"La duda."

"¡Juh!"

El estruendo de golpes bloqueados, seguido de pisadas que se alejaban del origen del sonido anterior, se escuchaba desde las afueras del Salón de Entrenamiento. Los últimos rayos de sol rozaban la superficie del Valle y las sombras de los árboles se hacían cada vez más pronunciadas.

Dentro del Salón, solo estaban un panda y una tigresa enfrentándose entre sí, como casi todos los días. Y había una razón; la única persona capaz de resistir la ferocidad de la felina era el Guerrero Dragón, y la única persona capaz de quebrantar la resistencia del panda era la líder de los Cinco Furiosos. Ambos tenían cualidades perfectas para desafiar al otro.

"Puedo hacer esto todo el día."

Ella se distanció del panda, chocó sus puños, y entre risas ahogadas le contestó con una sonrisa ladina: "Muy bien... Terminemos con esto."

Ambos predecían el siguiente movimiento del otro y bloqueaban a la par que intercambiaban golpes. Casi parecía que bailaban junto al otro. Con el tiempo, Po notó que le costaba concentrarse por perderse en la mirada feroz de su contrincante. Siempre admiró la fuerza y gracia con la que se caracterizaba su guerrera favorita, pero entrenar día a día con ella se sentía muy distinto a verla en torneos. Su corazón empezó a latir más fuerte mientras seguían con el entrenamiento.

La velocidad de ambos bajó considerablemente debido a lo exhaustos que estaban sus cuerpos. Po dejó de moverse y solo se defendía y contraatacaba cuando podía. Tigresa no dejaba de atacar y se replegaba en cuanto predecía los contraataques de su oponente. El combate que sostenían ya llevaba horas y ambos lo sentían.

En un desliz, Tigresa dio un mal avance debido a la pesadez de una de sus piernas y él vio la oportunidad perfecta para acabar con el combate. Se acercó lo más rápido que sus piernas le permitieron y lanzó un golpe al aire en espera de que conectara... Pero cuando llegó a dónde ella estaba, Tigresa perdió el balance de su pierna de apoyo y Po se resbaló con ella. Sus labios chocaron sin nada que los detuviera, formando un beso inesperado, y ambos se separaron congelados. Un silencio incómodo invadió el lugar, y se quedaron mirando al otro entre jadeos.

Para cuándo se dio cuenta de lo que ocurrió, el panda se llevó las patas a la cara y se disculpó con ella una y otra vez. Tigresa no contestó, seguía con la mirada perdida en él y los ojos bien abiertos. Po cerró sus ojos con fuerza y bajo la cabeza; juraba que acababa de arruinarlo todo, pero unos brazos rayados lo rodearon repentinamente luego de unos segundos y escuchó que le dijo: "Tranquilo... No pasa nada. Sé que no fue tu intención."

Eso lo relajó un poco y volvió a abrir los ojos para verla. Después del rompimiento del breve abrazo, los dos rieron un poco por lo ridículo que fue aquel momento.

"¿Otra ronda, Po?"

"Solo una más."

Y así siguieron entrenando hasta el anochecer. Pero con una nueva tensión formada entre ellos, y con la intención de no volver a chocar miradas entre sí.

Los dos no pudieron evitar preguntarse a sí mismos si lo de ese día avivó algo en el otro, justo como sentían que lo hizo con ellos. Mientras pasaban las semanas y ambos volvían a enfrentarse, notaron que se miraban de reojo constantemente y se ponían nerviosos al rozar accidentalmente con el otro.

Quizás algo inesperado sí surgió entre ellos y ambos sintieron esa chispa. O quizás no era más que imaginación de ambos. Fuera como fuera, la duda nunca se fue.

Fin.


Uf, ha pasado bastante desde la última vez que publique algo, y quizás no sea la última vez que pase en el futuro cercano. Si les digo que no me divertí escribiendo esto, les estaría mintiendo, y mucho. Solo espero que el Drabble los haya entretenido un rato. También quiero agradecerle a Nyu-enaiviV por ser mi beta para esto; si quieren (y pueden), les invito a que le echen un ojo a lo que tiene.

La vida pasa y pasa, y de un día para otro te sobrepasa... Solo espero que pueda acabar lo que tengo pendiente antes de que salga una nueva trilogía (no sé si acontecerá, pero ya lo veremos...).

El fin del año ya pasó, y perdí la oportunidad de desearles unas felices fiestas, así que les deseo un feliz año nuevo. Y si no tuvieron con quién celebrarlo, siempre estaré con ustedes. A veces hay años buenos y a veces hay otros peores, pero nada se resiste a los cambios.

De momento no tengo más que decirles. Si tienen una sugerencia o comentario, pueden dejar una review y yo la leeré luego (si es que no respondo tres siglos después...).

Así que los dejo. Recuerden que los patos serían el animal más OP si no los fuesen nerfeado en el juego de la vida; quizás tengamos GTA VI antes que Half-Life 3, tanto lo digital como lo físico tiene fecha de caducidad, y dormir de más después del medio día no recupera el sueño perdido.

Los leo luego y, ¡hasta la próxima!

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