Siento que me muero…
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El Redentor 777. Creo que, si Tamara lo hubiese escuchado, realmente habría sido masacre y media que le hubieran dado a Nico, hubiera quedado más enana de lo que está. He escuchado que Sinaloa es caliente, no me quiero imaginar si los dejan allá, se mueren chamuscados XD. ¡Saludos!
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RinMakoto. La relación en el grupo entero es importante ya que las amistades serán claves. Los cinco necesitan apresurarse en llegar a la ciudad y Yomi… jajaja, si, pobre, pero es que creo que eso la motivará a no darse por vencida XD. ¡Saludos!
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Sin más, comencemos…
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La fiesta entre los demás grupos terminó y ya era hora de dormir, aunque todos decidieron quedarse un rato más para esperar a los que se quedaron en el desierto, mejor dicho, los que abandonaron en el desierto.
- ¿Creen que nos pasamos con esta broma? – dijo Tomoe algo preocupada por todos los que quedaron perdidos.
- Kawakita, no creo que debas enfocarte mucho en eso, estarán bien.
- Aunque nuestra Nicocchi no la más lista como para lograr su cometido – dijo Nozomi metiéndose en la conversación.
- ¿También está allá su amiga? – preguntó Tomoe.
- Sí, ¿están preocupados por su amigo? – preguntó Honoka a los demás.
- Pues… - los chicos bajaron sus cabezas bastante tristes para luego levantarla con felicidad – no.
- Chicos, ¿Cómo pueden decir eso? – dijo Aoi bastante preocupada – Daisuke-kun puede perderse y…
- Y podría hacerle algo a alguna de las chicas ahí presentes.
- ¡Lo mato si les hace algo! – ahora la peli lila emanaba un aura negra – él ya me tiene a mí, puede hacer cosas pervertidas si quiere, este cuerpecito le pertenece.
- ¡Indecente! – gritaron Shinonome, Umi y Misa al mismo tiempo.
- Vaya, eso sí fue buena sincronización – dijo Ramón aplaudiendo un poco junto con Joan y algunos de los chicos.
- ¿Por qué nos aplauden? – dijeron las tres pelis azules al mismo tiempo.
- Veo que tienes gemelas Aoi-dono – dijo Manatsu molestando a la Shooter de cabello azul.
- ¿Yo qué? – se señaló la peli lila a ella misma.
- ¿Tu qué?
- ¿Por qué me dijiste que tengo gemelas? – Asada no entendía a lo que la morena se refería.
- Aoi, no creo que hablen de ti – dijo Yoshimi.
- ¿Yo qué? – Misa no entendía de que hablaban.
- Pero no te hablaba a ti.
- Pero si dijiste Aoi.
- ¡Ya basta! – exclamaron Yukio y Kurashiki al mismo tiempo.
- Vaya, incluso ambos tienen sincronización.
- Como sea – el peli azul solo desvió la mirada como sin darle importancia al comentario, pero Kurashiki se sonrojó mucho por esto.
- Pero a todo esto, ¿Cuál es el problema aquí Yukio? – dijo el hondureño a su mejor amigo.
- Antes de que me den ganas de golpear a alguien, quiero que ambas se presenten.
- Oye, ¿Quién te crees para hablarme así? – reclamó Misa.
- Pues yo, Yukio Murakami ¿algún problema? – el peli azul le dedicó una mirada tan fría a Misa que esta se asustó un poco y se escondió detrás del hondureño, aunque la chica era más alta.
- ¿É-Él siempre es así? – preguntó con algo de miedo.
- No te preocupes, él a veces si se enoja, pero es buen tipo.
- Preséntense de una maldita vez.
- Yo primero – la peli lila se acercó al grupo – soy Aoi Asada, un gusto.
- ¿Y tú?
- Así que tenemos dos Aoi ¿eh? – dijo Yuzu riendo un poco.
- ¿Cómo que dos Aoi? – el club de Satogahama estaba confundido con esto.
- Ahora presentante tu – Yukio le habló a la compañera de Jet Race de Rin.
- B-Bien – la peli azul se levantó – s-soy Misa Aoi, ¿contento?
- Bien, problema resuelto, como pueden ver, una de ellas se llama Aoi y la otra se apellida Aoi.
- Una pregunta Yukio.
- Dime Ramón.
- Prácticamente si no queremos confundirlas, tendremos que llamarlas por el nombre o que.
- Bueno, ahí depende de cómo quiera la otra Aoi, porque a Asada-san ya la llamamos a nuestro modo, aunque a la otra Aoi no sé cómo decirle, es más, ni me interesa.
- ¡Oye, más respeto! – reclamó Misa.
- ¿Qué respeto? – Yukio le volvió a dedicar la mirada fría que hizo temblar a Misa y volvió a esconderse detrás del hondureño que solo reía nerviosamente.
- Como que esa chica está tocando mucho a Ramón-san ¿no creen? – dijo Nakano mirando la escena.
- Sí – dijeron Nomi, Claudia y Shinonome al mismo tiempo.
- ¿Q-Que pasa aquí? – dijo Umi que no entendía que pasaba.
- Y falta la otra Aoi… - Iwaki se acercó a la Idol peli azul – no te llamas o apellidas Aoi ¿verdad?
- N-No… soy Umi Sonoda.
- Bueno, asunto arreglado – la peli mostaza se acercó a su mejor amiga – tenemos entonces a Aoi y tenemos a Misa.
- ¿M-Misa? – la shooter peli azul se sonrojó un poco - ¿Por qué me llama por mi nombre?
- Te acostumbrarás – dijo el moreno.
- C-Creo que esto me está confundiendo – dijo Chika que se agarraba la cabeza.
- No te preocupes Chika-san, estoy igual que tu – ahora fue Dia.
- Entonces tendremos problemas con ellas – dijo Mari riendo un poco.
- No solo eso, tenemos también 3 Ryo.
- ¿Hay 3 Ryo? – dijeron los chicos de Satogahama mirando a Shinonome la cual se sonrojó.
- Creí que tú eras la única Shinonome – dijo Joan.
- Bueno, tenemos a esta Ryo – Tsukumo señaló a la campocorto de Shin Koshigaya.
- Vaya, sí que es linda – dijo el hondureño sonrojando a la peli azul pálido.
- ¿L-Linda? – la chica estaba con el rostro rojo.
- ¿Pasa algo?
- Ramón, recuerda que decirle eso a las chicas como que es algo inapropiado – dijo Joan sabiendo como son las cosas.
- A mí no me molesta que me digas cosas así Joan – Tsukumo se acercó a su quedante mexicano y lo abrazó de su brazo derecho.
- Tsukumo-san, no te aproveches de la situación.
- Cortés-san, no creo que debas reclamar algo que no es tuyo, él y yo somos quedantes – lo dicho por la peli negra cayó como balde de agua fría hacia cierta rubia y peli roja.
- C-Claudia, ¿a poco tu hermano ya estaba con alguien? – dijo Mia algo triste.
- N-No sabía que él ya tenía algo con alguien.
- C-Creo que nos vinimos a enterar de la peor manera – ahora fue Magdalena con el mismo tono de voz de la estadounidense.
- Por lo que dijo, ellos son quedantes, así que no está todo perdido para ustedes.
- ¿Qué es quedante?
- Son personas cuyo trato entre ellos es más que amigos, como amantes, pero no tanto como novios.
- E-Eso quiere decir que…
- Aun no está en una relación, además, Esperanza lo está peleando y también pueden ustedes, eso sí, ya saben mi advertencia.
- Lo sabemos, no tocar a Ramón Maldonado ya que él es tuyo – dijeron todas las Mahou Shoujo.
- Exacto – la mexicana sonrió – por cierto, Asuka, me contó Mia que hay otra Asuka en el grupo.
- Sí, ahora que lo recuerdo – dijo la peli gris con algo de duda.
- ¿Quién es?
- Veamos – Asuka miró a las demás del grupo hasta que vio a la shinobi de cabello castaño – es ella.
- Vaya, imaginar que ambas se llamarían de la misma manera.
- Aunque debo admitir que tu hermano realmente la tiene difícil – dijo Tamara mirando como Joan era abrazado por Mia, Magdalena, Esperanza, Honjou y Tsukumo.
- ¿Por qué todas esas chicas agarran a ese chico? – dijo Rimi mirando lo que ocurría con el mexicano.
- No lo sé, pero se ve divertido – dijo Kasumi.
- No creo eso Kasumi-chan – dijo Rimi riendo un poco nerviosa.
- A lo mejor esas chicas están enamoradas de él – dijo Saya para sorpresa de las demás de Poppin' Party.
- Esto es lo que denominan harem ¿verdad? – dijo Tae.
- A lo mejor eso es O-Tae.
- ¿C-Como puede tener un harem ese chico? – dijo Umi algo roja por ese dato.
- No es tan malo Umi-chan, mira que las chicas somos muy amorosas y si alguien nos gusta, vamos por esa persona que amamos.
- Es como un manga de romance-nya – dijo Rin.
- Más o menos es así Rin-chan – dijo Honoka para luego ser observadas por cierta Jetter castaña.
- Pero si no he dicho nada.
- P-Pero si no te decía a ti – dijo la peli jengibre – le hablaba a mi amiga Rin-chan.
- Pero si yo me llamo Rin.
- ¡Otra vez no! – exclamaron los chicos al cielo.
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Mientras tanto, en las dunas de arena de Dubái seguían los chicos que habían dejado en el sitio.
Yasmina iba sin camisa, esta iba amarrada a su frente mientras las demás solo caminaban detrás de él sin mirarlo ya que iban algo avergonzadas por el modo en el que iba.
Las demás iban con sus ropas algo sucias y llenas de arena por los vientos que había en el lugar.
- ¡Me entró arena en los ojos! – exclamó Arisa limpiándose.
- No te quejes y camina – dijo el peli rosa caminando sin detenerse.
- Oye, no seas mal educado conmigo.
- Lo siento, pero tengo que volver – Yasmina parecía motivado en volver.
- ¿Cómo es que caminas tanto sin cansarte? – dijo Nico bastante cansada.
- Es que si no llego… - el peli rosa miró al cielo para luego temblar un poco – Aoi-Senpai me matará.
- ¿Aoi-Senpai? – a excepción de Emi, la mayoría no comprendió lo que el chico decía.
- Es la pareja de este pervertido.
- ¡No soy un pervertido!
- ¿Ya llegaremos? – dijo Yomi que se estaba cansando luego de la gran caminata.
- Ya casi, aquella luz que se observa es el campamento, solo nos falta poco para llegar.
- Eso espero – Hanayama solo seguía caminando a la par de Yasmina, mientras que las otras chicas le seguían el paso, aunque Arisa iba última ya que nunca había sido muy fuerte atléticamente.
Varios minutos después, los 5 llegaron al lugar en el que los demás estaban reunidos.
- ¡Yomi-chan! – Tamaki fue la primera en llegar hacia su mejor amiga la cual estaba bastante cansada.
- Tama-chan – la castaña cayó en los pechos de la peli negra la cual se sonrojó mucho por tenerla en esa posición.
- Y-Yomi-chan, no hagas eso.
- Tama-chan, que suaves pechos tienes – sin más, la pitcher castaña se quedó dormida en esa posición.
- ¡Nico-chan! – las de primer año fueron a ver a la peli negra la cual se miraba que venía exhausta.
- ¿Estás bien Nicocchi? – preguntó Nozomi.
- Tu ni me hables Nozomi – la peli negra estaba que ardía con la peli morada.
- Vamos Nicocchi, háblale a mamá Nozomi que fue lo que te pasó.
- Maldita tonta – decía esto la peli negra mientras le daba unos suaves golpes en los pechos de la oji verde.
- Emi-chan, ¿estás bien? – preguntó Kondo a la peli rosa.
- Tengo sed, nada más – la peli rosa se levantaba a pura fuerza de voluntad.
- ¡Arisa! – las de Poppin' Party fueron a ver a su tecladista.
- Estoy muerta, y ustedes dos… Kasumi, O-Tae… son unas pende… – dijo simplemente mientras se dormía por el cansancio.
- ¡No te duermas Arisa! ¡Si cierras los ojos, morirás!
- Volví sano y salvo – decía Yasmina llegando con los chicos que ni siquiera se dieron cuenta de su presencia ya que muchos se hallaban hablando con los chicos de Argonavis.
- Daisuke-kun – la voz de la peli lila hizo al chico estremecerse.
- H-Hola Aoi-Senpai, volví.
- Ya lo sé – por alguna razón, el peli rosa sentía que en cualquier momento, moriría.
- ¿Por qué siento que alguien morirá hoy? – dijo Asuka viendo a los grupos los cuales estaban atendiendo a alguien especialmente.
- No sé porque, pero siento que esas chicas deberían resistir – dijo Kanan mirando a los grupos, aunque Dia, Chika y Ruby fueron donde estaba Nico a ver como estaba.
- No digas eso Kanan / Asuka – dijeron Mari y Katsuragi mientras se tiraban sobre estas y las daban un masaje a sus pechos.
- ¡Q-Quítate de encima Mari / Katsu-nee!
- Vaya, esas chicas no lo hacen nada mal – Francine miró a Katsuragi y Mari hacerles masaje a sus dos amigas y está sin más, fue con Asuka y le hizo lo mismo sin previo aviso – Veamos cuanto han crecido Asuka.
- ¡S-Suéltame Francine! ¡Por favor!
- Ya déjala Francine-san, es repugnante – dijo Kurumi en su típico estado de yandere.
- Vamos Kurumi, unos cuantos masajes no harán daño.
- ¡Ya sé! – Nozomi miró a las otras tres y se le ocurrió una forma de despertar a Nico - ¡Nicocchi, hora del washi washi!
- ¡No! – la peli negra reaccionó y se escondió detrás de Eli - ¡atrás loca! Tengo a Eli y no dudaré en usarla.
- ¿Qué haces Nico? – preguntó la rubia.
- No creas que estar detrás de Elicchi te salvará.
- ¡Detente! – dijeron Kanan y las dos Asuka y se escondieron de nuevo detrás del hondureño que se hallaba cerca de ellas.
- Bueno, por el momento te dejaré ir – dijo la shinobi rubia.
- Yo también.
- Por tres – dijo Francine y esta miró a las otras dos – no hacen tan mal un buen masaje en los pechos.
- Tu tampoco lo haces mal – dijo la shinobi.
- Well, ustedes dos son geniales y tienen mucha técnica – dijo Mari que luego miró a cierta peli morada – aunque ella tiene más práctica que todas.
- ¿Quién?
- Ella – Mari señaló a la musa peli morada - ¡Nozomi-san!
- ¿Eh? – la peli morada sintió como la llamaban y cuando miró, notó como la rubia le hablaba y fue donde estaban - ¿Qué pasa Mari-chan?
- Te quería presentar a dos chicas las cuales son lo mejor de lo mejor.
- ¿Así?
- Sí, soy Katsuragi.
- Bonjour Nozomi-san, yo soy Chervalier Francine.
- Y por si acaso me presento, I'm Mari Ohara.
- Nozomi Tojou, para servirles.
Las 4 harían una gran amistad y los pechos de las chicas realmente estarían más en peligro que nunca.
No fue hasta que todos escucharon un fuerte grito y cuando voltearon a ver, notaron como Aoi le había dado en los bajos a Yasmina el cual cayó al suelo agarrándose la zona afectada.
- ¿P-Por qué fue eso? – dijo el chico en el suelo.
- ¿Les hiciste algo a ellas mientras estaban en el desierto? – preguntó una muy celosa Aoi.
- C-Claro que no Aoi-Senpai, solo tengo ojos para ti.
- Hanayama – la peli lila miró a su Kouhai peli rosa - ¿Qué te hizo Daisuke-kun?
- No nos hizo nada, es más, nos guío hacia aquí.
- ¿L-Lo ves?
- Bueno, te perdono – mientras el chico se ponía de pie, Asada se acercó a él y le dio un beso en la mejilla y se acercó a su oído – si te sigues portando bien, te daré algo más en una habitación cuando estemos solos.
- L-Lo esperaré con ansias – el chico se limpió un poco la baba que se le había empezado a caer.
Cuando todo esto terminó, todo el grupo volvió al Titanic en el cual cada quien iría a su respectiva habitación a dormir.
Todos los grupos se despedían y deseaban buenas noches, aunque luego se les informó que mañana harían algo especial.
Joan y Ramón fueron los únicos que quedaron despiertos en la proa del barco esperando a ciertas personas que faltaban.
Justo cuando llegaban ciertas personas, también venían los marinos y camareras del Titanic, junto con Rafael.
- ¡Rafael! – llamaron ambos al mexicano mayor, pero este venía algo cansado.
- Hola chicos – luego de eso, bostezó fuerte - ¿Qué hacen aquí? Ya es tarde.
- Es que todavía no estabas aquí, es más, ¿Dónde está Kakehashi-Sensei?
- ¿Y mi padre?
- Pues… - el peli negro señaló hacia las últimas personas que venían y sería sorpresa mayúscula.
- ¡Dirás que no me quisiste! Pero vas a estar muy triste… hip… y así te vas a quedar.
- ¿Papá? – Joan no entendía como su padre venía cantando así y no solo eso, venía agarrando cariñosamente a Momoko.
- Hola hijo… hip… que bueno que están bien.
- Señor Alfonso, ¿Por qué viene así? – preguntó el hondureño.
- N-No te preocupes por eso… hip… Ramón, solo fuimos por… hip… unos tragos con Kakehashi… hip… Sensei – el padre de Joan le agarró, sin previo aviso, un glúteo a la maestra, cosa que dejó azul a Joan y Ramón, Rafael no se miraba tan impresionado.
- ¡¿Por qué haces eso papá?! Es mi maestra…
- No te preocupes… hip… Fábregas-san, él y yo nos entendemos… - ahora fue Kakehashi quien de repente puso su rodilla en la entrepierna del padre de Joan – hace tiempo que no salgo con un hombre y quiero ver si es la primera vez que… hip… me acuesto con un hombre.
Sin más, ambos adultos se fueron a alguna habitación libre, aunque ya de antemano los chicos sabían que iba a pasar ahí.
- ¿Qué mierda acaba de pasar?
- No me hagas caso Joan, pero como que Kakehashi-Sensei se convertirá en madrastra de alguien.
- Rafael, Ramón, honestamente… busquen quien los ame.
- Oye, relájate.
- Al único que tengo que retractarme es a Ramón, después de todo tienes como a 4 chicas detrás de ti, incluida mi hermana.
- Eres todo un caso Ramón.
- Cállate Rafael – en eso, el moreno notó algo en el cuello del mexicano peli negro – oye Rafael.
- ¿Qué pasa?
- ¿Por qué tienes un chupete en el cuello?
- P-Pues… - el peli negro miró la hora de su celular – miren la hora que es. Ya me voy, vayan a dormir temprano.
Sin más, el capitán del buque se fue sin dar mayor explicación, dejando a los dos chicos con varias dudas.
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Continuará…
