Capítulo XIII

Supo del accidente porque se encontraba en Metrópolis, de hecho en El Planeta, en la otra acera del edificio de LuthorCorp, por eso no tuvo que usar su velocidad para llegar a tiempo de ver como subían a Lionel a la ambulancia.

–No puedo creerlo.

–¿Qué?

–Están diciendo que fue un intento de suicidio que salió mal.

–Obviamente no lo es ¿No crees?

–Claro que no ¡¿Por qué Lionel Luthor querría suicidarse?!–exclamó Chloe.

–Exacto, además…–Clark usó su visión.–La ventana está rota. Si te vas a suicidar por lo menos la abres.

–Si es una ventana, aunque yo creí que era una pared de vidrio.

La chica rubia miró en dirección de la ambulancia y se giró.

–De todos modos, no es como si alguien fuera a estar triste.

–Como puedes decir eso, ya hemos convivido más con él.

–No lo sé Clark, tú quieres ver que todos tiene algo de bondad, pero la de Lionel nunca me ha parecido muy sincera.

–Ha apoyada a Lana en sus proyectos para ayudar a los chicos y chicas de los meteoritos.

–Ni me lo recuerdes. No sé como ella se metió en eso.

–Quiere hacer un cambio para bien.

–Si, me imagino, aunque con dinero de los Luthor.

–Si solo ves esa parte.

Dijo Clark y la rubia decidió no seguir con ese tema o poniéndose en contra de su amigo.

–¿Vas a ir a verlo?

–Si, pero les avisaré a mis padres, probablemente también querrán verlo.

Ella solo alcanzó a asentir, antes de ver como su amigo desaparecía.

Clark llegó a la granja y encontró a sus padres en la sala, las noticias habían llegado antes que él. Jonathan le hizo un gesto para que se sentara y le preguntó:

–No fue un suicidio ¿verdad?

–No lo creo…

El menor les relató lo que Chloe y él vieron y los Kent mayores se lamentaron, pero al mismo tiempo supieron que el destino alcanzó a Lionel. La familia decidió ir al día siguiente a visitar a Lionel y así lo hicieron. Ahí les informaron que este estaba grave y en estado de coma, los médicos no tenían muchas esperanzas.

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Después de colocar el dibujo de Conner en la pared especial para ello, Lex pasó el día con este, llevándolo a todos los lugares que debía visitar. Conner era muy sociable y lo conocían desde los oficinistas, guardaespaldas y científicos. El día laboral pasó rápidamente y para la hora de la salida padre e hijo se dirigieron a su casa para cenar. Ahí fueron acompañados de los FitzGerald y luego de eso, Lex dejó que Susy se encargara de bañar a Conner en lo que él hacia lo mismo o eso seria lo rutinario, pero Conner pidió bañarse con su papá y así la hora del baño fue más larga de lo común. Conner fue arropado por Lex…

–Papá ahora quiero el del Osito trabajador por favor.

Lex sonrió y fue hasta el librero lleno de libros infantiles y agarró el que su hijo pidió. Lex vio como su hijo se quedó dormido, luego de leer menos de la mitad del libro. Lex besó el cabello oscuro de su hijo y prendió la lámpara de noche que iluminó el techo con estrellas repartidas en las diferentes constelaciones y en un color diferente donde antes existía Kryptón.

Salió al pasillo y se encontró con Susy.

–Ya está dormido Susy.

–Lo sé señor, pero descanso mejor si estoy vigilándolo.

Lex sonrió y decidió no interferir con la rutina nocturna de la niñera. Bajó a su despacho, tomó la llave de la Fortaleza e hizo el viaje. Al llegar sintió la temperatura cambiar de inmediato para que no sintiera frio.

–Hola Jor-El.

–Bienvenido Lex Luthor.

–Vengo a pedirte un favor.

–¿Es sobre algún avance?

–No. Por el momento tenemos las manos llenas, junto con los bolsillos. Digamos que…

–Si he visto tus datos, LexCorp está llegando a la cima de Asia. En Europa ya lo están desde hace algunos meses.

–Si. Por eso el favor no es sobre negocios, si no personal.

–Escucho.

–Es sobre mi padre y como verlo sin hacerlo.

–…

Lex le explicó a la IA y es que había revisado muchas de las aplicaciones que la Fortaleza poseía y por eso sabía que lo que pedía se podría realizar.

No tuvo que hacer más que pasar un día con su bebé para tomar una decisión y esa era verlo, pero no estar al alcance ni de él ni de nadie, no se podía arriesgar a que Conner fuera descubierto antes de que él lo decidiera.

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A esas horas la sala se encontraba vacía, a excepción de alguna enfermera haciendo su rondín, por las diferentes habitaciones privadas, era lo bueno de ser millonario, el piso solo era ocupado por dos o máximo tres pacientes, entre ellos Lionel Luthor.

Lex llegó hasta la cama donde su padre se encontraba y se colocó parado a su lado.

–Oh Lionel, me temo que por fin te atraparon tus enemigos.

El hombre entreabrió con mucho trabajo los ojos.

–Es…

El mencionado se sorprendió un poco, pero luego sonrió de lado.

–Así que eso de que estabas en coma no era cierto eh.

–Hi..o…

–Ahórrate las palabras. Vine porque es lo último que haré por ti.

–…

–Bueno, eso no importa, ya que tu nuevo hijo es tan maravilloso.

–Le…

–De hecho me sorprendió que estés aquí, si él pudo salvarte fácilmente, después de todo es un extraterrestre súper fuerte veloz y otras cosas.

Los ojos de Lionel brillaron en reconocimiento.

–Oh si Lionel, desde hace años que sé el secreto de tu amado protegido.

–¿Po…qe?

–¿Por que no he hecho nada con esa información?

–…

–Antes me hubiera importado, ahora no y entre más lejos esté de Clark y la gente que lo rodea, mejor.

Lionel pareció sonreír con condescendencia y Lex se dio cuenta.

–Sabes que tus intentos por hacerte cercano a él me parecen tan patéticos.

–Es fudte…

–¿Y eso qué? Sigue siendo un tonto que se deja llevar por todo lo que dicen los demás, Siempre le ha faltado carácter.

–…

–Y verás…–Lex sonrió ladino– eres tan tonto padre.

–…

Lex se inclinó hasta estar cerca del oído del mayor.–Estás con un paso en la tumba y a él le importara un rábano, pero yo…. Yo tengo un hijo medio Kryptoniano

–¡!

–Oh si padre, pudiste haber conocido a mi hijo, se llama Conner y es… medio Kryptoniano.

–Mi nie…

–!Ni de lejos! Él no es nada tuyo. Ni él ni yo somos ya nada tuyo, elegiste Lionel y… elegiste mal.

Lex se irguió y salió del lugar, pero antes de cruzar al pasillo, su figura se desapareció. Lionel simplemente comprendió que el final del juego ya había sido ganado por Lex. Lionel Luthor murió unas horas más tarde y lo único bueno que hizo por su hijo fue no decir nada de esa visita.

LuthorCorp quedó sin quien la dirigiera o eso decían los rumores, ya que Lex no se había presentado ni había dado ninguna declaración.

Clark fue a Metrópolis para el funeral de Lionel, en representación de sus padres y de cierto modo tuvo la ilusión de poder ver a Lex y comprobar que estaba vivo, pues luego de que aceptó que todo lo que decían que hizo Lex nunca fue comprobado o por lo menos nadie vio en persona a este, creyó que el ultimo adiós al Luthor mayor, haría regresar a Lex, pero no sucedió. Al funeral fue acompañado por Chloe, Jimmy y Loise, estos tres más en modo periodistas, por eso consideró por un segundo que si Lex fue y lo vio con todos ellos, no se acercó, por eso esperó en el cementerio por un tiempo más luego de que todos se fueron, sin embargo Lex no llegó.

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Vio la noticia del deceso, pero para el bien de su sique no le afectó en nada, después de todo Lionel nunca fue un padre y desde la lluvia de meteoritos y su adopción de Clark, no fue ni alguien que quisiera cerca, no era sano para su autoestima la constante comparación y elección de Clark sobre él. Ese día fue como cualquier otro disfrutando de los progresos de sus experimentos, el aumento de sus ganancias y por sobre cualquier cosa, la presencia de su hijo.

Fue una noticia que cubrió Luisa y por eso se enteró. Al parecer LuthorCorp quedó en manos de Lex y administraba a través de una mujer llamada Tess Mercer y se decía que…

–Por supuesto que Olliver estará a cargo, después de todo él es el CEO de Industrias Queen y Mercer solo administradora.

–¿Ella te lo dijo, Luisa?–preguntó Chloe.

–No es necesario que ella me lo diga.–dijo misteriosa la aludida.

–No creí que estuvieras todavía saliendo con Olliver.–mencionó Clark

–Oh vamos granjero, somos buenos amigos o…En fin, voy a dejar mi articulo.

Chloe vio a su prima irse y suspiró abatida.–No sé porque la convencí de ser reportera.

–Chloe, tú eres igual de buena.

La rubia le sonrió a su amigo, ese amigo que de unos días a la fecha veía a Luisa con ojos más ¿tiernos?

–¿Y Lana?

–¿Qué?

–¿Qué has sabido de ella?

–Sigue con su programa de ayuda y… En Smallville, lo ultimo que se es que Pete regresó y le está ayudando.

–Mmm.

–¿Qué?

–Nada.

Clark se removió inquieto y la rubia notó ese gesto.

–Suéltalo Clark.

–Creo que me gustaría ser como ustedes.

–¿Pobres y con un trabajo de esclavos?

–No, bueno si, quiero ser reportero, creo que sería genial… ya sabes para saber lo que está pasando y ayudar.

–Además de que de todos modos, siempre te llamamos para ayudarnos verdad.

–Yo no dije eso.

–No tenías que decirlo. Pero como somos mejores amigos y tú mi salvador. Creo que veré que puedo hacer.

–Gracias Chloe.

–No me las des, que de por si nuestro jefe dice que te la pasas aquí, pero no te ha dicho nada porque de cierto modo que tu padre sea casi Gobernador… ya sabes.

–Oh. No quiero que mi padre sea el motivo por el que me contraten.

–Si no lo quieres, busca una buena historia como… no lo sé algo.

Clark asintió y salió del periódico, tenía algo en mente, pero necesitaría ayuda de la Fortaleza.

Pasó a la granja y puso al tanto a sus padres, quienes le desearon suerte para conseguir esa oportunidad de empleo. Martha lo vio irse y se giró a ver a Jonathan.

–Tenía miedo de que no encontrara su lugar.

–Pero si de cierto modo, el ser héroe lo es. No me gusta, pero le dio un motivo para seguir.

–No debimos dejar que abandonara la escuela.

–Lo suyo no son los estudios cariño.

–…

–¿Lo viste no? está emocionado, eso es bueno.

–Mientras no este aquí solo cuando nosotros viajemos.

Jonathan abrazó a su esposa, Ninguno lo dijo, pero a veces se lamentaban por la partida de Lex de Smallville y de la vida de Clark.

...