Rockstar

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Te ha estado desnudando con los ojos desde que llegamos aquí.

"¿Oh?"

Naruto volteó a mirarla con su rostro que denotaba aburrimiento, y luego miró hacia donde ella estaba mirando. La mujer a la que se refería Yoruichi estaba sola, lo cual era algo nuevo en ella, y de hecho, lo miraba con un ligero brillo en los ojos.

Los dos estaban de pie con los brazos apoyados en la barra. Era una noche bastante tranquila en el Seireitei, el bar estaba muy poco concurrido.

Solo tomó un sorbo de su bebida de un trago, sin apartar los ojos de la mujer.

"Tiene tantas ganas de follarte" dijo la infame mujer gato a su lado, como si nada.

Naruto ahogó un resoplido y arqueó una de sus cejas. Habían pasado varios años desde que conoció a Yoruichi, pero su sinceridad cruda todavía lo divertía como el primer día.

Por supuesto, él ya sabía de qué estaba hablando. No era tan denso y obtuso como se hacía pasar, Naruto hacía tiempo que se había dado cuenta de la forma en que esa mujer se comportaba cuando estaba con él. La encontró extremadamente hermosa y sensual, y su actitud excéntrica lo atrajo, pero ella nunca había insinuado realmente a él.

Naruto, sin apartar los ojos de esa mujer, sacudió la cabeza y le respondió a su antiguo mentor.

"Estoy con Rukia, ¿sabes?"

Esas palabras deberían haber terminado con ese tema, pero la lengua afilada de la mujer gato siempre tenía algo que responder.

"Oh, pero eso no es lo que entiendo... Rukia habla mucho, ¿sabes?" Naruto se giró para mirarla, y ella le sonrió con picardía, sus ojos de gato nunca dejaban de brillar. "Ella nos dejó en claro a todos que ustedes dos simplemente follan".

No le sorprendió en lo más mínimo que la Kuchiki pudiera decir algo así a sus amigos.

"Sí, Rukia tiene miedo de que las cosas salgan mal entre nosotros. O algo así, a veces no la entiendo bien".

"Tiene miedo, por supuesto..." Yoruichi se rió un poco de él "¿Crees que una mujer tan independiente como Rukia querría estar en una relación?"

Sus palabras podrían haber lastimado a cualquier otra persona, pero él simplemente asintió levemente. Pensó exactamente lo mismo. Conocía a Rukia desde hacía años, y ella era tan independiente y testaruda que estaba seguro de que no tendría ganas de tener una relación romántica con nadie, ni siquiera con él.

"Además, solo porque te estés follando a Rukia no significa que no puedas follarte a alguien más". Agregó el ex capitán con total naturalidad.

Yoruichi -como la mayoría de las veces- tenía razón, solo porque estaba follando con Rukia no le prohibía follar con otra persona. Además, también tenía un poco de inseguridad, tenía miedo de que estar en una relación con la pequeña shinigami arruinara la gran amistad que habían cultivado en todos esos años. Prefería mil veces mantener las cosas simples.

"Está bien." Dijo, sus labios fruncidos.

"¿La encuentras atractiva?"

Nuevamente su atención se centró en la mujer sentada en la distancia frente a ellos. Sí, era una mujer deslumbrante, una de las mujeres más bellas y sensuales que jamás había visto, y probablemente la que tenía más pretendientes en todo el seireitei. Y, sin embargo, allí estaba ella, completamente sola y mirándolo exclusivamente a él.

Naruto sintió los ojos de Yoruichi mirándolo fijamente, así que simplemente asintió en silencio.

"Entonces ve allí y fóllala".

Eso fue extremadamente directo y contundente incluso para alguien como Yoruichi. El Shinigami sustituto no pudo evitar reírse.

"Lo haces parecer tan fácil, gato".

"Espera, ¿no es así?" Yoruichi le sonrió con suficiencia. "Eres el shinigami más poderoso de todos, Naruto, y a nosotras... a las mujeres Shinigami les gusta el poder". Ella habló.

Naruto nunca mostraría una falsa humildad. La verdad es que estaba orgulloso de su poder, y sobre todo del hecho de que fue él quien acabó y mató a Aizen. También sabía que las mujeres Shinigami se sentían atraídas por el poder, y eso le gustaba. Le gustaba mucho ser objeto de deseo.

"¿Quieres que me acerque y la tome, así como así?"

Ella asintió e Naruto la miró de soslayo. Yoruichi lo hizo parecer tan fácil con sus palabras, pero no sabía cómo diablos acercarse a esta mujer. La duda en sus ojos enfureció a su mentor.

"Naruto, eres una superestrella. Todo el mundo quiere pasar el rato contigo, y prácticamente todas las mujeres de este mundo quieren estar contigo". Ella dijo: "¿De verdad no sabes cómo acercarte a ella? Solo ve y llévatela. Ella es mi amiga, ¿sabes? Sé que le encantará".

-Una superestrella. Sus palabras lo hicieron reír un poco. Pero él estuvo de acuerdo con sus palabras, sin importar lo estúpido o descabellado que pareciera.

Todos querían hablar con él, entrenar con él o simplemente pasar el rato con él. Absolutamente todos en la sociedad de almas lo estaban molestando y pidiendo su tiempo desde que mató a Aizen y finalmente terminó la guerra.

Realmente era una superestrella en la Sociedad de Almas. Pero a pesar de eso, nunca se había aprovechado de eso, especialmente de su gran fama con el sexo opuesto. Nunca se había interesado.

Tal vez fue el alcohol, tal vez fue la mujer en cuestión. Pero, en ese momento, Naruto veía muy favorablemente aprovechar su fama y poder, solo una vez.

"A la mierda" dijo, manteniéndose firme antes de caminar en dirección a la mujer. Detrás de su espalda, podía escuchar la voz traviesa de Yoruichi susurrando, fóllala. Sonrió por dentro.

"Sabes que pude escuchar parte de su conversación desde aquí, ¿verdad?" La mujer lo miró con una sonrisa burlona en su rostro, y su melodiosa voz hizo que su piel se erizara. "Es bueno verte de cerca, Naruto".

"Rangiku..." Murmuró su nombre, y mientras lo hacía, inconscientemente aspiró el exquisito aroma de la mujer. Quizás fue porque nunca la había visto de cerca, pero Rangiku se veía más hermosa y sexy que nunca. Su piel parecía resplandeciente incluso bajo la escasa iluminación del bar, y su escote prominente era un espectáculo para los ojos doloridos.

Ni siquiera estaba tratando de ocultar que estaba comiéndose con los ojos su escote. Después de todo, tenía que aprovechar el hecho de que él estaba de pie y ella seguía sentada.

"¿Terminaste de mirar?" preguntó juguetonamente. Su voz lo despertó de su pequeño trance por un momento. "Porque preferiría que tocaras en lugar de solo mirar~"

Sonrió levemente, su corazón latía con fuerza ante las palabras del teniente. Cruzó las piernas lenta y sensualmente, muy consciente de que él estaba a gusto con mirarla, y apoyó las manos en la rodilla, juntando un poco los brazos y enfatizando aún más su voluptuoso seno.

Estaba acostumbrada a que los hombres se volvieran de piedra al verla, pero la animaba saber que el mismo Naruto Uzumaki estaba loco por ella.

Sus ojos se llenaron de picardía y alegría al mismo tiempo. "¿Te comió la lengua el gato? ~" Preguntó ella, su sonrisa reapareció en sus labios carnosos. "Puedo tomar la iniciativa y guiarte a través de esto si quieres que lo haga... Soy una mujer muy versátil, ¿sabes? ~"

Sus palabras de alguna manera hicieron que Naruto estallara.

A la mierda- pensó de nuevo. Tomó sin permiso la costosa botella de Sake que estaba sobre la mesa, y sin pensarlo dos veces bebió casi una cuarta parte de la botella como si nada.

"Eso estuvo bien" dijo, aclarándose la garganta y sonriendo levemente. "Y no, cariño, eso no será necesario".

Rangiku casi gritó cuando sintió que el brazo del rubio la agarraba indiscriminadamente por la cintura y la forzaba a abrazarla.

A ella no le molestaba, todo lo contrario. Había fantaseado más de una vez con estar en los brazos musculosos de Uzumaki, solo lo abrazó sensualmente, presionando sus grandes pechos contra el pecho trabajado del segador.

"¿A dónde, guapo?"

"Déjame mostrarte el camino", dijo.

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"Wow..." exclamó, mirando alrededor del lujoso apartamento "Ni siquiera sabía que tenías un apartamento aquí".

"Es gracioso" dijo, cerrando la puerta "Te he pillado acechándome aquí varias veces".

"¡No mientas!" Ella trató de actuar ofendida por sus palabras, pero la sonrisa traviesa en su rostro la delató.

"Sabes que no lo hago". Su sonrisa coincidía con la de ella.

Abruptamente cerró la distancia entre ellos y la agarró posesivamente por la cintura. Él la miró a los ojos y pudo sentir la electricidad en sus orbes azul claro. Era una mujer alta, pero la diferencia de estatura entre ellos era considerable.

Su mano subió hasta su rostro, acariciando su piel frágil y ligeramente bronceada, y sintiendo los cortes y rasgos femeninos de su rostro. Ella era una belleza total. Sus brillantes ojos azules nunca apartaron la mirada de él. Sus labios carnosos parecían estar rogándole que los tomara. Y estaba ansioso por hacerlo.

"¿Así que eres un romántico?" Ella dijo, rompiendo el pequeño silencio con su humor excéntrico "Honestamente, no me lo esperaba".

Volvió a mirarla a los ojos y notó que sus ojos estaban sumergidos en sus labios, mirándolos con puro y salvaje deseo. Estaba seguro de que la estaba mirando de la misma manera. La tensión sexual entre los dos siempre había sido así desde el día que se conocieron.

"Qué puedo decir, estoy lleno de sorpresas".

Ella se rió abiertamente de sus palabras, pero su risa fue ahogada por un gemido cuando Uzumaki mordió indiscriminadamente su cuello. Instintivamente el teniente se aferró al cuerpo del segador, abrazándolo con un brazo - El otro estaba ocupado sosteniendo la botella de Sake que habían traído de la barra.

La mordió una segunda vez, luego una tercera. Su cuello se veía tan femenino y frágil; era atractivo. Todo en ella era atractivo, y el sabor y el olor de su piel eran adictivos.

Sus mordiscos se convirtieron en besos húmedos y exagerados. Estaba disfrutando el sabor de su piel, y lentamente sus besos cubrieron todo su cuello. Él estaba disfrutando esto y, a juzgar por los leves gemidos y los ligeros saltos que Rangiku estaba dando, ella también estaba disfrutando esto.

Sus besos comenzaron a descender lentamente, poco a poco. Ahora eran ligeras caricias en su piel, caricias casi imperceptibles que sin embargo volvían loca a la bellísima mujer.

Sorprendentemente, le mordió la clavícula y Rangiku gimió abiertamente.

Sus gemidos no eran muy fuertes, casi como un suave llanto. Pero eran realmente obscenos. Todo acerca de esa mujer sexy era obsceno y caliente.

Finalmente dejó su cuello. Se incorporó y la miró a los ojos. Sus caras estaban especialmente cerca. Podía sentir la respiración dificultosa de la teniente y el calor que emanaba de sus mejillas ligeramente sonrojadas.

Esta vez ella tomó la delantera. Sin quitarle los ojos de encima se puso de puntillas, y muy lentamente cerró la distancia entre sus bocas, casi como pidiendo permiso.

Empezó como un dulce beso, ambos se saboreaban el uno al otro, pero poco a poco el beso se hizo más y más profundo. Sus labios se movían muy lentamente, estaban en total sincronía. Estaba amando cada segundo de ese beso, y estaba segura de que él también.

Naruto tomó la delantera y metió su lengua en su boca. No se quejó, al contrario, le encantó. El sabor de su lengua era exquisito. Dulce, aún conservando el sabor del Sake y todo el alcohol que habían estado bebiendo. Y sólo Dios sabía cuánto amaba el sabor del alcohol.

El shinigami continuó con el mismo ritmo que antes, incluso con la lengua. La forma en que movía los labios y la lengua era tortuosamente deliciosa. La estaba devorando lentamente, saboreando cada rincón de su boca y dominándola poco a poco. A pesar de eso, el beso aún no fue sucio ni muy lascivo, pero ella quería que fuera así.

El placer que le estaba dando ese simple beso era demasiado. estimulante Se sentía tan ligera como una pluma. Sus pies parecieron levantarse del suelo y estaba segura de que estaba temblando.

De repente, una ola de placer la invadió. Rangiku ahogó un gemido profundo y prolongado contra los labios del chico. Se sentía ardiendo, pero la lentitud del beso la estaba poniendo ansiosa por más. Sabía que Naruto podía hacerla sentir mucho más. Era casi como si estuviera bromeando con este beso a propósito.

Ella comenzó a mover su lengua como loca, y sus labios carnosos comenzaron a moverse salvajemente, como si tuviera hambre. Y ella fue. Rangiku estaba hambriento de placer y lujuria.

Pero, incluso si quería aumentar el ritmo y la velocidad del beso, incluso si quería hacer las cosas más sucias y lascivas, Naruto continuó con el mismo ritmo lento que la estaba torturando. Y las cosas empeoraron cuando rompió el beso.

Él rozó sus labios contra los de ella suavemente antes de separarse por completo. Se mordió los labios carnosos y lo miró a los ojos, mostrándole sin palabras lo caliente y desesperada que estaba por él.

Pero no le importó, le devolvió la mirada como si nada hubiera pasado.

Lo que hizo a continuación la sorprendió por completo.

De repente dio un paso atrás y le desgarró la blusa con ambas manos. Su sostén morado estaba totalmente expuesto a él, pero tampoco quería que ella lo usara, así que simplemente lo tomó y lo tiró.

Habría bromeado al respecto en cualquier otra ocasión, con cualquier otra persona. Habría roto el silencio con alguna de sus excéntricas bromas o comentarios, pero se sentía demasiado acalorada para decir nada. Aunque las palabras no podrían haber salido de su boca si hubiera querido.

Ahora Rangiku estaba totalmente desnudo de cintura para arriba. Sus pechos grandes, redondos y pálidos rebotaron cuando él le quitó el sostén. Sus areolas eran de un tono rosado claro y algo pequeñas para el gran tamaño de sus senos. Sus tetas se mantuvieron firmes, casi desafiando la gravedad.

Miró su cuerpo como si fuera un animal salvaje frente al trozo de carne más jugoso. Sus ojos estaban inmersos en una sed primaria que asustó a la teniente, pero también hizo que su entrepierna se humedeciera. Se lamió la lengua al ver sus tetas, y Rangiku pensó que era lo más sexy que había visto en su vida.

Tomó la botella de sake de su mano y abruptamente abrazó su cintura nuevamente, pero su mano comenzó a descender y apretó su trasero con mucha fuerza, haciéndola chillar de placer y dolor.

Abrió la botella de Sake, y sin perder tiempo ni mediar palabra alguna, derramó la bebida sobre sus grandes y gordas tetas.

"¡Nyahh! ~"

Ella gimió cuando él comenzó a lamer y besar su pecho y senos como una bestia loca. No desperdició ni una gota de alcohol. Lamió y lamió sus tetas como un hombre poseído.

Estaba besando y besando todas sus grandes tetas. Más de una vez chupó la piel de sus senos, dejando al teniente sin aliento. Ella simplemente se aferró a él y lo agarró por la nuca, empujándolo más hacia sus grandes y lascivas tetas.

Su piel era dulce, como lamer la miel más sabrosa y suave. Y el sabor del alcohol lo hizo todo mucho más pecaminoso, más sucio, más primitivo.

"¡Ahhh! ¡JODER! ~"

Simplemente no pudo evitar morder los dos pezones del teniente al mismo tiempo.

Ella gemía y gemía sin cesar. Quería saborearla aún más, quería seguir jugando con ella, quería darle más placer. Y ella solo quería que Naruto le diera todo lo que tenía.

Como un loco tiró la botella a un lado, el ruido del vaso rompiéndose en mil pedazos fue suprimido por los melodiosos gemidos de Rangiku.

Él la abrazó con ambos brazos, todavía apretando su culo redondo con una de sus manos. Presionó una de sus piernas entre la entrepierna del teniente. Intentando que el contacto de sus cuerpos sea lo más íntimo posible.

Lo abrazó por el cuello, todavía con una mano sosteniéndolo por el cuello, y prácticamente se tiró encima de él.

Naruto instantáneamente la atrapó como si nada, y Rangiku abrazó sus piernas alrededor de su cintura. En ningún momento el pelirubio dejó de chupar y besar sus tetas empapadas de alcohol.

"¡S-solo fóllame ya, maldita sea!" ella gritó "¡Ah! ~ ¡V-vamos guapo! ¡P-Por favor!" Ella rogó.

Naruto la tomó y la llevó a la sala de estar, donde se dejó caer en el sofá. Ella rebotó encima de él, pero no lo soltó. Ella lo agarró por la cara y lo obligó a besarla, e Naruto estaba más que feliz de hacerlo.

Esta vez el beso fue más rápido, más sucio y mucho más desesperado que el anterior. Justo como Rangiku lo quería. Pero no fue suficiente para calmar el calor que sentía por todo su cuerpo.

De repente tomó sus manos y las guió hacia sus pechos. Naruto los acarició y apretó con entusiasmo, y Rangiku gimió y gruñó mientras besaba lascivamente al pelirubio como un demonio.

Mientras sus bocas continuaban saboreándose, Rangiku despojó desesperadamente al chico de su ropa. De un segundo a otro estaba tan desnudo como ella.

Sus manos vagan por todo su pecho tonificado y duro como el acero. Era tan malditamente fuerte, su cuerpo era duro y todos sus músculos estaban definidos. Muchos decían que era la mujer más sexy de todo el Seireitei. Bueno, Naruto estaba realmente a la par con ella. Era el hombre más sexy de la Sociedad de Almas. Un verdadero Adonis.

Sus manos bajaron y bajaron, recorriendo sus tonificados y duros abdominales hasta que llegaron a su pelvis. Allí Rangiku sintió algo muy duro debajo de sus pantalones.

Ella se hizo a un lado, pero sin romper el beso ni por un segundo. Sin mirar trató de quitarle los pantalones, e Naruto, incluso en el calor del momento, la ayudó a hacerlo.

Su pene rebotó antes de estar completamente libre. Su polla era grande y dura como el hierro.

Ella rompió el beso y rápidamente comenzó a masturbar al chico con ambas manos. Dejó escapar un gemido tan masculino que la hizo lamerse los labios.

"Por supuesto... Por supuesto, eres muy grande ahí abajo". dijo con una sonrisa lasciva en su rostro. "Eres alto, guapo, con cabello rubio; musculoso, fuerte como la mierda... Y tienes una polla enorme... Realmente eres el espécimen perfecto, ¿no?" ella lo miraba a los ojos con deseo y fascinación. Los corazones se reflejaban en sus orbes azul claro. Rangiku Matsumoto estaba enamorada de Naruto Kurosaki.

"Te lo dije... estoy lleno de sorpresas"

Su comentario arrogante la hizo sonreír, pero también la hizo sentir aún más excitada.

Se inclinó sobre él y mordió su cuello, sin dejar de masturbarlo. Él gimió de nuevo, y ella podría jurar. que esos gemidos varoniles eran lo más hermoso y sexy que jamás había escuchado.

"Podría molestarte toda la noche..." le susurró al oído. "Podría hacerte caer al borde del placer sin siquiera tocar tu gran polla varonil". Ella bombeó su polla con unas cuantas caricias largas y duras. "O podría simplemente ponerme de rodillas y chuparte la polla sin dejar que te corras, incluso podría envolver mis enormes tetas entre tu gran y gorda polla y follarla sin dejar que derrames tu semilla sobre mis tetas, solo para mostrarte cómo Me siento ahora mismo ~" Ella mordió su oreja y la lamió lentamente "Porque estoy sintiendo un fuego salvaje dentro de mí, Naruto. Mi corazón se está volviendo loco y mi núcleo está ardiendo y no se detendrá. El calor no se detendrá. Y no quiero que desaparezca, solo quiero sentir más... Hazme sentir más, Naruto, sé que puedes. Hazme sentir todo de ti ~"

Él chasqueó. Sus ojos ardían de pasión y simplemente no podía soportar más. La agarró como si nada y la sentó en su regazo, su dura erección acariciándola entre las piernas, casi como si exigiera follarla.

La besó tan fuerte que Rangiku pensó que su lengua llegaría a su garganta. Tuvo que poner toda su fuerza de voluntad en concentrarse para poder quitarse la última ropa. Él la ayudó, ansioso por tenerla completamente desnuda sobre él.

"¡Ahhh! ~" Ella gimió salvajemente, y el gemido murió en la boca del semental. Su polla estaba acariciando su raja empapada. Sus labios vaginales estaban ligeramente abiertos, y en el vaivén de sus movimientos tortuosamente le masajeó la polla con ellos.

Todo era tan placentero, pero tan tortuoso al mismo tiempo. Rangiku no podía esperar más, sabía que un océano de placer estaba extremadamente cerca y estaba más que lista para experimentarlo.

Ella se inclinó y tomó la polla grande, dura y palpitante en su mano. Ella lo miró a los ojos de nuevo, y la forma salvaje en que él la miraba la derritió por completo. Se alineó con la gran polla y con un solo movimiento descendió sobre ella.

"¡Ohhh MIERDA! ¡Es i-incluso mejor de lo que imaginaba! ~"

Ella lo tomó en un solo movimiento. Disfrutó la sensación de tener la polla del shinigami más fuerte completamente dentro de su coño.

Él estaba profundamente dentro de ella, y se sentía como si su polla se derritiera dentro de ella. Su coño estaba en llamas. Nunca se había sentido tan bien como ahora. Rangiku era, en todos los sentidos, la mejor mujer con la que había estado, y esto apenas estaba comenzando.

"¡Ahhh! ~"

Ambos gimieron al mismo tiempo en sincronía. Ella comenzó a moverse lentamente con maestría. Su coño estaba demasiado apretado para el grosor de su pene, pero Rangiku estaba tan húmedo que su pene se movía dentro de ella con facilidad.

Ella estaba corcoveando hacia arriba y hacia abajo. Su pene estaba saliendo de su coño casi por completo, pero antes de que eso sucediera, Rangiku estaba volviendo a bajar e insertándolo completamente.

Ella tenía el control total del coito, e Naruto la dejaba hacer con él lo que quisiera. Su rostro se transformó por el placer. Su piel estaba sonrojada y desprendía el calor de una estrella. Sus ojos estaban encendidos, casi cristalinos, como si estuviera a punto de llorar de tanto placer. La forma en que ella lo miraba estaba haciendo que su corazón latiera con fuerza.

Estaba seguro de que nunca vería nada tan hermoso como el rostro de Rangiku en ese momento.

Él se inclinó y clamó sus labios. Oh, qué bien se sentía besar esos labios carnosos y jugosos. Ella era una mujer hecha de pecado.

Ella le devolvió el beso con todas sus fuerzas. Una de sus manos fue a su cabello y lo agarró con firmeza por sus suaves mechones anaranjados. Solo Dios sabía cuánto amaba su cabello.

Su otra mano agarró su cintura, como ya se había acostumbrado a hacer. Sus dedos se clavaron en su piel suave, marcándola. Eso era lo que quería hacer, marcar a esta mujer de todas las formas posibles.

Él comenzó a responder e imitar sus movimientos, incluso guiando su cuerpo con su agarre en su cintura. Las cosas comenzaron a ponerse más y más calientes.

"¡Ahhh, joder! ¡Eso es, grandullón! ¡Solo. Así. Eso! ~" Gritó y gimió como loca en medio del húmedo beso.

Sus bocas estaban abiertas de par en par, y sus lenguas se entrelazaban entre sí en una danza por lo demás caliente y lasciva. El calor entre ellos crecía como un reguero de pólvora.

Ambos estaban bañados en sudor. Sus jadeos y gemidos eran cada vez más fuertes.

Su polla palpitaba dentro de ella, y los músculos de su coño se contraían constantemente. Ambos estaban a punto de llegar a su límite, y lo sabían.

Ahora la estaba agarrando por las caderas con ambas manos. él era el que tenía el control ahora. Empezó a empujar dentro de ella como un loco, duro y profundo. Sus movimientos de ida y vuelta eran mucho más rápidos que antes. La estaba follando bien y llevándola al límite.

"¡Ahh! ¡Eso es, bebé! ¡Sigue así! ¡MIERDA! ~ " gritaba a todo pulmón. Sus uñas se clavaban profundamente en su espalda.

Estaba seguro de que estaba sangrando ahora, pero no le importaba. Todo lo que le importaba era llevar a esa súcubo de mujer al nirvana.

Él la tomó y la arrojó contra el sofá. Todavía la estaba follando. Ahora él era el que estaba arriba. Empujó dentro de ella como una bestia cruda, más rápido, más profundo y más duro que nunca.

Ella se colgó de él con fuerza y le rogó a todo pulmón que la follara más fuerte. Eran como dos animales primitivos, follando solo por el placer de follar. Eran demonios. Criaturas de pecado.

"¡Ahhhhhhh! ¡MIERDA! ¡MIERDA! ¡YA NO PUEDO SOPORTARLO, BEBÉ! ¡ME ESTOY CORRIENDO! ~ "

Con ese penetrante grito de placer, Rangiku comenzó a convulsionar en pleno orgasmo. Las paredes de su coño lo apretaron como nunca antes, e Naruto no pudo hacer nada más que correrse en la parte más profunda de su apretado coño.

Explotó como nunca antes. Sintió que su polla finalmente se había derretido.

Él la abrazó con fuerza y se quedó quieto mientras disparaba todo su semen dentro de ella. Su orgasmo pareció durar horas.

Incluso en el nirvana podía sentir sus disparos de semen llegando a su matriz. A ella no le importó un poco. Se sintió increíble.

Cuando finalmente terminó, simplemente se derrumbó sobre ella, que todavía estaba convulsionando un poco por su orgasmo.

Él la miró por un segundo. Sus pupilas estaban dilatadas y su mirada se perdía en la distancia. Una lágrima corría por su hermoso rostro y su sonrisa soñadora parecía que nunca desaparecería.

Su orgasmo finalmente terminó, y ambos se quedaron así, acostados en el sofá con él encima de ella por lo que parecieron horas.

De repente, su polla volvió a estar dura y no perdió tiempo en empezar a moverse de nuevo.

"¡Ahh! ¡E-espera!" Rangiku exclamó entre leves risitas. Estaban recuperados y listos para más. "Yo también quiero seguir follando. ¡A-ah! ¡Pero llévame a tu cama, por favor!"

Hizo una pausa por un momento y se rió un poco antes de levantarse del sofá cargándola. Todavía la estaba follando.

"¡Ahh! ¡Eso es! ¡Fóllame hasta que salga el sol! ¡Arruíname en tu cama, por favor! ¡Arruíname! ~"

Él la complació y la folló en su cama toda la noche. Lamentablemente, se había desmayado del placer antes de que saliera el sol.

Aún así, fue una noche increíble e inolvidable para ambos.

Fín