Víctor ha estado metiendo bolsas de compras en el apartamento y Yuuri no puede ignorar la creciente sensación de terror que acecha junto a su curiosidad.
Yuuri está leyendo en el sofá con Makkachin sobre su regazo la cuarta vez que ve a Victor arrastrándose desde el vestíbulo a la oficina—las bolsas de papel arrugadas contra sus muslos. Yuuri deja su libro con el lomo todavía roto y susurra: "Ve a saludar".
Makkachin salta del sofá como si hubiera sido magnetizada y tira a Víctor al suelo. Las bolsas vuelan por todas partes en una ráfaga de papel de seda y... ¿eso es tweed?
Yuuri corre hacia la escena del crimen, recogiendo un suéter de cachemira verde con coderas de caoba.
"Vitya, ¿qué es esto?" Yuuri está sosteniendo el suéter en cuestión, así como una chaqueta de tweed de espiga azul y gris, "¿Decidiste que querías ser Sherlock y Watson para Halloween?" Mira los restos de ropa que están esparcidos por el suelo, "Creo que olvidaste la pipa".
Víctor se lo arrebata de la mano a Yuuri y lo mete de nuevo en la bolsa, con el rubor manchado sobre la parte superior de sus pómulos. "¡Estoy probando una nueva apariencia!"
El ojo izquierdo de Víctor tiembla, lo que indica claramente que está mintiendo.
(Víctor lo odia. Provoca arrugas).
"¿En serio?" Yuuri arquea una ceja. Si no lo estaba antes, ahora está absolutamente seguro de que Víctor está tramando algo.
"Sabes que me encanta sorprender a la gente", guiña un ojo Víctor a través del tic. Yuuri desearía haber tenido su teléfono disponible para poder inmortalizar esa expresión facial en Instagram.
"¿Sabes lo que realmente me sorprendería?" Yuuri ronronea, acariciando el cuello de Victor. Víctor hace un ruido ininteligible entre un chillido y un gemido.
(Estos son los días en que Víctor se las arregla para superar sus sentimientos encontrados acerca de asignarle "Eros" a Yuuri. Se ha vuelto demasiado poderoso y Víctor está indefenso. Así es como Yuuri ganó la pelea para mantener ese horrible empate.) "
Una verdadera sorpresa sería si me lo dijeras". "La verdad", el aliento de Yuuri es caliente contra la oreja de Víctor y Víctor siente que sus rodillas se bloquean, un mecanismo de defensa para evitar que se doblen por completo.
"¿Qué tal si te lo muestro?" Víctor intenta igualar el tono de Yuuri pero fuerza demasiado aire a través de su diafragma y su pregunta sale más como un silbido que un susurro.
Yuuri se aleja de la oreja de Víctor, pero permanece lo suficientemente cerca como para provocar un rayo por el brazo de Víctor con las yemas de sus dedos mientras los recorre desde la muñeca hasta el codo. "Está bien", está sonriendo, pero son todos dientes, como si quisiera comerse a Víctor vivo.
(Y Víctor está más que feliz de desempeñar el papel de festín.)
Víctor lanza miradas a cada una de las bolsas frente a él, agarra una de color azul claro y la arroja a las manos de Yuuri, arrastrando su palma por la parte baja de la espalda de Yuuri hasta enmascarar el hecho de que está huyendoa la oficina. Si esto va a funcionar, tiene que arreglar sus cosas.
Quince minutos después, está vestido con el suéter verde, la chaqueta de tweed, un par de pantalones gris oscuro y zapatos Oxford con punta de ala azul pizarra que resaltan los detalles azules de la chaqueta.
"¿Vitya?" Yuuri está tocando la puerta de la oficina justo cuando Víctor busca en su última bolsa para agarrar los accesorios: una regla, un trozo de tiza con una pequeña pizarra y una manzana roja brillante que se ve lo suficientemente buena como para comerla, si tienes el paladar. para apreciar la fruta de cera. Es un gusto adquirido.
Víctor abre la puerta con una mano mientras blande la regla con la otra. "Llega tarde a la oficina, Sr. Katsuki", ronronea Víctor mientras se choca mentalmente los cinco porque ha conseguido el tono perfecto.
(Por primera vez en toda la noche.)
"¿Es Katsuki-Nikiforov? Vitya qué...
Víctor ve el momento exacto en que Yuuri lo junta todo: el tweed, la regla, la pizarra, la manzana de cera que es casi tan odiosamente brillante como sus anillos de boda.
"¿Éste es el gran secreto?" Víctor podría haber escrito, y lo ha hecho, una enciclopedia completa analizando los pequeños cambios de las expresiones faciales de Yuuri Katsuki-Nikiforov. Pero no puede analizar el semblante actual de Yuuri, lo que hace que sus ya acelerados nervios se aceleren.
(Los fans de Yuuri han estado privados durante demasiado tiempo. Víctor está realizando un servicio público.)
Yuuri se acerca. Sus hombros se ven un poco tensos, pero Víctor está extasiado de que Yuuri esté usando el uniforme escolar que Víctor le había entregado.
(Se habían necesitado siete paquetes diferentes mal escondidos debajo de su abrigo y una novela de críticas furiosas en Amazon para encontrar el correcto).
"La chaqueta te queda bien", dice Yuuri, jugueteando con las solapas, "pero creo que luciría mucho mejor en el suelo".
Yuuri se aleja y Víctor inmediatamente extraña el calor de su cuerpo.
"Ahora que lo pienso, el mío también lo haría", continúa Yuuri, deslizando su chaqueta azul marino por sus hombros. Saca los brazos de las mangas uno a la vez, colgando la chaqueta cálida de un dedo antes de caer al suelo, donde se acumula junto a sus pies.
Víctor ni siquiera se da cuenta de que se ha lanzado hacia adelante hasta que Yuuri le advierte: "no tocar". Mantiene contacto visual mientras sus dedos desatan su (no espantosa, totalmente aprobada por Víctor) y luego continúa para abrir los botones de su camisa. Los zapatos, pantalones y calcetines pronto se unen a sus compañeros en un charco en el suelo. Víctor está de pie completamente vestido, tirando del cuello de su suéter mientras Yuuri se queda en calzoncillos. Yuuri se gira y camina a través de la puerta, con un movimiento deliberado de sus caderas.
"¿Vienes?" Yuuri se lanza sobre su hombro antes de continuar hacia su dormitorio.
Víctor corre tras él, despojándose de la ropa en el camino y dejando los accesorios olvidados en la oficina. Él viene muy pronto.
No es hasta que están acostados en la cama, con el sudor enfriándose en sus cuerpos, la cabeza de Yuuri apoyada en el pecho de Víctor, que Víctor se da cuenta de que todos sus accesorios y disfraces meticulosamente seleccionados están abandonados por todo su apartamento.
"¿Yuuri?"
"Mmmm", murmura Yuuri en el pecho de Víctor.
"¿Hiciste eso a propósito?"
Yuuri resopla y levanta la cabeza, con los ojos brillantes, la comisura izquierda de sus labios levantada en una sonrisa, "sí, absolutamente tenía la intención de tener sexo contigo. ¿Necesitamos repasar el consentimiento?
Víctor hace un puchero, pero pasa una mano por el cabello de Yuuri, arrastrando las uñas por su cuero cabelludo. Yuuri cierra los ojos y tararea de satisfacción.
"Bueno, me alegra que estemos de acuerdo en eso, pero me refiero a la… escena. El juego de roles. Me llevó mucho tiempo encontrar el uniforme adecuado".
"Sí, me di cuenta de eso por la ridícula cantidad de viajes de compras clandestinos que has estado haciendo".
"Sí, bueno... estaba... distraído antes", el rostro de Yuuri es adorablemente satisfecho, "pero me doy cuenta de que ignoraste los accesorios y el vestuario y simplemente te dirigiste directamente al sexo".
"No hay nada claro sobre lo que pasó aquí".
"Yuuuuri", se queja Víctor, "eres tan malo conmigo..."
"Sí, soy el peor marido que jamás haya existido por tener sexo contigo".
"—Quería interpretar a profesora y estudiante sexy, pero lo secuestraste con tu Eros—"
"Toda y cada una de las culpas por situaciones relacionadas con Eros se remontan a usted".
"—¡Y te gustó el juego de rol de piratas! Pensé que inclinarte sobre el escritorio sería caluroso—" Víctor monologa.
"Haría calor". Yuuri está de acuerdo.
"—Está bien, entonces ¿por qué estamos en la cama y no en la oficina?"
"¿Te detuviste siquiera para tomar un respiro?"
"Yuuri, por favor responde la pregunta", Víctor está haciendo su mejor imitación de Makkachin.
Yuuri suspira, "es vergonzoso".
"Me contaste sobre la vez que tu hermana te sorprendió besando tu póster de mi patinaje libre de 2009..."
"Te encanta mencionar eso".
"—Y la vez que tuviste que conseguir una nueva copia de mi anuncio de Calvin Klein de 2011 después de que una sesión de masturbación salió mal—"
"Me prometiste que no volverías a mencionar eso."
"—Además, te dije que la verdadera razón por la que me corté el cabello es porque me quedé dormido con chicle en la boca—"
"No creo que estén realmente al mismo nivel".
"—Entonces, ¿por qué no puedes decirme esto?"
Yuuri se esconde bajo las sábanas y se envuelve como un burrito. Víctor lo empuja. Y sigue empujándolo hasta que Yuuri sale disparado de su manta de tortilla para mirarlo.
"No puedo creer que alguna vez pensé que eras intimidante".
"Yuuuuuuuuuri".
"Bien. Sólo... es... uf."
"¿Sí?" Víctor lo golpea de nuevo.
"Cuando estaba en la universidad, perdí el horario de oficina de un profesor, pero pensé que aún podría estar allí. Y uh... digamos que tuve que tomar una clase extra ese semestre porque abandoné su curso en el último segundo".
"¿Por qué?"
"Obtuve mucha más información sobre la vida personal de ese profesor de la que jamás hubiera deseado".
Víctor estalla en una terrible carcajada que a Yuuri normalmente le encanta, pero tendría que excavar hasta el núcleo de la Tierra para encontrar ese sentimiento ahora mismo.
"¡Víctor! ¡Basta! No pude mirarlo a él ni al asistente técnico a los ojos al día siguiente. De alguna manera arruinó todo ese escenario como una fantasía potencial".
"¿Entonces te desnudaste para mí?"
Yuuri levanta la vista para ver a Víctor secándose las lágrimas de los ojos.
"Te odio."
Víctor lo aborda: "Yo también te amo".
2.
Yuuri revisa la excesivamente grande pila de juegos de mesa de Víctor. Aprueba ¿Qué debe hacer una dama? , No dejes que el bebé se quede ciego , Cita misteriosa , Clue , Mall Madness , Super Hero High , Monopoly y La espectacular pista de hielo de Victor Nikiforov . Espera, ¿cuál fue ese último? Se queda mirando la portada por un segundo antes...
"Vitya, ¿conseguiste la licencia de tu nombre para un juego de mesa?" ¿Cómo el adolescente Yuuri no se había enterado de esto?
Víctor se encoge de hombros, sin mirar hacia la mesa de refrigerios, donde está colocando las zanahorias pequeñas en una torre y dibujando una carita sonriente en sriracha sobre el hummus.
"Algo así como. Es sólo un prototipo, nunca entró en producción. De alguna manera, el patinaje artístico no se traducía muy bien en una pieza de cartón bidimensional".
"Wow, me pregunto por qué", Yuuri pone los ojos en blanco.
(Él ignora a todos los demás Yuuris (de 12 a 23 años) que gritan y sangran por la nariz en su cabeza.)
"Es una tragedia de la que nunca me he recuperado del todo", espera Yuuri que Víctor bromee, pero está bastante seguro de haber visto una lágrima caer en el hummus.
(Este es el hombre con el que se casó).
Yuuri saca Monopoly y deja a los demás a un lado. Se supone que es una cita nocturna, preferiría no tener que lidiar con que su marido rompiera a llorar.
Cuando Yuuri deja la caja sobre la mesa, el rostro de Víctor se ilumina, y luego se gira hacia Yuuri con una sonrisa tortuosa, "esa es una elección peligrosa. Nunca me han derrotado en Monopoly ".
Diez minutos de juego y Yuuri encontró el secreto de Víctor sobre su monopolio en Monopoly .
Víctor hace trampa. Y ni siquiera es sutil al respecto. Oh, él piensa que es sutil, su constante sonrisa es suficiente para que se sienta insoportablemente satisfecho con sus tácticas solapadas. Cualquier máscara que Víctor use para las conferencias de prensa y para manejar a sus fanáticos se derrite ante las pequeñas casas de plástico de colores primarios, y la pieza de metal del juego Scottish Terrier que agarra tan pronto como Yuuri levanta la tapa de la caja.
Cuando Víctor insiste en ser el banquero, Yuuri se da cuenta de que ha elegido el juego equivocado.
Cuando Víctor insiste en que Russian Monopoly permite a los jugadores cobrar 400 por pasar "Go", pero se niega a darle a Yuuri más de 200 porque "claramente estás jugando con reglas japonesas, Yuuri", Yuuri comienza a lanzar miradas anhelantes a Mystery Date .
Cuando Víctor insiste en que "en el Monopolio Ruso , una sola casa es en realidad un complejo de condominios, y como hay varios residentes que pagan alquiler, tienes que pagarme el doble por aterrizar en Park Place", Yuuri tiene que contenerse físicamente para no voltear el tablero. .
"Vitya, ¿tienes el libro de reglas?"
Víctor aprieta el fajo de papeles contra su pecho, "sí, pero está en ruso. ¿No sigues teniendo dificultades con tu comprensión lectora?
(Víctor sabe que Yuuri se graduó en Literatura Rusa).
"Víctor." Víctor se estremece ante el uso de su nombre completo. Si es necesario, Yuuri usará toda su fuerza y romperá el patronímico.
Víctor se sienta ante las instrucciones: "¡Oh, mira, han desaparecido! Qué trágico."
"Mmm, sí, casi tan trágico como el hecho de que tu juego de mesa nunca llegó a producirse". Mientras Víctor asiente con la cabeza sobre la tragedia del juego de mesa Nikiforov de 2006, Yuuri tira del cuello de su delgada y desgastada camisa gris, "¿Cambiaste la configuración del calentador?"
Víctor está contando los billetes que tiene en las manos. Por quinta vez. Su pila es al menos tres veces más grande que la de Yuuri.
"No, todavía debería ser 23".
"¿Está seguro?" Pregunta Yuuri, quitándose la camisa por la cabeza. Lo lanza de modo que forma un arco por encima de la cabeza de Víctor y aterriza en el sofá detrás de él.
La boca de Víctor se abre pero no logra formar palabras.
"Porque parece que aquí hay al menos 30 grados". Yuuri se quita sus suaves pantalones de dormir. Apenas llegan a sus tobillos antes de que Víctor ataque a Yuuri, volteando el tablero y esparciendo casas de plástico por todas partes.
"Esto dejará de funcionar eventualmente", Yuuri se acurrucó alrededor de Víctor y pasó sus manos por el cabello de Víctor.
"Seguro."
"Lo digo en serio."
"Y yo te creo", miente Yuuri.
3.
"¡Vitya, estoy en casa!"
"¡En la cocina!"
Solo tomó una semana de vivir con Víctor para darme cuenta de que, si bien Víctor es un excelente cocinero, es terrible limpiando después. Yuuri regresará a casa después de una sesión extra en el estudio de ballet con Lilia, o de jugar videojuegos con Yurio, para disfrutar de una comida de cuatro platos, y las ollas y sartenes del restaurante que lo acompañan apiladas en el fregadero.
A Yuuri no le importa ayudar con la cena limpiando después, simplemente no entiende por qué Víctor siente la necesidad de usar cada utensilio y sartén en su apartamento, incluso cuando solo está haciendo huevos.
(Hiroko siempre le había enseñado a Yuuri a limpiar mientras cocinaba. Cuando es su turno de preparar la cena, generalmente hay tres sartenes en remojo en el fregadero una vez terminada la preparación, y están listas para un ligero lavado cuando termine la comida).
Esta noche, Víctor preparó un festín con los platos sucios a juego.
"¡Yuuri!" Víctor se limpia las manos con jabón en la parte delantera de su delantal; lleva el que Chris le regaló en su último cumpleaños; rosa bebé con "Trophy Husband" escrito en el pecho con pedrería.
(Víctor también tiene un delantal azul que dice "El mejor padre de perro del mundo" y un conjunto de delantales a juego que había modelado según sus trajes de baile sobre hielo de Stammi Vicino. También consiguió uno basado en el disfraz de "Eros" para Yuuri. )
"¿Cómo estuvo la práctica?" Víctor deja un beso en la mejilla de Yuuri y lo guía hacia la mesa donde Víctor preventivamente sacó su silla.
El delicioso aroma del halibut con costra de macadamia, la coliflor machacada con ajo y las coles de Bruselas asadas golpea la nariz de Yuuri y lo último que quiere hacer es hablar de práctica.
"Está bien", dice alrededor de una boca de coliflor.
"Yuuuuri", Víctor se inclina hacia adelante, ignorando su propio plato para arreglar a Yuuri con una Mirada, "como tu entrenador voy a necesitar un informe mucho más detallado que ese".
"Después de la cena", murmura Yuuri, tomando su cuchillo para poder clavar el pescado.
(Había sido un ajuste volver a usar cubiertos con más frecuencia que palillos).
"Esa es una promesa vinculante", Víctor intenta impresionar a Yuuri con lo que Víctor llama su Cara de Entrenador. Yuuri se niega a decirle que eso sólo le hace parecer como si tuviera gases.
(Las horas que han pasado riéndose de la cara de entrenador de Víctor han cimentado la amistad de Yuuri y Yurio).
Después de la cena, Víctor coloca sus platos sucios encima de la precaria pila apilada en el fregadero. Luego envuelve sus brazos alrededor de la cintura de Yuuri, engancha su barbilla sobre el hombro derecho de Yuuri e intenta guiarlo hacia el sofá.
"Vitya, los platos".
"Podemos ocuparnos de ellos más tarde".
"Oh, ¿y cuándo es más tarde?"
"…¿mañana por la mañana?"
"¿Te refieres a cuando ignoramos la alarma de las 5:30, nos despertamos a las 6 y corremos a la pista?"
"Yuuuuuri", se queja Víctor, "sólo quiero abrazar a mi marido".
"Y nos abrazaremos. Después de que lavemos los platos".
Víctor hace un puchero mientras Yuuri lo lleva de regreso a la cocina. Mira el fregadero con recelo. "No recuerdo haber usado tantos platos. ¿Se reproducen?
"Me niego a creer que pienses que los objetos inanimados son capaces de reproducirse".
"El universo funciona de maneras misteriosas, Yuuri. No soy más que un simple viajero en un mundo lleno de incógnitas".
"Vitya. Platos. Ahora."
Víctor suspira y refunfuña mientras recupera sus delantales azules y rosas a juego de donde están colgados en la despensa. Desliza el azul sobre la cabeza de Yuuri y el rosa sobre la suya antes de tomar sus guantes de goma con estampado de caniche del cajón al lado del fregadero. Porque, como Yuuri aprendió durante el último año y tres meses de matrimonio, Victor Nikiforov, ídolo de su juventud, es en realidad un idiota melodramático que necesita un disfraz para todo. Incluso lavando los platos.
Víctor lava los tres primeros platos en una sinfonía de suspiros. Yuuri termina seis en el mismo tiempo.
"¿Yuuri?"
"¿Sí?"
"Estoy absolutamente seguro de que lavar platos es la forma de hastío más concentrada del universo".
Yuuri suspira, lo que Víctor toma como un acuerdo implícito: "Sabía que lo entenderías".
"¿Qué pasa si te ofrezco una recompensa?"
"¿Oh?" Victor pasa un dedo enguantado por el costado del cuello de Yuuri. La goma chirría contra su piel y el dedo de Víctor deja un rastro de pompas de jabón a su paso. Es decididamente poco sexy. Las cosas que Yuuri hace por amor.
"Mhmm," Yuuri mira en el fregadero, "sólo quedan siete platos. Y, vaya, mira eso: llevo exactamente siete prendas".
Víctor se sonroja y termina el primer plato. Yuuri se quita el delantal, luego seca el primer plato mientras Víctor comienza con el siguiente.
El suéter, el calcetín izquierdo, el calcetín derecho, la camisa, los pantalones y la ropa interior de Yuuri siguen en breve. Víctor nunca había limpiado el fregadero tan rápido.
"He desatado un monstruo", gime Víctor contra la espalda de Yuuri, con el rostro presionado entre sus omóplatos.
Yuuri se estremece un poco, la ráfaga de aire caliente le hace cosquillas en la espalda, "Oh, sí, estoy seguro de que estás absolutamente desconsolado por el horror que has desatado en tu cama".
"Soy un hombre delicado, no puedo soportar tanta manipulación". Yuuri no necesita ver la cara de Víctor para saber que está haciendo pucheros.
"¿Es realmente manipulación si el participante está consciente y dispuesto? ¿Y simplemente le gusta quejarse? pregunta Yuuri.
"Muy cruel."
"Mi punto es válido".
"Y aparentemente también lo hacen tus métodos clandestinos", suspira Víctor. Envuelve sus brazos alrededor de la cintura de Yuuri, besa su nuca y planea su venganza.
(Víctor planea usar las tácticas de Yuuri contra él cuando Yuuri evita lavar la ropa).
1
Víctor ha estado deprimido durante el último mes. Yuuri quiere ayudar, pero no puede hacerlo a menos que Víctor realmente le diga lo que está mal.
(Ha recibido demasiados sermones de Phichit como "ustedes necesitan trabajar en su comunicación" como para dejar pasar esto).
Y sabe que no lo está imaginando. Yakov le lanza miradas cuando Víctor habla con Mila o Yurio, miradas que le ruegan explícitamente a Yuuri que "arregle lo que sea que esté pasando con ese idiota". Durante sus últimos dos años y medio en Rusia, Yuuri no sólo aprendió ruso con fluidez, sino también Feltsman.
(Además, ha alcanzado fluidez conversacional en Plisetsky).
No es obvio: Víctor tiene cuidado de mantener su melancolía como una sombra, algo que se esconde en las esquinas de tus ojos y desaparece cuando lo enfrentas de frente; luego, bajo la mirada brillante de un reflector, se transforma en una sonrisa plástica y una trivial seguridad de que no hay nada de qué preocuparse.
(Víctor ya debería saber que Yuuri es tan bueno preocupándose como secuenciando pasos. Ha tenido suficiente práctica con ambos.)
Yuuri conoce a Víctor. Y sabe que está ocultando algo. Cuando Yuuri se acerca de puntillas al tema del pasado, Víctor simplemente lo descarta y le dice que se concentre en la final del Gran Premio que se acerca rápidamente. Yuuri parece no poder encontrar las palabras adecuadas para decirle que este vaivén entre el conocimiento y la ignorancia sólo lo está empeorando.
"Vitya."
"Mmm", la cara de Víctor está enterrada en el pelaje de Makkachin.
"Vitya, tenemos que hablar".
Víctor aleja su cabeza de Makkachin tan rápido que Yuuri siente la tentación de revisarlo en busca de latigazo cervical. Una vez que Yuuri vislumbra el rostro de Víctor, inmediatamente se arrepiente de su frase.
"¿Yuuri?" El rostro de Víctor está pálido, y Yuuri no lo había visto tan molesto desde Barcelona, o la primera vez que tuvieron una pelea tan fuerte que Yuuri amenazó con dormir en el sofá.
Yuuri se levanta del sofá y se arrastra hacia Víctor, abrazándolo mientras se arrodillan en el suelo. Alguna parte distante del cerebro de Yuuri nota que esto va a ser un infierno para sus rodillas.
"¿Te estás divorciando de mí?" Víctor murmura contra su hombro, tan bajo que Yuuri apenas lo escucha.
Yuuri se aleja para que Víctor pueda ver su cara cuando dice: "¡no! ¡Por supuesto que no!" Víctor inmediatamente se inclina hacia atrás para abrazarlo, y Yuuri se sorprende un poco al notar que su hombro está húmedo.
"Ven aquí", dice Yuuri, guiando a Víctor al sofá. Él se acuesta primero y coloca a Víctor de manera que quede acunado sobre el pecho de Yuuri.
Makkachin se une a ellos después de unos minutos, con un peso reconfortante contra sus pies. La respiración de Víctor se estabiliza mientras Yuuri alterna entre pasar sus manos por el cabello de Víctor y colocar suaves besos en la parte superior de su cabeza. No está acostumbrado a que Víctor necesite tanta tranquilidad, por lo que imita los pequeños actos de afecto que Víctor le brinda cuando se siente inestable.
Yuuri no está seguro de cuánto tiempo permanecerán así, pero cuando mira por la ventana se da cuenta de que está oscuro. Comienza a moverse y la cabeza de Víctor se levanta, con el rostro tenso por la alarma. Yuuri coloca una mano contra el costado de la cara de Víctor y frota su pulgar contra la suave piel de la mejilla de Víctor, ligeramente pegajosa por las lágrimas secas.
"¿Ven a la cama?" Víctor asiente y su rostro se relaja poco a poco.
Yuuri lo lleva a su habitación, manteniendo sus dedos entrelazados. Acomoda a Víctor en la cama y comienza a quitarle la ropa. Desliza la camisa sobre la cabeza de Víctor y deja una línea de besos desde entre sus omóplatos hasta la parte baja de su espalda. Después de ayudar a Víctor a quitarse los pantalones, lo envuelve en el edredón de plumas antes de caminar hacia la esquina de la habitación para poner la ropa de Víctor en el cesto de la ropa sucia.
Cuando Yuuri se da vuelta, Víctor está esperando en la cama, con los brazos libres de las mantas y alcanzando a Yuuri.
Se acomodan en la cama, Yuuri encima de las mantas, todavía completamente vestido, y agarrando a Víctor a cambio.
"¿Podemos hablar sobre eso?"
Víctor libera una ráfaga de aire de sus pulmones, "es..."
"¿Que es?"
"Vas a pensar que es estúpido".
"Vitya, nada que te haga sentir así es estúpido".
Víctor se recuesta, empujando a Yuuri contra su pecho, invirtiendo su abrazo anterior. "Cumpliré treinta este año".
Yuuri espera. Víctor finalmente está hablando y Yuuri tiene miedo de que si lo interrumpe romperá algo que no tiene idea de cómo arreglar.
"Durante la mayor parte de mi vida, fui mi patinador. Imaginar los treinta fue como admitir que había un mundo sin eso". Levanta la cabeza de Yuuri y lo mira a los ojos. "Ahora tengo mucho más en mi vida. Cosas que nunca supe que existían fuera de las historias. Antes de conocerte... traté de ignorar el vacío porque, bueno, era horrible, pero me resultaba familiar. Aunque me encantan las sorpresas, no estoy por encima de la comodidad de la rutina". Víctor deja escapar una risa forzada que en realidad es más bien un suspiro. Comienza a dibujar círculos entre los omóplatos de Yuuri con las puntas de sus dedos. "Estoy tan feliz contigo. Necesito que sepas eso. Pero al cumplir treinta… recuerdo cuánto más tengo que perder. Víctor, de veinte años, nunca quiso a Víctor de treinta, entonces, ¿por qué querrías tú?
Yuuri lo besa, un suave y seco roce de labios uno contra el otro. Cuando se retira, mantiene su frente presionada contra la de Víctor.
"Gracias. Por decirme."
Víctor simplemente asiente. Aparentemente ha usado la última de sus palabras.
Yuuri se asegura de que Víctor lo mire cuando dice: "Vitya, te he deseado desde que tenía doce años. Y a los veintiséis te quiero más que a nadie.
Yuuri se levanta, presionando un dedo contra los labios de Víctor cuando éste intenta atraerlo hacia sus brazos. Se quita la camisa y la tira al suelo. Pueden ocuparse de ello por la mañana. Comienza con sus pantalones. "Te mostraré cuánto te deseo, cuánto te querré siempre, ahora mismo y todos los días después de eso. Por el resto de nuestras vidas."
Yuuri se desliza en la cama, envolviendo a Víctor en susurros de afecto y el deslizamiento de piel sobre piel.
Después, en la oscuridad, sosteniendo a Víctor por detrás en la oscuridad, Yuuri dice: "No puedo esperar a tu cumpleaños".
"¿Por qué?" Víctor susurra, como si todavía tuviera un poco de miedo de la respuesta.
"Porque", dice Yuuri, besando justo debajo de la oreja izquierda de Víctor. Se acerca más. Quiere que Víctor escuche esto: "significa que tengo la suerte de haber pasado un año más de mi vida casado contigo"