Azul Eléctrico 2
3. Imbecil
Perdí la cuenta de las horas que transcurrieron mientras viajábamos porque mi mente estaba completamente perdida. Cuando logre volver a la realidad estaba frente a las grandes murallas de Sunagakure y un horrible estremecimiento me recorrió toda la espalda.
-Tsk.- no pude evitar soltar un sonido de molestia.
Era hora de entrar a la aldea escondida entre la arena y había muy pocas cosas en esta vida que me causarán más desdicha que tener que hacerlo.
Dos guardias preguntaron nuestros nombres y cuando reconocieron finalmente a Jiraya y lo llenaron de cumplidos y alabanzas el Sannin no hizo más que sonreír. Me gustaba verlo feliz sin importar la razón por la que fuese pero es algo que jamás le diría, porque comenzaría a contarme sus aventuras eroticas.
Los guardias nos dejaron pasar y en cuanto entramo a la aldea senti como si tuviera cinco años de nuevo, corriendo por las calles, jugando con mis hermanos y un recuerdo me golpeo de pronto, la imagen de Gaara y yo sentados en el edificio más alto de Sunagakure, su aroma mezclado con el de la arena misma inundando el ambiente, mi mano siendo tomada por la suya mientras miraba su rostro y sus ojos aqua siendo iluminados por un cálido atardecer.
-Naruko ¿te sientes bien?- preguntó Naruto preocupado devolviéndome al presente.
Asentí mientras mis manos se volvían puños temblando de ira y apretaba los dientes con fuerza. Sasuke ya no existía, pero Gaara si, al igual que mis ganas de matarlo. Naruto y Jiraiya me miraron extrañados por el resto del camino así que tuve que calmarme, o al menos aparentar hacerlo. Llegamos a la oficina de mi padre, es decir, el Kazekage y cuando la puerta fue abierta por el Sannin la mirada del líder de Sunagakure se encontró con la mía. Sus ojos marrones tenían arrugas que no solían existir pero su mirada se había ablandado, tenía una sonrisa en el rostro y antes de que pudiera reaccionar tenía sus brazos envolviéndome.
-Naruko.- dijo recargando su cabeza en la mía -Has vuelto a casa.- dijo apretándome más entre sus brazos
Yo no diría que he vuelto a casa.
-Hola Padre.- me limité a contestar mientras me soltaba
-Pareces toda una mujer ahora.- dijo sonriendo -Todos estarán felices de verte.- dijo antes de saludar a Jiraiya
Yo no diría que todos.
Después de la extraña presentación entre mi padre y mi hermano gemelo, Jiraya comenzó a contarle todo lo que había sucedido con su investigación sobre akatsuki estos tres años y ambos comenzaron a sacar conclusiones.
Podía sentir mis músculos arder al pasar de las horas mientras cambiaba incómodamente de posición en la silla de dónde no me había movido desde que llegue mientras Naruto, por supuesto, estaba profundamente dormido desde hace rato.
-Naruko, cariño, lamento haberte hecho esperar todo este tiempo.- dijo mi Padre mirando a Naruto roncar
-No te preocupes.- conteste poniéndome de pie
-¿Porque no van a arreglarse en lo que Jiraiya y yo terminamos de hablar?- sugirió
-¿Arreglarnos?- pregunte confundida
-Por supuesto, olvide mencionar que he preparado una cena especial, no puedo evitar celebrar que mi niña ha vuelto.- dijo con una amplia sonrisa
Maldita sea, yo solo quería dormir.
Desperté a Naruto y caminamos hasta salir de la oficina cerrando la puerta detrás nuestro pero me detuve un momento al escuchar al kazekage hablar de nuevo.
-¿Porque Naruto está tan callada conmigo?- preguntó el Kazekage
-No es contigo, Naruko ha pasado por muchas cosas.- dijo Jiraiya suspirando -No esperes que actúe como una niña todavía.- contesto
Suspiré y tome a Naruto de la mano para finalmente salir del edificio, no quería escuchar mas.
Sin darme cuenta mis pies ya me llevaban en dirección a la tienda de ropa favorita de mi madre y Naruto solo me seguía admirando la aldea. En un par de minutos estábamos de pie frente a la gran tienda con luces blancas y un suelo del mismo color, la tienda estaba dividida en dos grandes pisos para dama y caballero respectivamente. Entramos y en ese instante aparecieron dos dependientas vestidas con el uniforme de la tienda.
-Bienvenidos ¿En que podemos ayudarles?- preguntaron al unísono amablemente, pero yo no estaba de humor para contestarles de la misma manera.
Tome a la señora mayor de la mano e hice que tomará la mano de mi hermano, ambas partes estaban muy sorprendidas pero no tenía tiempo, entre más pronto hiciéramos esto más pronto podría irme.
-No lo pierda de vista y no lo deje salir de la tienda sin un traje formal.- ordene
-Así será.- contesto la señora sonriendo y llevándose a un muy confundido Naruto al piso de arriba.
-Necesito un vestido.- dije mirando a la asombrada dependienta
-P-por supuesto.- tartamudeo -¿Que tan llamativo lo necesita?- preguntó nerviosa
No me tomo más de un segundo pensarlo.
-Quiero el vestido más llamativo, hermoso y elegante que tengas.- conteste con una sonrisa que hizo estremecer a la pobre señorita.
Y sin darme cuenta había comenzado mi plan para hacer que Sabaku no Gaara se muriera al verme. Si no podía hacer que su corazón se detuviese entonces lo haré acelerarse tanto como era posible. No puedo decir que era muy maduro de mi parte, pero venganza se había convertido en mi segundo nombre.
Una hora y treinta vestidos después estaba vestida con un maravilloso vestido rojo de con manga larga que parecía de ensueño. Era del mismo color rojo que las puntas de mi cabello, se ceñía a mi cuerpo hasta la altura de la cadera y luego se dejaba caer suavemente hasta el suelo, el vestido tenía un diseño de hojas que cubría mi piel pero al mismo tiempo dejaba expuestos mis hombros y un escote pronunciado pero que se contenía lo suficiente para no ser vulgar. Tenía unos tacones negros altísimos que me tomo veinte minutos dominar pero estaba segura de que no quería ningún otro zapato.
Pagamos por la ropa y arrastre a Naruto esta vez a la estetica. Le cortaron el cabello como a el le gustaba tenerlo, en estos meses no habíamos tenido tiempo ni de respirar, por lo que cuando menos nos dimos cuenta su cabello estaba lo suficientemente largo para cubir sus ojos. A el nunca le gustó llevar el cabello largo pero a mi parecer se veía aún más guapo. Opté por un maquillaje de noche que me favorecía y aunque tardaron mucho, rizaron mi cabello en ondas suaves que le daban volumen.
Me di cuenta de que había sido tan tonta como para salir de la oficina sin saber dónde ni cuándo era aquella cena, ni mi padre se había dado cuenta de que había olvidado informármelo. Por suerte mientras me arreglaban en cabello un pequeño sapo azul apareció de la nada, asustando a las señoritas y brincando a mi regazo. Sin más preámbulo vomito una especie de papel con algo escrito y se fue inmediatamente.
"No dejas de ser una distraída Naruko, la cena es a las 8:30 en la mansión del Kazekage, si pretendes huir ten por seguro que voy a encontrarte a ti y al cabeza hueca de tu hermano en menos de diez minutos"
Al menos tenía la dirección, cuando las estilistas terminaron conmigo, me puse de pie con algo de dificultad y mire el enorme reloj que tenían colgado en la pared. 10:30. Maldita sea, Jiraya no tardaria en venir a cortar mi cabeza. Desperté a Naruto que se había quedado dormido en el sillón de espera y lo tome de la mano con la esperanza de llegar antes de que el Sannin nos encontrará.
Me mire por última vez en el espejo de la estética y una malvada sonrisa se asomó por mis labios color escarlata.
Ahora si, me despido oficialmente de ustedes.
Voy a hacer algo que yo quisiera que todos los autores de historias cronicamente incompletas (nana) hubieran hecho: les voy a contar que ideas tenia para el resto de la historia.
Naruko y Naruto vuelven a la aldea, Naruko entra en un misterio sobre Itachi (el hombre desconocido de los primeros capitulos de rojo escarlata) para al final terminar enamorandose de el, despues desarrollan su relacion segun va avanzando la trama (los eventos de shippuden suceden casi igual) hasta que Sasuke se involucra otra vez, Naruko es confrontada por sasuke por haberse enamorado se su hermano, ella prefiere a Itachi porque el no la abandono pero en eso sucede lo mismo que en Shippuden **spoiler** y Sasuke mata a itachi/ el se sacrifica por Sasuke, obviamente Naruko lo odia pero despues lee una carta de Itachi diciendole que espera que ellos sean felices y le explica porque se sacrifico para su hermano (para liberar a Sasuke de ser vengador), ademas de que el iba a morir pronto por su enfermedad. Naruto va enamorandose de Hinata y se vuelven pareja oficial, ademas de que todas la otras parejas van desarrollandose con trama logica (no como el final de shippuden). Sakura se queda sola. Fin
Adios, las quiero mucho mucho mucho.
