En otra dimensión de portal, Mirai aterrizaba junto con Boruto y Sasuke viendo el extraño lugar brillante con pilares enormes cuadrados subiendo rápidos muy arriba infinitamente. Había sentido un extrañó tirón en su pecho, como si algo se deshiciera.

– ¿Qué es esté sitio? –Pregunto la Sarutobi viendo con fascinación y temor el lugar hermoso y desconocido.

– ¿do…Dónde estamos? –Decía Boruto también confundido.

– Tengan cuidado. – Dice el Uchiha.

Miraban en frente los pilares gigantescos, Mirai voltea y ve a una… ¿Una tortuga? Flotando con caparazón abierto con tres aros. Frunce el ceño, con incredulidad. ¿En serio?

–Esa tortuga…Es la que tenía Urashiki antes. –Dice Boruto viendo también a la cosa y camina en frente mientras Mirai e Sasuke lo seguían detrás.

– ¿Qué está pasando? –Dice Mirai viendo a la tortuga, ¿Eso era una reliquia? ¡No tiene sentido! ¿Quién fue el creador de tal locura de artefacto?

– ¿Me siguieron hasta aquí? Los humanos insistentes no son populares. –Dijo burlón sonriendo e atacando con rapidez en latigazo a los tres humanos Shinobis que lo esquivan rápido.

Sasuke desenfunda su katana saltando y atacando al Ootsutsuki que repela su ataque con su vara de chakra. Urashiki ríe burlón y lo patea del pecho lazándolo lejos de él.

Mirai saca sus cuchillas envolviéndolas en chakra. Nunca salía sin esas cuchillas. Ataca a Urashiki que sonreía serio.

– ¿Qué planeas, Urashiki? ¿Por qué haces esto?– Dijo seria e interrogante Mirai viendo al alto hombre mirarla con una sonrisa sombría y amarga.

–No debiste venir Mirai-sama. Esto es peligroso. – Dice empujando a su futura jefa lejos sin lastimarla mientras al mismo tiempo golpea con fuerza con la vara al hijo del Zorro mandándolo a volar para atrás. Haciendo que sin querer chocase con la tortuga. El Uchiha lo ataca con la katana de nuevo.

Boruto al chocar contra la tortuga, cae fuera del pilar atravesando una especie de campo invisible junto con la tortuga.

–Aún es pronto. – Dice Urashiki viendo al mocoso caer con la tortuga.

– ¿Qué… qué es esto? –Tartamudeo el niño cayendo sorprendido.

– ¡Boruto! –Grito Mirai preocupada corriendo hacía él y lista para saltar a ayudarlo pero rápidamente Urashiki la detiene agarrándola del brazo impidiendo que avanzará.

– ¿Que intentas hacer? –Gruño serio, si su señora caía, se perdería en un tiempo diferente y saber cuánto tiempo tardaría en aparecer.

Sasuke usa su rinegan rápidamente cambiando el lugar de Boruto y la tortuga de dónde estaba Urashiki. Que comenzó a caer siendo arrastrado hacía el vació.

–tsk…Maldición. Salí del portal antes de lo previsto. Jejeje. – Calló riendo. Mirai lo escucho frunciendo el ceño, no entendía que era lo gracioso de eso estaba cayendo al vació pero parece que eso no le aria daño además ¿Acaso olvido qué puede volar?

– ¡Boruto, Mirai! –Grita Sasuke agarrando e acercando a los dos jóvenes a él, manteniéndolos cerca mientras usaba a su Susano, protegiéndose los tres mientras veía serio a la tortuga hasta que los envolvió una luz blanca, segándolos.

De la nada los tres caen del cielo, Mirai estaba desconcertada pero se recompuso agarrando rápido a Boruto que gritaba sorprendido antes de que él estrellara su rostro al suelo y se rompiera el cuello.

Para al lado de Sasuke y suelta a Boruto que se marea y cayo sentado al suelo teniendo a la tortuga y se tocaba el pecho en susto e muy agitado.

– ¡Uff…, Gracias por atraparme, Mirai-san. –Dijo agitado el Uzumaki. Sonriéndole.

Mirai le asiente, luego observa alrededor pero justo Sasuke se desploma de una rodilla mientras soltaba un quejido de dolor y tocaba su ojo dónde estaba el Rinegan.

– ¡Sasuke-san!

– ¡Tío Sasuke!

Gritan preocupados los dos, Mirai se arrodilla viendo preocupada al Uchiha agitado. Ah usado mucho chakra con Susano, aún no se había recuperado desdé la última batalla contra los invasores. Ahora que lo piensa era la primera vez que veía el Susano, no competo pero aún así, vaya.

–Usé todo mí chakra. –Dice viéndolos.

–No veo a Urashiki cerca. –Decía serio Boruto buscando con la mirada a Urashiki de un lado a otro.

– ¿Dónde estamos? –Pregunto Mirai inusualmente extrañada ante la zona que estaban, no lo podía reconocer ¿Estarán lejos de Konoha?: Mira la tortuga que tenía Boruto, paresia una especie de portal, tal vez estén muy lejos y horas afuera al juzgar que es de día y obviamente no de noche.

–Tendremos que investigarlo. –Dice el azabache.

Mirai ayuda a levantarse a Sasuke mientras Boruto da golpecitos con un dedo el caparazón verdoso con moño rojo de la tortuga y luego lo agita pero nada a sucedido.

–Rayos, no reacciona. ¿Es culpa de está cosa? – Se queja Boruto viendo fijamente a la inmóvil tortuga.

–Probablemente. –Dice Sasuke.

Los tres prosiguen caminando buscando dónde salir del bosque hasta qué se detienen viendo una ciudad.

Mirai le paresia extraño, ya que las estructuras del lugar parecían, antiguas.

– ¡Una ciudad! … ah, pero si es Konoha. –Decía Boruto caminando en medio de Sasuke e Mirai-san.

–Entonces si es Konoha ¿O no? –Pensaba Mirai con muchas dudas viendo alrededor, no reconocía está parte de la ciudad.

–Qué susto pensé que moriríamos. –Hablaba el Uzumaki con los brazos cruzados a la nuca relajándose.

Mirai abre más sus ojos…Espera un momento, levanta la vista al mismo tiempo que Sasuke deteniéndose los dos y viendo los rostros Hokages. Se tensa no creyendo lo que estaba viendo.

–Qué raro, el rostro de Papá no está en la roca de los Hokages. –Dice confundido Boruto viendo las montañas, tampoco de la vieja Tsunade e de Kakashi.

–No puede ser. – Dijeron al mismo tiempo Sasuke y Mirai saltando hasta los tejados dejando a Boruto atrás.

– ¡Esperen! –Grito saltando e alcanzándolos e parando en un tanque de agua.

– ¿Co…Cómo es posible? –Decía Mirai viendo los monumentos Hokages, había cuatro rostros en ellos. Su corazón palpita rápido.

–Entonces estoy…– Piensa sin creerlo mirando con sus iris rojos mientras tragaba saliva algo asustada ante la posibilidad de estar en un tiempo delicado.

–No se vayan sin avisar, dattebasa. ¿Hum? ¿Sasuke, Mirai-san? –Dice Boruto viendo confundido al par. Luego ve en frente.

–Boruto, Mirai, esto es…

–La Konoha del pasado. Viajamos en el tiempo. –Dice Mirai terminando la frase del azabache, viendo la antigua aldea de la hoja.

–Faltan rostros en la roca de los Hokages. No solo el de Papá. Falta el de Kakashi y el de la vieja Tsunade. –Decía Boruto viendo los monumentos mientras Sasuke mira al niño y Mirai la aldea.

–si…. Si estoy en el pasado ¿Entonces mí Padre aún estará con vida? – Pensaba Mirai, esto paresia un sueño, toca su corazón sintiéndolo palpitar rápido. ¿Esto era real?

–…Y la nueva zona urbana no está. –Decía divagando Boruto no mostrando mucha sorpresa.

–La aldea es distinta. –Dijo Mirai estando al lado de Sasuke.

–Antes de entrar en ese espacio extraño, Urashiki dijo…

–Voy a cazar el chakra del Zorro. – Los tres recuerdan lo que había dicho el Ootsutsuki en el laboratorio arqueológico.

–Me lo temía. –Dice Sasuke viendo los rostros Hokages.

– ¿Hum? – Lo mira Mirai inclinando ligeramente la cabeza a igual qué Boruto hasta que algo los asusto.

– ¡Advertencia! ¡Advertencia! ¡Las coordenadas de desplazamiento temporal cambiaron.¡– Grito la tortuga asustando tanto a Boruto como a Mirai.

– ¡Kyaa! ¡Hablo! – Grito Boruto tirando del susto el aparato al aire por sin querer. Pero Mirai lo atrapa rápido.

Sasuke se acerca a Mirai viendo serio e escuchando lo que decía la tortuga.

–Las coordenadas de desplazamiento temporal asignadas por Urashiki Ootsutsuki no coinciden. –Decía la tortuga fea.

– ¿Dijiste desplazamiento temporal? –Dijo Mirai seria sin comprender mucho.

– ¿Estamos en la Konoha del pasado? –Pregunto Sasuke serio viendo a la pequeña tortuga.

–Eh ¿Del pasado? –Dice Boruto.

–Hai, esta es la época en la que Tsunade ejercía de quinta Hokage. –Respondía la tortuga moviendo sus extremidades para arriba.

–La quinta Hokage…–Dice Mirai viendo alrededor, ahora que veía más detenidamente a la montaña dónde están los monumentos, notaba que al lado estaban preparando para la cultura del rostro de la quinta.

– ¿De verdad? –Dijo sin creer mucho el joven Uzumaki mirando la vieja e antigua aldea.

–De verdad. –Responde la tortuga.

– ¿Dónde está Urashiki? Si las coordenadas no son las que esperabas, ¿Está en otra época? – Le pregunto Sasuke.

–Urashiki-sama ajusto las coordenadas a la infancia de Naruto Uzumaki. Pero por problemas a la hora de mi uso llegamos a una época anterior a lo esperado. Urashiki-sama se separó de nuestro grupo y calculo que llegará dentro de unos días. –Decía.

–Dentro de unos días… ¿Y cuándo seria precisamente? –Pregunto la Sarutobi viendo a la tortuga.

–Calculo que dentro de unos días, su aparición calculada esta inexistente. Lamento no poder dar más información, Mirai-sama. –Responde la tortuga sorprendiendo a la Sarutobi.

–Como sospechaba, Urashiki vino por Naruto. –Dice serio el azabache.

–eh…– Lo mira Boruto.

–Dijo que cazaría el chakra del Zorro. –Dijo Mirai ya entendiendo.

–Vino a robárselo a Naruto cuándo aún era joven y débil. –Dijo serio el azabache.

Boruto se preocupa sudando un poco por su Padre mientras ve a Mirai y a su maestro Uchiha hablar en casi en sincronía mientras explicaban la situación.

–Por suerte nosotros llegamos primero. Aunque siendo sincera no sabría decir que podemos hacer, estando en el pasado. Es muy peligroso. Aunque tengo en mente un plan algo complicado. –Dice tranquila Mirai.

– ¿Quiere atacar a mí Papá de pequeño? Que cobarde. – Decía serio incorporándose al lado de su tío Sasuke.

–Tenemos que encontrarlo antes que Urashiki y protegerlo, ¿No? –Dijo la Sarutobi. Sentía que algo le faltaba desdé que termino aquí, una sensación de arrebato.

–Si. –Dice Sasuke notando la confusión en el rostro de Mirai. Aunque entendía, contando que viajaron en el tiempo, algo precisamente imposible pero henos aquí. Están en el pasado.

–Como proceden del futuro, debo darles barias advertencias en referencia a sus acciones. –Decía la voz mecánica de la tortuga.

Era tan raro escucharlo de una criatura así. Mirai e Sasuke lo miraron, no podrán acostumbrarse mucho al respecto ante esto. Boruto agarra a la tortuga y lo mira interrogante.

– ¿Y quién eres tú? ¿Eres aliado de Urashiki? –Lo interroga Boruto.

–Soy el instrumento ritual de viajes temporales Karasuki. No contemplo el término de aliado que mencionaste. No tengo una relación interesada con Urashiki. Mi papel es efectuar viajes temporales y dar diversas advertencias a los viajeros. – Dice tranquilo.

–Esta tortuga dice cosas muy complicadas. –Se queja Boruto sin entender nada.

– ¿Qué advertencias? Te refieres a no interactuar con nadie o cambar nada de esté pasado ¿verdad?– Pregunto Mirai.

–Por su puesto, Mirai-sama, usted entiende. La gente del pasado no puede saber que proceden del futuro. Procuren no interferir con aquellos más cercanos a ustedes. –Dijo serio.

– ¿Y qué pasa si nos descubren? –Pregunto inocente el niño.

– ¿En serio acaba de preguntar eso? – Frunce el ceño Mirai. Era muy obvió lo que pasaría si alguien del futuro interfiere en el pasado.

–Es posible que eso ejerza una gran influencia en el futuro. – Decía la tortuga.

–Si asemos nuestras acciones en el pasado podríamos modificar el futuro. ¿No? –Dice Mirai seria escuchando atentamente.

–Por supuesto Mirai-sama. Es por eso se recomienda precaución a la hora de actuar. –Asiente la tortuga.

–Vaya. –Dice sorprendido Boruto. La tortuga incluso es muy cortes con Mirai-san y a saber como supo el nombre de ella.

Sasuke escuchaba atento mientras veía a Mirai, parece que ella ya pensaba sobre las consecuencias que podría pasar si alguien modificaba el pasado.

–Tengan en cuenta que podrían eliminar a objetos o personas del futuro. – Advierte la tortuga. Sasuke se pone serio ante eso.

– Será fácil. Esto será emocionante. Estoy en la Konoha de antes que yo naciera. – Dijo confiado Boruto alzando el puño adelante con emoción.

– Esto no es emocionante e fácil, Boruto, estamos en el pasado, un error y estamos perdidos. –Pensaba muy seria Mirai. Tendrá que tener cuidado si se cruzara a alguien conocido o no, no interactuará e seguirá de largo nadie más con solo Boruto y Sasuke-san podrá estar.

Después de horas, ya estaban caminando en la aldea. Mirando alrededor los tres juntos.

–Sasuke, no entiendo tu sentido de la moda. –Se queja Boruto.

–Aguántate. En esta época no existías. No puedes verte con una bandana de la aldea. – Decía el Uchiha, usando prendas viejas, una capa marrón y un sombrero y un parche también marrón para tapar su rinegan.

Boruto usaba pantaloncillos cortos azules y chaleco rojo. Con sandalias ninjas cortas.

–Estoy de acuerdo con Boruto, ¿No hay otras prendas menos reveladoras? –Decía Mirai muy sonrojada sintiendo las miradas de las personas sobre ella en especial de los hombres.

Vestía un lindo vestido blanco ninja, corto hasta las rodillas y bien ajustada en su cuerpo e monturas casi idénticos de las que usaban las Kunoichis de Suna con un pequeño chaleco rojo militar en el abdomen, por lo menos las sandalias ninjas que usaba eran apropiadas y quedaban a la perfección combinando bien con su vestuario, tenía los hombros desnudos mostrando también su cuello. Además de corto hasta los muslos, no acostumbra mostrar sus piernas.

– ¿Pero qué dices? Mirai-san, si te vez muy linda. ¿No Sasuke? Por lo menos tuviste suerte que él eligiera bien un vestuario apropiado para vos. – Decía inocente Boruto haciendo avergonzar a Mirai.

Sasuke mira en otro lado evitando un momento la mirada de Mirai, esa vestimenta lo había visto cuándo aún no había abandona la aldea, a él le paresia bonito de cierta forma. y Mirai, a ella le quedaba perfectamente los encajes y colores adecuados además de que era una vestimenta ninja que según recordaba ya estaba a la moda en esta época, para Kunoichis adolescentes. Lo sabe porque había escuchado a sus compañeras cotorras hablar de cierta vestimenta para querer seducirlo.

– ¿Dónde está Karasuki? –Pregunto a su distraído pupilo.

–Se metió en su caparazón diciendo que no tenía suficiente chakra. Se lo di a Mirai-san para que lo guardara en su bolsa. –Decía indiferente e confiado el niño.

–Bien. – Dice tranquilo, era mejor ella, ya que Boruto al asustarse cuándo la tortuga hablo, literalmente lo había lanzado al aire del susto. Pero luego ella lo había agarrado a tiempo.

–Es increíble. – Decía viendo alrededor el rubio.

– Parece una ciudad distinta. –Dice bajo Mirai mirando con cuidado y curiosidad a su alrededor. Esté lugar dentro de unos años será destruido por los Akatsuki. Había leído sobre ello en la biblioteca.

–Pones una mirada muy seria, Mirai. –Decía Sasuke.

Kakashi e Gai le hablaron una vez de como era ella en las misiones e momentos serios. Su mirada si era depredadora.

–Eh ¿Yo? oh lo… lo siento, intentare no hacerlo. – Dice avergonzada mientras se sonrojaba mucho y más si él la miraba.

Sasuke sonríe viendo la mirada inocente e avergonzada de Mirai mientras veía como ella bajaba su mirada y se mordía su labio inferior. Ahora entendía porque Momoshiki le decía lo bella que era. Había visto en la mente de Mirai las cosas lindas e…. incomodas que le decía a la Sarutobi.

–Oy ¡Vayamos a probar la kaminari burge de está época. –Decía emocionado Boruto.

–No existía. –Dice Sasuke mientras le frunce el ceño al Uzumaki.

– ¡¿Qué?! ¡¿En serio?! –Mira de nuevo y corre recorriendo como todo un turista en un nuevo parque de diversiones. Viendo el local Ramen Ichiraku un puesto aún pequeño mientras las personas lo miraba con extrañeza.

–Ichiraku era un restaurante muy pequeño. ja ¡Es increíble! No me lo puedo creer. –Decía alto e emocionado llamando más la atención de las personas.

Mirai e Sasuke se acercan a detener el escándalo que hacía el hijo del Hokage, ¿Esté chico no sabe qué es sigilo y no llamar la atención? Hará que parezcan sospechosos.

–Silencio, Boruto. –Lo regaña Sasuke.

–Es que es muy divertido. –Dice sonriendo.

Sasuke e Mirai resoplan ante lo imprudente que era Boruto al no ser cuidadoso.

–Tenemos que encontrar a Hokage-sama cuanto antes. –Dice seria Mirai intentando no poner cara sospechosa o depredadora como dirían Gai y Kakashi.

–Nuestro objetivo es protegerlo de Urashiki. –Decía el Uchiha mientras los tres emprendían su caminar.

Después de ratos caminando, Boruto ya se estaba aburriendo.

–Hay que encontrar a mí Papá. ¿No sabes dónde puede estar? –Preguntaba el rubio.

– En esta época debería estar en su casa o en Ichiraku. –Respondía, no estaba muy seguro de lo que más hacía el dobe.

En esta época simplemente no le prestaba atención a lo irrelevante, ahora se arrepiente de no haberlo hecho.

– ¿Eh? Pero si es…– Dice Mirai tensándose, Sakura-sama era muy unida a Sasuke seria peligroso que lo reconociera.

– ¡Oye! ¿Ella no es…–Les decía Boruto viendo a una niña muy linda de pelo rosado, caminando en su dirección.

–Sakura. Qué mal. –Dijo el Uchiha retrocediendo con Mirai pero el idiota de Boruto hizo lo contrario.

– ¡Disculpa!,¿Puedo pregun..?!

Mirai y Sasuke se balancean agarrando a Boruto y callándolo, ¿Es qué es tonto? Los dos lo fulminan al Uzumaki ante la estupidez que quería cometer.

– ¿Qué pretendes Boruto? –Lo regaña Mirai e Sasuke al mismo tiempo. El rubio Uzumaki libera su boca. Confundido viendo a los dos mirándolo molestos.

– ¿Qué? Sakura-san sabrá dónde está mí Papá, ¿No? –Dice inocente e torpe.

–Boruto. Karasuki dijo que fuéramos precavidos. – Le dice serio Sasuke.

–Y lo estás haciendo lo contrario. – Dice seria Mirai. Hinchando los mofletes.

–Sí, pero…–Dijo confuso mirando a Mirai y a su tío.

– ¿Me llamaste?– Decía una pelirosada viendo al chico rubio y luego a un hombre que se cubrió rápido el rostro y una chica joven muy bonita de cabello corto. Veía que ella si está a la moda, que envidia.

Era muy parecida a Kurenai-sensei, por los ojos, el cabello aunque corto y todo. Le sorprende lo parecida que era, aunque está chica era más linda ¿Será algún pariente? Iba a preguntar pero la interrumpen.

–No. –Dice Boruto nervioso.

–No es nada. –Dijo el azabache tenso.

–Solo nos confundimos. Discúlpanos. –Decía sonriendo dulce e casualmente tranquila Mirai abrazando el brazo de Sasuke y colocando un brazo en los hombros de Boruto haciendo parecer que eran nada más una familia paseando mientras volteaban e se marchaban rápido pero no tanto para no parecer sospechosos.

Sasuke se había tensado sintiendo a la Kunoichi abrazarlo, conocía esté abrazo, era el mismo que había sentido cuándo la encontró en el campo de entrenamiento abandonado, cerca de un lago no muy lejos, el lugar dónde había aparecido Momoshiki con intención clara de encontrarse a la chica. Al final el desgraciado se salio con la suya.

Observa la hermosa expresión de Mirai actuando casualmente con una dulce sonrisa y un sonrojo. Momoshiki estaba preparado para quedarse y robar su inocencia, pobre chica. Aunque en parte él también termino aceptando en entregarla.

Miraba fríamente adelante, maldiciendo por no haberse dado cuenta que Momoshiki estaba cerca de su alcancé. No lo había detectado porque el maldito suprimió su chakra ocultándolo completamente, solo había sentido la de ella en campo de entrenamiento. Debió haber sospechado más.

Después de caminar e alejarse en una buena distancia se separan. Mirai suelta un suspiro, aliviada y mira a Boruto con una mirada reprochante.

–Conocemos a mucha gente en la aldea. A partir de ahora piensa antes de actuar. –Dijo molesto el Uchiha.

–Tío Sasuke, Mirai-san, pero si tenemos que proteger a mí Papá de Urashiki, tendremos que encontrarnos con él ¿No? –Dice Boruto. Sin entender como encontrarlo.

–Me pregunto si Momoshiki estará bien. ¿Cuánto tiempo estaremos aquí atrapados? – Pensaba Mirai viendo a Boruto y a Sasuke discutir.

– Será un problema. Pero habrá que vigilarlo desdé una distancia prudente. –Dijo Serio el Uchiha.

Sasuke-san tenía razón, era mejor verlo y cuidar al pequeño e futuro Hokage, se moría de ganas de por lo menos verlo. Por lo menos de lejos.

– ¿Qué? Vinimos a Konoha del pasado solo para escondernos. –Reprocha no gustándole la idea.

–Si es posible que afectemos el futuro, debemos ir con cuidado. –Dijo serio.

–Mirai-san. – Mira suplicante necesitando un apoyo moral de Mirai.

–Sasuke-san tiene razón, Boruto. Comprende por favor, estamos en el pasado, no a divertirnos. Cualquier error arruinaría el futuro que conocemos. – Dice Mirai sintiéndose decepcionada ante la actitud del chico. Se supone que es listo, no tonto.

Sasuke asiente ante lo dicho, Mirai era lista, ella sabe lo que hace también., tiene que admitir que lo impresionaba más que Boruto en estos momentos siendo responsable y concientemente ante la situación.

–Qué aburrimiento. –Dijo el Uzumaki siguiendo adelante para doblar a la otra esquina pero de repente se choca al mismo tiempo con alguien y cae al suelo.

Mirai y Sasuke voltean viendo al rubio Uzumaki tumbado contra el piso. Quejándose.

–¡Ay!

–¡AY!

Gritan al mismo tiempo Boruto y el otro chico.

– ¡Mira por dónde caminas! Dattebasa. – Decía molesto frotándose la cabeza teniendo los ojos cerrados al sentir el golpe.

– ¿Perdón? ¡Eso mismo digo yo, Dattebayo! ¿Qué hacías ahí parado?

–Esto no podía ser peor. –Dijeron al mismo tiempo El Uchiha y la Sarutobi viendo con incredulidad justo se topan con el Naruto chiquito de doce años.

Mirai veía al niño, era el mismo Nanadaime que admira y ama mucho, era tan adorable y pequeñito, sonríe con ternura. Aunque preocupada ya que Boruto no es capas de mantener la boca cerrada.

– ¿Qué dijiste?...¿Eh?– Decía mira a su Padre pequeño de la misma edad que él.

– ¿¡Papá!?

Ah Mirai casi le salía el corazón por la boca, lo que grito Boruto ¡¿Cómo puede ser tan tonto!? Decirle Papá a Naruto niño.

– ¡¿Ah?! ¿Papá? ¿Con quién hablas? –Interroga el joven Naruto de doce años.

Boruto se tensa y se cubre la boca rápido mientras su joven Padre se paraba mirándolo extraño hasta que de lejos se escuchó a un hombre gritando.

– ¡Naruto!

– ¿Eh? – Voltea Naruto viendo al sabio pervertido.

– ¡Olvídate de ellos! ¡Nos persiguen! –Gritaba corriendo como loco.

– Ese es el maestro de mí Papá que vi en aquella foto. –Piensa Boruto levantándose del suelo viendo al maestro de su Padre correr hacía ellos.

– ¡Es…es…Es verdad! ¡Esto pasó por tu culpa, Sabio pervertido! – Grita Naruto haciendo zancadas e trotando de pasos hacía a la vez retrocediendo y refunfuñando a su maestro.

– ¿Los persiguen? –Pregunto el Uchiha.

– ¡Si! –Grito el mayor.

Mirai observa fascinada al gran Sanin Jiraiya, pero luego nota a personas atrás corriendo. Supo de inmediato porque lo perseguían.

Desdé que había terminado la misión de escolta clase "S" con Rokudaime y Gai-san, había investigado sobre el libro que leía Kakashi-sama, algo que la dejo muy roja con solo recordar haber leído dos paginas, pero la vergüenza era tan grande que no pudo llegar a la tercera.

Después de charlar con un clon de Nanadaime que explicó avergonzado y algunas aldeanas mayores. Supo que aunque sea respetado, el Sanin era un pervertido de primera que siempre involucraba a su pobre Nanadaime en problemas.

– ¡Déjennoslos a nosotros! –Grito Boruto haciendo que la Sarutobi se tensara.

– ¿Seguro? –Dijo Jiraiya. Rápidamente dándole el binoculares al mocoso.

– ¿Eh? – Mira confundido Boruto.

El Sanin y Naruto salieron huyendo rápidamente dejando confundido al Uzumaki.

Mirai se pasa la mano al frente por lo estúpido que era está situación. Sé supone que tienen que evitar los problemas no meterse en uno que no les concierne.

– ¡Cuento con ustedes! –Gritaba el Sanin yéndose rápidamente.

Sasuke y Boruto uno parado al lado del otro veían que se alejaban los dos Shinobis. Mirai que estaba apartada nota las personas mirando con enojo al Uchiha y al Uzumaki.

– ¡No escaparán, mirones! – Grito un hombre detrás de los dos.

Sasuke e Boruto voltean viendo a las personas y a un hombre mayor de lentes redondos mirándolos mal.

– ¡¿Mirones?! –Dijo sorprendido Boruto.

–Será idiota. –Decía Sasuke inclinado un poco la cabeza mientras el sombrero le cubría un poco el rostro. Era de esperar que Naruto y su maestro hicieran esto. Pero ahora termino involucrándose por sin querer.

– Un momento, se equivocan. –Decía Boruto extendiendo e agitando los brazos mientras veía a las personas molestas.

–Eran un adulto y un niño. ¡Y mira lo que llevas en la mano! –Grito señalando furioso el binocular.

Mirai resopla algo avergonzada por la situación mientras veía como Boruro se sorprendía y se enojaba sosteniendo el mirador, maldiciendo "viejo asqueroso" No sabría decir si era a Jiraiya o a Naruto.

– ¡Jovencita! Ten cuidado, son pervertidos. – Dijo un hombre acercándose a Mirai y alejándola de ellos.

– ¿Eh? es…esperen…–Dice nerviosa la Sarutobi ante el mal entendido.

–Miren nada más, ¡Que depravados! ¡No metan a una inocente en sus sucios juegos! –Dijo otro hombre poniéndose en frente. Protegiendo a la muchacha.

–Disculpen esto e un mal entendido, no es lo que creen. –Decía Mirai intentando razonar con las personas.

–Tranquila pequeña, estás a salvo ahora. Mantendremos a estos sucios mirones lejos de ti. No te obligaran a nada. – Dice una mujer alta y mayor abrazando a la Sarutobi en protección mientras fulminaba al rubio y al azabache, que se tensaron.

Mientras la multitud discutía. A lo lejos en una esquina el Sanin estaba escondido e inclinando viendo la escena estando detrás de una cerca de madera.

–Genial. Los perdimos. –Decía el Sanin sonriendo.

–Siempre tienes que espiar a las chicas, Sabio Pervertido. –Le decía molesto Naruto mirándolo mal.

– ¡Lo hago para escribir novelas mejores! –Grito volviéndose a su pupilo.

–Si, claro. Estoy harto de que la vieja Tsunade me castigué. – Dice mirando a otro lado y haciendo un puchero molesto.

–Vayamos al siguiente lugar dónde espi…recopilar información. –Decía con los brazos e manos en cada cadera mientras sonreía y Naruto paraba al lado suyo sin que los dos se percataba de una silueta femenina apareciendo por detrás. Escuchándolos.

Los dos sienten un escalofríos, asustados voltean temblorosos sudando frió viendo susodicha mujer de carácter fuete e resiente Hokage, con una sonrisa tenebrosa.

– ¿Qué están haciendo? –Pregunto la rubia Tsunade sonriendo mientras chocaba con eminente amenaza su puño en su palma creando un fuerte sonido seco de golpe. Acercándose al Sanin y a Naruto que sudaban de miedo. Hasta que los molió a golpes con su monstruosa fuerza.

Al cabo de media hora Mirai, Sasuke e Boruto estaban con Jiraiya e Naruto viendo tensos los golpes y chichones en las cabezas de esos dos.

– Hokage-sama. – Pensaba preocupada Mirai del pequeño niño rubio. Él no tenía la culpa de nada, pobrecito.

– ¡Lo sentimos! ¡Perdónanos, Tsunade! – Se disculpaban entando arrodillados en el cuelo los dos al mismo tiempo.

Boruto sudaba viendo lo masacrados que estaban esos dos tontos, e Sasuke también, Mirai veía con preocupación al par.

–Ya hablaré con estos dos tontos luego. Ahora les toca a ustedes tres. –Dijo seria volteando ver a los tres desconocidos.

– ¡Nosotros no espiábamos a nadie! –Grito asustándose Boruto sacudiendo las manos en nerviosismo.

–Lo sé, ya confesaron ellos. Soy Tsunade, la Quinta Hokage. No me suenan sus caras. ¿A qué vinieron a la aldea? –Pregunto seria e interrogativa viéndolos.

–Somos artistas itinerantes. – Se apresura a decir Mirai.

Boruto voltea mirando curioso. Sasuke entendió y se adelanta en meterse en el papel.

–Somos artistas itinerantes y viajamos por diversas tierras. – Dijo casualmente el Uchiha.

–Artistas itinerantes, ¿eh? Y… –Iba a decir más Tsunade, pero el hombre de sombrero marrón además de su mal vestuario ridículo que mostraba su claro mal sentido de la moda, sacaba una bola roja en su capa marrón.

Jiraiya e Naruto se inclinan mirando curiosos la bola que tenía el sujeto mal vestido. Todos lo miraron atentamente lanzando la bola roja a lo alto y chasqueando los dedos haciendo que la bola roja exploté en humo rosado y salieran confetis de colores.

Mirai quería contener la risa, ¿Exactamente qué era además de las misiones de viaje que hacía el Uchiha? Esto era cómico, sonríe divertida viendo los lindos confetis de colores caer e desplazarse alrededor de ellos hasta desaparecer. Era bonito ese truco. Aunque no muy convincente.

–No estamos al nivel de los Shinobi, pero usamos Ninjutsu para entretener. –Decía el Uchiha mientras Boruto e Mirai a cada lado asentían sonriendo.

– Qué mal, de todos modos ya le somos sospechosos. –Pensaba Mirai sonriendo tensa, notando la mirada de sospechas de su Hokage joven.

–Ninjutsu, ¿Eh? –Los mira seria la mujer rubia.

–Son muy sospechosos. –Los mira interrogante Naruto pequeño.

Mientras Boruto lo mira un momento y luego a la mujer mayor.

– ¿Saben lo qué ocurrió hace unos días en Konoha? –Les pregunto la mujer mayor.

Mirai sabia eso, según la época era, que un Genin deserto y no cualquier Genin, da un momento una mirada a Sasuke, estaba más serio. Esto de ve de ser un feo recuerdo para él.

– ¿Eh? No. –Responde Boruto mirando curioso a la Hokage.

–Un Genin desertó y abandonó la aldea. –Dijo la Hokage.

Sasuke mira un momento en otro lado, sabia quién era el Genin. Mirai veía en sigilo a Sasuke, de ve de ser difícil para él estar en está situación. Luego ve la expresión triste del pequeño Hokage, escuchar eso de ve doler por no haber podido traer a su compañero.

– ¿Un Genin desertó? –Pregunto sorprendido e inocente Boruto a la mujer.

–Si. Por eso estamos en estado de alerta. Tal vez ustedes no lo entiendan, pero en esta situación, debo ponerles vigilancia. –Decía viendo un momento a Naruto pero luego a los "artistas". Hablar de Sasuke frente a Naruto le entristecía pero tenía que hacerles saber a estos individuos que estaban en una situación seria.

– ¿Nos vigilarán? –Pregunto Mirai.

–Si. No puedo confiar en ustedes tan fácilmente. Es lo que hacemos con cualquier persona sospechosa. Ya estoy siendo bastante laxa. ¿Algún problema? –Pregunto muy seria la mayor.

–No. Entendido. –Responde Sasuke.

–Bien. Jiraiya, Naruto, quedan a su cargo –Sonríe la mayo con los brazos en las caderas. Viendo a los dos idiotas que estaban de rodillas.

– ¡¿Eh?! – Los dos gritan sorprendidos e disgustados al mismo tiempo no queriendo eso.

– ¿Algún problema? –Les pregunto Tsunade frunciéndole el ceño al par.

– ¡Si! –Grita en protesta Naruto.

– ¡Exacto! Pídeselo a Naruto. ¡¿Por qué tengo que hacerlo yo?! ¡Estoy ocupado! Si fueran chicas lindas aceptaría, pero no vigilaré a un mocoso y un jovenzuelo y una niña aunque sea bonita es una menor. – Protesto molesto mientras se cruzaba de brazos Jiraiya.

Boruto e Mirai veían con una gotita estilo anime caer detrás de la cabeza a igual que Sasuke escuchando las tonterías e protestas.

–¿Qué hacemos? – Piensa Mirai. La situación se volvió más que complicada ahora.

– ¡Oye, viejo! –Dice Boruto con una idea acercándose al viejo sensei de su Padre.

– ¿Qué? –Mira molesto al mocoso.

Boruto se transforma usando el Jutsu sexy en una mujer madura e rubia con unas curvas de muerte tentador usando un bañador rosado floral de cerezo mientras su cabello rubio largo y brillante como el sol se balanceaba en ondas suaves y perjudicantemente sexy.

Mirai ruborizada y muy avergonzada casi que se lanza a golpear a Boruto por usar un Jutsu atrevido como ese.

– ¿Y ahora? – Pregunto Boruto mujer con una voz sensual dando una pose inclinada mostrando sus pechos grandes.

– ¡WOW! ¡Lo are! –Grito emocionado el pervertido mientras levantaba el pulgar en aceptación y reía mientras ponía cara de idiota.

Naruto veía al sabio pervertido con indiferencia y volvía a ver al rubio niño de chaleco rojo.

– Sabe lo que hace. –Miraba serio Naruto mirando sospechoso al niño. ¿Cómo supo qué eso era una de las debilidades del sabio pervertido?

– ¿Tú también sabes transformarte? –Le pregunto Naruto al chico mientras se levantaba y se dirigía a él.

–Si, más o menos. Un artista itinerante debe entretener al público. –Se des transforma volviendo a como estaba mientras sonreía y se rascaba la nuca tenso. Había olvidado que su Padre también hacía está técnica.

–Cuento con ustedes. –Dice suspirando la Quinta retirándose y pensando que después enviara a otro a vigilar a estos artista por si esos dos holgazanes no hacían nada.

Sasuke e Mirai se sentían avergonzados.

– ¡Espera! ¡Si lo vigilamos no podré entrenar! –Protestaba Naruto joven.

–Puedes entrenar en otro momento. Aguántate un poco. –Dice Jiraiya viendo al pequeño.

–Pero…

– ¡No seas terco, Naruto! ¡Cuando tenía tu edad, yo era más obediente! –Le grita en la cara.

– ¡Eso yo no lo sé! ¡Tendría que haberte conocido entonces! – Le grita también Naruto encarando al viejo.

– ¡Cierra el pico!... –Grito molesto el Sanin

–Esa conversación me suena. –Decía bajo Boruto con los brazos cruzados detrás del cuello, recordando que en la actualidad había discutido las misma palabras que su Padre antes de venir al pasado.

Pasando unas horas, Tsunade ya se había ido dejando a Naruto y a Jiraiya a cargo de los tres "artistas".

–Qué nervios pasé. – Decía Boruto con los brazos cruzados detrás de su nuca mientras achinaba sus ojos y sonreía.

–Por su culpa ahora tenemos trabajo extra. – Reprocha Naruto.

– ¡¿Perdón?! La culpa es tuya, pa… –Se detiene rápido, casi le decía Papá.

–No lo líes Boruto. – Piensa Mirai viendo a Boruto.

–Quiero decir que es tu culpa por hacer tonterías. –Dice rápido.

–No fui yo, fue el sabio pervertido… ¿He? ¿Dónde está? –Decía Naruto volteando a ver a su maestro pero no estaba.

Los cuatros voltean y ven a lo lejos al Sanin coqueteando a una chica que luego le dio una bofetada y se marchaba molesta.

– ¿De verdad es uno de los legendarios Sanin? –Pregunto Mirai con decepción viendo al peliblanco.

– ¿No se equivocaron? –Dijo Boruto yendo dónde estaba el viejo pervertido.

–No. debería ser él. – Decía también Sasuke con decepción.

–No escarmienta. –Dice avergonzado Naruto ante la mala impresión que daba su maestro.

Los cuatros caminaron hacía dónde estaba el Sanin, ciertamente para los tres Shinobi les era difícil creer que una leyenda tan respetable sea así. Un mujeriego e pervertido.

–Deberías rendirte. –Le decía Naruto al sabio pervertido.

–Cállate. Es un proceso importante para escribir mí novela. –Reprocha volteando un poco notando la mirada avergonzada de los dos "artistas" el adulto y la adolescente. Parece que ellos vieron sus libros

– Novela porno, eso no es importante. – Pensaba Mirai con disgusto mientras se sonrojaba un poco con solo recordar lo picante que eran las dos páginas.

Tenía un libro de Icha-icha escondido en su habitación. Lo había comprado a escondidas para saber que era tan apreciado para que el Sexto Hokage lo venerara con pasión y sentimientos.

–En vez de perder el tiempo podrías entrenarme. –Regaña Naruto.

– Bien dicho, Nanadaime. – Piensa orgullosa Mirai.

– ¿Quieres entrenar? De acuerdo. –Dijo el Sanin volteando.

– ¿De verdad? – Pregunto alegre el joven Naruto, hasta que ve que el mayor señalaba a los tres artistas.

–Tienes que vigilar a esos tres para que no hagan nada raro. Ese será el entrenamiento. –Sonríe señalando y viendo a su pupilo.

–¡¿Eeeh?! ¿Piensa dejármelos a mí? –Grito moviendo exageradamente la cabeza en sorpresa y protesta.

– ¡Calla y haz lo qué te digo! ¡Yo estoy ocupado! –Grito retirándose.

– ¡No escapes, maldito! ¡¿Dónde vas?! –Gritaba el Uzumaki Hokage viendo que su traidor maestro se alejaba.

–Es un viejo pervertido como cualquier otro. –Dijo Boruto mientras Sasuke e Mirai asentían en de acuerdo.