Las pruebas de Quidditch se acercaban para todas las casas. Durante toda la semana siguiente, los capitanes estuvieron recibiendo peticiones apresuradas, Sofia ya tenía treinta centímetros de pergamino, y Emma tenía menos, pero no pocos. Liam presento su solicitud, se acercó a Sofia el martes, después de que Emma lo obligara, y le pidió a la chica que lo apuntara. Sofia, quien había tenido que ir a la enfermería a que le despegaran los labios, lo miro despectivamente y lo anoto de mala gana.
La primera prueba de quidditch sería la de gryffindor, a las seis de la tarde, el martes de la tercera semana de octubre. Las pruebas de slytherin serian el miércoles a la misma hora, después Ravenclaw el jueves, y Hufflepuf el viernes. El martes, en el desayuno, todos los de gryffindor estaban emocionados por las pruebas, incluso los que no se apuntaron, pues estaban ansiosos de ver a los nuevos integrantes del equipo. En eso, Liam, Emma y Raine estaban hablando tranquilos, como siempre, pues Jack estaba pasando su vida con Erika, Tom con Dalia, y Odette prefería leer un buen libro matutino de vez en cuando, ese día era el cuándo. Fue ahí cuando Sofia se le acerco a Liam.
-que sepas – le dijo, de mala gana – que no vas a tener ningún trato preferencial
-no esperaba tenerlo – dijo Liam algo confundido
-bien, espero que llegues temprano, Baker, porque eso también cuenta – Sofia se lanzó el pelo para atrás y regreso con Sebastián
-desde cuando me dice Baker? – Liam siguió a la chica con la mirada
-desde que la mayoría de los Baker la mandara lejos – rio Emma – solo falta tu padre y Raine
-que se vaya lejos – dijo Raine con la boca llena
-solo tu padre – dijo Emma contenta
-bueno, no importa – suspiro Liam – de todos modos, no creo entrar al equipo
-oh, vamos Liam, estoy seguro de que vas a entrar – le sonrió Emma – y dime, a cuál puesto te vas a apuntar?
-buscador, como tu – sonrió Liam – aunque también me gustaría ser cazador
-bueno, si no quedas como buscador este año, puedes intentarlo el siguiente como cazador – dijo Emma contenta
-solo si hay puestos disponibles – dijo Liam
-meh, si no los hay golpeo a algún cazador y lo saco del equipo – Emma rio maliciosamente
-gracias – rio Liam – ah, ojalá pudiera mandar a Annelie para hacer esas cosas
-Annelie? – gruño Emma – acaso no crees que yo podría hacerlo?
-claro que creo – sonrió Liam – mira tus músculos, harías trizas a cualquiera!
-pues claro – sonrió Emma orgullosa.
Después de hacer ejercicio todo septiembre, Emma había bajado de peso, y estaba empezando a ganar fuerza, aunque también perdió su bronceado, pues solo le basto un mes en la fría sala común de slytherin para regresar a su tez blanca de siempre
-que fuerza – suspiro Liam viendo como Emma posaba
-toca, toca – decía Emma haciendo fuerza en el brazo
-pues a mí no me gustaría que Annelie estuviera aquí – dijo Raine mientras Liam apretaba el bíceps de Emma, totalmente encantado – porque… bueno, casi mata a papá a golpes
-pero es linda – rio Emma – linda, linda, le gusta a Liam, a Jacob, y a media escuela
-bah, para nada – dijo Liam apretando más el bíceps de Emma – a mí me gustas tú, tu, claro que si – suspiro sonrojado
-bueno, pero apuesto a que a Raine sí que le gustaría que viniera Annelie – dijo mirando pícaramente a Raine – ya sabes, tu querida "Anne"
-claro que me gustaría que ella viniera – dijo Raine con una sonrisa – estoy ansiosa por que sea navidad, ya la quiero ver!
-qué bonito – sonrió Liam – ay el amooooor
Como siempre, las lechuzas entraron, Liam volvió a recibir cartas, pero solo dos, de manos de sara. Y un segundo después de que la lechuza familiar volara, otra lechuza dejo un enorme paquete enfrente de Emma, que hizo que la comida volara.
-deberían de hacer un mejor sistema de correspondencia – suspiro Liam quitándose el huevo revuelto del cabello
-oh, mira Liam, es de mamá – sonrió Emma enseñando la tarjeta a Liam – debe ser mi nueva escoba, pedí una nimbus 2000 nueva así que… – pero cuando Emma abrió el paquete, no encontró una nimbus 2000 – no… puede… ser…
-qué es? – dijo Liam curioso
-es… es… – Emma abrió por completo el paquete – ES UNA NIMBUS 2001! Liam, mira esta preciosidad!
-vaya – dijo Liam viendo la elegante escoba, de madera color negro y brillante
-que hermosura – dijo Emma pasando sus dedos por la escoba – y esta nuevecita, solo para mi
-felicidades – sonrió Liam
-ay, si tan solo Amanda no te hubiera regalado esa escoba, tendríamos la misma – sonrió Emma – gracias mamá
-hablando de mamá – dijo Liam y le extendió una carta a Raine
-sigue molesta con Tom? – dijo Raine tomando su carta
-solo quiere dejar pasar un tiempo – suspiro Liam
-ah, vaya – suspiro Raine – mamá dice que no va a poder venir la próxima semana
-la quería invitar a algo – dijo Liam leyendo su carta, en donde decía lo mismo, y que esperaba que Liam se portara mal pronto
-ojalá ver a mi suegra – dijo Emma contenta, bajando la escoba de la mesa – hace mucho que no hablamos bien
El día era soleado, con nubes por aquí y por haya, perfecto para pruebas de quidditch. Cuando Liam termino sus clases, subió rápidamente a su habitación, dejo sus cosas y tomo su escoba. Sebastián iba saliendo de la sala común, ya vestido con las túnicas de quidditch de gryffindor, y el demás equipamiento. Los dos salieron rápidamente, y en los jardines montaron su escoba, directo hacia el campo de quidditch. La tarde iluminaba el estadio de manera increíble, aunque dándole un aura de destino lejano. Liam estaba nervioso, llego un par de minutos antes que la hora acordada.
-esta enojada contigo – le dijo Sebastián mientras esperaban fuera del estadio, y otros aspirantes llegaban – dice que nunca en su vida se volvería a fijar en ti, que eres un desconsiderado que bla, bla, bla
-pero yo no le heche el maleficio – dijo Liam apenado
-ya sé, pero sabes cómo es ella – rio Sebastián – no te preocupes Liam, está un poco severa, pero te apuesto lo que sea a que va a volver a tratarte como antes
-bueno, casi que no – dijo Liam – porque… tengo… novia
-claro, eso es un problema – suspiro Sebastián – oh no, no lo es, no quise decir eso Liam
-no te preocupes – sonrió el chico – no sé qué quiere Sofia de verdad, si a mí, o a mi hermano…
-ella también se pregunta eso – dijo Sebastián – tiene que decidirse
-y Tom también – dijo Liam – va de un lado a otro
-ah, Baker, ya estás aquí – dijo Sofia saliendo del estadio – que bue… quiero decir, anótate ya, no hagas esperar a los demás, y tú, ven para acá – le dijo a Sebastián
-nos vemos en un momento – sonrió Sebastián
Liam camino hacia la lista, iba a ser el primero en anotase. Escribió su nombre y la posición a la que aspiraba. Después se hizo a un lado y se formó, atrás de él se formó otro chico, luego una chica muy bajita, luego un chico que se veía muy nervioso. Después de un rato, Sofia checo la lista, y permitió que todos pasaran, mientras les daba equipamiento para sus respectivos puestos. Desde dentro, el estadio parecía mucho más grande, e imponente, Liam se puso muy nervioso. Hasta que escucho una voz familiar.
-Liam! – le gritaba alguien en las tribunas, el chico subió a su escoba y fue a su encuentro
-Emma! – dijo Liam contento
-hola – sonrió la chica – vine a verte, y…
-también yo! – decía Odette llegando por la izquierda – vaya, que bonito estadio
-ey! ¡Ustedes! – dijo Sofia subiendo rápidamente – dejen de molestar a los jugadores
-cállate – gruño Emma – espero que lo hagas bien hoy, señorita capitana
-pues a ver cómo te va a ti – le dijo Sofia, molesta – bien, baja Baker, vamos a empezar
-Baker? – dijo Odette ceñuda – que no se llevan conociendo desde primero?
-aja – suspiro Sofia – ya, vamos – dio media vuelta y bajo
-suerte "Bakeg" – rio Emma
-oye! – le dijo Odette – suerte Liam
-gracias – Liam empezó a bajar
-BIEN, TODOS, ¡ATENCION! – grito Sofia abajo, con los pies en el césped, y con el equipo atrás – VAMOS A EMPEZAR LAS PRUEBAS!
-oh, no me dijiste que iba a venir Liam – dijo una chica alta, rubia dorada, muy guapa y con una hermosa sonrisa
-no importa eso, Denise – suspiro Sofia. Aquella chica era Denise Bennett, de la misma edad que Liam; se habían conocido en su segundo año, la chica era la pareja de Sebastián – y espero que no trates de darle ventaja
-y me lo pides a mí? – rio Denise
-bueno quien es ese tal Liam – dijo una chica pelirroja
-no importa – gruño Sofia – ya, cállense, a ver, ejem… TODOS LISTOS?!
-si! – corearon los alumnos
-bien, estamos buscando un cazador, un guardián y un buscador – dijo Sofia fuerte y claro – así que esfuércense… ok, empecemos con los cazadores, arriba en equipos de tres! – Los que buscaban el puesto de cazador se amontonaron y se separaron del resto, subieron a sus escobas y ocuparon ambos lados del estadio – ahora, guardianes, cada cinco tantos cambian de lugar, ¡arriba! – los aspirantes siguieron la indicación – buscadores, háganse a un lado y esperen – dicho esto, la chica subió a su escoba
-por qué nosotros al final? – dijo un pobre chico de tercero, bastante nervioso
-porque somos los más importantes – dijo una chica azabache estirándose – vaya, si salgo victoriosa, les invito a todos una ronda de "Delicias Baker"
-imposible – rio Liam – no le puedes invitar al cocinero la comida que va a cocinar
-oh, vaya – dijo la chica
-eres el encargado, ¿no? – le dijo un chico de séptimo – sí, sí, lo recuerdo, fui de tus primeras ordenes
-bueno, no soy solo yo – dijo Liam apenado
-así que también te animas al quidditch eh? – le dijo la pelinegra – si sales victorioso, supongo que cocinaras gratis para ellos
-eso sí veo la snitch – suspiro Liam
-animo – dijo una chica de segundo – lo haremos bien
-eso, los ánimos arriba – dijo el chico de tercero, limpiándose el sudor – que salga el mejor… pero sin rencores, ¿verdad?
-sin rencores – dijo el chico de séptimo
-sí, es un juego al final – rio la pelinegra – vamos a sentarnos haya, no tengo ganas de estar parada todo el tiempo
Así lo hicieron, todos se sentaron a la orilla del estadio mientras los demás jugaban. Liam observó contento a los cazadores, y se animó, como dijo Emma, si no conseguía ser buscador, podía intentarlo al año siguiente como cazador. Sus compañeros buscadores hablaban animadamente, y Liam se unió a la conversación, que trataba sobre las ocurrencias del profesor Richard, y su inusual manera de probar las pociones. Resulto que había muchos guardianes pésimos, que de los cinco tantos, los cinco anotaban. Hasta que uno logro parar cuatro de los cinco tantos, pero el problema vino cuando Sofia puso a los cazadores oficiales del equipo a anotar. El chico no paro ni uno de Denise, ni de la chica pelirroja, así que pasaron con el siguiente. Hasta que, por fin, un chico de cuarto logro parar cuatro de los cinco tantos de la pelirroja y cinco de Denise. Después de un rato, Sofia por fin llamo a los buscadores.
-a ver, vamos a hacer un juego rápido – dijo Sofia – voy a soltar la snitch, y la tendrán que atrapar mientras los demás siguen, de acuerdo?
-de acuerdo – dijo el grupo
-bien, arriba – Sofia dio un pequeño aplauso
-suerte! – se dijeron todos mientras subían
-muy bien, a la una… a las dos… ya! – Sofia soltó la snitch, y todos se pusieron en acción
Liam siguió las prácticas de Emma, y se puso a dar vueltas por todo el campo buscando la pelotita dorada. Los demás volaron por entre los cazadores, y miraban a todos lados. Liam suspiro, se acomodó las gafas y subió más, ahí obtuvo una buena visión del campo. La chica pelinegra le siguió, y los dos se pusieron a dar vueltas como tiburones al campo. Liam escuchaba a lo lejos las palabras de ánimo de Emma, que sospechaba estaban amplificadas por magia, y se puso a pensar en que hechizo habría realizado la chica. Entre tanto, vio un pequeño destello, entre uno de los palcos. Sin tiempo que perder, Liam se lanzó contra la snitch, pero la chica pelinegra, nada tonta, lo siguió de cerca. Empezó la persecución, la snitch cambiaba de lugar rápidamente, y Liam seguía los consejos de Amanda sobre la escoba. Los demás buscadores se unieron a la persecución, por lo que se hizo un completo caos. El chico de séptimo, al intentar esquivar a un cazador, choco contra la chica de segundo, y los dos cayeron. Liam estuvo a punto de chocar con una cazadora, y, por consiguiente, con la Quaffle. Todos esos contratiempos hicieron que Liam perdiera la concentración, pero los demás no, y siguieron con la persecución. Liam se sacudió, se apartó el cabello y emprendió carrera, siguiendo a los demás. Fue entonces que la snitch empezó a subir, el chico de tercero empezó a tener dificultades con su escoba y tuvo que bajar apresuradamente. Liam y la pelinegra estaban a solo un poco de atrapar la snitch, cuando de repente empezó a bajar.
-a donde se metieron? – dijo Sofia viendo hacia el cielo
-se te perdieron de vista? – rio Emma
-a nosotras también – dijo Odette viendo a todos lados
-que? ¿Entonces? No me digas que ya no te gusta Liam – rio Emma
-claro que no – contesto Sofia – es hora de dejarlo ir, de verdad, no más Liam
-no más? – sonrió Emma
-nop, nada nadita – dijo Sofia, y empezó a notar un zumbido molesto – ugh, malditas moscas, siempre son un problema aquí arriba
-sí que lo son – suspiro Emma, pero todas se quedaron como piedra cuando la snitch se puso justo enfrente de ellas
Liam y la pelinegra bajaban rápidamente, tenían la snitch bien ubicada y no planeaban dejarla ir. Iban como balas, el cabello de ambos revoloteaba con el viento, y un silbido les llenaba los odios. Con decisión, Liam estiro el brazo, y la chica se pegó a él, los dos tenía ya la snitch de frente, era cuestión de acelerar un poco, Liam tomo la delantera, la chica lo adelanto, Liam de nuevo, y… como un destello, Liam sintió como algo duro y redondo se posaba en su mano. Liam se apartó del suelo con rapidez, subió y dio vueltas en el aire con la snitch bien en alto, dio un salto y cayo nuevamente en su escoba.
-LA TENGO! – decía contento
-vaya – decía Emma sonrojada
-qué cosas… – dijo una chica de slytherin, detrás de Emma, junto a unas amigas – y yo que venía a ver a mi hermano…
-aja, bien – dijo Sofia, recuperándose de casi caerse de su escoba – tu, pelinegra
-sí, lo sé – suspiro la chica – felicidades Baker
-nada de felicidades – gruño Sofia y se acomodó el cabello – tu, estas dentro, Baker, fuera
-pero si atrape la snitch – dijo Liam meneando la mano con la snitch
-NO ME IMPORTA! – grito Sofia – FUERA IDIOTA!
-bah – Liam tiro la snitch a un lado
-oye! – le dijo Emma a Sofia – él la atrapo, está dentro
-metete en tu equipo – gruño Sofia
-es verdad – le dijo la pelinegra – el gano
- ¡AH, YA! ESTA BIEN – dijo Sofia, molesta – LIAM, ¡VEN AQUÍ! ¡Y TU TAMBIEN PELINEGRA!
-aja? – Liam regreso con cara de cansancio
-los dos están dentro, y no me importa, van a jugar, tu – dijo apuntando a Liam – vas a jugar contra slytherin, y tu – dijo apuntando a la pelinegra – contra Hufflepuf, y luego Liam contra Ravenclaw
-pero…
-PERO NADA – grito Sofia – YA, ESTAN DENTRO DEL EQUIPO, ¡AHORA LARGUENZE!
-y cuando es el primer entrenamiento? – pregunto la pelinegra
-el 18, así que los quiero aquí, a los dos, puntuales – gruño Sofia – vayan por sus uniformes con Sebastián!
-ay, ok – dijo la chica pelinegra – vamos
-pues ya que – suspiro Liam y los dos volaron hacia Sebastián
-vaya capitana – suspiro Emma – dos buscadores, estás loca?
-diré que uno se lastimo y que juega el otro, no importa – dijo Sofia cansada
-solo quieres que juegue contra mi – gruño Emma
-pues si – dijo Sofia molesta – y espero que te gane, y rompan, y me dejes en paz con el!
-ya quisieras – dijo Emma, que empezaba a molestarse
Liam y la chica bajaron, Sebastián estaba dándole un uniforme al chico guardián. Liam desmonto de la escoba y se acercó a su amigo, que lo miro contento.
-anda! ¡Te dije que saldrías victorioso! – sonrió Sebastián
-tu hermana está loca – le dijo Liam – nos metió a los dos de buscadores
-a los dos?! – dijo Sebastián sorprendido
-sí, no sé qué pretende – suspiro la chica – en fin, nuestros uniformes
-claro – Sebastián conjuro dos uniformes – a ver, Liam Baker – dijo un breve encantamiento y el nombre de Liam quedo grabado en el uniforme, junto con el numero 5 – y tu…
-Evangelin Mercer – contesto – aunque me dicen Eva
-ok – suspiro Sebastián, volvió a conjurar el hechizo y el nombre de la chica apareció, junto con el numero 4 – felicidades a los dos, espero trabajar bien con los dos
-gracias – dijo Liam tomando su uniforme, y salió del estadio junto con Eva – bien, pues nos vemos el 18
-claro – dijo Eva montando en su escoba – por cierto, soy de sexto año, un gusto
-lo mismo – dijo Liam – pero yo soy de quinto
-bien, nos vemos luego – sonrió y salió volando
Liam dio un suspiro y camino hacia el castillo, aún que en medió del camino, Emma y Odette lo alcanzaron.
-felicidades amor! – le dijo Emma dándole un enorme abrazo
-gracias – suspiro Liam
-qué pasa? ¿No querías ganar? – rio Emma
-no – dijo Liam y negó con la cabeza – me di cuenta de que voy a competir contigo
-ah… bueno… no es como si no compitiéramos antes, ¿verdad? – dijo Emma, que tampoco había contemplado eso
-pero, si ganas, van a decir que te deje ganar, y si gano van a decir que me dejaste ganar y no quiero! – Liam se sacudió el cabello
-claro que no van a decir eso – rio Emma – no es como si todo el colegió supiera que Liam Baker es novio de la guapa capitana de Slytherin
-pero…
-tranquilo, Liam, te aseguro que no te voy a dejar ganar – sonrió Emma
-eso es bueno o malo? – dijo Odette, con un pergamino en la mano
-eh… bueno… es… normal? – dijo Emma confusa
-pues no me voy a dejar ganar – le dijo Liam – y… voy a atrapar la snitch en… dos minutos, no, en dos segundos!
-jaja, claro – rio Emma – ya veremos, mientras tanto, FELICIDADES!
-crees que pueda cambiar de posición el próximo año? – dijo Liam mientras empezaba a caminar
-sí, supongo – contesto la chica – si realmente querías ser cazador deberías de haberte anotado para eso
-bueno… tal vez – suspiro Liam
Aunque Liam no quería ningún tipo de celebración, el dormitorio entero lo felicito por entrar al equipo de quidditch. Sebastián le dijo que no se preocupara por las bludger, Jack le dijo que le tenía que enseñar a volar, Ethan le dijo que Liam les llevaría la copa de quidditch ese año, y Oliver hecho un montón de confeti de su varita. Al final, Liam sintió que se le venía el mundo encima, con tantas cosas, lo iban a terminar odiando al final del año.
Al otro día, Emma se levantó muy temprano, casi como en automático, y empezó a hacer sus actividades de capitana. Primero, organizo todo el equipo, después, reunió al resto de sus compañeros, Jake Murphy; el único cazador que quedaba del equipo original, Justin Lewis y Ezra Butler, los golpeadores, que estaban en séptimo año. Les recordó la hora a la que tenían que estar en el campo, y se fue directo al desayuno. Liam le preparo un desayuno especial a la chica, que le agradeció dejando bien limpio el plato. Las clases fueron más de lo mismo, hasta que, por fin, después de Cuidado de Criaturas Mágicas, Emma voló, literalmente, al campo de Quidditch. Mientras estaba arreglando las Quaffles, Emma escucho una voz familiar.
-ey, Emma! – dijo una voz, jovial y alegre
-eh? – Emma se levantó y vio quien se acercaba – oh! Jeremy!
-hola – dijo Jeremy Fleck, un joven alto y alegre, que era el antiguó capitán del equipo
-que haces aquí? – dijo Emma muy contenta, y le dio un abrazo al chico
-vine a ver que tal lo hacías – rio Jeremy – mírate, una capitana hecha y derecha
-jeje, gracias – Emma se sonrojo un poco – va a ser difícil encontrar alguien mejor que tu
-no, hay muchos chicos, y mucho mejores – sonrió Jeremy
-oh, por cierto, que has estado haciendo? – dijo Emma mientras lanzaba Quaffles a una canasta de Quaffles
-hemos estado jugando en los Carphillys Catapults – dijo Jeremy contento – no has leído la sección deportiva de El Profeta?
-no estoy suscrita – contesto la chica, que no era de leer noticas aburridas todos los días
-pues nos está yendo bien – conto Jeremy – logramos llegar a la semifinal este año, y no tienes idea de lo motivada que esta Nataly para el próximo torneo
-aja! – dijo Emma mirando a Jeremy – como van las cosas con Nataly?
-mejor que nunca – sonrió el chico – vivimos juntos, en un departamento pequeño del callejón Diagon, pero está bien para los dos
-y cuando va a haber boda? – rio Emma mientras sacaba la varita
-jaja, lo hemos hablado – rio Jeremy – dice que es pronto aun, pero que tal vez en unos años mas
-está bien – sonrió Emma – no pudo venir?
-no, está un poco ocupada con su segundo trabajo – contesto Jeremy – acaba de empezar en el departamento de deportes mágicos, también me ofrecieron trabajo, pero con lo que ganamos del Quidditch podemos llegar, así que generalmente la espero en casa
-eres amo de casa? – dijo Emma viendo un baúl – Accio!
-sí, se podría decir jaja – dijo Jeremy – pero estamos planeando venir a tu primer partido
-uy! – dijo Emma emocionada – que bien, me muero por verla!
-ya llegamos! – dijeron Ezra Buttler y Justin Lewis
-ah! ¡Chicos! – dijo Jeremy con una sonrisa
-Jeremy! ¡Anda! – dijo Ezra sorprendido – que bueno que estes aquí
-uy, no lo esperaba – Justin vio a Jeremy con atención – buen trabajo que estás haciendo en los Carphillys
-buenas – dijo Jake Murphy, un chico de tez oscura de sexto – oh, Jeremy
-todo el equipo eh? – rio Jeremy – aunque falta…
-Diane, si, bueno, ella no nos necesita – rio Emma
-sí, no te enteraste? ¡Fue la campeona de Hogwarts en el torneo de los tres magos! – dijo Ezra
-los juegos… si, de algo me entere – dijo Jeremy pensativo – que bien, espero verla en algún equipo la próxima temporada
-oh, Jeremy, mira esto – dijo Emma contenta – Accio! – conjuro, y en un segundo su nimbus 2001 llego a sus manos
-vaya! – dijo Jeremy sorprendido – que modelito
-no nos la habías enseñado! – dijo Jake – esto es genial, tendremos la snitch en nada
-aunque apuesto que para Jeremy eso ya no es nada – dijo Ezra – en que juegas ahora?
-barredora 16 – dijo Jeremy – nos promocionan, así que todo el equipo tiene una
-pero esas no son nada – dijo Emma orgullosa – esta preciosidad está al nivel de las saetas de fuego con el jugador adecuado, obviamente yo soy esa jugadora adecuada
-aja, si así rompiste tu anterior escoba – rio Justin
-pero está ya no tiene ese problema – sonrió Emma – y… – Emma vio a la entrada del estadio, en donde ya había gente esperando – demonios, ya es hora!
-ah sí? – Ezra vio su reloj – pues sí, seis y cinco
-bien, pues vamos a empezar, Ezra, tu anótalos y cuentas, y Jake, ten el pergamino, vean que están todos – dijo Emma extendió el pergamino de nombres
-ok, vamos – dijo Jake
-veamos que nos depara – suspiro Ezra
Mientras Emma esperaba a que llegaran todos, dejo a Jeremy hablar un rato con Justin y dio una vuelta al campo. Su vuelo era firme y suave, casi como si volara naturalmente, con una estabilidad que nunca había sentido. En las gradas vio a Liam, que se acomodó tranquilamente, así que bajo a verlo.
-hola – le dijo el chico tranquilamente
-vienes a ver a las cazadoras? – rio Emma
-tal vez – rio Liam – cómo vas?
-tranquila, aunque ahora empieza lo bueno – dijo Emma viendo a la entrada
-bueno, aquí te espero, ah, y te prepare algo por si te da hambre – Liam alzo una cajita de madera
-jeje, gracias – sonrió Emma y se sonrojo un poco – oh, Ezra me habla, voy abajo
-suerte! – dijo Liam contento
Emma bajo tranquilamente a donde estaba Ezra, que le indico que estaban todos los de la lista. La chica dejo pasar a todos, los organizo en grupo mientras leía la lista.
-ugh, no estamos buscando buscadores! – dijo mientras leía la lista – ni tampoco golpeadores!
-ah – dijeron un par de chicos desilusionados, yéndose, aunque después se les unieron más de diez
-a ver, todos, atención! – grito Emma, y los alumnos prestaron atención – los cazadores, arriba, guardianes, arriba también, van a tirar cinco tantos cada uno, en orden por favor
Dicho esto, los aspirantes empezaron a subir, aunque fue todo un desastre, porque peleaban por ver quien iba primero. Emma tuvo que poner orden, y se tardó un muy buen rato. Las pruebas empezaron y todas fueron un absoluto desastre. Los aspirantes a guardianes lograban parar Quaffles, pero por que los aspirantes a cazadores las tiraban absurdamente mal. Un chico de cuarto, que iba para cazador, intento patear la Quaffle, pero siempre se le caía, hasta que, en el quinto intento, directamente lanzo la bola, pero lo hizo tan mal que termino dándole al de atrás. Una chica de segundo, que aspiraba a guardiana, dejo pasar tres tantos, y los otros dos terminaron haciendo que cayera de su escoba. Ya para la mitad de guardianes, la calidad empezó a subir un poco, hasta un chico de segundo logro parar cuatro tantos sin mucha dificultad, y el quinto tanto entro por mera suerte del aspirante a cazador; él se emocionó de más y le presumió al de atrás, que le dio un puñetazo en la cara, así que los dos terminaron descalificados. Quedaban pocos aspirantes a cazadores, Emma ya tenía algunos contemplados, los mejor que pudo sacar, hasta que una chica de segundo logro anotar los cinco tantos, aunque Emma la anoto, quedaba por ver si eso fue a causa del guardián.
La segunda parte de la prueba comenzó, ya con los seleccionados. Las cosas se arreglaron un poco mejor, y la calidad de jugadores fue aumentando. La chica de segundo demostró un buen rendimiento, anotando tres de los cinco tantos contra un guardián de tercer año. Raine estaba ahí, se presentó con la vieja escoba de su padre, una barredora 7. La chica lo hizo bien, pero los dos últimos los fallo, debido a que tenía la vista puesta en Emma. Finalmente, Emma llamo a Jake para que tirara los cinco tantos, esa sería la prueba definitiva. El chico de segundo logro parar cuatro tantos, el cuarto lo paro justo a tiempo, y casi empata con el aspirante anterior. Aunque muchos de los aspirantes a guardianes no dieron mucho, Emma decidió darles una segunda oportunidad, organizando un pequeño juego, con Jake junto a diferentes cazadores. La chica de segundo demostró hacer buen equipo con Jake, y Raine parecía ser buena en pases largos y desviaciones. Emma por fin tomo la decisión, y la consulto un rato con los integrantes del equipo, que dieron sus puntos de vista, y al final, les dieron el visto bueno.
-bien, chica – dijo Emma acercándose a la chica de segundo, una chica de tez oscura, cabello castaño y un copete que le tapaba un poco el ojo izquierdo. El chico de segundo, que tenía el cabello negro y rebelde, estaba hablando con ella – estas dentro
-genial! ¡Lo logre Marth! – dijo la chica contenta
-felicidades! – dijo el chico
-son amigos? – Emma miro a ambos chicos
-si – respondió el chico
-ah, pues felicidades, están dentro! – sonrió Emma
-de verdad?! – dijo el chico, emocionado
-sí, el primer entrenamiento es el 17, los espero ahí, ah, bajen por sus uniformes con Jake, por favor – dijo Emma tranquilamente
-wow, de verdad lo logramos! – dijo el chico
-si te sirvió esa cabezota jaja – sonrió la chica y empezó a descender
Emma empezó a buscar a Raine, que aparentemente se había escondido, porque no la hallaba por ningún lado. Hasta que, por fin, la encontró viendo triste los aros de gol, así que Emma se acercó.
-hola – dijo llegando suavemente
-ay! – Raine se sorprendió, dio media vuelta, pero la escoba se le atasco con el aro y termino dándose un golpe en la frente – auch!
-estas bien? – dijo Emma preocupada
-sí, sí, estoy acostumbrada – dijo la pobre Raine, sobándose la frente – como estuve?
-bien – dijo Emma – pero tienes un problema con la confianza
-bueno… es que… no sabía si la escoba de papá me obedeciera bien y… como es mi primera vez participando en estas cosas… yo…
-jaja, tranquila Raine – sonrió Emma – lo discutimos, y acordamos que estarías dentro, juegas bien, haces buenos pases, pero cuando te pones nerviosa, sueltas mucho la pelota
-lo siento – dijo Raine apenada
-no te disculpes – Emma rio un poco – vamos, anímate, estas en el equipo!
-gracias – Raine bajo la mirada un momento – sé que fue porque soy la hermana de Liam, pero intentare hacerlo bien
-no, no, ya te dije que lo hiciste bien – la consoló Emma – ven, te llevare por tu uniforme
-ok – suspiro Raine
-bonita escoba, por cierto – dijo Emma mientras descendían
-era de papá – sonrió Raine – los abuelos se la compraron en segundo, pero no pudo entrar… creo que ya sé porque fue
-Annelie, supongo – suspiro Emma
-aja, debería a preguntarle a Liam por eso – dijo Raine
Las chicas bajaron, y Emma acompaño a Raine por su uniforme, aunque Emma se lo dio personalmente, porque Jake se había ido a hablar con Jeremy. Al final, Emma se quedó reordenando las Quaffles, Raine también se quedó, y Liam bajo a ayudarle.
-felicidades, de verdad – le dijo Liam a Raine mientras recogía una Quaffle
-no sé, no estoy tan segura – suspiro Raine
-ya te dije que si puedes – Emma jugueteo con una Quaffle – es más, hagamos un partido rápido, Liam y tu como cazadores y yo como guardiana, que les parece?
-ok – rio Liam – a ver si puedo entrar al equipo
-bueno – suspiro Raine
Liam uso su nueva escoba, ya que la había traído por si Raine no se acomodaba con la barredora. Subieron, y empezaron a jugar. Liam estaba más que contento de jugar como cazador, y Emma noto que lo hacía absurdamente bien, como si jugara en esa posición desde segundo año, incluso le anoto siete tantos. Raine jugo mejor, ya sin nadie viéndola y con su hermano, se divirtió y metió tres tantos. Emma no era excelente como guardián, pero lo hacía normal.
-que divertido – rio Liam dando vueltas – caray, realmente me gustaría ser cazador
-pero lo haces bien de buscador – dijo Emma cansada
-fue suerte – dijo Liam – creo que la snitch se inclinó un poco por mi lado
-bueno, no importa, si quieres jugar como cazador habla con tu otra novia – gruño Emma
-otra vez estas con eso? – suspiro Liam
-no, es que me dijo que le seguías gustando – dijo Emma molesta – deberíamos presentarle a alguien más, de verdad
-qué problema – dijo Raine – a mí me gusta una persona nada mas
-y que tal Jake? No me habías dicho la otra vez que te llamaba la atención – dijo Emma volteándose y flotando de cabeza
-supongo – Raine se encogió de hombros – pero Anne es insuperable
-que escandalo – rio Liam – una sangre pura como tu con una muggle – dijo imitando el tono de voz de la madre de Raine – que descaro, yo no te crie así!
-jajaja, claro jajaja – rio Raine – no vaya a arruinar la sangre
-que envidia – suspiro Emma volando normal – yo también quiero un amor prohibido
-lo es – dijo Liam – los buscadores de gryffindor y slytherin son pareja, que escandalo!
-jiji, si – sonrió Emma sonrojada – me encanta que lo sea
