My Family
Maratón 2/2
En la Sala de Menesteres
—¿Pero qué carajos fue eso?
—No tengo idea, Al—la castaña miró a su hermano— ¿Qué quisiste decirle a Dumbledore con lo de la Varita de Sauco?
El rubio, una vez que entraron, se quitó enérgicamente la capa tirándola lejos con la ira quemándole las venas.
Pero ahora, mientras su familia estaba exigiendo explicaciones, se encontraba caminando de un lado a otro; pasando sus manos por sus cabellos y cara, intentando disipar un poco de frustración, porque el enojo fue reemplazado por temor al haber sido tan impulsivo.
" No soy un maldito Gryffindor"-gruñó en su mente.
—No viene al caso, pero creo que lo hice enojar aún más y…
—¿Enojarse? —Espetó su otra hermana— Scorpius ¡Dumbledore está loco de ira! no sabemos de lo que es capaz. Mamá nos advirtió de que nunca fuéramos de frente con él sino queríamos amanecer con un cuchillo clavado en nuestra espalda — Se acercó a su hermano buscando sus ojos—. Acabas de desafiarlo abiertamente, Scorpius. Necesitamos estar preparados para cualquier cosa, así que dinos ¿Cuál es el juego y sus reglas? —Eso causó que el rubio sonriera.
" Esta es mi hermana, siempre siendo nuestro salvavidas, la versión evolucionada de mamá"
—¿Quieres saber cuáles son las reglas para romperlas en busca de una ventaja, hermana? —Ella sonrió victoriosa— Eso es muy Slytherin de tu parte, pero está bien—Miró a todos en la habitación—. Dumbledore se dio cuenta que está perdiendo el control, pero creo que lo que más le molesta, es no saber quién es el que sabe todos sus secretos en este tiempo
—¿Crees que aún no sabe del otro doble espía? —Preguntó su cuñado
—No, estoy seguro de que no lo sabe. Es más, creo que el verdadero espía será la última opción que contemple, a menos que otra vez alguno suelte más de lo que debe en su presentación —Entrecerró los ojos al mirar a Pandora y a cierto pelirrojo—. Por cierto, George lo que pasó allá…
—Lo sé Scor, pero no pude contenerme y cuando me di cuenta ya había lanzado el hechizo. Sin embargo, y creo que hablo por más de uno cuando digo que controlarnos será difícil, más de lo que creíamos. Creo que la familia de mi padre todavía no dijo ni la mitad de lo que dirán y dudo que mejore, al contrario, creo que cada vez serán peores los comentarios e insultos.
—Pienso igual —soltó con voz soñadora Pandora—, sobre todo Ron Weasley. Por eso creo que deberían presentarse algunas de las comadrejas, para así mostrarles sus defectos y dejar en evidencia que no son tan honorables como quieren aparentar, o Victoire también podría ser una buena opción, dado lo del ataque a su padre — La mencionada asintió de mala gana.
—Está bien—La frustración estaba impregnada en su voz—. Sólo intenten controlarse—Varias cejas se alzaron y sus hermanos se rieron.
—Dijo el hipócrita que desafió y amenazó explícitamente al director—Habló su hermano mayor.
—Orión…
—No me vengas con eso, Hyperion—Se burló al decir su nombre—. Conmigo no funciona esa voz de "Yo soy la autoridad". No entremos en una discusión que sabemos que ambos no queremos, somos hermanos, que no se te olvide.
—No lo hago y espero que tú tampoco.
—¡Basta los dos! ¡Son hermanos por el amor de Salazar! Nadie más atacará a alguien o si lo hacen lo resolveremos, pero tú…—Señaló a Scorpius— No sé qué rayos te pasa, pero los cuatro aquí somos iguales, así que baja de tu trono y busca la forma de adelantarte a lo que ese viejo planee hacer.
—Todavía no aclaró lo de la Varita de Sauco —Recordó la castaña y todos volvieron a mirar al rubio, quién soltó un suspiro, colocando sus manos en la cadera.
—Al ser una reliquia de la muerte, la varita no está atada al tiempo en sí, dado que es una extensión de la mismísima muerte—Nadie entendía nada, excepto los otros portadores de las reliquias.
—¿Quieres decir que estás sin varita? —El rubio asintió.
—Fue una posibilidad que contemplamos con mamá, pero sólo se confirmó al llegar y darme cuenta de que no tenía la varita conmigo.
—Pero la piedra está en mi anillo—mostró la peliblanca— y Ly…. —Miró a su hermana quien asintió.
—Al y yo tenemos la capa —Confirmó con un asentimiento, mientras se cruzaba de brazos.
—No es lo mismo según mamá. La maldición que tiene la varita, que hace que su portador busque el poder, la hace única, siendo la más poderosa de las tres reliquias. Admito que no entendí ni la mitad de lo que mamá me explicó, pero lo que sé, es que existía una posibilidad de que me encontrara sin varita al llegar, que es lo que pasó.
—¿Y eso qué significa? —Su hermana se talló la cara, invocando toda su paciencia ante la imprudencia de Scor.
—Que la varita está en conflicto—Habló por primera vez Alex, en un intento de salvar a su amigo de una muerte segura—. Scor sería capaz de convocarla con un accio y no sólo eso, sino que Dumbledore no podrá levantarla contra él o al menos no responderá con la misma fuerza que comúnmente lo hace.
—¿Realmente lo desafiaste bajo suposiciones que no entiendes del todo? —Lo regaño la peliblanca, recordándole al rubio a su madre, por lo que bajo la mirada avergonzado—No lo puedo creer—Soltó exasperada, levantando las manos
—Si lo sé, fue impulsivo.
—¡Claro que no! — Cororeó con sarcasmo su familia y él se sonrojó
—Pero consideren el lado bueno, tal vez esté más concentrado en investigar sobre eso, que interponerse en nuestros planes.
—Ruega a Merlín que así sea—Scor tragó notablemente al ver cómo lo miraban esos ojos grises— y necesito ver tus recuerdos de esa conversación con mamá, a ver si lo resolvemos—Él se dio cuenta de que no era una petición—. Todavía no puedo creer que ella haya considerado prudente revelar algo tan importante únicamente a ti, sabiendo como eres—Tomó una respiración para calmarse—. Mientras, creo que los que ya se presentaron deberían buscar a nuestras familias y ver cómo van las cosas, no olvidemos que tenemos que evitar que hagan algo estúpido.
Todos respiraron profundamente, en un intento de contener la risa al ver como la melliza menor se parecía a su madre al regañar a su hermano mayor, pero asintieron reconociendo la orden, al mismo tiempo que los que ya se habían presentado se disponían en ir en busca de sus familias, mientras los demás encapuchados se dispersaron por la sala.
—Al—El azabache se detuvo—, creo que deberías hablar con él
—Pero todavía no me presentaré
—Lo sé y no hace falta que te vea o sepa quién eres. Estoy segura de que estará con la abuela Cissa y Andrómeda, ellas evitarían que él indague de más.
—¿Tienes alguna idea de lo que debo decirle?
—Sí, de hecho, creo saber exactamente lo que lo hará entender—Los ojos esmeraldas se abrieron en comprensión.
—Está bien, vamos
─: ·:°:◦:··:◦:°:· :─
En el Lago Negro
—¿Se puede?
—Claro Cissa, supongo que ya se pusieron al día ustedes dos—dijo al verla llegar con su otra prima.
—Creemos que ya hemos perdido demasiado tiempo—Comentó la castaña, mientras ambas hermanas Black se sentaban en el césped.
—Supongo que debo agradecerte por salvarme la vida Cissa. Sé que no soy muy bueno en esas cosas de las disculpas pe…
—No tienes que decir nada, Siri. Aunque me encantaría atribuirme el crédito de que continúes con vida y, claramente, si tuviera el poder para hacerlo lo hubiera hecho…no fui yo quien pidió y evitó que Bella te matara esa noche en el Ministerio —Eso hizo que tanto Andrómeda como Sirius abrieran los ojos desmesuradamente, antes de mirarse entre sí y nuevamente a la rubia.
—Pero sí no fuiste tú…
—Hay muchas cosas que no son lo que parecen—Dijo una voz misteriosa detrás del grupo haciendo que los tres Black voltearan a ver de dónde provenía—. Sé que es difícil abuela Cissy, pero espero que no digas nada más sobre… ya sabes—La rubia asintió
—¿Eres el hijo de Draco? —El chico negó con la cabeza, haciendo que Narcissa agachara la suya —Entiendo, al parecer tendré muchos nietos que en realidad no lo son—Él encapuchado ladeo la cabeza.
—¿Es eso un problema? —La rubia negó.
—No, claro que no. Solamente esperaba que después de todo esto mi hijo fuera feliz.
—Lo será—Prometió—. Todos ustedes, y también por eso estoy aquí, aunque no me haya presentado.
—Así que no nos dirás quién eres—Confirmó el ex merodeador
—No, pero creemos que muchas cosas se salieron de control allá dentro. Después de todo iba a ser yo quién te explicara lo ocurrido durante la guerra, tío Sirius.
—Control de daños—Susurró la mayor de las hermanas, haciendo reír al encapuchado—. Otro Slytherin.
—Puede ser—Dijo divertido—. Sin embargo, de lo que no hay duda es de que, aunque sus padres no lo notaron, es una digna Black, Señora Tonks.
—Sabes quién soy, pero no existe confianza—Entrecerró los ojos—. Morí antes de que nacieras — El azabache soltó un bufido.
—Al parecer esto será más difícil de lo pensé. Nadie me advirtió que eran tan astutas.
—¿Alguien podría explicarme qué está pasando?
—Gryffindor—Dijeron al unísono, poniendo los ojos en blanco, las tres serpientes. Haciendo que el hombre frunciera el ceño bastante ofendido.
—Pero tienes razón, después de todo vine para hablar contigo—Dijo sentándose al lado del Sirius—. Aunque antes—Hizo una pausa y volvió la vista hacia su "abuela"—. Podrías avisar a todos los que saben el secreto que no se preocupen, todo está controlado.
—Eso es lo opuesto a lo que acabas de asumir—Cuestionó la rubia levantando una de sus perfectas cejas.
—Lo ocurrido no fue de acuerdo al plan—Reconoció el encapuchado—, pero sabemos cómo arreglarlo. Sin embargo, si alguno de ustedes comienza a planear algo a nuestras espaldas, como sabemos que querrán hacer, puede que nos compliquen aún más las cosas.
—Se los diré, pero no sé si la conoces…costará que confié
—Lo sé, pero si existe alguien que puede convencerla de esperar, es alguno de ustedes tres.
—Ayudaría el que se presentará su hija.
Tras esas palabras, los otros dos Black entendieron de quién estaban hablando, lo que hizo reír al joven. Sin embargo, Sirius consideraba que estaba en un error, porque no creía posible que existiera un mundo donde los Malfoy hablaran o fueran cercanos a una nacida de muggles.
—Manera muy astuta de soltar información, abuela —Se burló—. Pero no será posible, ella no puede presentarse aún, ni sus hermanos—aclaró al ver que la mujer iba a replicar—. Eso sí sería un caos.
—Así que tiene más de un hijo—Era una observación, no una pregunta, por lo que el encapuchado no emitió palabra, ni realizó movimiento alguno — y se presentarán, por último—. Otra confirmación que el joven no se molestó en secundar o negar—. Haré lo que pueda—soltó algo rendida la rubia, mientras se levantaba y elegantemente quitaba el resto de césped de su túnica.
—Señora Malfoy—la nombrada lo miró—, en caso de que no pueda convencerla, hágamelo saber.
—No sé quién eres ¿Cómo podré encontrarte?
—Únicamente acérquese nuestra mesa y diga "Merak" —La rubia se tensó y lo miró atónita—. No importa que yo no esté, alguien de nuestra familia lo entenderá y no importa quien se acerque, podrá explicarle con toda confianza lo que sucedió —Tras un asentimiento y con su característica máscara de indiferencia en su lugar, Narcissa se fue a buscar a su familia.
—¿Qué fue todo eso?
—No importa—Dijo, restándole importancia al asunto, antes de mirar a Andrómeda—. Necesito su opinión acerca de todo lo que ha escuchado, antes de decidir si puede saber lo que vine a explicarle a Sirius.
—No viviré demasiado pequeño, no creo que importe
—Buscamos salvarla, Señora Tonks. Pero entenderá que las cosas no son como la mayoría espera.
—¿Por qué simplemente no haces la pregunta? Ambos sabemos lo que quieres saber.
—Perspicaz…Dígame Señora Tonks, en caso de sobrevivir ¿A qué bando apoyaría durante la tercera guerra mágica?
—Estaría con mi familia— Sentenció—, pero… Eso no significa mi familia por sangre. Creo que eso quedó más que claro el día que deje a todos atrás para estar con Ted —El chico asintió.
—Entonces puede quedarse, después de todo creo que ya sabe a quién apoya su verdadera familia en el futuro —Ella asintió, mientras el chico volteaba a ver a Sirius—. Como la Señora Malfoy dijo, fue otra persona la que te salvó la vida, pero cuando la descubras en vez de agradecerle, intentarás que la juzguen por traición —Andrómeda jadeó, tapándose la boca con ambas manos, mientras Sirius lo miraba enfermo.
—¿Por qué?
—Porque creías que Harry Potter era la única familia que te quedaba, a pesar de que muchos aún te amaban, y aunque ella lo salvo, pensaste que en realidad buscaba poder o salvar a personas que no merecían ser salvadas. Sin embargo, todo era a causa de la culpa que sentías, por eso no querías creer o ver que existía otra forma de hacer las cosas que no fuera como las dictaba Dumbledore. Hasta te alejaste de Teddy por el dolor que sentías al verlo, dado su gran parecido con Remus —Sirius se vio avergonzado
++Ella te hizo hacer un pacto inquebrantable antes de contarte por qué hizo lo que hizo. La dejaste ir justificándola como "una niña que fue manipulada para tomar medidas desesperadas", lo que es lo más alejado de la realidad que existe. Ella fue la que lo planeó todo y logró que todos estén donde ella quería que estuvieran, cuando ella lo necesitaba y haciendo lo que ella esperaba. La ventaja fue que, a diferencia de Dumbledore o Voldemort, ella sinceramente lo hizo para proteger a los que amaba, por más que en el proceso se manchará las manos con sangre y prácticamente, a ojos de muchos, condenará su alma.
—¿Entonces cómo terminé de su lado?
—Dado que tú le contaste parte de lo que ella hizo a la Orden, esperando que sus amigos la entendieran como tú; que lo hizo bajo manipulación o para protegerlos, tuvieron que irse de Inglaterra. Harry no podía creerte o creerle, aunque la realidad era que ella muchas veces tuvo la oportunidad de irse, de salvarse y al hombre que amaba, pero amaba a Potter con la misma intensidad; era su hermano en todo menos sangre, por lo que no podía dejarlo, pero a nadie le pareció suficiente.
—Le arruine la vida—El encapuchado negó con la cabeza antes de continuar su explicación.
—Fue lo mejor, ella debió irse mucho antes. Se fue con su actual familia, gente que había sacrificado demasiado durante esos años y que nunca la juzgó o abandonó. Todos creemos que se merecían un poco de paz —Sirius asintió en comprensión—. Después de un tiempo todos se arrepintieron de cómo la trataron, pero ella nunca volvió a buscarlos. Así que como tú sabías su posible paradero, te pusiste en contacto con su nueva familia y te sorprendiste cuando te enteraste de que todos los Black que quedaban formaban parte de esa "gran famiglia".
++Así fue como entendiste que, al igual que tú cuando fuiste tras Pettigrew, cada uno hizo lo que creía correcto y tras comparar la felicidad con la que vivían, con la que los sobrevivientes de la Orden tenían, te diste cuenta quienes eran los equivocados.
—¿Así que abandoné a la Orden y a los demás? —El encapuchado volvió a negar con la cabeza.
—No, no querías dejar a tu ahijado solo. Creías que algo andaba mal con él, cosa en la que no te equivocabas porque nunca dejaron de usarlo. Aunque la guerra había terminado, seguía sin ser dueño de su propia vida —Soltó con un suspiro cansino—. Pero confirmarlo te tomó años, en los cuales nacieron sus hijos y tuviste que quedarte para proteger a otra persona. Una que te recordaba demasiado a ti y no querías abandonarlo, como sentías que hiciste con tu hermano.
—¿Cuándo supimos sobre Reggie? —preguntó Andrómeda.
—Usted, poco después de que terminó la guerra. Fue una de las cosas que hizo que se acercara a Narcissa de nuevo—Volteó a mirar a Sirius— y tú, la primera vez que fuiste a visitarlos.
—Tiene lógica. Supongo que este chico, por el que me quede, peleó con el otro bando.
—Podría decirse —Se burló—. Pero en realidad, el notar como lo trataban los del "Bando de la Luz", a causa de algo que él no podía controlar, fue lo que hizo que miraras todo con otros ojos; era la oveja negra de su familia, una familia que se jactaba de no tener prejuicios…malditos hipócritas —maldijo por lo bajo—. Por lo que para cuando comenzó a formarse la revolución, no tuviste que pensarlo demasiado—Ambos Black asintieron—. Además, volviste a encontrarte con cierta persona, quienes todos creían muerta, pero que en realidad se escondió de la ira de Voldemort en caso de que esté se enterara de lo que hicieron Regulus y su hermana, cumpliendo el último deseo de ambos.
Por primera vez, en muchos años, en los ojos de Sirius Orión Black volvió a brillar la esperanza y el amor. Una parte de él creía imposible que esa persona estuviera viva o, en todo caso si lo estuviera, que lo quisiera en su vida. Ambas hermanas eran lo único, junto a su hermano y Cissa, que lamentaba perder tras dar la espalda a las creencias de su familia.
—¿Ellas... —No le salían las palabras, por lo que el encapuchado le regaló una sonrisa triste, que Sirius no pudo ver, y decidió ayudarlo.
—Ella—le corrigió—, está casada con un muggle en este momento. Tras la muerte de su hermano en la primera guerra y Regulus, ambas huyeron. Su hermana estaba embarazada cuando sucedió — Los ojos grises del azabache se abrieron llenos de incredulidad—. Como nunca se casaron, los mellizos no salieron en el tapiz. —Contestó a la pregunta no formulada—. Su esposo morirá en los próximos años, pero cuando supo que escapaste de Azkaban, ella intentó buscarte y ayudar, pero tuvo que irse cuando Dumbledore casi descubre sus planes y secretos.
—No entiendo ¿Cuándo murió Daphne? Creí que ella era…
—¿El alma gemela de Regulus? —Sirius asintió y Sev, aunque no podían verlo, sonrió genuinamente, ya que el vínculo de almas gemelas era algo que lo tocaba muy de cerca—. Lo era; la magia de los mellizos la mantuvo con vida lo suficiente como para que llegarán a término, pero falleció momentos después de dar a luz, junto a su hija.
—¿Así que solamente el chico sobrevivió? —Quiso estar segura Andrómeda
—Sí y más adelante sabrán cómo se relaciona con nosotros. Pero volviendo a Venus…Desconozco los detalles en realidad…lo que sé, es que el verla en Francia, junto al hijo de Regulus, quien es prácticamente su reencarnación según todos los que lo conocieron, hizo que quieras escuchar la otra versión de la historia. Tú habías perdido a Remus, ella a su esposo, creo puedes imaginar el resto.
Él azabache asintió, apartando la mirada para tomarse un momento para procesar todo, pero de pronto una frase dicha por el encapuchado golpeó su mente, haciendo que lo mire con los ojos bien abiertos por el pánico.
—Yo…emmm Remus, creo nunca…—El joven colocó su mano sobre el muslo de Black, con un apretón tranquilizador.
—No te martirices por eso, llegará el momento en el que se lo explicaras a la familia. Hasta Teddy lo sabe, no fue culpa de nadie, como dijiste "Amar también es retirarte y dejar que esa persona sea feliz". Sabías que todo estaba roto a causa de las mentiras y manipulaciones de Dumbledore, era algo que no se podía reparar—Sirius frunció el ceño—. Si, en el futuro cercano descubrirás que el director sabía sobre Pettigrew, pero buscaba hacer que la profecía se cumpliera, todavía lo hace, por lo que envío a Remus a esas misiones con la intención de alejarlo de ustedes y dada su relación tan volátil, te concentrarías en él como posible traidor, ya que James Potter simplemente no podía desconfiar de ninguno de sus amigos —Agregó como un pensamiento tardío—. Fue otra de las muchas cosas que se fueron sumando e hicieron que perdieras tu fe en el hombre—Andrómeda se río sarcásticamente.
—El maldito viejo siempre moviendo los hilos desde las sombras
—Más de lo que crees, Señora Tonks. Por eso les pido que tengan la mente abierta y que escuchen las presentaciones con cuidado, pero también que eviten atacarnos. Solamente somos los mensajeros —dijo agachado la cabeza—, hacerlo no cambiará el futuro —La castaña extendió su mano, de forma maternal, para tocar el hombro del encapuchado.
—No te preocupes, es más, estaré atenta en caso de que requieran ayuda. Después de todo tienes razón, su conocimiento de este tiempo proviene de historias o recuerdos, pero no conocen realmente a estas personas. Por lo que habrá cosas que no podrán controlar. Nosotros los ayudaremos —El azabache asintió, pero una parte de él agradecía que no pudieran ver la sonrisa en su rostro, habían mordido el anzuelo.
—Realmente gracias por ello, Señora Tonks
—Andrómeda o tía Andy estará bien
—Tía Andy será—dijo con dulzura, levantándose—. George necesita terminar su presentación, así que creo que lo mejor sería volver pronto al Gran Comedor —Ambos Black asintieron—. Sólo les pido que no hablen con nadie acerca de lo que saben, permitan que se enteren de a poco
—Claro—Dijo la castaña
—Gracias—mencionó al mismo tiempo Sirius—, realmente lo necesitaba
—Cuando quieras, Canuto.
Y tras ver la amplia sonrisa en el rostro de Sirius, se dirigió al castillo, dándoles a ambos primos espacio para poder procesar lo que acababan de escuchar.
Tras pasar uno de los arcos que conectaba un pasillo del castillo con el patio, pudo notar a una encapuchada recostada contra la pared con un aspecto relajado y mirándose las uñas como si fueran de lo más interesante del mundo en ese momento.
—¿Y bien?
—Estarán de nuestro lado
—¿Ambos? —Dijo acercándose al azabache, quien asintió—Vaya, te envió para que busques a uno y vuelves con dos—Su voz era unas octavas más bajas, mientras rodeaba la cintura del chico con sus brazos y levantaba la barbilla para mirarlo a causa de la diferencia de altura, con una sonrisa pícara en el rostro.
—Y medio. Estoy seguro de que, si sobrevive, Ted también peleara de nuestro lado, ahora que tenemos a toda de su familia—Le aseguró.
—Nunca paras de sorprenderme—ronroneó
—Todo por usted, mi alteza—Él se inclinó hacia ella, para unir sus labios en un tierno beso, mientras la abrazaba por la cintura.
—Aunque me alegra la decisión, me gustaría saber ¿qué hizo que quisieras salvar a Andrómeda? —Cuestionó la encapuchada, mientras lo tomaba de la mano y comenzaban a caminar hacia el comedor.
—Si vamos a salvar a los padres de Teddy, creí que tal vez puede salvarse junto a su esposo —La encapuchada asintió de acuerdo—y aunque puede que ahora Sirius confié en la abuela Cissa, si Andrómeda también está de nuestro lado, él no dudará en apoyarnos. Hasta puede que esta vez se una a la famiglia antes y así evite su destino.
—Esperemos que sí. Realmente nos gustaba y todos sabemos cuánto te dolió perderlo
─: ·:°:◦:··:◦:°:· :─
Al mismo tiempo en la Torre de Astronomía
Narcissa Malfoy, tras el pedido del extraño encapuchado que se les había acercado en el lago, emprendió su camino a la Torre de Astronomía, lugar especial no sólo para ella y su esposo, sino para su hijo. Así que no le sorprendió verlos a ambos, charlando tras un muffliato, mientras admiraban los amplios terrenos.
La rubia, con un movimiento de varita, canceló el hechizo haciendo que ambos hombres voltearan a verla.
—Tenemos que hablar. — La exigencia en su tono de voz preocupó a los rubios.
—Ella vendrá cuando pueda librarse de esos inútiles—Cómo siempre su hijo no usaba su nombre.
Narcissa sabía que ella era su secreto mejor guardado, como un tesoro del que, sin importar cuantos hechizos de privacidad lanzarán o donde se encontrarán, no lo mencionaría por miedo a que se lo arrebatarán.
—Entiendo, pero puede que necesiten saber esto antes de que ella llegue—Ambos la miraron interrogantes, pero asintieron.
Luego de que ella les diera el mensaje que se le había confiado en el lago, ambos hombres Malfoy tenían expresiones sombrías en el rostro.
—Esperemos que entienda—Dijo Lucius.
—¿Qué quién entienda qué? —Dijo la castaña entrando a la Torre y sacándose la capa de invisibilidad. Tras las tres cejas rubias arqueadas en forma de cuestionamiento, explicó—Ginny está acosando a Harry, esperando que él pida su mano a los Weasley ahora que está segura de que se casarán en el futuro y dado que Ron está prácticamente acechándome para convencerme de que me casaré con él, ambos huimos con la capa. Una vez que lo dejé en un aula desierta, le dije que necesitaba tiempo a solas para pensar y me la prestó.
Ella comentó con un encogimiento de hombros, como si realmente todo lo que pasaba era de lo más esperable. Pero no notó que, tras mencionar al pelirrojo, Draco había apretado los puños y tensado la mandíbula, con riesgo de romper sus dientes, al mismo tiempo que sus padres le lanzaron miradas analíticas, pero fugaces en su dirección. Por lo que, para evitar una discusión, el patriarca de los Malfoy se aclaró la garganta.
—Cissy vino a avisarnos de que a nuestros visitantes les gustaría que de momento no hiciéramos nada—La castaña miró a la mujer
—¿Por qué nos importaría lo que quieren que hagamos? O mejor aún ¿Por qué confiamos en sus palabras?
—Porque tienen un plan, pero si interferimos puede no funcioné—la castaña iba a replicar, por lo que Narcissa levantó la mano—. Si, también le cuestioné de que no parecían tener las cosas bajo mucho control, y asumió que sí, que esta última presentación no fue como se esperaba. Pero justamente por eso varios de ellos hablarán individualmente con algunos de nosotros. Este chico en particular me buscó y a Sirius, para darme el mensaje, antes de quedarse con él.
—¿Quién era? —Narcissa negó con la cabeza.
—Dijo que no podía decirnos, por lo que mantuvo su capucha, pero nos conocía. Me llamo abuela Cissa, aunque no es hijo de Draco—Dio una mirada fugaz a su esposo e hijo— y dijo que, dado que tus hijos no podían presentarse aún, nosotros éramos los únicos que podríamos convencerte de mantenerte al margen.
—Sigo sin entender— dijo con una mueca cuando la mujer confirmó que tenía más de un hijo y seguía sin saber quién sería su futuro esposo— ¿Por qué confiamos en este encapuchado en particular? Más considerando que, en realidad, no está relacionado directamente con ninguno de nosotros.
—"Merak"
Los ojos de los otros tres presentes se abrieron como platos cuando Narcissa dijo esa palabra. Si bien era una palabra que proviene del serbio y no tiene un significado exacto, era una clave que esta familia utilizaba, junto a un grupo de confianza conformado por ciertas serpientes y el profesor Snape, para transmitir mensajes desde que se habían unido a un juego más peligroso que la guerra misma. Después de todo, como lo aprendieron en runas antiguas, hacía referencia a "el sentido de unidad con el universo, que surge desde el más simple de los placeres", siendo estos "placeres", la familia, la paz…pequeños momentos robados entre tanto caos, que les permitía soñar con una vida después de esta guerra.
Tras unos momentos, la castaña asintió.
—Está bien, creo que, aunque no entienda del todo porque contar ciertas cosas, confiaré en que realmente saben lo que están haciendo.
—¿Así de simple? —Cuestionó incrédulo el rubio más joven y la castaña volvió a asentir.
—Dijeron que los más capaces de su tiempo idearon este viaje; ninguno es un niño, después de todo ellos organizaron una tercera guerra mágica para arreglar lo que nosotros no pudimos y saldrán vencedores. Creo que se merecen el derecho a la duda.
—¿Así que estás segura de en qué lado luchaste en esa guerra y que todos los que se presentaron, hasta ahora, fueron los que la orquestaron? —Hermione rio.
—Claro que sí. Dumbledore no puede manejarlos; viste su último enfrentamiento, lo que realmente considero muy imprudente ya que no entiendo porque fueron a pelear con él tan abiertamente sabiendo que puede traicionarlos cuando menos lo esperen. Pero, aun así, aunque ninguno fue mi hijo, fueron mis ahijados y todos están relacionados con los chicos. Además, que creí que, después de todo esto que estamos haciendo, no pensarían que yo sería capaz levantar mi varita contra ustedes—Había un leve cuestionamiento en sus palabras y una mirada un tanto herida, como mortal, por lo que fue Lucius el que habló para salvar a su hijo.
—No creemos tal cosa. Simplemente creo que a Draco le sorprendió—dijo dándole una mirada de advertencia a su hijo, antes de volver a mirarla— que esta vez estés peleando abiertamente contra de los Weasley y la Orden, junto con los que buscan destruir sus creencias.
Si la leona lo pensaba bien o era sincera consigo misma, también estaba bastante confundida por ese hecho, después de todo en este momento, aunque no estaba al 100% con la Orden, no estaba contra ellos. Es más, esperaba poder salvarlos al mismo tiempo que salvaba a aquellos que comenzó a considerar su familia y no tenían una real elección de estar o no estar con la oscuridad.
—Supongo que todo se irá aclarando más adelante—Ofreció como rama de olivo, Cissy—y creo deberíamos volver, para así poder ver lo que queda de la presentación del chico Greengrass — Todos estuvieron de acuerdo
—Creo que cuando tengamos un momento deberíamos reunirnos. Quiero salvar a Fred. Él y Tori merecen su final feliz junto a su hijo—Les hizo saber Hermione.
—Y yo que pensaba comenzar a controlarle las pociones anticonceptivas a Tori—Reconoció Draco con una mueca, ante la idea de que "su hermana menor" tuviera relaciones sexuales, haciendo que todos rieran por lo bajo.
—Si hace eso, puede que George no nazca. Aunque fue imprudente, creo que merece nacer y Tori te mataría si haces algo que lastime a su hijo, además…yo la ayudaría a idear su venganza—Draco se estremeció ante la idea y Hermione sonrió triunfal antes de echarse la capa de invisibilidad encima.
Todos salieron de la torre, sin dejar de pensar en el futuro y en como poder ayudar a los viajeros.
Sólo para aclarar unas cositas:
** Narcissa aquí es como en el libro, rubia, no como en las películas que tiene el cabello de dos colores.
** Si, en el pasado hubo Wolfstar, pero dado la desconfianza de Sirius en Remus a causa de sus misiones con los hombres lobos y lo de los Potter, se separaron.
Por otra parte espero que hayan logrado leer entre líneas, recuerden todos están jugando aquí. No duden en dejarme los comentarios en los párrafos si lo hicieron y el próximo capítulo ira dedicado a ustedes.
