Azul Eléctrico
Dolor
Joder.
Estaba jadeando en el suelo de lo que desde hace dos semanas era mi habitación. Cambiar de guarida cada pocos meses no era algo que odiara a decir verdad. Me hacía sentir libre de alguna retorcida manera, como si de irme de lugar en lugar me ayudara a no crear lazos, a no crear recuerdos, ya tenía demasiados.
Mi respiración aún estaba agitada, mi piel estaba llena de heridas pero mi mente, mi mente estaba realmente jodida en este momento. El entrenamiento de Orochimaru hoy fue el peor que he tenido desde que me uní a el. El bastardo decidió que era un buen momento para ponerme a prueba: decidió que me enfrentase a un ejército entero de hombres. Yo no era ningún idiota, era obvio que ese ejército venía en busca de la cabeza del Sannin y aunque para esa serpiente no sería mucho esfuerzo acabar con ellos, decidió que yo lo haría. No era la primera vez que acababa con la vida de alguien, nunca significó nada para mí hacerlo, nunca hasta hoy. Los soldados me rodearon y comenzaron a atacarme con espadas y arcos. Era bastante estimulante ver cómo a pesar de su numero y sus ataques lograba esquivarlos sin error blandiendo mi espada sobre cada uno que se atravesaba en mi camino. El sonido de la carne siendo divida al filo de mi espada era lo único que quería escuchar. Sus gritos no me amedrentaban, sus súplicas no significaban nada para mí, hace mucho que nada parecía tener significado. Iba aproximadamente a la mitad cuando todo se fue a la mierda. Por un solo segundo, un jodido segundo mire a uno de esos hombres y me maldije en cuanto lo hice. Sus ojos eran azules, era un azul grisáceo, no como el azul vivo del cielo, como los de ella, pero me bastó para caer de rodillas en ese instante. Había demasiadas flechas y espadas en mi dirección como para lograr esquivarlas todas, para que mentir, muchas de ellas las sentí venir con suficiente antelación para esquivarlas pero no lo hice, no quise hacerlo. De pronto cuando se me clavaron en la piel todo cobró sentido de nuevo y continúe con mi trabajo, mis golpes estaban llenos de furia después de lo ocurrido, eran más precisos, más constates mientras el número de hombres disminuia. Orochimaru me miró con desaprobación desde lejos cuando termine con el último de los hombres, como siempre intenté apuñalar al sanan de ojos de vivar con un movimiento rápido pero esa serpiente tenía reflejos mucho mejores que los míos, por ahora.
En cuanto puse un pie en la oscura mazmorra sentí una urgencia, intente controlarme pero no me di cuenta de que estaba corriendo hasta que el eco de mis acelerados pasos se hizo presente. Abrí la puerta de un sonoro golpe y la cerré con otro. Me recargué en una pared y la golpee lo suficientemente fuerte para que toda la habitación temblara pero me daba igual, había decenas de habitaciones iguales a esta por todo el lugar. La odiaba tanto. Era como un ancla que me hundía a su antojo y siempre hallaba la manera de hacerlo, solo una similitud, una imitación de su recuerdo bastaba para quebrarme como lo hizo hoy. Cerré los ojos. Te odio Naruko, te odio.
Un regalito para todas ustedes que siguieron la historia, son 4 capitulos desde la perspectiva de Sasuke que nos hablan de su vida a partir de que se fue de la aldea y despues de estos 4 capitulos subo los poquitos que existen de la segunda temporada
Las quiero mucho, bye