La noche en ese lujoso hotel donde se celebraba ese evento estaba tranquila, las sonrisas y los coqueteos hipócritas reinaban. Hachiman con ropa militar negra vigilaba su objetivo desde una de las cámaras puestas en el salón, un piso arriba de donde se celebraba, todo normal, ya faltaba media hora para acabar el evento algunos invitados ya se habían retirado. Pero entonces ocurrió un apagón y se escucharon gritos y explosiones. Inmediatamente todos se alertaron por sus objetivos. Sin embargo, los asesinos obstruyeron todos los pasadizos al salón con bombas que hicieron imposible pasar, no solo para el equipo de Hachiman sino para otros. Sin opciones rápidas, Hachiman les hizo un gestó a su grupo para que hicieran lo mismo, aunque era arriesgado.

−Cada uno enganche a un lugar de la habitación fuerte el arnés que tienen vamos a entrar por las ventanas del piso de abajo, es arriesgado nos verán entrar, pero no hay de otra, antes de hacer palanca para quebrar el vidrio, tiraremos y quebraremos esas ventanas mientras simultáneamente tiramos bombas de humo y granadas, ahora. – ordenó hachiman amarrando su arnés de una columna y su grupo así lo hizo. Todos estaban al borde de la ventana y en menos de un minuto, entraron al salón del evento matando a quién se enfrentará a ellos, gracias a la distracción de las bombas de humo y explosiones. Otros grupos atrapados hicieron lo mismo imitando la estrategia de Hachiman, mientras otros entraron gracias a otras estrategias. Hachiman aparentemente buscaba a Hayato, pero buscaba a Haruno Yukinoshita, las gafas nocturnas ayudaban pero el humo empeoraba la visión, finalmente su vista se encontró con una mujer similar a la imagen que buscó en internet y se acercó a ella, estaba escondida detrás de la barra de licores.

−Chica, ¿eres Haruno Yukinoshita?

−¿Quién eres?¿Vas a matarme? −preguntó con voz nerviosa Haruno.

−Lo contrario… − Hachiman iba a hablar, pero esquivo a un idiota que le iba a dar con una silla y le dio una patada en las piernas para derribarlo, para su sorpresa era Hayato.

−Vaya el objetivo, vino solo, niño vienes con nosotros junto con ella.

−No lo dejaré, no dejaré que maten a Haruno −murmuró en el suelo Hayato.

−Estas idiota, vine a salvarlos así que muevan el culo antes de que los asesinos nos vuelvan atacar −aclaró Hachiman mientras rápidamente corrió y abrazó protectoramente a Haruno y disparó detrás de ella a un tipo que se acercaba con una navaja.

−Mierda, chicos si el señorito no se digna a caminar cárguenlo como princesa, pero vámonos de este caos. −Dijo para sus hombres y luego le susurró al oído a Haruno −si quieres vivir, debes decir que te llamas Yukino y eres la prometida de Hayato.

−Esa voz −murmuró Haruno.

Luego uno de los hombres de Hachiman se echó al hombro a Hayato, mientras Hachiman llevaba de la mano corriendo a Haruno y disparaba a quien se le acerqué, sus otros tres hombres lo respaldaban y eliminaban obstáculos, en la oscuridad Hachiman y el hombre que cargaba a Hayato tuvieron que adelantarse y entrar a una habitación para protegerse.

−jefe debo ir a ayudar para que nos alcancen −mencionó el hombre tirando al piso como costal de papas a Hayato y salió cerrando la puerta.

−Que dolor− se quejó Hayato en el suelo.

−Hayama, casi no hay tiempo, cuando regresen debes decir que Haruno es tu prometida y se llama Yukino− con seriedad habló Hachiman

−¿Quién eres?¿cómo sabes nuestros nombres? −Indago Haruno intentando procesar lo que estaba pasando.

−Eso ahora no tiene importancia −dijo Hachiman sintiendo que alguien se acercaba, pero las pisadas sonaban como zapatillas de mujer.

−Escóndanse en ese armario, ahora −ordenó Hachiman empujándolos al armario, en ese instante tumbó un cuerpo la puerta clavado un cuchillo en su garganta al alzar su vista Hachiman vio una mujer que manejaba armas de filo y un nombre se le vino a la mente.

−Shenhua −murmuró incrédulo Hachiman.

−"Hache, nos volvemos a encontrar aunque la oscuridad nos rodea".

−Quisiera decir que es una alegría verte, pero el caos de allá afuera no me lo permite.

−"Veo que no solo, no despedirse de mí, sino que en Japón tener nueva amante la reina de la muerte"

−Se debe hacer algo para sobrevivir ¿acaso no pasamos la noche juntos antes de venir a Japón?

−"creer que eso es despedir, que estúpida forma de huir"

−Shenhua, si hubiera querido huir, nunca hubiera sido tu amante.

−"Esas palabras solo hacer enojar"

−Oh vamos, sabes que solo es una relación física la que tengo con la reina de la muerte, ¿acaso esta celosa? ¿acaso me extrañaste?

−"Celos no tener, ser un pasatiempo"

−Oh, que cruel, en fin, si es así, porque no te vas y seguimos con nuestras vidas −la respuesta de Shenhua fue atacar a Hachiman con sus cuchillas, mientras Hachiman disparaba con una mano y con otra tenía un cuchillo para también atacar.

−"todo que enseñe en el sexo, aplicarlo con cualquier mujer ¿no?" −dijo la pelinegra atacando a Hachiman.

−"no es mejor matar, que dejar que lo mío lo tome otra mujer" −continuó Shenhua.

−Dijiste que no estabas enojada, ahora quieres matarme, está loca.

−"loca si te dejo vivir y que me deshonres"

−Espera, pero ni te deshonre.

−"lo hiciste al ser perro amante de la reina de la muerte"

−Espera, cálmate, si seguro ya cumplieron su objetivo, no hay razón para matarme a mí.

−"existir mi razón, ser una deshonra, mujeriego"

−calma, calma, nunca me dijiste que debía serte fiel.

−"eso no justificar, ser imbécil" −dijo dando otro ataque Shenhua, en ese instante volvió la luz, apareciendo ante los ojos de Hayato y Haruno, la imagen de Hachiman y de una atractiva mujer con vestido chino.

−Eso es ser moralista, hay cosas que un hombre debe hacer así no quiera, así es la vida Shenhua.

−"Sabes tu amor por dos manos, tu deseo por mí siempre saber que ser por mujer de antigua vida, pero ser el perro faldero de una mujer por desengañó es patético"

−No metas a Revy en esto Shenhua, aunque admito que, si me tuve que convertir en el perro faldero de una mujer, pero no tengo opciones, así que haré lo necesario para proteger los míos, así tenga que caminar descalzó en el infierno, de forma que si vienes con la intención de matarme responderé con el doble de intensión, si me quieres muerto, yo te querré muerta. −con frialdad Hachiman habló.

−"Hache, tiene acaso los cojones para matarme"

−Los tengo y no dudaré de hacerlo, así que decide Shenhua, te calmas o nos matamos. −en ese instante sonó una alarma y Shenhua sonrió y caminó hacia la ventana.

−"Haz lo que quieras, ya no ser divertido, y cuídate mis dagas tener veneno" – dijo saltando por la ventana, en ese instante Hachiman vio las heridas que le provocó Shenhua y sintió un tenue adormecimiento de su cuerpo. Hayato y Haruno salieron del armario y vieron a un herido Hachiman.

−¿Hikigaya san? − preguntó Hayato, pero entraron los hombres del equipo de Hachiman.

−Lo sentimos jefe, se nos cruzaron unos problemas en el camino −habló un hombre.

−No importa, saquen al niño por la ventana, yo llevaré a la chica.

−Pero jefe solo nos dijeron que debíamos proteger al chico.

−Eres estúpido o te haces, no ves que vienen juntos, ella es la prometida del chico, Yukino Yukinoshita, así que es parte de la familia Hayama, ¿no es así? −dijo Hachiman mirándolos fríamente a Hayato y Haruno quienes solo asintieron.

De forma, que salieron adelante con Hayato el equipo de Hachiman. Sin embargo, Haruno se quedó viendo a Hachiman.

−¿Sucede algo? ¿duda que no pueda cargarla y bajarla?

−No, es que fuiste envenenado, el veneno…

−Eso no importa en este momento, ahora escucha te dejaré en la residencia de los Hayama desde ahí llama a tu padre, y cuéntale lo que pasó y cítalo mañana mismo a las cinco de la tarde en el restaurante ### cerca del parque del distrito #### dile que la vida de su familia está en juego. −explicó Hachiman tomando en sus brazos a Haruno estilo nupcial para saltar de la ventana. Cuando bajaron una camioneta los esperaba y fueron en camino a la residencia Hayama, inmediatamente el pelinegro comenzó a desvestirse.

−Dame el botiquín, ahí hay agua. −Ordenó en el caminó Hachiman mientras se retiraba su protección y ropa superior, dejando ver pequeñas heridas y grandes cicatrices pasadas.

−Yukino san, necesito que me rocíe esta agua en las heridas que vea, eso ralentizará un poco más el veneno, sin tocarme o te envenenaras −ordenó Hachiman a una sorprendida Haruno, ante un atónito Hayama.

Finalmente llegaron a la residencia Hayama,y Hachiman les dijo que cualquier explicación el patriarca Hayama se las dará y se fue. En el camino al hospital afiliado a la organización se sentía mareado, con ganas de vomitar. Akihiko ya estaba esperándolo allá y Hachiman fue llevado a emergencias donde lo desintoxicaron.

−Viejo, esa mujer quería matarte, de hecho, si es una asesina, pero porque salir con locas, porque ese afán de querer una muerte trágica− Akihiko preocupado hablo.

−No podía rechazarla, en Roanapur tenía que hacer de todo para sobrevivir, ella me buscó por lo peligrosa que era sabía que no podía rechazarla −pausadamente comentó Hachiman.

−Tuve que convencer a la mano derecha de Charlotte para usar el hospital para salvarte, pero esta furiosa mataron a un diputado que era socio de ella, ahora esta resolviendo eso en una reunión de emergencia, pero los chicos que estaban a cargo no pudieron hacer nada fueron asesinados− explicó serio Akihiko.

−Veo, así que fueron varios asesinos con Shenhua.

−Fueron asesinos expertos, de todas formas, se piensa que la triada china y otra organización fue contratada para este ataque.

−Pensé que tenía un acuerdo tácito nuestra organización con la triada china.

−Sí, pero cada quien tiene aliados y peticiones, seguramente no fue algo personal, pero cruzaron una línea Hachiman.

−Veo.

−Por cierto, agradece que Charlotte anda ocupada y que es un asunto de menor importancia que usaras inapropiadamente sus recursos para salvar a otra persona que no era la asignada.

−¿Ya lo sabe?

−Sí, dijo que más te vale que como tuviste los cojones para usar sus recursos a su antojo debes ir mañana en la mañana a su oficina para explicar.

−Suena a que moriré.

−Si mañana debes ir, sin importar tu club o clases, deseara ayudarte, pero viejo esta noche salió mal y ella esta furiosa, por ahora descansa, te traje tu uniforme y cuadernos para que después de encontrarte con ella vayas a clases.

Pronto amaneció y Hachiman, se encontraba en la oficina de R&R de Charlotte, se miraba cansada y molesta.

−Charlotte san, aquí estoy.

−Hikigaya san llegaste −dijo Charlotte levantándose y con su mano derecha le dio una cachetada fuerte a Hachiman, luego otra y otra hasta que se calmó. Hachiman simplemente se quedó inmóvil.

−¡Puedo saber porque carajos malgastaste mis recursos! −con furia gritó la mujer.

−¡No solo tu ex amante ayudó a matar a mi socio! ¡sino que desobedeces lo que te ordenó!¡Agradece que por ahora me agradas sino ya te hubiera matado! ¡Habla dime la razón de la porque salvaste esa mujer!

−Charlotte san, yo creo que la familia Yukinoshita será un excelente socio desde hoy a la organización.

−¿desde hoy serán mis socios? Eso es raro, esa familia nunca se asociado con nadie, es neutral, ¿así que ya los convenciste?

−Aun no, pero esta tarde lo harán, solo denme tiempo.

−Así que malgastaste mis recursos por una posibilidad.

−No eso no sucederá Charlotte san, sino pediré dinero, por lo que vale la salvación de su hija.

−¿esa es tu absurdo plan? Sabes lo que perdí anoche Hikigaya san, son billones de yenes ¿ellos lo pagaran?

−No, ellos no ocasionaron eso no podrán pagar eso, pero le darán una vida por una vida, una familia aliada por un socio caído, serán de utilidad al futuro.

−Ya veo, si es así, más te vale no equivocarte, ahora sal de aquí.

La tarde cayó y la ahora acordada estaba Hachiman con su uniforme con un hombre elegante en un pequeño restaurante sentados.

−Así que eres ¿Hikigaya san?

−Sr. Yukinoshita así es.

−Dime, el porqué de la cita.

−Iré directo al grano la salvación de la vida de su hija Haruno, no fue una obra de caridad, todo en este podrido mundo tiene precio y antes que me diga que me va a pagar, la cifra es muy superior a la que piensa, usted no podrá pagarlo porque son billones de yenes, lo que vale una solo empresa importante en Japón y aclaro ese dinero es para la organización en la que estoy, nunca para mí, así que ya debe saber que vengo a proponerle hoy.

−Yo nunca sería socio de criminales, me voy – comentó el Sr Yukinoshita.

−Antes de que se vaya, debe saber que puede perder mucho más que su dignidad.

−¿Me amenaza? ¿un joven criminal se atreve amenazarme?

−¿Yo? Para nada solo soy un peón de alguien más fuerte que yo en todos los sentidos, pero algo que me ha enseñado la vida en este corto tiempo, es que un hombre que no protege su familia es una porquería, así que le pido que se siente y piense bien, o acaso creé que el gobierno protegerá a su esposa e hijas de futuros atentados o de cosas peores que pueden destruir una persona, ya pudo comprobar que la familia de su futuro cuñado no le importaba salvar a su hija, yo salve a su hija, pero al parecer usted no valora la tranquilidad ni el gran tesoro que es la vida Sr. Yukinoshita.

−Pero acaso unirme a su organización no es aun más peligroso que ser neutral, creé que acaso no amo a mi familia, lo hago para protegerla− molesto el Sr. Yukinoshita habló, pero Hachiman chasqueo su lengua de forma de negación y habló.

−Lo que hace es peor, ya que nadie lo va ayudar si algo pasa, nadie lo va a proteger, ya debe saber que la policía esta con el crimen ¿así que a quien va a recurrir? Ahora cualquier persona puede atacar su casa.

−Entonces, creé que asociarme con ustedes es lo mejor ¿esta loco?

−No quería recurrir a esto, pero debe ver ese informe, antes de que se vaya.

−¿Qué es esto? −impactado el Sr. Yukinoshita preguntó después de leer el papel.

−No es obvio, un socio de su empresa planea robar dinero y darlo a una organización del crimen y sabe quien será culpado de ese robo.

−¿Yo? Pero él era mi mejor empleado.

−Se ganó su confianza, pero él es parte de una organización y estafarlo y mandarlo a la cárcel está en sus planes.

−Pero es imposible.

−Si quiere comprobar la veracidad de lo que digo, llámelo y pregúntele donde esta, el responderá que está en una cita con un socio importante, pero ya sabe quien es el socio, hágalo compruebe.

−Lo haré.

En ese instante llamó y el Sr. Yukinoshita comprobó que Hachiman no mentía.

−Debo denunciarlo ahora mismo.

−Cálmese Sr. Yukinoshita, usted ya debe saber que la policía no hará nada y provocará que ataquen a su familia solamente, es una organización nueva, de pacotilla, pero recuerde usted por ahora no tiene a nadie quien le respalde.

−¿Pero? Que puedo hacer mi amada esposa e hijas…

−No es obvio, solo nosotros podemos protegerlo y si acepta, yo prometo de encargarme de la rata y la organización de pacotilla inmediatamente, solo debe aceptar y dar huella digital en este aparato para que sepa mi organización que acepto.

−Mis hijas, mi esposa…

−Si acepta yo las protegeré como si fuera mi propia familia, no se preocupe, eso es más de mi parte por lo que hizo en el pasado por mi al ayudarme a buscar, agradezco su ayuda a pesar que la verdadera intensión fue comprometer su hija con una familia cercana.

−¿Cómo lo sabe?

−No sé preocupe no lo juzgo, supongo que tiene una buena razón, y como le dije antes un hombre debe proteger su familia.

−Ya veo, eres sincero, así que aceptaré, confió en su palabra Hikigaya san.

−Bien.