Los personajes de RK no me pertenecen, hago esto con fin de entretener.
Acto 1
Lavanda
Miércoles 14 de marzo de 2018, Tokio.
Su padre había fallecido. La persona más importante en su vida, quién había estado con ella en cada paso, quién le enseñó todo lo que sabía se había ido el día anterior debido a una grave enfermedad.
¿Qué sería de ella ahora? Primero falleció su madre producto de un accidente automovilístico, y, a decir verdad, siempre consideró que su padre no pudo recuperarse jamás de aquella pérdida, al punto que la enfermedad arrasó con él antes de lo previsto debido al desgaste emocional que presentaba.
¿Era eso posible? Lo habían diagnosticado con cáncer de páncreas en el año 2013, a los 41 años, y, por lo que les comentaron los doctores, sabían que esa enfermedad avanzaba rápidamente, de forma agresiva, y que lo único que se podía rescatar de esa cruda realidad era que el haberla detectado a tiempo le daba la posibilidad de iniciar un tratamiento que extendiera su vida hasta ocho años.
Eso no sucedió. Kojiro soportó cinco años junto a ella, cinco años en los que vio como él se apagaba, como simulaba estar bien, cinco años en los que le enseñó todo lo que pudo acerca de la empresa que dirigía, dado que su mayor sueño era que su hija continuara esa responsabilidad dejándole su puesto.
Dios, la empresa…su padre había dejado en claro varias veces que deseaba que ella se hiciera cargo, y si bien Kaoru no tenía inconveniente en tomar ese papel, ya que también era su deseo, jamás pensó que sería tan pronto, de forma tan solitaria; vamos, apenas tenía 21 años, era una simple universitaria y a decir verdad no se creía capaz de realizar tal tarea.
En Kasshin C.O se realizaban toda clase de negocios e inversiones, a menudo su padre la llevaba a reuniones importantes con el fin de que ella aprendiera siendo oyente. Hasta el momento solo había sido su secretaria, y ahora de pronto debía tomar el lugar de directora.
Esa misma tarde cuando finalizó el funeral se acercó a la compañía con la intención de ordenar varias cosas de la oficina de Kojiro. Si bien poseía hasta 5 días de duelo decidió que lo mejor sería comenzar a trabajar el siguiente día y así mantener su mente ocupada, además de que sus responsabilidades ahora eran mayores.
Cualquiera pensaría que dejar a Kaoru, siendo tan joven, a cargo de tal empresa era un error, incluso ella misma lo pensó, pero su padre siempre insistió en que su hija tenía grandes capacidades, y que prefería dejar la dirección en manos de su más preciado tesoro.
Ingresó al despacho de su padre totalmente perdida en sus pensamientos, mientras gruesas lágrimas corrían por sus mejillas, era inútil intentar detenerlas, se encontraba desconsolada. Apenas ingresar notó un sobre encima del escritorio con su nombre en él, por lo que se detuvo a leer el contenido.
En la carta encontró las palabras de su padre quién le expresaba su profundo amor, su respeto y sus más grandes deseos para ella, anhelaba que tuviera una vida feliz a pesar de encontrarse sola, aunque tanto él como la madre permanecerían siempre en su corazón acompañándola.
Comenzaba a sentirse débil, la cabeza le daba vueltas y sentía que en cualquier momento perdería la conciencia, la falta de sueño y la tristeza estaban comenzando a hacer mella en Kaoru, sin embargo, esto no la detuvo para llegar al final de la carta y encontrar unas palabras que no esperaba.
"(…) Dado que te encargué el dirigir mi empresa resultaba evidente que no dejaría esta difícil tarea para ti estando sola, por lo que decidí que estarás acompañada de una persona de mi confianza que tú conoces muy bien, lamento comunicarte esto en una carta, recuerdo haberte mencionado antes que cuando yo ya no estuviera siempre alguien estaría junto a ti. Kenshin Himura, mi mano derecha, él será quien a partir de ahora se quede a tu lado para continuar los proyectos; no te preocupes por explicarle nada, le dejé todas las indicaciones necesarias, desde este momento te encuentras a su cuidado (…)".
Debajo continuaban los buenos deseos de su padre con palabras que ella guardó en su corazón, sintiendo como cada vez extrañaba más su presencia; sin embargo, le impresionó el hecho de que haya escogido a Himura como su acompañante, ¿olvidó que más de una vez le mencionó la extraña sensación que le generaba ese hombre? La profundidad de sus ojos violeta la incomodaban, y más de una vez lo encontró mirándola de una forma que ella no podía descifrar.
Ya no aguantaba el malestar, sentía frío y a la vez sudaba, estaba segura de que iba a desmayarse, además de que probablemente le había subido la temperatura.
Kaoru…Kaoru…
¿Estaba teniendo alucinaciones acaso? Podía jurar que había escuchado su nombre, pero el aturdimiento en sus oídos sumado a la visión borrosa le hacían dudar de su juicio.
Kaoru…
No pudo aguantar más, su cuerpo se dejó caer hacia el costado de donde se encontraba sentada, probablemente se golpearía la cabeza.
- ¡Kaoru! – justo antes de caer alguien llegó a sostener su cuerpo en brazos, en los que, por cierto, se sintió completamente relajada. Se abandonó en ellos, y antes de rendirse al cansancio, alcanzó a divisar una preocupada mirada color lavanda con motas doradas.
Notita: arriba el primer capítulo! Un poco corto para empezar y ponernos en contexto, los próximos serán más largos. Estoy contenta de estar empezando esta nueva experiencia, tengo muchas cosas en mente para esta historia y quiero disfrutar cada capítulo así que espero que ustedes también lo hagan. Acepto cualquier comentario constructivo, siempre con respeto. Ojalá amen la historia, nos vemos en el próximo cap, saludos! :3