Capítulo 54: "Torneo Seven Heavens - Primera Ronda, Parte 3"

- ¿Estás seguro, Ruby? –

- Sí, me haré cargo de ellas –

- Platinum también salió hace poco tiempo… por qué no la escoltas a ella… de verdad, hazlo, tengo miedo que vaya a molestar a Dawn, ya tengo suficiente con lo que lidiar, para ahora tener que soportar eso y—

- Espera un segundo, ¿Dawn?, ¿Quién es ella? –

- Una amiga, viajamos juntos en el pasado, durante mi tiempo como entrenador… resulta que ambas tienen una apariencia similar, aunque su personalidad son un completo contraste… Dawn es mucho más alegre y descuidada, que Platinum… supongo que si Platinum es un frío tempano de hielo, ¿Dawn es un sol de verano? –

- Repite eso frente a Platinum, y volverá a perseguirte con su Empoleon… como sea, tengo que rechazar eso –

- ¿Huh?, ¿Por qué? –

- Es Platinum, Red… ¿Cómo piensas que seré capaz de llevarla de regreso?, Sí se llega a molestar, será mi final –

- Vamos, vamos, estarás bien~ –

- Cómo si fuera a creer eso… no soy Gold, maldición –

Quejándose por el comunicador, Ruby avanzó por las calles colmadas de personas, mientras mantenía una charla con Ash.

Las batallas de esta ronda habían terminado, por lo que el número de personas en la calle, era mucho mayor al usual. Y especialmente, dada la hora, muchos quienes perdieron la hora del almuerzo, se dirigieron a comer, antes de que comience la última ronda.

En medio de esa multitud, Ruby se abrió paso.

- Espera y piénsalo… las mujeres te favorecen, no tengo duda que Platinum quedará encantada –

- Diamond me matará, además, ¿Qué diablos es esa afirmación?, Eres el único que está rodeado todo el tiempo por mujeres, ¿no?… empezando por Blue, están Yellow, Sabrina, Anabel, Crystal e incluso White y Platinum… ¿Y ahora también están esas chicas, Emilia y Dawn?, ¡Tú eres el que siempre está en problemas de faldas! –

- Dejando a Blue y Emy de lado, siempre consideré a todas mis amigas, no te confundas, Ruby –

- ¡Cómo si me fuera a tragar eso!, ¡Siempre conscientes y malcrías a las chicas!, ¡¿Cómo no tendrás líos de faldas así?!, ¡Piensa, demonios!, ¡Todas desarrollaron una relación contigo, que ya no puede ser explicada simplemente con "son solo amigas"!, ¡Idiota! –

- Ruby, no voy a tener una conversación sobre mis relaciones sentimentales, en este momento… solo tranquiliza a Platinum, la conocemos, ella suele exagerar las cosas, en el peor sentido… yo llevaré a White y Yellow de vuelta, aprovecharé para investigar esa zona, además, me preocupa que algún pervertido ponga sus ojos en ellas… sabes el tipo de idiotas, que se reúnen ahí, si algo pasa, actuaré como Red y los haré volar –

- Haah… cómo sea, haz lo que quieras… pero hablaré con Platinum primero, y luego decidiré -

- Seguro, seguro, te lo encargo~ –

Ruby suspiró y maldijo por lo bajo, cortando la llamada.

Su líder a menudo actuaba de esta manera, dulce y protector con las chicas, y muy pocas veces, se dio cuenta de los sentimientos que crecían en los corazones de aquellas bajo su protección. No era como si su preocupación por ellos, no fuera menor que las chicas, pero todos los chicos sabían que Ash era mucho más atento con ellas, haciendo que todo el tiempo estuviera rodeado de problemas por mujeres.

Todos los miembros masculinos de Crimson vieron eso, y llegaron a una simple respuesta.

"Los harem dan asco"

El nivel de estrés, que ellos sufrieron bajo ese ambiente rosa, y la imagen del azabache siendo celado y acosado todo el tiempo, por cada chica nueva, bastó para que ninguno de ellos, quisiera vivir eso.

Ruby, era un fiel defensor de esa idea.

Sin embargo, el joven a menudo olvidaba, que él mismo, era muy popular con el sexo femenino, teniendo bastante éxito entre las varias chicas a lo largo de su vida. Blue y Anabel se burlan a menudo de eso, pero lo cierto, es que todas las chicas de Crimson, pensaban seriamente, que Ruby pertenecía al mismo tipo de hombre que Ash.

Varias veces, las chicas presenciaron los "éxitos" de Ruby, pese el mismo chico no lo entendía.

Incluso aquí en Edén, la situación no cambió en lo absoluto.

- U-Umm… o-oye… -

- ¿Huh?, ¿Si? –

Ruby fue sacado de sus pensamientos, por una voz desconocida.

Volviendo su mirada, se encontraba una linda chica, mirándolo tímidamente, mientras miraba nerviosamente a un grupo de 3 chicas, a unos metros alejadas del joven.

Ruby miró curioso a la chica, que enfrentó su mirada con un rubor en su rostro.

- M-Mis amigas y yo… estamos buscando alguien p-para acompañarnos a la zona de diversiones y t-te vimos combatiendo, ¡F-Fuiste muy genial!, ¡De verdad! –

- ¿Es eso así?, Me alegra – (respondió Ruby, sonriendo ligeramente, aumentando el sonrojo en la chica)

- Y-Ya veo… en ese caso, ¿Q-Quieres acompañarnos? –

- ¿Eh?, no, lo siento, tengo un lugar al que ir… de cualquier forma, gracias por invitarme –

Y respondiendo así, Ruby se dio media vuelta, mientras un gran signo de pregunta aparecía en su cabeza. Ni siquiera se fijó en la devastada chica, que fue a lamentarse con sus compañeras, mientras caminaba tranquilamente hacia la base.

Eventos como ese ocurrían demasiado frecuentemente en su vida, sin embargo, lamentablemente, nunca era una chica que le gustaba, la que le invitaba a salir.

Y eso solo hacía suspirar más al joven.

Pero, en ese lugar, había otra persona que estaba tan o más familiarizada con esta realidad, que el mismo joven. Viendo con profunda decepción y desagrado, las acciones del joven con gorra blanca.

- Como esperaba, sigues siendo una basura de hombre, que hace más que jugar con los corazones de las mujeres… pensé que el tiempo te haría madurar de una vez, pero veo que me equivoqué… Ruby –

El joven de Hoenn, se detuvo en el lugar.

Poco a poco, su frente se llenó de sudor frío y su cuerpo se tensó.

Giró lentamente su cabeza, y ahí.

Estaba Wallace.

- ¿Oh?, ¿Ni siquiera tienes un saludo para mí, mi querido Diamante en Bruto?, ¿Y preguntándome si realmente creías, que no notaría tu estadía en este torneo? – (murmuró el peliceleste, bufando y moviendo su larga bufanda, con una mirada filosa)

- …Wallace – (susurró Ruby, colocando una expresión completamente arrugada)

- ¿No tienes nada más que decir?, ¿Perdón?, ¿Lo siento, Wallace?, ¡Oh, mi increíble e inigualable héroe Wallace, he vuelto a tu lado, como siempre debí ser!… ¿Nada? – (gruñó Wallace, entrecerrando los ojos)

- …Hola Wallace, supe que Steven volvió a tomar el manto de campeón, duró poco el puesto para tu Élite 4, hice bien en dejarla – (murmuró Ruby, frunciendo el ceño)

- ¡Ha!, ¡Tienes el descaro de hablarme traidor!, ¡Incluso cuando confié en ti, para ser mi mano derecha! – (gritó el campeón, ofendido)

- ¡Tú fuiste quién decidió eso!, yo te dije que solo me estaba preparando para tomar un puesto en la Élite 4, ¡En ningún momento, te dije que despidieras a cada miembro de la actual Élite 4, maldito loco! – (gritó el joven de vuelta)

- Es inútil que uses excusas, Ruby… saliste un día para seguir al Team Rocket, e ignoraste mis llamadas y mensajes… ¡Durante más de 3 años! – (gritó el peliceleste, mirando fijamente al joven)

- …Y hasta el día de hoy, agradezco haber tomado esa decisión – (murmuró Ruby, mirando sombríamente al hombre)

Los dos hombres originarios de Hoenn se miraron fijamente, mientras se lanzaban miradas violentas, el uno al otro. Sin embargo, al poco tiempo, Wallace ajustó su bufanda y bufó, deteniendo la infantil pelea, para sorpresa de Ruby.

El campeón miró al joven, alzando su ceja.

- ¿Qué?, ¿Crees que me quedaría estancado en nuestro antiguo acuerdo?, ¿Creías que los coordinadores no lograrían surgir sin ti?, Lamento decepcionarte, pero alguien si decidió seguir mis pasos… dominando tanto el combate como los concursos, esa persona SI logró lo que una vez te propusiste… limpia tus oídos y escucha su nombre… -

- May, ¿no? –

- …¿Huh?, ¿Cómo la conoces? –

Wallace miró al joven con los ojos entrecerrados, mientras que Ruby bajaba los hombros, negando con la cabeza.

- No hay forma, que nadie proveniente de Hoenn, desconozca a la "Mariposa Guerrera de Hoenn", muchos coordinadores la admiran, y no es para menos, ha logrado derrotar a muchos entrenadores famosos, además de tener varios títulos, tanto como de batallas pokemon o concursos – (respondió Ruby, sonriendo irónicamente)

- Bueno… tienes razón, pues es como lo esperabas, esa chica era muy habilidosa como coordinadora, pero un día se acercó a mí, para que le enseñara uno o dos trucos en las batallas… no creí que le ayudaran mucho, pero ella parecía tener una buena base como entrenadora, un diamante en bruto… quizás no tan buena como tú, pero su esfuerzo era realmente admirable – (agregó Wallace, asintiendo sonrientemente)

- Cierto, es una chica que se esforzará en lo que quiere… - (respondió el joven, sonriendo suavemente)

- ¿Huh?, ¿Otro comentario sospechoso?… Dime la verdad, ¿La conoces?- ¡¿N-No será otra de tus conquistas, no?! – (preguntó el peliceleste, mirando aterrado al joven)

- No, solo somos amigos de la infancia – (respondió Ruby)

- …Sospechoso – (murmuró Wallace, mirando con ojos entrecerrados al joven)

- ¿Ya terminaste?, Me retiro… lo que les dije a esas chicas, era verdad, debo ir a otro lugar – (comentó el joven de la gorra, bajando sus hombros y dándose la media vuelta para irse, sin embargo, una mano agarró su hombro, deteniéndolo)

- Un momento, no tan rápido… no me importa dejarte ir, no soy tan terco, como para detener a un hombre no interesado en mantener una amistad… pero verás Ruby, sigues incumpliendo nuestro contrato… ¿no? – (preguntó Wallace, sonriendo siniestramente)

Ruby entrecerró los ojos, enfrentado al campeón con un ceño fruncido.

- …¿Cuál contrato? –

- Oh, ¿No lo recuerdas?… mira esto –

Con esas palabras y con una sonrisa victoriosa en el rostro, Wallace sacó de su bolsillo, un contrato plastificado y perfectamente mantenido, frente a la cara de Ruby.

El joven frunció el ceño, mirando alternadamente entre el peliceleste y el contrato, finalmente se fijó en este. Era el contrato de uso de las instalaciones de la Élite 4, un contrato que firmó durante su época de preparación, varios años atrás.

Mirando confundido al campeón, Ruby alzó su ceja.

- …¿Y qué tiene que ver eso conmigo? – (preguntó cautelosamente Ruby)

- Oh, estos jóvenes sin educación… firmaste un contrato, sin siquiera leer las cláusulas de cancelación, ¿no? – (respondió un aburrido Wallace)

- ¿Haaah?, ¿Condiciones?, ¿Cuáles condiciones?, Este contrato no tiene nada, no estoy ciego – (contestó un molesto Ruby)

- Lee las letras pequeñas… mira aquí, aquí –

- …¿Huh? –

Ruby entrecerró los ojos y acercó su vista alejado del contrato, donde una indistinguible línea roja estaba sola, alejada del resto de letras negras. Con un vistazo rápido, nadie se daría cuenta de algo raro, pero cuanto más se le miraba, la línea roja mostraba ser una larga línea de letras muy pequeñas.

El joven comenzó a tener un mal presentimiento, cuando Wallace extendió una lupa para que él pudiera leer las letras ocultas.

"…Por la presente, en caso de presentarse un incumplimiento al contrato, ignorando la duración del contrato, el entrenador deberá aceptar cancelar la totalidad de los gastos sostenidos por el contratista, sin embargo, esta deuda puede ser perdonada, si cumple con una solicitud del contratista, bajo su propia decisión… para aquellos que violen esta cláusula, deberán ser encarcelados hasta el pago de la deuda pactada."

Ruby miró de principio a fin las palabras escritas, y entonces, de un rápido movimiento, rompió el contrato a la mitad. Fue un sorprendente e inesperado movimiento, que incluso dejó pasmado a Wallace, sin embargo, los ojos de Ruby eras violentos e iracundos, bajo la sonrisa fría que llevaba.

- …Wallace, lo siento, se rompió el contrato – (comentó un frío Ruby)

- Tengo varias copias, no necesitas disculparte – (respondió Wallace, bajando sus hombros y sacando varias copias de entre sus ropas)

- ¡Ese contrato, es una maldita estafa!, ¡Ningún tribunal real podría tomar en serio esa maldita cosa! –

- Oh, vamos, el contrato es perfectamente legal… lo llevamos usando desde hace varios años, es casi tan antiguo como el título de campeón, y sustenta la base de todo Alto Mando… todo campeón es capaz de hacer uno, y solo un campeón, es capaz de usarlo… hace poco, Mirto le enseño a Iris esto, y ya hizo su primer escla… ups, olvida lo que dije –

Ruby miró exasperado al peliceleste.

Se maldijo así mismo, lamentando no haberse ido antes a la base.

- Vamos, vamos, no te pediré nada raro, ni te presionaré a hacer algo absurdo… solo quiero que me acompañes a ver a alguien – (comentó Wallace, bajando los hombros)

- ¿A alguien?, ¿Quién? – (preguntó Ruby, mirando sospechosamente al hombre)

- Un fan tuyo… oh, pero será mejor que nos movamos luego, este lugar ya se está volviendo muy ruidoso – (respondió Wallace, haciendo un gesto para ver a su alrededor)

Ruby miró confundido hacia la dirección que miraba el hombre, solo para encontrarse rodeado de varias decenas de personas, que gravaban a ambos con curiosidad.

Muchas personas simplemente estaban por el campeón, pero lo cierto, era que varios otros estaban curiosos con el joven, haciendo que este tuviera una fea expresión.

- …¿Dónde quieres ir? – (preguntó un molesto y derrotado Ruby)

- Una tienda de helados, creo que está en la zona superior – (respondió Wallace, con una sonrisa)

- …La condición es solo ir y conocer esa persona, ¿no? –

- Tienes mi palabra, incluso hablaré con Lance y dejaré que él notifique la cancelación del contrato –

- ¿Lance? –

Ruby miró fijamente al peliceleste, que asentía poderosamente.

El joven miró a su alrededor, así como su comunicador.

Suspirando, el joven asintió.

- Que sea rápido, tengo que irme luego de eso… -

.

..

- "Mi combate… será… en 20 minutos… sí, quiero ir contigo… te esperaré… t-tu amada Yel—"¡No, no, no!, ¡Yellow, mala!, ¡Mala!… "con cariño…" sí, eso… –

- …¿Sigues escribiéndole a Ash, Yellow? –

- ¡Ah!, ¡S-Sí!… dijo que vendría a buscarnos más tarde –

- ¿Lo hará?, ¿Y por qué pareces tan emocionada? –

- ¿Eh?… B-Bueno… me dijo que me invitará una comida, como recompensa por mi victoria, a pesar que todavía no empiezo mi batalla… le dije que no tenía que hacerlo, pero él insistió… je, je, je, Ash sigue siendo dulce conmigo -

- …Bien, iré contigo –

- ¡¿Eh?! –

- …No puedo dejarte sola con ese tipo, no es confiable –

Yellow miró con una expresión lamentable a White, quién giró rápidamente su mirada a otro lado, aunque sus orejas estaban completamente rojas.

Dentro de poco comenzaría la 3° ronda de combates del primer día, y ambas, Yellow y White, tendrían su batalla.

Ambas salieron antes de la base, para llegar a sus combates a tiempo, dado que las Arenas de ambas estaban en el otro extremo de la ciudad, por así decirlo.

Este lugar de la ciudad, era un sitio perfecto para el ocio, en un sentido diferente del espacio central de la ciudad, donde se encontraba el parque de diversiones. En este lugar, se encontraba un gran casino, además de contar con restaurants y establecimientos de alta clase, era básicamente, el lugar donde los ricos y poderosos podrían satisfacer sus necesidades, sin necesidad de mezclarse demasiado.

La segregación social fue camuflada perfectamente en Edén… aunque Aurora misma diría lo contario, si se le preguntara.

- Umm… ¿Pero estás segura?, Creí que querrías ir a ver a Ryota, luego de tu batalla – (preguntó Yellow, mirando confundida a la castaña)

- El instructor no tiene dudas en mi victoria, ir a verlo solo por algo así, seguramente le molestaría… a-además, de cualquier manera… no es justo que solo ustedes vayan a divertirse… - (murmuró White, desviando la mirada avergonzada)

- ¿Hm?… no necesitas comportarte tan tímida como Platinum… tú batalla culminará en el centro de la ciudad, ¿no?, mi batalla terminará rápido, si quieres, podemos ir a buscarte ahí, con Ash – (comentó una divertida Yellow)

- ¿R-Rápido?… ¿No estás nerviosa Yellow? – (preguntó una sorprendida White)

- Umm… es solo… que comparado a enfrentarse al Team Rocket, todo se siente… ¿normal? – (contestó una no muy segura Yellow)

- ¿Normal, no?… Bueno, cuando lo pones así, claramente, no está en la misma escala… ¿Sin embargo, no te molesta estar rodeada de cientos de personas viéndote? – (preguntó White, curiosa)

- E-Eso podría ser algo vergonzoso… -

Viendo a la tímida Yellow, reír nerviosamente sin darle importancia real, hizo que White sonriera irónicamente.

Yellow participaría en la Arena Fortuna, una Arena ubicada en el interior del casino. En ella, Yellow tendrá a disposición a sus 6 pokemon, pero solo 3 al azar serían llevados al campo de batalla, lo mismo pasaría con su rival, ninguno tendría control de la decisión, por lo que sería una prueba para su adaptabilidad inmediata.

White por su lado, tiene una arena especial, la Arena Expreso Batalla, inspirado en la atracción nacida en la región de Unova, esta arena adoptó el método de batalla usado en dicha región, "Combates Triples".

Ambas fueron puestas en estas arenas de forma aleatoria, sin embargo, ambas estaban felices cuando vieron el tipo de arena que les tocó.

White era una experta en el estilo de batalla de Unova, era una nativa, después de todo, mientras que Yellow, por su lado, tenía una gran adaptabilidad gracias a Ash, quien la entrenó todo el tiempo, desde que se conocieron.

De hecho, es Yellow, probablemente, la estudiante más parecida a Ash.

Todos los demás, tenían un estilo de batalla personal, que fue potenciado gracias a las enseñanzas del joven. Pero la pequeña rubia, en cambio, aprendió por Ash, todo, desde su estilo de batalla, su adaptabilidad y su uso de batalla irregular de los pokemon.

Todo fue absorbido por ella, y a una velocidad que no esperarías de una completa novata.

Eso sumado a su habilidad especial, la harían una contrincante de temer, incluso para los más fuertes de Crimson. Quizás, su único fallo, es la poca motivación de batalla de Yellow, que no tenía interés en batallas y peleas pokemon.

Pero cometerías un error, pensando que ella era débil.

Ella no pertenecía al grupo participante, por una razón al azar.

Y eso… era algo que el rival de Yellow aprendió por las malas.

.

..

_Arena Fortuna_

- ¡Kitty, usa Tornado Parálisis! –

El grito de Yellow resonó a lo largo de la Arena, pese su dulce voz.

Pero lejos de burlarse, su rival, un chico cuya edad estaba entre los 16 o 17 años, sintió una ola de frustración y miedo, mientras veía el fiero ataque acercarse.

Kitty, el Butterfree de Yellow lanzó un ruido agudo, mientras aleaba a toda velocidad. Un tornado rápidamente se formó con él de fondo, sin embargo, estaba lejos de ser normal, este tornado tenía una potencia que pocos pokemon eran capaces de generar, no sería raro que lo confundieran con un tornado real.

Pero eso no era todo, la característica más importante, es que este tornado, estaba teñido, por un extraño color amarillo brillante, proveniente de la mescla del ataque Tornado, con el ataque Paralizador.

Era parte del repertorio personal de Yellow, que creó para competir junto a Ash, en sus extrañas tardes de inspiración, inventando nuevos movimientos, junto a Gold, Black y Platinum. El resto de los miembros de Crimson, también participaban, pero los más comunes en estas reuniones, siempre fueron ellos.

Yellow fue una buena alumna, que llevó su imaginación a un mismo nivel, que Ash.

Y el resultado de eso, fue una abominación de ataques, que pronto Aurora incluiría en su lista negra.

El torbellino amarillo se acercó a toda velocidad al pokemon de su rival, un Magmortar que miró sombríamente el ataque. Su cuerpo se movía lentamente, gracias a ignorar la amenaza que significó en su primer momento.

Creyó que la suerte le había sonreído, tras sacar un pokemon con ventaja de tipo.

Ahora, solo podía lamentarse.

Pero los arrepentimientos ya no servían de nada, y eso, el rival de Yellow y su pokemon, ya lo sabían.

- ¡Magmortar, usa Lanzallamas! –

El pokemon rival rugió y apuntó ambos brazos al frente, listo para enfrentar el ataque con su Lanzallamas.

Ambos ataques chocaron en medio de la arena, mientras el enfrentamiento generaba fuertes ráfagas, que se esparcían por todas direcciones. El tornado amarillo estaba siendo quemado por las llamas, pero siguió teniendo tanta fuerza como siempre.

Ambos ataques llegaron a un punto muerto, que tenía a la audiencia en el borde de su asiento.

Pero entonces, el cambió ocurrió en el momento más crítico. El pokemon rival, sufrió una parálisis, que detuvo momentáneamente su ataque.

Yellow no dejó pasar la oportunidad.

- ¡Cambio!, ¡Usa Tornado Venenoso, Kitty! –

Con el grito de Yellow, el Butterfree de ella emitió un poderoso ruido, mientras el tornado amarillo se volvía morado.

Y acelerando, como una feroz serpiente morada, el tornado engulló al pokemon de fuego, lanzándolo con fuerza al otro extremo de la arena, impactándose en la pared.

El pokemon intentó levantarse, pero estaba afectado por la parálisis y el envenenamiento producto de los ataques. Un raro efecto, dónde ambos problemas de estado se mezclaron, bastaron para volcar la batalla a un solo lado.

Solo Yellow y Ash, saben lo duro que fue conseguir eso.

Pero, en este caso… solo Yellow, sabe lo difícil, que fue crear ESTE ataque.

Con los ojos de la chica, brillando levemente de color verde, Yellow alzó su mano a su pokemon y declaró.

- Es hora de acabar con esto… ¡Kitty, usa el Torbellino de Estados! –

Los ojos del Butterfree brillaron del mismo color que los ojos de Yellow, mientras aleteaba fuertemente. Nuevamente, un tornado comenzó a formarse bajo el pokemon, pero al alzarse, el poder psíquico lo dividió en dos, creando dos tornados que comenzaron a entrelazarse, danzando entre sí, alrededor del pokemon Bicho.

Era un espectáculo deslumbrante, pero el ataque no terminó.

Dos polvos comenzaron a ser emitidos por el pokemon, uno paralizaba, el otro envenenaba. Estos tiñeron ambos tornados, uno amarillo y otro morado, ambos entrelazándose entre sí, como un par de serpientes que acechaban lentamente a su presa.

El rival de Yellow y su Magmortar perdieron todo color ante la escena, incluso el público y los televidentes estaban boquiabiertos ante eso.

Dando un paso adelante, Yellow declaró.

- …Ataca –

Y los tornados se abalanzaron a su rival, implacablemente.

Todo el mundo perdió el habla.

Yellow dio un paso adelante y recibió con una sonrisa a su pokemon, entonces, volvió la vista al frente, mientras ajustaba su cola de caballo.

Y colocando una expresión decidida, la rubia declaró.

- Todavía faltan dos batallas… -

La expresión decidida y fuerte en Yellow, trajo escalofríos a la columna de su rival, que miró torpemente los brillantes ojos verdes en la rubia.

Poco sabía Yellow, que la figura de Ash, se superponía con la suya propia, en este preciso instante, causando aún más impresión en la arena.

Aquella, que fue considerada la alumna ideal del azabache, se plantó en escena sin temor.

Aunque, en otro lugar, otra excelente alumna, estaba igualmente centrada.

.

..

_Arena Expreso Batalla_

"…Ataca, Observa, Analiza y Reacciona, esas son las bases para todo Duelista, White"

- ¡…Qué el combate comience! –

Aurora anunció por todo lo alto, el comienzo de la batalla, a través de los altavoces de la estación de tren.

Una gran estructura, sostenida en una plataforma se movía rápidamente por el interior de la red de trenes, con forma de una cúpula, la Arena Expreso Batalla, se movía tan rápido como un tren.

Tenía una forma aerodinámica que le permitía no reducir la velocidad de este, además de proteger a ambos contrincantes, uno frente al otro. Esta Arena, es la única sin tribunas, ni público, pero en cambio, la batalla estaba a la vista de todas las personas de la estación, gracias a las brillantes pantallas, ubicadas en cada espacio disponible en esta.

Un solo combate, la batalla se decidiría cuando los 3 pokemon del contrincante cayeran. Esa realidad puso mucha presión en los hombros de ambas, pero dadas las reglas del torneo debían aceptarlo.

Quien logre el primer golpe, tendría ventaja.

"Inhala, exhala… despeja tu cabeza de cualquier pensamiento innecesario, solo una mente en calma, tendrá la claridad necesaria, para actuar"

White, despejó su mente, estaba rodeada de sus pokemon, Jessica (Sawsbuck), Sally (Reuniclus) y Bárbara (Mandibuzz).

Su rival, por su lado, tenía un Pinsir, un Ampharos y Manectric.

White y su rival, una guapa mujer en sus 20', se enfrentaron al anuncio de Aurora, actuando inmediatamente.

La rival de White sonrió y sacó un collar unido a una megapiedra.

Estaba lista para activar la megapiedra, cuando la clara y serena voz de White, resonó en la arena.

- "Ataque" –

Fue una simple palabra, que ni siquiera podía pasar como una frase.

Pero la respuesta fue inmediata.

Energibola, Bola sombra y Tajo Aéreo, respectivamente.

Los 3 ataques ocurrieron simultáneamente, sorprendiendo a la rival y el público.

- ¡E-Esquiven! –

La orden en pánico de la mujer, llegó tarde, que, desechando sus iniciales intensiones, apenas tuvo tiempo para alertar a sus pokemon, antes que los ataques impactaran.

Estos esquivaron como pudieron, pero la explosión cerca de ellos, causó que perdieran el equilibrio, especialmente Pinsir, quién no logró moverse tan rápidamente.

White centró su mirada en este fijamente.

"…Calcula su tiempo de reacción, quién es más lento, quien es más débil, quién es más vulnerable… un campo de batallas es cruel, no juegues ni alargues una batalla, sé decisiva"

- El primero… ¡Ataque Aéreo, Cambio de Banda y Energibola! –

El grito de White, resonó por la arena.

De la nube de polvo formada de la explosión, el Mandibuzz de White apareció atacando al Pinsir rezagado, casi sin nada de tiempo, desde el último ataque.

Brillando como un haz de luz, el Mandibuzz se abrió paso, golpeando furiosamente a Pinsir y lanzándolo hacia una pared de la arena, para sorpresa de su entrenadora y el público.

Pero, cuando la rival de White, abrió la boca para dar instrucciones, el Mandibuzz frente al Pinsir brilló.

Y se intercambió.

Y lo que apareció en su lugar, fue el Sawsbuck de White, con una brillante Energibola, lista para disparar.

Con un fuerte chillido, el pokemon no hizo esperar a su rival y lanzó su ataque a quemarropa, frente al débil Pinsir, todavía enterrado en la pared.

Una nueva explosión retumbó en la arena y del humo, Pinsir cayó, debilitado.

Toda la audiencia quedó sin palabras, ante el perfecto ataque de White.

La castaña exhaló el aire en sus pulmones y volvió a respirar, mirando a su rival con precaución.

"…Es común caer en engaños tras un ataque exitoso, tu mayor enemigo eres tú misma, no pierdas el enfoque… no hasta que tu enemigo haya caído, White"

- Quedan dos… ¡Jessica, regresa!, ¡Sally, Bárbara, cubran a Jessica! –

Las ordenes de White no pararon, haciendo que su Mandibuzz y su Reuniclus volvieran a lanzar sus ataques especiales, mientras que su Sawsbuck regresaba a paso rápido.

El ataque, tan orgánico como feroz, causó que nuevamente la rival de White se retirara, mordiéndose el labio.

- ¡Pinsir…!, ¡Tú!, ¡No te saldrás con la tuya!, ¡Ahora, Manectric!, ¡Megaevoluciona!

- ¡!, ¡Ataquen! –

White frunció el ceño, mientras hacía que sus pokemon volvieran a atacar, con sus ataques a larga distancia.

Otra Energibola, Bola sombra y Tajo Aéreo, volvieron a ser lanzados, acercándose peligrosamente a los dos pokemon restantes. La rival de White frunció el ceño, chasqueando la legua mientras gritaba.

- ¡Ampharos, usa Campo Eléctrico! –

El pokemon lanzó un fuerte grito, al mismo tiempo, que un enorme campo lleno de relámpagos, rodeó el espacio ocupado por los pokemon de la rival de White.

El campo eléctrico de Ampharos se enfrentó a los ataques de los pokemon de White, retrocediendo mientras una explosión cubría la zona.

Pero luego, una explosión de rayos se elevó al techo de la arena, mientras una lluvia de relámpagos salía de la nube de polvo.

La expresión de White se hundió.

AAAUUUUU

La nube de polvo se aclaró, y ahí, Manectric se alzó mirando ferozmente a la castaña y sus pokemon.

Su apariencia y poder cambiaron con la megaevolución, haciendo que la toda la zona se llenase de un ambiente amenazante.

Los pokemon de la castaña mostraron una expresión compleja, retrocediendo ante la amenazante figura amarilla.

- ¡Reagrúpense!, ¡Primera formación! –

Los pokemon de White respondieron al grito de la castaña, que, apretando los dientes, se forzó a mantener la calma.

"…El campo de batalla es caótico, y el Duelista, es la punta de la lanza que deberá abrirse paso en medio de todo ese caos… muchas veces, eso requiere más que simple fuerza o inteligencia… White, para ti, quien posee un nivel, sustancialmente menor, que el resto de mocosos… enfocarás tu entrenamiento de estas pocas semanas, en aprender lo único valioso, que aprendieron los otros del idiota… una gran fortaleza mental…"

Exhalando, White miró al pokemon megaevolucionado acercarse, seguido de cerca, de su compañero algo herido.

Sus pokemon se alinearon frente a White, encabezado por Sawsbuck, seguido por su Reuniclus y finalizando por su Mandibuzz.

White se ajustó su gorra, y sonrió intrépidamente.

"… y una vez aprendas a mantener la calma… verás claramente, cómo romper el flujo de batalla"

- …Puedo verlo, Instructor – (susurró White, para luego alzar la mano) - ¡Sally, usa Zona Extraña! –

Entonces, el Reuniclus de White, brilló resplandecientemente, mientras un campo violeta se generaba desde el pokemon, rodeando toda la arena.

.

..

- ¡La ganadora de la batalla, es la participante Yellow!, ¡Con 3 victorias seguidas, pasa a la segunda ronda! –

El auncio de Aurora resonó por lo largo de toda la Arena Fortuna, mientras una ola de aplausos llegaba a la rubia, que, suspirando, atrapó a Chuchu, entre sus brazos, sonriéndose la una a la otra.

Chica y pokemon, estaban hablando animadamente.

FLASH

Yellow se sorprendió ligeramente, mientras se fijaba en el chico que enfrentó en la última batalla. Este tenía una cámara digital en sus manos, mientras le daba una ligera sonrisa a la alertada Yellow.

- Lo siento, si te sorprendí… fue una gran batalla, es la primera vez, que veo un ataque así y quería guardar el recuerdo, de la primera chica en sorprenderme tanto… mi nombre es Trip, ¿Puedo preguntar tu nombre? –

- ¿M-Mi nombre?… Soy Yellow, un gusto –

- El gusto es mío… nunca antes vi ese tipo de ataque –

- ¿Es eso así?, Je, je… sí, no fue sencillo, me tomó mucho tiempo aprender a hacerlo y todavía no lo domino del todo – (respondió una sonriente Yellow)

- ¿De verdad?… Ya veo, debe ser realmente difícil hacer algo así… hey, si no es mucha molestia… ¿Crees que pueda pedirte algunos consejos?, te invito una comida… lo que sea que pidas, lo pagaré –

- ¿Eh? –

- Y también, si no te molesta, ¿Te puedo pedir tu número celular? –

- ¿Mi número? –

- Sí, deseo saberlo, Yellow –

Yellow quedó perpleja, mirando confundida al joven, frente a ella.

Intercambió miradas con Chuchu, que rio divertida por la confusión de su entrenadora.

"Je, je, je… está atraído por ti, boba"

La expresión de Yellow se tiñó de una confusión y pánico, mirando al chico frente a ella, que la miraba con fervientes ojos, y una arrogante sonrisa.

El joven recibió la mirada de la rubia, y no dudó en acercarse a esta.

- Prometo que te gustará la comida, también, espero que podamos ser buenos amigos… y tal vez, algo más… realmente, quisiera eso, más que la amistad –

La extraña declaración, fue escuchada a lo largo de toda la arena, que seguía transmitiendo, por medio de las pantallas flotantes, la conversación entre ambos entrenadores. Varios gritos emocionados, se escucharon en la tribuna, principalmente proveniente de parte del público femenino.

Incluso Aurora, estaba impactada por la repentina declaración.

En medio de la surreal escena, donde una IA, con ambas manos sobre sus mejillas, miraba a ambos jóvenes como una adolescente, Yellow miró unos segundos al joven, pero luego, sonrió dulcemente y respondió.

- Lo lamento, tengo una cita más tarde – (respondió Yellow)

- …¿Eh? –

- También, lo siento, pero estoy satisfecha con mi círculo de amistades… y, en cuanto a concejos de batalla, todavía no tengo la habilidad necesaria para dar consejos… pero, puedes aprender algo del hombre que más admiro –

- ¿H-Hombre?, ¿Quién? –

- Fu, fu… se puede llamar, Red –

Y con esas palabras, Yellow sonrió encantadoramente, y se retiró, causando una conmoción tan o más problemática que antes.

La figura, cuya cola de caballo rubia, se movía de un lado al otro, estaba destinada a convertirse un gran furor en Edén, aunque la persona en cuestión no lo sabía hasta entonces.

.

..

A la salida de la Arena, Yellow se encontró con varios periodistas que trataron de entrevistarla, con apasionados y codiciosos ojos.

Aprendiendo de la especialidad de cierto azabache, la rubia se escapó de la problemática escena, aferrándose a su Butterfree, que la levantó sin problema alguno, pese a su diferencia de tamaños, Yellow escapó pese a la insistencia de los reporteros.

En medio de su vuelo, una figura sobre un Charizard se acercó.

- Hey, Yellow, buen combate ahí atrás –

- ¡A-Ash! –

Yellow miró sorprendida la figura del azabache, que llegó volando sobre su pokemon, y miró a la rubia con una sonrisa.

Ash, por su lado, instó a Charizard a acercarse a Yellow, la cual saltó naturalmente en la espalda del pokemon, que ni siquiera se estremeció por el peso extra a su espalda.

Pikachu, sobre la cabeza del joven le hizo una seña a Yellow, la cual asintió sonriendo, liberando a Chuchu, que inmediatamente comenzó a coquetear con el pokemon del azabache, ignorando a todo el mundo.

Ash y Yellow sonrieron irónicamente, mientras miraban a la pareja de Pikachus.

- E-Entonces, ¿Viste mi combate, Ash? – (preguntó Yellow, volviendo su mirada al joven)

- Sí, alcance a mirarlo todo, buena batalla, por cierto… oh, también vi la confesión fallida ahí atrás, cielos… ¿Qué clase de idiota va ahí, intentando ligar con una chica, luego de una batalla? – (murmuró Ash, comportándose desdeñoso, mientras negaba con la cabeza)

- ¿L-Lo viste?, M-Me sorprendió en su momento… ¡Aunque luego lo rechacé! – (respondió una nerviosa y sonrojada Yellow)

- Oh, lo sé, lo vi… diablos, aunque sé que Yellow puede ser tan linda, no puedo creer que el descaro de ese tipo, qué pasa con estos tipos – (comentó Ash, bajando los hombros, mientras Yellow se volvía tan roja como la gorra del joven)

Ash miró con tranquilidad a Yellow, mientras que sonreía por la apariencia avergonzada de la chica.

Sin embargo, Charizard y Pikachu miraron desdeñosamente al azabache, que mostraba una apariencia tan arrogante.

- Según recuerdo, hiciste exactamente lo mismo con Blue, luego de la batalla en el Mt. Silver, y con Emilia, en medio de la batalla para salvar a Ryota, ¿No sientes vergüenza, Ash? – (murmuró Charizard, mirando fijamente a su entrenador)

- Además, ahora actúas compuesto y todo… pero cuando el tipo se le confesó a Yellow, tuvimos que reunirnos todos, para detenerte de destrozarle el trasero al pobre diablo… – (añadió Pikachu, mirando de igual forma al azabache)

Ante la acusación de sus propios pokemon, Ash giró naturalmente su mirada, actuando ignorante de todo, mientras que Yellow se sorprendía.

- ¿T-Te molestaste? – (preguntó Yellow, con ojos brillantes)

- Ejem, ejem, están exagerando, no les hagas caso… en fin, eso no es lo importante… de verdad, no me esperaba que dominaras el doble tornado, fue una sorpresa verlo en uso, recuerdo que antes, cuando lo usabas, quedabas exhausta por el sobreuso de tu poder – (comentó el azabache, sonriéndole a la rubia, que se sonrojó levemente)

- B-Bueno… no fue sencillo, saber la técnica no fue bastó y el costo para hacerla con la ayuda de mi habilidad, seguía siendo muy alta… así que llegué a la conclusión, que se debía al poco nivel de Kitty… es por eso que, durante el tiempo que te perdiste, le pedí ayuda a Platinum, para poder elevar el nivel de mi equipo… cuando alcancé el nivel 80, fue mucho más sencillo – (respondió una avergonzada Yellow, sorprendiendo al joven)

- ¿Platinum?, ¿Entrenaron juntas? – (preguntó el azabache, alzando una ceja)

- Sí, ella se esforzó para ayudar a Blue con su búsqueda, mientras usábamos una mansión de ella como base… nos quedamos junto con Diamond, Gold y Crystal, mientras que Black y Bianca salían por un par de meses, por entrenamiento… el resto intentó rastrearte, mientras regresaban a sus vidas diarias… fue muy triste cuando debimos separarnos – (respondió Yellow, bajando su mirada)

Viendo a la lamentable chica, Ash no pudo evitar suspirar.

- …Lo siento, sé que fue mi culpa que todos tuvieran que separarse así – (murmuró el azabache, llamando la atención de la rubia)

- No, no necesitas sentirte culpable, Ash… es cierto, que nos afectó bastante, pero todo el mundo sabía que había una buena razón tras tu desaparición… además, ninguno perdió la esperanza de volver a encontrarte, y de ser necesario, todos querían volverse más fuertes… es por eso, que cada uno eligió la mejor manera de volverse más fuerte – (contestó la rubia, haciendo que el joven sonriera irónicamente)

- Haah… los he metido en demasiados problemas – (murmuró Ash)

- Pero también nos has ayudado, lo hiciste cuando más lo necesitamos, salvándonos y brindándonos calor cuando caímos desesperados… eso, no lo olvidaremos jamás… si estamos aquí hoy, es porque tú estuviste ahí, Ash – (comentó Yellow, sonriendo encantadoramente)

- …Ya veo -

Ash y Yellow se miraron mutuamente, con suaves sonrisas en sus rostros.

Ninguno se dio cuenta, pero ambos ya habían creado un dulce ambiente entre ambos, cosa que hizo que Pikachu gruñera.

- ¡Ya bésense, cobardes! –

La intrusión del pokemon, hizo que ambos jóvenes se enrojecieran, en el caso de Yellow, en particular, hizo que su rostro se volviera tan roja como un tomate, mientras que el entrenador del entrometido pokemon, jaló sus mejillas en represalia. Entrenador y pokemon comenzaron a pelear, aunque luego Chuchu se unió a su pareja, para burlarse de la roja y avergonzada Yellow.

Fue un caos, hasta que finalmente, un molesto Charizard puso un alto a la situación, tras amenazarlos con lanzarlos de su espalda en pleno vuelo, si no se comportaban. El grupo obedeció, mientras pokemon de fuego gruñó, y maldijo su condición, de ser el más sensato en el grupo.

El grupo se tranquilizó, mientras atravesaban la ciudad, rumbo a la Plaza Central, de camino al lugar de termino de batalla de White. Ninguno de ellos de se perdió la batalla de la castaña, viendo el combate, a través de las pantallas que Aurora, trajo para ellos.

Habiendo disminuido el poder del Manectric, White, se centró en usar a Sawsbuck, como escudo para detener los embates del pokemon eléctrico, que potenciado por Ampharos, se había vuelto peligroso, mientras que sus otros pokemon, intercambiaban roles de ataque y apoyo, calando en la defensa de los pokemon rivales.

Eventualmente, Ampharos cayó, aunque el Sawsbuck logró detener al Mega Manectric, durante un buen tiempo, finalmente cayó, no sin antes, reducir las capacidades del rival.

Esto se convirtió en la carta de triunfo, en la batalla de la castaña.

Yellow aplaudió viendo el combate de White, mientras que el azabache intercambió miradas con Pikachu, llevando su mano a su barbilla, mientras fruncía el ceño.

- ¿Lo viste Pikachu? – (preguntó Ash)

- Sí, lo vi… es claramente el estilo de Ryota – (respondió Pikachu, mirando fijamente a la castaña)

- Tch, el Blancanieves… le enseñó ese estilo, después de todo - (comentó el joven, gruñendo)

- ¿Eh?, ¿Estilo?, ¿Qué quieres decir con eso? – (preguntó Yellow, mirando confundida al azabache)

- Yellow, ¿Recuerdas cual es el fundamento de mi entrenamiento? – (preguntó Ash de vuelta, haciendo que la rubia frunciera el ceño, pensando)

- Adaptabilidad… e improvisación, ¿no? – (respondió Yellow, mirando confundida al joven)

- Sí, básicamente… mi estilo, radica en un estilo libre, y pocas veces sigo un plan preestablecido de antemano, creo que mis pokemon y yo seremos capaces de ir más allá de toda estrategia, gracias a una mescla de ingenio y experiencia… Steel, ese anciano definió los puntos de mi estilo como… "Pelea, Observa, Siente y Crea", un estilo apropiado para ser un Núcleo… mientras que, la de Ryota es "Ataca, Observa, Analiza y Reacciona", el estilo de un Duelista… ¿Entiendes la diferencia entre ambos? – (preguntó Ash, mirando directamente a Yellow, que negó la cabeza, confundida) – Básicamente, es la esencia… yo peleo para obtener la ventaja en una batalla, analizo a mi rival, mi entorno, y luego creo una táctica que rompa con los planes del rival… con el Blancanieves, eso es distinto –

- ¿Lo es?, ¿Pero no es casi lo mismo? – (preguntó Yellow, mirando confundida a Ash)

- No, para empezar… "Pelea", "Ataca", aunque el estilo de ambos pueda parecer igual, y ambos comenzamos atacando al rival… el Blancanieve siempre prioriza el primer ataque, no como medio para obtener ventaja, sino como medio para analizar a sus oponentes – (respondió Ash, mirando fijamente la pantalla en el que aparecía White, celebrando su victoria) – Para él, la batalla es una proceso… él tomará cada pequeño detalle en su rival, para generar un plan, que llevará a cabo, para aplastarlo lo más rápidamente posible… es un estilo que radica, en cuanta información puedes robar en un corto periodo de tiempo, y cuan fulminante es el plan que creas, a partir de ello… para un estilo libre, como el nuestro, puede ser fatal, si no somos capaces de ir más allá de su planificación… Yellow, jamás permitas que White o Ryota controlen el ritmo de la batalla, si sientes que pasa eso… lanza el ataque más fuerte que tengas, y rompe la lectura de ellos, cuanto más rompas su planificación, más cerca estarás de ganar –

- Y-Ya veo… - (murmuró una confundida Yellow, que volvió su mirada a White) – Entonces… ¿White es fuerte? –

- Es una novata en ese estilo, su cálculo de cada tiempo necesita pulirse y su nivel es bajo… pero, veo que tiene talento, el estilo del Blancanieves requiere mucha observación y análisis, no es algo que un idiota pueda hacer… si sigue con la guía del Blancanieves, durante un año o más… puede ser una poderosa rival para ustedes, así que no deben confiarse – (respondió Ash, mirando seriamente a la rubia)

- ¿De verdad? – (preguntó una impresionada Yellow)

- Sí, pase lo que pase en el torneo… White se hará más fuerte – (afirmó Ash, mirando la pantalla frunciendo el ceño) - …Pero es molesto que le haya gustado ese estilo, antes que el mío… maldición, seguro que ese bastardo le lavó el cerebro, mientras no estaba, ¿Cómo puede ser mejor su estilo?… El mío es mejor, maldición –

Yellow y los pokemon miraron al joven, que comenzó a gruñir y maldecir infantilmente, con una mirada irónica. Charizard y Pikachu lo miraron con exasperación, mientras que Yellow, solo rio divertida, por la actuación del joven.

En poco tiempo, llegaron a frente a la estación de tren, donde aguardaba una roja White, rodeada de periodistas, que no la dejaban escapar.

- Parece que tiene problemas – (murmuró Ash, sonriendo irónicamente)

- Cierto… ¿No la ayudarás? – (preguntó una confundida Yellow)

- Todavía no, es su castigo por no querer mi guía – (respondió un sonriente Ash)

- Por Arceus… eres tan malo – (murmuró una divertida Yellow)

Ash miró la figura de Yellow.

Parecía el que el tiempo apenas y había hecho un cambio en ella, pero en su interior, la indefensa chica. que una vez estuvo siguiéndolo como un pequeño animal asustado, creció y se convirtió en una mujer, antes de siquiera notarlo.

Incluso logró adaptar y crear sus propias técnicas, antes de que él mismo lo notara.

"…Realmente, siempre me sorprendes"

Sonriendo ligeramente, y siendo dominado por un sentimiento melancólico, Ash extendió su mano a la cabeza de la rubia, acariciándola ligeramente.

- ¡¿?!, ¡¿A-A-A-Ash?! –

- Hey, Yellow, no discutimos dónde iríamos a comer –

La roja Yellow miró extrañada al azabache, que solo sonrió, entonces, la chica comenzó a pensar un tiempo, antes que finalmente diera una respuesta.

- A decir verdad… hay una tienda, a la que White y yo fuimos, cuando explorábamos la ciudad, quiero ir ahí –

.

..

- …Te lo digo, vi a Dawn peleando, es imposible que fuera otra persona, incluso si Aurora le llama de otra forma, estoy segura que era ella, pero ni siquiera se molestó en dirigirme la mirada… ¡Esa chica está siendo cruel conmigo! –

- Dawn estaba conmigo a esa hora, viendo mi batalla, es imposible que sean la misma persona, debes haberte equivocado… –

- ¡No hay forma que haya dos personas tan parecidas, May!, ¡Esa chica debe odiarme, por ganarle esa encuesta de popularidad, en el último "Top Miss Coordinadora"! –

- …Aunque hacer la entrevista en traje de baño, fue trampa, Lisia –

En una discreta heladería, ubicada en el área de la azotea de la ciudad, el gran parque "natural", dos chicas discutían animadamente, disfrutando de un helado. Una de ellas, era May, quién miraba con una expresión irónica a su compañera y amiga coordinadora, Lisia, una hermosa y glamorosa chica de cabellos celestes.

Ambas pidieron una mesa al aire libre, May estaba originalmente preocupada que fueran molestadas por algún fan, sin embargo, contraria a su preocupación, la tienda resultaba ser lo suficientemente poco concurrida para disfrutar, en paz, su postre.

Una tercera chica falta en la imagen, para completar el trio de famosas coordinadoras, que normalmente era fuente de trabajo para varias revistas, lamentablemente, Dawn tuvo que partir a encontrarse con Iris, antes que llegara su turno para pelear.

Sin otra opción, la peliceleste coordinadora, atrapó a May y la llevó a la heladería, mientras fruncía infantilmente el ceño. La castaña, por su lado, lamentó no ser más rápida y huir cuando tenía la oportunidad.

No odiaba a Lisia, pero perdió la oportunidad de reunirse con sus amigas y apoyar a Dawn.

Además…

- Por Arceus, May, ¿Qué hay de mal en mostrar un poco, cuando la situación lo amerita?, además, tenía que hacerlo… de otra forma, sería derrotada por ti y tu engañosa ropa, que te hace parecer más… delgada – (comentó una sonriente Lisia, al mismo tiempo que una vena aparecía en la frente de la castaña)

- …¿Me estás llamando gorda, Lisia? – (susurró May peligrosamente, mientras sus ojos se volvían feroces)

- Claro que no… pero debes admitir, que tu ropa tiende a engañar los ojos de todo el mundo, especialmente… cuando se trata del tamaño de "cierta", parte de tu cuerpo – (respondió Lisia, mientras sus ojos se enfocaban fijamente, en el pecho de la castaña)

La cara de May se enrojeció, mientras se tapaba de la mirada indiscreta de la peliceleste.

- N-No es grande… - (murmuró May)

- Hemos ido a las aguas termales juntas, y sabes que eso no es cierto, definitivamente – (refutó Lisia, entrecerrando los ojos)

- ¡S-Solo es tamaño promedio! – (gritó una roja May)

- …Di eso en la cara de Dawn, veamos si no te golpea, por mentirosa – (respondió una sonriente Lisia, mientras que la castaña desvió su mirada a otro lado, comiendo el helado en silencio) – Me lo esperaba –

Ambas chicas continuaron charlando animadamente un tiempo, hasta un sonido, proveniente del bolso de la peliceleste, llamó la atención de ambas chicas.

Lisia sacó un celular, y contestó la llamada un poco alejada de la castaña, conversó un tiempo, hasta que finalmente volvió con la chica, que le miraba curiosa.

- ¿Qué fue eso? – (preguntó la castaña)

- Mi tío me llamó, dijo que viene en camino… fu, fu – (respondió una risueña peliceleste, causando confusión en May)

- ¿Wallace viene?, Extraño, no recuerdo verte tan emocionada en el pasado, cuando venía a tus concursos – (comentó una curiosa May)

- Fu, fu, fu… no es él quien me importa, sino mi héroe… jamás te lo conté, pero cuando estaba iniciando mi carrera, hubo un chico con el que siempre competí y perdí… ya sean los combates o los concursos, él era imbatible, un genio en ambas especialidades, él fue quién me impulsó a ser quién soy hoy en día… además, es el hombre que robó mi corazón – (confesó Lisia, sorprendiendo a la castaña, que miró con los ojos completamente abiertos, a la chica)

- ¿De verdad?… jamás pensé que tendrías ese tipo de pasado… sin contar ese chico que hablas… pero sí era tan buen coordinador y entrenador, ¿Entonces, por qué no lo he conocido?, ¿Se retiró? – (preguntó May, mirando curiosa a la peliceleste)

La pregunta de la castaña, calmó al instante la emoción de la peliceleste, que frunció el ceño y suspiró, mientras su expresión tenía un dejo de tristeza.

- Haah… no lo sé, lo último que supe de él, fue que se estaba preparando para ser parte del Alto Mando de mi tío… después, se le perdió el rastro – (murmuró Lisia, mordiendo con su helado)

- Y-Ya veo… debió ser duro… entiendo el sentimiento – (murmuró May, colocando una expresión complicada)

- ¿Lo entiendes? –

- Pues claro… recuerda, tanto yo, como Dawn, podemos comprender el sentimiento, de perder todo contacto con alguien preciado para uno… -

- Cierto… está ese chico… ¿Cómo se llamaba? –

- Ash –

- Cierto, él… recuerdo que ustedes lo buscaron durante mucho tiempo… ¿Además, no fue él la razón de que ambas decidieran unirse a este torneo?, ¿Pudiste encontrarlo? –

- Eso… sí… pero volvió a irse –

- ¡¿Se fue?!, ¡¿Qué le pasa a ese tipo?! –

- Bueno… tal vez, tenía sus razones –

Lisia miró confundida a May, la castaña se quedó en silencio, mirando fijamente el helado en su mano, y comenzar a comerlo con ira.

La mañana en que Ash volvió a irse, Misty, Dawn y ella quedaron impactadas y profundamente heridas, hablaron con la madre del joven, pero la Sra. Ketchum solo sonrió débilmente y les dijo que no sabía el desino del su hijo.

También descubrieron que las chicas que estaban con Ash, también desaparecieron esa noche, mucho antes, que cualquiera de ellas se despertara. Eso llevó a estallar la ira de ellas, quienes inmediatamente pensaron que el azabache se fue con ellas.

Las 3 juraron darle una paliza al azabache, si lo encontraban, una vez más.

- …M-May, tranquilízate –

- Ese idiota… ¡Llevamos años buscándolo y luego se larga!, ¡¿Y quizás con quién?!, ¡Apuesto que se largó con una de esas mujeres! –

- Y-Ya veo… -

- ¡Además, ahora que nos inscribimos en este torneo!, ¡Ni siquiera aparece en la maldita lista de participantes!, ¡¿Para qué fue todo este problema?!, ¡Pude evitarme toda esta maldita competencia y solo venir a hacer turismo! –

- ¿Y-Y qué hay de obtener gloria para los coordinadores? –

- Wallace puede hacer eso si quiere, además, si solo es gloria, siempre puedo ir y darle una paliza a cualquier idiota de la Unión –

- …No dejes que tus fans te escuchen, por favor –

Ambas chicas conversaron un tiempo, cuando dentro de la tienda una voz agraciada y animada fue escuchaba. Las chicas se miraron y luego vieron a la puerta, de la cual apareció un sonriente peliceleste, moviéndose con confianza ante el par de chicas.

Entonces, con completa naturalidad, se sentó entre ambas, mirando casualmente el menú y, posteriormente, chasqueando los dedos.

- Un Amorino Luvdisc, por favor –

May y Lisia vieron sin palabras al hombre, el cual casualmente ordenó con la mayor confianza del mundo, además de irrumpir en el lugar, ignorando la presencia de ambas.

Suspirando, la peliceleste miró fijamente a su tío, que se arreglaba la bufanda con comodidad.

- Tío Wallace, ¿Dónde está mi invitado? – (preguntó la peliceleste, llamando la atención del campeón)

- Oh, dijo que tenía que hacer una llamada, vendrá luego, tranquila Lisia – (respondió el hombre, con una sonrisa brillante, antes de girarse a la castaña, que se tensó) – Veo que sigues usando el mismo estilo, Princesa, oh, perdón, ahora es "Mariposa", ¿no? –

- Un gusto verte otra vez, Wallace… y por favor, llámame May, es la enésima vez que te lo digo – (respondió May, sonriendo irónicamente)

- Bah, qué diversión hay en eso… ¿Hm?, ¿No estás con la "Hada" hoy?, Pensé que eran inseparables, incluso – (preguntó Wallace, alzando su ceja y mirando curioso a la castaña)

- …Dawn fue a ver a Iris, tenía una batalla difícil… en más de un sentido… yo también debería estar ahí, por cierto – (respondió May, colocando una mirada compleja)

- Oh, luego se lo explicaré a Iris, no te preocupes… lo cierto, es que también es un gusto encontrarte aquí, la persona que viene, es tu antecesor, en esta lucha por la dignidad de los coordinadores… aunque se fue, y abandonó su tarea, espero que puedas aprender una o dos cosas de él, después de todo, creo que es más fuerte que tú – (respondió el hombre, cruzando sus piernas)

- ¿Es fuerte? – (preguntó May, girando la cabeza, confundida)

- En su época, era un fuerte candidato a convertirse en Élite 4, no es una posición que muchos puedan tener – (respondió Wallace)

- Además, pese a su corta edad, él ya llevaba varios títulos de Ligas Pokemon, además, incluso ganó un par de Gran Festivales… estaba a un paso de convertirse en Maestro Coordinador – (añadió Lisia, sonriendo)

- Increíble… - (comentó May, genuinamente impresionada, aunque luego frunció el ceño y llevó su mano a su barbilla) – Aunque todavía no recuerdo a nadie así… -

- Fu, es normal que no lo recuerdes… después de todo él usaba un… oh, ya llegó –

La mirada de la castaña se giró, y vio a la persona recién llegada al balcón.

- ¿Eh?… ¿Ruby? –

- ¿Huh?… ¿May? –

Ruby y May se vieron el uno al otro.

Confusión y duda llenó el rostro de ambos, mientras se veían fijamente el uno al otro.

Wallace y Lisia se miraron el uno al otro, confundidos por la situación.

La habitación se llenó de un incómodo silencio, sin embargo, May rompió el ambiente, parándose y golpeando fuertemente la mesa, al mismo momento.

- ¡RUBY! –

El fuerte gritó de la castaña, sorprendió a los presentes, especialmente a Ruby, que retrocedió varios pasos, chocando con la puerta de entrada. Los pelicelestes, tampoco pudieron seguir el rumbo de acontecimientos, especialmente, cuando la castaña pasó por un lado de ambos, llegando al joven, con una mirada entrecerrada e irritada.

- ¡¿Sabes cuan preocupado tienes a tu padre, idiota?!, ¡Ya estás demasiado grande para darle problemas!, ¡¿Sabes cuantas veces, ha llamado a todos tus antiguos amigos, para preguntar por tu paradero?! –

- E-Espera May, estoy seguro que hablé con él hace 3, no, hace 4… 7 meses… -

- ¡El profesor Birch merece saber de su hijo, idiota!, ¡Tienes suerte que mi padre siempre puede acompañarlo, pero no creas que yo soportaré ese tipo de actitud! –

- ¡¿…?! –

Wallace y Lisia miraron perplejos al joven con gorra, cuya expresión estaba teñida de complejidad.

Ruby, por su lado, sonrió forzadamente, mientras pensaba en su padre, el famoso profesor de la región Hoenn. Su origen es algo que, incluso varios de sus compañeros desconocían, salvo por Ash y un par, que lo descubrieron por sí mismos.

No fue porque desconfiara de ellos, ni era por algún particular origen, que no podía ni compararse al de Ash, Platinum o Silver, cuyas familias eran tan absurdas como podría esperarse. En su lugar, simplemente, fue por una razón tan simple, como que nadie le preguntó de esto, y seguramente, incluso si lo sabían, no cambiaría nada su relación.

Aunque, claro, incluso el despistado Gold se aseguraba de comunicarse con su familia, y es cierto, que su padre siempre le dio la suficiente libertad, como para no necesitar llamarlo todo el tiempo.

Pero a este paso, Ruby temía ser llamado el segundo Ash, si todos sabían lo olvidadizo respecto a esto.

Pero eso era secundario, después de todo…

- Siento que mi padre les haya dado problemas… gracias May – (comentó el joven, sonando apenado)

- ¿Hm?, Oh, no hay problema, nuestras familias tienen años de ser conocidos, después de todo… de cualquier manera, ¿Qué haces aquí Ruby? – (preguntó una confundida May)

- ¿Eh?, P-Pues… Wallace me llamó aquí – (respondió Ruby, sonriendo irónicamente)

- ¿Oh?, ¿También vienes a conocer al chico que esperaba Lisia?, ¿Sabes quién es?, Me han dicho que era muy bueno – (comentó May, llevando su mano a su barbilla) – Es fuerte en concursos y batallas pokemon, no debe ser un chico normal y corriente, ¿no? –

- ¿Qué?, P-Pues… -

La sonrisa de Ruby se tensó y miró nerviosamente a los pelicelestes, los cuales asintieron comprensivamente.

- Ejem, Mariposa, la persona que buscas, está ahí – (comentó Wallace, apuntando hacia Ruby)

Viendo eso, la castaña inclinó su cabeza, mirando detrás del joven, con confusión.

- ¿Dónde? –

La expresión del joven y los pelicelestes se tensó.

- May, míralo a él, él – (comentó Lisia, mirando directamente a Ruby)

La castaña se volvió para mirar a Ruby, una vez más, pero volvió colocar una mirada confundida y complicada.

- ¿Ruby? – (preguntó May, mirando confundida a los pelicelestes)

- Sí, es él, Mariposa – (respondió Wallace)

- …¡Ya veo!, ¡Es una broma! – (comentó una animada May, al mismo tiempo que asentía a Ruby) – Hey, Ruby, sé que llevamos años sin vernos, pero hey, no necesitas jugar al entrenador misterioso… ya tenemos suficiente con Red, en este torneo –

- No, May escucha… haah, no se lo dije a mi padre en su momento, ya que esperaba ansiosamente que siguiera su camino, como investigador, pero la verdad, es que me he dedicado a ser entrenador y coordinador – (comentó Ruby, mirando fijamente a la castaña, que llevó su mano a su barbilla)

- Ya veo… me alegro que te dediques a lo que realmente te apasiona, Ruby – (murmuró May sonriendo dulcemente)

- ¿Eh?… s-sí… gracias, May –

Ruby y May intercambiaron unas dulces sonrisas, entrecerrando los ojos, mientras un silencio cómodo envolvía el ambiente.

Wallace y Lisia fruncieron el ceño, mientras parecían ver un fondo rosa entre ambos jóvenes. La peliceleste tenía una ceja alzada, mientras que su tío entrecerraba los ojos, mirando a cada uno.

El tiempo parecía detenerse con ambos jóvenes, cuando May volvió a hablar.

- Entonces, ¿Dónde está el concursante que esperaba Lisia, Ruby?, Me alegro que te guste lo mismo que a mí, así que de seguro será una gran inspiración para ti Ruby, quién recién comenzó su propio camino –

Las palabras de la sonriente castaña, fue como un balde de agua fría para cada uno de los presentes, quienes quedaron paralizados. Todos miraban pasmados a la castaña, que parecía tener una gran interrogante en su cabeza.

Suspirando, Ruby llamó a May.

- …May, yo soy la persona que fue invitada – (comentó Ruby)

- ¿Eh?, ¿Pero no acabas de comenzar tu aventura pokemon? – (preguntó May, girando su cabeza, confundida)

- ¡Inicie mi viaje, un año, antes que tú!, ¡Eras tú la que deseaba irse a un viaje de turismo, en lugar de iniciar tu viaje como entrenadora!, ¡Decidiste quedarte en casa, mientras que Harrison y yo, partimos como corresponde, a los 10 años! – (gritó un molesto Ruby)

- Hey, eso es cruel, tu sabes que siempre tuve problemas con los pokemon… yo era muy inmadura entonces, y que mi padre fuera tan insistente, no lo hizo mejor – (se quejó May, haciendo un mohín)

- Sí, lo entiendo… pero podrías, al menos, recordar, cuando tus amigos de la infancia iniciaron su viaje, ¿sabes? – (murmuró Ruby, cansado)

- ¿Amigos de la infancia?, Yo no sabía eso – (comentó Lisia, metiéndose en la conversación, con una forzada sonrisa) - Pensé que Brendan no tenía amigos, ya que siempre estaba solo en cada presentación –

- …¿Brendan?, ¿El Kaiser de Hoenn? – (preguntó una confundida May, frunciendo gravemente) – ¿El ganador 3 Grandes Concursos y el único coordinador conocido, que ha empatado con Wallace, en una presentación de exhibición?, ¿Ese Brendan? –

- Sí, él es ese Brendan, doy fe de ello – (contestó Wallace, asintiendo orgullosamente)

- …Brendan fue mi nombre artístico, también fue el nombre que inscribí para la Liga y torneos que gané… un gusto, May – (respondió un sonriente Ruby, haciendo que May soltara su helado, cayendo al piso)

May frunció gravemente el ceño, mirando de arriba hasta abajo a Ruby, escéptica y grito.

- ¡E-Eres una maldita celebridad! – (gritó May, retrocediendo varios pasos, mirando al joven, como si fuese un fantasma) - ¡¿Qué rayos hacías?!, ¡Creí que estabas perdiendo tu tiempo en algún lugar al azar, coqueteando con cuanta chica se te acercara!, ¡¿Cómo te convertiste en alguien importante?! –

- ¡Espera un maldito segundo!, ¡¿En qué momento he coqueteado con alguna chica?!, ¡Jamás hice algo como eso! – (gritó un molesto Ruby, incapaz de dejar pasar por alto esas palabras)

- Recuerdo a Jasmín, la hija de la señora de la tienda, a Andrea, la hija de esa pareja que venía de Unova, Jannah, la hermana de Harrison… además, supe más tarde, que te confesaste a la enfermera Joy de nuestra ciudad… e incluso a mí, si mal no recuerdo – (comentó May, llevando su mano a su barbilla con los ojos entrecerrados)

Las palabras de la castaña fueron como una piedra, cayendo en un tranquilo lago, causando que inmediatamente Ruby fuera el centro de atención, sintiendo, claramente, la mirada filosa de Lisia lo atravesaba.

- ¿…Es eso así? – (susurró Lisia, cuyos ojos parecían haber perdido el brillo)

- ¡Espera!, ¡Eso fue un simple malentendido!, ¡Solo era un niño!, ¡¿Cómo pueden tomar esas palabras en serio?! – (gritó un desesperado Ruby)

- Hou… así que Ruby era así de mujeriego, desde hace tanto tiempo, el mundo de los coordinadores caería en caos, si se sabe una información tan explosiva – (murmuró Wallace, mirando al joven, sorprendido)

- Lo peor, es que todas las otras chicas de mi edad, querían que Ruby fuera su novio… aunque al final se fue de viaje, para no volver – (añadió May, negando con la cabeza)

- …Ahora que lo pienso, siempre hubo un gran grupo de coordinadoras, que siempre estaban detrás de él, e incluso varias veces, le vi junto a mujeres varios años mayor que él – (murmuró Lisia, frunciendo el ceño fuertemente)

- ¡Es un malentendido!, ¡Solo me daban consejos! –

- Oh, pero ahora que lo pienso… Ruby también se llevaba muy bien, con Phoebe y Glacia, dos de los Élite 4 de nuestra región – (comentó Wallace, asintiendo reflexivamente)

- ¡Es solo un malentendido! –

Ruby respiró agitadamente, atormentado por las falsas acusaciones, que una tras otra, llegaron tras otra, incriminándolo y hundiéndolo más gravemente, en cada segundo.

Nunca antes, sintió tanto la necesidad, de pedirle un concejo a Ash, el especialista en crear malentendidos estúpidos.

- No necesitas gastar excusas conmigo, Ruby… pero espero que seas más serio con las relaciones, ninguna mujer se merece ser engañada así – (comentó May, entrecerrando sus ojos)

- Ciertamente, ese tipo de comportamiento es una vergüenza para todos los coordinadores, Brendan – (murmuró la peliceleste, frunciendo el ceño)

- …Lo siento –

Rindiéndose, el joven se hundió en su asiento, mientras que las dos chicas, suspiraron al ver al joven en ese estado. Wallace, por su lado, tenía una satisfecha sonrisa, viendo el estado de las cosas.

- Fu, fu, no esperaba menos de mi sobrina… –

Ruby gruñó por lo bajo, mientras que Lisia miraba fijamente al joven en su asiento.

- Haah… veo que el tiempo no te ha cambiado en lo más mínimo, Brendan, dime, ¿Sigues trabajando en tus rutinas?, ¿O has decidido abandonar los Concursos definitivamente? – (preguntó la peliceleste)

- Cierto, ha pasado mucho tiempo, desde la última vez, que se escuchó el nombre de "Brendan"… – (añadió May, mirando curiosamente al joven)

- Yo… he estado ocupado, no necesitas preocuparte, trabajo ocasionalmente en mis rutinas, puedo volver cuando sea – (murmuró Ruby, desviando nerviosamente la mirada, mientras que la peliceleste, fruncía el ceño)

- ¿Oh, no has perdido el tiempo con más mujeres?—¡Ouch!, ¡¿Lisia?! – (preguntó Wallace, recibiendo una patada bajo la mesa, por parte de su sobrina)

- Ya pasó el tiempo de las bromas, tío… - (murmuró Lisia, girando su mirada al joven, con una mirada seria) – Hey, Brendan, ¿Crees nosotros los coordinadores, somos una broma? –

- ¿Huh? –

Ruby abrió ampliamente los ojos, mirando sorprendido a la peliceleste, quién no inmutó su miranda, viendo al joven con una expresión crítica. May y Wallace también vieron a la chica sorprendidos, pero pronto, Wallace cerró los ojos y asintió en silencio.

- "Trabajo ocasionalmente en mis rutinas"… ¿Crees que puedes volver al escenario con ese tipo de actitud?, ¿Desde cuándo te volviste un idiota tan arrogante?, ¿Acaso te estás burlando de todo el trabajo duro, en el que invertimos nosotros? – (comentó Lisia, al mismo tiempo que Ruby fruncía el ceño)

- Yo jamás me he burlado de ustedes, Lisia – (respondió Ruby)

- Pues pareciera que lo haces, con esa actitud, con esa poca disposición… no digas que regresarás cuando quieras, el Brendan del pasado, era talentoso, sí… pero pasabas incontables horas perfeccionando cada técnica, cada paso, cada rutina… eras un trabajador incansable, que hizo del escenario, su estilo de batalla… ¿Pero, qué has hecho estos años?, ¿Sabes cuantos coordinadores han perdido todo su trabajo, solo por detenerse a medio camino? – (preguntó Lisia mirando fijamente al joven)

- ¡E-Espera!, Lisia, de seguro Ruby tuvo una buena razón… no necesitas molestarte tanto – (comentó una nerviosa May)

- Alto, Mariposa… esta vez, deja que Lisia siga hablando, esto es por el propio bienestar de Ruby – (comentó Wallace, palmeando el hombro de la chica)

- P-Pero… -

May miró contrariadamente a Wallace, que solo negó con la cabeza, haciendo que la chica se tensara, viendo nerviosa el desarrollo de la situación.

- Brendan, ¿No dirás nada? – (preguntó Lisia, mirando fijamente al joven)

Ruby se enfrentó a la mirada de la peliceleste, era una mirada pura, pero decidida. Él no estuvo para verlo, pero estaba seguro que la chica trabajó mucho.

Ambos tuvieron un pasado conjunto, siendo tanto rivales, como amigos, se encontraron muchas veces en el escenario, y se conocían como la palma de la mano. Durante su tiempo compitiendo como coordinador, ella fue muchas veces una mentora para él, con conocimientos avanzados, gracias a su tío, pero con su talento natural, logró varias veces alcanzarla, haciendo que la chica se frustrara con él.

Aquellos días, en el que solo él y ella competían, era algo que Ruby apreciaba mucho.

Posteriormente, se interesó en los combates, haciendo que su relación se distanciara en lo profesional, pero dado que entrenaba con Wallace, se podría decir que prácticamente se veían todo el tiempo.

Él no podía mentirle, no a Lisia.

- …Dejaré los Concursos –

May abrió los ojos sorprendida, Wallace entrecerró los ojos y Lisia suspiró, bajando lentamente su cabeza, con una expresión indescriptible para todos.

- Ya veo… supongo que era que… eventualmente harías… –

Y con esas palabras la peliceleste se levantó, sacó el dinero de su helado y luego intentó irse. Pero antes que pudiera retirarse, el joven la tomó de su muñeca, deteniéndola en medio camino.

- Déjame terminar… dejaré los concursos, pero no dejaré de ser un coordinador, no ignoraré esa parte de mi vida, ya que lo que soy hoy en día, nació de ser un coordinador… y gracias a ti, Lisia –

- …Ya veo, déjame ir ahora, tengo cosas que hacer –

- …Seguro –

Lisia se retiró tras eso.

May intentó salir tras la chica, pero Wallace la detuvo, negando con la cabeza y levantándose tras la chica. Antes de irse miró ligeramente al joven, con una ligera sonrisa en su rostro.

- Me alegra que finalmente se lo dijeras, da tu deuda por saldada… espero verte en el futuro, Ruby, estoy ansioso de competir con Steven y contigo, por el título que realmente mereces… ¡Adieu~, Mariposa! –

Y con esas palabras, Wallace desapareció tras Lisia, dejando a los dos jóvenes originarios de Hoenn, atrás.

May miraba fijamente a Ruby, con una mano puesta en su barbilla, mientras que Ruby mismo, parecía perdido en sus pensamientos.

- Ruby – (llamó May, llamando la atención del joven) - ¿Qué opinas de Lisia? –

- ¿Eh?… Ella es una amiga – (respondió un confundido Ruby)

- ¿Seguro? –

- Claro, es mi amiga –

- ¿De verdad? –

- Naturalmente… ¿A dónde quieres llegar, May? – (preguntó Ruby, frunciendo el ceño y mirando sospechosamente a la castaña)

- …Creo que hacen una gran pareja – (respondió May, cuyos ojos parecían brillar de la emoción) – Quiero decir, no puedo evitarlo, ¿no?… ¡Esa interacción entre ambos parecía una confesión de amor!, ¡Se veían muy bien juntos!… Fu, fu, fu, no puedes ocultarme este tipo de cosas Ruby, sabes que he sido una experta en el amor, toda mi vida –

- …¿Qué? –

Ruby miró con ojos vacíos y perplejos a May, quien tenía ojos brillantes, que casi parecía tener estrellas en ellos. El cerebro del joven pareció hacer un corto circuito, mientras que May escalaba todo el asunto.

- Se veían taaan lindos, ¿Quién diría que nuestro Ruby, finalmente, tendría seriamente alguien en su mente?, No te preocupes, hablaré con Lisia, arreglaré las cosas para que ambos puedan estar juntos, solo déjaselo todo a May – (comentó una confiada May)

- ¡Espera, espera, espera!, ¡¿Dé dónde diablos sacaste, que yo estoy enamorado de Lisia?! – (gritó un desesperado Ruby)

- Por Arceus, que eres denso… - (murmuró May, haciendo que al joven le creciera una vena en la frente)

- ¡T-Tú eres la densa!, ¡A-Además, lo sabes!, ¡¿No?!, ¡L-La chica que me gusta… la chica que siempre me ha gustado, e-e-e-es…! –

- ¿Has tenido una chica así, todo este tiempo?, ¿De verdad?, ¿La conozco? – (preguntó May, girando su cabeza, mirando confundida al joven)

- Haah… mucho, incluso me le confesé de joven – (respondió Ruby, suspirando con un gran dolor de cabeza)

- ¡¿Eh?!, ¿De joven?, ¡¿Y qué te dijo?! – (gritó la castaña, mirando emocionada al joven)

- …Se rio, y me dijo que me veía como su hermano mayor, peor aún, cuando la invité a ir conmigo a mi viaje, me dijo que prefería irse de vacaciones – (murmuró Ruby, colocando una expresión compleja y entrecerrando los ojos)

- ¿Eh?, ¿De verdad?, Fu, fu… vaya pensamiento, apuesto que seriamos amigas, preséntamela –

La inocente y alegre respuesta de la castaña, causó que Ruby golpeara involuntariamente su cara, desesperado.

Gruñó en sus adentros, mientras se disculpaba con Diamond.

May giró su cabeza confundida, pero tras unos segundos de espera, Ruby alzó su mirada con una expresión decidida en el rostro, cosa que hizo retroceder involuntariamente a la castaña, con una sonrisa rígida en el rostro.

- May, escúchame atentamente –

- ¿Si? –

Una sensación ominosa surgió en la cabeza de la castaña, pero, aun así, decidió escuchar al joven con seriedad.

Ruby suspiró ligeramente, y luego miró fijamente a May.

Su hermoso cabello castaño, brillante y limpio, sus ojos azules como el mar, dulces e inocentes, pero que ocultaban una gran fuerza de voluntad, sus labios rosados y perfectos, capaces de robarles el aliento a cualquier hombre, la dulce y brillante luz roja, proveniente de una cámara sostenida por Pikachu, que comía tranquilamente palomitas de maíz de la mano de Ash, que le miraba con una sonrisa brillante, junto a unas avergonzadas, pero emocionadas Yellow, White y Aurora, que por alguna razón, estaba sobre el regazo del azabache…

Ruby se petrificó en su lugar, causando que May se confundiera.

Pero eso era lo de menos.

Viendo que Ruby finalmente lo había notado, Ash extendió una hebra de aura, que llegó directamente a Ruby.

"Se gravó todo, desde el principio"

Los ojos de Ruby se contrajeron e impulsivamente, gritó de todo pulmón.

- ¡¿POR QUÉ DIABLOS ESTÁS AQUÍ?! –

Como era de esperar, May no supo cómo reaccionar.

.

..

_Núcleo_

- …Aurora, te he sentido distante estos últimos días, ¿Necesitas una de una revisión? –

- Es su imaginación, joven Clemont, el sistema trabaja perfectamente, simplemente dedico mi completa capacidad para observar el correcto funcionamiento de Edén –

- …E-Es eso así… ¿E-Entonces, hay algo de lo que quieras hablar?, N-No hemos hablado durante días… -

- Lo siento, joven Clemont, actualmente todo el sistema está en búsqueda del objetivo "Greed", por lo que, salvo el programa de soporte de la Ciudad y la guía de las "Blancas", me disculpo por no poder cumplir con su petición –

- N-No, no te preocupes, lo comprendo… déjame ayudarte con la sincronización del resto de sensores, quizás pueda aumentar la velocidad de sincronización, si yo mismo me involucro –

- Entonces, le encargo eso –

Clemont suspiró cuando volvió su mirada a la pantalla y acercó el teclado para comenzar a trabajar, en la sincronización de los sensores a la onda de aura.

El proceso resultó más complicado de lo que ambos, la IA y el joven, pudieron comprender, originalmente.

Actualmente, solo el 30% de los sensores en Edén, tienen incorporado el sistema de detección, y actualmente trabajan en otro 30% de estos, manteniendo operativos, solo el 70% de los sensores en la ciudad.

Aurora no tenía problemas, pero Clemont ya llevaba más de 30 hrs trabajando sin descanso. El joven estaba agotado, pero sabía que no podía confiar su trabajo en otra persona, después de todo, Ash fue enfático en lo peligroso de lo que hacían actualmente.

Nadie, salvo Aurora, los campeones y él, sabían que estaba trabajando junto con "Red".

El resto de ingenieros y científicos, de hecho, seguían celebrando su triunfo tecnológico, jactándose ante entrevistas extranjeros y la comunidad científica, o bien, decidieron tomarse unas "vacaciones", mientras Aurora maquillaba toda información que llegaba a ellos.

Creían tener el completo control de la ciudad flotante, ignorantes de la evolución radical de Aurora. Ahora, era un sistema independiente y autónomo, con la capacidad de, incluso, "desafiar" las ordenes que le impongan, incluso aquellos en la sala de mando.

Esa habitación es ahora, solo un cascarón vacío.

El único control, estaba ahí, en el núcleo de Aurora.

Pero contrario a la expectativa brillante de Clemont, la IA se había comportado extraña, desde el comienzo del torneo.

Sabía, gracias a su propia vigilancia, que Aurora tuvo muchos problemas controlando y coordinando con Ash. Originalmente, el rubio tuvo mucho temor que existiera una discordancia entre el joven azabache y la IA, quienes parecían no coincidir en muchas decisiones, especialmente, gracias a la terquedad de Ash.

Pero… ¿No se estaban llevando demasiado bien, últimamente?.

Aurora tiene un sistema automático de soporte, las llamadas "Blancas", bajo el cual sus miles de copias funcionan. Puede parecer que están conscientes, ya que responden a cada pregunta e interacción activamente, pero poco sabían, que Aurora, el núcleo y, por tanto, la real, apenas prestaba atención a estos.

Pero, Ash y Crimson… esos eran una cosa distinta, especialmente el azabache.

No solo medió entre Ash y los campeones, ella también ayudó a sus amigos con esa escandalosa idea de promoción de su local. Aurora actualmente llevaba un seguimiento del joven y sus amigos, una lista hecha por el mismo Ash, en la que se encontraban los miembros de Crimson y otros más.

Alguno conocía Clemont, e incluso se sorprendió al ver un par.

Pero eso no explicaba el extraño apego que tenía hacia el azabache, dónde quiera que este fuera, le acompañaba una Aurora, conectada directamente al núcleo, y siempre parecían bromear el uno con la otra, ignorando a todo el mundo a su alrededor, teniendo un comportamiento anormal, al mostrado al resto de "invitados" en Edén.

La anormalidad fue a tal grado, en que incluso Clemont, su creador, tuvo dudas, al ver el comportamiento tan… humano, de la IA.

Al principio, decidió no darle importancia, pero ahora…

La mirada del rubio, se dirigió a una pestaña, en la cual estaban las principales cámaras de Edén, que servían de "ojos" para Aurora.

Ahí, una peculiar imagen se le presentó.

- Aurora, hay una "Blanca" directamente conectada al sistema principal… está en una heladería junto a Red –

- Es vital para Edén, que la vigilancia al campeón Red sea permanente, se ha creado todo un protocolo para mantener su monitoreo continuo y estable, en caso de que cree más caos del necesario… así lo he estimado –

- Ya veo… Pero antes dime, ¿Por qué la imagen proyectada de la "Blanca", parece venir desde el regazo de Red?, ¿Tienes a la "Blanca" sentada en su regazo? –

SWITCH

- …Error, la única visión del campeón, es lateral –

Clemont miró con ojos fríos, la pantalla frente a él.

Ahí, la cara del joven azabache aparecía desde un costado, muy cerca de su cara, mientras le daba helado a su Pikachu, que estaba sobre su cabeza.

Los ojos muertos del rubio, no se fijaban en el joven, sino en el pequeño fragmento blanco, bajo la barbilla del azabache. Estaba 100% seguro, que una copia de Aurora estaba ahí, y como prueba de eso, estaban las filosas miradas de las dos chicas, apenas tocando su helado, a un lado del joven, manteniendo sus ojos fijos en el regazo de este.

Por cierto, la imagen del azabache, desde el regazo, fue borrada misteriosamente.

La mirada el rubio se dirigió a la IA, estrechando su mirada.

- …Aurora –

- Espere, algo pasa –

Y con esas palabras de la IA, el sistema de alarma de la ciudad comenzó a sonar.

.

..

Los radares de Aurora detectaron algo acercándose a la ciudad, no era ni un ferry, ni un avión, mucho menos un pokemon.

Lo que sea que se acercara, fue algo que venía desde las profundidades del mar, y no podía ser un pokemon, gracias al sistema integrado a la ciudad, que emitía ondas especiales, que impedían que los pokemon salvajes que se acerquen demasiado a la ciudad.

Aquello solo podía ser humano, y seguramente hostil.

Y aquello, activó el sistema de defensa de la ciudad, causando caos en la sala de control y el núcleo de Aurora.

Todo el mundo sabía del sistema de defensa en Edén, no era una broma, ni una, e incluso si el sistema que mantenía a los pokemon fuera fallara, incluso un pokemon legendario como Kyogre, sería rechazado si fuese a tomar a la ciudad como su enemigo.

Varias decenas de miles de esferas brillantes, salieron expulsadas de la base de la ciudad. Adentrándose en el fondo oceánico, las esferas crearon espectáculo brillante y colorido, que podría confundirse con otro espectáculo artístico de la ciudad.

Pero, no debían confundirse, cada una de esas brillantes esferas, era un arma oceánica, cargadas con una feroz energía eléctrica, comparables al rayo de un Raikou. Actuaban como una red, capaz de capturar a todo intruso mediante una imitación del ataque Electrotela. Pero su principal función, es ser minas submarinas, en caso de detectar una amenaza.

Y tal arma, ahora se encontraba en el camino de los 5 objetivos, que fueron detectados por el radar. Sin embargo, quizás porque los sensores estaban siendo reemplazados y actualizados, los 5 objetivos estaban demasiado cerca de la superficie, haciendo que fuese peligroso que estas explotaran.

El sistema de defensa, así como Aurora, fue puesta en una situación difícil, en la que no podían darse el lujo de esperar más tiempo, pero la inesperada emergencia, hizo que la arma se quedara estática, calculado la mejor situación posible.

Lamentablemente, tal lujo, era algo que la ciudad de Edén, no tenía.

¡…!

Un grito ensordecedor e indescriptible es escuchó, desde el fondo del océano hasta la superficie, y resonando por la ciudad.

Entonces, las miles de minas explotaron, haciendo que un brillante espectáculo que sacudió las aguas y la ciudad.

El sistema de Flotabilidad, el sistema de Balance y el sistema de Defensa, de la ciudad cayó en emergencia, mientras que los sistemas de vigilancia, comenzaron a trabajar con la energía de reserva.

Todo el mundo en la ciudad cayó en caos, por la inesperada situación.

Los visitantes se aferraron entre ellos, exigiendo a Aurora una explicación.

Los participantes liberaron a sus pokemon, usándolos para ayudarse a ellos o otros, manteniéndose alertas y confundidos.

Los trabajadores de Edén corrían a cada área afectada, mientras en la sala de control, todo el mundo trabajaba ansiosamente, preparándose para cuantificar el daño.

Y finalmente, Crimson… ellos entendieron QUÉ COSA, llegó.

- …¿Campeón? –

- …Lleva a todos aquellos en la lista que te di, al refugio más cercano, avisa a los campeones, que no permitan el libre movimiento y pon el sistema de alerta al máximo… Aurora, esta es una orden, ni siquiera te atrevas a pedir la autorización del resto… él ya está aquí –

- …Comprendido –

Aurora cerró los ojos y se concentró, Ash giró su mirada a las ansiosas chicas a su lado.

Thump, Thump… Thump, Thump

- Yellow y White, regresen de inmediato a la base, usen a Aurora para llegar lo más pronto posible… avisen a Blue y el resto, que se resguarden y esperen a que Emy llegue, más tarde me reuniré con ustedes –

- ¡E-Espera, A-Ash! –

- ¡¿A-Ash, a dónde vas?! –

- …Iré a ver a Ryota, no se preocupen, hablaremos luego –

Ash sonrió ligeramente, palmeando la cabeza de ambas, cuya expresión era tan pálida como un fantasma.

Incluso si era un poco, quería tranquilizarlas.

Thump, Thump… Thump, Thump

- ¡Ruby! –

- ¡…! –

- ¿E-Eh?, ¡¿E-Espera, ese es Red?! –

Ash miró a May, entrecerró los ojos, apretando los puños, para no temblar.

"…Dawn, Misty, Iris y los demás… ¿Siguen en la ciudad?… ¿Cuántos de mis conocidos siguen por la ciudad?"

Frunció el ceño y alejó esos pensamientos.

- Ruby… lleva a May a lugar seguro, averigua dónde está Platinum y vuelvan a la base –

- …Entendido –

- ¿Huh?, ¿E-Espera, cómo sabes mi nombre…?, ¡Auch!, ¡Espera, Ruby!, ¡¿A dónde me llevas?!, ¡E-Espera! –

Ruby frunció el ceño, igualmente confundido, pero obedeció rápidamente, llevando de la mano a la castaña, cuya expresión estaba teñida de miedo y confusión.

Ash vio la expresión de May y rápidamente giró su mirada, temiendo que ella pudiera ver la preocupación en su rostro.

Thump, Thump… Thump, Thump

- …¡Charizard! –

Gritando, Ash llamó a su pokemon, el cual respondió su llamado rápidamente.

Descendiendo como un haz de luz roja, Charizard aterrizó en el suelo, dejando unas pequeñas grietas en el suelo.

Acariciando a Pikachu, quien pasó la cámara a una confundida Yellow, el joven subió en el pokemon de fuego, junto a sus pokemon.

Entonces, Ash… no… Red se elevó en el cielo.

Este fue el inició, de lo que, años más adelante, sería llamado el mayor desastre, de la Liga Pokemon, de todos los tiempos.

.

..

Los 5 objetivos… las 5 cápsulas de escape, se elevaron lentamente en medio del océano, ascendiendo a la superficie, mientras las remanentes ondas, causadas por la explosión repentina, las hacía moverse descontroladamente.

Mirando a través de la trizada ventana, un hombre, con una expresión lamentable y una profunda desolación, miraba la sombra de la ciudad cada vez más cerca.

Sostuvo a su herido subordinado en sus brazos, mientras imploraba de todo corazón.

- Anabel, quien quiera que sea… por favor, destruyan todas las cápsulas, no duden… incluso si debemos morir… no dejen que esa cosa llegue a la superficie… –

CONTINUARA…