RinMakoto. Ya la prueba llegó con ambos, Yoko va con todo para meterlos en el equipo, quien sabe si pasará algo con ellos.

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Sin más, comencemos…

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Yu y Raiden se someterían a una prueba para ver su futuro en el equipo de los Dream Monkeys, Yoko había hecho el trato con ambos de que harían cinco disparos a portería y la portera tapaba uno, estos entrarían al equipo, aunque la peli azul no estuvo del todo de acuerdo, al final decidió hacerlo simplemente porque así se libraría de todo eso de una vez.

Ambos chicos estaban alistándose poniéndose los patines para jugar, en eso, el asistente de Yoko llegó con dos palos.

- Los necesitarán.

- Gracias – Raiden lo miró fijamente al igual que Yu, aunque esta última le echó más mirada dándose cuenta de algo.

- Es un palo para zurdos… ¿cómo sabías que yo era zurda?

- E-Este…

- Supongo que debió saber porque como eres alguien que es conocida, a lo mejor es eso Kiyose-san – explicó Raiden salvando a So de una explicación difícil.

- Puede ser, con este palo no voy a perder con nadie – la peli azul miró al peli rojizo – Mochizuki, eres derecho ¿verdad?

- Soy ambidiestro, pero uso más la derecha, por lo que no tengo ningún problema – con eso, ambos entraron a la pista de patinaje en donde anduvieron un buen momento para calentar.

- ¿Por qué estoy aquí de nuevo? Se supone que lo dejé – pensaba la peli azul mientras seguía patinando.

- Hm, y justo que hoy anduvimos patinando con Keiji – ahora fue el turno de Raiden mientras que iban hacia el centro de lanzamiento, la portera sería Manaka en sustitución de Kaoruko, siendo que la peli naranja decidió hacerlo para probar a ambos.

- Muy bien, comenzaremos la tanda de disparos entre Manaka y Kiyose Yu, así que vamos a hacerlo – Yoko sonó el silbato y el primero de los disparos fue a la portería sin tiempo a la peli naranja de tocar el disco.

- Me confié, pero eres genial – Manaka dijo eso, Yu solo tomó el segundo disco siendo que fue hacia la portería y usando el palo desvió la trayectoria del disco mandándola al interior de la portería.

- Ya van dos.

- ¡Vamos! Con ese tiro no tenía chance de tomarla – decía la oji rosada riendo un poco, Yu no estaba entendiendo la actitud de Manaka, aunque Raiden, que ya había convivido tiempo con ella, sabía que esa actitud era característica de ella.

- ¡Aun no termina Mana! ¡Ánimos! – después de eso, Yu anotó el tercer y cuarto punto por lo que solo quedaba uno para definir el futuro de la peli azul, aunque Manaka seguía con su actitud positiva a pesar de todo.

- ¿Te diviertes en esto?

- Sí, es muy divertido – eso dejó callada a Yu, pero esta siguió con el disco a punto de disparar, aunque Manaka estaba siempre motivada – ¡esto no termina aún!

- ¿Eh? – esa frase hizo que el disparo de Yu no fuera del todo asertivo por lo que Manaka lo logró desviar, Yoko asintió, habían ganado, lo que significa que la peli azul se unía al equipo.

- Veo que no golpeaste con todo ese último disparo – susurró Raiden al lado de la chica la cual solo sonrió por lo bajo.

- Ahora te toca a ti, espero que no me decepciones ya que te admiro Mochizuki-san – Yu dijo eso mientras que Manaka le hablaba.

- Kiyose-san, nuestro equipo será más fuerte con tus disparos porque te unirás al equipo ¿verdad?

- Cumpliré mi promesa, por lo que me uniré al equipo de Dream Monkeys – eso alegró a las demás ya que tenían a una jugadora de gran nivel como lo era Yu.

- Muy bien, ahora te toca a ti Mochizuki Raiden – el peli rojizo fue a buscar los discos y los colocó en posición.

- Sin arrepentimientos – Raiden comenzó con unos movimientos extraños, aunque cuando menos acordaron, el disco salió volando hasta que se colocó dentro de la portería – va uno.

- ¿Cuándo lo metiste?

- No me lo creo, el disparo que hizo fue tan fuerte que no me di cuenta – susurró Yu – realmente por eso lo admiré bastante, él es el jugador que me hizo querer más el hockey cuando estaba más joven.

- ¿Kiyose-san?

- ¡Aquí vamos Manaka-san! – los siguientes dos disparos fueron al interior del arco dándole tres puntos al peli rojizo.

- Los tiros de él tienen potencia, no solo eso, cuando están por llegar al portero, agarran una especie de curvatura la cual confunde mucho al portero, pero es difícil ver que hará – susurró Yoko para sí misma, aunque Raiden volvió a hacer lo mismo desviándola hacia la derecha haciendo creer a Manaka que el disco iría hacia otro lado.

- ¡Increíble Mochizuki-kun, lo haces tan bien!

- Gracias, aunque tengo que decir que estoy algo oxidado, no jugué en un poco más de un año por lo que he perdido algo de fuerza, aunque con el patinaje lo he retomado por las clases de mi universidad.

- ¿En serio?

- Sí, en la universidad a la que asisto hay clases de deportes y hay una pista de patinaje, pero bueno, terminemos con esto de una vez.

- ¡Adelante Mochizuki-kun, haré lo mejor que pueda! – la peli naranja habló, aunque a diferencia de Yu, Raiden no se contuvo, pero esta vez no hizo un disparo potente, de hecho, bajó la velocidad por lo que pensaron que el peli rojizo se estaba rindiendo, de hecho, Manaka logró tomar el disco.

- No me lo creo… mi hermano lo agarró.

- ¡Lo hizo! – las chicas estaban celebrando, pero Yu no estaba así ni tampoco Yoko, ambas estaban serias – ¿Qué ocurre?

- Anotó.

- ¿Qué?

- Miren bien donde tiene el disco Mizusawa-san – las demás miraron más detalladamente notando como es que justamente el disco estaba metido adentro, aunque no había tocado la red, sobrepasó la línea por lo que era anotación para el peli rojizo.

- Vaya, casi la atrapo – Manaka miró a su amigo – ¿lo hiciste a propósito Mochizuki-kun?

- Sí, no disparar con fuerza, pero con la ilusión de que el jugador la va a atrapar, solo para darse cuenta de que el disco ha sobrepasado la zona de anotación – sonrió el joven a lo que las demás estaban sorprendidas por eso, Yoko del mismo modo.

- Bueno, contigo no será igual, pero soy alguien de palabra, eres libre de hacer lo que desees, pero de igual forma no me daré por vencida hasta que entres al equipo, no quiero que un talento como el tuyo se desperdicie.

- Se lo agradezco, pero de igual forma estoy así, aunque, volveré algunos días aquí para ver como siguen las cosas, digo, si se puede.

- ¡Por supuesto! – exclamó la entrenadora, su asistente solo suspiró sabiendo que esto no era el final de esto, a la salida, Yu se topó con Raiden el cual estaba subiéndose en su moto.

- No te contuviste a la hora de enfrentarte a la prueba de Matsunaga-san ¿verdad? – preguntó la peli azul.

- Dije que iría con todo. Dime Kiyose-san, ¿Por qué fallaste ese último disparo?

- La verdad es que Manaka-san me tomó desprevenida cuando dijo que esto aún no había terminado, era algo que yo me planteé cuando dejé el hockey, siendo redundante, era algo que no quería volver a retomar y solo enfocarme a mi vida escolar, no obstante, realmente Matsunaga-sanes alguien que insiste hasta que aceptes, lo logró conmigo, ahora solo me queda esperar a ver cómo me va con este nuevo equipo.

- Te aseguro que si la pasas bien con ellas, el equipo te resultará bastante llevadero y podrán hacer grandes cosas – sonrió el peli rojizo, Yu solo quedó sorprendida por eso – oye, si quieres te llevo a tu casa.

- ¿A mi casa? Pero si tú no…

- Sé que no conozco tu casa, pero si quieres te llevo, solo que me des indicaciones.

- B-Bueno… está bien, confío en ti – la peli azul se subió en el asiento trasero, Raiden encendió el motor del vehículo, de hecho, justo en ese momento las demás salieron junto con Yoko y So y notaron como el peli rojizo estaba por irse con Yu abordó.

- ¿A dónde van esos dos?

- Parece de esas escapadas de películas de romance – comentó Kaoruko la cual sonrió, ambos se fueron del sitio, con estos, Raiden estaba siguiendo las indicaciones que le daba Yu y unos minutos después llegaron a la casa de la chica.

- Ya estamos aquí.

- G-Gracias – la joven bajó de la moto y justo la abuela salió a recibir a la peli azul.

- Bienvenida Yu… oh, ¿y él quién es? ¿Es tu novio?

- N-No es mi novio abuela, solo es que él es un jugador de hockey de gran nivel y me trajo aquí ya que está en el equipo en el que estaré.

- ¿Entraste a un equipo de hockey? Me alegro que hayas vuelto al deporte que tanto quieres Yu, la verdad es que me había preocupado con que ya no harías nada de eso.

- ¿En serio abuela? – la peli azul estaba preocupada por eso, no sabía que el hecho de que haya dejado el hockey había puesto triste a su abuela, pero ahora que ya había encontrado un nuevo equipo, podría estar feliz – lo siento.

- No te preocupes, estoy feliz por eso.

- Bueno, me retiro, pasen buenas tardes – el peli rojizo se fue del lugar, la abuela de Yu se río un poco por eso, no obstante, la peli azul entró a su casa.

Durante los siguientes días comenzó la adición de Yu a entrenar con las demás, de hecho, cuando menos acordó, ya tenían un uniforme listo para ella.

- Aquí tienes – la entrenadora le dio la vestimenta deportiva, Yu logró verlo y notó algo – supongo que te diste cuenta Yu, ese número es familiar ¿no?

- Sí, es el 33, el mismo que usaba cuando estaba en Snow White.

- Te gusta ese número ¿no? Pues ya con eso eres oficialmente miembro del equipo, por lo que ve alistándote y recuerda ver la sesión de entrenamiento que hemos hecho con las chicas este último tiempo – la peli azul fue al camerino a ponerse el uniforme y además miró los entrenamientos que usaban las chicas, aunque eso se le hacía raro.

- ¿Qué mierda es esto? – Yu se unió al entrenamiento minutos después, las demás patinaron por un rato hasta que finalmente fue presentada ante las demás chicas del equipo como la nueva jugadora del equipo de los Dream Monkeys.

- No me lo creo, ella es…

- ¡Sí es ella!

- Soy Kiyose Yu, anteriormente jugué en Snow White de Kushiro, así que espero que nos llevemos bien en el equipo.

- ¡Y nosotras esperamos eso de ti! – las demás aceptaron bastante bien a Yu siendo aplaudida.

- Bueno, vamos a seguir con los entrenamientos, por lo que espero que, con esto, miren que nuestra fuerza se ha multiplicado y podamos competir por el campeonato de Japón y llegar a la división A – las demás asintieron por lo que ya todo el equipo completo comenzó a entrenar, más tarde ese día, Manaka decidió llevar a Yu a su casa junto con sus demás amigas, esto para que se hicieran más amigas, no obstante, la peli azul se topó con tremenda sorpresa cuando llegaron.

- ¿Abuela?

- Vaya, hola Yu – la abuela de la peli azul estaba hablando con la abuela de las hermanas Mizusawa.

- ¿Qué haces aquí?

- Yukino y yo éramos amigas en la escuela.

- Sí, qué tiempos aquellos.

- De hecho, Yu, cuando dijiste que pasarías por aquí, decidí hacer lo mismo.

- Vaya, si somos amigas y nuestras abuelas también lo son, ¡eso significa que estábamos destinadas a hacerlo desde el comienzo de nuestras vidas!

- No digas esas cosas.

- Una amiga de otras amigas hace que todas seamos amigas.

- Oye, eso no lo dice nadie.

- Hermana, tu siempre y tus cosas – con eso, las chicas decidieron ir la habitación de Manaka, aunque en el pasillo, Yu se sorprendió al encontrarse con alguien que venía del baño.

- Oh, Mochizuki-kun, ¿terminaste de limpiar los baños?

- Sí, es fácil hacerlo por lo que no tardo mucho.

- Ayudas más que mi hermana – susurró Ayaka, aunque la peli naranja logró escucharla.

- ¡Ayaka!

- ¿Qué hace él aquí? – preguntó Yu confundida.

- Hola Kiyose-san.

- Mochizuki-san, ¿Qué haces aquí?

- Aquí estoy viviendo por mientras voy a la universidad – eso sorprendió a Yu la cual no tenía idea de que el jugador que admiraba viviera bajo el mismo techo que dos de sus compañeras de equipo.

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Continuará…