Ladies and Gentlemen!

Muy bien, es fin de semana y saben lo que hay este día. ¡Actualización de esta maravillosa historia! Realmente tengo que seguir agradeciendo a mi beta que me ayuda en todo momento, a menos en la revisión de mi historia, yo me enfoco en volverla a leer en el momento que regresa a mí y así ver los cambios que se aplicaron. ¡Realmente le debo de agradecer por todo lo que me ayuda a pesar de que ella está ocupada la mayor parte del tiempo! En especial para poder describir algunos lugares o en este caso especial, ropa. ¿Por qué ropa? Bueno, ya lo verán.

It's time to read!

It's showtime!


Aclaración: Yu-Gi-Oh! VRAINS no me pertenece. Es propiedad de Kazuki Takahashi. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir mis historias que se podrán leer a continuación.

Aclaración: Con estas historias no estoy cobrando por ninguna ganancia o regalía. Solo escribo para el entretenimiento de todo público pidiendo permisos al autor. Cualquier aclaración, pueden escribir en los comentarios su opinión al respecto.


En el momento que Jin vio a Yusaku, no pudo evitar soltar la bandeja de sus manos el ruido llamo la atención tanto de Ryoken como de Shoichi. Los ojos completamente abiertos del joven Kusanagi y como prácticamente había empezado a caminar, casi correr para poder atrapar a la joven frente a él en sus brazos. No pudo evitar llorar como un pequeño niño, abrazando a la misma con fuerza y ocultando su rostro en su hombro. Fue la chica quien soltó una pequeña risita para poder pasar sus manos por alrededor del cuerpo del mismo y darle pequeñas palmadas. Sonriendo mientras sentía como la estrujaba más.

-Ya estoy aquí Jin -Fue lo que susurro.- Todo ha terminado, lamento no haber ido por ti como lo había prometido

-Pero sé que cumples tus promesas -Fue lo que Jin murmuro.- Sabía que ibas a regresar, sabía que ibas a volver a este lugar -La separo un poco de sí para verla con atención, la diferencia de estaturas era obvia, tanto que Yusaku se levantó en puntitas para poder acariciar sus cabellos morados que ya se encontraban un tanto largos.- Siempre confié en que ibas a regresar

-Gracias por confiar en mi Jin -Sonrió.

-Bienvenida a casa Yu -Jin sonrió, quitándose las lágrimas de su rostro y sonriendo para ella como hace tiempo aprendió.

-Ya estoy aquí, Jin

Ambos amigos no pudieron evitar soltar pequeñas risitas y volver abrazarse. Shoichi solo pudo sonreír y soltar un pequeño suspiro pero fue en ese momento como Ryoken solo se había quedado ahí quieto, haciendo sus manos puño y tratando de mirar a otro lado. El dolor que aún tenía el joven usuario de Revolver, era demasiado grande que no podía dejar su orgullo a un lado para poder disfrutar de aquel evento. Solo negó, sabía que en algún momento, ellos se las arreglarían para volver a ser esa joven pareja de duelistas de la que todos tienen un poco de envidia, incluso él. Prefirió mover su cabeza de un lado a otro para dejarle aquellos temas complicados a la joven pareja y poder carraspear un poco para llamar la atención de todos los presentes. En el momento que Yusaku lo miro, la chica no pudo evitar sonreír mientras hacia una pequeña reverencia.

-También me alegra verte con bien Yu-chan -Shoichi soltó una risita, desde hace tiempo que no le decía así, no pudo evitar recordar un poco cuando la conoció y le pidió que le dijera así porque odiaba su nombre.- Pero, ¿Qué es aquello tan importante que nos tienes que decir?

Yusaku soltó un pequeño suspiro, mirando a otro lado, justamente donde la ambulancia había llegado para atender a ese empleado que cayó desmayado. Observaba con atención como lo subían con cuidado a la camilla para poder llevarlo al hospital más cercano. Empezó a mirar a su alrededor, las personas que estaban más cerca, se habían alejado en el momento que sucedió aquello y llamo la atención de todos. Solo estaban ellos cuatro, la chica solo volvió a mirar a todos los presentes, incluso, mirando con atención a Ryoken para poder desviar su mirada y sonreír con tranquilidad.

-Si, necesitamos hablar pero hay otra cosa que quiero hacer antes de que todas esas personas regresen a comprar algo de comer -Hablo tranquila.- ¿Aun tienes instalado el equipo de tu camión?

-Nunca lo desmantelaría -Sonrió Shoichi.- Anda, sube y cierren la puerta para poder empezar a investigar ¿Cómo en los viejos tiempos?

-Como en los viejos tiempo, Shoichi -La chica sonrió, espero a que Jin guardara las mesas y se subiera. Fue ese tiempo en el que los ojos de ella y los de Ryoken chocaron. El usuario de Revolver aún mantenía la mirada desviada, mirando a otro lado.- También deberías de entrar -Fue lo que ella dijo para llamar su atención, en el momento que aquellos celestes se posaron con los suyos, alzo los hombros despreocupada.- Solo es si quieres, tampoco te voy a estar obligando, solo lo decía

La chica subió a la parte trasera del camión una vez que la ventana de servicio se encontraba abajo. Ryoken rasco su nuca, miro a un lado, después miro a otro lado y solo suspiro. La puerta trasera estaba abierta al final, la curiosidad fue más fuerte para poder caminar y subir a esa parte del camión para cerrar la misma detrás de él. Al estar adentro, se sorprendió de lo bien equipado que estaba aquel lugar, un puesto de perritos calientes ambulante, solo era un disfraz para lo que realmente se guardaba en aquel lugar. Observo a la única chica presente empezar a mover sus manos con rapidez en el teclado táctil que se había formado y los monitores que se encargaban de buscar algún tipo de información. Podía observar aquellos ojos esmeraldas moverse con rapidez para al fin, ver como la información se detenía al momento de que aparecía la imagen y datos de un hombre.

-¿Quién es él? -Pregunto curioso Jin.

-Es el hombre que se desmayó -Comento señalando a sus espaldas como aún se escuchaba el ruido de las personas hablando.- Furukawa Makoto es solo un empleado en SOL, diría que no es de gran importancia pero fue él quien aplico el programa que revelo el nombre de Revolver y de otros usuarios más en Vrains o eso fue lo que me dijo

-¿Fue él? -Pregunto Ryoken un tanto furioso.

-Pero no fue por que quisiera hacerlo -Ella suspiro para mirar a Ryoken, después mirar al monitor, teclear un par de cosas.- Alguien más se lo ordeno, no podía rechazar la orden cuando viene de la persona más importante, mucho menos cuando amenazan a tu familia

-¿Quién se lo ordeno? -Pregunto Shoichi.

-King, uno de los antiguos directivos de SOL -Menciono ella, recargando su mentón en sus manos y mirando de reojo a Ryoken.- De alguna manera, se contactó con un empleado de SOL y la condición es que siga sus órdenes para que pudiera rescatar a su familia, esa es la amenaza que le aplicaron a este sujeto, no dudo que alguien más dentro de la empresa, este en las mismas situaciones -Escupió un poco molesta.- Como las piezas más importantes del ajedrez, se encargan de utilizar a los peones como sacrificio antes de querer llegar a ellos

-¿Y qué es lo que busca este tipo llamado King? -Pregunto Jin entendiendo la situación.

Un pequeño silencio se formó en ese momento, los tres hombres no pudieron evitar mirar a la única que contenía aquella información. Como esta solo se dedicaba a mirar frente a ella, la información que esos monitores presentaban. Aunque uno de ellos estaba enfocado en el mundo virtual y mejorado de Vrains. Miro por algunos momentos este monitor para poder cerrar sus ojos por un momento y recargar su frente en sus manos. Ignorando el ruido que estaba a su alrededor, enfocándose en lo que aquel mundo tan fantástico como la red pero también peligroso, le puede otorgar a todos. Enfocando todos sus sentidos, sintiendo la tormenta de datos, cada uno de aquellos algoritmos. Aquellos "1" y "0" como todo lenguaje típico, todo alfanumérico que fuera capaz de encontrar en su camino. Un pequeño escalofrió que le recorrió al momento de sentir aquel lugar pero que fue capaz de disimular en el momento que Shoichi poso su mano en su hombro para poder hacerle regresar. Fue en ese instante que soltó un pesado suspiro y alzo la mirada para poder girar en aquella silla y así poder encarar a ellos tres, sentir la mirada de todos pero en especial de Ryoken. Decidió no prestar atención a ello.

-Algo que se esconde en lo más profundo de la red -Hablo por fin.- Y no me refiero a todos esos sitios de mala muerte, no, hay algo más que se esconde dentro de ese lugar -Volteo a sus espaldas para ver en los monitores y después volverlos a mirar.- Una puerta que es capaz de esconder detrás de sus narices, un mundo entero, la información que se necesita o algo más

-¿Qué es ese algo más? -Pregunto Ryoken.

La chica solo negó.

-Ni yo lo sé, no he podido llegar a ese lugar, solo se dé su existencia -Alzo los hombros despreocupada, miro a Ryoken.- King te busca por alguna razón pero ahora que sabe que lo desconoces, en estos momentos me está buscando, está buscando a Playmaker para que le de todo tipo de información que le sea útil para tener bajo sus manos este secreto, una verdad que alguien escondió

-La verdad que alguien escondió

El sonido de un celular sonando fue lo que les llamo la atención, incluso saco a Jin de sus pensamientos mientras murmuraba las palabras de su amiga, la chica metió sus manos en sus bolsas para poder sacar su celular miro con atención la pantalla. Era un mensaje. Tomo un poco de aire para poder levantarse de su lugar y caminar a la salida, no sin antes, mirar a sus espaldas, tocar el centro de su disco de duelos , en ese momento, envió un mensaje. Los presentes, miraron que este se trataba de las coordenadas de un lugar en Vrains.

-Tengo que atender otros asuntos pero en tres días, vengan a la siguiente ubicación -La chica les dirigió una pequeña sonrisa.- El mensaje que les estoy enviando, también será para todos los aliados ese día les daré todas las respuestas que buscan, incluso más cosas que en este momento no les puedo contar -Alzo la mano, despidiéndose de ellos.- Nos veremos hasta ese día, por favor, por cualquier cosa que encuentren extraña, aléjense de los problemas lo más rápido que puedan

Fue así como ella solo salió por la puerta. Dejando a todos los presentes mirándose, observando la ubicación que ella les otorgaba. Fue Ryoken quien no dudo en seguirla, salir por aquella puerta corriendo para encontrarse con su figura, no podía creer que ella realmente caminara tan rápido y se mezclara muy bien entre las personas para evitar ser encontrada.

-¡Yusaku!

Fue aquel grito que salió de lo más profundo de él. Provocando que la chica volteara.

-¿Sucede algo? -Pregunto un poco preocupada.

-¿En serio me dirás todo lo que paso en este año? ¿Me dirás por qué decidiste irte y dejarnos solos? -Tomo un poco de aire, correr no era lo suyo.- ¿Podrás confiar una vez más en mí?

La gente seguía pasando a su alrededor, ignorando lo que sucedía entre aquellos dos jóvenes. Ella bajo la mirada un poco y lo volvió a mirar con aquella decisión que siempre le ha gustado de la duelista.

-Nunca he dejado de confiar en ti -Ella sonrió.- Siempre lo hago a pesar del daño que puedo ocasionar pero esta vez regrese para quedarme al lado de mis amigos, al lado de mi familia, al tuyo y de mi pequeña Aiko, ella sigue siendo mi pequeña niña -Soltó una pequeña risita.- Estoy aquí para hacer lo correcto, es para eso que he regresado, porque realmente los extrañaba

-¿En serio lo harás?

-Lo hare, cambiare el destino y mi futuro a su lado -Subió su mano a su pecho.- Cambiare aquel futuro para poder estar a tu lado como te lo prometí

Ryoken sonrió.

-Entonces, te seguiré esperando Playmaker

-Espérame Revolver, no olvides de ir a ese lugar, los estaré esperando

Ella solo dio media vuelta antes de ponerse la capucha en su cabeza y seguir caminando para perderse entre la gente. Ryoken solo soltó un pequeño suspiro para sonreír un poco y caminar por donde venía. Tal vez, no había sido malo dejar aquellos pensamientos a un lado para poder correr a su lado una vez más. Sí, todo saldría bien.

.o.

En el momento que Yusaku regreso a Den, decidió pasarse por el puesto de perritos calientes para poder visitar a Shoichi y comentar un poco de lo que pasaba. Claro, todo iba bien hasta el momento que vio aquellos blancos cabellos de Ryoken, y a un hombre sospechoso que se encontraba detrás de él. No dudo en mirar con atención para saber que este trataba de seguirlo. ¿Para qué motivo? Estaba segura que lo sabría con lo silenciosa que podía llegar a ser. Siendo cautelosa a su alrededor para que las personas no noten que estaba siguiendo a alguien. Observando a todos lados si se podía tratar de una trampa y actuar con normalidad hasta que llegue el momento de interceptar a ese hombre que al final, termino por hablar de todo ante el nerviosismo de aquella arma filosa en su cuello, objeto que le había robado a Kengo aunque estaba más que segura que se había dado cuenta de que faltaba algo. Cubriendo su rostro con su capucha, fue que escucho todo, incluso que esta vez, los antiguos directivos de SOL realmente estaban dispuestos a hacer todo lo posible por recuperar lo que le han quitado.

Aunque eso significara que tuvieran que utilizar aquello a su favor. Cosa que le parecía incorrecto. Fue bueno interceptarlo, al menos, así podría tener un plan para poder controlar a todos esos perros rabiosos. Aunque la reunión con Shoichi y Ryoken, salió un poco mejor de lo esperado, realmente no se podía quejar. Se detuvo un poco para poder olvidar lo que había pasado hasta hace unos momentos, tomando un poco de aire ahora que se encontraba sola en aquel lugar, ni siquiera, sabía en qué momento había llegado, alzo la vista para ver el atardecer del cielo, como el mismo se empezaba a pintar de naranja y azul oscuro para poder apreciarse las pequeñas estrellas que se alzaban en lo más alto. Aunque claro, no se podía ver con claridad por la cantidad de contaminación que se podía encontrar en el ambiente, era realmente molesto que no dudo suspirar frustrada. Si estuviera en las costas de Den, sería capaz de ver el cielo aún más hermoso de lo que las personas lo han visto, podría escuchar el sonido tranquilizador de las olas rompiéndose en las rocas con las que chocan. Sintiendo aquel aire frio que era capaz de hacer contraste con el cálido ambiente. Incluso, sería capaz de mirar el Stardust Road que solo se puede apreciar en ese lugar, poder disfrutar de estar en los brazos de Ryoken y poder tener a su pequeña Aiko entre los suyos como siempre soñó.

-Hare todo lo posible por cambiar ese futuro Ai -Murmuro.- No permitiré que sea víctima de mis propias decisiones, si detrás de esa puerta se encuentran las respuestas -Sonrió.- No dudare en proteger la misma

Miro a todos lados una vez que dejo de murmurar. No había personas en aquel lugar, cosa típica en el lugar donde vivía Dojun Kengo. Miro el departamento tan lujoso que no dudo en entrar al mismo y saludar a las pocas personas que se encontraban y que ya la conocían. Claro, solo ellos sabían que era una compañera de trabajo, incluso algunos más tenían el pensamiento de que se trataba de su hermana menor, aquí ninguno sería capaz de imaginar lo que realmente pasaba entre ellos, que ambos eran hackers pero fue ella quien decidió contratarlo para que le ayudara en los problemas que pudieran llegar a tener. Subió por las escaleras, hasta llegar al piso indicado y poder burlar de nuevo la nueva cerradura electrónica que este había puesto. Soltó una pequeña risita, tal pareciera que aún no entiende que ni esas cosas iban a ser capaces de detenerla, aunque tal vez era porque este no comprendía que era inútil colocarlas. Una vez que abrió, entro con cuidado, porque sabía que Kengo era capaz de disparar en ese momento sin importar si se encontraban personas cerca de ella. Y no lo dudo en el momento que este solo saco el arma del cajón más cercano para poder apuntarlo a ella.

-Eres una estúpida ¿Cómo se te ocurre aparecer de esta manera? ¿Acaso no te he dicho que toques la puerta antes de que burles la cerradura de mi departamento? Eres la única que conozco que haría cosas como esta -Escupió molesto Kengo.- ¿Ahora qué vienes hacer metiéndote en la casa de otros?

-¿Así me agradeces al ser tu única compañía? Es más fácil abrir la cerradura por mi sola que esperar a que me abras la puerta ¿Recuerdas? La última vez estuve afuera por varias horas y todo porque estuviste conectado a Vrains -Se burló ella, alzo las manos en rendición en el momento que el caza recompensas volvió a enfundar su arma.- Tranquilo que no vengo a pelear, solo a traerte aún más noticias de las que no nos imaginábamos

-¿Y eso que es?

-King -Dijo cortante y directa llamando la atención de este.- King tomara este asunto entre sus manos, tomara a los empleados de SOL como peones sin importarle a quien debe de sacrificar -Kengo le miraba con atención.- Hará lo que Queen, no fue capaz de hacer aunque me temo que esta vez, podría llegar a ser un poco más arriesgado para todos, será más aterrador por los sacrificios que un rey debe de tomar en el campo

-¿Y eso nos va a detener?

-No -Sonrió.- Por más peligro que se recorre, es porque hay algo más que no estamos viendo ¿Me seguirás ayudando a pesar de los riesgos que se van a correr a partir de este momento?

-Eres la que me pagas, deberías preocuparte más por tu dinero -Alzo los hombros despreocupado.- Pero si quieres contarle a todas esas personas sobre lo que hemos encontrado, es mejor trabajar de una vez

-Tres días, tenemos tiempo suficiente para poder encontrar algo más

Fue en ese momento que la chica miro su disco de duelos y solo con un pequeño clic, aquellos mensajes empezaron a llegar a todos los destinatarios.

.o.

En el momento que los discos de duelos empezaron a sonar de un nuevo mensaje, los destinatarios no pudieron evitar mirar con un poco de curiosidad el mismo. No pudieron evitar abrir los ojos un tanto sorprendidos al ver de quien era el origen del mensaje. Tomaron con cuidado su disco de duelos para poder apretar la pequeña esfera que este tiene y poder ver como un holograma aparecía donde indicaba que el mensaje tenía que ser abierto.

Las coordenadas de una ubicación. El mensaje que pedía que se reunieran al tercer día de que el mensaje les llegara. Algunos, no pudieron evitar llamarse los unos a los otros para preguntar por el mensaje, en caso de que fuera una broma o una trampa pero sabían de buena manera que la duelista no era capaz de realizar una broma de mal gusto, no era de ese tipo de personas. Por lo que decidieron tomar eso como algo serio. Aquel mensaje que incluso llego a Miyu y las ganas de Jin de querer entrar aquel mundo virtual, tan desconocido pero que a todos es capaz de gustarle. Aoi que solo asintió ante los pensamientos de su hermano, una noticia que desde el tiempo que ella se fue, ya estaban esperando para poder ayudarle en todo lo que puedan hacer. Go Onizuka que solo sonrió, al saber que aquella fuerte duelista se encuentra bien, mirando a los niños del orfanato y pensando si había algo más que los pudiera amenazara a ellos, se encargaría de protegerlos, para eso, todo ese tiempo había entrenado.

Los caballeros Hanoi no pudieron evitar abrir los ojos sorprendidos pero al ver la sonrisa de Ryoken y la manera en que este asentía, solo les confirmaba que aquello era cierto. La comunicación entre Shoichi y Emma solo se hizo más fuerte al querer investigar de lo que pudieran hablar en aquel lugar, cosa que no encontraron información, ni siquiera Emma pudo sacársela a Kengo que solo alzo los hombros un tanto molesto de tantas preguntas que prefería alejarse lo más pronto de su hermana menor antes de que lo volviera loco. Y Yusaku, la chica duelista solo se encontraba inmersa en Vrains en busca de algo.

El tercer día llego.

Takeru que cayó rendido en su cama, como cada noche, no pudo evitar tomar su disco de duelos y sonreír un poco ante la nostalgia. Fue en ese momento que vio una pequeña luz en la pequeña pantalla de en medio. Un tanto curioso, no dudo en encender su dispositivo y ver que se trataba de aquel mensaje. Abrió los ojos sorprendido, se dio cuenta que ese mensaje le había llegado desde hace tiempo. ¿Cómo es que a penas lo noto? Miro la hora en la mesa de noche al lado de su cama. Tal vez, aun podría ser posible que llegue a la reunión antes de que empiece. Se sintió un poco nostálgico en el momento que puso sus cartas en la ranura principal. Sonrió un poco y después, solo dijo las palabras que todos en ese momento, dijeron.

-¡Into the Vrains!

Era un lugar tranquilo, alejado de los curiosos y con varios sistemas de seguridad para evitar que fueran encontrados. Cosas que nadie sería capaz de realizar cuando realmente todos los encargados, se encontraban en ese lugar. Incluso, algunos podían asegurar que los duelistas curiosos de seguir investigando nuevas islas, se encargaban de pasar por su lado, al lado de aquella base de operaciones invisibles y solo accesible para aquellos que recibieron una invitación. Uno por uno es que empezaron aparecer. Donde algunos se saludaban amistosamente. Mientras otros se quedaban en su lugar con las personas que conocían. Incluso nuevos avatares como los de Jin y Miyu, no pudieron evitar hacerse presentes. Observando todo con atención, incluso sorprendiéndose de los avatares que se podían encontrar en ese momento. Como a Revolver, que Jin no tardo en saludar y que este se sorprendiera un poco por la visita de este. Avatares como ellos, no debían de faltar cuando era Playmaker quien los reunió. El último en llegar y casi como siempre, fue Soulburner que un tanto apenado solo menciono que hasta apenas había leído el mensaje, ganándose algunas risas de los presentes y como Revolver le hablaba sobre lo inútil que era molestando un poco al duelista de fuego.

Guardaron silencio en el momento que escucharon unos pasos. Miraron a la lejanía como aquel de nombre Blood Shepherd se hacía presente. Se hizo a un lado para poder dejar pasar a la persona que todo el mundo estaba esperando por ver.

-¿Playmaker?

No dudo en preguntar Soulburner un tanto dudoso por la imagen que estaba frente a ellos.

No era la típica imagen que recordaban de la duelista que todos guardaban en mente. Incluso, aquella sonrisa que la duelista era capaz de presumir con aquel nuevo cambio de vestuario a su avatar, aquellos mismos ojos verde eléctrico que era tan común en ella. El largo cabello de fuego ahora era corto alborotado en una coleta alto que ni siquiera llegaba a los hombros mientras las puntas se mantenían alzadas aunque algunas cubrían un poco sus mejillas. Aquel típico flequillo amarillo con mechones rosados que se mantenía en su lugar. Seguía utilizando aquellos colores verdes como la línea amarilla que pasaba por su cuerpo pero su vestuario tenía otro estilo. Parecía una guerrera, debía reconócelo ese nuevo avatar se veía mucho más práctico para el campo. Como que los hombros se encontraran descubiertos, el cuello seguía siendo alto, en sus brazos ahora había un par de guantes, como si su traje se hubiera separado por piezas. La idea practica fue eliminada al ver aquel par de tacones que seguía haciendo lucir su estilo de avatar, su traje aún era ajustado y marcando sus curvas propias de la silueta de su cuerpo, pero ahora el cinturón plata era holgado, y de su lado al lado izquierdo de su traje salía un holan de color verde en pico, el pequeño triangulo delineado con una línea amarilla seguía la de su pecho, recorriendo su cuerpo, como si de una pequeña falda a la mitad se tratase.

-Muy bien, es hora de hablar


¡Muchas gracias por leer!

¿Alguien siquiera imagino que nuestro protagonista (ahora mujer) tendría un cambio de vestuario en su avatar? Realmente les puedo decir que ya se venía venir, si ella cambio su corte de cabello. ¿Por qué no cambiar su estilo de ropa de avatar? Era una pequeña sorpresa que ya tenía esperado en el momento que llegara a esta parte de la historia. A mi realmente me hubiera gustado ver algo así. ¡Aquí estoy para hacer realidad todos sus sueños!

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Por cada comentario el escritor desvelado tendrá una gran sonrisa en su rostro y más energías al seguir escribiendo.

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¡Nos vemos a la próxima!


Atte.: AnZuZu Dragneel

Fecha: Sábado 22 de Agosto de 2020