¡Saludos, queridos lectores!

Había quedado que cada quince días actualizaría, y eso habría sido la semana pasada, sin embargo, no me fue posible. Debido a ello, actualizaré esta semana esta historia y subiré una historia más, pero la próxima, estaré subiendo más actualizaciones n.n

El capítulo de hoy, va dedicado a LizzethSalazar4, como obsequio de navidad/reyes muy atrasado.

Linda, espero que realmente te guste el capítulo y aunque originalmente había pensado en subir dos capítulos, no me fue posible terminar el segundo capítulo. Sin embargo, estaré subiéndolo la próxima semana, lo prometo.

Sin más, los dejo con el capítulo de hoy, el cual espero que disfruten n.n


Sasuke y Karin se sentaron a resolver los cuestionarios en la cama, los cuales terminaron por contestar de forma muy vaga, ya que por un lado, Sasuke que intentaba dejar claro que no era un principiante y Karin que estaba disfrutando como nunca dicha situación, ninguno prestó mucha atención a qué condones habían usado ni en qué momento.

La verdad es que ambos estaban haciendo las cosas mal con respecto a esa situación, y haciendo un inventario de los condones, ya sólo les quedaba una oportunidad de prueba para uno de los cuatro tipos. Estúpidamente, era el condón saborizado que no habían usado para eso en particular.

—Creo que vamos a tener que ser más metódicos para poder hacer esto bien —comentó la pelirroja suspirando y ya con un camisón puesto, y el azabache, ya vestido, asintió en silencio— Y quizá debamos contestar cada cuestionario después de terminar con la actividad.

—Tendremos que hacerlo así.

—Creo que también tendremos que hacer una especie de agenda para evitar excedernos como hoy —comentó después de una pausa— Aún sin caer en esa trampa empresarial de la que me hablaste, no puedo estar faltando de esa forma.

—Tenemos suficiente tiempo —aseguró Sasuke y ambos quedaron en silencio y pensativos.

—Sasuke —llamó la pelirroja y él volteó a verla esperando a que continuara hablando— ¿Por qué fuiste tan tímido la primera vez?

—Ya te dije que no quería lastimarte —respondió irritado de recordar que ella había pensado que era un principiante.

—Lo sé, pero es que no fue sólo eso, sino que incluso te rehusaste a hacerlo más de una vez —ella insistió— Por el contrario, te dedicaste a masturbarme. Pudimos hacerlo un par de veces más en su lugar.

Él no contestó de inmediato, apenas fue una pausa de unos segundos, pero lo suficientemente larga para que ella notara que dudó en hablar antes de responderle.

—Habrías terminado lastimada como hoy.

—¿Eso piensas? Estabas siendo muy cuidadoso ese día y…

—Tampoco debí excederme anoche —dijo desviando la mirada, aunque se seguía escuchando serio.

—A mí no me importaría que repitiéramos lo de anoche —respondió Karin con una gran sonrisa— Aunque sería mejor un fin se semana para no faltar al trabajo.

—No…

—Hablando del trabajo, ¿qué harás ahora que has renunciado? ¿Ya tienes algo en mente?

Sasuke se había sonrojado con la propuesta de la pelirroja, pero quiso ocultarlo y al mismo tiempo, cambiar de tema, pero Karin, que sólo había notado que él quería desviar el tema que ella recién había introducido, se apresuró a interrumpirlo.

—Sí —respondió el varón después de salir de su pasmo y sin intenciones de decir más.

—¿Debo preocuparme? —preguntó Karin.

—¿Por qué deberías?

—Porque somos amigos y eso hacen los amigos —respondió Karin haciendo a un lado las cosas que había usado para responder los cuestionarios y girar su cuerpo hacia él. Eso era algo serio, y quería mirarlo de frente— Me preocupa que por mi causa, te quedes sin trabajo y sin dinero.

—No fue tu culpa. Yo sé lo que hago.

—No tenías que ir con tu familia si no querías y lo hiciste para ayudarme. Claro que voy a sentirme culpable —ella tocó suavemente la mano del varón— También quiero ayudarte y quizá pueda buscar algo en mi trabajo si no te incomoda la idea de estar en esa industria.

—No es necesario…

—Quizá tengas que empezar en un rango más bajo que yo, porque yo tuve la ventaja de que mi profesora me recomendara, pero…

—Karin —la interrumpió y la miró a los ojos esbozando una sutil sonrisa— Gracias.

—No dudes en pedir ayuda cuando la necesites. ¿Sí? —ella le devolvió la sonrisa contenta por el gesto de él— Quizá no siempre tenga los recursos para ayudarte, pero lo intentaré.

Por algunos instantes quedaron en silencio mirándose mutuamente, y de hecho, Karin aún tocaba el dorso de la mano del varón, por lo que, cuando se dió cuenta, la quitó enseguida y miró para otro lado.

—Si te sientes mejor, deberías tomar un baño para que vayamos a buscar la ropa para la cena —Sasuke también desvío la mirada viendo al lado opuesto— También te enseñaré la etiqueta básica. Mis padres son muy estrictos con que se cumpla.

—Sasuke, conozco la etiqueta básica. No es tan difícil —dijo Karin ofendida por el comentario del varón— No codos en la mesa, no masticar con la boca abierta, no…

—Me refiero a la etiqueta básica que ellos conocen.

—¿Me enseñarás para qué sirve cada tenedor, cuchara, cuchillo y esas cosas como en Mujer bonita? —preguntó Karin con sarcasmo.

—Sí y con mis padres no vas a librarte de la misma forma.

—¡Espera! ¿Has visto la película? —preguntó Karin más que sorprendida y muy curiosa.

—Necesito hacer una llamada —respondió Sasuke haciendo las cosas de los cuestionarios a un lado y levantándose de la cama.

—¿Con quién…?

—Apresúrate —Sasuke la interrumpió y salió de la habitación. No quería admitir que vio una película de ese estilo porque su madre le suplicó que la acompañara a verla en una ocasión que su padre se había ido de viaje.

Una vez fuera de la habitación, Sasuke se metió a lo que era un despacho dentro del mismo departamento y llamó a su hermano.

—Acepto.

—¿En serio? Pensé que…

—Si sigues hablando al respecto, colgaré.

—De acuerdo, ya no diré más —respondió Itachi tratando de contener una risita— Puedes venir ahora y…

—No puedo hoy.

—¿Todavía no empiezas y ya estás poniendo excusas?

—Iré con Karin a buscar ropa para la cena. Es complicado que vayamos mañana, así que tenemos que hacerlo hoy.

—Ya veo. En ese caso, te espero mañana temprano —respondió Itachi— Por cierto, ¿a qué tiendas planeas llevarla?

—A las plazas del centro.

—Si quieres yo puedo…

—¿Cómo va el favor que te pedí? —Sasuke lo interrumpió. Lo último que necesitaba era seguir pidiéndole favores a su hermano. En tan poco tiempo le estaba debiendo mucho más de lo que le debía en los años que estuvo alejado de casa.

—Todo está arreglado. No te preocupes, por eso, si lo prefieres, podría ayudarte con la ropa para la cena. Con una llamada…

—Sé lo que estás pensando, y quítate de la mente esas ideas. Karin no es mi novia, es sólo una amiga —Sasuke se apresuró a decir queriendo dejar las cosas claras— Afortunadamente ella me conoce lo suficiente para saber que yo no preparé esa cursilería de la habitación.

—Pero ella te gusta mucho. ¿No es así? —señaló Itachi y aunque Sasuke no podía verlo, estaba seguro que su hermano estaba sonriendo— Tienes que decírselo. Ella no es adivina —esperó respuesta sin éxito— Alguien más se te adelantará.

—Olvida ese tema —protestó Sasuke aún más irritado y agradecido de que fuese una llamada o Itachi habría notado un suave sonrojo en sus mejillas al principio o su ceño fruncido al final.

—Y por cierto, hacer cosas cursis de vez en cuando es necesario para demostrarle que la quieres.

—Nos vemos mañana, si es que no me arrepiento —respondió Sasuke y colgó sin darle oportunidad a su hermano de responder.

Sasuke permaneció en la sala molesto por lo dicho por su hermano y en cuanto Karin se arregló para salir, fueron a la plaza.

En el camino, Karin notó que Sasuke estaba más serio de lo normal, y aunque quizá era difícil saberlo teniendo en cuenta que aún estando de humor, él no era conversador, ella podía notarlo porque se veía tenso.

Claro que la pelirroja quería preguntarle al respecto, pero decidió darle su espacio. Es decir, recientemente había tenido una plática donde ella le había dicho que podía pedirle ayuda si la necesitaba, y él pareció valorar el ofrecimiento. Sin embargo, parecía que algo tenía y ella esperaba que en esta ocasión, él diera el primer paso para hablar.

—¿Y qué es exactamente el tipo de ropa que debo llevar a la cena, "señor Edward" —le preguntó Karin a modo de broma entre risitas, al entrar a la primera tienda, esperando que ello ayudara a mejorar su humor.

—Un vestido conservador, ningún tacón mayor a los cinco centímetros y poco maquillaje —resumió el azabache ignorando la broma— También hay que evitar el color rojo, y el negro. Este último puede usarse sólo en combinación con otro.

—¿Bromeas? Ya no estamos en el siglo pasado y…

—Si vamos a la cena, la única forma de salir de allí sin dramas, es seguir la etiqueta —señaló Sasuke muy serio.

—De acuerdo, pero ¿podemos tratar de encontrar algo que vaya a usar más de una vez? De nada me va a servir el dinero del bono, si tengo que gastarlo para ganarlo.

—Empecemos a buscar.

Les llevó dos horas conseguir un vestido que, según Sasuke, sería adecuado para la cena con su familia y que Karin considerara que podría usar más de un vez, y les llevó mucho menos tiempo que Sasuke encontrara algo para él también.

Aquello sorprendió un poco a Karin, ya que pensaba que él sólo la había criticado por criticar, pero incluso él buscó algo para sí mismo que fuese apropiado para la cena. Eso sí, ella no pudo verlo con elegante traje porque él sólo llegó con las vendedoras con las instrucciones puntuales de lo que buscaba y se lo llevó sin probárselo.

En lo referente al pago de la ropa, Sasuke pagó lo de ambos. Algo que Karin tampoco esperó y de hecho, intentó poner su parte porque aunque era un gasto no planeado, ella sabía que mientras él no tuviese el favor de su familia, ella tenía más dinero que él, especialmente ahora que él no tenía un trabajo.

No, Sasuke no aceptó el dinero, pero aceptó que ella lo invitara a comer en la plaza. Además, pasaron a la sexshop donde trabajaba Tayuya para preguntarle si alguna de las otras dos personas ya habían ido a dejarle los cuestionarios, pero ella había salido a comer, y la tienda estaba cerrada.

—No he visto ningún autobús por el barrio desde que vinimos a vivir aquí. Tampoco he visto algún otro tipo de transporte público —Karin comentó cuando iban de regreso a la casa— De hecho, quería preguntarte cómo ir y venir del trabajo, ya que sé que no siempre podrás llevarme y recogerme.

—No pasa ningún autobús. En esta zona sólo se puede salir y entrar en auto —respondió Sasuke.

—¿Cómo se supone que…?

—Yo te llevaré y te traeré.

—Supongo que estará bien si vienes a trabajar conmigo a Mantis, pero aún no estoy segura si hay vacantes y…

—Lo haré de todas formas. Yo te puse en esta situación.

Karin se sintió enternecida, y sabía que era absurdo teniendo en cuenta que él lo estaba haciendo porque sentía que se lo debía, sin embargo, no podía evitarlo. Quizá sólo era el deseo de ella porque ese tipo de atenciones significaran más.

El resto del día Sasuke se dedicó a enseñarle a Karin la etiqueta y no hubo incidentes, pues ella aprendía rápido. En cuando a los condones, no intentaron seguir probándolos, por un lado Sasuke consideraba que ella debía descansar más aún cuando antes de salir, ella había dicho que ya casi no le dolía nada, y por otro lado, ella optó por no proponerlo, porque de antemano sabía que él se negaría a hacerlo.

A la mañana siguiente, ambos se prepararon, Karin para ir al trabajo y Sasuke para llevarla.

—Hoy mismo buscaré alguna vacante para ti, así que quédate al pendiente del teléfono en caso de que…

—No es necesario —respondió Sasuke mientras manejaba.

—¿Cómo que no es necesario? ¿Acaso cediste a las condiciones de tu familia? —Karin preguntó sorprendida y quizá un poco decepcionada. Además, eso explicaría por qué él había pagado la ropa, y parecía tan tranquilo estando sin trabajo.

—No. Tengo una entrevista de trabajo hoy.

—¿En serio? ¿Dónde? —preguntó Karin sorprendida gratamente.

—Después hablamos de eso.

—Pero…

—No seré una carga para ti, no te preocupes —Sasuke le aseguró pensando que quizá esa era la preocupación de su amiga.

—No me molesta ayudarte. Tu me estas ayudado a mí —respondió Karin— Además, también me ayudaste mucho en la universidad y…

—Llegamos —la interrumpió sin quitar la vista del frente.

La pelirroja dió un suspiro de resignación y lo volteó a ver.

—De verdad, Sasuke. Si necesitas ayuda, no dudes en pedirla —dijo la joven, repentinamente se acercó a darle un beso en la mejilla y salió rápidamente del carro.

Sasuke no pudo evitar sonrojarse con la acción tan repentina de su amiga, e incluso volteó a verla, pero ella ya se estaba perdiendo dentro del edificio.

Después de unos instantes, dió un suspiro de resignación y arrancó el carro para dirigirse a la sucursal de la empresa familiar de la que su hermano se hacía cargo.

A la hora de la salida de Karin, Sasuke fue a recogerla tal como había prometido, y al llegar, notó que el hombre rubio de la última vez, la seguía al salir del edificio.

No le gustó para nada ver a ese hombre acercársele, pero menos le gustó ver qué la pelirroja, al notarlo, se le acercó y le sonrió con coquetería mientras le decía algo que evidentemente Sasuke no podría oír no sólo por estar dentro del carro, sino porque la distancia lo complicaba aún más.

Karin acercó su rostro al rubio casi como si fuera a besarlo, pero se alejó en el último momento y se alejó de él para caminar a la orilla de la banqueta. Ella echó una mirada alrededor y cuando vio el coche, se apresuró a subirse.

—Gracias por recogerme —ella le sonrió como si nada y Sasuke le dirigió una mirada enfadosa para luego mirar al frente y arrancar el carro.


¿Lograran completar los formularios antes de acabarse los condones? ¿Cómo le irá a Karin en la cena con los padres y el hermano de Sasuke? ¿Por qué Karin iba a besar a Souma y le coqueteaba de esa forma? ¿Por qué Sasuke de enfadó con lo que vio? ¿Qué otras preguntas les nacieron al leer el capítulo?

Me encantará leer sus teorías y preguntas en los comentarios n.n

Querida LizzethSalazar4, espero que el capítulo te haya gustado. Lamento mucho por no haber podido hacer una historia nueva, pero también procuraré actualizar más pronto esta historia n.n

Sin más por el momento, me despido por ahora.

¡Hasta la próxima actualización!