Especial [20 favoritos]

Nota de autor:

Gaiden es un término popular japonés

que describe una historia paralela dentro de otra historia. Es decir, el uso de gaiden se utiliza comúnmente en la ficción japonesa para referirse a un spin-off de una obra publicada anteriormente que no se considera oficialmente una secuela ni una precuela

Dicho esto, les pregunto.

¿Alguna vez han deseado ver la historia de Amber cuando estaba viva o de Raven en sus días en el clan?

Por último, quise crear un personaje que les ayude a escapar a Glynda y compañía. Para justificar su aparición, hice este especial, además de que esto ayudará a introducir otras cosas. Espero que les guste y si ven el final, solo puedo decir que tengo un amigo al que le gusta cierto anime de peleas y me gustaron algunas cosas de la historia.

(...)

El golfo de Nomad Bay es un mar que, por lo general, es evitado por las grandes industrias marítimas debido a que gran parte de sus playas y bahías pertenecen al territorio de la "Nada". Como era de esperar, la falta de autoridades ha generado la proliferación de la anarquía en las áreas habitables de la región, convirtiéndolas en víctimas de amenazas de piratas y Grimms. Incluso, algunos pueblos de difícil acceso se han convertido en refugio para los bandidos del mar. Sin embargo, hay una excepción: el pueblo pesquero conocido como "Queen Elisa Bay".

En este lugar, los piratas han sido prohibidos desde hace algunos años y son exterminados si se aventuran en su territorio. Esto se debe a una joven quien ha sido nombrada protectora por el propio alcalde del lugar. Su nombre es Amber, alias "La Protectora de Elise Bay".

Una formidable joven mujer frente a la cual nadie se atrevía a enfrentarse.

Para sorpresa de muchos, solo hubo un pirata al que ella le dio su consentimiento para atracar en su puerto. Se llamaba Black Jones, la pesadilla de los barcos mercantes provenientes de Atlas.

Su relación era más de socios, ya que él podía proveer recursos que la corrupta administración real no podía suministrar al pueblo. A cambio, ella le otorgaba refugio en caso de que sus rivales intentaran atacarlo en momentos de debilidad, entre otros beneficios.

Desafortunadamente, pasaron meses desde la última vez que atracaron y era predecible que algo malo estaba ocurriendo en ese lugar. Afortunadamente, estaban en el golfo cuando sospecharon que algo no iba bien.

Recientemente, la comunicación por radio se cortó repentinamente cuando anunciaban su llegada y lo único que pudieron escuchar fue el grito de las personas en pánico y el encargado de las comunicaciones pidiendo auxilio a la administración real. Aunque no solían involucrarse en este tipo de asuntos, esta vez su aliado más valioso en la región estaba en problemas. Su sentido del honor no les permitía quedarse de brazos cruzados.

Cuando el barco del capitán cambió su rumbo hacia Queen Elise Bay, este ya tenía sus propios motivos para dirigirse allí, además de defender a su aliado. Resulta que hace poco, un amigo suyo, traficante de armas para los nómadas de la Nada, aceptó un encargo altamente remunerado por parte de individuos particulares originarios de Vale. Entre estos individuos se encontraban los notorios cazadores Qrow Branwen y la hermosa subdirectora de Beacon, Glynda Godwitch. Deseaban ser transportados discretamente hacia el pueblo de Queen Elise Bay en una misión que no se habían molestado en explicar.

Al principio, el capitán dudaba de sus acciones, pero luego recordó que probablemente tenían un motivo importante. Esto se debía a que conocía bien a todos ellos, ya que él también había sido estudiante de Beacon en sus días de juventud.

Orgullosamente el era miembro de la misma generación que dio a luz al temido equipo STRQ, y sus demás cazadores afamados. Aunque, a diferencia de ellos, el dedico después su vida a la piratería luego de graduarse. Una vida que eligió con convicción hasta el día de hoy.

Si ellos se dirigían al desastre que estaba ocurriendo en ese lugar, necesitaran su apoyo. Parte de su intuición, le avisaba de un desastre inminente.

"Ha pasado un tiempo" Pensó reflexivamente desde su camarote.

Lo único que no puede negar es que tenía varios recuerdos gratos en aquellos años. Unos más que otros en compañía de sus amigos en aquellos años.

Sobre todo, los que tuvo con su ex lideresa.

(...)

—¡Vamos Morgan!, ¡no te quedes atrás!—Dijo una chica con voz de ángel.

—¡Vamos alumnos! Esto solo es calentamiento, ¡Esos 10 kilometros no se recorrerán solos!. Solo tenemos media hora para hacerlo—Exclamó el profesor Izuku corriendo al mismo tiempo que la clase sin cansarse.

Recordaba que tenia que hacer un entrenamiento brutal con el maestro supuestamente joven que le toco, Izuku Midoriya. Un profesor bastardo que le hizo sufrir, pero al mismo tiempo le hizo un bien para cuando salió al mundo.

En aquellos momentos de debilidad, una hermosa chica líder de toda la clase le daba aliento y le animaba a seguir. Su nombre era Summer Rose, y su aura de ángel era el alma para todo la clase.

—Si, voy lideresa—Dijo el joven Morgan jadeando de cansancio.

(...)

Como cualquier joven tonto, se termino enamorando de ella. Obviamente, en su momento también fue realista. Nunca iba poder a estar con ella.

Incluso el tiempo le mostró que jamás tuvo oportunidad, ya que cayó en los brazos de otros compañeros y un bastardo. Luego, no pasó mucho para que tuviera una familia propia, con sus propios hijos.

—Al menos viviste feliz, Summer—Dijo el capitán melancólico, mientras encendía un cigarro. A su vez, checaba en su mapa oceánico que tan aproximado estaba de Elisa Bay.

A pesar de todo, el siempre respetó su decisión y continuó con su vida. Aunque, la tuvo que vivir lejos de los amigos que hizo en la academia. Después de todo tenía que cumplir con su meta de auxiliar a los suyos en su hogar natal, Paradise Bay.

La principal razón por la que eligió esta vida.

Paradise Bay es un isla hecha para los millonarios en Remannt, y también es el pilar del comercio de esclavos Faunos y humanos en la región norte del continente. Mientras era suministrado por empresas Atlasianas. Un infierno para quienes laboran ahí, que el mismo tuvo que vivir desde su infancia.

De repente, nuevamente se acordó de su maestro.

—Me pregunto dónde estarás maldito viejo.

Por más rencor le guarde a su maestro Izuku, el siempre le reconoció su sueño de auxiliar a su gente sometida por los Atlasianos y esclavistas. Hasta le llegó a ayudar para contactar con un conocido suyo en el negocio para que orientará, al terminar de estudiar Beacon. No sin antes darle consejos suyos, derivados de su propia experiencia.

Si nuevamente viera a ese hombre, no sabría si golpearlo por el pasado o invitarle una cerveza por apoyar en un inicia su carrera criminal como pirata.

Al cabo de un rato, sus pensamientos fueron interrumpidos por un miembro suyo de la tripulación.

—¡Capitán!—Dijo un hombre entrando al camarote del barco.

—¿Que pasa?

—Estamos cerca de Queen Elisa Bay, pero hay problema.

—¿Cuál?

—Esta...—Dijo el hombre con un nudo en su garganta— El mar cerca de la costa está lleno de cadáveres.

No tardó mucho después al salir a la cubierta y observar el panorama desolador. Cómo le habían dicho, el mar estaba lleno de cadáveres de la gente del pueblo pesquero.

Hasta este punto, el punto de acción más obvio estaba enfrente de sus ojos.

—¡Mierda!... ¡Los cazadores a cubierta! No vaya a ser un ataque de un Leviantan o algo peor—Dijo el Capitán Black Jones dando órdenes a su tripulación.

Solo el sabía la clase de destrucción que haría un Leviantan cerca de la costa.

Si el amado pueblo de Amber, la invicta chica que puede derrotar a Grimms de clase SSS o más, cayó. Significa que algo o alguien muy poderoso la derrotó. Por lo cual, está gente cayó asesinada en consecuencia.

Dentro de si, tenía miedo que la misión de auxilio de sus compañeros también había fracasado a manos de quién derrotó a Amber.

También, de que los atacará por sorpresa.

—¡Señor! ¡Mire!

De repente, el vigía en la torre de vigilancia del barco captó cerca de la costa algo inusual.

—¡Mierda! —exclamo en shock el capitán.

Estaba hundiéndose rápido el barco de su amigo que le había comentado acerca de la misión. El Zenobia III estaba lleno de Beowolves destrozando su cubierta y masticando a sus víctimas de la tripulación. A esas criaturas no les importaba morir ahogadas y por lo visto, desafortunadamente no pudieron alejarse mucho de la costa.

Para la desgracia de sus antiguos compañeros, esa era su única ruta de escape de este infierno y necesitarían rápidamente auxilio.

—Ignorenlos, ya están muertos. Solo podemos auxiliar en tierra a los que están vivos. ¿Entendido?—Dijo dirigidose a sus subordinados.

—¡Si!—Afirmaron como siempre.

Para cuándo llegaron a tierra, el humo de una destellante batalla se veía a la distancia, justamente en el centro del pueblo.

—¿Capitán? Si quiere, podría juntar un grupo de cazadores que le acompañen para rescatar a nuestra aliada o evacuar—Dijo un lugarteniente del capitán.

—¡No!—Dijo tajantemente a su suborndinado.

Entonces continuo dando órdenes.

—Ire solo, ustedes defiendan el bote de posibles ataques grimms. Para mi, la prioridad es salvar a mis antiguos compañeros. No queremos tener el mismo destino de ese barco que vimos, ¿No?

No fue difícil despedirse de su tripulación y dejarlos que defiendan el barco para su regreso. Confiaba en ellos y es solo lo que importaba.

A la vez, confiaba en su propia fuerza para enfrentar a los enemigos.

(...)

—¡Oye bruja!, ¿no crees que hay demasiado polvo y escombro aquí?—Dijo la mujer llamada Cinder, con una sonrisa sádica—Creo que necesitan un poco de brisa...

En ese momento, Glynda se percató de que algunos pequeños pedazos de escombro sueltos en el lugar y polvo que los rodeaban, se habían empezado a movilizarse sobre ella, formando un pequeño remolino. Con un simple movimiento de manos, todo esa acumulación se había sobrecalentado a una temperatura extrema. Formando en el proceso, diversas masas de vidrio fundido, que se esparcían en posiciones diferentes en el aire. Para finalmente convertirse en cientos de cuchillas de vidrio en dirección suya. No le fue difícil deducir que su Semblanza le permite sobrecalentar objetos y manipular su forma.

—Tsk

Viendo su inminente ataque, Glynda no sé quedó de brazos cruzados y aún desarmada sin su Fusta, utilizó su Semblanza a través de sus manos para invocar un muro protector telequinético. Tratando de que los proyectiles cubrieran a Qrow, un herido Clover y a la doncella inconsciente en el escape. No podía dejar que esos hombres que mantuvieron a raya a ese sujeto se sacrificarán en vano.

—¡Escapen!

—¡No!—Dijo negandose Qrow, mientras todavía tenía a la chica en sus brazos

El inquisidor había eliminado al último de los compañeros de generación de Qrow, solamente quedando Clover con una herida prominente en el abdomen. Afortunadamente, la contaminación no llego por que ese monstruo le había herido con su propia arma.

—¡Tenemos que huir!, ¡Tenemos a la doncella!—Dijo Clover débilmente, producto de su herida— No creo tener suficiente suerte para retrasarlo más.

—¡No dejaré a nuestra ex maestra aquí idiota! —Exclamo Qrow mirando a su compañero herido.

Inesperadamente un fuerte viento llegó hacia su posición y dispersó el miasma que lo estaba afectando. Todo esto fue obra de un hombre, quien se interpuso entre el inquisidor y los que quedaban vivos.

—¿Morgan?—Exclamaron sorprendidos ambos hombres.

—Maestra, derrota a esa loca. Yo les daré tiempo—Dijo el hacia Glynda, quien afirmó débilmente con su cabeza. Ya que todavía tenía el esfuerzo encima.

[Fin del especial]