Los personajes de Naruto no son míos sino de su autor Masashi Kishimoto.

Gaara x OC

Canon divergence

Easter Eggs y referencias a otras obras (animes, películas, comenten si pillan las referencias).

Bla bla bla –narración general (POV)

-blablabla- diálogos del momento/acción

-blablabla- pensamientos del momento/acción

(N/A)- nota de la autora si hubiera


Protocolos de m

Observé a todas las personas enfrente mío, la mayoría eran señores mayores en largas túnicas.

-Imagino este es el concejo de Suna- pensé.

Luego mi vista se centró en un pequeño grupo conocido por mí; eran ellos, el temible equipo de la arena de los exámenes chunin, aunque claro, ahora eran aliados nuestros y nos ayudaron con el berrinche del Uchiha. Entonces noté al menor de los hermanos en el centro y unos pasos delante de su séquito, el también vestía una túnica blanca y encima una especie de capa de color negro con exquisitos bordados de oro en los puños y borde de la prenda (N/A esta prenda externa se llama Bisht en el mundo árabe), en ese instante caí en cuenta que era él, mi prometido era… el temible Gaara del desierto, contenedor del Shukaku.

-¡¿Tú?!- exclamé al verlo, pues no entendía la razón de por qué debía casarme con alguien así.

-Yue-sama, por favor modérese- dijo Tokito, mi primo y "confidente", impuesto por mi familia por cierto, quien me acompañaría y representaría unos cuantos días.

-Pero…- no pude terminar lo que iba a decir al ver la mirada suplicante pero firme de Tokito, rogando por que no arruinara este circo, digo… "ceremonia de compromiso".

-Lamentamos este pequeño imprevisto- dijo haciendo una reverencia, a lo cual yo hice lo mismo.

-Sean bienvenidos- respondió sin más un hombre con un turbante y en la cabeza y paño que cubría la mitad de su cara (N/A Baki), como si fuera el representante de Gaara, mientras se reverenciaron todos en respuesta.

Luego del "saludo" me dieron la indicación de posicionarme junto a Gaara por indicación de Tokito. Entonces, una señora muy mayor de edad se acercó con una enorme manta se seda y nos envolvió a Gaara y a mí con ella, a continuación tomó un incienso con una de sus manos y con la otra hacía señas extrañas mientras hablaba en una lengua que no conocía, supongo algún dialecto ancestral de la zona o algo así.

–Gaara y Yue, Viento y Fuego se unirán para la alianza, estabilidad y prosperidad de nuestras naciones- dijo mientras con su mano libre dibujo un símbolo imaginario en nuestras frentes.

-Hoy es un día histórico, tenemos el honor de recibir a un miembro de la familia del Daimyou de la tierra del Fuego para formalizar la alianza conjunta con la tierra del viento a través del matrimonio con el heredero a Kazekage de nuestra aldea- Dijo Baki a la multitud presente.

-¿Kaze..kage? ¿Gaara será Kazekage?- en ese momento todo cobró sentido, me casaré con Gaara por su posición, tal vez no sea el Kazekage aún pero es lógico que lo sea, después de todo es obvio que es el Shinobi más fuerte de esta aldea.

En cierta forma me sentí aliviada porque pensaba que iba a casarme con un treintón o un señor mucho mayor, ¿pero por qué tenía que ser justo él?

Desperté de mis pensamientos al escuchar al público aplaudir por nuestro compromiso, me sentía…abrumada y derrotada, sin escapatoria, sin embargo mi sentido del deber era fuerte, y estaba dispuesta a aceptar un matrimonio arreglado por el bien de mi nación.

–Ahora todos pasemos al gran banquete a celebrar- dijo Baki una vez terminada la ceremonia, después guiarnos a todos al interior del edificio administrativo.

El interior de este edificio era sobrio y se veía casi igual que el exterior de piedra tallada y arena, sin embargo el gran comedor al cual pasamos era enorme, con exquisita decoración y pomposo.

El trayecto desde la entrada hasta la mesa no era tan largo, sin embargo atravesar todo el salón se sintió como una eternidad. El salón estaba lleno de más "gente importante" asumo yo, quienes no despegaban la vista de mí, escuchaba sus cuchicheos y lo que decían por lo bajo: "es sólo una niña", "¿no es su atuendo demasiado exagerado?", "¿en serio podremos confiar en una kunoichi de Konoha?", "no tiene cara de buena esposa", "las de su tipo son fáciles, seguro Gaara-Sama se deshará de ella pronto, no hay que preocuparse".

Ya habiendo alcanzado la gran mesa, Gaara y yo nos sentamos lado a lado en el centro, la cual era muy larga y baja, y los asientos eran sedosos y esponjosos cojines.

Mentiría si dijera que no me gustaba o sorprendía ese nivel de "lujo" de la aldea de la arena, aunque sea de forma ocasional, no es que esté feliz por este matrimonio, pero al menos es bueno saber que me tocó un pez gordo.

Creo que no será muy difícil acostumbrarme a esta vida- pensé riendo por lo bajo, hasta que volteé y vi de reojo a Gaara y caí en cuenta de que ni siquiera nos habíamos dirigido la palabra.

-Rayos, tengo que hablar con él eventualmente, qué incómodo-.

Justo cuando quise decir algo para interactuar con él llegaron los empleados a servirnos la comida, se veía muy colorida y diversa: kebabs, falafel, hummus, pan pita, no eran muchos los ingredientes, pero la diversidad de platos que se podían crean con ellos era sorprendente.

–Adelante, debes tener hambre por el viaje- dijo Gaara señalando la comida, a lo que lo miré algo sorprendida, pues nunca creí que fuera él quien iniciara la conversación.

-S-Sí, gracias…- dije mientras me volteaba a ver la comida rápido, pues sentí un leve ardor en las mejillas y no quería que él me viera así. Me serví un poco de todo y POR DIOS QUE ESTABA DELICIOSO, era tan diferente a la comida en Konoha, esta era más "exótica" y condimentada, sentí una especie de fiesta en mi boca.

Espero no tener efectos secundarios luego- pensé.

-Está muy bueno, cierto?- le comenté a Gaara para continuar la charla, pero un hubo un silencio de por lo meno segundos.

-Sí- respondió fríamente sin decir más mientras degustaba de su plato.

-¿Me estás jodiendo? ¿Eso es todo lo que dirás?- pensé ofendida. Cuando me invitó a servirme comida sonó bastante atento y hasta agradable, y ahora me habla esa forma seca sin siquiera verme a la cara.

Y apenas vamos en el primer día, ¿cómo pasaré el resto de mi vida con alguien así?- Me quedé cabizbaja apretando los puños.

Por favor, no llores Yue, hagas lo que hagas NO llores- me repetía una y otra vez. Podía ser algo enojona, berrinchuda y hasta odiosa y dura, pero joder que soy una persona estúpidamente sensible, y no es que piense que sea algo malo, pero cuando no es el lugar ni el momento, como ahora, es muy… frustrante.

De repente empezó a sonar una música misteriosa la cual captó de inmediato mi atención, era una presentación de una hermosa cantante acompañada de una orquesta. Me quedé perdida en la canción, la melodía, la letra, la hermosa voz de la muchacha, hasta llegué a pensar en que si fuera hombre hetero y estuviera en esta situación me habría gustado escapar con ella muye pero muy lejos de aquí.

La canción terminó y se escucharon aplausos y silbidos de todo el público, pero yo quedé hipnotizada por un buen momento, en verdad fue de lo más hermoso que haya escuchado en mi vida, sobre todo porque ayudó a relajarme y distraerme de lo de hace un momento.

Sin darme cuenta el banquete había terminado y ya era muy tarde. Baki y Tokito se acercaron a Gaara y a mí.

-En nombre de Sunagakure, el país del Viento y el Kazekage le damos la bienvenida Li-sama, esperamos disfrute su estadía en su futuro hogar, por favor acompáñenme a que los lleve a sus aposentos- dijo Baki, aunque con la última frase casi me da un infarto. Ni siquiera estábamos casados ¿y ya quieren que hagamos…"cosas"? ¿y a esta edad?.

-Muchas gracias Baki-san, ciertamente estamos agotados por el viaje, así que estamos ansiosos por descansar cómodamente- respondió Tokito.

-…ah…- fue lo único que pensé al caer en cuenta que se refería a mi asistente y a mí, me sentí aliviada primero, y tonta después, ¿en qué demonios estaba pensando?, tal vez deba dejar de juntarme tanto con Naruto y Konohamaru, aunque a pesar de ser unos payasos me caen muy bien y me divierto con ellos.

Mientras tanto Gaara se limitó a hacer una reverencia a modo de despedida, sin decir palabra alguna, para luego retirarse junto con sus hermanos.

-Por acá- dijo el jounin de la arena guiándonos a nuestras respectivas habitaciones.

-Buenas noches- dijimos todos antes de encerrarnos y acomodarnos cada uno en su habitación, el cual era tan hermoso como el salón, aunque algo más sobrio, imagino para darle ese toque más íntimo. Me acosté en la cama (muy suave por cierto) y mi mente empezó a repetir la canción del banquete hasta que me quedé profundamente dormida.


Y hasta aquí el segundo cap, quise incorporar la cultura árabe a Suna ya que me sentí inspirada por tiktoks y shorts de youtube de Gaara con "Arabian nights" de audio, espero les haya gustado :3