El Redentor 777. Los gemelos son fáciles de confundir, al menos esas dos los reconocen con el color de los ojos y sí, ahora se viene el juego.

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RinMakoto. Ryo y Ren mantienen una relación secreta, solo es cuestión de tiempo para Sumire y Ran, quien sabe y sí, vamos al partido contra Seijo.

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Sin más, comencemos…

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Ese sábado las chicas se levantaron temprano para ir en uno de los buses de la academia el cual era conducido por Fujii, no solo eso, los chicos también se habían levantado temprano para acompañar a las chicas.

- ¿Por qué Oomura-san y Yamazaki-san vienen del mismo modo? – preguntó la maestra mirando a Raito y Shiragiku, aunque la peli negra se sonrojó por eso, el peli rojizo se puso algo serio.

- Me la encontré cuando veníamos, ¿hay algo raro?

- N-No, no se preocupen – dijo la maestra ya que recordó que no debía molestar a Raito por ocurrido en el campamento.

- Dejando eso a un lado, vamos a irnos entonces – exclamó Rei la cual entró con Ángel y los demás también lo hicieron.

El bus sin más arrancó, cabe decir que estarían en unas 3 horas en la ciudad de Seijo, sitio en el que jugarían con el equipo de la academia de ese lugar con el mismo nombre.

Durante el viaje, como el bus poseía un televisor en su interior, pusieron una película, aunque por mayoría se votó por la película de El Conjuro 3, algunas chicas estaban aterradas con esa idea, pero tuvieron que aferrarse a los chicos a su lado.

Aunque las cosas pasaron volando viendo la película ya que cuando menso acordaron, iban llegando a la ciudad.

- ¡Llegamos!

- ¡Hasta que por fin! – dijeron los dos gemelos Hasegawa.

- Lo mismo digo, se me durmieron las petacas – dijo Efraín.

- Al final llegamos, así que vayamos bajando, apuesto que habrá que entrenar un poco antes del juego – dijo Fujii y sin más, el equipo entero bajó del bus y se dirigieron a la academia Seijo la cual estaba con los campos de entrenamiento abiertos.

- Guau, realmente es una academia bastante grande.

- Y muy acomodada por lo que miro.

- Sensei, ¿usted ya conocía aquí?

- Sí, he venido unas cuantas veces a ver algunos juegos de Seijo, son realmente buenos.

- Así es – habló Yoshino – averigüé sobre el equipo y son buenas jugadoras, en especial su pitcher y capitana del equipo, Sayaka Jinguji.

- Creo que escuché de ella también – dijo Rentaro – supe que fueron uno de los clubes más laureados de clubes femeninos de béisbol, aunque hubo un escándalo con un entrenador y el club fue cerrado hasta que ella lo abrió de nuevo.

- Parece que tenemos un dúo de expertos – dijo Ibuki riendo al lado de su hermana la cual se sonrojó ya que sabía que Ibuki lo decía por los sentimientos que tenía la manager por el peli chocolate.

- Puede ser que sea así – Risa río a un lado mientras Rei solo negó con la cabeza.

- Vamos entonces – el grupo entero llegó a las instalaciones en el ingresaron acompañados de los vigilantes los cuales estaban enterados sobre el juego, los chicos sin más se fueron hacia las gradas a observar el juego.

Unos minutos después, estaban entrenando las chicas, aunque también salieron las de Seijo comandadas por una chica de cabello ceniza la cual se miraba algo seria.

- ¿Ella es la capitana?

- Sí, Sayaka Jinguji – Yoshino fue la que habló – tiene un lanzamiento bastante fuerte y toma unas curvas que te toma por sorpresa cuando está cerca del bate.

- Yomi lo contrarrestará, su lanzamiento hará que ella no tenga oportunidad – dijo Ryo a lo que solo recibió la mirada dura de Fujii.

- Kawasaki-san, no estés tan segura, recuerda que no solo Takeda-san es la que debe hacer todo lo importante, ustedes también deben hacerlo – la maestra miró a las demás – recuerden que son un equipo y deben dar lo mejor de ustedes.

- Bueno, eso me quita peso de encima – río la castaña, aunque sintió como una mano se posaba en su hombro - ¿eh?

- Takeda-san, recuerda que, aunque haya dicho eso, tu lanzamiento es lo más fuete que tenemos, así que no vayas a arruinar nada tampoco.

- S-Sí.

- Yomi-chan – suspiró Tamaki con su mejor amiga la cual solo se calmó de que no tuviera que hacer que sufrir la ira de Fujii.

Unos minutos después de los calentamientos, las chicas fueron a cambiarse al igual que las locales y pasado un tiempo, aparecieron listas para el juego. La grada del equipo de Seijo tenía varias alumnas apoyando.

- ¿Cómo crees que les vaya Tomocchi? – preguntó una castaña de ojos azules.

- Jinguji-san ha entrenado mucho por lo que creo que le irá bien – respondió otra chica de cabello negro y ojos verdes – ojalá hubieran venido las demás ¿no lo crees Tsubasa?

- Sí.

- Preséntense capitanas.

- Sayaka Jinguji, capitana del equipo femenino de Seijo.

- Rei Okada, capitana del club de béisbol de la academia Shin Koshigaya.

- ¡A jugar! – los jueces hicieron el sorteo y al final Rei fue la que salió escogida y decidió ir a batear primero, por lo que las locales solo se fueron al jardín.

- Bien hecho Okada-san, si atacamos primero podemos ver cómo es que Jinguji-san puede atacar.

- Bueno, entonces iré…

- No Yomi, iré yo primero – dijo Ibuki tomando el bate que estaba teniendo Yomi – lo siento.

- No soy mala bateando, simplemente he entrenado más lanzando.

- Yomi, eso quiere decir que no puedes batear – dijo Shiragiku la cual solo fue peor para la castaña.

- Haz un buen trabajo Ibuki – dijo Risa a lo que la rubia solo asintió y sin más se fue al montículo de bateo en el que miró fijo a la peli ceniza.

- Realmente es aterradora si la miras desde aquí, pero del mismo modo no me arrepentiré – dijo en voz baja la rubia. En eso, Sayaka solo lanzó la pelota e Ibuki creyó que sería fácil batearla, no fue hasta que, llegando cerca de ella, esta agarró una parábola por debajo del bate de Ibuki llegando al guante de Hana Makino, la cátcher - ¿Qué?

- ¿Y eso?

- No por nada es de las mejores pitchers del país – dijo Yoshino llamando la atención de las demás – Realmente es genial verla de cerca.

- Y ahí va otro – Ibuki recibido el segundo strike por lo que solo suspiró algo molesta.

- Es buena – Sayaka lanzó de nuevo la pelota e Ibuki intentó hacer un tiro de seguridad, cosa que pudo, así que corrió lo más rápido que pudo a la primera base.

- ¡A base! – las jugadoras actuaron rápido y antes de que la gemela llegara a base, la pelota llegó a la jugadora de Seijo.

- ¡Out!

- Estuvo cerca – dijo Rentaro mirando a Ibuki la cual solo volvió a la banca con las demás.

- Pareces preocupado por ella – bromeó Kenji mirando al peli chocolate el cual solo se sonrojó un poco por eso – no será que…

- Pues acertaste Kenji – dijo Jiro para horror de Rentaro – resulta que a nuestro gordito le gusta Ibuki-san.

- ¡Que no estoy gordo retrasado mental!

- Eso si es sorpresa – dijo Ángel a un lado – por el modo en que se llevan con las gemelas, pensé que la que te gustaría sería la otra.

- ¿Yoshino-san?

- Sí, como ambos son expertos en deportes, arman estrategias y, además, parece que le llamas la atención.

- Solo debe ser tu imaginación, si la que le gusta a Yoshino-san es Jiro – ahora las miradas se dirigieron al peli limón.

- Creo que tanto tiempo de convivir con las chicas nos ha acercado a ellas – con eso, los demás solo rieron un poco.

- ¡Ánimo capitana! ¡Hazlo bien! – las demás miraban a Rei la cual era la siguiente que se acercaba a batear.

- ¡Dale Rei! ¡Confío en ti! – el nipo-hondureño alertaba a la peli morada la cual solo sonrió sabiendo que tenía la confianza y apoyo de su amado. La capitana dejó pasar el primer lanzamiento, ya el segundo logró conectarlo y mandarla algo lejos, aunque no fue home run, este fue a una de las esquinas lo que le permitió a Rei llegar a la primera base.

- ¡Bien Rei!

- ¡Hurra capitana!

- ¡Vamos adelante!

- Tenemos jugadora en base, así que necesitamos seguir a este paso – Yoshino miró a una de sus amigas - ¿lista Nozomi-chan?

- No tienes ni que decirlo Yoshino – la chica fue directo a la zona de bateo y solo suspiró, aunque se fijó un momento en las gradas y notó como es que Seiya estaba alzándole los pulgares en alto en forma de alentarla, cosa que ella solo sonrió un poco.

- ¿Y eso Seiya? – preguntó Efraín – es la primera vez que miro a esa chica sonreírle a uno de nosotros de ese modo.

- Nakamura-san es alguien genial, puede ser seria y eso, pero realmente tiene un buen corazón – decía el castaño lo que llamó la atención de los demás.

- Creo que solo batearé de la forma normal a la que hago, no es como si tuviera que hacer lo mismo que hice en el torneo, pero… - Nozomi miró a Yoshino – lo hice por ella, pero ahora puedo mostrarlo de nuevo, aunque sea solo una vez.

- ¿De qué estará hablando Nozomi? – preguntó Sumire.

- Ni idea.

- ¡Mándala hasta el Planeta de Kaio-sama! – exclamó Seiya a lo que Nozomi solo río un poco, pero eso la puso más seria y lista para batear. La pitcher de Seijo lanzó la pelota por lo que Nozomi solo agarró con más fuerza la pelota y logró conectarla con el bate, por lo que el esférico salió disparado hacia los jardines, aunque fue más de lo que esperaban ya que pasó la valla.

- ¡Un home run! – exclamó Tamaki y las demás solo se miraron como es que la pelota llegó hasta la zona del home run, por lo que Nozomi y Rei comandaron las primeras dos carreras dándoles una pequeña ventaja momentánea.

- ¡Bien hecho Nakamura-san! – exclamó el castaño de ojos morados celebrando la carrera de la rubia.

- Eso les da una ventaja buena, dos carreras, aunque no se deben confiar – dijo Álvaro – así pasa cuando en el futbol español te confías, no hay que hacerlo.

- Bien hecho Nakamura-san, ese fue un bateo bastante fuerte – dijo Fujii, aunque fue abrazada con fuerza por Yoshino.

- ¡Increíble Nozomi-chan! ¡Hiciste algo genial! Eso me recuerda a cuando bateaste en el torneo y lo hiciste por mí.

- Sí, creo que no era momento de guardarme nada – dijo simplemente la rubia.

- Voy allá entonces – Ryo fue la siguiente en intentar batear, aunque no le fue del todo bien ya que terminó ponchada y es que los lanzamientos de Sayaka fueron bastante fuertes.

- No te preocupes Ryo – susurró Ren mirando a su novia la cual solo volteó de reojo a verlo, aunque esta disimuló un poco eso.

- ¡Yo salvaré esta carrera entonces! – Yomi tomó el bate y sin más se fue a la zona para enfrentarse contra Sayaka la cual seguía de igual modo, seria y mirando a la siguiente bateadora.

- No sé porque, pero esa chica me recuerda a Arihara-san, pero con más pecho… ok, no sé de donde salió eso, pero de igual modo no me dejaré intimidar.

- Realmente es alguien seria – río la castaña mirando a la pitcher.

- ¡Dale Yomi! ¡No te desanimes! – Kenji animaba a su amante la cual solo sonrió por eso.

- Lo haré, no te defraudaré Kenji-kun ni a las demás – pitcher contra pitcher mirándose fijamente, en eso, la peli ceniza lanzó la pelota y la pitcher de Shin Koshigaya intentó darle, aunque se fue al guante de Makino.

- Jinguji-san es buen lanzando.

- Pobre Yomi-chan, creo que la ponchará por eso – dijo Tamaki.

- No creo que debas decir eso Tamaki – habló la campeona de kendo – apuesto que Yomi hará…

- ¡Strike tres! ¡Ponchada! ¡Cambio!

- Lo siento, realmente no podía ver el movimiento de la pelota de Jinguji-san – se disculpó la castaña.

- No te preocupes, ahora tendrás que mostrar tu lanzamiento estrellas Takeda-san, así que no nos decepciones.

- ¡No lo haré!

- Bien, entonces saben lo que tienen que hacer – Fujii miró a sus alumnas las cuales asintieron y todas, a excepción de Yoshino, fueron a sus respectivas posiciones.

- ¡Comencemos entonces!

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Continuará…