Ya pasaron dos semanas sin la aparición del Ootsutsuki, algo que preocupaba al Uchiha y a la Sarutobi. Que estaban en el complejo Sarutobi por seguridad. Siendo los invitados por Asuma que los mantenía precavidos e ocultos.

Mirai entrenaba un poco con su Padre sobre el manejo de las cuchillas de chakra algo que ha podido perfeccionar sorpresivamente rápido, aunque el control de su chakra era un caso diferente, era una gran cantidad de chakra que desprendía. No sabía porque tenía ese incremento de chakra. Más bien muy pocas veces podía sentir a Urashiki pero luego el desaparecía su presencia. Por seguro entrando a otra dimensión.

Suspira ahora estando en el campo de entrenamiento viendo como Boruto e Naruto entrenaba su puntería a un árbol que tenía un blanco colgado, la técnica que ellos practicaban lo han podido perfeccionar hace tres días, a veces la mejoran más de vez encunado, reforzando sus chakras. Estaba segura que sus resistencias han mejorado en estos días.

Mira al lado suyo a Sasuke, apoyado bajo un árbol viendo con una mirada de nostalgia la zona. El sol pasaba entre las hojas alumbrándolo un poco mientras la suave brisa removía su azabache cabello oscuro.

¿Qué estará pensando?– Pensó vagamente mirando curiosa al mayor. Hasta que ve de lejos que se acercaba una niña de pelo rosa seria con un trozó de papel en mano.

Se levanta rápido viendo en alerta que la peli rosa se acercaba a ella seria. Mira a su lado como esperaba, el Uchiha ya se había oculto. Boruto y Naruto se acercaron también con curiosidad.

–Tengo una pregunta. –Dijo enfocando su mirada Jade en las esmeraldas. Era mejor preguntarle a ella que es la mayor.

– ¿Cuál? –Pregunto Boruto parando al lado de la peli negra mirando algo tenso a la Genin.

– ¿Qué quieres preguntar? –Decía mirando y manteniendo la calma mientras observaba lo seria que estaba la joven Genin.

La Pelirosa extiende un papel algo arrugado con palabras borrosas, indicios de que anteriormente se habían mojado pero leyó unas pequeñas partes visible, los nombres de Sasuke y Sakura en ellos.

¿Dónde saco eso? –Pensó sorprendida reconocido un poco la letra de Sarada.

–Esto se le cayó al hombre que los acompañaba. –Decía la niña mientras los chicos se asomaban y veían frunciendo el ceño.

–Solo se pueden leer algunas palabras. "Boru","Sasuke", "Sakura" "pidiera", de Sarada". – Decía seria pronunciando lo que se leía en ese papel.

Oh, no. Debe ser la carta que le escribió Sarada a Sasuke. – Pensaba preocupado y tenso el Uzumaki viendo la carta. Y a él le advertían más para que no causara problemas. Pero no esperaba que el tío Sasuke fuera el que llegara a desencadenar esté incidente.

Esto era un desastre: Fruncía el ceño con simpleza la Sarutobi agarrando el papel de la futura Sannin medico, es mejor no dejar que ella siga teniendo el papel. Da una mirada a su Padre que estaba viniendo hacía ellos.

–No entiendo nada, pero aquí solo dice claramente Sasuke. ¿Sabes algo sobre él? –Pregunto seria a la chica mientras extendía su dedo y señalaba el nombre escrito.

–Esto…– Decía el Uzumaki sin saber que decir viendo a Mirai muy tranquila.

–Si. –Dijo haciendo que Boruto se ponga pálido y nervioso. –Investigamos la historia de Sasuke Sarutobi, fue un miembro del Clan Sarutobi que se volvió muy famoso por su extraordinario talento, llegando a dominar las cinco transformaciones de la naturaleza. – Decía sonriéndole un poco.

– ¿Sasuke Sarutobi? ¿Por qué les interesa? –Pregunto frunciendo el ceño aún sin creerle.

–Ey, no solo entretenemos a las personas, también nos gusta aprender de las historias de otras aldeas cuándo viajamos. –Interviene el Uzumaki adentrándose al engaño mientras se cruzaba de brazos.

– ¿Pero por qué está escrito? –Siguió preguntando viendo en duda a la mujer y al chico. No podía simplemente creerles así como así. Estaban ocultando algo: Los miras un poco más desconfiada e molesta.

– Anotamos los nombres para no olvidar aprender de su historia. Como aquí, el que dice Sarada. Una doncella muy hermosa que fue una medico prodigio joven de un pueblo lejano que había salvado de muchas enfermedades a las personas, lamentablemente no se ha vuelto hablar mucho de ello y de su paradero. – Decía suspirando pesadamente mirando con sentimientos de frustración el papel que tenía en mano. No era buena actuando y e inventando historias pero no lo hacía tan mal.

–La señorita Mirai tiene razón Haruno-san –Decía Asuma parando al lado de su hija y le sonreía a la niña pelirosada.

–Asuma-sensei. –Mira al mayo.

– ¿No tienes qué estar entrenado? Es raro verte a está hora temprano. Tsunade estará molesta si faltaste por lo que estaba escrito en un papel. Ellos no conocen a tu compañero, pequeño pétalo. – Decía colocando su mano en la cabeza y revolviendo la cabellera rosada a la niña.

–Pero…

–Solo quieren saber un poco de historia de mí clan. Lamento si por ahí hayas malentendido las cosas. Entiendo que extrañes a tu compañero pero andando por ahí acorralando e interrogando a las personas no te llevara a nada solo por escuchar o leer el nombre. –Decía serio pero amable.

–Ya veo. –Dice sonriendo bajo. –Siento haberles molestado. –Voltea y se retira, dejando al grupo.

–Sakura-chan… –Decía bajo Naruto viendo con tristeza como ella se retiraba: Baja su mirada viendo en un punto sin importancia el suelo. Si hubiera sido más fuerte y traído a Sasuke de vuelta a la aldea, ella no estaría así. Siente una mano en su cabeza y levanta la vista viendo a Nee-chan mirándolo preocupada.

– ¿Estás bien? –Pregunto preocupada ante la actitud deprimida de su futuro Hokage.

–Si, estoy bien Nee-chan. –Dice sonriendo ante la calidez y preocupación que emitía Mirai.

Asuma sonríe viendo con orgullo como su hija alegraba al niño haciendo que se sintiera mejor.: Agarra un cigarro y lo enciende mientras se alejaba y se sentaba bajo un árbol.

Pudo ver ante la sonrisa falsa de Haruno que no creyó mucho de lo que dijo. Espera que no cause controversias en ellos y esparza el rumor hasta la Hokage.

–Gracias por aparecer antes, no soy muy buena inventando excusas. –Decía Mirai sentándose al lado de su Padre pero un poco más apartada por el humo del cigarrillo.

–Hay que tener cuidado, en especial por el Uchiha ante el descuido que a hecho. –Dice bajo sonriéndole a su hija.

La tarde paso tranquila Mirai se separa de su Padre para buscar a Sasuke mientras su Padre acompaña a los chicos para ir a comer con el bentos que había traído.

Caminaba en el bosque buscando a Sasuke y lo ve aparecer saliendo entre los árboles, se acerca a él y extiende el papel que tenía.

No podía creer que haya sido descuidado, por poco Sakura los descubría, agarra el papel mirando que estaba manchado e in entendible.

–Gracias, Lamento haberme descuidado. –Decía bajo viendo aún el papel para luego guardarlo bien.

–Descuida. –Dice sonriéndole.

Estuvieron solos e silencio un largo rato.

– ¿Cómo te sientes? –Pregunto serio viendo la mirada rojiza de Mirai.

–Extraña. Fuerte y cansada. –Dice bajo por su chakra, últimamente se sentía fuerte, su chakra estaba fortalecido e refinado en especial cuándo sus sentidos se han desarrollado. Estaba segura que de ve de ser el efecto del lazo que tiene con Momoshiki. Aunque ya no siente otros cambios en ella.

Resopla y se apoya en un árbol, aunque que tenga estás cualidades ciertamente la hacían sentir agotada, por la falta de costumbre sobre esta nuevas habilidades que no acostumbra usarlos.

Veía a la Kunoichi agotada, notando una pequeña hoja caer en su cabello oscuro e rebelde, se acerca a ella parando en frente.

– ¿Sasuke-san? –Dice viendo la cercanía del mayor.

–Tienes una hoja en tu cabello. –Dijo bajo extendiendo su mano hasta la cabellera de la Kunoichi. le quita la hojita lo arroja aún lado, pero luego prosiguió tocando esos mechones oscuros e rebeldes, no entendía porque lo hacía pero eran suaves.

Algo incomoda e sonrojada veía al Uchiha distraído en su cabello.

–Me gusta tu cabello. –Dijo bajo, pero se da cuento lo que hace y se aparta, viendo la mirada brillante y rostro sonrojado de la joven.

–Gracias, es la primera vez que dicen que mí pelo es bonito. El tuyo es lindo también. –Le sonríe apenada mientras desviaba su rostro.

Aunque el de Momoshiki es más lindo. –Pensaba recordando el hermoso cabello largo e lila de su príncipe. Deja de sonreír al sentir a Urashiki.

–Urashiki. –Dijo seria alejándose del árbol y mirando dónde sentía la presencia.

Sasuke observo serio dónde ella estaba viendo. De la nada se escucha una explosión en el campo dónde estrenaban los chicos, los dos prendes a correr hacía el lugar escuchando una pelea.

Al llegar ven a Jiraiya herido y Asuma manteniendo a los chicos detrás de él.

–Mirai-sama, je, me alegro de verte, espera ahí e no te involucres, cuándo acabe con ello y obtenga lo que quiero, te llevare conmigo. –Dijo sonriendo una mirada seria, ya no quería perder el tiempo. Pero esquiva rápidamente el ataque del Padre de la humana, para luego esquivar otro ataque del Zorro que venía por detrás.

–No te atrevas a acercarte también a mí Nee-chan. –Gruño molesto fulminando al hombre.

–No sé que relación tienes con mí hija pero no permitiré que la toques. Ella no ira contigo a ningún lado, Imbecil. –Escupió con veneno Asuma, fulminando al Ootsutsuki. No dejara que obtenga el chakra del Kyubi, ni menos que se llevara a su hija.

– ¿Tú hija? –Dice sorprendido Naruto viendo al mayor.

–Kukuku. Son unos ilusos. –Dijo divertido de los patéticos que eran mientras atacaba y esquivaba los ataques.

Sasuke se une a la lucha mientras Mirai corría dónde estaba Jiraiya herido.

–Estoy bien, solo es un rasguñó. No te reocupes. –Decía sonriendo a la Kunoichi.

–No es un rasguñó. –Dice preocupada viendo la herida que no paraba de sangrar. Naruto fue empujado por Asuma quedando al lado de ellos.

En los arbustos Sakura se asoma estando escondida y viendo lo que sucedía.

¿Qué está pasando? – Veía preocupada. Ese hombre había aparecido de la nada y los había atacado. ¿Qué ara? ¿Ir por Tsunade a pedir ayuda que seria lo más lógico o quedarse a ver que era lo que pasaba en primer lugar? Se muerde el labio viendo lo que pasaba en la pelea.

–No sabía que Asuma sensei tenía una hija. Jamás pensé que era esa chica. –Decía viendo el otro lado a la chica. ¿Entonces Kurenai sensei y Asuma tuvieron una hija en secreto?

Boruto rodea a Urashiki con sus clones de sombra y lo atacan pero el Ootsutsuki sonreía tranquilo esquivando y golpeando al verdadero de una patada mientras deshacía los clones con su lazo sin tener que moverse mucho. Pero esquivo rápido al Uchiha y al Jounin que casi le rozaban. Podía notar que el Uchiha aún estaba agotado podía ver su agitación.

–Je, eres tan patético. –Se burla para luego esquivar al otro humano. –Eres un pesado Asuma Sarutobi. –Dice sonriendo un poco volando hasta arriba pensando en como atrapar al zorro pero…

Mirai-chan. – Sonría activando el rinegan mientras rápidamente tomo desprevenido a la Kunoichi en brazos.

Mirai se sorprende dándose cuenta que estaba en brazos del Ootsutsuki, ¿En qué momento se ha acercado? Observo como el lazo de chakra se enrollaba alrededor suyo manteniendola inmóvil mientras aún Urashiki la sostenía.

– ¡Mirai Nee-chan! – Grito Naruto mientras sus ojos se entornaban rojos.

–Lo siento pero es mejor que te tenga antes que al mocoso además no quiero que te entrometas más. – Dijo serio abriendo un portal en el aire sobre él mientras lanzaba a Mirai dentro rápido antes que el resto lo detuvieran.

Ya en otra dimensión se encontraba Mirai acostada en el suelo, lentamente se levanta con esfuerzo ante las molestas ataduras hasta que reacciona mirando a su alrededor.

– ¿Dónde estoy? –Susurro viendo el lugar grisáceo, con bases rectangulares y cuadradas.

Inspecciona el lugar, camina mirando el lugar con curiosidad, se acerca al bordé del pilar dónde estaba: Viendo hacía abajo, era un abismo oscuro que paresia no tener fondo.

–Tengo que volver ¿Pero cómo? – Dice retrocediendo y mirando alrededor. Cierra sus ojos y forcejea usando su fuerza para romper el lazo de chakra que la ataba.

Vamos, rompete. –Pensaba concentrándose más hasta que el lazo se rompía desapareciendo, quedando ya liberada.

Sonríe un poco pero aún estaba preocupada por los demás y más si no puede estar allá para ayudar. Estaba atrapada en otra dimensión y no sabe cómo volver.

No podía hacer nada: Se muerde el labio molesta mientras apretaba sus puños quedando sus nudillos en blancos. No podía protegerse así misma ¿Cómo diablos podría ayudar si todo lo qué intenta hacer le sale mal?

Quería llorar e maldecir a mil demonios por su maldición, se sentía tan inútil de nuevo: Se sienta en el suelo abrazando sus piernas mientras intenta no llorar ante su desliz que cometió al dejar que el enemigo la secuestrará.

–Bien hecho Mirai, siempre siendo la victima en vez de defenderte. Que patética Shinobi. –Se regaña así misma con un poco de ansiedad.


En el otro lado, en el campo de entrenamiento Urashiki buscaba a los Shinobis que se habían ocultado. Suelta un quejido de dolor, no esperaba que se pusieran como locos por Mirai y casi esos infelices lo matan. Ciertamente ella si que es una mujer muy sentimentalmente importante para todos.

–Diablos duele mucho. El Padre de Mirai-chan si que da buenos golpes y cortadas. –Decía mientras tocaba su torso cortado e casi magullado manchado de su sangre. Si no peleaba en serio, si que lo habrían matado.

Ciertamente tiene que dejar de subestimar a los humanos si quería cumplir lo que quería hacer en primer lugar, a gastado mucho chakra que colecto usándolo en esa estúpida tortuga, si se hacía aún el tonto, todo terminaría en vano.

– Son unos entrometidos. –Decía molesto mientras sostenía una katana. Ciertamente no esperaba ser empujado hasta la cascada y se sentía muy avergonzado, ya siendo que podía volar, pero estúpidamente se había olvidado que podía hacerlo en ese momento.

En un arroyo Sasuke estaba inconsciente mientras una niña de pelo rosado se acercaba a él. La peli rosa se inclina cerca del mayor viendo su rostro.

– ¿Quién eres? –Pregunto bajo e curiosa viendo al azabache.

Sin más lo levanta sujetando su único brazo colocándolo sobre su hombro, no esperaba que no tuviera brazo el pobre hombre.

–Pesa mucho. –Decía esforzándose en moverse llevando al mayor a un lugar seguro donde lo pueda sanar, sin que ese sujeto extraño los encontrara.

En el otro lado del bosque estaba Jiraiya con los dos Uzumaki sentados detrás de unos arbusto pensando que hacer en la situación.

–Piensa bien en el motivo por el que les pidió que huyeran. – Decía serio el Sannin a los niños.

Mirai-san. –Piensa preocupado e molesto por no saber que hacer en una situación así, si tan sólo pudiera tener un poder o algo para poder abrir portales. Sasuke podría pero no sabe cuanto chakra le queda.

Por mí culpa Nee-chan fue secuestrada. –Pensaba Naruto impotente de que el maldito se llevara a su Nee-chan.

–Ya has visto lo que puede hacer Urashiki. –Decía Jiraiya serio interrumpiendo los pensamientos de los jóvenes Genin mientras recordaba lo que había dicho presumidamente el enemigo. Mis ojos pueden ver el futuro.

–No creo que estuviera mintiendo. –Dice serio el Sannin recordando esos ojos rinegan. Le recordaban los que tenía Nagato, su antiguo estudiante.

– ¿De verdad puede ver el futuro? –Pregunto el futuro Hokage, esto parecía una locura si era así entonces como podrán confrontar a ese tipo.

–Es posible. Sea quién sea, nunca había oído hablar de una técnica para ver el futuro. Si no descubrimos qué truco usa… No podremos vencerlo. –Decía serio mirando en frente a lo lejos el bosque, Asuma fue a buscar a Sasuke, espera que esté bien.

Urashiki caminaba siguiendo el arrollo y ve unas marcas en el suelo. Se acerca observando serio unas huellas pequeñas. Se inclina observando bien las pisadas.

– ¿Se lo ha llevado un niño? –Dice serio sonriendo un poco, deben de estar ocultos cerca de dónde está. Está era una huella más pequeña.

Bajo en un gran árbol entre las raíz Sakura curaba con su chakra curativo al hombre que aún permanecía inconsciente, esto podría agotar su chakra pero tenía que ayudarlo.

– ¿Qué está pasando? ¿Quién era ese enemigo? Necesito que despiertes pronto. –Dice tensa, centrando su chakra en la lesión pero se sorprende viendo que aparecía Asuma enfrenté suyo.

– ¿Sakura? ¿Qué haces aquí? –Decía sorprendido, viendo que lamentablemente la niña se había involucrado.

–Asuma-sensei. –Dijo aliviada de verlo.

– ¡¿Me oyes?! –Los dos escuchan al enemigo no muy lejos de dónde estaban.

–¡No sé quién eres, pero no te pongas en peligro! ¿Por qué no nos ahorramos el trabajo ambos? – Decía estando levitando sobre un tronco cortado mientras sonreía.

Asuma se escabulle bajo la raíz viendo a distancia a Urashiki, aprieta sus puños enojado mirando con desden al hijo de puta, seria buena oportunidad en tratar de emboscarlo pero no tiene la fuerzas suficientes para confrontarlo, no solo además que tiene que cuidar a Haruno y a Sasuke.

– Si me entregas a ese hombre te perdonare la vida. –Decía calmado el Ootsutsuki mirando con sigilo alrededor esperando ver un movimiento para poder atacar.

¿Nos ha encontrado? No, todavía no. –Pensaba seria y tensa Sakura estando al lado del Sarutobi. Observa al sensei, estaba preocupada, no sabe que fue lo que hizo el sujeto con su hija, espera que la chica esté bien.

– ¿Por qué morir por un hombre que ni conoces? –Seguía hablando mientras Sakura volvía dónde estaba el azabache, tenía que ayudarlo.


Mientras en la dimensión Kamui.

Mirai veía seria a un sujeto con túnica negra cubierto de pie a cabeza estando en frente suyo, no sabe quién es pero podía sentir esa energía extraña ¿Era un Ootsutsuki? ¿Akatsuki? Se sentía distinto al de Urashiki pero luego recuerda haber sentido esa energía antes cuándo fueron a rescatar a su Hokage.

–Esto es una gran sorpresa. –Dijo serio y bajo el hombre con voz ronca e profunda. Entonces no estaba equivocado de que hubiese alguien aquí además del tipo de la mascara naranja de espírales que a veces pasaba en está dimensión pero como puede ver, es la primera vez que ella está en esté lugar.

– ¿Quién eres? – Decía tomando postura defensiva por si el desconocido intentara atacarla.

–Eso lo debo de preguntar yo, jovencita. –Decía cortes y serio enfocando sus ojos negros en las escarlatas.

– ¿Qué relación tienes con Ootsutsuki? – Pregunto de repente viendo serio como ella se tensaba y retrocedía sin quitar su vista de él.

–Mí relación con Ootsutsuki no te incumbe. –Sabe que no era buena idea provocar al sujeto pero su instinto le advertía a gritos que era peligroso, es mejor no decir nada más, en especial si está en el pasado.

Esa chica era una descarada, le recordaba molestosamente a Delta que recientemente había sido creada por Amado. Se acerca a ella viendo que se tensaba al moverse. Tenía tantas preguntas en mente.

–No te acerques. –Demando seria e amenazante, viendo al hombre de la túnica detener sus pasos ante su demanda.

– ¿Sabes dónde están? –Pregunto bajo e ronco.

–No. Aunque lo supiera, jamás te lo diría. – Responde seria sintiendo un sudor frió en la nuca, realmente le asustaba un poco esté extraño, sentía que si dejaba de verlo la atacaría, observo con detenimiento la capucha intentando ver su rostro, su aspecto no lo podía ver del todo.

Veía que ella no mentía, era muy bueno ver que si uno miente o no. Sin muchos rodeos es mejor preguntar que hace aquí, después podrá averiguarlo, la joven estaba vulnerable y sola en un lugar desconocido, no le seria extraño que lo tratara hostilmente con desconfianza.

–Te regresare a tu mundo. Si me cuentas como llegaste aquí. –Dice bajo viendo como la joven Kunoichi bajaba un poco sus defensas mirándolo sorprendía pero en duda.

– No lo sé. Solo de la nada aparecí aquí. – Miente, hubiera sido imprudente decirle a un desconocido del pasado que tal vez sea aliado de Akatsuki de que un Ootsutsuki la mando a está dimensión. Y a saber cómo es qué saben de ellos.

No fue una mentira convincente pero era mejor, observo que el de la túnica negra permaneció en silenció, sin apartar la mirada seria, haciendo que se sintiera incómodamente rígida.

Es una mala mentirosa. –Pensó serio e indiferente. Abre un vórtice espiral oscuro al lado suyo viendo en parte la reacción de la joven mujer.

–Como puedes ver, también abro portales de espacio tiempo, pero veo que no es la primera vez que ves algo así. –Dice serio. El vórtice que tenía al lado estaba dirigido a otra dimensión dónde hace sus reuniones, podrá llevar a la mujer allí e interrogarla.

Veía dudosa al sujeto, pensando que hacer, antes de decir algo al extraño de la túnica negra, dio un paso en frente, hasta que, la tortuga Karasuki que tenía guardado en su bolso ninja comenzó hacer ruidos de alerta haciendo que se sobresaltara y retrocediera.

– ¡Advertencia! ¡Advertencia! Ha hecho contacto peligroso. –Comenzó a decir varias veces la tortuga poniendo rígida a la Sarutobi, que de momento observó con preocupación y seriedad al sujeto, tenía que alejarse, evitar más estar cerca de él. ¡Esto es malo!

Jigen abre ligeramente sorprendido sus ojos negros carbonizados, ¿Era Karasuki? Pensó que se había deshizo de esa inservible reliquia hace miles de años. Observa a la joven Kunoichi intentando que la tortuga se callara pero sin dejar que él lo vea.

–Ya veo. –Murmuro comprendiendo desasiendo el vórtice, era una viajera, por así decirlo, que caso tan peculiar que una humana pueda usar el aparato mediocre. Para él es un desperdicio de chakra. No valía la pena usarlo.

Según la posición de dónde están, es de Konoha, abre otro vórtice al lado suyo dónde tenía el otro. Casi comete un error en entrometerse. Como ella no es Ootsutsuki no puede hacer nada, podría peligrosamente cambiar el futuro o pasado en que estaba.

–Esté vórtice te conducirá a Konoha. Vete antes de que me arrepienta mujer. –Dice serio. Es mejor no meterse, no es su asunto, aunque si está viajera hace algo en contra las reglas en especial su futuro de reencarnar la mataría.

¿Esto era un truco? ¿Una trampa? ¿Por qué ayudarla así cómo así? No se conocían. Lo mira dudosa, da un vistazo al vórtice negro, era su única salida ¿Pero y si él mentía? No tenía muchas opciones, así que da un paso al frente caminando con cuidad mirando con récelos al sujeto.

Trampa o no, no tenía opciones que confiar ciegamente de esté desconocido. Respira hondo parando al frente al vórtice. Antes de entrar se pone rígida al sentir la mano del encapuchado en su hombro, voltea su cabeza viendo de reojos al hombre alto. Observo unos ojos negros profundos y luego sus rasgos, su barbilla tenía una marca negra en forma de diamante. Le recordó a Sakura nada más que el de ella era púrpura y lo tenía en la frente.

–No arruines nada, o yo mismo te buscaré. –Dijo inclinado detrás de ella susurrándole la amenaza en el oído sintiendo lo rígida que se a puesto mientras deslizaba su mano a la espalda de la joven y procedía a empujarla ligeramente dentro del portal.

Al ver que ella ya no estaba, procede a volver a su escondite a ver los resultados de Amado para encontrar su receptáculo, tardaran bastante pero estaba seguro que pronto podrá encontrar al elegido.


Mirai caía del vórtice hasta el suelo que por suerte no estaba muy alto al aire. Se sienta en el césped agitada ante el susto que le ha dado ese extraño.

–Karasuki ¿Quién era él? – Pregunto sacando con cuidado a la tortuga que saco su cabeza del caparazón. Se había alarmado cuándo la tortuga había reaccionado así de repente en esa dimensión.

–Lo siento, Mirai-sama. No puedo proceder en contarle. –Dice con su voz robótica.

–Entiendo. Siento ponerte en problemas. Iré a ayudar a Sasuke-san. – Decía seria.

–Descuida Mirai-sama. –Dice metiéndose en su caparazón.

Sorprendentemente estaba en Konoha y en el mismo lugar dónde Urashiki había aparecido, tal vez ese hombre era amable, aunque, recuerda su amenaza. Parece saber de la situación aunque no sabría decir si es verdad.

Si algún día nos encontramos le agradeceré por su ayuda. –Pensó mientras se levantaba, cuándo regresé a su actual futuro, podrá investigar quién era él.

Después de recorrer el bosque preocupada subió a unos árboles grandes, buscando pistas de Sasuke o de Naruto. Se detiene en una rama lejos viendo un muro de tierra con un circuló en medio.

–Doton Doryuheki. – Dice bajo reconociendo que era una de los jutsu de Jiraiya. Está cerca, devén de estar escondidos, ya siendo que estaba herido el Sannin. Esperaba que su Padre y los chicos estén bien.

Iba a saltar al otro extremó del árbol hasta que siente un escalofríos sintiendo la presencia de Urashiki.

– Me sorprende que estés aquí Mirai-chan. ¿Cómo has hecho para volver? –Pregunto de repente Urashiki haciendo que la humana se sobre saltara y volteara rápido a verlo.

En el otro lado

–Sakura, espera aquí y cuida a esté hombre. –Ordeno Asuma, le pareció ver a su hija pasar, se alerto viendo que detrás de ella lo seguía ese sujeto intentando atraparla.

–Tranquilo, yo me ocupo. Ve con cuidado Asuma-sensei. –Decía confiada la niña con una mirada decidida en ayudar. Aun que estaba un poco tensa.

–Cuento contigo, Sakura. –Dice sonriéndole e revolviendo su cabello rosado para luego salir rápidamente de dónde estaba escondiéndose.

Urashiki tenía acorralada a Mirai entre un gran árbol mirándola serio. Ella intento apartarlo pero él ejerció más fuerza agarrando su cuello levantándola y acercando su rostro a la de él.

–Te lo volveré a repetir, Mirai-sama. ¿Cómo has hecho para volver? –Gruño serio, esto lo molestaba no quería perder tiempo pero ella lo terminaba retrasando.

–No lo sé. –Miente intentando que la soltara. A tratado de patearlo pero aún así el permanecía inmóvil aunque podía notar unas muecas de dolor.

– ¿Así? –Dice sonriendo molesto apoyándola en el tronco del árbol mientras procese en apoyar su cuerpo en la de ella haciendo que se pusiera rígida y lo mirara sorprendida mientras apretaba más su mano en el cuello.

–Detenté. –Protesto sobresaltándose y gruñendo. Esta situación le daba un ligero e amargo recuerdo. Que la había sellado con cierto príncipe.

–Me pregunto si él te ha hecho esto cuándo se conocieron. Siendo que él abuso de ti y trato de violarte. –Dice recordando lo de Momoshiki aquella noche.

Según esa mirada que le estaba dando ella parece que si lo recuerda muy bien: Sonríe divertido, al ver como creaba confusión y enojo a la humana, sobre esa noche con Momoshiki, de ve de estar emocionalmente inestable entre un mar de sentimientos amargos e vergüenza por querer a semejante sujeto.

Suelta el cuello de ella mientras con una mano sujetaba sus muñecas sobre su cabeza impidiendo que le propine un golpe que podría partirle el cuerno.

–Sabes Mirai-chan. Momoshiki-sempai fue el que me rompió el cuerno. Solo por usar el mismo método lo que él no a podido completar contigo. –Dice bajo ignorando las protestas de ella. Su mirada rojiza era tan linda. Sonríe ante esa mirada.

–Suéltame. –Demando molesta e incomoda, no estaba interesada en escuchar, lo que más le preocupaba que él se cernía más sobre ella viendo como lentamente invadía su espació personal.

–Ése lado tan malo Mirai-sama. –Dice serio dejando de sonreír, observa la mirada desafiante.

Había olvidado que ella era lindamente intrépida. Era entendible porque Momoshiki la apreciaba tanto en cierta forma claro.

Antes de seguir con su monologo ve al Shinobi paterno de la Sarutobi, rápidamente suelta a la humana y esquiva una gran patada que iba a provenir en su cabeza.

– ¡Aléjate de mí hija! – Grito serio poniéndose en frente mientras sus cuchillas se envolvían en chakra.

–Je eres un…hum? – Se iba a burlar pero de la nada aparecen los mocosos y el mayor que rápidamente se mordió su pulgar e hizo un sello de mano y ve alrededor oscurecerse ¿En dónde se enseraban?

– ¿Dónde estamos? – Pensaba la Sarutobi al lado de su padre y los chicos.

–Arte ninja Atadura de boca de sapo. – Decía Jiraiya serio viendo al Ootsutsuki.