DULCECITO311: Siiii, un capítulo súper tierno :) El bebé es la cereza del pastel, pero sí, llegó para apurar todo el proceso jaja. Gracias por tu comentario y espero que este te guste. ¡Saludos!
Cam-2002: ¡Misao es un amor de amiga! Qué bueno que estuvo a su lado, ya que esa situación es de mucha tensión como para enfrentarla sola. Gracias por tu comentario, espero que este capítulo también sea de tu agrado. ¡Saludos!
Aliento matinal
Kamiya Kaoru soltó un pequeño maullido mientras se estiraba sobre la gran cama. No quería moverse. Su cuerpo estaba totalmente relajado y se negaba a despertar. Sin embargo, había una fuerza persistente insistiendo con que se despertara y rápido.
Ella le dio un manotazo a la fuente de esa fuerza y sonrió levemente. Como respuesta, sintió una sonrisa sobre su hombro.
"Mmm," murmuró dándose la vuelta.
"Despierta, koishii."
"No quiero," replicó ella adormilada.
Él estaba haciendo pucheros. Ella podía saberlo por la manera en que sus labios se movían contra su piel. Suspiró y pasó los dedos a través de sus cabellos hasta localizarlo. Él tomó la otra mano de la chica y mordisqueó la punta de los dedos.
"Kenshin," lo reprendió, abriendo lentamente los ojos. "No hagas eso."
"¿Por qué no?" Desvió la atención de las yemas de los dedos a su palma.
"Porque no," respondió ella, riendo y apartando ambas manos.
"Eso es trampa," protestó él, inclinándose hacia su rostro.
"Noooo," dijo ella, levantando las manos para tapar su boca.
"¿Qué?"
"¡Kenshin, no puedes besarme cuando apenas estoy despertando!" exclamó la chica, sin quitar las manos. "¡Sabes que no sabe bien! ¡Tengo el peor aliento del planeta, no importa cuántas veces me cepille los dientes antes de dormir!"
Él suspiró y se dejó caer hacia atrás, señalándole el baño. Ella sonrió y saltó de la cama después de darle un rápido beso en la mejilla. Entró en el baño y se apresuró a agarrar su cepillo y la pasta dental.
Después de unos agonizantes cinco minutos de cepillado para asegurarse de que su aliento oliera a menta, volvió a la habitación y estuvo a punto de brincar sobre la cama cuando encontró a Kenshin acostado y dormido.
Pero no podía enojarse, ya que él lucía tan lindo mientras dormía.
"¡Mou!" murmuró, acurrucándose junto a él. "Supongo que esto resuelve el problema."
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