RinMakoto. Son unos castigos muy jodidos para las pobres, aunque en lo personal a la pobre Maya le irá peor. Karen y su suerte le jugaron a favor, mira que ganar todas las partidas que le caían, eso es suerte de la mayor jaja.

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Sin más, comencemos…

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- A ver, a ver, quiero que me expliquen de nuevo lo que pasa – decía Joan junto con su pareja peli negra. El mexicano estaba que no se creía lo que pasaba.

- No es tan difícil, hemos perdido en Uno y nos han obligado a ser tus parejas por un día entero – explicó Claudine – como dije, la verdad es que me molesta que la que haya ganado fuera Karen sabiendo cómo es ella.

- 这是可耻的 (Esto es vergonzoso) – susurró Mei Fan, Tsukumo solo estaba tomando con fuerza el brazo de su novio.

- Kana – Joan miró a su chica la cual se fueron a otro lado disculpándose con las chicas para hablar con ella – no sé qué hacer, es un reto que les dieron, pero…

- Joan, confío en ti y aunque sea un reto, sé que no harás nada más con ellas ¿verdad?

- Tu eres la chica que me gusta y con la que me puedo hacer esto – Joan la tomó y le dio un beso bastante apasionado el cual la japonesa correspondió con ímpetu, unos segundos después se separaron mirándose sonrojados – ¿ahora me crees?

- Besas como me gusta, así que puedo confiar en ti Joan, pero cuando terminen esto quiero que hagamos algo solo nosotros dos – le guiñó el ojo la peli negra, el chico se sonrojó un poco, pero aceptó.

- No te preocupes por nada y… - este fue interrumpido de nuevo con un beso de su pareja – K-Kana…

- Te amo – susurró la peli negra yéndose del lugar, sin más, Joan volvió con Claudine y Mei Fan las cuales solo miraron al chico el cual estaba sin su novia.

- ¿Y la chica con la que estabas?

- Ella fue con sus amigas, por lo tanto, creo que las ayudaré a hacer lo que tenga que hacer, aunque no tengo idea de que haré.

- Bueno, depende que haremos, se supone que debemos hacernos pasar como pareja.

- Saijo-san, deberías saber sobre esto del romance, ¿no se supone que eres francesa?

- Ça ne veut pas dire que je connais la romance, je suis français, pas un romantique sans espoir (Eso no significa que sepa de romance, soy francesa, no una romántica empedernida) – reclamó Claudine a la china peli morada – como sea, solo terminemos esto.

- Lo mismo digo Fábregas-san – Mei Fan dijo eso – pero la verdad es que no sé cómo comenzar con esto.

- Veamos, Claudine es francesa y por lo que miro Mei Fan es china… eso es bastante incompatible para alguien como yo que es mexicano – río Joan – aunque la verdad no me puedo quejar sabiendo que mi hermanastra es francesa y una amiga de ella es de China.

- ¿En serio? – preguntó la peli morada recibiendo la afirmación del castaño – bueno, al menos estás algo familiarizado.

- Bueno, hagámoslo – los tres decidieron salir al día siguiente por la ciudad para poder llevar a cabo una "cita" con ambas chicas – aunque la verdad no me imagino como es que será estar con chicas que no son de mi país, aunque no tengo que hablar ya que mi novia es japonesa jeje.

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Mientras tanto, en la noche…

- Saben que me harán hacer mañana ¿verdad? – preguntó Maya mirando a las demás chicas las cuales estaban reunidas en una de las habitaciones, aunque varias de estas estaban jugando Uno.

- No tienes que hacer mucho escandalo Maya Tendo, ¿no te toca con el chico que te gusta? – preguntó Claudine sonrojando a la castaña, aunque como buena actriz que era lo disimuló.

- No entiendo cómo es que aguantan con esto – dijo Hikari – me da algo de vergüenza hacerme pasar por una maid con ese traje.

- ¿No se supone que podría ser como una actuación?

- Quien sabe, aunque Kagura-san tiene ventaja ya que está en la ciudad que creció casi toda su vida – dijo Junna la cual estaba jugando con Karen, Nana y Futaba.

- Al menos Ramón-han deberá agradecer que tiene como sirvienta a una chica totalmente linda y que es alguien que le promete un gran futuro.

- Kaoruko, no es como que él fuera tu novio ni nada por el estilo.

- ¡Futaba-han, no digas eso!

- Cada una parece que la pasará bien – dijo Nana riendo un poco – al menos los chicos son buenos, es más, cuando termina les daré unos de mis cupcakes de banana.

- Esos son ricos Banana-chan – dijo Karen la cual lanzó una de sus cartas – lo lamento Jun-Jun… ¡Uno!

- ¿Qué cosa? – la peli morada notó como es que la castaña solo poseía una carta en su mazo, además, la que había lanzado era un más dos.

- ¿Otra vez nos va a ganar Karen? – reclamó Futaba la cual solo miró como Junna tomaba las dos cartas y le tocaba a ella lanzando un 5 rojo.

- No sé qué lanzar… tiraré esto – la peli naranja lanzó un Cambio de Color lo que provocó asombro – veamos… elegiré azul.

- ¿Azul? – Karen miró su carta y esta solo sonrió lanzándola resultando ser otro Cambio de Color – ¡gané!

- ¡¿Cómo es que tiene esa suerte para el Uno?!

- Yo quiero tener algo de suerte como Karen en el Uno.

- Igual yo.

- Al menos vayan alistándose para la salida que tendrán mañana todas – dijo Nana riendo un poco, aunque para las que tendrían que llevar a cabo ese castigo, no sería nada bonito.

- Ya quiero ver cómo es que Tamao la pasa de sirvienta, eso me dará mucha risa.

- Kaoruko, te recuerdo que tu también deberás aceptar ese castigo.

- Lo sé, pero a diferencia de ella, me veré más bella para Ramón-han, no es como que ella me supere en eso.

- No sé qué haré contigo cuando no esté – susurró la peli roja mirando a su mejor amiga.

- ¿Quieren jugar otra ronda? – preguntó Karen con el mazo de cartas de Uno.

- ¡Yo acepto jugar! – la francesa habló mirando a la castaña – Cette fois je vais te battre Karen, tu ne continueras pas ta série de victoires (esta vez ganaré Karen, no seguirás con esta racha de victorias).

- Bueno, sigamos jugando – dijo con inocencia la castaña, pero no pasó nada más extraño que lo que estaba pasando con normalidad. Karen volvió a hacer de las suyas – ¡Toma 4 cartas! ¡Gané!

- ¡¿Cómo demonios lo hace?!

- Nos volvió a ganar Karen… realmente no me esperé que ella fuera tan buena en esto.

- ¿Jugabas Uno de pequeña?

- Me metí a jugarlo con unos amigos de la secundaria y al parecer me hice de gran respeto en eso, aunque solo lo tomaba como hobby ya que mi enfoque principal era ser actriz – decía la castaña – aun así, gané un concurso de Uno que hicimos.

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Al día siguiente, Joan estaba listo para salir con Claudine y Mei Fan, sin embargo, el castaño estaba vestido de forma normal, aunque elegante; jeans azules, zapatos deportivos y una camiseta de la selección de México de polo, aparte de su cabello bien arreglado.

- ¿Por qué se están tardando?

- Lo lamento, no encontré mi zapatilla izquierda – Claudine llegó con un vestido que llegaba un poco encima de sus rodillas, este era de color crema y le quedaba bastante bien a su cuerpo – al menos quiero verme bien, ¿me queda bien?

- Ouais, tu es plutôt mignonne Claudine (Sí, te ves bastante linda Claudine) – dijo el chico en francés sonrojando a Claudine, pero en eso, Mei Fan apareció.

- Perdón por tardar, mi zapatilla derecha no la encontraba.

- Parece que a las dos les faltaba una zapatilla – río el mexicano por la gran coincidencia – aun así, espero que estén listas para la salida.

- Por mí lado estoy lista – dijo la china y los tres se fueron del barco, sin darse cuenta que tanto Tsukumo como Aoi y Yoshimi estaban mirando desde la parte superior del barco como el castaño se iba con las dos Butai Shoujos.

- ¿No te preocupas que él se vaya con otras chicas Kana?

- Ya hablé con él, sé lo que hará con ellas, así que no me preocupo – decía la peli negra para sorpresa de las dos chicas – además, confío en él y ya me lo mostró.

- Kana… realmente eres alguien madura.

- Por eso es que te has ganado un buen hombre – dijo Aoi sonrojándola, aunque no se notó mucho su vergüenza en el rostro, aunque Joan si lo hubiera notado.

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En otro lado….

- ¿T-Tengo que llevar esto por la ciudad? – preguntó Maya la cual estaba con el traje de gata, sin embargo, llevaba un pequeño vestido que lo cubría, por lo que no se podría decir que ella estaba vestida de eso, solo se notaría la diadema con orejas de gato.

- Sí, recuerda que esto lo tendrás por unos días, así que aguántate.

- Maya Tendo, no me esperé que alguien como tu llevar ese traje tan pequeño – dijo Akira Yukishiro mirando a la castaña la cual solo se sonrojó más.

- B-Bueno, como actriz de palabra, cumpliré mi castigo – en eso, Yukio apareció vestido de forma casual.

- ¿En serio tengo que llevarla a dar un paseo vestida así? – preguntó el peli azul.

- Sí, es parte de su castigo, así que suerte – dijo Futaba y el chico se la llevó, aunque la peli roja reía con fuerza por la mala suerte de la mejor de Seisho – de suerte tengo a alguien que lo va a estar grabando por mí.

- ¿A quién te refieres?

- Nana.

- Eso explica todo.

- Pobre de Tendo-san – Suzu estaba con Mahiru y tuvo pena por la castaña de ojos morados.

- Tendo-san es fuerte, superará esto, aunque con las demás, lamento mucho lo que van a pasar – la peli azul habló, unos minutos después, Yukio y Maya estaban caminando por la ciudad inglesa, aunque la actriz estaba muy sonrojada sabiendo que de debajo de su vestido estaba casi sin nada.

- ¿P-Por qué demonios acepté hacer esto? – exclamó por lo bajo, en eso, se acercó más al peli azul ya que, aunque fuera la mejor de la generación de Seisho, aun poseía emociones como toda persona normal, entre ellas estaba la vergüenza.

- ¿Te encuentras bien con esto Tendo-san?

- S-Sí, no soy alguien que rompe las promesas, cumpliré mi parte del castigo.

- Deberías tener cuidado con eso, porque si el vestido se levanta, todo el mundo mirará lo que tienes debajo de tu vestido – decía el peli azul con calma.

- Lo sé… mejor sigamos que no… - en eso, Maya tropezó con accidente con un anciano el cual iba con su bastón, la castaña cayó al suelo, aunque el hombre mayor no se cayó de milagro, sin embargo, este llegó a tocar las orejas de la diadema de Maya.

- Get away from me, you dirty cat! – exclamó el anciano el cual de un solo golpe tomó el bastón y comenzó a darle de golpes a Maya la cual solo se cubrió, no fue hasta que Yukio lo calmó.

- Señor, cálmese por favor.

- Oh, lo siento joven, lo que pasa es que soy ciego y esto fue provocado por un gato, siempre que siento uno me altero.

- B-Bien, no se preocupe por eso.

- Gracias joven – el anciano se fue del lugar, Yukio ayudó a Maya la cual solo se sobaba la cabeza.

- ¿Estás bien Tendo-san?

- La cabeza me duele un poco, ¿Qué le pasa a ese loco decrepito? – reclamó Maya mirando de lejos al anciano, aun así, miró como el chico la levantaba y se pegaba a ella, aunque solo para verificar como estaba – ¿eh?

- Parece que no es nada grave, aun así, vamos por una vía más calmada en donde no salga ese anciano – Yukio se llevó de la mano a Maya la cual sonrió un poco por eso.

Mientras tanto en el barco…

- ¡Gané de nuevo! – exclamó Karen la cual lanzaba su última carta y lograba la victoria – guau, es mi victoria número 5 seguida.

- ¡¿Cómo demonios lo hace?! – exclamó Futaba la cual lanzaba sus cartas a la mesa – Karen, ¿qué desayunas? ¿Cereales de suerte o qué?

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Continuará…