N/A: Hola!
Espero que hayan tenido unas maravillosas fiestas de fin de año :)
Ahora con ustedes el primer capítulo de este 2024. Como lo prometí, nos espera el más largo de esta historia además de ser uno más de esos capítulos que estaba ansiosa por publicar así que veamos de qué hablarán Ed y Winry.
Ed le dio un par de golpes a la puerta de la habitación de Winry. "¿Winry?" Le dio un par de golpes más. "¿Puedo pasar?"
El silencio al otro lado de la puerta era respuesta más que suficiente pero, haciendo uso de su terquedad, Ed intentó girar el pomo de la puerta descubriendo de inmediato que el seguro estaba puesto.
"Maldición, Winry, abre por favor." Siguió golpeando. "¡Winry!"
De manera repentina la puerta se abrió, congelando el puño de Ed en el aire.
"Te recuerdo que estás en mi departamento, Edward. Así que no tienes el derecho de darme órdenes." Dijo Winry con tono molesto. Sus ojos estaban ligeramente hinchados pero las lágrimas habían cesado.
"Sólo quiero hablar contigo."
"Pues yo no quiero hablar contigo. Estoy harta de tus excusas baratas."
"No son ninguna excusa, Win. Tal vez lo parezca, pero déjame explicarte."
"No te preocupes, Ed. Ya me dijiste lo que querías decirme. El punto es que te vas a ir de mi vida y yo, como siempre, no tengo ni voz ni voto en ello. Está bien, entiendo. Ya estoy acostumbrada." Dijo con amargura.
Ed suspiró. "Sé que no puedo corregir mis errores del pasado pero al menos en esta ocasión quiero ser completamente sincero contigo. Quiero contarte todo lo que tú desees saber y los motivos que me están llevando a tomar esta decisión."
Winry lo miró desafiante por algunos momentos antes de suspirar pesadamente y preguntar. "¿Todo?" Ed asintió con la cabeza. Winry se le quedó viendo algunos momentos sin decirle nada hasta que decidió volver a hablar. "¿Responderás cualquier pregunta que te haga?" Ed volvió a asentir. "Ok, hagamos una prueba... ¿Me amas?"
"Con todo mi corazón." Respondió Ed sin dudarlo.
Winry vio atentamente sus orbes dorados por unos segundos. La devoción y amor que veía en ellos parecían tan reales que su propio corazón se aceleró por un momento.
Winry lo siguió viendo fijamente a los ojos por unos momentos más, antes de suspirar y hacerse a un lado para dejar pasar a Ed. "Está bien. Pasa."
"Gracias." Dijo Ed antes de entrar en la habitación.
Winry se sentó en la cama recargándose contra la cabecera y se le quedó viendo a Ed con una expresión expectante. Notando que el rubio parecía un poco nervioso e inseguro acerca de dónde sentarse, Winry rodó los ojos y le dijo. "Siéntate en la cama. No te voy a hacer nada."
Ed se rascó la nuca antes de hacerle caso y sentarse del otro lado de la cama. Cruzó su pierna de carne y hueso y la prótesis temporal la dejó a nivel del suelo. "Bien… ¿por dónde quieres que empiece?"
Winry se encogió de hombros. "No lo sé. Al fin y al cabo no tengo la menor idea de qué es lo que quieres hablar conmigo."
Ed sintió una punzada de culpabilidad. "Tienes razón, por eso quiero intentar cambiar un poco eso." Suspiró. "Bueno, pues… ¿recuerdas lo que te dije de los dobles?"
Winry asintió con la cabeza.
"¿Qué harías si te dijera que me topé con los dobles de las personas que conocí aquí? Que hay un mundo en el que Maes Hughes es un policía perdidamente enamorado de una florista llamada Gracia y que juntos están esperando a su segundo hijo."
Winry se quedó con la boca ligeramente abierta. Cuando Ed le había mencionado la existencia de "gemelos" en el otro mundo había asumido que el joven alguna vez se había topado con el doble de alguien que había conocido en Amestris pero escuchar directamente la confirmación de sus labios y aún más sabiendo que esa persona había sido el doble de Maes Hughes era aún más sorprendente y doloroso de aceptar. "¿De verdad? Con todos los años que han pasado desde lo del señor Hughes..." Tragó saliva ante el mal recuerdo. "Suena como un sueño. Algo imposible."
"Como diría Greed, nada es imposible."
"Greed… ¿el homúnculo que… estaba en la casa de Dante?" Dijo Winry no queriendo ser tan directa al recordarle el destino que el homúnculo había tenido bajo sus propias manos.
Ed se sorprendió un poco. A pesar de lo poco que le había contado a Winry ella recordaba muy bien todo lo que le decía. Se esforzó por no hacer una mueca por el granito de arena de culpabilidad que se sumaba a su carga antes de continuar. "Sí, él. Ahora que lo pienso, creo que mereces saber qué fue precisamente lo que pasó con Dante y… los homúnculos. Incluida la que tenía aspecto de agua."
Winry se mordió el labio inferior antes de asentir con la cabeza. Desde aquella incursión que ella y Sheska habían hecho a la sala de comunicaciones del Comando Central esa figura había hecho sus ocasionales apariciones en su mente y pesadillas trayendo consigo la incertidumbre de no poder estar completamente segura de si realmente ese ser guardaba alguna relación con Trisha Elric tal y como había sucedido con Wrath y el hijo de Izumi Curtis. Lo más seguro es que así fuera pero nunca pudo hablar de ello ni con Al ni con Izumi, prefiriendo dejar a Al en la feliz ignorancia de lo ocurrido con ese ser durante todo el tiempo que fuera posible y no queriendo causarle más sufrimiento al Izumi al hablar de un tema que resultaba tan personal para ella.
Ed suspiró y comenzó a hablar. A diferencia del último encuentro que había tenido con Winry en Resembool, en esta ocasión le contó absolutamente todo. Desde la confirmación de que Sloth había nacido de la trasmutación humana que él y Al habían hecho, pasando por cuál había sido su final por medio de sus propias manos y toda la confrontación final con Dante.
Winry se llevó una mano a la boca soltando una exclamación de sorpresa. "¡Ed!" Motivada por el miedo, llevó una mano a su pecho sobre su corazón, como si quisiera convencerse de que el joven que estaba a su lado era real. "¿Pero c-cómo? ¿De verdad…" Tragó saliva. " ...moriste?"
Ed tomó la mano de Winry con la suya de carne y hueso y dijo. "Sí, o al menos así se sintió. Tengo vagos recuerdos de haber estado frente al Portal de la Verdad antes de que Al me salvara así que creo que morí pero quedé en una especie de limbo antes de que mi alma se perdiera por completo, si es que eso hace sentido."
Suavemente Winry apartó la mano de Ed para que ella pudiera poner su mano justo al centro de su pecho. "Envy… tu medio hermano te apuñaló aquí." Dijo y Ed asintió con la cabeza. "No puedo creerlo. Rose me contó que habías sido herido pero nunca me dio detalles ni me dijo que… que habías muerto." Una lágrima se le escapó. "Y yo sin saberlo."
Ed limpió su lágrima con un dedo. "No tenías manera de saberlo. Ni yo te lo dije ni se lo aclaré a Rose porque probablemente ella tenga recuerdos muy borrosos a causa del trance en que Dante la puso y no le veía el caso de anguastiarla con algo que ya pasó y que, por increíble que parezca, no pasó a mayores. Digo, de alguna manera estoy vivo ¿no? Y Al…" El joven se encogió de hombros y una sonrisa triste apareció en su rostro. "quién sabe si algún día recupere todos sus recuerdos. Aunque la verdad prefiero que se quede así. Hay muchos recuerdos dolorosos que no le harían ningún bien, además de que podemos construir nuevos recuerdos juntos."
Winry asintió. "Tal vez sea lo mejor." Se acercó a él en la cama y lo abrazó, obviamente sacudida por los eventos que le había relatado. Ed correspondió su abrazo colocando su barbilla sobre la cabeza de la rubia. Se quedaron así en silencio por unos cuantos minutos hasta que Winry se apartó aunque en esta ocasión quedó más cerca de Ed de lo que habían estado en un inicio.
Ella suspiró. "Ya no sé si quiero saber el resto."
"Pues ni modos, ya no hay marcha atrás. Pediste la verdad y la verdad vas a tener." Dijo Ed con una ligera sonrisa antes de continuar con su relato. Esta vez le contó sobre lo que hizo Al (aunque de esto Winry sí tenía una idea de lo que había sucedido), el círculo de transmutación que él había usado y cómo había llegado a un lugar diferente a Londres.
"Al inicio creí que estaba en el mismo lugar pero he llegado a la conclusión de que la verdad es un hijo de perra porque me mandó a un lugar con un idioma completamente diferente, unos años en el futuro y sin ninguno de mis automails."
"Concuerdo, es un hijo de perra."
La espontaneidad del comentario de Winry hizo reír a Ed. "Jamás creí escucharte decir algo como eso." Dijo entre carcajadas.
"Pues se lo ganó a pulso. Casi casi pareciera que se ensañó contigo."
Ed rió un poco más hasta que pudo controlar sus risas. "Me gustaría decir que sí pero en realidad me fui ganando lo que me pasó."
"Eso no es cierto." Dijo Winry con tono firme. "Pudiste haber cometido errores pero nadie se merece pasar por lo que tú viviste, sobre todo considerando que lo único que querías eras reparar lo que hiciste. No es tu culpa que la desquiciada de Dante entrara en la ecuación."
"Pero de una u otra forma terminé eligiendo el camino que tomé."
Winry resopló. "Sí, pero no es como si tuvieras muchas opciones." Winry se quedó callada meditando sus propias palabras antes de añadir. "Al menos hasta ese punto, claro."
Ed se dio cuenta de a qué se refería Winry. "Puede ser…" Suspiró.
Winry también suspiró antes de hablar. "Oye, Ed, entonces ¿qué hiciste cuando llegaste al otro mundo? No debió ser fácil si ni siquiera tenías tus automails." Dijo Winry con sincera preocupación.
"Pues… no fue precisamente fácil. Aparecí en un callejón y me quedé ahí por un rato tratando de asimilar lo que había pasado. Probablemente estuve en una especie de shock. Estaba sorprendido de estar con vida y después no tardé mucho en darme cuenta de que había vuelto a cruzar el Portal." Suspiró. "Cuando finalmente me animé a salir de ahí para ver qué podía hacer para conseguir un lugar donde quedarme me llevé la "maravillosa" sorpresa de no entender ni la más mínima mierda de lo que decían los demás."
"Entonces ¿cómo lograste sobrevivir?" Dijo Winry con voz temblorosa al imaginar vívidamente lo que esa experiencia debió haber sido para Ed.
"Por una desafortunada coincidencia. Tuve que quedarme a dormir en ese callejón por algunos días mientras intentaba encontrar algún lugar donde hubiera una persona que hablara el mismo idioma que yo o simplemente un lugar dónde me permitieran trabajar para comprar algo de comer pero, aunque no pudiera entenderlos, era fácil notar que nadie estaba dispuesto a tener cerca a un aparente mendigo al que le faltaba un brazo y que iba brincoteando en una sola pierna." Cerró los ojos. "Hasta que ella apareció."
"¿Quién?" Preguntó Winry con voz temblorosa.
"Patrice Alberich." Ed abrió los ojos y la vio fijamente. "La doble de mi madre."
Winry tomó la mano de Ed y la sostuvo en las suyas. "Oh, Ed."
Ed inhaló profundamente antes de continuar. "Descontando a mi propia contraparte, ella fue la primera doble que conocí. Cuando recién llegué a la Tierra no había pensado realmente en ello pero ahí comprobé que la teoría de Hohenheim era correcta. Descontando los ojos marrones y el cabello rubio ella era una idéntica copia de mi mamá porque incluso era igual de bondadosa."
Winry comenzó a frotar la mano de Ed con las suyas tratando de brindarle algo de confort a Ed mientras relataba su historia. No quería presionarlo cuando obviamente el rubio estaba teniendo cierta dificultad al contar esa parte de su vida por lo que siguió con su movimiento mientras guardaba silencio esperando a que Ed decidiera si estaba listo para continuar o si prefería dejar el relato ahí.
Agradecido con el gesto de Winry, Ed le dirigió una ligera sonrisa antes de continuar tras una pausa. "Patrice me siguió cuando me vio cojear hasta el callejón. A diferencia de todas las demás personas que me veían con asco, ella se acercó a mí y me ofreció su ayuda. Afortunadamente ella hablaba inglés, aunque estoy seguro de que aunque fuera a señas ella me iba a dar todo su apoyo."
Winry siguió escuchando atentamente el relato de Ed sin soltar su mano en ningún momento. Ed le contó acerca de la gran confusión y dolor que le provocó el estar frente a frente a una persona que portaba el mismo rostro de su madre ya fallecida. Asimismo le contó cómo Patrice Alberich insistió en llevarlo a su casa (descubriendo en ese momento que se encontraban en una ciudad llamada Frankfurt) para darle una comida caliente y un lugar donde dormir al menos por una noche, aunque esa simple visita dio lugar a una temporada en la que Ed estuvo viviendo con ella y su familia: su esposo Ulric de origen alemán (Patrice había nacido en Inglaterra pero había regresado al hogar materno de su padre en Alemania) y su hija de 10 años Giselle.
La familia Alberich tenía una pequeña panadería en la cual Ed estuvo trabajando tratando de recompensarles al menos de esa manera su amabilidad. En varias ocasiones intentó conseguir un empleo para no ser una carga para ellos pero al ser un joven con dos miembros menos y con un nivel básico de alemán (Patrice le comenzó a enseñar alemán pero a veces era más fácil hablarse en inglés, sobre todo cuando la frustración que llenaba a Ed de vez en cuando al tener que aprender un idioma complicado cuando ni siquiera tenía la menor idea de qué podía hacer para intentar volver a Amestris) nadie quiso contratarlo, ganándose repetidas miradas de asco y desaprobación ante la creciente expansión de la ideología de la raza "superior" aria.
Así siguió un par de meses hasta que Ulric lo llevó con él a un viaje a Münich en el que, por azares del destino, Ed terminó reencontrándose con Hohenheim. Aunque le dolió separarse de ellos, Ed accedió a la oferta de Hohenheim de quedarse con él ya que no quería seguir siendo una carga para los Alberich, sobre todo considerando la inflación que estaba mermando los recursos con los que contaban para sacar a flote su panadería.
A pesar de que la convivencia diaria con Patrice se había convertido en una dualidad de calidez y nostalgia, Ed había pensando en regresar a Frankfurt para despedirse de ella en persona pero al final terminó decidiendo sólo mandarle una carta de agradecimiento con Ulric junto con el dinero que se hubiera ocupado en su pasaje de vuelta, por lo que Ed vio en persona a Patrice por última vez una fría mañana de otoño al salir de su hogar sin saber que sería la última vez que la vería, teniendo como recuerdo de ella la receta de las Königsberger Klopse que esa noche le había preparado a Winry.
Durante su estancia en el departamento de su padre, Hohenheim dedicó varios meses a desarrollar los prostéticos con los que Ed había regresado a Amestris al mismo tiempo que estuvo hablando con sus contactos de la universidad para conseguirle a Ed un empleo de medio tiempo como su asistente además de haber logrado inscribirlo en un programa académico que le brindaría a Ed el mejor acceso posible a investigaciones que pudieran darle alguna pista acerca de cómo volver a su mundo.
Transcurridos dos años de su nueva vida con Hohenheim, un grupo de estudiantes extranjeros llegó a estudiar a la universidad de Münich, entre ellos Alfons Heiderich. Ed no habló mucho de sus reacciones al conocer al doble del hermano del que no estaba seguro de si seguía con vida o no, pero Winry pudo ver en su rostro los atisbos de las emociones que debieron embargarlo en ese entonces.
Afortunadamente para Ed, Alfons estaba interesado en las mismas investigaciones que él por lo que tras unos meses decidieron compartir un departamento para poder dedicar todo el tiempo que les fuera posible a su investigación acerca de los cohetes espaciales, además de que para ese entonces Ed estaba viviendo prácticamente por su cuenta ya que Hohenheim había comenzado a hacer constantes viajes de investigación y pasaba pocos días en el departamento.
Al cabo de un año las esperanzas de Ed de volver a Amestris habían menguado considerablemente ya que ni siquiera la ayuda de Alfons y su equipo le había dado la más mínima pista acerca de cómo volver e incluso estaba teniendo el efecto contrario debido a que entre más leía e investigaba más parecía que el método en el que estaba vertiendo todas sus esperanzas parecía ser completamente inútil para lograr su objetivo.
En ese punto Ed le contó de los eventos que lo terminaron llevando de vuelta a Amestris. Desde el encuentro con Noah en una feria hasta la muerte de Hohenheim a causa de Envy e instigaga por la sociedad Thule.
"Lo siento, Ed."
"¿Eh?"
"La muerte de tu padre. Lo lamento mucho. Debió haber sido muy difícil para ti."
Ed parpadeó un par de veces antes de responder. "Oh… gracias, supongo. Incluso ahora no sé cómo sentirme por ello. Ese Hohenheim fue todo un bastardo pero nuestro tiempo juntos en Münich… me hizo darme cuenta de que al menos tenía una que otra cosa buena oculta dentro de su idiotez. Y sin su ayuda… no estoy seguro de si hoy estaría aquí…" Inhaló profundamente para apartar la inexplicable humedad que quiso formarse en sus ojos. "¿Crees que sea correcto que diga que a veces lo extraño?"
Winry lo atrajó hacia sí. "Claro que sí, Ed. Al final de cuentas era tu padre y se volvió un apoyo importante para ti. Quizás eso no compense los años que estuvo lejos de ustedes pero al menos dio lo mejor de sí para ayudarte a encontrar una manera de regresar a tu hogar."
Ed asintió con la cabeza mientras estrechaba a Winry con fuerza. No derramó ninguna lágrima y, por el momento, no intentó pronunciar una palabra más debido a que tenía el presentimiento de que si lo hacía perdería el control de sus emociones.
Pasaron unos minutos así hasta que Ed se separó de Winry dirigiéndole una ligera sonrisa de agradecimiento.
Ed inhaló profundamente antes de ponerse serio y continuar. "Bueno, esta parte de la historia ya la sabes. Eckart logró su cometido y trajo un ejército a Amestris. La nave en la que me viste llegar me la dio Alfons. Hasta el último momento él se esforzó por apoyarme a pesar de que seguramente no fui el mejor de los amigos." La mirada de Ed se entristeció momentáneamente pero Winry prefirió no comentar al respecto. "Gracias a su rápido actuar fui capaz de despejar completamente la gran duda que tuve todos estos años. Al estaba vivo y en su cuerpo original." Tomó una mano de Winry y vio a la rubia fijamente a los ojos. "Y también me permitió volver a ver a la chica que tanto había extrañado y que incluso a través de los mundos hacía palpitar mi corazón como loco."
Winry le sostuvo la mirada mientras un ligero rubor se hacía presente en sus mejillas. "Ed…"
No pudiendo contenerse, Ed se inclinó y besó su frente antes de añadir. "Logré volver a verte y aproveché ese pequeño tiempo para lastimarte." Exhaló pesadamente. "Me dejé llevar por mis impulsos y te besé. No me malentiendas, no me arrepiento como tal de haberlo hecho porque fue algo que llevaba años añorando hacer pero cometí el grandísimo error de no hablar apropiadamente contigo y de eso sí me arrepiento enormemente porque no te merecías que te tratara así."
Winry se quedó viendo su rostro fijamente por algunos segundos, observando fácilmente la sinceridad con la que Ed le estaba hablando. Sin embargo, cuando una de las constantes dudas que había rondando en su mente en todos estos años hizo su aparición no pudo evitar preguntar. "¿Decidiste regresar a la Tierra… por Noah?"
"¿Qué? ¡No! ¿Cómo se te ocurre? No fue por eso."
Aunque el relato de Ed le había dado su respuesta en cierta forma, Winry soltó el aliento que no se había dado cuenta que estaba conteniendo. Uno de los pensamientos que tanto la habían atormentado en estos años finalmente se desvanecía ya que escucharlo de la propia boca de Ed al mismo tiempo que lo veía a los ojos no dejaba duda alguna de que el joven hablaba con la verdad. Sin embargo…
"Entonces… ¿por qué te fuiste así sin más? ¿De verdad eras el único que podía cerrar el Portal?"
Ed exhaló pesadamente. "En mi mente así lo ví. Sin proponérmelo fui una pieza clave para lograr abrir el Portal desde la Tierra así que la invasión a Amestris era prácticamente mi culpa. Tenía que hacerme cargo de mis errores."
"Siempre queriendo cargar con la culpa de todo." Murmuró Winry.
Ed esbozó una sonrisa triste. "Lo siento, así es como soy." Suspiró y agachó su cabeza. "Fue por eso que decidí regresar a la Tierra. Tenía que asegurarme de que el Portal no pudiera volver a ser abierto nunca más. Así que cuando finalmente logramos inmovilizar a Eckart no lo pensé mucho y decidí irme porque no estaba seguro de si había otro ejército esperando atravesar el Portal." Alzó su rostro y vio fijamente a Winry. "¿Al te dio mi mensaje?"
Winry apretó sus puños sobre las sábanas. "Sí, lo hizo."
"No puedo decir que me alegro porque realmente esa fue una idiotez mía. Tú merecías más que eso. Una despedida apropiada."
Winry agachó su cabeza. "Todos estos años creí que el beso no había significado nada para ti ya que tu mensaje era simplemente un 'Gracias'. ¿Gracias por qué? ¿Únicamente por ser tu mecánica? ¿Por soportar la distancia que pusiste entre nosotros? ¿Por cumplirte el capricho de corresponder tu beso sin cuestionarte?" Confesó Winry con amargura.
Ed levantó su rostro con una mano para que pudiera verlo fijamente a los ojos. "Lo lamento tanto, Winry. Jamás voy a terminar de arrepentirme por haberme ido como lo hice. Había tantas cosas que quería decirte pero que no fui capaz de decirte tanto por las circunstancias como por idiota. Cuando te besé una parte de mí fue consciente de que había cruzado una línea y que eso cambiaba todo entre nosotros. Al haberte besado no había vuelta atrás, ya no podía seguir fingiendo que no sentía algo por ti más allá de la amistad cuando lo único que quería era no soltarte nunca más. Por eso debí haberte dicho al menos una parte de mis verdaderos sentimientos aunque Al y Sheska estuvieran ahí pero fui un maldito cobarde. Y cuando llegó el punto culminante de la batalla tomé una decisión impulsiva. No me puse a pensar detenidamente en que tenía que buscarte y despedirme de ti. Mostrarte lo mucho que significas para mí aunque tuviera que irme. Sin embargo…" Suspiró y comenzó a acariciar la mejilla de Winry. "Bien sabes que soy todo un idiota y lo mejor que se me ocurrió decirte fue el mensaje que le pedí a Al que te dijera. Había tanto que decirte pero al final en mi mente cruzó la idea de que quizás lo mejor sería no darte falsas esperanzas porque en ese momento creí que no habría ninguna otra manera de volver a Amestris. No tenía un futuro que prometerte y por eso decidí irme sin hablarte de cómo me sentía de verdad." Una lágrima se le escapó a Winry y Ed la limpió con su pulgar. "Créeme que he estado lamentando mi mal juicio cada día desde entonces."
Winry cerró sus ojos por unos segundos centrándose en la caricia de Ed para evitar que más lágrimas se derramaran. Cuando se sintió en control de sí misma, abrió los ojos e inhaló profundamente antes de hablar. "¿Qué hiciste cuando regresaste a la Tierra?"
Ed acarició la mejilla de Winry una vez más antes de continuar con su relato. "Arrepentirme, ¿qué más podía hacer?" Suspiró. "Cuando la adrenalina del momento pasó, mi mente se encargó de recordarme de golpe lo que había perdido por mi decisión. Ya no te vería a ti ni a Al. No vería a mi hermano crecer. No tendría la oportunidad de buscar tu amor. No vería nunca más los terrenos verdes de Resembool. Nada… Lo había perdido todo." Hizo una pausa antes de continuar. "Y por si eso no fuera poco, también perdí a mi amigo, a Alfons."
Winry soltó un jadeo de sorpresa antes de preguntar. "¿Qué le pasó?"
"Un maldito nazi le disparó cuando descubrió que me había ayudado a escapar hacia aquí." Dijo Ed apretando sus manos en puños. "En medio de mi desilusión al creer que nunca podría volver a Amestris descuidé a Alfons cuando el siempre fue un buen amigo conmigo. Escuchaba todas mis historias con Al aunque creyera que me las estaba inventando e incluso no sólo me ayudó con nuestras investigaciones sino que también me ayudó a mejorar mi alemán. Gracias a él pude desenvolverme cada vez mejor en eventos científicos y en la vida diaria…" Exhaló pesadamente tratando de apartar el escozor que se estaba haciendo presente en sus ojos. "Tal vez hacia el final tuvimos desacuerdos por su insistencia de apoyarse en los recursos que los nazis podrían brindarle si seguía colaborando con ellos pero ante todo fue mi amigo. Un amigo que me ayudó a no sentirme tan solo y perdido en un mundo desconocido…" Golpeó el colchón con un puño. "Un amigo al que inconscientemente asociaba con mi hermano constantemente y al que lastimé al no darle la importancia que merecía y reconocerlo como un ser completamente independiente de mi hermano. Y que aún en su muerte no pude evitar sentir cómo el corazón se me desgarraba al ver muerto a alguien que portaba el rostro de Al." Concluyó Ed agachando su cabeza para que su flequillo cubriera sus ojos.
Sin decir palabra alguna, Winry cerró la distancia entre ellos y lo abrazó, empujando suavemente el rostro de Ed sobre su hombro. Lentamente comenzó a moverse para que los dos se mecieran suavemente y poco después murmuró. "Está bien, Ed, déjalo salir. No te guardes todo. Estás en todo tu derecho de sentir dolor por la pérdida de tu amigo. No importa las diferencias que llegaran a tener, sé que él te apreciaba mucho y que se fue sin guardarte ninguna clase de rencor. Así que no te tortures de esta manera, por favor."
Ed aferró sus manos a la espalda de Winry y comenzó a llorar. No sólo era la muerte de Alfons la que estaba provocando su llanto. Era todo. Todos los años de incertidumbre acerca del destino de su hermano. El haber perdido a Winry. La constante desesperanza de no poder volver a Amestris. El haber visto morir a Hohenheim, prácticamente su única constante en un mundo desconocido, justo cuando al fin lo estaba reconociendo como su padre. El vivir bajo el mismo techo de una mujer que tenía el mismo rostro de su madre pero sin ningún lazo ni recuerdo mutuo que los uniera. Su soledad y el arrepentimiento casi insoportable que había cargado desde que volvió tras la invasión a Amestris y lo que vivió en los últimos tres años y que aún no le había contado a Winry.
Durante su llanto, Winry no se separó de él y siguió meciéndolo y acariciando su cabeza mientras le murmuraba algunas palabras de apoyo para ayudar a tranquilizarlo.
Cuando el llanto de Ed cesó y se convirtió en uno que otro sollozo esporádico, Winry se separó de él y comenzó a depositar suaves besos en sus mejillas y frente hasta que finalmente las lágrimas se habían detenido por completo.
Winry llevó ambas manos al rostro de Ed para acariciar sus mejillas con sus pulgares. "Lo siento, Ed, no debí haberte forzado a hablar."
Ed negó con la cabeza. "No me forzaste, Win. Fue mi decisión contarte todo. No quieras llevarte mi mérito, eh." Dijo esbozando una ligera sonrisa.
Winry correspondió su sonrisa.
Ed se puso serio. "Es más, lamento que me haya tomado todo este tiempo hablar contigo. Hay tantas cosas que merecías saber desde hace tiempo. Tuve la oportunidad de contarte todo cuando estábamos en casa de Rose pero me rehusé a hacerlo como siempre. No es que no confíe en ti porque a ti te confiaría mi vida, es sólo que-"
"No te sentías listo." Terminó Winry por él. "Está bien, Ed. Creo que ahora lo entiendo." Sonrió. "Gracias por hablar conmigo, Ed. No sabes lo mucho que significa el que me estés teniendo la confianza suficiente para compartirme todo esto."
"Siempre he confiado en ti, Winry. Tal vez no sea el mejor demostrándolo pero tú y Al siempre han sido las personas en las que más confío. Aunque…" Soltó una risita. "No le digas a Al porque si no se va a encelar de que te conté a ti y no a él."
Winry se sorprendió. "¿No le has dicho a Al?"
"Sólo algunas partes. Así como a tí no." Suspiró. "Ni siquiera me he atrevido a contarle que estuve viviendo con la doble de mamá ni con Hohenheim. Con Hohenheim no sé si deba decírselo porque al final tendría que decirle que está muerto y no sé, a veces me da la impresión de que todavía tiene la esperanza de que un día vuelva."
"Es su padre, Ed. Tiene derecho a saberlo. Al es más fuerte de lo que piensas y estoy segura de que, a pesar de todo, le hará feliz saber que no estuviste solo y que tú y Hohenheim lograron limar sus asperezas."
Ed se quedó callado por unos segundos antes de responder. "Tal vez tengas razón, pero esa no es una conversación que ansíe tener."
"Tendrás tiempo para prepararte de aquí a lo que Al vuelve. Se lo tienes que decir en persona ¿de acuerdo?"
"Sí, madame." Dijo Ed con un ligero tono bromista.
"Bien." Dijo Winry con una ligera sonrisa.
Ed apartó delicadamente las manos de Winry de su rostro no sin antes depositar un beso en la palma de cada una. Las colocó en medio de los dos sobre la cama sin soltarlas. "Aún no he terminado de contarte todo."
Winry se mordió el labio inferior antes de responder. "¿Estás seguro de querer seguir, Ed? Entendería perfectamente si prefirieras que tuviéramos esta conversación en otro momento."
"No, Winry. Ya te he hecho esperar mucho tiempo."
"¿Seguro?"
Ed asintió con la cabeza.
"Bien, será como tú digas."
Ed inhaló profundamente antes de retomar su relato. "Destruir el portal como tal no fue difícil, simplemente fue cuestión de robar algunos de los explosivos que quedaron en el avión de Eckart y ponerlos por todo el lugar. El caos del momento fue una buena cobertura para robarlos y colocarlos, pero poco antes de activarlos los seguidores de Eckart me descubrieron e intentaron atraparme." Levantó su camisa para dejar ver una cicatriz en su costado derecho. "Me dispararon pero por suerte fue algo relativamente superficial."
Winry lo miró con expresión sorprendida antes de suspirar. "Teniéndote aquí, no diré nada más porque bien podríamos discutir acerca de cuál es tu definición de 'superficial'."
Ed esbozó una sonrisa. "Lo admito, sí sangró bastante pero nada que no pudiera esperar a ser tratado." Su expresión volvió a ponerse seria. "Además en ese momento me sentía tan desconectado de lo que sucedía a mi alrededor al estar pensando en lo que había dejado ir, que sinceramente no me importaba lo que pasara conmigo siempre y cuando lograra destruir el portal y sacar el cuerpo de Alfons de ahí. Él se merecía un funeral apropiado y no quedarse en un lugar dónde terminarían tirando su cuerpo por ahí como si se tratara de basura."
Silenciosamente, Winry tomó su mano y entrelazó sus dedos con los de él, siendo correspondida inmediatamente con un ligero apretón de su parte.
"No fue fácil pero con ayuda de Noah logramos salir de ahí con el cuerpo de Alfons. Pensé que nos seguirían pero una vez fuera nos dejaron en paz y, afortunadamente, ya no supe de la sociedad Thule desde entonces. Al parecer la sociedad fue desmantelada y sus recursos fueron cortados por completo tras el fiasco de Shamballa." Cerró sus ojos momentáneamente antes de continuar. "Después del funeral de Alfons, Noah insistió en quedarse conmigo para hacerme compañía." Winry enarcó una ceja. "Ella se disculpó conmigo, trató mi herida y me ayudó en esos primeros días en los que me adaptaba a tener que quedarme en la Tierra para siempre aunque no sé... creo que una parte de mí nunca la terminó de perdonar pero…" Su tono de voz bajó. "No quería quedarme solo. Ya no tenía a Hohenheim ni a Alfons y había desperdiciado la que aparentemente era mi única oportunidad de regresar a Amestris… así que digamos que no estaba en mi mejor momento."
Winry tragó saliva antes de continuar. "¿Cómo lo sobrellevaste?"
"De la mejor manera que se me pudo ocurrir: con el alcohol." Dijo con una sonrisa triste. "Tan solo había pasado un mes desde la invasión cuando me volví un cliente frecuente de la taberna local. Me pasaba todas las noches ahí bebiendo hasta que quedaba inconsciente o hasta que Noah iba a buscarme. Como ya no veía forma posible de regresar a Amestris me gastaba prácticamente todo mi dinero en alcohol. De por si no es como si tuviera mucho dinero para mantenerme con todo lo de la recesión que estaba viviendo el país pero te sorprendería la cantidad de alcohol barato que podías conseguir. Casi todo sabía a rayos pero el sabor no importaba, lo único que quería era algo que me ayudara a huir de mi realidad. Y aún así no fue suficiente… Llegó un punto en el que el alcohol ya no me ayudaba a lidiar con mi soledad." Inhaló profundamente para después dirigirle una mirada arrepentida. "Desde que comenzó a vivir conmigo, Noah se me insinuaba constantemente y me había robado besos aunque siempre le decía que no sentía nada por ella. Pero aún así…" Winry cerró los ojos y agachó su cabeza. "terminé acostándome con ella."
"Y he de asumir que no fue cuestión de una sola noche de borrachera." Comentó Winry sin abrir los ojos.
Ed suspiró y se pasó una mano por el cabello. "Tienes razón… Lo hicimos un par de veces más."
Winry inhaló profundamente antes de abrir los ojos y levantar su rostro para ver fijamente a Ed. "Ya veo."
"¿Ya veo?" Preguntó Ed confundido. "¿No estás molesta? ¿Decepcionada?"
"No soy nadie para pedirte cuentas. Estabas en toda tu libertad de hacer lo que quisieras. Nunca tuvimos algo."
"Pero-"
Winry frunció el ceño. "¿Qué es lo que quieres? ¿Qué te golpee o algo por el estilo?" Dijo mientras le daba un fuerte tirón a su coleta.
"¡Ouch!" Se quejó Ed mientras se sobaba el cuero cabelludo.
"No tengo derecho de decirte nada, es tu vida." Ante la atenta mirada de Ed sobre ella, Winry suspiró y añadió. "Ok, ¿quieres que te diga algo? Pues sí, me desconcierta que te hayas acostado con Noah pero no soy quién para regañarte por ello."
Ed enarcó una ceja. "¿Win? ¿Tú…?"
Winry agachó ligeramente la mirada.
No queriendo presionarla, Ed exhaló pesadamente y bajó la mano de su cabeza, optando por continuar su relato para no incomodar a Winry indagando en un tema del que quizás no quería hablar. "Ciertamente esos no fueron mis días más brillantes. Espero que no suene a excusa pero yo le dije a Noah una y otra vez que no sentía nada por ella pero ella decía que no importaba y seguía dispuesta a tener sexo conmigo. Y yo…" Suspiró. "Bueno, al menos me ayudaba a distraer mi mente por un rato. Después me sentía emocionalmente como una mierda pero es lo que había."
"Eres un idiota." Murmuró Winry.
"Concuerdo contigo."
Winry suspiró. "Y bien, ¿cómo fue que terminaron tus encuentros con Noah?"
"Después de unos días ya no podía más. Siempre me sentía fatal conmigo mismo después de hacerlo pero sólo se fue haciendo peor con cada ocasión así que decidí ponerle un alto. Por sorprendente que parezca, Noah me reclamó y me armó todo un escándalo cuando le dije que nuestros encuentros se habían acabado." Frunció el ceño. "No entiendo cómo es que se sentía a gusto con nuestro arreglo cuando le dije infinidad de veces que no sentía nada por ella y que lo que hacíamos era algo meramente físico."
"¿Entonces qué pasó? ¿Cómo lograste convencerla de que debían dejar de hacerlo?"
La mirada de Ed se ensombreció ligeramente. "La estuve evitando tanto como pude pero una semana después me dijo que estaba embarazada."
En ese momento Winry lo vio con sorpresa y cierta molestia, apartándose un poco de él. "¡¿Qué?!"
"No es lo que crees. Ella me mintió, no estaba embarazada. Aunque claro, en aquel entonces no sabía que era una mentira." Suspiró pesadamente antes de continuar. "Cuando me lo dijo… quedé en shock. Siempre procuré usar protección aunque bueno aún así sabía que se podría llegar a dar el caso de que ella quedara embarazada además de que siempre estaba borracho cuando lo hacíamos así que pude haberme descuidado sin darme cuenta. Pero en fin, el punto es que no estaba en mis planes volverme padre. El sólo pensar en ello me hacía creer que jodería todo. Así que está de más decir que la idea me aterraba. Bastante." Se mordió el labio inferior por unos segundos antes de continuar. "Así que esa noche me fui y la dejé ahí. No sabía si era algo del momento o si pensaba irme por un temporada o incluso para siempre. Simplemente necesitaba alejarme."
Notando lo perdida que se había vuelto la mirada de Ed, Winry puso una mano en su rodilla en señal de apoyo y preguntó. "Al final no la dejaste sola con su supuesto embarazo, ¿cierto?"
Ed sonrió ligeramente por unos momentos. "A veces no entiendo cómo es que puedes tener fe en mí…"
"Sé que hemos estado años separados pero aún así no me queda duda de que eres una buena persona. Tu mirada te delata." Le dijo Winry correspondiendo su sonrisa.
Ed colocó su mano sobre la que Winry había posado sobre su rodilla antes de decir. "Tengo mis dudas al respecto porque una buena persona no abandonaría a la madre de su hijo así como así."
"Pero volviste ¿no?"
"Sí, lo hice. No recuerdo exactamente cuántos días estuve fuera porque me pasé casi todo el tiempo en un bar que estaba lo más alejado posible del apartamento. Supongo que fue cerca de una semana cuando mi cerebro finalmente pudo registrar correctamente lo que significaba que Noah estuviera "esperando" a mi hijo y eso me hizo volver. Seguía temiendo el tipo de padre en el que me convertiría pero al menos tenía que hacer algo bien y estar ahí para los dos. Además, no sé, creo que una parte de mí también se dio cuenta de que tener un hijo, por más inesperada que fuera su llegada, me ayudaría a ya no estar solo en ese mundo." El tono y mirada de Ed cuando dijo esto hicieron que Winry sintiera una punzada en el corazón al ver una vez más la soledad que el joven había experimentado en el otro lado del Portal. "Así que decidí que aunque no amara a Noah me quedaría con ella. O bueno…" Suspiró. "La verdad no sé si habría podido soportar vivir con ella pero sí buscaría la manera de estar cerca de mi hijo. De cuidarlo y estar ahí para él. Por más imbécil que estuviera siendo no hubiera querido cometer el mismo error de Hohenheim."
"Cuando regresé Noah era un desastre de lágrimas y eso sólo me hizo sentir más miserable conmigo mismo por lo que casi hacía." Ed dijo mientras inconscientemente apretaba su mano libre en un puño, resentido ante el engaño de Noah. "Hablamos y acordé quedarme con ella hasta que naciera mi hijo y de ahí veríamos que haríamos respecto a nosotros. Noah quería casarse pero no estaba dispuesto a hacerlo. Armó todo un alboroto por ello pero no cedí y ella no tuvo más remedio que resignarse aunque no por eso frenó sus intentos por querer acostarse conmigo. Se volvió más insistente que nunca pero al fin había aprendido para no cometer el mismo error otra vez." Llevó la mano que había estado sobre la de Winry a su frente apretando ligeramente el comienzo de su cuero cabelludo. "Era tan obvio el porqué le urgía tanto que tuviéramos sexo otra vez pero como el idiota que soy no me di cuenta de sus verdaderas intenciones."
Winry llevó una mano a la que Ed tenía en su frente apretándola suavemente para incitarlo a liberar la presión que estaba ejerciendo en su cuero cabelludo. "No fuiste un idiota, Ed. Al menos no en esa ocasión." Añadió en un ligero tono de broma tratando de animar al rubio, logrando robarle una sonrisa. "Simplemente confiaste en ella, aunque no se lo mereciera. Confiar en las personas no es un pecado. El problema viene cuando se deposita esa confianza en personas que no lo merecen y que incluso llegan a aprovecharse de eso, pero no hay forma en que podamos conocer las verdaderas intenciones de las demás personas. Y en este caso, Noah se aprovechó del estado vulnerable en el que estabas." Concluyó ella con el ceño ligeramente fruncido ante la mención de la mujer que había jugado de esa manera con Ed.
"Pero aunque confiara en su palabra me fui y-"
"Entiendo sí, pudiste cometer un gravísimo error." Lo interrumpió Winry. "Pero al final rectificaste y asumiste el rol que te hubiera correspondido de haber tenido un hijo con ella."
"Ha, vaya padre que hubiera sido." Dijo Ed apartando suavemente su mano de su frente y, por ende, la de Winry.
"Aunque te niegues a aceptarlo, pienso que una vez que terminaras de digerir la noticia te hubiera convertido en un padre maravilloso."
"Sólo podría haberlo sido si tú hubieras sido la persona que estuviera a mi lado."
Los ojos de Winry se abrieron un poco más ante la sorpresa por las palabras de Ed y la naturalidad con que las había dicho, implicando que el joven la había llegado a visualizar en su futuro… tal y como ella lo había hecho con él.
Dándose cuenta del impacto de lo que había dicho, Ed tosió un par de veces antes de continuar. "En fin, no sé si hubiera sido un buen padre pero en aquel entonces pensé en que lo mínimo que podía hacer era cubrir las necesidades del bebé y darle un padre sobrio así que ahora sí tomé en serio mi trabajo y asistí a un par de reuniones de ayuda para alcohólicos."
"Y tú diciendo que hubieras sido un mal padre con todos los preparativos que estabas haciendo para cuidar apropiadamente del bebé."
Ed se encogió de hombros. "Bueno necesitaba el dinero y la compra continua de alcohol no es una buena aliada para lograrlo."
Sabiendo que Ed no cedería fácilmente, Winry decidió no insistir en ese punto. "Entonces… ¿cómo fue que descubriste que Noah no estaba embarazada?"
"Cuando junté lo suficiente llevé a Noah con un médico para verificar que el bebé estuviera bien, ella insistió en entrar sola y la dejé. Cuando salió me dijo que todo iba de maravilla y por más que le pregunté simplemente me dio detalles muy básicos que puedes encontrar en cualquier libro de reproducción humana. Así que al día siguiente fui a ver al doctor para verificarlo por mí mismo porque ya eran casi tres meses de "embarazo" y no veía realmente alguna señal de que Noah estuviera embarazada y la verdad tenía miedo de que el bebé tuviera algún problema. Así que el doctor confirmó mis sospechas y me fui del departamento."
"Y Noah seguramente te dejó ir fácilmente." Dijo Winry con sarcasmo.
Ed resopló. "Vaya que sí. Me pidió perdón, lloró y me suplicó pero, si de por si no la amaba, cualquier confianza que pudimos haber construido se derrumbó con su mentira."
"¿Y qué hiciste entonces?"
"Me quedé en los dormitorios de la universidad. Nunca les dije que Hohenheim había muerto porque ¿cómo explicárserlos? Probablemente había algún miembro de la sociedad Thule en la universidad pero con el destino que tuvo la sociedad, los miembros restantes prefirieron mantenerse en el anonimato por lo que todos dieron a Hohenheim por desaparecido y a mí, sorprendentemente considerando mis malos hábitos de la época, me dejaron quedarme trabajando ahí. Ciertamente desde que regresé de Amestris ya no fui asistente de profesor porque Hohenheim ya no estaba en la universidad pero me dejaron quedarme como bibliotecario. La paga era mínima pero en un inicio fue suficiente para mantener mi vicio y, cuando dejé a Noah, me rendía aún mejor ya que, con la baja matrícula que estaba teniendo la universidad, me dejaron quedarme en el dormitorio gratuitamente siempre y cuando me encargara yo mismo de su mantenimiento."
"No me lo tomes a mal pero no te veo como un bibliotecario."
Ed rió. "Créeme que jamás se me hubiera cruzado por la mente pero es lo que había. El país estaba pasando por una fuerte recesión y yo no tenía papeles así que tampoco es como que tuviera muchas opciones y…" Su mirada se ensombreció ligeramente. "tampoco es como si tuviera ambiciones ni sueños."
"¿Entonces desde que regresaste de Amestris no retomaste las investigaciones que estabas llevando a cabo antes de la invasión?"
Ed negó con la cabeza. "El único pensamiento que tenía en mi mente respecto a retomar mis investigaciones era '¿Para qué?'. Estaba resignado a mi destino puesto que no creía que hubiera ninguna otra manera de abrir un portal cuando yo mismo destruí el que había usado la sociedad Thule. Al menos así fue hasta que tuve una fuerte motivación para intentarlo una vez más."
"¿A qué te refieres?"
Ed la miró intensamente a los ojos. "A tí. No te mentí cuando te dije que tú habías sido mi motivación para regresar a Amestris."
La intensidad de la mirada de Ed hicieron que Winry se sonrojara ligeramente. "Creo que no te entiendo."
"Espero que no te rías de mí cuando te lo diga." Suspiró. "Durante mi tiempo de bibliotecario fui interactuando con otros miembros de la universidad. Docentes, administrativos y alumnos. Uno de ellos era Ludwig Hoffman. Era un joven profesor recién integrado a la facultad de literatura y filosofía y por alguna extraña razón le caía bien." Se encogió de hombros. "Continuamente iba a la biblioteca para preparar sus clases y siempre me pedía mi opinión aunque muchas veces no entendía del todo qué demonios era precisamente lo que querían transmitir los autores de filosofía de los que me consultaba."
Winry sonrió. "Quizás tu visión le pareció algo fresco."
Ed volvió a encogerse de hombros. "Quizás simplemente buscaba algo con lo que distraerse." Inhaló profundamente antes de continuar. "El punto es que le caí lo suficientemente bien como para invitarme a su boda. Y todo cambió cuando vi a la novia." Tomó la mano de Winry con su mano izquierda. "Eras tú." Carraspeó. "Bueno, ya sabes, tu doble de la Tierra. La única diferencia era que Wynona tenía los ojos verdes pero su rostro y su color de cabello era exactamente los mismos a los tuyos." Exhaló pesadamente. "Incluso su sonrisa se parecía tanto a la tuya…"
"Ed…"
Ed atrajó la otra mano de Winry para poder sostener las dos manos de Winry con las suyas. "Me pasé toda la fiesta en un rincón bebiendo mientras la veía tan feliz besando a su esposo y bailando con él." Agachó su cabeza mientras alzaba las manos de Winry unos centímetros por debajo de su barbilla mientras pasaba sus pulgares por los nudillos de la rubia. "No pude quitarles la vista de encima porque a cada momento me parecía verte a ti, casándote con un hombre que no fuera yo. Sonriendo, riendo, besándolo, abrazándolo." Suspiró. "Simplemente viviendo el resto de tu vida a su lado." Cerró sus ojos. "No podía soportarlo. Todo ese tiempo supe que ese era el destino que te esperaba al no tener la oportunidad de siquiera intentar ganarme tu perdón y tu amor pero el pensarlo y el verlo materializado a través de Wynona eran cosas completamente diferentes. En ese momento, viendo a Wynona tan feliz y escuchando tu voz a través de la suya, me di cuenta de que no podía ni quería aceptar que definitivamente había perdido cualquier oportunidad contigo." Confesó en voz baja mientras recargaba su barbilla en sus manos entrelazadas.
Winry parpadeó varias veces para contener las lágrimas que se querían formar en sus ojos. "Debió ser muy difícil." Murmuró Winry al pensar el dolor que ella misma había sentido al pensar que Ed se había ido porque tenía a una mujer esperándolo del otro lado del Portal.
"Como no tienes una idea. Esa noche me di una buena borrachera como no lo había hecho desde mi tiempo con Noah, así que digamos que ahí fue cuando empecé a olvidarme de lo que había aprendido en el grupo de apoyo. Obviamente al día siguiente tuve una cruda de los mil demonios pero, por irónico que suene, estando en la Tierra nunca tuve la mente más clara que en esos momentos. Quizás ya era una batalla perdida en caso de que lograra regresar pero no quería quedarme con la inquietud de no haber intentado hasta el último recurso para volver a ti." Dijo Ed antes de besar las manos de Winry.
"Lo lograste." Dijo Winry con una ligera sonrisa.
"Aunque tarde." Dijo Ed con una sonrisa triste.
Winry se mordió el labio inferior antes de responder, optando por no ahondar en lo que Ed acababa de decir. "¿Entonces cómo fue que lograste volver? Sólo me dijiste algo de un Portal y Gluttony pero estoy confundida. Dijiste que cuando volviste al otro mundo destruiste el Portal."
Ed suspiró, un tanto triste de que Winry hubiera ignorado su comentario. "La versión corta es que podríamos decir que creé un nuevo Portal. Estuve investigando por varios meses en cualquier libro que pudiera servirme por poco que fuera, y me infiltré para tomar algunos de los archivos secretos de las viejas instalaciones de la sociedad Thule. Cuando tuve los cálculos aproximados de algunas coordenadas viajé por Austria, Hungría y Rumania, eh países de la Tierra." Añadió al final al notar la expresión de ligera confusión y curiosidad de Winry. "No era seguro pero la única opción que tenía era ir a base de 'ensayo y error'. En Austria y Hungría no pasó nada, bueno en realidad sí hubo algo…" Suspiró. "Me reencontré con Noah."
"Por favor dime que no cometiste el mismo error."
"No, aprendí mi lección." Dijo con una ligera sonrisa. "Ella quiso convencerme de quedarme con ella pero me negué y me fui lo más pronto que pude. En fin, cuando llegué a Rumania parecía que mis cálculos habían sido erróneos hasta que me enteré de un pueblo abandonado al que todos evitaban ir porque había "un monstruo" ahí."
"Gluttony."
"Efectivamente. Por suerte las personas no se lo toparon pero sí escucharon ruidos extraños y pudieron ver varios cadáveres destrozados de animales en los alrededores. En ese momento no pensé que fuera Gluttony pero en ese pueblo es donde más parecían converger las coordenadas y cálculos que tenía así que fui ahí y el resto es historia."
"Pasaste unos días trazando el círculo y verificándolo cuando Gluttony apareció." Winry se estremeció ligeramente cuando su mente conjuró la imagen de cómo se debió haber visto Ed tras su enfrentamiento con el homúnculo. Heridas en todo el cuerpo, costillas rotas y sin el automail de su brazo el cuál había sido arrancado brutalmente por Gluttony. "Y ahora estás aquí." Dijo esbozando una ligera sonrisa no queriendo expresar en voz alta una vez más la experiencia que Ed vivió para poder regresar a Amestris.
"Así es." Dijo Ed correspondiendo su sonrisa. "Y bien… creo que eso es todo. Te debí haber contado todo hace tiempo. No sólo cuando regresé si no que te debí haber hablado de lo que nos pasaba a Al y a mí cuando estuve en Resembool." Exhaló pesadamente. "Creí que entre menos supieras sería mejor para ti, así estarías más segura. Así no estarías expuesta una vez más a un psicópata como Barry." Su mirada se ensombreció brevemente ante el recuerdo de esa experiencia tan extrema con Barry pero apartó el pensamiento lo más rápido que pudo. "No era necesario que tuvieras que involucrarte en las consecuencias de mis acciones-"
"Ok, entiendo, tal vez no había razón para que estuviera con ustedes en cada paso de su viaje, pero sabes que hubiera estado ahí para ustedes… para ti." Winry añadió al final mirándolo fijamente a los ojos. "Ante todo soy tu amiga y si hubiera algo que hubiera podido hacer para evitarte todo el dolor y sufrimiento por el que pasaste créeme que lo hubiera hecho sin dudarlo."
Ed colocó su mano izquierda sobre una de las manos de Winry, que reposaba en la cama, y le dio un ligero apretón. "Ahora lo sé. Estoy seguro de que lo supe todos estos años pero mi obstinación me impidió aceptarlo y decidí hacer las cosas por mi cuenta."
Winry colocó su otra mano sobre la que Ed había posado sobre la suya. "Al menos ya sabes que no estás solo." Le dirigió una sonrisa antes de apartar su mano y volver a hablar. "Oye, Ed, hay algo que no me has dicho. ¿Cómo lograste viajar? Por lo que me has dicho Alemania no estaba pasando por una buena racha y no contabas con los mismos recursos con los que contabas aquí siendo un alquimista estatal."
Ed se encogió de hombros. "Simplemente ahorré todo lo que pude. Mi trabajo como bibliotecario no me dejaba mucho así que, desde que decidí hacer todo lo posible para volver, convencí a los directivos de darme también un puesto como asistente de profesor para cubrir algunas clases cuando los profesores titulares faltaban. Eso me dio un poco más de dinero pero tampoco era suficiente así que también conseguí un trabajo como mesero por las tardes-noches en un restaurante."
Winry frunció el ceño. "Te descuidaste ¿verdad?"
Ed se llevó una mano a la nuca. "Bueno… mucha de la comida de allá no era muy buena así que no me perdía de mucho."
Winry le dio un golpe en la cabeza. "¡Regresaste sumamente desnutrido! ¡Te descuidaste terriblemente por meses! ¡El daño a tu cuerpo pudo ser permanente e incluso pudiste haberte impedido el uso de tus automails!" Dijo en un tono molesto.
Ed se llevó una mano a la zona dolorida. "¡No mentía cuando dije que había decidido hacer lo que fuera necesario para regresar a ti!"
Se miraron intensamente hasta que Winry suspiró y apartó la mirada.
Con delicadeza, Ed giró el rostro de Winry hacia él antes de hablar. "Escucha, Win, eso no me importa. Lo único que quería era poder verte una vez más." Hizo una ligera pausa antes de añadir. "Si hay algo de lo que me arrepiento es de no haber regresado antes y de no haberte demostrado antes lo mucho que significas para mí."
"Quizás debí haber mejorado mis habilidades de traducción de lenguaje y comportamiento de Edward Elric." Dijo Winry con una ligera sonrisa.
Ed correspondió su sonrisa. "Más bien me sorprende la habilidad que tienes para entenderme y, sobre todo, aguantarme. Es más, tú deberías darme clases de eso."
Winry mantuvo su sonrisa por unos momentos más antes de bajar su mirada. Se quedó callada por unos segundos antes de comenzar a juguetear con sus manos y preguntar. "¿Esa es toda tu historia, Ed?"
Ed parpadeó un par de veces, confundido ante la nerviosidad que Winry estaba demostrando repentinamente. "Sí, creo que eso es todo. Si hay algo más que quieras saber, dime."
Winry jugueteó con sus dedos por unos momentos más antes de hablar. "Creo que es justo que te hable de mí. De todo lo que no te he contado hasta ahora."
Notando su nerviosismo, Ed dijo. "No tienes que forzarte a hacerlo. Si uno de los dos estaba en deuda con el otro ese soy yo."
Winry negó con la cabeza. "Quiero hacerlo… es más, creo que necesito hacerlo."
"¿Segura?"
Winry asintió con la cabeza antes de tomar la mano de Ed, para guiarlo mientras se movían en la cama hasta que ambos quedaron con la espalda recargada contra la cabecera.
Winry suspiró antes de comenzar a hablar. "¿Cuándo te diste cuenta de que… de que realmente estabas enamorado de mí?"
"No sé si hubo un momento exacto en lo que lo supe. Durante mis viajes con Al me di cuenta de que estaba sintiendo algo por ti pero no le di la importancia necesaria ya que, como te dije antes, pensé que más adelante llegaría el momento adecuado de afrontar esos sentimientos y decírtelos. Aunque, cuando crucé el Portal por primera vez ya no pude seguir negándome que estaba completa y perdidamente enamorado de ti."
"Ya veo… en mi caso yo me di cuenta de que estaba enamorada de ti cuando te vi partir en el tren. Cuando ibas con el cabello teñido a enfrentarte a los homúnculos." Se quedó callada unos segundos antes de sonreír y añadir. "Aunque probablemente ya lo estaba desde un par de meses antes sólo que nunca había un buen momento como para pensar en eso."
"Mi culpa." Dijo Ed con tono arrepentido.
Winry negó con la cabeza. "No te culpo, ¿cómo podría hacerlo cuando el descubrir que me había enamorado de mi mejor amigo me hizo tan feliz?" Dijo tras voltearlo a ver con una sonrisa en su rostro. "Creo que una parte de mí se había rehusado a aceptarlo porque no podía verte tan seguido como a mí me gustaría y a veces podías ser todo un imbécil." Dijo con una risilla. "Pero cuando finalmente lo acepté, sentí una especie de paz y alegría en mi interior. Además de esperanza… esperanza de que algún día te lo diría y tú corresponderías mis sentimientos." Suspiró. "Sólo que esas emociones se vieron ensombrecidas con tu partida. Me sentía muy preocupada por ustedes dos cuando tuvieron que irse en las circunstancias en las que lo hicieron pero me aferré a mi fe de que volvería a verlos pronto y que todo se solucionaría. Estaba tan segura de que un día los vería regresar por las colinas de Resembool con sus cuerpos originales que cuando vi a Al regresar solo con Rose y sin ningún rastro de ti, lloré y lloré. Aunque estaba desconcertada por el aspecto infantil de Al y un tanto triste por los recuerdos que ni él mismo sabía que había perdido, él había recuperado su cuerpo y eso me hizo muy feliz pero al mismo tiempo sentí que mi corazón empezaba a quebrarse. Tú no estabas ahí y no había quedado ni el más mínimo rastro de ti. Al no recordaba nada de los últimos 4 años y Rose estaba casi igual de confundida que yo."
Silenciosamente Ed tomó la mano de Winry con la suya y la mantuvo así mientras Winry seguía hablando.
"Todo apuntaba a que habías…" Tomó un aliento tambaleante antes de continuar. "... a que habías muerto… No podía ni quería creerlo pero conforme pasaban los días todo parecía indicar que ese había sido tu destino. Trataba de no hacerlo pero mi esperanza se estaba desmoronando y quizás hubiera terminado por aceptarlo si Al no nos hubiera insistido para poder ir a entrenar nuevamente con Izumi porque estaba seguro de que debía de haber alguna forma de traerte de vuelta." Sonrió ligeramente. "Su determinación me contagió y, aunque no hubiera nada alquímicamente posible que pudiera hacer para ayudarlo, sí podía estar lista para apoyarlo con compañía o dinero para su investigación y también tenía que estarlo para cuando volvieras, porque en ese momento me propuse en convertirme en la mejor mecánica de automail de todo Amestris para que así tuvieras un automail que todos se murieran por tener."
"Una vez una cabeza de tuerca, siempre una cabeza de tuerca." Bromeó Ed para aligerar el ambiente.
Winry rió. "Sabes que eso difícilmente iba a cambiar." Hizo una pausa antes de continuar. "Con esa meta en mente decidí ir a Rush Valley como aprendiz de Dominic. Gracias a Paninya me aceptó y pasé los siguientes años ahí ya que algunos meses después me aceptaron como mecánica en George's. Me mudé a Rush Valley y hacía visitas ocasionales a Dublith para visitar a Al, Izumi y Sig…" Se mordió el labio inferior antes de continuar. "Aunque debo confesar que mis visitas a Resembool fueron contadas." Confesó con evidente culpa en su tono de voz.
Ed le dio un ligero apretón a su mano. "Hey, no te sientas mal. Estoy seguro de que la abuela Pinako estaba enormemente orgullosa de que su nieta estuviera aprendiendo y viviendo en la meca del automail."
Winry esbozó una sonrisa temblorosa pero no volteó a verlo. "Es lo que ella me decía en nuestras llamadas." Inhaló profundamente antes de continuar. "Mi abuela me apoyó en mis decisiones y siempre tenía las palabras exactas para animarme, ya fueran consejos o un buen regaño a la Pinako Rockbell. Además no sólo vio por mi a la distancia sino que también me pidió que la mantuviera al tanto de cómo estaba Al y de cualquier avance que pudiera haber acerca de ti. A ella le hubiera encantado volver a verte."
"A mí más. Siempre se burlaba de mí pero la extraño demasiado." Ed dijo antes de exhalar pesadamente. "Como me hubiera gustado haberle dicho lo mucho que le agradecía todo lo que hizo por nosotros."
Ahora fue Winry la que le dio un apretón a la mano de Ed. "Ella lo sabía, Ed. No tengas duda de ello."
Ed sonrió levemente y le devolvió el apretón.
Tras una breve pausa, Winry continuó. "Unas semanas después de que Al me llamó para avisarme que había terminado su entrenamiento con Izumi, fui a Dublith y ahí fue cuando me enteré de su muerte." Dijo con tristeza. "Pasé un par de días haciéndole compañía a Sig antes de irme. Creo que la muerte de Izumi me asustó y decidí ir a ver a mi abuela porque ya había pasado un tiempo desde que la había visitado. Al llegar me enteré de que Al estaba en la casa, pero de un momento a otro pasó una y otra cosa y cuando me di cuenta ya estaba saliendo de casa de mi abuela para seguir a Al a Central."
"El día de la invasión."
Winry asintió con la cabeza. "Esta parte ya la sabes." Suspiró. "Por un momento me sentí en los cielos cuando me besaste y en el siguiente ya te habías ido de mi vida, aparentemente para siempre y… en ese momento fue como si todo mi mundo, todas mis ilusiones se vinieran abajo." Dijo Winry con tristeza.
Ed agachó su cabeza.
"No sabes lo mucho que me dolió el que te hayas ido sin despedirte. Me hice mil y un preguntas acerca del porqué me habías besado si después terminarías yéndote de esa manera. Y fue ahí cuando me di cuenta de que no significaba lo suficiente para ti como para merecer una despedida de tu par-"
"¡Claro que significas mucho para mí! ¡Demasiado!" Intervino Ed.
Winry lo volteó a ver con una sonrisa triste en su rostro. "En ese entonces no tenía garantías de ello."
Ed suspiró pesadamente. "Supongo que tienes un punto."
Winry devolvió su mirada al frente. "No sabes el millón de tonterías que se me metieron en la cabeza a raíz de ese momento pero tampoco es como que hubiera tenido tanto tiempo para hundirme completamente en mi depresión porque había trabajo que hacer. Todos los militares estaban ocupados sacando a civiles de los edificios que habían sido dañados y los hospitales estaban saturados así que me ofrecí como voluntaria. No era mi especialidad pero hice lo que pude. Hubo muchos heridos pero, afortunadamente dentro de lo que cabe, sólo hubo un par de defunciones. Ciertamente no fue una experiencia precisamente agradable por toda la sangre y sufrimiento que hubo en las primeras horas pero algunos meses después me olvidé por completo de que eso había pasado."
Notando cómo la mirada de Winry se volvía un tanto perdida, Ed comenzó a acariciar su mano con su pulgar tratando de brindarle al menos un poco de confort en medio de sus recuerdos dolorosos.
Tras unos momentos, Winry retomó su relato. "Mi abuela estaba enferma, muy enferma y yo ni siquiera me había dado cuenta." Confesó con un tono lleno de culpa. "Cuando había regresado en la víspera de la invasión la noté un poco más delgada y con una tos persistente pero ya sabes como es ella, me dijo que sólo se trataba de un mal resfriado y se comportó con la misma energía de siempre, lo cual me hizo olvidarme de la idea de que algo podría estarle pasando porque mi mente no estaba realmente con ella en esos momentos." Una lágrima silenciosa recorrió su mejilla. "Al volver después de la invasión, ella seguía con la tos y decidí quedarme con ella una temporada hasta que se mejorara. Ella me insistió para que volviera a Rush Valley pero no cedí, así que pasé los siguientes meses en Resembool y sólo hacía algunas visitas rápidas a Rush Valley para atender a clientes y después de unos meses..." Inhaló profundamente antes de suspirar. "para tener citas."
"¿Con Russell?" Preguntó Ed fingiendo casualidad.
Winry negó con la cabeza. "No, con otros chicos."
En la cabeza de Ed las palabras de 'otros chicos' se volvieron un eco en su mente. "Ya veo…"
Winry suspiró. "Va a sonar como una tontería pero antes de la invasión no había salido con nadie porque mi yo más joven quería serte fiel aunque no estuvieras aquí pero después de que te fuiste… quise darme una oportunidad. No fue fácil porque las primeras semanas mi corazón estaba destrozado." Apretó el abrazo de sus piernas. "Pero un día reaccioné y decidí que era tiempo de dejar de llorar por un imbécil como tú."
Ed hizo una ligera mueca pero concordó con sus palabras. "Ok, me lo gané." Suspiró antes de añadir. "Además estabas y estás en todo tu derecho de seguir adelante con tu vida."
Winry se mordió el labio inferior antes de continuar con su relato. "Así que acepté salir con los chicos que me invitaban." Suspiró. "Salí con varios chicos pero al final mis noviazgos no fueron precisamente duraderos. Por más que quería tu recuerdo se aparecía en los momentos más inapropiados haciéndome dejar todo hasta ahí o ellos lo hacían por mí. Incluso, en cierta forma, eso pasó con Russell ya que en un inicio no creí que realmente podríamos iniciar propiamente una relación."
Ed suspiró. "No es el tema que más me apasione pero ¿cómo fue que lo conociste?"
"Él y Fletcher llegaron a Resembool para llevar a cabo un proyecto de restauración de los campos de la zona este que habían quedado dañados desde la guerra de Ishval y en los cuales estaba dándose una terrible sequía. Se quedaron unos dos meses allí, así que inevitablemente terminamos conociéndonos. No tardó mucho para que Russell me pidiera una cita así que fuimos por un helado del señor Johnson. Debo confesar que pasé un rato muy agradable con él. A veces era un tanto arrogante como alguien que conozco…" Dijo echándole una rápida mirada a Ed. "Pero también fue divertido y caballeroso y debo de admitir que desde ese entonces besaba muy bien."
Ed tragó saliva antes de preguntar. "Entonces, ¿por qué te habías rehusado a tener más citas con él?"
Winry se encogió de hombros. "Quizás me estaba autosaboteando. Me había acostumbrado a no durar mucho en una relación que quizás no quise romper mi tradición."
"¿Y qué hizo Russell?"
"Insistir. Iba a visitarme constantemente a la casa y se quedaba conmigo contándome todo de sus proyectos. Lo mantuve como mi amigo durante todo ese tiempo hasta que llegó el momento en que él y Fletcher tuvieron que irse para continuar con sus proyectos en otra ciudad. Pensé que ya no lo vería tan fácilmente así que accedí a tener otra cita con él."
Ed inhaló profundamente antes de continuar. "Y ahí fue cuando se hicieron novios."
Winry negó lentamente con la cabeza. "Sí me lo pidió pero me negué ya que no me sentía lista para tener una relación con alguien que iba a estar viajando de un lado a otro… Creía que me recordaría tanto a ti que no podría hacerlo." Suspiró. "Aunque él dijo que no se iba a rendir. Así que cada cierto tiempo me llamaba para saludarme y contarme de sus aventuras. Por eso era fácil deducir en dónde estaba aunque de cualquier forma Russell no tardó mucho en darme la dirección de su departamento en Central por si me animaba a dejar Resembool para trabajar ahí ya que tampoco era como si él fuera muy fan de que trabajara en Rush Valley. Incluso se ofreció a ponerme en contacto con sus amigos de la milicia para conseguirme un trabajo en algunas de las oficinas de Central como recepcionista o asistente de algún militar pero ya sabes que nunca he sido muy fan de la milicia además de que-"
"Cómo podrías trabajar en algo que no tuviera algo que ver con el automail." Ed terminó la frase por ella.
Winry esbozó una ligera sonrisa. "Exacto."
Tras unos segundos, Ed sintió cómo la mano de Winry, que estaba debajo de la suya, se tensaba hasta formarse en un puño por lo que le preguntó con preocupación. "¿Win?"
Winry cerró sus ojos e inhaló profundamente antes de abrirlos y continuar. "Unas semanas después de la partida de Russell y Fletcher, mi abuela se puso grave. No podía levantarse de la cama y le dolía respirar. Así que la llevé al hospital. Estuvo ahí un par de días y fue entonces que me enteré de lo que realmente estaba pasando." Tras una breve pausa, continuó con voz entrecortada. "Mi abuela había sido diagnosticada con cáncer de pulmón unos meses antes de la invasión."
Ed no pudo evitar un ligero jadeo de sorpresa. Winry le había dicho que había sido la edad y ahora descubría que en realidad la causa de muerte de Pinako era una completamente diferente. Cuando Winry le había hablado por primera vez de la muerte de su abuela ella había rehuido su mirada cuando le habló de la causa, situación que en aquel entonces le había parecido algo propio de la dolorosa noticia que le estaba compartiendo pero ahora, en retrospectiva, podía darse cuenta que la rubia lo había hecho para evitar que descubriera la mentira a través de su mirada. ¿Cómo no pudo darse cuenta de ello en su momento? Aunque… ¿qué hubiera logrado con ello? Simplemente hubiera hecho sufrir a Winry al hacerla sacar a la luz sentimientos y probables remordimientos para los que ella no estaba preparada para hablar, mucho menos con él, quién recién estaba volviendo a su vida.
Tragando el nudo que se estaba formando en su garganta, Ed preguntó. "¿C-cáncer?"
Winry asintió con la cabeza. "Lamento haberte mentido, no lo hice con mala intención. Es sólo que lo que pasó con mi abuela… es algo que me ha costado asimilar incluso hasta la fecha." Dijo con voz suave. "Yo también me sorprendí porque ingenuamente me había aferrado a la idea de que mi abuela era una mujer fuerte y casi invencible además de que cuando estaba en Resembool ella se esforzaba por comportarse como siempre lo había hecho dedicándose al automail todo el tiempo posible, pero cuando terminé de asimilar el estado de salud de mi abuela, no tardó mucho en que me odiara a mí misma. Me sentía tan culpable y enojada conmigo misma por no haberme dado cuenta antes, por no haber estado con ella. Ella siempre me había cuidado y apoyado en todas mis decisiones y yo… yo la dejé atrás… me enfrasqué tanto en mí misma y en mis intereses que descuidé por completo a mi abuela, al único miembro de mi familia que me quedaba. A la mujer que me crió y siempre dio lo mejor de sí para que a mí no me faltara nada." Al terminar un par de lágrimas se le escaparon a Winry, quien se apresuró a limpiarlas.
"Win, no tienes que sentirte culpable. Tú no le deseaste ningún mal a tu abuela y simplemente seguiste el ciclo de la vida. Tarde o temprano ibas a hacer tu propia vida y estoy completamente seguro de que la abuela se fue sumamente orgullosa de la nieta que crió." Dijo Ed suavemente sin dejar de acariciar su mano con su pulgar.
"¡Pero fui egoísta! ¡Me enfrasqué tanto en mis propias metas y en mi deseo de volver a verte que la dejé atrás, aún sabiendo que ya estaba comenzando a tener problemas de artritis antes de que la dejara! Incluso cuando la enfrenté y le pregunté el porqué no me había dicho nada ella simplemente me dijo que no quería ser una carga para mí. ¡Una carga! ¡Mi abuela estaba preocupada de que yo la viera como una carga! ¡Eso es lo que mi egoísmo causó!" Exclamó Winry mientras más lágrimas caían de sus ojos.
No pudiendo resistirse más, Ed se acercó a ella y la atrajó hacia sí con su brazo. "Winry, no seas tan dura contigo misma. Bien sabes cómo era la abuela. Ella era una mujer sumamente independiente que prefería hacer las cosas a su manera y que esperaba que tú hicieras lo mismo con tu propia vida. Recuerda lo que siempre decía: Las mujeres Rockbell son brillantes, independientes y fuertes como un toro." Dijo mientras frotaba suavemente su hombro tratando de tranquilizarla.
"¡Aún así! ¡¿Pero por qué no me lo dijo?! Fui una idiota al no darme cuenta por mí misma ¿pero por qué no me tuvo la confianza para decirme qué era lo que en realidad le estaba pasando? ¡No tenía que haber pasado por todo eso ella sola!" Dijo Winry entre sollozos.
"Conociéndola, no quiso preocuparte. Estoy seguro de que el saber que estabas llevando el apellido Rockbell a lo más alto del mundo del automail y tu simple presencia en su casa en esos meses fueron su mayor alegría y orgullo. Es más, tú misma dijiste que ella te apoyaba e incluso te decía precisamente eso, bueno ya sabes a su manera, cuando le llamabas ¿no?"
Winry asintió débilmente. "Pero ella era mucho más importante que cualquier logro que pudiera obtener en el automail." Dijo con voz llorosa mientras su mano se aferraba a la camisa de Ed.
"Lo sé, Win." Dijo Ed para después darle un beso en la cabeza. "Pero ella misma deseó apoyarte con todo su corazón así que no te sientas culpable por haber aceptado sus buenas intenciones ¿sí? Ahora lo mejor que puedes hacer por ella es seguir dando lo mejor de ti para que nadie olvide el maravilloso trabajo que las Rockbell son capaces de hacer."
Los hombros de Winry se sacudieron hasta que no pudo contenerse más y se aferró con más fuerza a la camisa de Ed al mismo tiempo que enterraba su rostro en el hueco entre el hombro y cuello de Ed para llorar a lágrima viva. En todo este tiempo no había compartido tan abiertamente sus emociones y arrepentimientos relativos a la muerte de su abuela. Nadie sabía la historia completa del estado real de salud de Pinako. Ni siquiera Russell ni Al. Para todos Pinako Rockbell simplemente había muerto por la edad de manera pacífica e indolora.
Mientras Winry lloraba Ed pasó su mano suavemente por su cabeza dándole besos ocasionales en ella al mismo tiempo que le susurraba palabras tranquilizadoras esperando poder sanar al menos una parte del dolor de la rubia.
Cuando los sollozos de Winry se habían aminorado y sus hombros dejaron de temblar, Ed dijo con tono bromista, esperando relajar a la rubia. "Oye, vas a tener que lavar mi camisa, eh."
Sus palabras tuvieron el efecto deseado ya que Winry soltó una risa temblorosa. "De cualquier forma huele a sudor."
"Hey." Dijo Ed mientras suavemente se separaba un poco de Winry para poder verla a los ojos. "Es colonia, no sudor." Dijo con un ceño fruncido de broma.
"Pues creo que necesitas ponerte más porque no noto nada." Dijo Winry con una ligera sonrisa temblorosa.
Al verla sonreír, Ed suavizó sus facciones y pasó sus pulgares por las mejillas de Winry para limpiar sus lágrimas.
Winry se sonrojó ligeramente y quiso pasar su mano por su nariz para limpiársela pero Ed le ganó al acercarse aún más a ella para poder limpiar su rostro con su camisa.
"Eres un desastre." Dijo Ed con cariño mientras limpiaba su rostro.
"Creo que en realidad somos un desastre." Dijo Winry con voz suave.
Ed esbozó una sonrisa. "Probablemente." Dijo mientras terminaba de limpiar sus lágrimas y nariz.
"Definitivamente voy a tener que lavar tu camisa." Dijo Winry un tanto avergonzada mientras veía fijamente la visible mancha que había quedado en la camisa del rubio.
Ed se encogió de hombros. "Esto no es nada. Hay tanto que debí haber hecho por ti." Tomó una de sus manos con su mano izquierda. "Sé que no hay mucho que pueda ofrecerte pero si necesitas seguir desahogándote o si necesitas golpear a alguien para sacar tus emociones, hazlo. Haz conmigo lo que quieras."
Winry parpadeó un par de veces antes de inclinarse ligeramente hacia él. Enfocó su mirada un momento en sus labios antes de decir. "¿Lo que sea?"
Para Ed no pasó desapercibida la rápida mirada que Winry dirigió a sus labios. Sintiendo la boca repentinamente seca, sólo pudo atinar a asentir con la cabeza.
Ante su afirmación, Winry se inclinó más hasta que sus labios quedaron a milímetros de los de Ed. En ese momento enfocó su mirada en los ojos dorados de Ed y al verlos brillar y notar revolotear varias emociones en ellos, esbozó una sonrisa y se desvió para darle un beso en la mejilla. "Gracias, Ed." Dijo sinceramente. Inhaló profundamente antes de continuar. "Aún hay algo que no te he contado. ¿Puedo tomarte la palabra y decírtelo?"
Ed carraspeó antes de responder. "Siempre y cuando te sientas lista para hablar, soy todo oídos."
"Gracias." Repitió Winry con una sonrisa que se borró unos momentos después cuando retomó su relato, no sin antes volver a su antigua posición recargada contra la cabecera de la cama. "Cuando hablé con la abuela después de enterarme de su condición, me pidió que mantuviéramos su enfermedad en secreto. En general no quería que sus conocidos armaran un alboroto ni que la vieran con lástima, ni mucho menos quería interferir en la búsqueda de Al por ti. Al acababa de partir a Xing y ella no quería que él lo supiera porque estaba segura de que él volvería de inmediato en cuanto se enterara."
Ed sintió una punzada al corazón al darse cuenta una vez más de lo mucho que la abuela lo quería y se preocupaba por él y Al.
"Me insistió en que volviera a Rush Valley pero obviamente no lo iba a hacer así que pasamos los siguientes meses solas. La abuela siempre mantuvo su buena actitud pero era obvio que su salud estaba decayendo ya que empezó a perderse de sus sesiones de póker y llegó un punto en el que ya casi no podía hacer piezas de automail. Seguimos el tratamiento al pie de la letra pero… realmente no parecía que le estuviera haciendo nada ya que había noches en las que podía escucharla quejarse del dolor aunque siempre se esforzara por fingir y negarlo cuando iba a verla." Cerró sus ojos y los apretó momentáneamente ante el recuerdo hasta que reunió la voluntad suficiente para seguir hablando, abriendo sus ojos, brillantes por las lágrimas. "Y… un par de meses después de enterarme de su enfermedad, la abuela ya no despertó." Dijo Winry al final con voz baja y con algunas lágrimas recorriendo sus mejillas.
Ed quiso tomar nuevamente su mano en señal de apoyo pero en ese momento Winry retrajo sus piernas hacia su pecho para poder abrazarlas.
"Como mi abuela me pidió discreción, en su funeral sólo estuvieron algunos vecinos de Resembool. No quise decirle a nadie más lo que había pasado porque me dolía mucho y porque mi culpa me hizo sentir que no merecía palabras de consuelo de mis amigos."
"¿De verdad no le dijiste a nadie? ¿Ni Al, Riza, Sheska o tus amigos de Rush Valley?... ¿Ni a Russell?" Preguntó Ed, desconcertado.
Winry negó con la cabeza.
"Winry…" Dijo Ed en un ligero tono de reprimenda mientras comenzaba a pasar su mano por la cabeza de la rubia.
"No lo merecía… Era algo con lo que tenía que lidiar sola." Se limpió las lágrimas, inhaló profundamente y continuó. "Así que cuando todo terminó me quedé sola. Completamente sola. Den había muerto unos días antes de enterarme del diagnóstico de mi abuela, tú te habías ido, Al estaba en Xing y mis amigos no estaban al tanto de lo que había ocurrido." Cerró sus ojos y los apretó con fuerza. "Esa noche, la primera tras el entierro de mi abuela, fue la peor que he tenido en mi vida. Me sentí tan abandonada en una casa vacía y silenciosa que-" Winry no pudo terminar su oración cuando un sollozo se le escapó.
"Shhh, Win, tranquila, todo está bien. Ya pasó, shhh." Dijo Ed en voz suave mientras seguía pasando rítmicamente su mano por la cabeza de la rubia.
Un par de minutos después, Winry se tranquilizó. Sus ojos seguían brillando por las lágrimas derramadas pero su respiración se había regularizado. Winry miró a Ed con una expresión que no supo descifrar antes de que la rubia devolviera su rostro a sus rodillas.
"Al día siguiente…" Winry continuó su relato en voz baja. "no pude soportarlo más. Necesitaba de alguien así que tomé un tren con destino a Central. Llegué un poco tarde pero no me importó. Caminé y caminé hasta que di con el departamento de Russell."
Ed sintió cómo su corazón comenzaba a acelerarse ante las palabras de Winry y el cómo ella comenzaba a ocultar su rostro en sus rodillas.
"No estaba segura de si estaría ahí porque lo último que me había dicho en la última llamada que había tenido con él, había sido que Fletcher se había ido al sur y que él pronto se iría al norte, cerca de Rivière… Cuando llamé a la puerta creí que no había nadie pero después escuché ruidos y poco después él estaba frente a mí. Y yo… me abalancé hacia él. Lo besé una y otra vez y… lo incité para que se acostara conmigo." Confesó Winry en voz un tanto más baja. "No lo veía más que como un amigo pero buscaba compañía. Quería sentirme acompañada por un momento aunque tuviera que ser de esa forma. Quería sentirme querida y protegida sin importarme quien fuera el que me acompañara esa noche. Simplemente… quería sentir algo, algo que se llevara mi dolor al menos por una noche." Concluyó mientras apretaba sus piernas con todas sus fuerzas manteniendo su rostro enterrado en sus rodillas.
Ed se quedó callado unos instantes mientras asimilaba las palabras de Winry. Pensar en el gran dolor y sufrimiento que pasó Winry al quedarse sola, perdiendo al último miembro de su familia y no teniendo a su lado a los que en otros tiempos habían sido sus mejores amigos, le rompió el corazón pues sabía que Winry se merecía toda la felicidad del mundo y no haber pasado por todo ese sufrimiento ella sola, sufrimiento al que él mismo contribuyó.
Delicadamente Ed llevó sus manos al rostro de Winry para hacer que dejara su posición. Winry se rehusó en un inicio pero después cedió aunque lo hizo con los ojos cerrados mientras Ed la atraía a sus brazos para estrecharla fuertemente. Winry terminó correspondiendo su abrazo con la misma fuerza y así se mantuvieron por unos minutos en silencio. Poco después, Ed comenzó a depositar delicados besos en su cabeza y frente pero se detuvo cuando notó que Winry comenzaba a alejarse un poco de él.
Winry se separó lo suficiente para verlo a los ojos. "Ed…" Llevó una mano a su mejilla. "¿Por qué estás llorando?" Dijo al ver las lágrimas silenciosas que se derramaban de sus orbes dorados.
Ed se desconcertó por un segundo. Estaba tan concentrado en ella que no se había dado cuenta de que la tristeza que sentía por el dolor y sufrimiento que Winry había pasado se había traducido en lágrimas.
Tras inhalar profundamente, el rubio respondió. "Por haberte hecho sufrir así. Por dejarte sola. No te merecías pasar por todo eso. Tenías que haber vivido feliz todo este tiempo y yo lo arruiné todo. No sabes cuánto lo lamento." Dijo para después limpiarse las lágrimas.
"No todo es tu culpa, Ed. Sí, me lastimaste al irte como lo hiciste pero yo también tomé malas decisiones."
"Pero te dejé sola."
"Y yo contribuí aislandome todavía más." Dijo Winry con una sonrisa triste.
Ed suspiró. "Creo que nos parecemos más de lo que creíamos ¿no?"
"Puede ser."
Winry asintió y Ed se quedó pensativo. A su manera cada uno se había aislado y hundido en su depresión llegando incluso al punto de buscar placer físico para olvidarse de su soledad. Ahora entendía porque no había recibido el regaño o la mirada decepcionada que esperaba que Winry le diera cuando le contó lo que pasó con Noah.
Winry rompió el silencio. "Entonces ya lo sabes. Así fue como Russell y yo comenzamos a salir. Después de haber tenido sexo él creyó que ya éramos una pareja y nunca tuve el valor de decirle que sólo lo había buscado por el confort y placer que podía darme así que le seguí la corriente y, como la cobarde que soy, me convertí en su novia sin decirle la verdad del porqué había llegado a su casa esa noche. Además, como a los pocos días tuvo que marcharse a ciudad del Norte, no se enteró de la muerte de mi abuela hasta meses después y no está enterado de la fecha exacta de su fallecimiento por lo que hasta la fecha no sabe las razones que me llevaron a su puerta esa noche."
Ed se mordió el labio inferior por unos segundos indeciso de si hacer o no su pregunta pero la curiosidad pudo más que él. "Win… entonces ¿cómo es que aceptaste casarte con él?" Tragó saliva antes de agregar. "¿Te enamoraste de él?"
Winry se quedó callada unos instantes viéndolo fijamente a los ojos para después suspirar y responder. "¿La verdad? Creo que acepté para no perder la oportunidad de tener a alguien a mi lado y así evitar quedarme sola. Después de todo, mis relaciones previas siempre fueron algo pasajero, así que creo que una parte de mí temía que no tuviera otra oportunidad así en mi vida." Confesó. "Russell es un buen hombre. Es trabajador, responsable, gracioso y él y Fletcher están haciendo muchos proyectos que están ayudando a cientos de personas. No tengo dudas de que él me ama y yo… lo quiero mucho, pero…" Apretó una de sus manos en un puño. "Creo que no he llegado a amarlo como tal. Me preocupo por él y de verdad lo aprecio pero por más que lo he intentado él no ha despertado las mismas emociones que tú me provocas tan fácilmente."
"Y al final el que va a casarse contigo es él." Dijo Ed con ironía y con una sonrisa triste en sus labios.
"Cuando acepté casarme con él lo hice por mi egoísmo de no querer quedarme sola pero en realidad Russell no merece que le haga eso. Como te dije, es una buena persona, obviamente tiene sus defectos por aquí y por allá pero eso no le quita mérito al buen corazón que tiene. Así que me dije a mí misma que me esforzaría por aprender a amarlo como es debido. Es lo menos que podía hacer después de todos mis errores y el hecho de haberlo utilizado en su momento. Pero…" Hizo una pausa para mover la mano que anteriormente había apretado en un puño y colocarla sobre la mano de carne y hueso de Ed. "Desde que regresaste mi resolución ha estado tambaleándose. Por eso te besé como lo hice en la noche de Gala. No fue por juego ni venganza simplemente no pude contenerme más y me dejé llevar por los sentimientos que despiertas en mí. Pero… después me llegó el arrepentimiento y el recuerdo de lo molesta, decepcionada y sola que me había sentido tras tu partida y por eso actué como lo hice. Lo siento mucho, Ed. No era mi intención lastimarte con mi actitud."
"No te disculpes, me lo gané." Dijo Ed ahora que tenía la cabeza fría y sabía toda la historia que había detrás de lo sucedido a comparación de esa noche donde el enojo y despecho hicieron su aparición. "Además, no puedo decir que no disfruté bastante la primera parte de esa noche." Dijo con una ligera sonrisa.
Winry se sonrojó y rió. "Me dí cuenta."
Ed correspondió la sonrisa. "Win, gracias por hablar conmigo. Por contarme todo. Por dejarme ser parte de tu historia." Le dijo con sinceridad mientras movía su mano para que ahora pudiera entrelazar sus dedos con los de la rubia.
"Y tú por finalmente dejarme ser parte de la tuya. Creo que ambos necesitábamos esto." Dijo apretando ligeramente el agarre de sus dedos con los de Ed. Poniéndose seria continuó. "Ed, ¿era en serio lo que me dijiste al terminar la cena?"
La sonrisa de Ed se borró. Suspiró y dijo. "Creo que es lo mejor."
"¿Aún después de todo lo que te dije?" Se inclinó ligeramente hacia él. "¿Aún a pesar de haberte dicho que te amo?"
Inconscientemente, Ed replicó el movimiento de Winry, quedando ambos a una escasa distancia del otro. "Tú misma lo dijiste. Russell es un buen hombre y puede hacerte feliz. No quiero intervenir en tu felicidad y…" Tragó saliva cuando sus ojos se desviaron momentáneamente a los labios de la rubia. "ahora sabes porqué no me siento capaz de verte casada con otro hombre. Ver a Wynona casarse me rompió el corazón aún a sabiendas de que no eras tú, así que… verte casada con otro hombre creo que es algo para lo que nunca podré estar completamente preparado, sobre todo porque en esta ocasión no tengo nada más a que aferrarme. En aquel entonces pude superar el dolor y la resignación de ver a Wynona casarse porque, en primera, al final de cuentas ella no era tú y, en segunda, porque te tenía a ti como motivación. Sé que no tenía siquiera el derecho de luchar por tu amor pero me permití engañarme con la ilusión de que quizás, si lograba regresar y me esforzaba lo suficiente para enmendar mis errores, un día podríamos estar juntos pero ahora estoy convencido de que lo nuestro jamás podrá ser y que, por lo idiota que soy, te haré más bien si me alejo a si me quedo cerca de ti como un estorbo que quizás nunca terminé la asimilar la idea de que te vas a casar con otro hombre. No puedo fingir que estaré completamente bien cuando Russell se case contigo, no después de darme cuenta del poco control que tengo cuando estoy a tu lado. Si te besé a sabiendas de que estabas comprometida ¿quién te asegura que podré contenerme cuando ya estés casada?" Suspiró. "No quiero ser la causa de tu desdicha. Por eso creo que lo mejor es poner distancia entre nosotros porque temo hacer una tontería que arruine tu felicidad… Es lo mejor." Repitió aunque esta vez sonó más para sí mismo que para ella. "Ya te he hecho sufrir y no quiero seguir haciéndolo."
"Entonces no me hagas más daño, Ed. No te vayas… Entiendo por lo que pasaste y hasta cierto punto ahora puedo entender tus razones pero también…" Se mordió el labio inferior antes de continuar. "Sé que puede ser egoísta que te pida que te quedes a mi lado en estas circunstancias pero… no estoy lista para dejarte ir. No quiero separarme de ti nunca más." Dijo Winry con voz suave que poco a poco se convirtió en un susurro. "No me dejes de nuevo."
"Win…" Murmuró Ed mientras llevaba su mano de automail a su rostro. "Yo…"
"Por favor, Ed…"
Ed la miró fijamente antes de seguir. "No sé… yo no…" Inhaló profundamente antes de continuar con voz suave. "No… no me iré…" Dicho esto cerró la distancia que había entre ellos con sus labios.
A diferencia de sus besos anteriores en la noche de Gala y el beso que Winry había iniciado hace unas horas, éste fue más suave y delicado. En esta ocasión no existía el frenesí desenfrenado causado por la imperiosa necesidad de estar en contacto directo con el otro sino que en esta ocasión se trataba de transmitir la ternura, cariño y el amor que los unía. Querían transmitir todos esos sentimientos al mismo tiempo que perdonaban al otro y ofrecían sus disculpas por los errores cometidos. En ese momento querían olvidarse de todo, de sus circunstancias actuales, de sus arrepentimientos y de su dolor pasado para finalmente aceptar y disfrutar el simple hecho de estar juntos, más juntos de lo que habían estado antes debido a que ambos habían revelado sus miedos y errores, mostrándose tal y como eran y acercando sus almas como nunca antes lo habían estado antes.
Tras un par de besos suaves, se separaron y Ed colocó su frente sobre la de Winry, cerrando sus ojos en el proceso.
Winry abrió sus ojos y una ligera sonrisa se dibujó en sus labios al notar cómo la expresión de Ed parecía más calmada y también por la simple cercanía que ahora disfrutaban. Delicadamente llevó su mano a la barbilla del rubio para acariciarla suavemente, provocando que el rubio abriera sus orbes dorados.
"Quédate conmigo, Ed." Murmuró Winry.
Ed asintió y besó su frente para después atraerla a sus brazos y colocar su barbilla sobre la cabeza de la rubia. Realmente había estado dispuesto a alejarse de ella pero ahora… no podía hacerlo. No había querido hacerlo desde un inicio pero ahora más que nunca quería olvidarse de todo y simplemente huir lejos con Winry a su lado. Jamás había deseado algo con mayor fuerza como ahora deseaba estar con Winry para siempre. Una parte de su mente aún no estaba convencida de si estaba haciendo lo correcto pero al menos por esa noche quería centrarse únicamente en la joven que tenía en sus brazos. Ella era todo lo que su corazón añoraba.
N/A2: Sé que fue un capítulo largo así que trataré de no extenderme mucho.
Quizás pude haber omitido la primera parte en la que Ed le relata a Winry los eventos de 03 pero me gustó la idea de que Ed le contara absolutamente todo acerca de lo que había vivido para demostrar aún más lo mucho que le hubiera gustado que las cosas hubieran sido diferentes para poder vivir su vida al lado de Winry, o bueno, haberle permitido realmente ser parte de su vida como ella tanto quería.
También creo que es importante para Winry recibir esa información directamente de él tanto por el lazo que los une como por su propio involucramiento en ciertos eventos. Rose pudo haberle dicho algunas cosas de lo que sucedió en ese enfrentamiento final con Dante pero hay ciertas cosas que por más que quisiera no podría haberle dicho, como si Sloth era el homúnculo creado a raíz de la transmutación de Ed y Al (ya que ella no conoció a Trisha) y la muerte de Ed (aunque en este caso pienso que sí tiene recuerdo de ello pero prefirió no divulgarlo). Además, como lo puse antes, por más dudas que tuviera, no creo que Winry insistiera en comprobar al 100% su hipótesis de Sloth ya que su única fuente es Izumi e Izumi ya tenía mucho con lo que lidiar con lo de Wrath y con todo lo acontecido con los Elric.
Asimismo considero que este punto en la historia es importante ya que, aunque Ed y Winry aún no han decidido qué van a hacer con sus vidas, los dos finalmente se dieron la oportunidad de hablar apropiadamente debido a que sus inseguridades y su deseo de guardarse ciertas cosas habían formado una barrera entre ellos que finalmente se rompió permitiéndoles hablar libremente porque un elemento clave que estaba afectando sus interacciones era la mala comunicación que habían estado teniendo y ahora ambos están confiando en el otro para hablar de lo que han vivido en los años que estuvieron separados.
En fin, como punto final, traté de no dejar de lado ninguno de los momentos que tenía contemplados para esta historia tanto de parte de Ed como de Winry. De algunos de ellos traté de dejar una que otra pista por ahí así que espero que al final las cosas hayan quedado bien hiladas y si por ahí olvidé algo digánmelo y lo incluiré en notas o, de ser posible, lo integraré en capítulos posteriores.
Ahora sí, después de miles de palabras jeje, eso es todo por ahora.
Muchas gracias por leer!
Golden
