RinMakoto. Al tener más apoyo, Keke se llevó el triunfo y aunque la actuación de Lanzhu fue genial, no le bastó para ganar y con eso último, está extraña la cosa que se agravia jeje.
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Sin más, comencemos…
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La competencia entre Keke y Lanzhu había terminado, aunque el resultado fue favorable para la peli gris, la otra china no estaba del todo convencida por esa derrota, aunque esta había decidido ir a espiar un poco a su rival de Shanghái, esto para ver que la hacía diferente a ella.
- No puedo creer que estas habitaciones sean tan cómodas – dijo Shioriko la cual estaba en una habitación de primera clase con su mejor amiga y Mia, las tres estaban ahí.
- Al menos queda al lado de la sala de música que posee el barco, realmente pensaron en todo cuando lo diseñaron – la joven rubia habló, Lanzhu por su lado estaba cambiándose para ponerse una gabardina y un sombrero como si fuera detective.
- Volveré pronto, necesito averiguar un poco – la peli rosa platino se fue del sitio dejando a las dos chicas extrañadas.
- Lanzhu se ha puesto extraña desde que perdió contra Tang-san.
- Desde que comencé a colaborar con ella, nunca la he visto así – susurró Mia la cual comenzó a escuchar música – She went crazy.
- No creo que haya sido eso – con eso, Lanzhu estaba caminando como si de un ninja se tratara para que nadie la mirara, aunque en el barco había auténticas shinobis. La oriunda de Hong Kong estaba llegando a la cocina en donde se encontró justo a la persona que estaba buscando.
- A ver… si le añado un poco de sal al cangrejo creo que puede salir bien… ¡no, espera! Así no era.
- ¿Qué se supone que hace? Parece que cocina el cangrejo, pero no lo hace bien – pensó la peli rosa, en eso, notó que alguien venia y resultó ni más ni menos que Joan el cual parecía que estaba con algo de hambre.
- Ay, no me vuelvo a desvelar viendo la película de la Llorona animada, aunque tengo que decir que estuvo bien hecha, al menos Kana durmió bien y eso es importante – decía por lo bajo el mexicano, sin más, este llegó a la cocina en el que, al abrirla, lo primero que miró fue a Keke.
- J-Joan-kun – susurró la peli gris, el color rojo invadió sus mejillas, Joan estaba del mismo modo, la noche anterior fue toda una montaña rusa de emociones que ninguno de los dos esperó, Lanzhu estaba detrás de la puerta escuchando y mirando un poco, ella también fue testigo de lo que pasó.
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Flashback
Keke y Lanzhu habían terminado la competencia y cabe decir que Joan le estaba dando una pequeña lección de amistad y humildad a Lanzhu, sin embargo, cuando estaba por irse, la nacida en la región de Shanghái estaba ahí parada detrás de él.
- Tang, ¿Qué fue lo que…? – antes de que Joan reaccionara, este fue besado por la china en los labios, segundos después se separaron, Lanzhu quedó callada por eso, esta no se había ido todavía.
- O-Oye Keke Tang, ¿Qué diablos haces?
- E-Es solo un agradecimiento para ti Fábregas-kun, tómalo como gustes – le susurró la peli gris abrazándolo y escondiendo su rostro en su pecho, Joan estaba mudo, no podía decir nada sobre eso.
- O-Oigan, ¿Por qué se dicen de esas cosas? – exclamó la nacida en Hong Kong que cuando menos acordó, separó un poco a ambos chicos.
- Nǐ wèishéme yào zhuàng shàng zhège zhōng sān? (¿Por qué te entrometes en esto Zhong-san?) – reclamó la peli gris, Lanzhu tampoco se quedó callada.
- Bùyào shuō wǒ duō guǎn xiánshì, zūnzhòng wǒ, xiǎo jiāhuo (No me llames entrometida, trátame con respeto, pequeña) – ambas chicas estaban mirándose con rivalidad, aunque Keke no perdió el tiempo peleando.
- Al menos no he perdido contra mi rival… ¡es cierto! Perdiste contra mí.
- ¡¿Qué has dicho?! – Joan tuvo que calmar a ambas chinas, aunque la verdad es que Keke solo se ponía al lado del mexicano, es más, esta se lo terminó llevando de ahí dejando solo a Lanzhu mirando el mar, aunque no parecía importarle mucho, sin embargo, eso era lo que dejaba ver. Con Keke y Joan, estos estaban en otro lado.
- Lo siento por eso, pero es que no pude resistirme – susurró la peli gris la cual estaba con la cabeza escondida en el pecho del castaño.
- ¿Por qué hiciste eso Tang?
- Eres alguien que me ha atraído desde que me salvaste la otra vez, sin ti creo que ni siquiera estaría aquí, no solo eso, tu cocina es grandiosa, me has tratado con mucho respeto, ningún chico en Shanghái es como tú, eres totalmente diferente, por lo que solo tu tendrás mi corazón, mis sentimientos por ti son fuertes.
- Tang… lo siento, pero…
- Entiendo si ya tienes a alguien… pero yo quiero seguir a tu lado, digo, si me lo permites por favor – susurró la peli gris pegándose más al mexicano, este solo tragó saliva, a pesar de que muchas veces Keke se comportaba de forma infantil, ahora mostró una faceta opuesta a lo que era.
- Pero Tang…
- No me llames Tang… llámame por mi nombre por favor, también quiero llamarte por tu nombre, si me lo permites.
- No tengo problema con eso, digo, es algo a lo que estoy acostumbrándome a que llamar a las chicas por el apellido, solo es cuando me dicen que las llame por sus nombres que vuelvo a lo que es normal para mí en México.
- Está bien… Joan-kun – eso sonrojó un poco al castaño, no era muy común que lo llamaran con el honorifico –kun, Tsukumo lo decía su nombre a secas, algo común para él, aunque Mari lo llamaba con el honorifico también, por lo que no era raro entonces.
- Lo tengo entonces Keke.
Fin Flashback
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- Que tensión se siente – pensó la peli rosa mientras seguía mirando el interior de la cocina, ambos chicos solo estaban de su lado haciendo lo que fueran a hacer, lo que no sabía Joan es que la oriunda de Shanghái estaba haciendo justamente el platillo para él.
- No esperé que él estuviera aquí, y justo que quería hacer este plato nativo de mi tierra para Joan-kun – pensó Keke, aunque Joan no estaba prestando mucha atención y este solo fue por un vaso con leche y solo se despidió de la china la cual seguía en lo suyo – menos mal, al menos podré aprovechar para hacerle algo antes de que vuelva.
- Parece que Keke Tang está haciéndole algo a Joan Fábregas, aunque bueno, no es como que le vaya a gustar una comida de allá sabiendo que él no es japonés o chino, aun así, siento que la comida de Hong Kong es mejor que la de Shanghái.
- ¿Eso crees?
- Completamente – Lanzhu se dio cuenta de que alguien la había escuchado – ¿Keke Tang?
- ¿Qué haces espiándome? ¿Acaso quieres aprender canto de la persona que te ganó?
- Como si fuera a hacer eso, de hecho, solo estaba mirando que vas a hacer una comida de una tierra que no tiene el gusto de poseer lo que nosotros tenemos.
- ¿De qué hablas?
- Hong Kong es conocido como el sitio que posee una gastronomía que muchos en el mundo envidian, los mejores críticos culinarios han elogiado la comida de Hong Kong como de las mejores del mundo, aparte de que se ha apodado como el paraíso gourmet o también la Feria Mundial de la Comida.
- Bah, eso no es nada, la comida de Shanghái es conocida y querida en toda China, aunque sea una combinación de muchas, nadie la ha perfeccionado como nosotros.
- Solo son una copia.
- Eso lo veremos – susurró la peli gris, ambas chinas se miraron con rayos saliendo de sus ojos, sin más, comenzaría una especie de competencia en donde cada una haría un platillo típico de su zona de origen.
Keke ya tenía un platillo seleccionado el cual era el que haría para Joan, sin embargo, con esto, decidió cambiar de planes e ir con algo que llamara más la atención para ganarle a la peli rosa platino.
- Veamos, de suerte en la biodiversidad de animales hay peces y muchos tipos de carne, con eso voy a hacer algo genial, pero a la vez haré algo más sencillo para Joan-kun… quiero que él esté orgulloso de mi comida – eso era lo que susurraba la oji azul, de otro lado, Lanzhu estaba haciendo lo mismo, aunque la misión de espiar a Keke se había ido a la mierda, se enfocaba más en cocinar, no obstante, había un gran problema.
- Mierda… la reté a una competencia de cocina, pero… no sé cómo cocinar, sé platillos de mi tierra, pero no entiendo cómo hacerlo – efectivamente, la peli rosa no podía cocinar, aun así, no permitiría que su rival le ganara en algo así.
Los tutoriales de YouTube siempre eran buenos, aunque China fuera un país en el que la plataforma de vídeos estaba vetada, eso no impedía ver otros vídeos de Japón en donde indicaba como hacer esos platillos que quería hacer y siguiendo las órdenes al pie de la letra.
Ambas Idols chinas estaban cocinando siguiendo las instrucciones, aunque se notaba que la que más problemas tenía era Lanzhu, podía ser una prodigio que sabía mucho de canto, baile y demás bellas artes, pero en el caso de la cocina, no podía hacerlo bien y eso que le costó incluso cortar las verduras.
- ¿Por qué lloras? ¿A poco ya te estás rindiendo? – exclamó Keke mirando a la peli rosa de Hong Kong la cual tenía lágrimas en sus ojos.
- N-No, solo estoy cortando las cebollas.
- Está bien – susurró, ambas siguieron en lo suyo, pasaron dos horas hasta que muchas de las Idols llegaron a la cocina, Joan llegó unos momentos después solo para ver como las dos jóvenes estaban terminando.
- Lanzhu, ¿Qué se supone que haces? – exclamó Shioriko a su amiga la cual estaba quitándose el sudor de la frente.
- Verás Shioriko, estamos con Keke Tang para probar que gastronomía es mejor, si la de su pueblo Shanghái o de mi natal Hong Kong.
- Y así demuestro que la comida de mi ciudad es mil veces que la de ella.
- Ni loca aceptaré eso.
- Shībài zhě (Perdedora).
- Báichī (Idiota).
- Wǒ zài ǒuxiàng bǐsài zhōng jíbàile nǐ (Te gané en la competencia Idol).
- Wǒ de xiōng bǐ nǐ dà, érqiě nǐ shì píng de (Yo tengo los pechos más grandes que tú, además, estás plana).
- Wǒ bù píngtǎn, wǒ de shēntǐ bǐ nǐ de hǎo, wǒ de rǔfáng hěn hǎo (No estoy plana, mi cuerpo es mejor que el tuyo, mis pechos son de buen tamaño).
- Oigan, dejen de pelear en chino que aquí nadie entiende nada – exclamó Mia la cual estaba masticando un chicle.
- Muy bien, entonces decidamos quien es la ganadora y tenemos al juez perfecto – exclamó Ai mirando al mexicano – ¡Jo-kun, tú decides!
- ¿Yo?
- Sí, prueba la comida de ambas y tú dices quién gana, si Lan-chan o Ke-chan, ahí veremos – Joan solo suspiró, pero con tanta presión, finalmente accedió a probar las comidas de ambas chinas. Primero, fue hacia el de Keke.
- Esto es Cí fàn tuán – la peli gris presentó su platillo, este se hacía envolviendo apretado un trozo de youtiao (masa frita) con arroz glutinoso. Este plato suele tomarse para desayunar junto a leche de soja dulce o salada en el este de China, Hong Kong y Taiwán.
- De apariencia se nota extraño, pero de igual forma espero que sepa bien – Joan se llevó un trozo a la boca y unos segundos después, se quedó callado con la mirada oculta en su cabello.
- ¿C-Cómo está?
- A ver cómo está – Nico fue y tomó un trozo del platillo de Keke, unos segundos después, esta estaba vomitando – ¡¿Qué mierda le echaste?!
- ¿Tan mal está? Me encargué de seguir todos los pasos a la perfección.
- Hm, eso solo demuestra que eres débil – Keke se molestó por la frase de Lanzhu.
- Pues veamos que tal sabe tu platillo.
- Bien – Joan se terminó de tragar lo que había tomado de Keke y ahora tocó el turno de Lanzhu, el castaño notó que el platillo se miraba bien.
- ¿Qué es esto?
- Es Wanton mee – el plato presentado por la peli rosa platino era servido en una especie de sopa caliente o humedecido en salsa de soja o salsa de ostras, aliñado con verduras (preferiblemente aquellas que poseen hojas verdes), char siew (rodajas de carne de cerdo asado), y junto con el wanton en un cuenco separado.
- Pues vamos allá – Joan probó el Wanton mee y en menos de lo que canta un gallo, este se desmayó.
- ¡Fábregas-kun!
- ¡Óyeme idiota, ¿Qué demonios tenía esa comida?!
- Lo probaré – Shioriko fue por ella, pero de inmediato terminó escupiendo la comida de su amiga – Lanzhu, esto está quemado.
- Pero si cuando lo probé estaba bueno.
- ¡Joan-kun! ¡Joan-kun! ¡Por favor, responde!
- No probaba algo así desde que Arihara cocinó para nosotros el otro día – susurró el chico el cual tuvo que ser llevado a enfermería para que le dieran algo para la intoxicación alimentaria, por otro lado, Keke estaba afuera de la enfermería.
- Supongo que no pude acercarme a él por medio de la comida, preguntaré a alguien como puedo hacerle.
- Tengo una sugerencia para ti.
- Oh, ¿tú eres Honjou-san?
- Sí, ven a mi pequeña, que te contaré como puedes encantar a Fábregas-kun, créeme, no te arrepentirás – Honjou se encargaría de "guiar" a la oriunda de Shanghái en ese camino.
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Continuará…
