TOTAL DRAMA: LEGENDS OF THE ISLAND

Capítulo 10: Wawanakwa Party

Disclaimer: Total Drama y sus personajes no me pertenecen. Esto es un fic de fans para fans.

En anteriores capítulos de Total Drama...

Los dos equipos se enfrentaron en un desafío inspirado en la segunda temporada de Total Drama. Izzy y Leshawna habían sido secuestradas por el Chef Hatchet, y cada equipo debía rescatar a la secuestrada de su equipo. Hugo y Bridgette, por su lado, decidieron DESOBEDECER LAS NORMAS e irse a Boney Island en busca del delincuente de Duncan, al que acabaron encontrando milagrosamente y trajeron de vuelta a la isla. Los ganadores al final fueron los Demonios Desalmados gracias a los esfuerzos de Izzy por liberarse a sí misma, y justo cuando Leshawna estaba a punto de ser eliminada apareció una misteriosa joven que decía llamarse Sammy e interrumpió la ceremonia de eliminación. ¿Qué pasará tras la llegada de Duncan y de la misteriosa Sammy a la isla? ¿Conseguirá remontar Leshawna su nulo nivel de popularidad entre los concursantes? ¡Descubridlo hoy en el nuevo episodio de TOTAL DRAMA: LEGENDS OF THE ISLAND!


-No me puedo creer que hayas vuelto...

En la cabaña-enfermería de la isla Wawanakwa, Duncan yacía en una de las camas tapada con una manta roñosa mientras devoraba un plato de gachas. El Chef Hatchet iba vestido con su traje de enfermera y sus tacones, y atendía a la chica rubia que había aparecido dos días atrás en la ceremonia de eliminación.

Sentada junto a la cama de Duncan, estaba Gwen, que parecía aliviada.

-Nos tenías a todos muy preocupados-insistió Gwen.

-Ya veo, ya-sonrió Duncan-. Tanto que arriesgaste tu vida por venir a buscarme a Boney Island. No hacía falta que te molestaras tanto, Gwen.

Gwen resopló, poniendo los ojos en blanco.

-En realidad, fue cosa de Hugo y Bridgette. Yo me uní más que nada para que hubiera un adulto responsable en la expedición.

-¿TÚ eres el adulto responsable?-se jactó Duncan.

Ella sonrió.

-Hugo estaba muy preocupado por ti, aunque ahora se intente hacer el duro-dijo Gwen, cruzándose de brazos.

-Bueno, me imagino que habrá estado bastante solo desde que me eliminaron-replicó Duncan, encogiéndose de hombros.

Gwen no dijo nada más. El Chef Hatchet se iba cargando con una bandeja, dejando a la chica rubia yaciendo en la cama.

-¿De dónde habrá salido?-preguntó Gwen.

Duncan se encogió de hombros.

-Se habrá caído de alguna barca o algo-dijo Duncan-. Es verano, seguro que hay mucha gente de vacaciones por la zona.

-Supongo que sí... Bueno, te dejo que descanses, Duncan. Si necesitas cualquier cosa, llama al Chef Hatchet.

-Prefiero no tener que verle con su minifalda de enfermera...

Gwen le apretó el hombro con la mano, se levantó de la silla y salió fuera de la cabaña. Luego se alejó unos pasos hacia el bosque, sacó el móvil que llevaba en uno de los bolsillos de su camisa de pasante y marcó un número rápidamente. Esperó a que sonara un par de veces, y cuando respondieron al otro lado, dijo:

-Hola... Sí, ha habido novedades. Ha pasado algo que no nos esperábamos.


Se abrió la puerta de la cabaña de los Demonios Desalmados, y Tiana salió por ella tras agitar su larga melena. Estaba decidiendo si irse a desayunar o saltarse el desayuno e irse a meter los pies en el agua cuando vio a Noah saliendo corriendo de su cabaña. Noah pasó a su lado casi sin mirarla y se fue a toda prisa hacia el bosque. Tiana frunció el ceño, extrañada.

-¿Qué mosca le habrá picado?

Sus dudas se resolvieron cuando vio a Izzy acercarse por el otro lado de la cabaña de los Ángeles Amables y dirigirse hacia la puerta de la habitación de los chicos. Izzy llamó a la puerta y le abrió Devon, que le dijo algo que pareció decepcionarla.

-¿Oh...?-musitó Tiana.


- Confesionario -

Tiana - ¿Soy yo o Noah ha salido corriendo en cuanto ha visto a Izzy acercarse a su cabaña? Qué raro... ¿Habrá pasado algo entre ellos? (Se queda callada un momento) Este concurso me está empezando a afectar, ¡si yo no soy cotilla! Me da igual.


Izzy caminó de vuelta hacia la cabaña de los Demonios Desalmados, cabizbaja, y Tiana se acercó lentamente a ella.

-Izzy, ¿estás bien?

Izzy dio un bote, sorprendida, y sonrió al verla.

-¡Hola, Tiana! Sí, sí, ¡estoy bien! ¡Ja, ja, ja!-se partió de risa Izzy, pero a Tiana le dio la sensación de que le estaba mintiendo.

-Parecías triste hace un momento-dijo la morena, frunciendo el ceño.

-Quéeee vaaaaaa-dijo Izzy, haciendo un gesto con la mano para quitarle importancia-. ¡Me voy a ir a desayunar! ¿Qué habrá preparado ese bribón del Chef Hatchet? ¡Seguro que algo delicioso! ¡Ja, ja, ja!

Tiana frunció el ceño un poco más, mientras Izzy se alejaba todavía riéndose. En ese momento salía Fiora de la cabaña de los Ángeles Amables, y Tiana decidió acercarse también a ella.

-Hola, Fiora.

-¡AY! ¡Qué susto! Hola, Tiana-le respondió la rubia, girándose-. Qué sorpresa, no solemos hablar tú y yo mucho.

-Es solo que... Estaba yendo yo a desayunar y me crucé a Noah, que salía corriendo de vuestra cabaña justo cuando vio acercarse a Izzy-dijo Tiana, lentamente-. ¿Sabes si les ha pasado algo?

-Qué raro que te preocupes por los demás, Tiana-sonrió Fiora-. Pensé que a ti solo te importabas tú misma.

-Bueno, Izzy es la única chica que queda en el equipo-dijo Tiana, sin querer darle mucha importancia.


- Confesionario -

Tiana - ... ¡Y me muero de curiosidad! ¡¿En qué me está convirtiendo este concurso?!


-Bueno, no es asunto mío compartir lo que pase entre Noah e Izzy-dijo Fiora, encogiéndose de hombros-. Pero, si quieres, me puedes ayudar a investigar otra cosa.

-¿Qué cosa?-preguntó Tiana.

-Sospecho que hay alguien escondido en esta isla, intentando acabar con la vida de Chris... ¡Y quiero saber quién es!


Noah estaba corriendo, en dirección a ningún sitio en concreto, hasta que llegó a una zona boscosa y se escondió detrás de un árbol. Tras recuperar el aliento, se quedó muy quieto y musitó:

-Soy deleznable.

Cuando iba a echar a caminar de vuelta hacia las cabañas, avergonzado, vio a lo lejos la cabaña-enfermería donde habían alojado a Duncan y a la chica que había aparecido en la última ceremonia de eliminación.

Decidió echar a caminar hacia su cabaña dando un rodeo por la cabaña-enfermería y, cuando pasó a lo lejos, vio que Duncan estaba completamente dormido en su cama, y todas las otras camas estaban vacías. Siguió caminando hasta que llegó a donde estaba el confesionario, y justo cuando pasaba a su lado se abrió la puerta y apareció la chica rubia, que llevaba una bata de hospital.

-¡Ah!-exclamaron los dos a la vez.

-Qué susto, perdona-dijo Noah, sobresaltado-. No me esperaba a nadie usando el confesionario ahora.

-¿El confesionario?-preguntó la chica.

-Claro, ahí es donde vamos a hacer nuestras confesiones, si es que tenemos alguna que hacer.

-¿Como si fuera una iglesia?-preguntó ella.

Noah se rió ligeramente.

-No, hombre. ¿Nadie te ha explicado nada? Estamos en un concurso. Estamos rodeados de cámaras.

-¡¿Cómo?!-preguntó la rubia, horrorizada-. ¡¿Cámaras?! ¡Yo pensaba que esto era un campamento de verano!

-Qué va, mira-y Noah señaló a una cámara que asomaba por detrás de un árbol-. Cámaras por todas partes. Incluso en el baño, bueno, el confesionario.

-... Oh, oh-dijo la chica, mirando hacia la puerta del confesionario avergonzada.

Noah se rió otra vez.

-Por cierto, encantada... Soy Sammy-dijo ella, dulcemente.

-¡Ah! Sí, me suena que dijiste tu nombre el otro día. Yo soy Noah, estoy participando en el concurso. ¿Conoces Total Drama?

Sammy negó con la cabeza.

-No me gusta mucho la tele. ¿Es conocido?

-Bueno, vamos por la sexta temporada...

Sammy abrió la boca, sorprendida.

-¿Y tú has participado en todas?

-Casi...-dijo Noah, avergonzado.

-Wow...

Los dos se quedaron callados, sin decir nada. Sammy luego echó a caminar de vuelta a la cabaña-enfermería.

-Bueno, me voy a tumbar otro ratito, que aún sigo mareada. Noah, ¿verdad?

Él asintió.

-Ya nos veremos-le dijo Sammy, y se fue.

Noah se quedó parado, sin decir nada y sin saber a dónde ir.


En la cabaña de los Ángeles Amables, Heather leía una revista distraídamente mientras Leshawna y Harold estaban sentados en el suelo sin decir nada. Tras unos minutos en silencio, Heather resopló y dijo:

-¿Qué diantres os pasa hoy? Estáis muy callados.

-¿No te das cuenta, Heather? Nuestra alianza ya no sirve de nada-dijo Harold, triste-. Si no llega a ser por la aparición de la chica aquella, Leshawna ya no estaría aquí con nosotros.

Heather se quedó callada, pensativa.

-Aún no entiendo qué es lo que pasó-dijo, tras unos segundos.


- Confesionario -

Heather - Cierto hispano me debe una explicación. Me prometió que él, Ezekiel, Izzy y Justin votarían por Devon, ¡pero Chris iba a decir el nombre de Leshawna! ¿Qué es lo que pretende? ¿Jugármela? ¿Está esperando a que yo salga nominada para echarme? Pues se va a enterar.


Heather se levantó y salió de la cabaña dando largas zancadas, sin decir nada. Harold miró a Leshawna.

-Aún sigues aquí, Le... Aún no es tarde-le dijo Harold-. No tenemos que seguir escuchando a Heather. Está claro que ella ya no nos puede proteger.

-¿Y qué opción tenemos, Harold? Está claro que todos los demás en nuestro equipo me odian... Devon ya se ha encargado de ello.

-No sé qué decir...-dijo Harold, tras unos segundos-. No quiero verte triste.

-Pues estoy triste-dijo Leshawna, metiendo la cabeza entre sus brazos-. Soy la enemiga pública nº1 de nuestro equipo, me odian más que a Heather... Y no les culpo. Lo he hecho todo mal, desde el principio.


- Confesionario -

Leshawna - Empecé esta temporada pensando que todo me iba a salir bien, que iba a conseguir llegar lejos por lo bien que me llevo con todo el mundo... Metí la pata en un desafío y pum, se acabó, todos me odian. ¡Y encima se me ocurre la brillante idea de aliarme con Heather! ¡¿En qué estaba pensando?! ¡¿Es que no he aprendido nada en todos estos años?!


-Yo conozco tu lado feo, Le...-dijo Harold, solemne-. Yo vi tus lágrimas de cocodrilo cuando querías quedarte el premio con tu prima en Action, yo vi cómo te dejabas llevar por tus instintos más primarios para caer en las redes de Alejandro... Pero siempre conseguiste levantar la cabeza. ¿Por qué esta vez iba a ser diferente?

Harold se levantó y salió de la cabaña, dejando a Leshawna sola en la habitación, en completo silencio.


Ezekiel estaba caminando por el bosque. Había visto a Heather alejándose a paso apresurado, así que se había puesto a seguirla tal y como le había pedido Alejandro. No obstante, ella era mucho más rápida que él, y tras unos minutos le perdió completamente la pista. Cuando iba a echar a caminar de vuelta hacia las cabañas, Heather salió de la nada y lo agarró por la capucha, levantándolo del suelo.

-Me vas a decir ahora mismo lo que Alejandro se trae entre manos, rarito-le dijo, poniendo su cara muy cerca de la de Ezekiel.

-¡Yo no sé nada, eh! ¡Déjame ir!-exclamó Ezekiel, horrorizado.

-No sé cómo te las has apañado para sobrevivir tantos desafíos en el juego-dijo Heather, lentamente-. ¿Es porque Alejandro te está protegiendo? ¡Cuéntame todo lo que sabes!

-¡NO!-gritó Ezekiel-. ¡Le debo lealtad a Alejandro!

-Lo sabía-dijo Heather, tirándolo al suelo sin miramientos-. O sea, que se está valiendo de ti y, efectivamente, te ha mandado que me espíes, ¿verdad?

-Um... Nooo, qué va-mintió Ezekiel de forma muy poco creíble.

Heather puso los ojos en blanco.

-Pues me vas a escuchar, rarito-le dijo Heather, muy despacio-. Ahora vas a ser MI topo. Vas a trabajar para mí, te guste o no.

-¿Y si no quiero?

Heather le lanzó una mirada muy seria.

-No quieres saber lo que pasaría si no quieres...

Ezekiel tragó saliva.


- Confesionario -

Heather - En realidad no tenía nada para amenazarle, no es que fuera a tirarle al lago ni nada por el estilo... Pero es tan memo que resulta muy fácil meterle miedo.


Justin estaba caminando por la isla, observando los pájaros, sin ganas de relacionarse con nadie en particular, cuando notó algo bajo sus pies.

-¿Mm?

Miró hacia el suelo y comprobó que estaba pisando una especie de casilla con un +1 dibujado. Frunció el ceño pero, al alzar la vista, comprobó que estaba rodeado por esas casillas.

-Esto me es vagamente familiar...-musitó Justin.

-¡CONCURSANTES!-anunció la voz de Chris por el altavoz-. ¡Presentaos cuanto antes en el muelle para que dé comienzo la décima prueba de la temporada! ¡Chris corta!

-Ajá...-dijo Justin, pensativo-. O sea, que toca un desafío... Lo sospechaba, las casillas las ha colocado Chris. ¡Dios! ¡Qué inteligente me estoy volviendo! Mi abuela estaría muy orgullosa si no me hubiera retirado la palabra por unirme a los Drama Brothers... Espera, estoy hablando solo, ¿no?

Miró a todas partes y se dio cuenta de que, efectivamente, estaba hablando solo.

-Debería volver a lo de estar todo el día callado... Se me está yendo la cabeza.


En el muelle, Justin se unió al resto de miembros de su equipo, que ya estaban esperando ahí. Los Ángeles Amables también fueron llegando poco a poco hasta estar todos al completo. Leshawna lanzó una mirada de refilón a Devon, que estaba muy callado.

-¡Hola, hola! Va a dar comienzo el desafío, como bien os anunciaba hace un momento. ¿Estáis preparados?

-Nunca se está lo suficientemente preparado, querido Chris...-dijo Alejandro.

-¿Qué son todas esas casillas que hay por todas partes, eh?-preguntó Ezekiel.

-A los que no sois unos PRINGADOS y participasteis en la cuarta temporada-dijo Chris, ignorando a Ezekiel- os resultarán familiares las casillas que hemos colocado por toda la isla. ¡Efectivamente, son las mismas que usamos en el desafío de Nueva York de World Tour Express!

-¿Aquel ridículo juego de mesa en el que teníamos que ir tirando dados mientras hacíamos desafíos humillantes?-preguntó Heather.

-¿No fue en el que Tiana nos amañó el dado?-le preguntó Noah a Fiora, y ella asintió, apesadumbrada.


- Confesionario -

Fiora - El desafío de Nueva York fue en el que me eliminaron por primera vez en World Tour Express... Nunca he podido volver a verlo del trauma que me dejó... (Le da un escalofrío)


-¡Hoy tenemos un desafío REMAKE inspirado en el desafío de la Gran Manzanopoly de World Tour Expres... Con todos vosotros, ¡hoy vamos a jugar a WAWANAKWA PARTY!

-¿Wawanakwa Party?-repitieron todos a la vez.

-Las reglas son exactamente las mismas que las de la última vez: cada equipo tendrá un dado que deberá ir tirando para saber cuántas casillas avanza. Cuando lleguéis a una casilla, podéis encontraros con un minidesafío que deberéis completar para poder seguir avanzando. Habrá también casillas con efectos diversos, como haceros avanzar o retroceder un número de casillas determinado, o lanzar alguna desventaja al otro equipo.

-¿Y cuál es el objetivo?-preguntó Justin.

-¡El mismo que la otra vez! Tendréis que llegar a la casilla final, que está en lo alto del precipicio de la isla.

-¿Y si el otro equipo hace trampas?-preguntó Alejandro, entrecerrando los ojos.

-¡Pues muy fácil! Cada equipo tendrá a un guardián vigilando todos sus movimientos. El Chef Hatchet irá con los Demonios, y Gwen irá con los Ángeles.

El Chef Hatcher se puso al lado de Ezekiel y le lanzó una mirada asesina, haciendo que el chico tragara saliva. Izzy le saludó, alegremente.

-¡Hola, Chefito!

Gwen se puso junto a Bridgette, con gesto aburrido.

-Otra vez a vigilar que nadie haga trampas... Como si estuviera en el jardín de infancia.

Chris alzó los brazos, alegremente.

-¡Muy bien! Ahora que todo está claro... ¡QUE DÉ COMIENZO ESTA PARTIDA DE "WAWANAKWA PARTY"! ¡WOOOOO!


Turno de los Ángeles Amables

Gwen le tendió el dado a Leshawna.

-Tiráis, chicos.

-¿Yo?-preguntó Leshawna, sorprendida.

Gwen se encogió de hombros. Leshawna miró a Devon, dubitativa.

-Creo que deberías tirar tú, Devon...

-¿Eh?-preguntó el chico, sin entender, cogiendo el dado que le tendía Leshawna.


- Confesionario -

Devon - Leshawna está como asustada cuando habla conmigo... ¿Será porque estuvo a punto de ser eliminada?


Devon tiró el dado, que empezó a rodar por el suelo, y sacó un 4.

-Movéis 4 casillas-dijo Gwen.

Los siete avanzaron las 4 casillas que les tocaba, hasta llegar a una que tenía el símbolo de unas abejas dibujado.

-Os ha tocado el desafío del panal de abejas-apuntó Gwen, sacando una tarjeta-. "Uno de los miembros del equipo deberá subir al árbol que tenéis justo al lado y bajar el panal de abejas que hay en él".

Todos se miraron, dubitativos.

-Ni de broma pienso hacer yo eso...-dijo Heather.

-¡A mí no me miréis! Es una de mis numerosas alergias-comentó Harold.

-A mí se me da fatal trepar...-dijo Noah, haciéndose el remolón.

Devon puso los ojos en blanco.

-Lo haré yo-dijo.

Leshawna se quedó callada, mirando hacia él, y tras unos segundos lo apartó y dijo:

-¡No! Lo haré yo.

Leshawna empezó a trepar por el árbol mientras sus compañeros la miraban alucinados.


- Confesionario -

Devon - Qué raro... ¿Será acaso que Leshawna... se quiere disculpar conmigo?


Turno de los Demonios Desalmados

-Mientras los Angelitos completan su desafío, podéis ir tirando-dijo Chef.

Ezekiel cogió el dado y lo miró, con una sonrisa bobalicona en el rostro.

-¡Qué dado tan grande! El que uso yo para jugar al parchís es mucho más pequeño.

-Deja de perder el tiempo y tira ya el dado, Ezekiel-dijo Justin.

El chico lanzó el dado y sacó un 1.

-Ugh... ¿Quién le ha dejado tirar a él?-resopló Hugo.

-¡Oye, eh! ¡Que es cosa de suerte!-se indignó Ezekiel.

-Sí, suerte... Lo que tú no tienes-rezongó Hugo.

Los seis Demonios movieron la casilla que les correspondía. Cayeron en una que tenía un "10" dibujado.

-¡Toma! ¿Significa eso que avanzamos 10 casillas?-preguntó Ezekiel.

El Chef sacó una tarjeta y negó con la cabeza.

-Uno de vosotros se tendrá que enfrentar a 10 ninjas entrenados en técnicas para matar sin que te des cuenta en menos de 10 segundos.

-¿Tiene que derrotar a los 10 ninjas en menos de 10 segundos o te matan en menos de 10 segundos?-preguntó Tiana.

El Chef se encogió de hombros.

-Yo solo os leo la estupidez que ha escrito Chris, a mí no me preguntéis.

-¡YO! ¡Lo hago yo!-exclamó Izzy.

-¿En serio? Qué efusividad... No seré yo quien proteste-dijo Hugo.

De la nada aparecieron 10 ninjas cargando con shuriken y nunchakus.

-Nos volvemos a encontrar...-musitó Izzy.


- Confesionario -

Izzy - ¡No es la primera vez que me enfrento a 10 personas a la vez! La primera fue cuando fui a las rebajas con mi tía Sharla a comprarnos una de esas bolsas que estaban tan de modas. ¡Y os aseguro que 10 señoras de rebajas son peor que 10 ninjas!


Turno de los Ángeles Amables

-Au... Au...

Leshawna tenía un montón de picaduras en las manos y Bridgette le estaba poniendo un vendaje.

-Habéis superado el desafío, enhorabueeeena-dijo Gwen, intentando poner tono alegre.

-Chica, Gwen, podías darle un poco de vidilla-dijo Harold-. Nos estás deprimiendo un poco.

-Es que hoy era mi día de descanso...-dijo Gwen, triste.

Heather cogió el dado y lo lanzó rápidamente.

-¡Venga, tenemos que avanzar mientras los pringados de los Demonios están entretenidos!

Sacó un 6. Se movieron las casillas que les correspondían hasta caer en una que tenía dibujado un cocodrilo.

-Es la casilla del combate contra el cocodrilo-dijo Gwen, señalando a un cocodrilo que movía la cola lentamente desde una charca-. Si lo derrotáis, podéis volver a tirar.

Todos se miraron unos a otros, sin nadie querer presentarse voluntario. Cuando Devon iba a dar un paso al frente para hacer él el desafío, Leshawna se adelantó por él y dijo:

-Lo hago yo.


- Confesionario -

Noah - ¿Qué le pasa a Leshawna hoy? Parece que se haya levantado con ganas de morir.


-Leshawna, si estás haciendo esto porque...-empezó a decir Harold.

Ella se giró y le lanzó una mirada muy seria. Harold se quedó callado.

-Bueno, vale...

Y la chica se fue a pelear contra el cocodrilo mientras sus compañeros observaban horrorizados.


- Confesionario -

Fiora - Fue espantoso. Los golpes, los mordiscos, los gritos de dolor... ¡El pobre cocodrilo no tenía nada que hacer contra la furia de Leshawna!


Turno de los Demonios Desalmados

Izzy volvía de derrotar a los 10 ninjas con un gesto de satisfacción en la cara.

-Ha sido pan comido, ya podrían haber sido 20, como cuando me encerraron en aquella cárcel de Japón.

El Chef Hatchet recogió el dado, y Ezekiel se lanzó a cogerlo.

-¡Tiro yo, tiro yo!-exclamó.

-¡De eso nada!-le dijo Alejandro, quitándoselo de las manos y dándoselo a Izzy-. Tú nos das muy mala suerte.

-Ohhh... Jopé...

Izzy tiró el dado y sacó un 5. Se movieron las casillas que les había dicho el dado hasta llegar a una casilla que tenía una jaula dibujada.

-¿Y esto?-preguntó Alejandro al Chef.

-¡Es la casilla de la cárcel!-exclamó el Chef-. Perdéis al miembro de vuestro equipo que ha tirado el dado.

-¡¿CÓMO?!-exclamaron todos a la vez.

-¡No podemos quedarnos sin Izzy!-protestó Justin-. ¿Quién va a hacer todos los desafíos que nos ponen en riesgo de perder nuestra belleza?

-¡No es problema mío!-exclamó el Chef, esposando a Izzy y haciendo que se sentara en el banco que había junto a la casilla-. Izzy, te quedas aquí hasta que acabe la partida.

-¡Vale! Puedo meditar y pensar en mis cosas...-dijo Izzy, y se quedó con la mirada completamente ausente mientras le caía un hilito de baba.

Ezekiel miró a Alejandro con una sonrisa de superioridad.

-¿Veis? Tenía que haber tirado yo el dado.

Alejandro puso los ojos en blanco.


Turno de los Ángeles Amables

Leshawna volvía de derrotar al cocodrilo llena de magulladuras, heridas y el pelo completamente despeinado. Todos la miraron alucinados.

-No es lo peor a lo que me he tenido que enfrentar...-dijo la chica, agotada.

Gwen cogió el dado y se lo tendió a Fiora, quien la miró horrorizada.

-¿Q-Q-Quieres q-q-que t-t-t-tire y-y-y-y-yo?

Gwen frunció el ceño.

-¿Sí?-dijo la gótica-. ¿Qué problema hay?


- Confesionario -

Fiora - (Toma aire profundamente) Tengo que superar mis traumas... ¡Vamos, Fiora, tú puedes con esto! (Se queda paralizada. Acto seguido, empieza a llorar) No, no puedo, no puedo...


Fiora cogió el dado y, tras inspirar hondo durante unos segundos, lo tiró, sacando un 3.

-¡TOMA! ¡Lo he tirado, lo he tirado!-gritó, mirando a todos sus compañeros-. ¡LO HE CONSEGUIDO!

-Claro... ¿Qué dificultad había?-preguntó Harold.

Pero Noah levantó un dedo en señal de celebración, y Fiora se puso a bailar en su sitio en silencio. Avanzaron las casillas que indicaba el dado y cayeron en un 6.

-¿Qué significa eso?-preguntó Harold.

-Que avanzáis 6 casillas más-respondió Gwen-. ¿No es obvio?

-Pues la verdad es que no...-musitó Harold.

Turno de los Demonios Desalmados

Alejandro tiró el dado y sacó un 3. Avanzaron las casillas que les correspondía hasta llegar a una con un dibujo de Sierra.

-¿Y esto? ¿Qué pinta aquí Sierra?-preguntó Tiana, alzando una ceja.

-¡Es la pregunta de la megafán!-exclamó el Chef-. Tendréis que responder a una pregunta sobre Total Drama que solo una megafán como Sierra podría responder.

-Uf...-dijo Justin-. No podría importarme menos este concurso...

El Chef sacó una tarjetita y la leyó.

-La pregunta es: "¿En qué puesto quedó Beth en la primera temporada?". ¡Tenéis 30 segundos!

-¡Y yo qué sé! Nunca he visto la primera temporada-protestó Hugo.

-Yo no recuerdo absolutamente naaaada de la primera temporada-dijo Justin-. Es como un sueño febril en el que apenas pienso...

-Será porque te echaron de los primeros...-resopló Alejandro-. ¿Nadie estaba aquí cuando echaron a Beth?

Todos negaron con la cabeza.

-¡¿En serio?! ¡¿Ni uno?! Qué desastre... ¿Qué pasa si fallamos, Chef?

-Tendréis que retroceder las tres casillas que habéis avanzado.

-Buf... Los Ángeles ya nos sacan muchísima ventaja...-musitó Hugo.

-Digamos un puesto al azar... ¿Séptima?-dijo Justin.

-¡Qué va, tuvo que irse mucho antes!-exclamó Tiana-. Es Beth.

-¿Vigésimo primera?-propuso Hugo.

-No sé, yo creo que tuvo que ser después...-dijo Alejandro.

-Os quedan 5 segundos...

-¡Quedó decimosexta!-exclamó Ezekiel.

El Chef le miró alucinado.

-Co... Correcto.

-¿Cómo lo sabías tú?-preguntó Alejandro, alucinado-. ¡Si a ti te eliminaron el primero!

-Yaaa, pero me acuerdo de cuando estábamos en Playa Des Losers. Hacia el final Beth se obsesionó con que había plantado cara a Heather y con que, tras el regreso de Izzy y Eva, había quedado de 16, que era su número de la suerte.

-... ¡¿Cómo te acuerdas tú de eso?!-exclamó Justin-. ¡Si nadie te hacía caso!

Ezekiel se encogió de hombros.


- Confesionario -

Ezekiel - ¡Siempre he tenido muy buena memoria, eh! ¡Me acuerdo hasta de los apellidos de todos mis compañeros de celda de cuando estuve en la cárcel!


-Como premio por acertar tan increíblemente difícil pregunta, podéis avanzar 5 casillas-dijo el Chef.

Los Demonios empezaron a gritar de alegría y echaron a correr las cinco casillas.

Turno de los Ángeles Amables

Heather se giró y vio cómo se acercaban los Demonios poco a poco.

-Necesitamos un número alto-dijo, arrebatándole el dado a Fiora-. ¡Tiro yo!

Fiora le dirigió una mirada aliviada. Heather tiró el dado y sacó un 2.

-¡Ugh! ¡Qué mala suerte!-exclamó.

Avanzaron las dos casillas y cayeron en una que tenía el dibujo de una jaula.

-¿Qué es esto?-preguntó Harold-. ¿Vamos a tener que meter un loro en una jaula?

-No, es la casilla de la cárcel-explicó Gwen, aburrida-. La persona que ha tirado queda eliminada y tiene que quedarse esperando a que acabe el desafío.

-Vaya por Dios-dijo Devon, sonriendo sarcásticamente.

-Qué suerte...-musitó Fiora.

Heather puso los ojos en blanco.

-En fin, mejor... Este desafío es un aburrimiento-dijo, y se sentó en el banco que había junto a la casilla.

Los Ángeles respiraron, aliviados. Se miraron los unos a los otros y sonrieron.


- Confesionario -

Bridgette - Vaya... Así debería ser nuestro equipo si Chris no nos la hubiese liado metiendo a Heather en el equipo...


Los turnos siguieron avanzando, y los dos equipos se fueron enfrentando a desafíos cada vez más caóticos. Los Ángeles Amables (o más bien, Leshawna) tuvieron que hacer un debate sobre la crisis económica de la nación contra un miembro del partido político más importante de Canadá, una carrera de karts contra un oso panda y un concurso de maquillaje contra una influencer usando témperas y pinceles, entre otras cosas; los Demonios, en cambio, se enfrentaron a un desafío de apilar cajas sin que se cayeran, a una partida de ajedrez humano y a pescar una trucha solo con la boca. Además, ambos equipos perdieron a más miembros en la casilla de la cárcel: Bridgette y Fiora tuvieron que sentarse para los Ángeles Amables, mientras que Hugo tuvo que sentarse para los Demonios Desalmados.

Turno de los Demonios Desalmados

-Concursantes-anunció la voz de Chris-. Los Demonios Desalmados estáis a solo 15 casillas de la meta. Los Ángeles Amables, a 21. ¡La batalla está muy reñida!

Alejandro miró a sus compañeros con gesto de determinación.

-¡Estamos muy cerca de ganar!-les dijo-. No podemos dejarnos vencer ahora.

Tiana cogió el dado y lo lanzó. Rodó por el suelo hasta marcar un 6.

-¡Toma!-exclamó Justin-. ¡Muy bien, Tiana!

Los cuatro avanzaron las casillas que les correspondía, hasta llegar a una que tenía un maki japonés dibujado.

-¡Es la casilla del sushi!-exclamó el Chef-. Uno de vosotros va a tener que enrollar arroz en un alga para hacer un maki relleno de aguacate.

-Oh, qué bien, ¡yo soy una experta en cocinas internacionales!-dijo Tiana, satisfecha-. Lo haré y...

-¡LO HAGO YO!-exclamó Ezekiel-. ¡Me encanta el chuchi!

-Se pronuncia sushi-le dijo Tiana, con desprecio-. Y cómo vas a apreciar tú la exquisitez culinaria de una cocina ancestral como es la japonesa...

-¡No sé qué significa todo eso, eh!-la interrumpió Ezekiel-. ¡Pero mi madre me enseñó a hacer chuchi una vez!

Tiana puso los ojos en blanco.

-Ya es tarde-le dijo el Chef a Tiana-. Se ha presentado voluntario él primero.


- Confesionario -

Tiana - ¡No me digáis que no le tiraríais por un barranco si tuvierais la oportunidad!


Ezekiel cogió las herramientas para hacer sushi y se puso un delantal que le dio el Chef, y empezó a preparar el sushi con gran maestría. Sus tres compañeros lo miraron alucinados.

-No tenía ni idea de que Ezekiel tuviera tanto manejo de las manos-musitó Justin.

Alejandro negó con la cabeza.

-Nunca es que haya tenido mucha oportunidad de demostrarlo, la verdad...

-¡Acabé!

Ezekiel le tendió el maki al Chef Hatchet, quien lo examinó de cerca con gesto escrutador.

-Mmmmm...

Tras unos segundos, el Chef Hatchet negó con la cabeza.

-No, no está bien hecho. El alga no envuelve completamente el arroz, y además hay un par de huecos aquí y allí... Tienes que volver a empezar.

Tiana resopló.

-Por supuesto... No podía ser de otra manera-dijo, cruzándose de brazos y mirando a Ezekiel con dureza.

Sin embargo, Ezekiel se quedó muy quieto, contemplando el maki que tenía delante. Tras unos segundos completamente paralizado, alzó la cabeza: su mirada era completamente distinta. Emitió un grito terrorífico y se lanzó a morder el cuello del Chef Hatchet.

-¡HOMBRE HERIDO, HOMBRE HERIDO!-gritó el Chef.

Tiana, Alejandro y Justin ahogaron un grito de pánico e intentaron, en vano, apartar a Ezekiel del Chef Hatchet.

-¡¿Pero qué hace?!-gritó Alejandro.

-¡Déjale en paz, Ezekiel!-exclamó Justin.

Ezekiel rugía con fiereza, como si fuera un animal, mientras Alejandro y Justin luchaban con todas sus fuerzas por sujetarle. Tras unos segundos de pura tensión, Ezekiel se quedó completamente quieto otra vez. Parpadeó un par de veces, miró a Alejandro y le sonrió.

-¿Qué pasa, Al? ¿Por qué me sujetas? Si yo solo iba a volver a hacer el chuchi.

-Pero qué...-musitó Tiana.


- Confesionario -

Tiana - (Completamente aterrorizada) ¡¿Pero vosotros habéis visto eso?! ¡¿Qué demonio le ha entrado en el cuerpo a ese bicho raro de Ezekiel?!


El Chef se levantó, se recompuso, se colocó la ropa y se limpió las babas de Ezekiel del cuello, como en shock.

-Um... Pensándolo mejor, no hace falta que repitas el plato, Ezekiel. Os lo doy por bueno.

-¡Qué bien!-exclamó Ezekiel-. Soy bueno en esto de los desafíos, ¿eh?

Alejandro, Justin y Tiana compartieron una mirada completamente horrorizada.


Turno de los Ángeles Amables

Devon tiró el dado y sacó un 5. Avanzaron las 5 casillas correspondientes y llegaron a una casilla que tenía el símbolo de una manzana.

-¿Nos toca comer una manzana?-preguntó Devon, esperanzado.

-No-dijo Gwen, sonando preocupada-. Es la lluvia de manzanas. Uno de vosotros deberá colocarse ahí-y señaló una enorme cruz roja que había en el suelo-, y aguantar una lluvia de manzanas de los pasantes.

-Courtney acabó en la enfermería en la primera temporada después de una lluvia de manzanas-dijo Harold, preocupado.

Leshawna dio un paso adelante.

-Lo haré y...

-¡Leshawna!-exclamó Harold-. ¡De eso nada! ¡No te vas a poner en riesgo así! ¡Podrías sufrir una conmoción cerebral o algo peor! ¿Por qué estás haciendo esto? ¿Qué pretendes conseguir haciendo tú todos los desafíos de hoy? ¡No tienes nada que demostrar!

-Harold... Es que...-empezó a decir Leshawna, mirando a Devon de refilón.

Harold miró también a Devon, quien evitó su mirada. Harold negó con la cabeza.


- Confesionario -

Harold - No puedo seguir callándome lo que ha hecho Devon... ¡Estoy harto!


-Leshawna, Devon lleva intentando que te expulsen desde hace días. Cuando eliminamos a Lindsay, los demás querían votar por Heather. ¡Fue él quien pidió que votasen por ti para eliminarte! ¡Él lleva un montón de tiempo intentando que te expulsen y lo consiguió el otro día! ¡No estarías aquí con nosotros ahora mismo, Leshawna! ¡No se merece tu perdón!

Devon agachó la cabeza, avergonzado. Leshawna le dirigió una mirada de genuina sorpresa, pero luego se giró hacia Harold y le miró con determinación.

-Harold, el desafío lo hago yo.

Harold resopló. Noah le hizo un gesto para que no se metiese.

-Vale ya, Harold, si es lo que ella quiere...

-Menuda injusticia...-dijo Harold, enfurruñado.

Leshawna se colocó sobre la cruz roja y, en un momento, la rodearon unos pasantes con unas metralletas de manzanas, como la que usó el Chef Hatchet en el desafío anterior para disparar huevos cocidos.

-¡FUEGOOOOO!-gritó uno de los pasantes.

Y Leshawna se vio rodeada por una auténtica lluvia de manzanas, mientras Devon, Harold y Noah miraban horrorizados.

Turno de los Demonios Desalmados

Estaban por fin a 9 casillas.

-Venga, tenemos que sacar un número alto-dijo Tiana, tirando el dado.

Sacó un 3. Resopló, mientras Alejandro negaba con la cabeza.

-En fin... Íbamos a tener que tirar otra vez de todos modos-dijo Justin, encogiéndose de hombros.

Cayeron sobre una casilla que tenía una calavera dibujada. Todos compartieron miradas de horror absoluto.

-¿Esta es la casilla de la muerte o algo?-le preguntó Alejandro al Chef Hatchet.

El Chef Hatchet asintió.

-Tenéis que sobrevivir los cuatro a un desafío mortal. Si ninguno de los cuatro aguanta... Volveréis a la casilla de salida.

-¡¿CÓMO?!-gritaron los cuatro a la vez.

El Chef los guió hasta una jaula gigante que colgaba de unos árboles. Tiana la miró, horrorizada.

-¿Q-Qué es eso?

-Es la jaula de los mil agujeros. El suelo de la jaula irá girando a vuestros pies, y se irán abriendo agujeros que deberéis ir esquivando. Si os caéis por uno de los agujeros, quedáis fuera. Si os caéis los cuatro, volvéis a la casilla de salida, dándole la victoria a los Ángeles.

-Maldita sea...-dijo Justin.

Los cuatro se subieron a la jaula. El Chef Hatchet estaba en el suelo con un cronómetro.

-Tenéis que aguantar un minuto. Y empieza... ¡YA!

El suelo de la jaula empezó a girar a sus pies, haciendo que Justin perdiera el equilibro y cayera al suelo de culo. Empezó a rodar por el suelo hasta que rodó por uno de los agujeros y cayó al suelo desde lo alto de la jaula.

-¡Justin fuera!-exclamó el Chef.


- Confesionario -

Justin - Qué humillante... No conseguí aguantar ni 5 segundos... Es que un top-model no debería estar haciendo desafíos sacados de algún programa de televisión japonés.


El suelo de la jaula siguió girando, mientras Ezekiel, Tiana y Alejandro intentaban equilibrarse. Alejandro estaba intentando agarrarse a los barrotes de la jaula, pero el suelo giraba demasiado rápido.

-Ugh... Esto es... Muy difícil...

-¡Kyah!

Tiana cayó de frente, sobre sus rodillas. Alejandro intentó darle la mano para sujetarla, pero ella empezó a deslizarse por el suelo mientras la jaula se inclinaba hacia un lado, y acabó cayendo directita por otro agujero.

-¡Tiana fuera!-exclamó el Chef-. ¡Os quedan 35 segundos!

Sin embargo, Alejandro no tardó en caer también al suelo y deslizarse por uno de los agujeros, aterrizando también en el suelo. Quedaban más de 25 segundos todavía.

-Es imposible que Ezekiel aguante 25 segundos...-dijo Justin, observando desde el suelo.

Tiana negó con la cabeza.

-Es nuestra oportunidad de mandarle a casa esta noche...

Ezekiel se puso a cuatro patas en el suelo y, tras soltar un rugido aterrador, empezó a saltar de un lado a otro de la jaula, esquivando los agujeros con maestría y dando piruetas por el aire para aterrizar con clase. Sus compañeros lo observaban completamente anonadados.

-¿Cómo es posible...?-preguntó Alejandro.


- Confesionario -

Alejandro - Ese... Ese no es Ezekiel.


Pasaron los 25 segundos mientras Ezekiel saltaba de un lado para otro. El Chef anunció el fin del desafío.

-¡Se acabó! Sobrevivís a este desafío... Milagrosamente.

La jaula descendió hasta el suelo y se abrió la puerta. Alejandro se acercó a ella, con gesto dubitativo.

-¿E-Ezekiel...?

El chico estaba a cuatro patas en el suelo. Alejandro lo miró, preocupado.

-¿Eres tú...?

De repente, Ezekiel se incorporó sobre sus piernas y se giró hacia Alejandro. Le sonrió, con gesto sorprendido.

-¡Vaya, Al! ¿Hemos superado el desafío?

Alejandro asintió, lentamente.

-¡Toma ya! Somos el mejor equipo, eh.


- Confesionario -

Alejandro - Aquí está pasando algo raro... Y preocupante.


Turno de los Ángeles Amables

Leshawna llegó junto a sus compañeros, entre mareada y desmayada, tras aguantar la lluvia de manzanas el tiempo requerido.

-Guau... Lo tuyo es de otro planeta, Leshawna-dijo Gwen, sorprendida, y la chica le sonrió medio ida-. En fin, volvéis a tirar.

-¿Estás bien, Le?-le preguntó Devon.

-No sé cómo te atreves a preguntarle, cuando está así por tu culpa-dijo Harold.

-¿Por mi culpa?-se sorprendió Devon.

-Lleva todo el día haciendo los desafíos ella para pedirte perdón-respondió el nerd-. ¡Perdónala ya para que pare de hacerlo! ¡Se está poniendo en mucho peligro!

-A ver, al final lo está haciendo porque quiere-dijo Noah, encogiéndose de hombros.

-Tú no te metas.

Leshawna parecía volver en sí, así que ajena a la discusión de sus compañeros, cogió el dado y lo tiró. Sacó un 6.

-¡Vamos, tenemos que ganar!-les dijo a los otros tres, apremiante.

Cayeron en una casilla con un 5.

-Avanzáis 5 casillas... Por lo que os quedáis a tan solo 5 casillas, adelantando a los Demonios Desalmados.

Adelantaron al grupo de Alejandro, Tiana, Ezekiel y Justin, quienes les lanzaron una mirada asesina.

-¡Esto se pone interesante!-exclamó Devon.

-Qué injusto... Llevamos casi toda la partida en cabeza-rezongó Alejandro.

-No perdamos la esperanza. Aún podemos sacar un 6-dijo Justin.

Turno de los Demonios Desalmados

Ezekiel cogió el dado y lo tiró. Sacó un 1.

-¡MALDITA SEA!-gritaron a la vez Justin y Alejandro.

-¡¿Quién le ha dejado coger el dado a él?!-protestó Tiana.

-Lo siento, eh...-dijo Ezekiel-. Ha sido mala suerte.

Cayeron en la casilla de delante, donde estaban los Ángeles Amables. La casilla tenía una flecha y un arco.

-Tenéis que acertar en la cabeza del muñeco con la cara de Chris que cuelga en lo alto de aquel árbol-explicó el Chef.

Alejandro cogió el arco y la flecha que le tendía el Chef Hatchet antes de que Ezekiel se pudiera adelantar.

-Aún me acuerdo de tu vídeo de presentación que mandaste en la primera temporada-le dijo a Ezekiel, muy serio-. Disparo yo.

Ezekiel se encogió de hombros.

Turno de los Ángeles Amables

-Si sacáis un 5, habéis ganado-les dijo Gwen.

Noah, Harold, Leshawna y Devon se miraron. ¿Quién iba a ser el valiente que tirara el dado? Finalmente, lo cogió Harold:

-Lo haré yo, Leshawna. Y también el desafío que hagamos.

Harold tiró el dado y sacó...

Un 4.

-¡Argh!-exclamó el nerd.

-No pasa nada, a la siguiente llegamos seguro-le dijo Noah.

Se movieron las 4 casillas y llegaron casi a la meta, desde donde les sonreía Chris.

-Si queréis ganar, tendréis que superar el último desafío...-les dijo Chris, alegremente.

En la casilla aparecía un dibujo del acantilado.

-Uno de vosotros tendrá que colgarse de lo alto del acantilado con una cuerda, y aguantar hasta que acabe el turno del otro equipo.

Cuando Leshawna se iba a presentar voluntaria, Devon la hizo a un lado y se acercó a atarse la cuerda al pie.

-¡Devon!-exclamó Leshawna.

-Ya has hecho muchos desafíos por hoy-le dijo, con una sonrisa.

Ella le devolvió la sonrisa, mientras Harold le clavaba la mirada. Devon se ató la cuerda al pie y saltó.

-¡ESPERA!-gritó Chris-. ¡Que no la hemos atado a la piedra para que te sujete!

-¡DEVON! ¡NOOOOOOOO!-gritó Leshawna, mientras Devon caía al vacío.

-Al menos ha hecho lo que nunca había hecho-dijo Harold, con una sonrisa de satisfacción-. Ha saltado desde lo alto del precipicio.

Turno de los Demonios Desalmados

-Necesitamos un 5 para llegar a la meta...-dijo Tiana, nerviosa.

Alejandro cogió el dado y tomó aire.

-Bueno, vamos allá...

Tiró y...

...

...

...

¡Un 5!

-¡TOMA YA!-gritaron los cuatro a la vez.

Avanzaron las 5 casillas, dejando a los Ángeles Amables asomados al precipicio para comprobar si Devon estaba bien, y cruzaron la línea de meta.

-Y los ganadores son... ¡LOS DEMONIOS DESALMADOS! ¡Enhorabuena!-anunció Chris.

Alejandro y Tiana se abrazaron, mientras Justin chocaba las cinco con Ezekiel.

-Por lo tanto, serán los Ángeles Amables los que manden hoy a alguien a su casa... ¡Se siente!

Harold, Leshawna y Noah compartieron miradas tristes.

-Espero que Devon esté bien, al menos...-dijo Noah, mirando precipicio abajo.

-Es verdad... ¡Devon!-exclamó Leshawna, y echó a correr seguida de Harold.


Los Ángeles Amables caminaban una vez más hacia la ceremonia de expulsión, tristes y derrotados (a excepción de Fiora, que iba dando saltitos alegremente).


- Confesionario -

Fiora - Sí. Hemos perdido, lo sé. ¡Pero para mí es como si hubiéramos ganado! ¡He superado mi trauma con el desafío de Nueva York! ¡He sido capaz de tirar el dado! ¡WOOOOHOOOOO!


Cuando se dirigían hacia los tocones, Devon agarró a Leshawna de un brazo y la apartó hacia un lado mientras los demás seguían caminando.

-Uy, ¿qué pasa?-preguntó Leshawna.

Devon, que llevaba un brazo vendado y en cabestrillo, le sonrió.

-Menudo numerito has montado hoy, ¿eh?-le dijo Devon, con una sonrisa y una ceja levantada.

-¿Yo?-se sorprendió ella-. ¿Y tú qué? ¿Te has visto el brazo?

Devon siguió sonriendo. Leshawna suspiró.

-Vale... Sí, he hecho literalmente todos los desafíos como una forma de pedirte perdón... Lo siento si es demasiado retorcido, no sabía cómo expresar cuánto me arrepiento de cómo me he portado esta temporada, Devon. No he sido una buena amiga.

-No, la verdad que no... Te has dejado manipular por Heather. No pasa nada, nos ha pasado a todos alguna vez.

Los dos se quedaron callados un momento.

-Sé que... Bueno, se me dan fatal las disculpas...-dijo Leshawna, avergonzada.

Devon hizo un gesto para quitarle importancia con el brazo que tenía sano.

-Qué va. De todos modos, no te voy a juzgar yo: yo hice trampas aliándome con el Chef Hatchet una vez, ¿te acuerdas? A todos nos han cegado las ganas de ganar.

-Supongo... Pero sigue sin ser justo.

-Y Le, Harold tenía razón. Intenté eliminarte en las últimas expulsiones. Yo les pedí a los demás que votasen por ti en lugar de Heather. Lo siento.

Leshawna negó con la cabeza, sonriendo. Le apoyó una mano en el hombro a Devon.

-Hoy votaré por mí misma, para demostrarte que...

-¡Ni se te ocurra!-exclamó Devon-. ¿Para demostrar qué? ¡No va a servir de nada!

-Devon, hiciste lo correcto intentando eliminarme-le dijo Leshawna-. Me merecía irme a mi casa.

-No sé... Creo que había otras formas de intentar reconciliarme contigo-le dijo el chico-. Pero bueno, de regalo me llevo un brazo roto, ¿no?

Leshawna sonrió débilmente. Él se partió de risa.

-¿Qué te parece si votamos por Heather?-le preguntó Devon.

Leshawna abrió la boca, sorprendida. Luego sonrió.

-Tienes razón. Vamos a librarnos de una vez de ella.

Los dos se sonrieron y, tras unos segundos, preguntó Leshawna:

-¿Amigos?

Devon sonrió y asintió.

-¡Amigos!

Devon la abrazó, sin ser consciente de que Ezekiel lo estaba escuchando todo detrás de un árbol.


- Confesionario -

Ezekiel - ¡No puede ser! Esos dos quieren eliminar a la chica esta... ¡A Heather! ¿Debería decírselo a Al? ¿O... O a ella para que no me haga daño?


Alejandro se estaba sentando en la galería de los ganadores junto a algunos de sus compañeros. De la nada apareció Ezekiel, con gesto preocupado. Alejandro le lanzó una mirada desconfiada.

-Uy, Al, ¿por qué me miras así?-le preguntó Ezekiel, sentándose a su lado.

Alejandro se quedó callado unos segundos, tras los que le dijo:

-Mmm... Nada, estaba pensando en algo.


- Confesionario -

Alejandro - ¿Es que Ezekiel no recuerda su momento de locura absoluta contra el Chef Hatchet durante el desafío? ¿O cuando ganó el desafío de la jaula dando saltos sobrehumanos? Es muy preocupante... Empiezo a pensar que Ezekiel es mucho más peligroso de lo que puede parecer.


-En fin... ¿Ha pasado algo? Parecías preocupado cuando llegaste-le preguntó Alejandro.

Ezekiel asintió enérgicamente.

-No digas que te lo he dicho yo...-le dijo Ezekiel en un susurro-. ¡Pero van a votar por Heather!

-¿Quién va a votar por Heather?-preguntó Alejandro.

-¡Ellos!-musitó Ezekiel, señalando a los Ángeles, que estaban empezando a ocupar sus sitios.

-¿Y por qué susurras?

-Um... No lo sé, eh. Buena pregunta.

Alejandro puso los ojos en blanco.

-Bueno, pues no queda otro remedio: activamos la operación Águila Blanca-dijo el hispano.

-¡¿La operación Águila Blanca?!-exclamó Ezekiel.

Alejandro asintió, muy serio.

-¿Y cuál era esa?-preguntó Ezekiel.

-Arrrgh...


- Confesionario -

Bridgette - Voto por Heather. Ya es hora de que acabe la discordia entre los Ángeles.

Fiora - ¡Heather! Lo siento... Espero que no puedas cumplir tu sueño de ser la única que ha ganado dos veces el concurso.

Harold - Por fin, mi querida Leshawna ha entrado en razón... ¡Adiós, Heather!


Chris ya estaba en su sitio, contabilizando los votos de los Ángeles Amables.

-Vale, ya tenemos a los dos nominados de hoy. Voy a anunciar sus nombres...-dijo el presentador.

Todos se miraron, nerviosos...

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-Heather y Devon. Vosotros sois los dos nominados de hoy.

Heather lanzó una mirada sorprendida a Leshawna, pero no dijo nada. Devon se cruzó de brazos, serio.

-Demonios, ¡a votar!


- Confesionario -

Izzy - ¡Oye, qué nervios! ¿A quién creéis que van a echar? Espero que no a mí... Heather es muy mala a veces, aunque también es un poco incomprendida. Ella solo quiere ganar... ¡En fin! (Se va del confesionario sin votar)

Hugo - Se oye una tormenta que se avecina... Creo que hoy nadie está a salvo. Voto por Heather.

Ezekiel - Aún no sé qué es la operación Águila Blanca...


-Ya he contabilizado los votos-anunció Chris, una vez todos los Demonios hubieron regresado de emitir sus votos-. Y ya tenemos los resultados. Voy a anunciar al expulsado o expulsada de hoy...

Las miradas de los Ángeles se repartían entre Heather y Devon alternativamente. Fiora y Bridgette parecían dubitativas, Noah lanzaba miradas nerviosas a Chris, y Leshawna parecía tan nerviosa como siempre.

-Quien se tiene que ir hoy a su casa es...

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-Devon. Lo siento, colega.

Leshawna ahogó un grito. Heather respiró, aliviada.

-No puede ser...-musitó Leshawna, sin entender nada.

Se giró hacia los Demonios, que contemplaban la ceremonia en silencio. ¿Cómo era posible? ¿Por qué habían eliminado a Devon en vez de a Heather?

-Los votos son los votos. ¡Te vas a casa, Devon!

Devon se levantó de su sitio, mientras sus compañeros le miraban triste.

-Bueno, he aguantado más de lo habitual-dijo él, con una sonrisa-. Al menos me alegro de haber podido arreglar las cosas contigo antes de irme, Leshawna.

Ella le dirigió una sonrisa cargada de pena y se lanzó a darle un abrazo.

-Uy, cuidado con el brazo...-dijo Devon, ligeramente.

Heather se giró hacia los Demonios y sonrió a Alejandro, complacida.


- Confesionario -

Heather - Si alguna vez se daba la situación de que yo acabase nominada contra uno de estos pringados, el plan era que Alejandro convencería sutilmente a todas las personas posibles entre los Demonios de que mantenerme a mí en el equipo crearía caos y discordia entre los Ángeles, poniéndoles a ellos más fácil la victoria... ¡Y ha funcionado! ¡Se han cargado a Devon! Me encanta este nuevo método de eliminación.


Tras despedirse de Fiora, Bridgette, Noah y Harold, Devon echó a caminar hacia el bote de remos que debía coger para irse a su casa.

-Oye una cosa, eh...-dijo entonces Ezekiel-. ¿Cómo va a remar el bote si tiene un brazo roto?

Chris se encogió de hombros, sonriente.

-¡Eso parece problema de él! ¡JA, JA!

Y echó a caminar hacia el campamento. Mientras sus compañeros se iban también, Heather se acercó a Leshawna, que estaba hablando con Harold.

-En fin, Leshawna, supongo que sabes que nuestra alianza ha terminado aquí, ¿verdad?

-Sí-dijo ella, desafiante-. No te tengo miedo, Heather.

-Ya lo veremos-dijo Heather-. Te vas a arrepentir de haberte convertido en mi enemiga... otra vez.

Harold apoyó la mano en el hombro de Leshawna.

-Estás sola en esto, Heather.

La chica se encogió de hombros, y se fue meneando su larga melena, adelantando a Noah y a Fiora, que iban charlando. Al verla, Fiora se giró hacia su compañero:

-Con lo bien protegida que está por los Demonios, me da que la vamos a tener que aguantar hasta la fusión... ¿Qué vamos a hacer?-preguntó Fiora.

-Si los Demonios votan por la persona que no sea ella... Al final el expulsado será la persona por la que vote Heather-razonó Noah-. Es muy arriesgado.

-Quizá la manera sea más fácil de lo que pensamos...-dijo finalmente Fiora, mirando a cierto hispano que caminaba a lo lejos.


- Concursantes -

Ángeles Amables - Bridgette, Fiora, Harold, Heather, Leshawna, Noah

Demonios Desalmados - Alejandro, Ezekiel, Izzy, Hugo, Justin, Tiana

Expulsados:

19 - Owen (Ángeles Amables)

18 - Eva (Demonios Desalmados)

17 - Cody (Ángeles Amables)

16 - Duncan (Demonios Desalmados)

15 - Lindsay (Ángeles Amables)

14 - Emma (Demonios Desalmados)

13 - Devon (Ángeles Amables)


¡Y un nuevo eliminado abandona la isla!

Devon, aka DJ, ha sido el más votado por los Demonios, quedando eliminado tras arreglar (¡por fin!) las cosas con Leshawna. Su trama esta temporada puede haberse hecho un poco cargante, pero creo que era importante para lo que pretendo conseguir con la trama general de Legends of the Island. Sé que "Desastre devónico" es uno de los capítulos que menos han gustado en general, pero sigo pensando que era muy importante para el desarrollo de parte del elenco.

En este capítulo hemos tenido otras tramas importantes, como la de Ezekiel y en menor medida la de Izzy/Noah. ¿Cómo se irán desarrollando estas tan importantes temporadas? Pronto lo descubriremos chan chan chan.

Además, tenemos todavía a Sammy y a Duncan recuperándose en la cabaña-enfermería. ¿Qué pasará con ellos? ¿Y con quién estaba hablando Gwen?

Muchas gracias a todos por vuestras reviews =) Me hace muy feliz seguir leyéndoos a todos. Espero que la temporada os vaya gustando, siempre tengo ganas de ver lo que vais opinando de las tramas y de los personajes, y vuestras teorías sobre lo que creéis que va a pasar. Espero que el capítulo 10 os haya gustado, porque desde aquí ya va a ser todo una montaña rusa... ¡Preparaos!

El capítulo 11 tardará un poquitillo en llegar porque me esperan un par de semanas un poco locas, pero espero tenerlo listo antes de que acabe el mes. Se llamará "La gruta del tes-horror" y traerá muchas respuestas a vuestras preguntas.

¡Hasta entonces!