las miradas que sus familiares golpeando su espalda. No, no pensaba voltear a verlos. Paso tímidamente la cortina y siguió a la trabajadora de la aerolínea. Los asientos eran más amplios, sólo había un lugar desocupado y de lado izquierdo. Hinata trago saliva nerviosamente.
-Señor Uchiha, lamentamos molestarlo pero la señorita ocupará el lugar que esta disponible.
El apellido hizo click en su memoria, el cabello oscuro y desordenado estaban igual como lo había visto hace unos momentos. El destino le había jugado una mala broma. Hinata pudo escuchar un tono de inseguridad en la voz de la azafata. No la culpaba, ella también le tenia miedo.
-El señor Uchiha es mi padre y el lugar que vez disponible yo mismo lo compre.
Un Uchiha.
Su pasado se estaba haciendo presente.
El joven que parecía de unos treinta años tenia su atención estaba puesta en la pantalla de su laptop . Solo se podía escuchar el sonido de las teclas que cada vez eran mas rápido y repetitivo. Hinata tembló de pies a cabeza. Él era un Uchiha.
-No es mi problema que la aerolínea cometiera un error de novatos, así que la señorita no puede ocupar el lugar.
Su respuesta había sido fría como el hielo. Ni siquiera había volteado a ver si estaba sola o acompañada la aeromoza. Hinata sintió pena ajena por unos breves segundos haciendo olvidar su temor. Ella llego a la conclusión que el Uchiha era un hombre grosero y ególatra. Dé repente deja de escuchar el sonido de las teclas y escuchó que el hombre inspiró profundamente y observo como era que el cerraba sus ojos.
Fue como una escena de película, todo pasó en cámara lenta frente a ella porque vio como es que se quitaba los lentes que se apoyaban en el puente de su nariz giró su cabeza hacia la derecha cambiando su atención hacia ambas. Su mirada oscura se enfoco en Hinata y volvió a inspirar profundamente como si buscara un olor en el ambiente. Instintivamente ella intentó recordar si traía el aroma de algún perfume y luego por su mente paso la peor pregunta.
¿Acaso ella olía mal?
-Que sea la última vez que pase esto- su respuesta fue hacia la trabajadora. Hinata estaba segura que era para la aeromoza, pero por alguna extraña razón pero sentía culpa e inconformidad.
Si solo se hubiera quedado en su lugar a lado de Hanabi.
Con sumo cuidado, Hinata acomodo su bolsa de mano debajo del asiento de enfrente y murmuró más para ella que era para él un "buenos días" mientras tomaba su asiento sin recibir respuesta alguna por parte de él. Giró su cabeza para oler su propia ropa discretamente verificando que no traía ningún perfume.
Tampoco olía mal, tal vez era su imaginación.
Pensó que serian las seis horas de vuelo las más largas de su vida, intento distraer sus nervios viendo cómo es que daban las últimas indicaciones en casos de emergencia. La azafata más joven daba casi todas las indicaciones en dirección al hombre que estaba a su lado.
El hombre que estaba a lado de ella era un Uchiha.
Escucho que todos los electrónicos debían estar apagados o en modo avión antes del despegue, soltó un bufido y sacó su celular dispuesta apagarlo pero se encontró con los mensajes recientes de Hanabi.
¿Dónde están? Ya vamos abordar.
El maldito Ko no quiere sentarse a mi lado y yo tampoco lo quiero a mi lado.
Maldita perra, no dijiste que irías en primera clase.
Te tomas un martini por mi, bitch
Vente en un momento para acá.
olvídalo, me gusta estar con mis piernas extendidas.
Controlo su sonrisa y luego apago su celular momentos antes de que el Uchiha cerrara su laptop. Mientras despegaba el avión pensaba en como las cosas habían salido en su contra pero después de pensarlo unos minutos lo único que debía de hacer era no hablar con el. No la reconocería si es que era alguno de su pasado. Podia ser que no era, pero había una pequeña voz interna que le decía que sí era el mismo.
El mismo Uchiha de la casa Mitarashi. El mismo Uchiha de las fiesta de Universidad.
Era el mismo de su pasado.
Temía que fuer el mismo de aquel verano, intento en pensar que no era posible pero si es que era el mismo, no podría reconocerla. Jamás lo podría hacer. Después de todo, lo único que había escuchado de ella aquella vez fue "me mordió".
Porque el maldito la había mordido demasiado fuerte causando una cicatriz pequeña entre su cuello y hombro.
Nadie podría reconocerla. No podrían reconocer a Neji. Se mordió el labio inferior por nervios al recordar que el que había dado la charla-por ordenes de Hoheto- fue Tokuma, las máscaras habían protegido su identidad. Le empezaron a sudar las manos de tanto pensar la situación, trató de relajarse y vio a su lado izquierdo que el Uchiha había vuelto a sacar su laptop para continuar tecleando rápidamente.
Aquel hombre que su atención seguía enfocada en su computadora portátil se veía tranquilo. Se dijo así misma que solo eran sus nervios los que la traicionaron. Empezó a hacer memoria y si no mal recordaba Tokuma le había dicho aquella ocasión que los Uchihas eran una familia de buena cuna. Miro por la periferia de su ojo al joven que seguía absorto en su trabajo. Ella se acomodo un poco en su asiento, usando su almohada de viaje nueva se dispuso a dormir un momento, sin importar que hace menos de una hora se hubiera tomado su dosis de cafeína.
El sonido de sus dedos con el teclado la estaba arrullando, definitivamente dormir seria la solución para calmar los nervios.
Esa era una de su especialidad, evadir problemas.
Cuando volvió abrir los ojos habían pasado mas de tres horas y el joven seguía plantado en su computadora. Se estiró al mismo tiempo haciendo un sonido no muy agraciado, el pasajero de a lado la miro de reojo y enarco una ceja. Los nervios volvieron hacer presencia en su cuerpo haciendo caso omiso a sus ordenes, intento ignorar su mirada mientras tomaba su bolsa que se encontraba debajo del asiento de enfrente. El Uchiha volvió a fijar su atención en la pantalla de la computadora haciendo que Hinata pudiera recuperar el aliento.
Mas tranquila siguió buscando entre sus cosas hasta que encontró su gameboy advance.
Escucho que ligero "tap" a su lado, giró su cabeza y vio que su compañero de asiento guardaba su laptop en una maleta de color negra elegante. Hinata estaba apunto de jugar su primer ronda de pokemon cuando vio a las azafatas acercarse a los pasajeros.
Al momento que se acercan a ellos, nota que la azafata no le dirigió la palabra. Toda la atención estaban en el Uchiha.
-Señor Uchiha, ¿lo mismo de siempre?
-Hn..
Ella levanto una ceja. Eso no fue una respuesta tampoco era una afirmación y definitivamente no era una negación.
¿Quién diablos entiende ese lenguaje?
Imaginaba Hinata que el joven, porque no tendría más de treinta, había asentido con su cabeza. Ve que la mujer se acerca con un vaso entregándoselo en las manos del Uchiha. Ella no era experta en bebidas alcohólicas pero estaba segura que era un brandy. Con una sonrisa grande y coqueta la mujer se despide.
-Disculpe, señorita ¿tendrá agua embotellada?
Pregunto con el mal hábito que siempre había tenido. Podía sentir que sus mejillas se tornaban de color rosa, porque Hyuga ella es y el sonrojo es inevitable. La mujer levanta la ceja mientras le confirma que en un momento se lo pasaría a entregar. La había mirado de una forma denigrante. Hinata controlo su impulso por voltear los ojos.
¿Racismo?
No, estaba de acuerdo que tanto sus primos como ella tenían rasgos japoneses y no lo negaban pero estaba segura que el Uchiha a lado de ella también los poseía inclusive más notorios que los de ella. Probablemente estaba en un momento de clasismo lo que estaba viviendo.
Posiblemente la peor experiencia en su primera ocasión en primera clase. Definitivamente a los de clase económica a todos los odiaban a por igual y les servían el mismo paquete de maní. Con desprecio, la azafata le entrego una botella de agua. Cuando estaba apunto de abrirla, una mano masculina se interpone evitando realizar dicha acción.
Hinata parpadeo un par de veces sorprendida.
-La señorita pidió un bote de agua-menciona el joven Uchiha, luego con el ceño fruncido y la mirada fría ve a la azafata directamente a los ojos- Ella pidió un bote agua, que sea un bote Fiji o mi tío se enterara de esto.
-N-o no no hay necesidad de eso, cla-claro que si rápidamente señor-la joven tartamudeo para poderle responder y retiraron el bote de agua que hace unos momentos se lo habían entregado.
Así como se fue la azafata con el bote, regresó con otro rápidamente.
¿Qué diablos había pasado?
Agua era agua en cualquier parte del mundo.
Hinata respondió con un murmullo un pequeño "gracias" aun sorprendida y un poco sonrojada. El viaje aún le faltaban otras dos horas vuelo, de las cuales esperaba que pasaran rápido. Observo que el vaso del joven que en algún punto había estado llenado con bebida alcohólica se encontraba ya vacío, una joven azafata diferente a la anterior se acerco rápidamente hacia ellos lista para entregarle otro vaso con brandy.
Hinata soltó un suspiro ligero, realmente deseaba que su compañero tomara una siesta lo que restaba para fuera más cómodo el vuelo.
Vio como era que un solo trago se tomo su vaso. Definitivamente alguien aquí tenia problemas de alcohol y no era ella. Cuando él noto su mirada gris en él la pelinegra abrió rápidamente su botella de agua nerviosa y le dio un sorbo sonrojada. Tenia que ser mas discreta al estudiarlo. Cuando sintió que la mirada oscura del Uchiha no estaba en ella tomó su gameboy y comenzó a jugar.
Así pasaron las dos horas más rápidas en el vuelo.
Amo la idea de comprar su propio gameboy del cual lo tendría escondido de Hanabi y de Neji. Específicamente de Hanabi, su hermana tenia esa habilidad de quitarle sus cosas. Cuando volvió a ver nuevamente hacia su lado izquierdo, el Uchiha estaba apoyando su cabeza en la ventana con los ojos cerrados.
Sintió lastima por él, estuvo casi cuatro horas despierto en un vuelo de seis cuando pudo haber dormido más. Recordó que la laptop de el que se encontraba guardada, estudio su vestimenta y recordó los vasos de brandy. Hinata llego a una conclusión.
Probable workaholic.
Su mente la hizo recordar el día después de aquella noche horrible, cuando Tokuma afirmo que eran snobs por su vestimenta que traían. Tenia razón, no se había dado cuenta pero como iba a prestar atención cuando tenia a Iroha frente a ella lastimado.
Empezó a estudiar al Uchiha, tenia su cabello oscuro y largo. Era muy parecido a las fotos que le habían mostrado aquel día en la oficina del director. Se pregunto cual de todos seria. El joven murmuro entre sus sueños palabras incomprensibles, Hinata se apoyo su mentón en su mano. Definitivamente tenia peculiar forma de darse entender en un idioma que no era inglés, japonés, español, francés , parcel o élfico. Las aeromozas habían entendido lo que trato de decir, inclusive lo podría comparar con la familia de su amigo Shino que todos eran introvertidos pero la forma elegante en la que estaba sentado o el porte tenía cierta similitud con...Neji.
El tablero se marcó en rojo para indicar que se pusieran los cinturones, la voz del piloto retumbo en las bocinas indicando que estaban llegando a su destino. El eco hizo levantar al Uchiha. Él levantó su cabeza de donde la tenía apoyada, gira sutilmente a su lado derecho y realizó lo más bizarro de ese día: inspira profundamente con los ojos cerrados y después de unos segundos abre sus ojos al mismo tiempo que sus labios se ladean a su lado derecho causándole una mueca que hizo sonrojar a Hinata para que en unos segundos después volviera a pegar sus párpados superiores con los inferiores.
Con esa sonrisa podía destronar a Neji y a Tokuma con sus conquistas.
El avión aterrizo sin problema alguno y ella automáticamente prendió su celular lo mas rápido que se podía, estaba segura que Hanabi le había mandado mensajes. Cuando vio los mensajes eran más emoticones y maldiciones al mismo tiempo escucho que daban las indicaciones para levantarse de su lugar.
Tenia que admitir que esa era una ventaja de estar en primera clase.
Fucking trip. Ya estaban en casa.
Notas de autor:
Buenas buenas! La verdad no se por donde empezar a explicarles. No se desesperen algunas cosas lo entenderán más adelante, para entender más tendran que leer otras dos historias que saldrán durante el proceso. Esta historia es la tercera parte de tres, osea este el futuro. Muchas cosas del pasado de los personajes los conocerán mas a detalle con otras dos historias, sus traumas y sus actividades. Me odio a mi misma , porque me prometí no volverlo a hacer, pero mi mente hace historias que tienen que plasmarse.
Me tarde 3 días en escribirlo. El pedo es la corrección de todo, parecía que estaba drogada cuando lo escribí y no tenian sentido algunos párrafos.
No gano nada por subirlo, tampoco pierdo algo. El dia de hoy se que tengo la idea de 10 capítulos de esta historia, que sinceramente me he quedado bloqueada por eso decidí transcribirla y en el capítul animarme a subirlos. Hasta que avence otro capitulo y si me animo a las correcciones las haré. Anyway, no se cuando volvere a subir otro capitulo.
Preguntas que pasan por tu cabeza:
¿que es esto?Mira, yo tampoco lo se. Solo dejo ser mi imaginacion, te ayuda como psicologa me lo recomendo mucho.
¿Porque elegiste parejas tan raras? No se, me gustaria darte una respuesta.
¿Sasuke nunca le hizo caso a Hinata? Y hinata tampoco le puso atencion a a él en el mundo de Naruto. Esto es un UA, con OCC.
¿Haz ido a boston?Tenía varios viajes planeados entre ellos Boston pero el 2020 me lo arruino.
¿Porque escribes spanglish? En una de las revisiones quería cambiarlo todo a español, pero mi mood cuando lo escribí fue ese. Así que lo deje.
¿cuando saldran las otras historias? Quiero avazarle estos dias deperdido hasta el capitulo 10 de esta historia que es la que no he terminado ,los otros dos ya los tengo construidos solo faltan transcribirlos.
¿Odias a Sakura? No, no tengo que odiar a Sakura. De hecho es el personaje que menos la tengo contemplada en mi historia y si quiero darle un buen lugar. No como Kishimoto. Luego podemos a sentarnos a discutir sus errores que pudieron haber hecho una super obra maestra a este anime/manga.
¿Odias a Kishimoto? No, es un hombre talentosisimo. Honor a su familia, honor a su vaca. Solo...cometió unos errores como cualquier humano.
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PRIMER EDIT: 11-03-2021.
Hello.
Tenia muchos errores, al igual si encuentran alguno pueden mandarmelo por PM. Se que tendré que hacer un par de correcciones mas así que con confianza.
