RinMakoto. Como dijiste, el torneo está hecho para que Karen lo gane, sabiendo que Umi en los juegos de cartas tiene mala suerte, aquí se miró reflejado lo que le espera de ese torneo.

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Sin más, comencemos…

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Kudo y Tomoe anduvieron probándose trajes en una tienda de ropas de Londres, aun así, no estaban solos ya que Tsubasa y Hibiki se enteraron de esto y estaban vigilando a los chicos.

- Pues la verdad hay buenas cosas aquí, pero creo que hay muchas cosas mejores en Japón ¿no es así?

- Sí, aunque… - la peli negra le echó mirada de reojo hacia la prenda de vestir de forma pervertida imaginándose con ella puesta, sin embargo, los dos decidieron salir de ahí para seguir mirando algunas cosas más, sabían que tenían que hacer eso o Iwaki podría publicar las cosas que ellas poseía en su celular.

- Tomoe-san, esto es malo ¿verdad?

- S-Sí, Iwaki-Senpai es bastante extraña con sus peticiones, sin embargo, Nakano-san da algo de miedo por saber cómo es que consigue la información que obtiene.

- Da hasta miedo, creo que tiene redes en la Deep Web o algo así – Kudo tembló un poco – ¿Cómo mierda supo que tenía esos vídeos con Tsubasa?

- En serio Kudo-san, ¿Por qué se graban con Tsubasa haciendo eso?

- B-Bueno, creo que solo fueron fotos al inicio, luego Tsubasa me pidió que nos grabáramos porque según ella es más excitante saber que nos grabamos para ver en qué mejoramos para que sea más excitante, y tengo que admitir que… te excita más al hacerlo – decía el capitán de los chicos algo sonrojado – ¿y tu Tomoe-san? ¿Tú y Hibiki no han…?

- N-No… aunque hemos tenido algo roces que sugieren que podríamos hacerlo, al final parece que ninguno da el paso – la oji verde tragó algo de saliva sonrojándose – aunque… yo también quisiera hacerlo con Hibiki-san.

- Entiendo, pues supongo que tanto tu como él lo harán a su momento, en mi caso, solo te podría decir que Tsubasa lo hicimos una vez llegados de un entrenamiento.

- Oh… bueno, quisiera saber eso… digo, si no te molesta.

- Adelante, no tengo ningún problema, pero si quieres podemos ir a una cafetería para que lo hablemos con más normalidad, aparte de que los meseros no hablan japonés, así que no creo que nos entiendan.

- Buen punto – ambos peli negros siguieron su camino hacia la cafetería más cercana, sus parejas los estaban siguiendo también para saber qué era lo que estaban hablando.

- Me pregunto qué es lo que se dicen porque Tomoe-san se puso algo roja – exclamó Hibiki por lo bajo apretando un poco su puño – Kudo, espero que no le estés diciendo algunas cosas a Tomoe-san porque si no…

- Espero que Tomocchi no esté haciendo lo que estoy pensando – Tsubasa fue la siguiente en hablar – ella no es capaz de traicionarme de ese modo, sabe bien que Kudo-kun es el chico que amo.

- Lo mismo que Kudo, sabe bien que Tomoe-san es mi novia y no pienso que él vaya a hacer de cosas con ella.

- Mejor sigámoslo – el peli humo asintió y continuaron la búsqueda de los dos, aunque de tanto que hablaron entre ellos, terminaron perdiendo el rumbo en el que se fueron – Tsubasa-san… creo que…

- Si – la chica sonrió nerviosamente hasta que se desesperó – ¡nos perdimos!

- No creo que fuera necesario que gritaras fuerte, aun así, parece que nos perdimos – Hibiki miraba para todos lados, aunque la verdad no entendía muchas cosas ya que estaban en inglés y no era un experto de ese idioma.

- ¿Y qué hacemos ahora?

- Si estuviera Joan que sabe muy bien el inglés estaría genial, también Honjou-Senpai que es de aquí… maldición.

- Espera, la llamaré – la castaña tomó su teléfono marcando el número de la inglesa la cual contestó unos segundos después.

- Hello? Tsubasa-chan, ¿Qué ocurre?

- Honjou-Senpai, tenemos un problema, verás, estamos perdidos con Hibiki-san y la verdad no sabemos qué hacer para poder volver…

- Tsubasa-san, mejor dile que venga para que nos guie – susurró el peli humo.

- Oh, olvida eso último, quisiera saber si puedes venir a guiarnos para encontrar un sitio que tanto Hibiki-san como yo estamos buscando – la mentira de Tsubasa era creíble sabiendo que los dos estaban ausentes, sin embargo, por alguna razón, la peli vino tinto pensó en algo.

- Tsubasa-chan, es raro que digas que estás con Inoue-kun – Honjou se impresionó por una idea que se le vino a la cabeza – Tsubasa-chan… no me digas…

- ¿Q-Que cosa?

- Are you cheating on Miyamoto-kun with Inoue-kun?!

- ¿Eh?

- ¿Por qué lo haces Tsubasa-chan? No pensé que serías alguien como para engañar a tu pareja, pensé que les iba bien, es más, me acercaba a su habitación para escucharlos tener sexo y parecía que lo disfrutabas mucho porque gritabas "¡Más adentro Kudo-kun!" o también "Métemela con más fuerza", aunque también te escuché gritar "Rómpeme la vagi…"

- ¡Bien, ya entendí! – exclamó sonrojada la oji azul, aunque Hibiki tuvo que desviar la mirada para ocultar que él estaba avergonzado por escuchar eso – y no, no engaño a Kudo-kun, es que…

- ¿Qué pasa? If you don't tell me then i can't help you.

- B-Bueno, te explicaré las cosas si es lo que quieres Senpai – Tsubasa procedió a explicarle el asunto de que tanto Kudo como Tomoe habían salido y ellos en busca de ellos para saber qué es lo que se traían entre manos llegando a la parte en la que se perdieron en la ciudad londinense – y eso fue lo que pasó.

- Comprendo, los celos son bastante jodidos, aun así, estaré allí en unos minutos, después de todo conozco la ciudad como si fuera la palma de mi mano – exclamó Honjou riendo un poco – espérenme que llegaré en cuanto pueda.

- Gracias Senpai.

- Por cierto, Tsubasa-chan… ¿Cuál es tu posición sexual favorita? – ni siquiera se molestó en responder cuando la capitana del club colgó la llamada.

- Solo queda esperar a que Honjou-Senpai venga a ayudarnos.

- Sí, aunque no sé cuánto tardará en llegar aquí.

- Nos queda esperar, pero… - la castaña se puso a jugar con sus dedos mientras que parecía que el tiempo no avanzaba, aun así, la paciencia se le estaba acabando.

- Tsubasa-san, por favor relájate.

- Es que no puedo, me estoy comiendo la cabeza en pensar que Tomocchi no sería capaz de hacer algo con Kudo-kun – decía la chica la cual se tomaba los brazos – no creo que me cambie por Tomocchi, no es por nada Hibiki-san, pero es que solo mira este cuerpo, miento si no digo que estoy bastante buena luego de muchos años practicando el deporte que más amo.

- ¿Y eso que tiene que ver Tsubasa-san? Tomoe-san posee un buen cuerpo, los pechos de ella son más grandes que los tuyos.

- E-Eso no tiene que ver, ojalá que Honjou-Senpai ya venga, quiero ir a buscar a Kudo-kun y Tomocchi – los dos estuvieron esperando más, de hecho, Hibiki tuvo que calmar a la castaña para que no hiciera algo tonto, aunque la inglesa terminó apareciendo unos minutos después.

Mientras tanto, Tomoe y Kudo estaban terminando un té el cual estaba bastante bueno y la charla que estaban llevando a cabo ambos parecía bastante confortable.

- La verdad es que pensé que Tsubasa no estaría interesada en esto del romance, como siempre pensamos que estaría soltera toda su vida y virgen solo teniendo equipos de béisbol en su cuarto.

- Lo mismo me dijeron, pero de suerte Tsubasa no es así, es una chica bastante genial y espero que algún día sea mi esposa, es algo que me encantaría que pasara.

- Igual creo que me gustaría casarme con Hibiki-san, aunque aún falta para que pase eso.

- Aun nos queda mucho por delante, pero creo que con esto supongo que Iwaki-Senpai nos dejará en paz con eso, no me gustaría que nadie mirara los videos que tenemos Tsubasa y yo.

- Y a mí me gustaría que borrara esas fotos que le mandé a Hibiki-san, aun me pregunto cómo es que Nakano-san puede obtenerlas con facilidad – en eso, la peli negra sintió como una pestaña le caía en el ojo.

- ¿Estás bien Tomoe-san?

- S-Sí, solo fue que se me metió algo al ojo – el peli negro se le acercó a la chica para ayudarla, era algo normal, pero desde justo estaban mirando Tsubasa y Hibiki, que llegaron con Honjou luego de encontrarlos, sin embargo, el ángulo desde donde estaban mirando podía malinterpretar las cosas.

- Tomocchi… ¡¿qué demonios haces?!

- ¡Tsubasa-san! – Hibiki fue tras la castaña la cual iba con instintos asesinos hacia su mejor amiga, pero esta tuvo que ser detenida por el chico, aunque eso no evitó que este mismo también sintiera una gran molestia por todo este asunto.

- Jeje, the gossip is good – la inglesa detrás solo reía un poco.

- ¡Tomocchi! ¡Kudo-kun! ¡Explíquenme que mierda pasa aquí!

- ¡¿Tsubasa?!

- Kudo, Tomoe-san, yo también quiero una explicación de todo lo que pasa – reclamó el peli humo acomodándose un poco los lentes, los dos chicos de cabello negro tragaron algo de saliva por eso.

- Tomocchi… más vale que me vayas explicando todo esto – susurró en tono amenazador la castaña la cual emanaba un aura que a su mejor amiga aterró.

- ¡E-Espera Tsubasa, todo tiene una explicación!

- Habla ahora.

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Mientras tanto en el barco, más específico en el torneo del Uno…

- Tengan cuidado chicas, Karen solo tiene tres cartas, está a punto de ganar – decía Junna la cual estaba en otra mesa con la castaña, con ellas estaban las hermanas Udagawa, Ako y Tomoe.

- Eres bastante buena, siempre que estoy cerca me logra ganar – la peli roja habló tirando su carta la cual era un 7 verde.

- Buena esa hermana – Ako fue la siguiente en lanzar un 9 del mismo color – veamos, el demonio que se oculta en mi ojo derecho me indica que Hoshimi-san tiene un… 6 amarillo.

- Tiro mi 6 amarillo… ¿eh? ¿Cómo lo supiste?

- Esa es mi Ako, adivinaste la que ella tiraría – Tomoe felicitó a su hermana menor la cual solo sonrió por eso.

- Jun-Jun, esa fue buena, aunque la verdad… - Karen miró su mazo y lanzó dos cartas al mismo tiempo siendo dos 5 amarillos – ¡Uno!

- Ya nos va a ganar – exclamó por lo bajo Junna – Udagawa-san.

- ¿Sí? – las dos hermanas miraron a la actriz peli morada confundidas, aun así, la chica supo que tenía problemas con decir el apellido de las dos.

- Perdón… Tomoe-san, lánzale algo.

- Veamos… creo que podré hacer esto – la baterista peli roja lanzó un Cambio de Sentido color amarillo por lo que Karen tendría que robar en caso de que no tuviera el color de esa carta.

- ¡Tomoe-san, gracias! ¡Gané! – exclamó Karen la cual lanzó su última carta resultando ser un Cambio de Sentido, pero de color rojo – ¡Yujuuuu! Pensé que me tendría que tocar robar cartas, pero de suerte no la tiré al inicio.

- Hermana, perdimos – susurró Ako la cual solo miró a Tomoe – aun así, fue una buena partida.

- Karen casi nunca jala cartas y cuando lo hace le salen justo las que quiere para ganar – Junna solo suspiró – analicé esto y era casi imposible que le saliera una buena mano de cartas, aun así, logró romper las expectativas.

- Jeje, creo que solo soy buena en esto.

- ¡¿POR QUÉ VOLVÍ A PERDER?! – exclamó Umi desde su mesa siendo la única que poseía más de 10 cartas a diferencia de sus compañeras que solo poseían menos de 5 cartas.

- Pobre de Sonoda-san.

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De nuevo con el cuarteto, tuvieron que dar una larga explicación de camino al barco, aunque Honjou mantuvo algo de distancia.

- Menos mal, pensé que se estaban viendo a escondidas, pero parece que solo protegían a sus parejas – Tsubasa dijo eso aferrándose a su novio el cual asintió.

- Lamento si me molesté por esto – se disculpó Hibiki a su pareja peli negra la cual solo negó con su cabeza.

- No necesitas disculparte, debí haberlo dicho, pero es que Iwaki-Senpai nos dijo que no dijéramos nada – las dos parejas se dirigieron hacia sus habitaciones, en el caso de Kudo y Tsubasa, estos solo se fueron al cuarto y cuando parecían que las cosas entre ellos subirían de tono porque la castaña se subió encima del peli negro besándolo, sin embargo, Tsubasa se detuvo.

- ¿Qué pasa?

- Bueno, como castigo por haberme hecho esto – la oji azul se le acercó al oído susurrándole en tono sensual – tendrás que aguantar dos días sin nada de lo nuestro en la cama, eso te pasa por hacerme eso.

- ¿T-Tsubasa? ¿En serio me harás eso? – la castaña asintió, sin embargo, Kudo tendría que aguantar no hacerlo con su novia, pero al menos el asunto se había resuelto.

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Continuará…