Capítulo Adicional: El Encuentro en el Mes Especial
Eren, ahora anciano y rodeado por el paso del tiempo, reflexionaba sobre los años que habían transcurrido desde su llegada al mundo de Konosuba. Había vivido una vida llena de aventuras, desafíos y amistades peculiares. Sin embargo, la vida también le trajo cambios inesperados y desafíos personales.
En su hogar, miraba fotografías de momentos pasados. Imágenes de Historia, Armin, Mikasa y otros seres queridos de su vida anterior le recordaban a las personas que había perdido en el camino. Aquellos que se habían vuelto como una familia para él en este nuevo mundo también habían envejecido, y algunos ya habían relación con Aqua, quien se había convertido en su esposa por un giro cósmico del destino, también había experimentado altibajos a lo largo de los años. Sus hijos, fruto de esa unión, tenían vidas propias, y las relaciones familiares estaban marcadas por desafíos y complejidades.
En un momento de reflexión, Eren se percató de la fecha en el calendario. El mes especial estaba por comenzar, el período en el que Aqua, la diosa que había compartido su vida y le había dado una familia, tenía permitido abandonar su puesto en el más allá y visitar el mundo de los vivos. La anticipación creció en el corazón de Eren mientras esperaba el reencuentro con Aqua. A pesar de las dificultades que habían enfrentado juntos y las complicaciones en su relación, seguía existiendo un lazo especial entre ellos. Este mes significaba la oportunidad de encontrarse de nuevo y compartir momentos, recordar viejas experiencias y, quizás, hallar un cierre para las cuestiones pendientes.
Aqua apareció frente a Eren con su característica despreocupación y una sonrisa radiante. Su cabello azul resplandecía, y sus ojos destellaban con esa familiar mezcla de alegría e ingenuidad que Eren recordaba desde el primer día que la conoció.
"¡Hola, Eren! ¡Hace tanto que no nos vemos!", exclamó Aqua, abriendo los brazos para abrazarlo.
Eren, sin embargo, no podía dejar de notar la ironía del tiempo en ese momento. Mientras él se veía afectado por los años y las arrugas marcaban su rostro, Aqua parecía no haber envejecido un día.
"Aqua..." comenzó Eren, su voz temblando con una mezcla de emociones. "¿Realmente no has cambiado en todos estos años?"
"¿Cambiar? Oh, claro que no. Soy una diosa, después de todo. No envejezco como los mortales", respondió ella con su característica falta de comprensión sobre la gravedad de la situación.
Eren suspiró, sabiendo que la brecha entre ellos solo se había ampliado con el tiempo. "Aqua, necesitamos hablar sobre algo importante."
"¡Claro! ¡Hablemos de todo! ¿O prefieres que despeje algunas mazmorras primero? ¡Podemos hacerlo juntos!", sugirió ella emocionada.
"No, Aqua, no se trata de eso." Eren se sentó, mirando fijamente a la diosa. "Quiero hablar sobre nosotros, sobre mi vida aquí y lo que sucederá cuando yo..."
Aqua lo interrumpió con un brillo en sus ojos. "¡Oh, ya sé! ¡Hablemos sobre lo que sucede después de la muerte! Es un tema fascinante, ¿no crees?"
Eren asintió con tristeza. "Sí, eso es lo que quiero discutir. ¿Qué pasa cuando muero?"
Aqua titubeó por un momento, como si nunca antes hubiera considerado la pregunta. "Bueno, ya sabes, los matrimonios en este mundo solo duran hasta que la muerte los separe. Después de eso, las cosas pueden ponerse un poco complicadas."
"¿Complicadas?" Eren frunció el ceño.
"Sí, verás, después de que mueras, tengo algunas opciones", explicó Aqua. "Podría reencarnarte como un bebé sin recuerdos, lo que suena divertido, ¿verdad? O podrías quedarte como un espíritu en el más allá, pero ya no seríamos nada. Solo serías un vago recuerdo."
El peso de esas palabras golpeó a Eren con dureza. Había imaginado muchas veces cómo sería este encuentro, pero la frialdad de las opciones de Aqua le hizo darse cuenta de que, incluso en la vida después de la muerte, su relación con ella sería efímera.
Aqua, ajena a la tormenta de emociones en el corazón de Eren, continuó hablando animadamente sobre las peculiaridades de la vida después de la muerte, pero sus palabras caían en oídos sordos. Eren estaba sumido en sus pensamientos, reflexionando sobre la naturaleza efímera de su existencia en este mundo de fantasía y los límites que el tiempo imponía a las relaciones, incluso con una diosa.
Eren y Aqua paseaban por las animadas calles de Axel, disfrutando de la luz dorada del atardecer. La ciudad había cambiado a lo largo de los años, pero para Eren, el cambio más significativo había ocurrido dentro de él mismo. Con el tiempo limitado que le quedaba, había decidido abrazar la felicidad en lugar de lamentarse por lo que ya no podía cambiar.
Mientras caminaban, Eren comenzó a hablar sobre los conocidos que había dejado atrás. "Komeko como Reina Demonio... No me sorprende. Siempre tuvo esa chispa de liderazgo, incluso cuando era solo una niña."
Aqua asintió. "Sí, ha hecho un buen trabajo manteniendo las cosas emocionantes en el mundo. Pero, sabes, la gente no te recuerda, Eren. Tal vez eso sea lo mejor. Puedes vivir tranquilo sin que te persigan los fantasmas del pasado."
Eren sonrió, aunque había tristeza en sus ojos. "Tienes razón, Aqua. No necesito que me recuerden. Solo quiero disfrutar los últimos años que me quedan."
Caminaron en silencio por un rato antes de que Eren continuara, reflexionando sobre otros conocidos. "Megumin se casó con... , pero parece que su vida fue bastante común después. Y Darkness, al final, se convirtió en otra noble más. A veces me sorprende cómo la vida puede llevar a las personas por caminos tan diferentes."
Aqua, mirando hacia el horizonte, respondió: "Las vidas de las personas son como aventuras, Eren. A veces llevan a lugares inesperados, y cada elección define su historia."
Eren asintió con gratitud por las palabras de Aqua. "Por cierto, lo que realmente me sorprendió fue Porco Galiard. Convertirse en un héroe reconocido en otros países... Eso no me lo esperaba."
Aqua rió. "Incluso los villanos pueden encontrar su camino hacia la redención. Tal vez eso sea un recordatorio de que las personas pueden cambiar."
A medida que el sol se ponía, Eren y Aqua continuaron su paseo por Axel. Aunque el peso del tiempo pesaba sobre los hombros de Eren, había encontrado un atisbo de paz en aquellos momentos compartidos con la diosa que, de alguna manera, había sido una constante en su vida tumultuosa.
El capítulo especial concluyó con la promesa de aprovechar cada momento restante y encontrar la dicha en el presente, sin importar cuánto quedara en el reloj de la vida.
Eren y Aqua avanzaron con precaución a través de los oscuros pasillos de la masmorra. Aunque el tiempo había dejado su marca en el cuerpo de Eren, su agudo ingenio y habilidades desarrolladas a lo largo de los años aún brillaban. Con la visión nocturna de Aqua como guía, evitaron trampas, se deslizaron entre sombras y sortearon criaturas oscuras que acechaban en las profundidades.
Finalmente, llegaron a la cámara central, donde un demonio peculiar estaba sentado, leyendo un libro. Vanir levantó la vista, sus ojos brillaban con una mezcla de aburrimiento y expectación. "Ah, visitantes inesperados. Pero, ¿dónde están los demás? Me había preparado para una broma épica".
Eren se adelantó, su expresión serena. "Parece que somos los únicos esta vez, Vanir. Pero no estamos aquí por una broma, sino por... nostalgia, supongo".
Vanir bajó el libro y se rió entre dientes. "Nostalgia, dices. Bueno, eso es un cambio. ¿Qué los trae a este antiguo lugar?"
Eren se encogió de hombros. "Solo decidimos dar un paseo por el viejo tiempo. Y, por casualidad, acabamos aquí".
Vanir observó a Eren con agudeza. "Pareces diferente, Eren Yeager. Más sabio, pero también más cansado. Y Aqua, ¿sigues siendo tan despistada como siempre?"
Aqua sonrió con su típica inocencia. "¡No cambió nada! ¡Sigo siendo la diosa más increíble de todas!"
Vanir rió ante la respuesta de Aqua. "Bueno, siempre es reconfortante saber que algunas cosas nunca cambian. Ah, pero me parece que no sabes la última. Wiz ya no está".
Vanir suspiró. "Murió hace años. Después de ver a sus amigos partir, le pidió a Aqua que la purificara, que la hiciera una con la tierra misma. Ahora es parte de la naturaleza que tanto amaba".
La noticia resonó en el aire, un recordatorio de la fugacidad de la vida incluso en mundos mágicos. Eren asintió en silencio, mientras Aqua miraba al suelo, una sombra de melancolía cruzando sus ojos.
Vanir, notando la seriedad del momento, cambió de tema. "Pero bueno, ya que están aquí, ¿quieres una visión del futuro? Podría revelarte algunos eventos interesantes".
Eren dudó por un momento, pero finalmente asintió. "Adelante, Vanir. Quisiera saber qué depara el futuro, aunque sea solo por curiosidad".
Vanir observó la expresión en el rostro de Eren y Aqua, leyendo entre líneas sus emociones mientras compartían la información sobre sus descendientes.
"Se han ramificado en distintos caminos", comentó Vanir, disfrutando sutilmente de la tensión en el aire. "Pero aquí va un consejo gratuito: sería mejor que no los visiten. Guardan resentimientos, y la última cosa que necesitamos es alimentar mi negocio con más emociones negativas".
Eren y Aqua intercambiaron miradas incómodas, conscientes de la complejidad de sus relaciones familiares.
Vanir, siempre buscando aumentar sus provisiones de energía emocional, adoptó una expresión sabihonda. "Hablemos de su matrimonio, entonces. Eren, sinceridad en su máxima expresión, ¿nunca lograste enamorarte de Aqua?"
Eren suspiró, tomando un momento antes de responder. "Al principio, hubo atracción, pero tuvimos nuestras diferencias. Su personalidad... no encajaba bien con la mía. Y aunque intenté enamorarme de ella, simplemente no sucedió".
Aqua, sintiendo el dolor en las palabras de Eren, decidió ser honesta también. "Creí que podríamos construir algo, pero cada intento terminaba en malentendidos y desacuerdos. Al final, aceptamos que no éramos el uno para el otro".
Vanir sonrió satisfecho, saboreando el sufrimiento emocional. "Interesante. Un matrimonio forzado por circunstancias, con intentos fallidos de forjar una conexión más profunda. Esto tiene el potencial de ser bastante delicioso".
Eren, sin dejarse llevar por la manipulación de Vanir, se dirigió a Aqua con seriedad. "Aqua, quiero que sepas que valoré nuestra relación en ciertos aspectos. Pero también fue un recordatorio de que la felicidad no siempre se encuentra donde uno espera".
Aqua asintió, un brillo de tristeza en sus ojos. "Sí, Eren, también aprecio algunos momentos. Pero quizás sea mejor así. El amor no siempre sigue los caminos que queremos".
Vanir, disfrutando de la revelación íntima, concluyó su papel de improvisado terapeuta matrimonial. "Interesante, muy interesante. Ahora, ¿quieres seguir explorando la masmorra o hay algo más en lo que pueda ayudarlos?"
Vanir, observando la curiosidad en los ojos de Eren y Aqua, se preparó para realizar uno de sus trucos más impresionantes. "¿Quieren ver otros universos? Estoy seguro de que encontrarán algunos muy interesantes".
Eren y Aqua intercambiaron miradas y asintieron con cautela. Vanir, con un gesto teatral, invocó una especie de portal mágico. La energía fluyó y se distorsionó a su alrededor, revelando imágenes de otros mundos.
Primero, mostró un universo donde Eren y Aqua nunca se conocieron. Eren era un científico destacado, y Aqua una diosa despreocupada que prefería no interferir en los asuntos humanos. Ambos llevaban vidas separadas, llenas de logros y desafíos únicos.
Luego, exhibió un universo donde Eren y Aqua eran enemigos acérrimos. Eren lideraba la resistencia contra un régimen tiránico donde Aqua estaba del lado de los opresores. Sus encuentros eran enfrentamientos épicos, y sus historias estaban marcadas por la tragedia y la lucha constante.
Vanir continuó revelando diversos universos, cada uno con su propia versión de Eren y Aqua, con elecciones y destinos que divergían en caminos inimaginables. Mostró universos donde no se conocieron, otros donde eran inseparables amigos, aventureros solitarios, o incluso antagonistas inesperados.
A medida que las imágenes se sucedían, Eren y Aqua quedaron asombrados por la complejidad del multiverso. Vanir, disfrutando de su papel como guía a través de dimensiones paralelas, comentó: "En cada universo, las decisiones y circunstancias se combinan de manera única. Sus vidas podrían haber tomado caminos completamente diferentes".
Vanir, volviendo a su tono sarcástico, dijo: "Ahora que han tenido un vistazo, ¿alguna pregunta o prefieren continuar su búsqueda en esta masmorra?"
Eren, con un asombro palpable en sus ojos, dijo: "Es increíble, Vanir. Pero creo que prefiero centrarme en este universo por ahora. Hay suficientes misterios aquí".
Aqua, asintiendo, agregó: "Sí, y siempre podemos explorar más universos después. Ahora, ¿vamos a seguir adelante?"
Vanir, observando la reacción de Aqua y percibiendo el peso del pesar en ese universo alternativo, decidió cambiar el tono de sus revelaciones. "Parece que han tenido suficiente de las visiones sombrías", dijo con un toque de comprensión. "No se preocupen, también hay universos donde las cosas resultaron mejor".
Esta vez, Vanir decidió mostrarles un universo donde Aqua y Eren, aunque con desafíos, lograron encontrar la felicidad. Se establecieron como líderes respetados en un próspero reino, con hijos que llevaban vidas plenas. El Rey Demonio había sido vencido de manera decisiva, y la paz reinaba en su mundo.
Las imágenes mostraban a Aqua y Eren sonriendo, compartiendo momentos de alegría y éxito. Este universo alternativo era una visión reconfortante para contrarrestar las sombras de los anteriores.
Vanir comentó con su característico sarcasmo: "Ahí lo tienen, un final feliz para variar. Pero recuerden, estos son solo destellos de lo que podría haber sido".
Aqua, con lágrimas en los ojos, suspiró de alivio al ver que, al menos en algunos universos, las cosas salían bien para ella y Eren. Eren, por su parte, sintió una extraña mezcla de emociones al contemplar las diferentes vidas que podrían haber tenido.
Vanir, ntando la necesidad de cambiar la atmósfera, sugirió: "Bueno, ¿quieren ver más o estamos listos para continuar? Hay infinitos universos por explorar".
Vanir, sin perder el ritmo, continuó mostrando otro universo alternativo. En este escenario, Aqua y Eren sí se casaron y lograron deshacer la maldición que había caído sobre Eren después de su noche juntos. Tuvieron un hijo y llevaron una vida relativamente pacífica. Sin embargo, había una diferencia crucial.
Aqua, en lugar de mantener su estatus divino, se volvió mortal. Su pelo, en lugar de conservar su distintivo tono azul, se volvió negro como la noche. Las imágenes mostraban a Aqua llevando una vida más mundana, dedicada a las tareas cotidianas. Aunque continuaba siendo la misma persona en esencia, la falta de sus habilidades divinas marcaba una diferencia palpable.
El destino de Historia, sin embargo, tomó un giro más oscuro. En este universo, durante un enfrentamiento con Silvia, ella terminó fusionada con un titán, perdiendo su humanidad y quedando atrapada en una forma grotesca e inhumana. Sin los poderes de Aqua para revertir la transformación, Historia quedó atrapada en ese estado.
Las imágenes eran sombrías, y la sala se llenó de un silencio incómodo mientras Aqua y Eren asimilaban la impactante realidad de este universo alternativo. Vanir, observando sus reacciones, no pudo evitar comentar con su característico humor: "A veces, las cosas no salen como uno espera, incluso en los universos alternativos".
Aqua, con expresión sombría, preguntó: "¿Hay más?".
Vanir asintió y, sin esperar más comentarios, continuó mostrando los destinos de los personajes en otros universos, dejando que Aqua y Eren contemplaran las diversas posibilidades que el multiverso tenía para ofrecerles.
Vanir, con una expresión ligeramente decepcionada, mostró otro universo en el cual Aqua y Eren no se acostaron durante la fiesta. Este universo seguía los eventos de la historia canónica de Konosuba, donde Kazuma Satou, Aqua, Megumin y Darkness llevaban a cabo sus cómicas y desventuradas aventuras.
Sin embargo, en este universo como en la mayoria, Eren no estaba presente, y las imágenes sugerían que la vida continuaba de manera bastante rutinaria y aburrida para los personajes de Konosuba. Kazuma enfrentaba las mismas dificultades y situaciones cómicas, con su propio toque distintivo
Eren, al ver estas imágenes, preguntó sinceramente: "¿Entonces, si no hubiéramos hecho eso, todo seguiría como si nada hubiera pasado?".
Vanir, con su característica sonrisa burlona, respondió: "Parece que este universo es un tanto más aburrido, ¿no lo creen?".
Aqua, mirando las imágenes, comentó: "Bueno, al menos aquí las cosas son entretenidas".
Vanir, con su característica sonrisa maliciosa, presentó otro universo alterno, uno en el cual Eren se había enamorado obsesivamente de Aqua. Las imágenes mostraban a un Eren completamente diferente, un hombre oscuro y controlador que mantenía a Aqua prisionera, buscando maneras de debilitarla y retenerla a su lado.
En este universo distorsionado, Eren se volvía cada vez más obsesivo, forzando a Aqua a realizar acciones que iban en contra de sus propias reglas y principios. Le exigía experimentar con sus limites corporales y la mantenía cautiva para que no pudiera regresar al Más Allá.
Aqua, en estas imágenes, aparecía angustiada y desesperada, tratando de encontrar alguna manera de liberarse de la obsesión enfermiza de Eren. Este universo presentaba una versión tóxica y perturbadora de la relación entre ellos.
Eren, al ver estas imágenes, quedó horrorizado por la versión retorcida de sí mismo. "¿Es esto lo que podría haber sido si me hubiera enamorado de ti de esa manera?" preguntó, mirando a Aqua con preocupación.
Vanir, disfrutando del dramático giro en la situación, respondió: "Bueno, las relaciones pueden ser complicadas en los universos alternativos. A veces, las elecciones que hacemos pueden llevarnos por caminos oscuros".
Aqua, notablemente incómoda, miró a Eren y dijo: "Aprecio que no hayamos seguido por ese camino en particular".
Eren asintió, agradeciendo internamente que las cosas no hubieran tomado un rumbo tan siniestro en su relación con Aqua. Vanir, siempre listo para jugar con las emociones de los demás, continuó explorando más universos para mostrar las infinitas posibilidades que el multiverso tenía para ofrecer.
Vanir, disfrutando del juego de los universos alternativos, aceptó la solicitud de Aqua con una sonrisa pícara. Mostró imágenes de un universo donde Aqua llegaba al mundo de fantasía como semi-humana, privada de algunos de sus poderes divinos pero capaz de experimentar placeres mortales.
En este universo alterno, Aqua, con una actitud más lasciva y celosa, se involucraba en numerosas relaciones y tenía más hijos. La versión yandere de Aqua mostraba una faceta posesiva, buscando satisfacción en los placeres carnales que antes le estaban vedados.
Eren, viendo estas imágenes, se quedó perplejo ante la visión de Aqua en un papel tan diferente. La versión yandere de Aqua parecía más terrenal y humana, pero también más complicada en términos emocionales.
Aqua, al ver esta representación de sí misma, frunció el ceño y exclamó: "¡Eso no soy yo! ¡Nunca sería así de... de lasciva y celosa!"
Vanir, riendo ante la reacción de Aqua, comentó: "Bueno, los universos alternativos pueden ser sorprendentes, ¿no? Parece que en este, tus deseos mortales tomaron el control".
Aqua, evidentemente incómoda con esa versión de su yo alternativo, se volvió hacia Eren y dijo: "De ninguna manera me comportaría así. ¡Esto es solo una broma absurda del multiverso!"
Eren, tratando de contener la risa ante la situación, asintió y respondió: "Sí, definitivamente es un universo muy extraño. Pero estoy agradecido de que en nuestra realidad las cosas no hayan tomado un rumbo tan... complicado".
Vanir, satisfecho con la reacción de Aqua, continuó explorando los infinitos caminos que el multiverso tenía para ofrecer.
Vanir, después de mostrar los diversos universos y sus extrañas variaciones, hizo una última observación antes de cerrar las puertas del multiverso.
"En la mayoría de los universos, no había un Eren Yeager", comenzó Vanir. "Y de los pocos en los que existía, la mayoría terminó en situaciones bastante... desagradables. Algunos fueron enviados al infierno por sus acciones, otros tomaron caminos oscuros como el Rey Demonio. También hay algunos en los que tuvieron un impacto positivo, como Aqua volviéndose mortal o curando al padre de Darkness. Y, por supuesto, está la variante en la que Eren reclutó a los Magos Carmesíes para enfrentarse al Rey Demonio, aunque eso no siempre funcionó como se esperaba".
Aqua, aliviada de que su versión yandere no fuera la norma en todos los universos, miró a Eren con una sonrisa. "Bueno, parece que en nuestro universo las cosas no son tan malas".
Eren asintió y dijo: "Sí, parece que hemos tenido una historia bastante única. ¿Qué te parece, Aqua?"
Aqua sonrió y respondió: "Aunque seas un forastero loco del pueblo, estoy contenta de que hayas sido parte de mi historia. Y, aunque en algunos universos las cosas fueron diferentes, estoy agradecida por cómo resultaron aquí".
Vanir, cerrando el acceso al multiverso, concluyó: "Y así, cierra el telón de este espectáculo interdimensional. Hasta la próxima, si alguna vez deciden aventurarse de nuevo en los secretos de los universos alternativos".
En un rincón oscuro y desapercibido del multiverso, una Aqua sucubo observaba a través de los pliegues del espacio y el tiempo. A su lado, Vanir de ese mundo, que nunca había conocido a Aqua ni a Eren en sus vidas, hacía una reflexión.
"¿Has aprendido algo, Aqua?", preguntó Vanir.
La Aqua sucubo suspiró y respondió: "Este Eren y esta Aqua eligieron un camino diferente al nuestro. A veces me pregunto qué hubiera pasado si tomáramos decisiones distintas".
Vanir reflexionó: "La realidad es que no podemos viajar en el tiempo ni cambiar las decisiones que tomamos. Cada elección forma un universo propio, y debemos aprender a ser felices con la vida que nos tocó o formamos. El 'hubiera' es una ilusión, es el juego de las posibilidades infinitas, pero solo una es la que vivimos".
La Aqua sucubo miró el panorama con nostalgia y añadió: "Quizás estemos destinados a vivir siempre con el deseo de lo que pudo haber sido".
Vanir asintió y concluyó: "Ese deseo es natural, pero también es una carga. Aprender a encontrar la felicidad en el presente es la verdadera sabiduría".
Y así, en ese rincón olvidado del multiverso, la Aqua sucubo y Vanir continuaron observando, cada uno con sus propias lecciones y reflexiones, mientras el tiempo y las realidades se desplegaban en una danza eterna.
