Todo esto sucede antes de Shibuya, ni siquiera sé si voy a incluir Shibuya. Vamos, ni siquiera sé si lo voy a terminar (?).

PD: no hay guiones largos porque #no

Megumi no sabe qué sentir en esos momentos, realmente. Sólo sabe que si ve a Yuuji y su cara llena de preocupación y angustia le van a dar unas ganas tremendas de agarrarlo a trancazos y eso no ayudaría en nada. Solo llamaría la atención de las personas en la cafetería y pues ya tienen suficientes problemas como para agregar otro.

Mejor cerró los ojos, y apretó un poco más los puños en sus brazos cruzados.

Estaban de misión, una serie de maldiciones grado 3 de las que se tenían que deshacer sin problemas y en poco tiempo. Así aprovecharían la vuelta y se irían de compras más por insistencia de Nobara que porque los otros realmente quisieran comprar algo, pero Yuuji siempre le seguía la corriente y Megumi no los iba a perder porque para encontrarlos luego sería una chinga y mejor se ahorraba eso.

Pero Nobara vomitó. Y Megumi lo hubiera tomado con tranquilidad, no era la primera vez, antes de salir también había vomitado y un día antes habían pedido comida de fuera. Un virus que se le pegó y ya. Nos vamos temprano, que Shoko la vea y se acabó.

Y entonces vio la cara de Yuuji. Yuuji que si bien no era ajeno a preocuparse por alguien en problemas en esos momentos lucía genuinamente asustado. Una reacción bastante exagerada para Megumi. Pero pues Yuuji a veces tendía a exagerar. O sea, no había nada que preparara a Megumi para lo que salió de la boca de Yuuji después de ver a Nobara empinada vomitando sobre un bote.

"Nobara, ¿cuándo fue la última vez que te bajó?"

Megumi no le partió la cara en ese momento porque desconocía el antecedente y porque en serio pensó que era Yuuji siendo Yuuji.

Fue la reacción de Nobara la que le dio toda la información que necesitaba.

Como pudo la chica se incorporó para ver a Yuuji con la mirada más amenazante que le había visto.

"No."

Su tono de voz fue tan salvaje y contundente que Megumi se quedó literalmente tieso. La chica volvió a vomitar y Yuuji se le acercó pero lo que sea que se hayan dicho o hecho no lo terminó de procesar porque no podía ser cierto ¿o si? O sea, Yuuji es medio distraído y Nobara a veces cuando se le ocurre algo ni como hacerle para quitárselo de la cabeza pero… no. No podía ser, porque para que fuera eso ambos tendrían que haber… había muchos pasos de por medio para llegar A ESO, Y Megumi no se explicaba cómo esos dos le había hecho para pasarlos todos o saltarselos. Pero…

"¿Cuánto tienes vomitando, Nobara?" fue lo primero que preguntó porque necesitaba tener respuestas y no suposiciones.

"Desde ayer."

"¡Yuuji!"

Antes de seguir Nobara volvió a vomitar pero Megumi sólo podía ver a Yuuji. Yuuji y su miedo tatuado en la cara, pero sobre todo la culpa.

Megumi sintió un dolor de cabeza repentino. Después investigaba el por qué y los cómo. Había un problema de momento con una solución clara. Así que después de asegurarse de que Nobara no fuera a vomitar otra vez los sacó de ahí y buscaron la farmacia más cercana. Entró solo, porque no tenía ganas de andar exponiendo a una fúrica Nobara a la juzgona mirada de los empleados del local y porque Yuuji parecía estar lidiando con otros problemas en su cabeza. En serio esperaba que uno de esos problemas no fuera Sukuna. Ya era demasiado por un día…

Salió con una prueba de embarazo y una botella de un litro de agua. Nobara le quitó la botella con brusquedad, y empezó a beber. Media hora después estaban sentados en una cafetería. Él con un café, Yuuji con una malteada sin beber y Nobara seguía en el baño. Se estaba tardando mucho y eso no auguraba nada bueno, para nadie.

"Megumi…"

"¿Qué?"

"Si Nobara esta…"

"Yuuji, lo que sea que pasé Nobara nos va a decir, así que guarda silencio."

Porque si Nobara estaba embarazada, sí en serio esos dos habían cometido semejante estupidez, Megumi no sabría qué hacer. Sabía que había opciones, pero cuando trataba de formularlas en su mente no aparecían, era como ver a un túnel oscuro cuyo final no es apreciable. Su mente no podía imaginar posibilidades más allá de lo que fuera que arrojara la maldita prueba.

Escuchó la exhalación de Yuuji y levantó la vista. La respuesta estaba ahí, en los ojos hinchados de Nobara y lo fuerte que agarraba la prueba en su mano izquierda. Ella sólo caminó hasta ellos, sus labios una fina línea recta y sin quitarles la mirada encima simplemente llegó, azotó la prueba contra la mesa y salió de ahí, paso firme y sin mirar si la seguían o no.

Yuuji fue detrás de ella. Megumi, detrás de los dos.