Resumen: Un plan elaborado y minucioso de doce meses será lo único que necesitarán estos doce amigos para hacer que Draco y Harry estén finalmente juntos. Después de todo, ellos ya se han hartado de verlos suspirar el uno por el otro; y visto y considerando que ni Draco ni Harry están dispuestos a dar el primer paso, es hora de que ellos intervengan. DRARRY.

Disclaimer: el universo de Harry Potter no me pertenece, todo es propiedad de Rowling y Warner Bro.

Notas de autora: ¡Hola a todos! ¡Ffeliz Navidad súper atrasada! Sí, no están viendo mal. Después de la serie de tres partes que publiqué este año (¡¿Qué?! ¿Qué todavía no has leído la serie "Constelaciones"? ¡¿A qué esperas?! ¡Ve a mi perfil y disfruta de un Longfic lleno de Drarry!) he vuelto con otro fic Navideño. El mismo contendrá catorce capítulos como mínimo y ya tengo los bosquejos de qué escribir en cada uno, pero me falta redactarlos. De todos modos, quería comenzar a subirlo como regalo de Navidad para todos ustedes. Ahora sí, los dejo leer el prólogo de esta historia.

Advertencias: esta historia estará plagada de situaciones graciosas (o, al menos, que lo intentan ser), amigos y familiares de Harry y Draco HARTOS de verlos suspirar por el otro, y a un Harry siendo completamente despistado y en negación de sus sentimientos. Además, veremos al monstruo de los celos que vive en el estómago de Harry en, prácticamente, casi todos los capítulos. Así que, en resumidas cuentas, las risas están aseguradas. Además, esta historia fue escrita mientras escuchaba la canción You Make It Feel Like Christmasde Gwen Stefani y Blake Shelton. Así que, si les gusta escuchar música mientras leen, se las recomiendo porque acompaña muy bien con la temática alegre del fic.


Código Navidad

Prólogo

30 de diciembre de 2010

Doce personas se encuentran reunidas alrededor de una vieja y desvencijada mesa en una casa de varios pisos que tiene desniveles algo peculiares. ¿El motivo de la reunión? Simple. Idear un plan infalible y a prueba de fallas en el cual los participantes de esta agrupación puedan conseguir aquello que más anhelan en este momento. ¿Y qué es eso que estas buenas y desconocidas personas desean? Nada más y nada menos que dejar de escuchar a sus respectivos amigos suspirando el uno por el otro y sin hacer nada para remediar esta situación.

Verán, es sabido por todo aquel que tenga un mínimo de materia gris en su cerebro que Harry James Potter, héroe indiscutido del mundo mágico, está total e irremediablemente enamorado de Draco Lucius Malfoy. Asimismo, es de igual conocimiento a nivel mundial el hecho de que Draco Lucius Malfoy corresponde firmemente a los sentimientos que Harry tiene por él. Entonces, si ambos están tan enamorados el uno del otro, y esto es algo que podría ver incluso un muggle sin conocimiento de estos dos magos, ¿por qué Draco y Harry todavía no tienen su final feliz juntos?

Eso, mis queridos lectores, es exactamente lo mismo que se están preguntando las personas que se encuentran reunidas en esta casa vieja y acogedora ubicada en el pintoresco pueblo de Ottery St. Catchpole, mayormente conocida como La Madriguera.

─Muy bien. Ahora que todos estamos aquí, voy a dar inicio a la reunión. ─Comienza diciendo una joven de abultada cabellera castaña, lo cual hace que se detengan de inmediato todas las conversaciones que se están dando alrededor de la mesa. Una vez que la mujer comprueba que tiene la atención de todos, se aclara la garganta y procede con la reunión. ─Como todos saben, nos hemos reunido aquí para poner fin a una absurda situación que ya se ha extendido más de lo debido.

La joven de abultada cabellera observa cómo sus compañeros asienten con cansancio y algo que comienza a parecerse a la exasperación. Sabiendo que una mueca similar debe estar plasmada en su rostro, y sin tener la intención de extender esta reunión más de lo debido, la joven mujer procede con el plan que ha ideado para poner fin a sus tormentos.

─Y creo que todos estamos de acuerdo con el hecho de que ninguno de ellos parece querer dejar de lado sus inseguridades para dar el primer paso. ─Todos los presentes vuelven a asentir, rodar los ojos con molestia e, incluso, pueden oírse varios bufidos repletos de hartazgo. Al ver que todos parecen estar comprometidos a unirse a la causa, la chica procede con la explicación del plan que los hará librarse de esta tortura. ─Por lo tanto, creo que la única forma que tenemos de deshacernos de esas miradas anhelantes que se lanzan el uno al otro…

─¡Y no te olvides de los eternos monólogos acerca de cada cosa que haga el otro!

Un joven alto, atractivo y de tez morena interrumpe a la joven de cabello castaño para aportar este hecho que, al parecer, todos los presentes han tenido que sufrir en algún momento de sus vidas, si los gemidos de dolor y frustración que se empiezan a escuchar alrededor de la mesa son indicativos de algo.

─Estoy contigo, compañero. ─Suelta un hombre alto y pecoso de nariz bastante larga, a la vez que jala su cabello pelirrojo con remarcada irritación. ─Si tengo que escuchar a Harry una vez más hablar sobre lo alto que es Malfoy en comparación con él y cómo el idiota pomposo parece haberse vuelto más atractivo, creo que voy a enloquecer.

Una serie de "¡Sí! ¡Tienes razón, Ron!" y de "¡Merlín! ¡Draco es igual de molesto que Potter!" se alza en la cocina en la que se encuentran reunidos para brindarle apoyo a las palabras de Ron y, por qué no también, para compartir la frustración que sienten por la desesperante situación a la que se ven sometidos todos los días; y a pesar de que la joven de abultada cabellera está completamente de acuerdo con todo lo que se está diciendo en estos momentos, ella entiende que nada productivo saldrá de que continúen perdiendo el tiempo. Para retomar la atención de todos, la chica mueve su varita y conjura un pequeño martillo de madera. Luego, lo golpea sobre la vieja mesa para llamar la atención de todos. Su idea parece funcionar, porque la gran mayoría se gira hacia ella y la observan con atención y distintos grados de confusión. Sin embargo, la única persona que se atreve a cuestionar este hecho es una dama delgada y muy bella que tiene una larga cabellera rubio platinado.

─¿Por qué está golpeando un martillo sobre la mesa, señora Granger-Weasley?

La joven de abultada cabellera se sonroja ante esa pregunta, sin embargo, no se amedrenta y aclara su garganta. Luego, deja el martillo sobre la mesa y procede a explicarle a la bruja sangre pura ese comportamiento que tan extraño le ha parecido. ─Por favor, Hermione está bien, señora Malfoy; y en cuanto al martillo, es algo que solían hacer los jueces muggles para llamar al orden en un juicio. Fue lo primero que se me ocurrió hacer para que volvamos a prestar atención al plan que vinimos a poner en marcha.

La señora Malfoy eleva una pulcra ceja en una viva imagen de la que su hijo suele hacer, demostrando con ello que esa explicación que ha recibido le parece de lo más extraña; y así se lo hace saber a Hermione con palabras.

─Que… dato curioso; pero tienes en claro que podrías haber obtenido el mismo efecto dramático con un simple hechizo Sonorus, ¿verdad, Hermione? ─Narcisa dice esto con un tono educado, lo cual deja entrever que, en realidad, ella no está tratando de hacer sentir mal a Hermione por haber sacado a relucir su ascendencia muggle. Sin embargo, eso no evita que Hermione se sonroje tan salvajemente que su pálido rostro adquiere un preocupante tono escarlata. Narcisa, por su parte, sonríe con amabilidad y deja salir unas últimas palabras con un refinado tono que evidencia la clase alta de la que proviene. ─¡Oh! Y por favor, puedes llamarme Narcisa, si gustas. Después de todo, es cuestión de tiempo antes de que nuestras familias se unan.

Hermione asiente para hacerle saber que está de acuerdo con dejar las formalidades de los apellidos detrás, y luego de que el embarazoso momento pasa, retoma la palabra en ese mandón tono que tanto la caracteriza.

─Muy bien. ¿En qué estábamos? Ah, sí, en el plan para unir a Harry y a Draco de una vez por todas.

Hermione mueve su varita en una floritura y ante ella aparece un pequeño folleto con un fondo navideño en el cual resaltan adornos, ramas de acebo, regalos navideños, estrellas y copos de nieve. El folleto carece casi por completo de texto, excepto por un número en específico y dos palabras que han sido escritas en letras de color rojo, las cuales rezan "Código Navidad". Hermione agita su varita nuevamente, y los folletos se elevan de la mesa y comienzan a distribuirse hacia cada uno de los presentes. Una vez que cada uno de los participantes de la reunión tiene uno de ellos en sus manos, comienza a explicarles su plan.

─Lo que tienen allí es el nombre del plan para unir a Harry y a Draco. "Código Navidad", en realidad, sólo es la sigla que se me ocurrió darle al plan denominado: "Compañeros Obligados Diaria e Ininterrumpidamente a Gestionar Odio-amores, No Aceptamos Vivir Insufribles Días de Anhelante Deseo". ─Hermione hace una pausa para tomar aire después de recitar el nombre extremadamente largo del plan. Narcisa, al percatarse de que la joven parece haberse quedado sin aliento, conjura un vaso de agua y se lo extiende para que pueda hidratar su garganta. Con una agradecida mirada, Hermione toma el vaso y comienza a beber, pero parte de éste pasa por el lado incorrecto de su garganta cuando escucha a su esposo reír y decir algo que arranca carcajadas y algunas miradas curiosas por toda la cocina.

─Bueno, al menos la sigla de esta organización no tiene un nombre divertido como la PEDO para liberar a los elfos domésticos.

─¡No es PEDO, Ron! ¡¿Cuántas veces tengo que decírtelo?! ¡Es P-E-D-D-O! ¡Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros!

Hermione suelta esto en una especie de grito ultrajado y se cruza de brazos con enfado para mostrar su disgusto, aunque esto no parece intimidar a nadie. Por el contrario, la mayoría de los presentes comienzan a reír descontroladamente. Al ver que nadie parece estarse tomando esto en serio, y teniendo en claro que el tiempo se les agota, Narcisa se aclara la garganta remilgadamente, y dice: ─Por mucho que me gustaría conocer más sobre esta "Plataforma en Defensa de los Derechos Élficos", creo que deberíamos retomar la conversación al motivo por el cual estamos reunidos aquí.

─¿Ves, Hermione? No era tan difícil hallar un nombre mejor que PEDDO. La sigla que dijo Narcisa, P-E-D-D-E, te habría ahorrado varias bromas al respecto.

Estas palabras son dichas por una chica pecosa y pelirroja que no deja de soltar risitas detrás de la mano que tiene cubriendo su boca. Hermione, por su parte, le lanza una mirada ceñuda a su cuñada, y retoma con la explicación de su plan.

─Sí, muchas gracias, Ginny, por ese aporte completamente inútil e innecesario.

─Siempre feliz de serte de utilidad, querida cuñada. ─Dice Ginny regalándole a Hermione un gesto de saludo militar que hace reír a varios en la mesa.

─¡¿Podemos volver a hablar de lo que es importante aquí?! ¿Qué vamos a hacer para unir a Draco y a Potter, Granger?

Estas palabras salen de una bajita joven de cabello negro a la altura de los hombros. A su lado, el atractivo moreno, y que había sido el responsable de comenzar esta serie de interrupciones, asiente firmemente para brindarle su apoyo. Hermione suspira aliviada al ver que aún no ha perdido por completo el rumbo de esta reunión y comienza, finalmente, a explicar los pormenores de su plan.

─Bien, como estaba comentándoles, este es el plan que llevaremos a cabo para reunir a Harry y Draco. El plan es simple, y cada uno de nosotros tendrá un mes asignado para encargarse de cumplir con su parte.

─¿Por qué tendremos un mes para cumplir con nuestra parte? ¿No sería mejor terminar esto mucho más rápido? ─Pregunta un regordete hombre que tiene una mancha de tierra en una de sus mejillas y lo que parecen ser hojas de una planta en su cabello.

─No seas tonto, Longbottom. No podemos ser tan obvios con nuestras intenciones, o eso hará que Draco y Potter se pongan a la defensiva.

Neville se sonroja al haber quedado en evidencia por la joven de cabello negro a la altura de los hombros, y esto hace que Hermione le lance una mirada reprobatoria a la chica. De nada serviría que comiencen a discutir entre ellos, a pesar de que ésta haya estado en lo cierto. La pregunta de Neville ciertamente había sido muy tonta.

─Agradecería que dejáramos los insultos de lado, Parkinson. ─Suelta Hermione con una molesta mueca dirigida hacia la chica en cuestión. Luego, se gira hacia Neville, y le explica con paciencia el motivo por el cual no pueden hacer como él dijo. ─No podemos hacer eso, Neville, porque, como bien dijo Pansy, Harry y Draco siempre están a la defensiva cuando intentamos hacerles ver que se aman. Es por ello que, si queremos tener éxito, tenemos que actuar con astucia. Debemos ir plantándoles la idea en sus densas cabezas, pero de manera tan sutil que, para cuando acepten la realidad que todos ya hemos visto, ellos creerán que lo han descubierto por sí mismos; y no debido a que habremos estado machacándoselas en sus cerebros durante meses.

─¡Oh! Tienes razón, Hermione. ─Dice Neville con un rostro lleno de comprensión. Sin embargo, esto no dura mucho, ya que nuevamente se llena de confusión al notar un número debajo de la palabra "Código Navidad". No teniendo idea de qué significa el siete que tiene en su folleto, y después de notar (mediante un rápido vistazo al resto) que todos tienen números diferentes al de él, pregunta: ─Siento preguntar algo que quizás es obvio para el resto, pero, ¿qué significa el número que tiene el folleto?

─¡Me alegra que lo preguntes, Neville! ─Dice Hermione con emoción, mientras se enfrasca en una extensa explicación sobre el plan que estas doce personas llevarán a cabo para darles un final feliz a dos de sus queridos amigos. ─El número que tienen en su folleto representa al mes que tendrán para cumplir con su parte del plan. En tu caso, Neville, como tienes el número siete, eso quiere decir que tendrás que realizar tu misión en julio.

Y con eso dicho, Hermione termina de contarles su plan, quitar las pocas dudas que algunos de los presentes aún tengan, y de afinar los últimos retoques para tener el éxito asegurado; pero, ¿será esto suficiente para unir a Harry y a Draco? ¿O Hermione habrá subestimado lo despistados que son estos dos tortolitos?

¡Merlín! ¡Que la magia de la Navidad los ayude! Parece que estas doce personas están en graves problemas.


Notas finales: espero que les haya gustado el comienzo de esta historia. Sepan que pueden dejarme todas sus opiniones en un comentario. Trataré de ir actualizando lo más pronto posible y más de una vez por semana, pero de no poder hacerlo, sepan que siempre tendrán al menos una actualización por semana.

Ahora sí, antes de despedirme, les deseo a todos un feliz año nuevo. Que este 2024 nos traiga a todos mucha salud, amor y buenos momentos. Abrazo a la distancia y nos leemos en el próximo capítulo.