En un apartamento de lujo, en Shinjuku, Tokio.
Naruto salió del departamento de su habitación con un fuerte bostezo.
Tenía una cita con Ayako Takamine, la atractiva profesora de su escuela, para comprar lo necesario para sus estudios.
Ahora, todos ustedes deben preguntarse cómo consiguió Naruto este tipo de apartamento simple.
Genjutsu y el dinero que obtuvo al volver a publicar los libros Icha-Icha de Jiraiya.
En un lapso de unos pocos meses, el nombre Jiraiya se convirtió en el top 5 de las personas más ricas del mundo solo debido a sus libros y la adaptación televisiva y cinematográfica.
Jiraiya nunca se reunió cara a cara con el editor o el director, sino que entregaba sus obras por correo o algo así.
Suspirando, el rubio cerró la puerta con llave y se giró para dirigirse a las escaleras solo para ver a la familia Azuma, que pronto se casaría, besándose frente a la habitación de su apartamento.
"Oh, vamos, ¿¡ustedes dos tienen que chuparse la cara frente a su habitación!?" Naruto se quejó cuando la pareja se sobresaltó por su voz.
"¡U-Uzumaki-kun! ¡Nos sorprendiste! ¡Y shoo! ¡Esto no es para que lo vean los niños!" Dijo en broma Norihito Azuma, el supuesto hombre de la familia, que era oficinista en una gran empresa en Shinjuku.
La ceja de Naruto se arqueó hacia el hombre unos años mayor que él.
"¡Norihito-san! ¡No seas tan grosero!" Su prometida lo reprendió. Hisato Asuma, la futura matriarca de la familia y una de las hermosas mujeres que viven en el complejo de apartamentos con cabello y ojos castaños.
'110 cm... eso es incluso más grande que el de Baa-chan... pensó Naruto antes de parpadear.
Se abofeteó interiormente por convertirse en su maestro cuanto más pasaba el tiempo.
Mientras tanto, Kurama simplemente se rió de su anfitrión.
"Buenos días, Naruto-kun. Llegas temprano hoy, ¿no está cerrada la escuela?" Hisato saludó mientras miraba a Naruto que estaba parado a 6'.
"Dios, si tan solo lo hubiera conocido a él antes en lugar de a Norihito-san". pensó mientras disfrutaba la sensación de sus ojos mirándola.
"Buenos días, Hisato-san. Y sí, la escuela está cerrada pero una de las maestras me pidió que la acompañara a comprar algunas cosas necesarias para mi estudio". El rubio se frotó la nuca tímidamente.
"¿Oh-ho? ¿Una profesora?" Norihito intervino antes de sonreír. "Bastardo con suerte. Dime, ¿está buena? ¿Tienes alguna foto de ella?"
Naruto sudaba mientras veía a la esposa golpear a su marido.
Aún así sacó su teléfono inteligente antes de abrir su galería y mostrarles una foto de él, la maestra, Aida y Yukiha.
Fue para su club de literatura, aunque Yukiha y Aida lo arrastraron, quienes lo confundieron con alguien que amaba las obras literarias mientras él solo estaba leyendo la historia de este mundo y Ayako era la asesora de su club.
Norihito silbó.
Hisato se puso tenso.
"Ella es sexy. ¿Y la chica que está a tu lado es tu novia?"
"No." Se guardó el teléfono en el bolsillo. "Solo somos amigos, además, Aida está interesada en Yukiha-chan."
"Ay, eso apesta". Dijo el hombre con una sonrisa. "¡De todos modos, me iré ahora!" Norihito besó a su esposa, quien parecía un poco reacia una vez más antes de saludarse.
"Yo también iré, Hisato-san. Toma-"
"Oye, ¿puedo ir contigo?"
Naruto levantó una ceja.
"Lo siento, pero no." La rubia se negó, haciendo que la mujer pareciera oprimida.
Naruto suspiró al verla así.
"No es porque seas mayor que yo o no luzcas atractiva", aseguró Naruto a la mujer. "En todo caso, te encuentro muy hermosa", Hisato se sonrojó ante el repentino cumplido. "Y si te llevo de compras sin decírselo a tu prometido, me sentiré fatal". Naruto terminó con una sonrisa.
"Así que anímate, ¿quieres? Si realmente quieres ir de compras conmigo, será mejor que le pidamos permiso a Norihito-san primero". El rubio sonrió antes de darse la vuelta y dejar a la mujer nerviosa en el pasillo.
Mientras continuaba caminando hacia el ascensor, no pudo evitar pensar en el otro dueño de la habitación contigua a la suya.
Nunca había visto a la dueña, que era una chica con cabello violeta azulado a la que vio una vez en el pasado.
Naruto juró que podía escuchar voces de niños dentro de la habitación, pero nunca la de un hombre.
"Hablando de eso, la mujer de cabello rubio rojizo que a veces los visitaba seguía tratando de conocerte mejor..." Kurama se rió disimuladamente.
La rubia se encogió de hombros.
Claro, encontró hermosa a la mujer cuyo nombre era Miyako Saitou, increíblemente igualada, pero no quería arruinar el matrimonio de otra persona.
"No lo serás si son ellos los que vienen por ti".
"Cállate, zorro-ero..."
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"¡Takamine-san!" Naruto gritó cuando notó que su maestra tenía el cabello suelto y le llegaba a la cintura.
Ayako se dio vuelta y notó a la rubia bigotuda caminando en su dirección.
Fue entonces cuando Naruto vio bien a la mujer. Estaba usando lentes de contacto en lugar de anteojos.
Llevaba un traje conservador con una falda larga de color verde azulado que llegaba hasta debajo de las rodillas y una blusa blanca con un collar adornado alrededor del cuello y zapatos planos de color cian, a diferencia de Hisato que usaba cuñas.
"¡Naruto-kun! ¡Estás aquí!" La mujer le sonrió a su cita.
Luego notó que las mujeres y las niñas lo miraban con una mirada soñadora antes de mirarla a ella cuando descubrieron que la rubia tenía una cita.
Los hombres también le lanzaron a Ayako una mirada lasciva antes de maldecir a Naruto solo para quedar inconsciente solo por su KI.
Fue una dura prueba, ya que la mayoría de los hombres en las calles se desmayaron mojando sus pantalones.
"Lo juro, ¿¡qué pasa con ellos estando cachondos todo el tiempo!? ¡Estos humanos son peores que los nuestros!" Kurama gruñó con irritación antes de que otro se desmayara por el Kl exudado por Naruto. "¿¡Estás seguro de que no puedo volar toda esta isla !? ¡Quién sabe que abriríamos una brecha en nuestro mundo si golpeamos algo con nuestro ataque más fuerte!"
'Te hace preguntarte si estamos arrojados a un mundo lleno de lujuria, ¿no? Y no, no tienes permitido hacer eso. Naruto suspiró antes de sentir a su maestro agarrar una de sus manos.
"¿No te dije que me llamaras Ayako cuando solo seamos nosotros dos?" Naruto le hizo sudar una gota a la mujer que hacía pucheros.
"Su lujuria supera los 9000..." Kurama dijo inexpresivamente con un tarareo. "¿No está prohibida la relación estudiante-maestro?"
'Bueno, quemaremos el puente cuando lleguemos allí...'
"Me dijiste que no querías una relación..."
'Todavía no lo hago, pero no dije que no iba a intentarlo...'
Naruto miró a uno de los autos en el semáforo en rojo que pasó por delante de los dos.
Había sentido que alguien les tomaba una foto a los dos y podía adivinar quién, ya que la emoción que sentía Naruto era similar a la de alguien en la escuela.
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Unas horas más tarde, con otra pareja, Yukiha y Aida que acababan de terminar de comprar.
Los dos fueron a un café abierto antes de que este último decidiera confesar sus sentimientos por la chica ya que Naruto no estaba aquí y no había nadie que los molestara a los dos.
"S-Serizawa-san." Aida agarró una de las manos de Yukiha. "¿Q-Te gustaría salir conmigo?"
Desafortunadamente para el chico, fue interrumpido una vez más antes de que Yukiha pudiera darle una respuesta.
"¿Oh? ¿Yuki-san y Serizawa-san?" Los dos estudiantes se volvieron hacia la voz y encontraron a la asesora del club caminando hacia ellos con Naruto a su lado.
"¿Oh? ¡Hola, ustedes dos!" Naruto agitó su mano antes de notar sus dedos entrelazados.
Yukiha comenzó a entrar en pánico cuando su rostro se puso pálido, no queriendo que la persona que le gustaba tuviera un malentendido.
Intentó retirar la mano pero Aida la apretaba con fuerza.
Yukiha hizo una mueca y dejó escapar un pequeño grito al sentir las garras del chico clavándose en su piel.
"Yuki-san, Serizawa-san, ¿saben que tener una relación está prohibido en nuestra escuela, verdad?" La maestra reprendió con los puños en las caderas.
Luego, la pareja apartó sus manos lentamente y Yukiha se frotó la marca de la garra en su mano.
Luego, Naruto discretamente le entregó a la niña una tirita y un antiséptico mientras la maestra reprendía al otro niño.
¿Por qué tenía esto con él?
Porque la gente en este mundo se lastima fácilmente.
"G-Gracias, Naruto-kun..." susurró Yukiha con cara nerviosa.
Naruto sonrió antes de volverse hacia su maestro.
"Vamos, vamos, sensei, ¿no deberíamos ir a la última tienda? ¡Aquí tengo hambre y me muero por ramen!" la rubia se quejó.
Ayako suspiró antes de volverse hacia los estudiantes.
Como mujer, quería pasar su tiempo con Naruto, pero como maestra, ahora tenía que vigilarlos a los dos.
Por lo tanto, la situación lógica era...
"¿P-Podemos ir contigo, Takamine-sensei?" Yukiha preguntó fervientemente para sorpresa de Aida ya que el niño esperaba que su amigo y maestro se fuera sin ellos.
Ayako parpadeó.
"Sí, es una buena idea. Además, recuerdo que ustedes tres necesitaban comprar algo para la biblioteca, ¿correcto?"
Yukiha asintió con entusiasmo.
"Ya terminamos y tal vez podamos ayudar a Naruto-kun con sus propias compras".
La rubia se quedó inexpresiva.
Finalmente, los cuatro decidieron ir juntos hasta que Naruto vio a alguien que conocía, aunque la chica era de otra clase y parecía tener una clase extra por cómo vestía su uniforme el sábado.
Sin embargo, lo que le molestaba era que la chica tenía novio, Hiroki Mori, el hermano de Kanoko si no se equivocaba.
Luego, la rubia vio a los dos entrar a un callejón y la niña parecía preocupada al borde de llorar mientras el estudiante transferido de piel negra sonreía.
Yukiha notó hacia dónde miraba Naruto antes de seguir su línea de visión con una mirada horrible.
"¿¡POR MIERDA!? ¿¡EN SERIO!? ¿¡QUÉ MIERDA!?" Kurama rugió dentro de Naruto con molestia mientras el rubio asentía.
"Uh, hola chicos, vi a alguien que conozco y voy a saludarla un momento, ¿pueden ustedes tres esperarme aquí?" Dijo Naruto con una sonrisa.
La maestra y Aida levantaron una ceja antes de asentir con la cabeza.
Naruto luego abandonó rápidamente el grupo.
Después de uno o dos minutos, mientras Ayako y Aida entraban al café, Yukiha les dijo que quería comprar algo para su madre en una tienda cercana.
Aida quería acompañarlo pero como Yukiha le dijo que es solo para niñas, el chico cedió.
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En un callejón oscuro, una niña estaba siendo manoseada mientras aún vestía su uniforme.
Luego, el estudiante transferido le metió una pastilla en la boca usando la suya, haciéndola tragarla.
Su cuerpo comenzó a calentarse y el chico sonrió lascivamente y estaba a punto de proceder a arrancarle la camisa hasta que fue golpeado por una patada circular en el costado.
La estudiante abrió los ojos entrecerrados temblorosamente mientras sentía que su cuerpo comenzaba a sentirse más y más caliente por cada segundo que pasaba antes de sentirse atraída hacia el marco más grande de Naruto.
"¿N-Naruto-san?"
"Oye, Nao, ¿no? No te preocupes, ahora estás a salvo, te llevaré de regreso con tu novio". La rubia la tranquilizó.
La chica que ahora era conocida como Nao asintió lentamente antes de que sus manos comenzaran a frotar su cuerpo y olerlo.
'Él... es increíblemente musculoso... A diferencia de Hiroki-kun... no por el resultado de ir al gimnasio... más bien... tiene una constitución natural...'
"¡Bastardo!" John se levantó mientras se frotaba el costado.
Luego, el chico le lanzó un uno-dos a Naruto mientras el rubio los esquivaba fácilmente y le lanzaba un gancho en la mandíbula.
Escucharon un fuerte crujido por ese golpe y Naruto tuvo que hacer una mueca de dolor.
'¡Mierda! ¡Le golpeé demasiado fuerte!'
"¡Buen viaje! ¡Golpéalo más fuerte!" Dijo Kurama con palomitas de maíz en la mano.
Naruto sudó una gota ante el Biju.
Luego, John gimió de dolor mientras tosía sangre.
La rubia entonces sintió que Nao frotaba sus pechos tetonas contra él de arriba a abajo.
"¿Nao-chan? ¿Estás bien? ¿Te hizo algo?" Preguntó Naruto preocupado mientras se agachaba al nivel de los ojos de la chica.
"La han drogado. Afrodisíaco, probablemente." Adivinó Kurama.
"Tan grande... me dividirá... ¿es realmente japonés? Es incluso más grande que el de John cuando se presionó contra mí... y ni siquiera es difícil todavía..." murmuró Nao en voz demasiado alta. para que Naruto lo escuche.
Naruto se quedó inexpresivo mientras Kurama aullaba de risa.
Era de esperarse ya que era un Uzumaki y el Uzumaki tenía una resistencia y longevidad increíbles. Sin mencionar que son bestias en la cama.
Y si pudiera, el Biju le habría dado a Naruto algo más que Chakra.
Kurama todavía se preguntaba cómo diablos logró el bastardo rubio satisfacer a su anterior anfitrión. ¿Selló algo de su lujuria o algo así?
Luego, el rubio presionó su palma derecha, que tenía la marca del sol, en la frente de Nao antes de empujar un poco de su chakra para limpiarla de la droga.
Cuando Nao comenzó a recuperar la cordura, su rostro se puso rojo atómico al recordar lo que dijo en voz alta.
"¡N-N-Naruto-san! ¡Por favor, olvida lo que dije!"
"Lo sé, lo sé..." La rubia sudaba antes de continuar. "Yukiha-san, puedes salir ahora..."
Luego dicha chica salió de detrás de las cajas.
"N-Naruto-kun..."
"Llegaste en el momento adecuado, ¿puedes llevar a Nao-chan con Sensei? Solo di que la conociste hace un momento y le pediste que se uniera a nosotros".
Yukiha asintió sin dudarlo.
"¿Y qué le harás?"
Los ojos de Naruto se entrecerraron hacia las dos chicas ante la mención del estudiante caído.
Sintieron un escalofrío en la columna, aunque no era de miedo, sino de emoción.
Ambas chicas se frotaron los muslos detrás de las faldas cuando sintieron que su ropa interior formaba una mancha húmeda.
Los labios de Naruto se abrieron, mostrando su colmillo como sonrisa.
"Me aseguraré de que sea deportado a dondequiera que haya venido".
Luego, los dos asintieron con miradas nerviosas mientras salían del callejón antes de mirar a Naruto una vez más.
"Es tan sexy..." murmuró Nao.
"Estoy de acuerdo..." añadió Yukiha antes de girarse hacia la chica más joven. "Y... ¿es cierto lo que dijiste?"
Nao asintió con las mejillas enrojecidas.
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Unos minutos más después, Naruto se reunió con el grupo antes de que escucharan los gritos de los peatones.
En uno de los edificios había una enorme imagen impresa del rostro de John y palabras que decían que había intentado violar a una niña.
El propio John estaba atado a un poste en lo alto del edificio.
El niño parecía golpeado, negro y azul e incluso había sangre goteando de sus pantalones, cortesía de Naruto pisoteando su polla hasta convertirla en papilla.
No pasó mucho tiempo hasta que la parte autorizada, también conocida como la policía, bajó al niño y enrolló pancartas impresas.
Naruto se cruzó de brazos frente a él con una mirada engreída antes de notar que dos chicas lo miraban con asombro y emoción.
Les guiñó un ojo, haciendo que los dos se dieran la vuelta con las mejillas quemadas.
Otra mujer también lo miraba con complicidad pero la rubia la ignoró, fingiendo no saber nada.
Después de eso, reanudaron sus compras y Nao se unió a ellos.
Mientras tanto, Aida había renunciado a confesarse con Yukiha ya que no había ninguna posibilidad para él después de ver la mirada anhelante que la chica le dio a su mejor amigo.
Quería llorar, pero al menos sabía que ella se había enamorado del hombre adecuado.
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Al final del viaje de compras, Naruto les dio a cada una de las chicas un llavero con la forma de la cara chibinizada de Kurama para la ira de Biju como regalo.
Lo aceptaron de todo corazón antes de que ambos chicos los llevaran a cada uno de sus hogares.
Naruto no estaba realmente preocupado ya que esos llaveros eran en realidad sus clones transformados para protegerlos.
Finalmente, Naruto llegó a su propio apartamento y estaba a punto de salir del ascensor hasta que un hombre gordo vestido con traje de negocios chocó contra él mientras este último murmuraba sobre Hisato.
"¡Oye! Mira dónde estás!" El hombre mayor hizo una pausa mientras miraba hacia arriba para encontrar los ojos rojos entrecerrados de Naruto mirándolo.
"Joder, conoces a dos de estos bastardos en un día... ¿Cuál es la posibilidad? Y para agregar, estaba hablando de 'secretaria privada' y 'Hisato'..."
"¡Lo siento por eso!" Naruto sonrió falsamente al hombre antes de pasar junto al gordo petrificado.
Cuando Naruto se fue, el hombre cayó de rodillas, inhalando desesperadamente aire.
Sintió un miedo primario con solo mirar esos ojos rojos y se preguntó si el rubio más alto de antes se había enterado de su plan.
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En el pasillo, Naruto notó que la futura matriarca de la familia Azuma estaba suspirando en el balcón.
"¡Buenas noches, Hisato-san!" Naruto saludó a la mujer mayor, con una de sus manos ocupada con sus bolsas de compras.
"B-Buenas noches, Naruto-kun." respondió ella con una pequeña sonrisa grabada en su rostro.
La rubia alzó una ceja.
"¿Estás bien?"
Hisato solo le sonrió a la rubia por preocuparse por ella.
"¿Se trata de ser secretario privado del gordo de antes?"
La mujer abrió mucho los ojos instintivamente.
"Me choqué con el cerdo antes cuando salí del ascensor..." Naruto se encogió de hombros antes de fijar sus ojos en los de la mujer mayor. "¿Alguna vez te hizo algo?"
Hisato se estremeció.
No, no fue miedo.
Nunca había visto una mirada tan poderosa en toda su vida y sintió que estaba desnuda bajo ella.
Inconscientemente, su respiración comenzó a acelerarse y sus piernas se frotaban entre sí.
Unos segundos más tarde, los labios de Hisato se separaron antes de contarle al rubio lo sucedido.
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Con Ayako que acababa de terminar de ordenar sus cosas.
Recibió un mensaje de uno de los miembros del personal de la escuela, el subdirector.
La mujer chasqueó la lengua antes de abrir el mensaje con irritación.
Para su sorpresa, era la foto de ella y Naruto pasando el rato con su brazo entrelazado con el de él cuando se encontraron.
Ella jadeó antes de cubrirse la boca con pánico y se puso pálida.
"Si no quieres que esto se informe al director, ven a verme mañana a la escuela". Llegó otro mensaje, haciéndola palidecer aún más.
Pero ella no era una idiota.
Es cierto que Ayako conocía las consecuencias de lo que estaba haciendo, pero no iba a seguir los deseos del subdirector.
Iba a dejarlo así y vería qué pasaba el lunes.
Sin que la mujer lo notara. Naruto suspiró al ver el mensaje.
'Simplemente lo sabía...'
El clon hizo otro clon antes de disiparlos silenciosamente para informar al original sobre el asunto.
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Con el Naruto original, se enojó después de escuchar lo que le dijo Hisato.
Al parecer, el gordo de antes la chantajeó para que se convirtiera en su secretaria privada y así cubrir la pérdida de millones de efectivo.
Su esposo salió a buscar alguna forma de pagarle a la empresa mientras Hisato estaba sola poco después de que la pareja hablara.
Actualmente, Naruto estaba solo con la mujer en la sala de estar de la pareja mientras Hisato se quedaba dormido en su regazo.
"Los humanos, me dan asco..." gruñó Kurama con odio.
Naruto asintió mientras acariciaba la cabeza de la mujer.
Fue entonces cuando recibió la noticia de su clon.
"¡¿Maldita sea, el subdirector?! ¡Sabía que deberías haberlo convertido en tu perro faldero cuando pusiste al director bajo tu ilusión!" rugió Kurama.
Naruto suspiró.
Parecía que habían reservado todo el domingo para "disciplinar" a dos cerdos.
Luego escuchó a Hisato retorcerse en su regazo.
"Mmmnnnmm... Naruto-kun... como..."
La rubia y el Biju parpadearon antes de que este último se riera a carcajadas de su sonrojado anfitrión.
Continuará