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...

El centro de Reiwa nuevamente estaba aglomerado, un grupo de nuevos curiosos, noticieros y demás se habían reunido a media madrugada frente a un edificio que parecía no tener propósito.

Y que parecía a punto de caerse a pedazos.

Afortunadamente, todos en el interior habían sido evacuados antes de que empezara el escandalo, directo a la estación de policía de Reiwa.

Que la ventisca se hubiese amainado les daba un incentivo mas para salir pese al frio.

En el exterior, los había recibido la TSG, sumado a los servicios de emergencias.

Ahora los cuatro miembros estrellas de la operación, estaban dentro de una ambulancia junto con una enfermera.

Afortunadamente, ninguno tenia heridas criticas (O en el caso de Shirou, ninguna que fuese un problema ahora) pero Michiru prácticamente suplico por algo que atenuara los moretones en sus extremidades.

"Michiru, ya fue suficiente, déjame vendarte" Shirou sostenía las vendas en espera de que esta terminara con lo que sea que estuviese intentando.

Nazuna y Yuu estaban siendo tratadas por la enfermera, pese a tener pocas marcas.

Particularmente, la antigua Senpai de Michiru estaba prácticamente ilesa, incluso le habían ofrecido el llevarla a su casa, pero…

Había reaccionado del peor modo posible.

"D-dame un poco mas de tiempo, si papa ve mi brazo se va a morir" Michiru miraba su moretón morado cubierto de ungüento suplicándole que se borrara por arte de magia.

Tenia que llegar a casa con la menor cantidad de rasguños posibles, tenían que saber que podía manejar cualquier situación por sí sola.

En el fondo, Shirou sabia que ya era tarde para eso.

La puerta de la ambulancia se abrió dejando entrar a un hombre mayor, rubio, bien peinado, trajeado y con lentes redondos.

"¿Ogami, verdad?" Este pregunto a secas mirando al mayor de los cuatro.

"Oh, si soy yo"

"Soy Anzu Godai, el asesor de seguridad publica de la prefectura de Kanto ¿podemos tutearnos?" Se aseguro de que pudieran ser casuales.

"Por supuesto" Le permitió a la ligera.

"También me gustaría hablar con los tres en privado… normalmente seria solo contigo, pero… su participación lo amerita, ¿nos permitiría señorita?" Se dirigió a Yuu con educación.

Con algo de duda, esta asintió y fue guiada afuera por la enfermera hacia otro vehículo, el agente subió a la ambulancia, planeando usarla como lugar de reunión, cerro la puerta y se sentó junto al albino.

"… escuchen, voy a resumirlo, Reiwa esta a salvo… parcialmente, casi todos los involucrados están en jaulas en este momento, algunos quisieron rezagarse a los puntos en las afueras que nos proporcionaron, pero estos sitios ya están asegurados, solo quedan algunas hormigas que se ocultan en la oscuridad… no pasara mucho antes de que los encontremos" Explico largo y tendido, dibujando sonrisas de alivio en las dos chicas.

Al final, lograron poner la información extraída de la casa de Yuu en orden, en parte gracias a la información que Kubo les consiguió.

"Shirou, Nazuna, lo logramos" La pelinegra quiso dar inicio a una felicitación bien merecida.

Pero entre Shirou y el hombre, había cierta tensión.

"¿… dijo, parcialmente?"

"Si, y son las malas noticias… no creo que hayan tenido una chance de ver los noticieros, seria un buen momento" Les comunico, invitándolos a ver sus teléfonos.

Solo pudieron hacer caso, de manera tortuosa, encendieron los móviles.

Luego deslizaron el dedo un par de veces para ver a que se refería.

Las pupilas de Michiru se encogieron.

En la sección de noticias, había notas recientes, aproximadamente de minutos, sobre reportes de asaltos armados en diferentes partes del país.

… heridos, secuestros, muertos, anti-beastman, civiles, incluso el ejercito se había involucrado.

Los tres se hundieron en desconcierto.

"Sh-shirou…" La peli azul quiso escuchar algo de él, algo que pudiera darle calma.

Pero incluso el estaba mudo mientras se sujetaba el pelo, intentando mantener la compostura.

Esto no era una operación limitada a Reiwa…

Era una maldita operación a nivel nacional, ellos solo habían detenido una de las fugas.

Ese infeliz no estaba preocupado en lo mas mínimo por ser derrotado o incluso acabar muerto, solo era un engranaje de una maquinaria gigantesca que podía reemplazarlo.

"No voy a culparlos… de no ser por ustedes las cosas estarían igual o peor en este lugar, salvaron a la gente de este pueblo… y no lo vamos a olvidar" Godai les dio una garantía y un poco de consuelo.

"¿Qué pasara en los otros sitios?" La pelinegra se anticipo con alta preocupación.

"Lamentablemente, no pudieron reaccionar tan rápido… los servicios de emergencias fueron saboteados, así que las fuerzas especiales no pudieron movilizarse hasta una hora después… en el pánico, termino habiendo enfrentamientos" Sonaba mortalmente serio.

"Los medios dicen que los anti-beastman atacaron a la población al azar…" Nazuna añadió con consternación mientras leía una de las notas… no era tan falso, pero no era toda la historia completa.

"… si, hay mensajes en medios de comunicación, uno de los colectivos anti-beastman se atribuye los ataques… utilizan un credo bastante radical: "Expulsen a la bestias o morirán con las bestias" aun no hay declaraciones de los que lograron capturar, pero no creo que mejore su situación, aunque lo nieguen, también hay una lista larga de elementos de la policía que entrara en suspensión indefinida por haber participado en este circo"

"¿Encontraron a otros cabecillas?" Fue la primera pregunta de Shirou, no creía que Henzou fuera el único que manejara los hilos tras bambalinas.

Y si eran como él, podría haber aun mas peligro.

"… no, no hay reportes de monstruos o algo parecido, me imagino que tenían la tarea de desaparecer una vez que lanzaran la bomba" El agente respondió con todo su saber, el cual seguía siendo tan poco como ellos.

"¿Deberíamos decirles a los medios…?" Michiru no pudo establecerlo como un objetivo, de hecho, los dos adultos no se vieron nada convencidos.

"… puede no ser el movimiento mas inteligente, aun si exponemos la denuncia a los medios y en caso de que llegaran a creerlo, la población podría tomarlo como una acción de los beastman en general… eso podría iniciar una segregación masiva entre especies"

"Y eso va a destruir Animacity" Shirou tradujo, mirando el suelo y visualizando el peor escenario.

La sola posibilidad se volvió aterradora.

"Por el momento, solo lo sabemos ustedes, Barbara Rose, el ministro, seguridad publica y yo" Les facilitó esa información "Aun no se decide nada, pero la idea que se propone es buscar a los responsables por debajo de la mesa, sin golpear el avispero" Era: Sacrificar a los anti-beastman o arruinar la relación de dos especies.

Los estaban obligando a elegir.

"¿Dejaremos que todos crean lo que ellos quieren que crean?" La pelinegra evito recriminar en esa cuestión, sabia que estaban hasta el cuello y ni ella sabia si podría decir la verdad por mucho que quisiera…

"No importa cual fuese su objetivo original, esos hombres y mujeres tomaron armas y amenazaron a la población por voluntad propia… su sentencia será la misma sin importar el supuesto" Godai expuso, para rectificar sus valores y darles algo de consuelo.

Pero al final, seguían con el jaque sobre sus cabezas.

"Esto es basura…" Nazuna murmuró, mientras escondía su cara entre sus piernas, Michiru le puso la mano en el hombro.

El trajeado solo pudo suspirar, tenía un sentimiento parecido.

"Puedes decirlo dos veces… deberían irse a casa, va a haber toque de queda hasta nuevo aviso… díganme cuando estén listos, les daré un aventón" Esa nueva noticia les sentó peor.

El toque de queda era para evitar nuevas movilizaciones de parte de los hostiles… fuesen quienes fuesen.

Si había al menos una docena de tipos como Henzou, podrían barrer con la fuerza publica de Tokio sin problemas.

Yuu volvió a entrar a la ambulancia una vez que el hombre bajó.

"¿Qué les dijo?" pregunto por un impulso irresistible.

"Va a haber un toque de queda" Shirou le dio solo la información que podían darle.

Y la peli negra-azul no se lo tomo bien… eso significaba que tendría que estar encerrada en casa la mayor parte del día.

La sola idea de tener que volver a casa de su papá le dio arcadas, Yuu miro al espacio por un largo rato, buscando un escape… cualquier cosa le venia…

"¿Estas bien Yuu?" Michiru se le acercó con mesura.

La aludida reacciono al instante.

"¿… P-puedo quedarme con ustedes un tiempo?" Podía ser la petición mas embustera que había hecho, pero no tenia a nadie más a quien recurrir.

Los tres fueron tomados con la guardia baja… la primera en reaccionar fue la pelinegra.

"… le preguntare a papá, si es que no me mata" Michiru le comunico cálidamente, tanto que Yuu se sintió conmovida.

"Muchas gracias, a los tres…"

Tras un corto y tormentoso paseo a casa…

Apenas acercarse a la entrada de su hogar, Minorin había salido a abrazar a Michiru.

Los tres habían mudado de ropa por adelantado, sabiendo que volver con los harapos sangrientos que llevaron a la misión solo levantaría mas cuestiones al respecto.

El abrigo rojo de la chica estaba escondiendo los parches y vendajes en su torso y brazos.

Minorin indago por su estado, donde había estado, lo que había estado haciendo, si estaba herida…

Todas respondidas con verdades a medias, por su propio bien, también resaltando lo obvio, Shirou la había protegido en toda su posibilidad.

Pero faltaba la parte mas difícil.

Ichiro había salido de la casa como un muerto viviente, pálido, descoordinado y ojeroso.

Pedirles a los dos que volvieran a dormir tras su salida hubiera sido irrealista, así que ya esperaban esta reacción.

Aunque aún tenían un az bajo la manga.

"… por eso, tiene que sentirse muy orgulloso de sus muchachos" Godai les hizo un ultimo favor, abogar por ellos.

Le habían dado al matrimonio la versión recortada de los hechos, resaltando la versión de las chicas siendo solo apoyos, ayudando enormemente a la carga de responsabilidad de ambos.

La expresión de Ichiro aun parecía… perturbada.

"¿Es broma verdad? ¿le parece correcto que una civil interfiriera en asuntos de seguridad publica?" Ichiro parecía intentar despotricar con el agente Godai…

"Ella no es una civil" Shirou contradijo, pese a lo peligroso que podía ser.

La pelinegra estuvo a punto de moderarlo, pero incluso a ella la afirmación le llamo la atención.

Godai mostro una sonrisa confianzuda.

"Su hija tiene la calidad de agente auxiliar multipropósitos en Animacity en toda regla, lo que les faltaba era la jurisdicción en la prefectura de Kanto… la cual adquirieron ayer a las quinientas horas y terminara mañana a las mil quinientas"

Entonces eso es lo que estuvo arreglando Shirou todo el día por teléfono…

La chica tuvo que resistir el impulso de preguntar mas al respecto, la alcaldesa le había dado un gafete que le permitía acompañar a Shirou en reuniones o visitar el ayuntamiento, pero no sabia que tenia tanta validez.

Solo viendo la cara que tenia Michiru, el albino supo que tenia que ponerle limitaciones con dicho titulo.

"Por la señorita de cabello blanco…" Nazuna se encogió a su mención "Ella ha negado su participación activa en el asunto, pero aun si lo hiciera, seria como reclamarle a un civil por ayudar a un policía tras ser incapacitado" Termino de explicar, siendo internamente comido vivo por los nervios.

Creyó que seria fácil convencerlo cuando accedió a la petición de Ogami, pero este hombre parecía un volcán de ansiedad "Una docena de familias en este pueblo pueden dormir sanos y salvos, todo gracias a la participación de su hija… si no esta orgulloso por eso, no puedo imaginarme porque lo estaría" El agente se volvió sutilmente severo, lo cual pareció ayudar a contrarrestar la agresividad del oficinista.

Finalmente, Ichiro pareció enfriarse… o mas bien, resignarse.

"Ya veo… supongo que… no se podía evitar" Este bajo sus intenciones de hacer una escena "Pero… por favor, hagan lo posible para que mi hija no tenga que hacer su trabajo" burbujeo en frustración.

"Fue una ocasión única, haremos lo posible para que no vuelva a pasar" Godai hizo una breve reverencia en disculpa.

Todos los demás también se relajaron de manera inconsciente.

El padre de Michiru se le acerco de manera calmada, para luego tomarla y darle un abrazo.

Uno bastante tenso, uno al que ella correspondió con timidez.

Luego la soltó y los invito a pasar a todos, menos a Godai, quien se despidió brevemente de Ogami.

Una vez adentro, todos seguían callados y al borde.

En especial Ichiro, parecía como si estuviese en automático.

"Papá, sobre Yuu…" Quiso iniciar esa petición… pero no sabia si era buen momento.

Ichiro miro a la inesperada invitada, quien solo atino a saludar de vuelta.

"Puede quedarse cuanto necesite, pero enserio, ya deberían ir a dormir… " Aunque faltaban pocas horas para la salida del sol.

"¿No estas enojado?" Michiru se arriesgo, intentando sonar en extremo dócil.

"No es como si pudiera hacer algo al respecto ¿o si?" Este hablo de espaldas antes de ir a su habitación.

Eso no sonaba bien en absoluto… tuvo el impulso de intentar ir a remediarlo, pero su procreadora la detuvo con una mano sobre su cabeza.

"Estará bien, Michiru, solo necesita dormir" Su madre la conforto, aun cuando ni ella estaba segura de ello.

"Hay que descansar" Shirou reforzó esa idea con una sonrisa afable recordándole lo agotada que estaba, ella solo pudo asentir en respuesta.

"¿… Ogami, usted también se queda aquí?" Yuu preguntó con modestia, recordándoles que estaba ahí.

Todos los presentes miraron a la joven universitaria con cierta complicación.

"Oh, si, de momento" Decidió que no debía ser el quien diera esa noticia.

"Vaya, es cercano con la familia de Michiru" Hizo solo una observación inocente.

La mujer del yukata se le acerco por su lateral.

"… Es nuestro yerno" Minorin le susurro a Yuu con un poco de orgullo, a la vista de una aterrorizada Michiru.

La universitaria tardo un poco en unir los hilos…

Luego se quedo pálida como el papel.

Se habían trasladado a la habitación, preparándose para darle cierre a este día.

Las tres se habían turnado para usar la ducha y Yuu había comido algo de las sobras de la cena.

Entre tanto, Nazuna había devuelto las llamadas perdidas de su mamá, asegurándole que solo se había involucrado en lo mínimo durante la emergencia en el centro.

"Michiru… ¿estas segura de que no quieren que yo vaya al cuarto trasero?" Yuu volvió a ofrecerse… después de su discusión con Michiru en su casa, debía ser una molestia que estuviesen moviendo gente por ella.

En especial a su… novio.

Pero, al contrario, Michiru parecía de buen humor al respecto, después de todo, había pasado un tiempo desde que Yuu le había hablado con tanta cordialidad.

Nazuna se había vuelto un ovillo en la cama apenas llegar a la habitación y haberse puesto una pijama mas gruesa.

Usualmente su pelaje seria suficiente, pero con Yuu aquí…

"No te preocupes, Shirou se ofreció, además de que mamá tiene miedo de que alguien mas toque sus cosas… pero parece que confía en él"

Era raro, su mamá siempre había mantenido una buena disposición con gente nueva, pero desde hace unas semanas, parecía tratar a Shirou como un amigo cercano.

La anfitriona le facilito una sábana extra a Yuu, considerando que Shirou la había negado en su primer día.

La excapitana tuvo que tomarse un momento para apreciar la generosidad de su antigua compañera.

"… gracias de nuevo, no tenias razones para arriesgarte tanto…"

"Si las tenía" La contradijo enseguida "Eres mi amiga Yuu" Añadió con afección, haciendo que a la azul-azabache le pesara el corazón.

Le sonrió de vuelta de una manera cálida.

Ese miedo latente a perder una amistad se estaba desvaneciendo.

Solo quedaba una ultima cosa.

"Yuu… sobre lo del equipo" Era momento de resolverlo, era el lugar y el tiempo ideal.

"Ya no importa, Shirou es un gran tipo, tienes un trabajo admirable, no te culpo por querer ir con él…" Quiso dejarlo en el pasado, lo había deducido y sin querer, lo había relacionado con aquel viejo rumor.

Pero la justificación no era suficiente para la pelinegra.

"No fue por Shirou" Por enésima vez "A el lo conocí fuera del pueblo, hemos estado juntos desde que lo conocí hasta que nos volvimos novios… pero la razón por la que me fui fue… distinta"

Michiru recorto la versión, y por lo visto, la peli azul parecía dispuesta a escucharla.

"¿Qué ocurrió entonces?" Ya no había inquisición, solo curiosidad al respecto, acompañada de comprensión.

Pero Michiru no se veía capaz de ponerlo en palabras… incluso pareció intentar forzarse a sacárselo del pecho.

"… no importa" Yuu detuvo el intento de Michiru de forzarse a hablar "Ya hiciste suficiente por mi, suficiente como para demostrarme que te juzgué mal… sin importar lo que escuchara de ti, no debí dudar"

Fue el turno se Michiru de casi llorar, abrazo a Yuu como a una hermana mayor que no había visto en bastante tiempo…

"Oigan, es lindo y todo, pero voy a morir de deprivación si no apagan la luz" Nazuna hablo con la sabana tapándole la cara.

Ambas chicas rieron por lo bajo… luego le concedieron su deseo a Nazuna.

Fue cuando el sol volvio a ascender, aun eclipsado por nubes grises, las nevadas esporádicas eran cada vez mas comunes, pero la ventisca había dejado un manto blanco en toda la ciudad.

Uno que nadie se atrevía a salir a disfrutar.

La gente estaba recluida en casa bajo el miedo de que los "terroristas" siguieran rondando.

Solo salian por lo esencial, por el momento, procurando volver antes de las siete de la tarde.

Claro, el lobo y la tanuki tendrían que ser la excepción esta vez.

Godai fue a buscarlos después de mediodía, pues, pese a que habían querido evitarlo, alguien había solicitado una "junta casual" con ellos.

Aun no terminaban con la parte engorrosa del asunto.

Así fue como terminaron en el ayuntamiento de Reiwa, un elegante edificio dentro de un amurallado de ladrillos blancos, todo frente a un enorme lago artificial, en la oficina mas grande del lugar.

El par tomó acomodo en un sofá grande frente a un escritorio, en un sillón individual, Godai los acompañaba en representación de seguridad nacional.

Detrás de este escritorio, un hombre trajeado, bastante joven, un peinado pulcro azabache, ojos verdes, rondando la misma "edad" de Shirou.

El alcalde, Sataru Yoshio, viéndolos como si los dos acabaran de patearlo en la espinilla.

"Muchachos… es la primera vez que nos vemos en la vida, esperaría que nuestro primer encuentro fuera en un almuerzo incomodo donde intentáramos conseguir algún favor del otro, pero no es el caso, así que la mejor pregunta que puedo pensar ahora es: ¿… Por qué a mi?" Este se dirigió agresivamente a Michiru, siendo visto de mala manera por el albino.

"N-no se que responder señor alcalde" La pelinegra se incómodo un poco al respecto, incluso intimidándose un poco por la aproximación.

El alcalde se puso de pie y camino hasta un librero, sin un objetivo en mente mas que el de estirar las piernas.

"… me desperté hoy muy temprano, desayune un par de huevos fritos con jugo de naranja barato, como cualquier ciudadano decente… cuando me informaron por teléfono, que todo mi departamento de policía se fue por el retrete, el pueblo entero bajo custodia de fuerzas especiales, un grupo de locos portando armas intentando echar abajo MI administración…" Progresivamente, parecía perder los estribos, incluso soltó una risa de incredulidad "cuando dicha administración acabe, voy a ser el hazmerreir si siquiera pienso en postularme para tesorero de Saga…" Listo, volviendo cada vez su tono de voz mas agudo y mortificado.

La expresión de Michiru cada vez se orillaba mas a la lastima… y al desagrado.

"Alcalde, empiece por tranquilizarse" Godai le dio una señal con las manos "su situación es buena si la comparamos con Kanzai, Shibuya o Kioto, esos lugares están peor parados frente a la opinión publica… si alguien de los medios le reclamara lo sucedido, será el único servidor publico que salió de este desastre solo con dos muertos" Godai expuso su escenario ideal, logrando que el alcalde cambiara su expresión se sumiera en una fantasía vivida por un momento.

Luego, este miro a los autores de dicho logro, esperando una protesta por robarles el crédito.

"No necesitamos ningún crédito, puede tenerlos todos, pero debería darle a Daisuke Somori parte del reconocimiento por ser el único policía que mantuvo la investigación" Shirou añadió al trato "Lo único que pido es que le den prioridad a nuestra protección, del santuario y de los beastman que están registrados…"

A la mención del santuario, el trajeado se volvió algo severo.

"Cuando mi antecesor…" El joven trajeado empezó.

("Su papi") El albino le hizo un gesto a Michiru, quien ahogo una risita sin que el joven alcalde se diera cuenta.

"… me ayudo con mi campaña, me dijo que el santuario era prácticamente un fantasma y que solo tendría que preocuparme de ellos como si fueran cualquier ciudadano… ¿Cómo se que no van a intentar quemarlo de nuevo y luego lanzarme de cabeza a los activistas?"

"No tiene que preocuparse por ello" Godai le dio una nueva garantía.

"Oiga ¿que está diciendo?" Michiru se alarmo al instante, pensando que podrían estar pensando en sacrificar a la gente del edificio.

Shirou la llamó para darle la noticia.

"Cletus estuvo los últimos días convenciendo a los demás de mudarse a Animacity… lo hizo a mis espaldas, pero parece que al final logro convencerlos a todos" Termino con una voz seria.

"Espera…" Michiru tenia muchas cuestiones al respecto, estaba feliz de que pudieran ver a Haruna mas seguido o de que Shirou y la alcaldesa tuvieran a sus amigos cerca.

¿Pero que pasaría con las vidas que ya tenían aquí?

Michiru fue interrumpida por el alcalde, quien recibió la información como una buena noticia.

"Problema resuelto" El hombre se puso de pie, pues parecía ser todo lo que le. Importaba.

Acordaron unos puntos mas mientras la pelinegra seguía muda… luego se despidieron de mano con el alcalde.

Tras otro aventón de parte del agente, se detuvieron frente a la residencia Kagemori.

"En las otras zonas se esta haciendo lo mejor posible para retomar el control de la situación, si surge cualquier cosa los contactare" Godai prometió otro encuentro mientras quitaba los seguros de las puertas.

"Oiga ¿cree que el toque de queda termine antes de Navidad?" Era una posibilidad, pero odiaría que la navidad pudiese ser afectada negativamente por ese hecho.

"Si tenemos suerte, sin ofender, pero no quiero pasar la navidad con ustedes" El trajeado bromeo mientras ambos bajaban del vehículo.

Los dos se despidieron de él mientras su automóvil se alejaba y luego doblaba en la esquina.

Era todo.

Finalmente tenían libertad para enfocarse en las fiestas… el toque de queda era algo para tomar en cuenta, pero aun así… se sentía bien tener aquello fuera de sus hombros por el momento.

"¿Entramos?" Shirou le ofreció con una sonrisa afable.

"Si" Y ella no podía estar mas de acuerdo.

Al entrar en la sala, se dieron cuenta de que tenían visitas, aun mas visitas.

Minorin se estaba encargando de hacer té… en la mesa del comedor también se encontraba Shion, quien parecía estarse congelando viva mientras sorbía su propia tasa.

"H-H-hola muchachos" esta saludo temblorosa al par.

"Señora Hiwatashi ¿se encuentra bien?" Michiru indago un poco en su estado.

"Oh, no es n-n-nada, solo me sentó mal la tormenta" Ah claro, la temperatura se había ido en picada anoche "Tenia que ver a Nazuna… me entere de lo que ocurrió esta mañana"

"Ella está bien, sana y salva" Michiru se apresuró sin querer, recordando que casi sale herida en el enfrentamiento con esa chica panda, para su suerte, la pelirroja no parecía estarla recriminando.

"… Lo se, pero tengo que venir por ella de todas formas… es mi trabajo" Aclaro, volviéndose bastante amena hacia Michiru.

Era nuevo verla tan comprometida al respecto…

"Pero… por favor, si no estoy presente, sigan cuidando de ella ¿Si?" Les pidió con una sonrisa y la nariz roja, recomponiéndose brevemente.

"Lo haremos" La chica del abrigo rojo le prometió con humor.

Ichiro no parecía estar presente, debía volver del trabajo temprano por el toque de queda, pero parece que aun no era la hora.

"¡Buenas! perdón por la intrusión" Rumi saludo animadamente desde un asiento en la sala junto con Akemi quien solo saludo de mano mientras sonreía.

Michiru evito a toda costa hacer alguna cara que delatara alguna impresión negativa, solo pudo sonreír de vuelta.

Nazuna los recibió con una mueca burlona que decía ("Yo no los invite")

También notaron la presencia de Haruna, la (secretamente) chica conejo del santuario, quien parecía estarse integrando al grupo de Rumi.

Aun usaba su sudadera blanca y capucha de conejito de manera indiscreta.

Esta se excuso un momento y fue donde ellos.

"Diste con la casa" Michiru fue la primera en saludarle, había logrado que no se expusiera al exterior durante la noche y le había dado una positiva cuando pregunto si podía venir.

"Si, el señor Cletus me contó lo que paso, vine a ver como estaban" Les susurro mientras tomaba las manos de la pelinegra.

"No te preocupes, somos huesos duros" Le guiño el ojo con complicidad, dejando que Haruna volviera a charlar con Rumi.

Siguió observando a los invitados, incluso Kubo estaba en la sala, estando un poco apartado del resto en una silla individual.

Sus miradas se cruzaron brevemente, luego parecieron evitarse de manera instantánea.

También Sawada estaba presente, portando una caja con el logo de la cafetería, presumiblemente un regalo de su parte.

Y la persona junto a ella, hizo que la secreta tanuki diera un jadeo de pura emoción.

Castaña amielado corto, delgada, pecosa, ojos verdes y una estatura de miniatura.

Un suéter de cuello de tortuga verde irlandés con un papa noel en el pecho era lo mas característico que portaba.

"¡NOZOMI!" Michiru la embistió y la levanto en el aire como si fuese una muñeca mientras la abrazaba y reía.

"¡M-Michiru, bájame!" Esta lucho contra la empalagosa pelinegra, quien estaba restregando su mejilla contra la suya, antes de que esta tuviera suficiente de ella "T-también me alegra verte"

"Pensé que estabas enfadada conmigo, no respondías mis llamadas" Casi parecía un reclamo, pero sonaba inmensamente feliz.

Nozomi recordó el motivo posible, se puso roja mientras encontraba como explicarse.

"Mi teléfono se averió hace unas semanas, papá dijo que solo me ayudara cuando reúna la mitad de la reparación o uno nuevo… y robaron mi computadora en la universidad" Nozomi empezó a deprimirse según seguía contando.

Michiru se lamento por ella…

Lejos de darle mas importancia, volvio a abrazarla "No sabes lo mucho que te extrañe"

"Yo también, cuando Sawada me dijo que tu y Nazuna estaban en el pueblo le pedí que me acompañara… Rumi nos vio de camino y vino con nosotras" Tras asegurarse de que Nazuna estaba sana y con un nuevo color de pelo, solo restaba esperar a la líder de su pequeña formación.

"Pecas…" Rumi le recordó que estaba detrás de ella, haciéndola encogerse de miedo.

Nozomi tardo un poco en notar la presencia del albino, quien había tomado asiento en el comedor para tomar una taza de café cortesía de Minorin.

"Buenas tardes" Saludo de manera simple y cortes a la nueva cara del círculo de Michiru.

"Oh, hola, es un gusto… uhmm ¿Quién es?" Nozomi espero a que la pelinegra los presentara, pues el hombre tenia un aspecto bastante peculiar…

y por peculiar quería decir apuesto.

Pero Rumi se le adelantó a Michiru por una milla.

"Es el novio pornográfico de Michiru" Todos en la sala se petrificaron, Haruna se tapo la boca mientras soltaba un sorpresivo "¡Oh!"

Kubo sintió una nueva puñalada en el estómago.

Algunos aguantaron unas risas al ver como Nozomi se tambaleaba ante el nuevo golpe de información.

"¿Tienes una mina debajo de la lengua?" Michiru parecía a punto de recaer en los viejos hábitos de pelear con Rumi.

Seria después.

Nozomi estaba produciendo un tartamudeo constante que parecía querer articular palabras.

"Fe-felicidades Michiru… será duro, pero estoy segura d-d-de que podrás…" Se forzó a sonreír mientras miraba el estomago de Michiru.

"No estoy embarazada" Aclaro hastiada del tema, provocando mas risas.

"Olvídalo, solo estoy feliz por ti" Nozomi se corrigió volviendo a la normalidad.

"También vinimos a ver a la capitana, pero parece que esta encerrada en el baño" Akemi también añadió, señalando el techo.

"¿… siguen ahí?" Yuu los llamo discretamente desde arriba.

"¡Baja de una vez, vinimos a ver que estés viva!" Rumi alzo la voz bastante molesta.

En el comedor, las madres de las dos inquilinas de la casa se rieron en voz baja.

Tras una breve espera, Yuu bajo de mala gana, con una pijama prestada y viéndose bastante desalineada para variar.

"Woah, quien diría que la capitana se vería tan bien en modo descanso" La chica de las puntas rojas le dio un buen vistazo a la azul-azabache.

Yuu tenía una sudadera de Michiru, para quien seria holgada, pero para ella, estaba justa a su figura, también unos pants térmicos negros y unas pantuflas de perrito.

"C-callate" La chica se puso a la defensiva al verse acosada por la chica problema del aula 1-3

"Yuu, no seas grosera" Minorin asomo la cabeza por la cocina y regaño a la mayor.

"P-perdón señora" Bajo la cabeza de inmediato, frente a una risa ahogada de Rumi.

"No dejes que te moleste, solo esta jugando" Michiru conforto a la mayor, quien acepto el gesto sin protestar.

Rumi tuvo un leve destello de sorpresa, solo por la simple interacción de ambas santurronas de la escuela, las cuales se suponía estaban peleadas.

"¿Entonces, tus mamá aun no viene?" Nazuna le preguntó a la universitaria, debió ser notificada desde el inicio de los hechos, e incluso se lo había asegurado la propia madre tras traerla anoche.

"Esta intentando conseguir un vuelo lo antes posible, pero solo pudo agendar para el veintiocho" Yuu no parecía demasiado abatida por eso, pero no dejaba de desanimarla en medida.

"¿Tienes planes para entonces?" Sawada preguntó de manera comprensiva.

"Estoy en blanco" Yuu contesto de buen humor, a pesar de la aclaración tan pesimista.

"Puedes quedarte con nosotros…" Michiru volvió a ofrecerle asilo, haciendo que la mayor se cohibiera.

"Michiru, ya fueron demasiado amables conmigo, no quiero pasar de ser una invitada a quitarle comida a alguien de su plato"

"No te preocupes por eso, voy a hacer un montón" Minorin se asomo de nuevo, quitándole la excusa a Yuu de la mesa.

Una idea llego a la cabeza de Rumi, quien ensancho una sonrisa perversa.

"Michiruuuu, mis papás estarán trabajando ¿también puedo?" La pelinegra de las puntas rojas levanto la mano con una sonrisa de lo mas inocente.

"Ni en sueños" Michiru le negó al instante con cara de asco.

"Si" Minorin volvio a asomarse, dejando una expresión de horror en la pelinegra.

Las dos madres de las chicas empezaron a levantarse de la mesa ante Shirou, para luego trasladarse a el estudio de la artista, con el fin de que Shion viera una de las muestras de Minorin.

El barullo fue interrumpido por una aclaración de garganta de una castaña bien vestida.

"No le hagan caso a Rumi, esta mal de la cabeza" Akemi hablo con cierta molestia.

Una que incluso llego a intimidar a Rumi.

"Jaja, es broma, me voy a quedar con Akemi en las fiestas" Se retracto con algunos nervios recorriéndole la nuca y una mano amenazando con pellizcarla en el brazo derecho.

Akemi había estado dos días rogándole a su papá para que dejara a su revoltosa amiga estar en la cena, prometiendo que no diría o haría nada estúpido.

Que Rumi pudiese darse la vuelta tan fácilmente, aunque fuese de broma, la había enfadado.

"P-pero es bueno ver que las dos hicieron las pases" Era un intento de desviar el tema, pero termino haciendo a las dos pelinegras el centro de atención.

"¿Uh?" La excapitana miro a Michiru, pues no pensó que nadie mas supiera al respecto.

"hemos hablado un poco últimamente" Michiru se excuso, se había dejado llevar en sus ultimas platicas por chat con la chica problema.

Bueno, no era ningún secreto y ella no podía pedir secretismo a estas alturas.

"Si, realmente Michiru no hizo nada malo… y aun si fuera el caso, ella tenia sus razones" Todos en la sala vertieron su atención en Yuu, quien empezó a sentir la presión de ello.

"¿… te contó la razón?" Rumi preguntó con una ceja alzada, para ambas.

"Uh, no… pero…" La universitaria busco un remedio para su indiscreción.

Incluso Haruna se vio levemente preocupada, pues ella también era un sujeto de ese secretismo.

Michiru opto por lo seguro.

"Les diré en algún momento, pero no ahora" la pelinegra intentó cerrar el tema por hoy.

Nadie quedo conforme, pero logro que se resignaran a esperar hasta entonces.

"Niña, enserio" La chica de puntas rojas miro incriminatoria a Michiru, pero sin alguna clase de apuro en saberlo.

"¿Por qué no ahora?" Desde el fondo de la sala, Kubo hablo por primera vez, llamando la atención de todos.

"Kubo…" Michiru quiso evitar la agresividad, pero era obvio que seguía molesto por lo de la noche anterior.

"Oye, dijo que lo hará cuando este lista" Nazuna no tenía tanta paciencia, intento bajarle los humos con una agresividad inusual.

"¿Te lo dijo a ti?" El varón le cuestionó a la idol con la lengua aguda.

"Claro que lo se, soy su mejor amiga, y mas importante, también era mi problema" Nazuna le reprocho, decantándose cada vez mas a la hostilidad.

Kubo se lo pensó por un momento, con la mirada en el suelo.

"¿Sawada lo sabe?" Miró a la chica de las coletas, quien se enervo al verse interrogada.

Sawada intento encontrar las palabras correctas…

"Okubo, saberlo no es algo de estatus o de cuanto Michiru confía en nosotros… todos somos compañeros" Como Sawada temía, no logro cambiar la postura de su compañero de salón.

"Entonces no hay razones para que no me lo diga" Siguió insistiendo, tanto que llamo la atención de alguien mas.

"¿Qué tal si te calmas un poco?" Shirou se puso de pie junto a la barra.

Era el único que había quedado en el comedor.

Pese a que Kubo denotaba una seria desventaja contra el albino, siguió plantando los pies.

"¿Tiene que ver con él?" El castaño preguntó de nuevo a una nerviosa Michiru.

"¿Tal vez?" El albino no la dejo responder.

Rumi no pudo evitar ahogar una risita en sus mejillas, estando a punto de barullar de manera involuntaria.

"Oigan, yo también quiero saberlo, pero no es bueno molestar a Michiru así" Nozomi intento disuadir al joven de calmarse.

Sawada tuvo que guardarse el ("Te lo contaremos luego")

El castaño no detuvo sus intenciones.

"Los vi cerca de mi edificio anoche… se veía extraña, pero reconocería a Michiru donde fuera… y también estoy seguro de que te vi a ti" De nuevo, se estaba volviendo tan desafiante con Shirou.

E insolente para su gusto.

"Ew" Akemi murmuró de manera involuntaria.

La pelinegra se paro entre ambos.

"Si no se detienen les voy a dar una tunda a los dos…" Michiru les recordó que lo ultimo que quería es ver una pelea.

Kubo bajo su hostilidad, pero esta vez paso a una severa decaída.

"Para ti sigo siendo solo un chiste" Declaro con un pesimismo agrio.

"Deja de hablar así, sabes perfectamente que no es cierto"

"Me hiciste mentirle a uno de mis amigos, ahora Taro cree que soy la razón por la que su hermano va a ir a prisión, pero eso no pesa nada junto a tu secreto" Esa frase pareció golpear a Michiru, haciéndola sentir afectada...

"¡Esa información salvo a personas!" Nazuna le recrimino al castaño a punto de optar por sacarlo a patadas.

Shirou estaba por secundar la idea… pero también se percató de algo muy tarde, la pelinegra apretando los puños con obvia frustración…

"Michiru…" Intento decirle que no era el momento o que no tenia que hacerlo.

"¿Tanto quieres saberlo?" Michiru murmuró como si su voz hirviera, pero Kubo no pareció intimidarse esta vez.

Luego, un destello azul inundo la sala.

"…"

Todos los presentes miraron a su ex compañera, como nunca creyeron verla, incluso, la mayoría sentía que podrían haberla confundido con otra persona en diferentes circunstancias.

Cabello azul, nariz negra y pequeña, cubierta de pelaje marrón, un antifaz impreso en su rostro, garras pequeñas y una cola azul grande y esponjosa.

"¿Feliz?" Se dirigió al castaño, cuya expresión de rigor se había caído en una mueca de incredulidad.

Estamos a unos cuantos pasos del final, los vere mañana… espero.