Día 6: Se conocen en una boda

Odiaba las corbatas, odiaba los trajes, pero sobre todo odiaba las bodas. Su madre lo había obligado a ir, en su representación. Según su madre lo tenía que hacer por que Deku era su amigo, y ahora se casaba con aquella chica de cabellos largos negros.

Y ahora se encontraba en aquella situación donde estaba solo, bebiendo de su copa de champagne, todos se divertían, comían, saludaban a los novios y se divertían en general.

—¿Puedo sentarme? —-Dijo una dulce voz, al verla se dio cuenta de que era una de las damas de honor.

Llevaba un vestido rosado de mangas cortas, adornando su pecho con una suave gasa llena de flores, en su cabello llevaba una pequeña trenza a un costado y una corona de flores. Su falda era una tela de gasa sobre una tela de seda. Aquella chica la había visto en la ceremonia, ella sostenía el ramo cuando su amiga estaba diciendo acepto, y pudo ver como una lagrima caía de sus ojos.

"Otra chica que llora en las bodas" Fue el pensamiento que cruzo cuando la vio desde las bancas de aquella pequeña iglesia.

Pero al verla ahí parada junto a su mesa con los ojos rojos y la mirada triste le hizo preguntarse el porqué de las cosas.

Afirmo a su pregunta y la chica se sentó a una silla vacía al lado de él, saco de su pequeña bolsa plateada un pequeño espejo con polvo, se retoco el maquillaje y se volvió a pintar los labios de un rosa muy tenue.

—Se supone que las chicas deberían estar felices por las bodas de sus amigas—Dijo Bakugo sin voltear a verla.

—¿Y quién dice que no estoy feliz por la boda de mi amiga?

—Traes los ojos llorosos y la nariz roja.

—Llore...llore de emoción—Dijo la castaña algo nerviosa.

—Claro, lloraste después de la ceremonia—Bakugo dijo con ironía.

La chica a su lado se avergonzó e intento esconder su rostro avergonzado, Bakugo sonrió maliciosamente, paro a un camarero y tomo de la bandeja dos copas de champagne, le pasó una copa a la castaña y bebió un poco.

—Por no llorar en las bodas—Dijo alzando su copa.

La chica no entendía que estaba haciendo el chico, pero le dio la confianza suficiente para iniciar una conversación, Bakugo escuchaba atentamente a aquella dama de honor, hasta que en algún punto de la noche la chica llego al porqué de su llanto en aquella boda.

—Eres una tonta—Dijo Bakugo mientras bebía su tercera copa de vino.

—No me digas así, ni siquiera me conoces—Menciono la castaña.

—No necesito ser un genio para darme cuenta de que cometiste la mayor tontería de tu vida, Uraraka.

La castaña lo vio con los ojos cristalinos y se levantó de la mesa indignada. Bakugo la siguió hasta el jardín de aquel lugar, le tomo la muñeca e hizo que se volteara, Uraraka choco rápidamente con el pecho de Bakugo, haciendo que aspirara la colonia que llevaba, olía tan bien que hizo que su corazón se acelerara un poco.

—Sabes por qué te dije tonta—Bakugo la tomo de la cintura y tomo su barbilla forzándola a verlo—Eres una tonta porque si yo estuviese enamorado de ti, jamás te presentaría a nadie, mucho menos a mi mejor amigo, porque tu corazón me pertenece.


Mis estrellitas, espero les este gustando, estoy trabajando muy duro para traer un monton de kacchakos mas