-Mi señora, no sea mala conmigo- Dijo emi sentada en el trono donde Irasue gobernaba desde los cielos con la intención de insultarla y de denigrar al demonio que estaba enfrente de ella con su típico semblante frio.
En ese momento, emi parecía un ser indefenso y frágil. Había optado por usar la imagen de una niña inocente en su plena juventud de 5 años, poseía el rostro de alguien que carecía de maldad y una inocencia incuestionable pero sus ojos negros eran quienes revelaban la verdad detrás de su disfraz.
Entre sus delgados y pequeños dedos, la piedra meidu yacía ennegrecida con la joya aun quebrada a la mitad. Emi sonreia de oreja a oreja y jugaba con el collar mientras miraba fijamente a la demonio, le resultaba curioso y a la vez intrigante las escasas reacciones de la mujer.
-No vengo a desquitarme con los descendientes de todos los demonios de que aquella época.-Dijo emi.- A pesar de que ellos fueron los responsables de nuestra mágica desaparición.
- Emi, parece que te encuentras metida en una grave problema como para que vengas hasta aquí buscando una respuesta.-Interrumpió irasue.
Emi soltó una ligera risa que fue percibida por irasue, jugueteaba con el collar como si estuviera reflexionando que respuesta le daría pero volvió a decir lo mismo que dijo cuando llego al palacio.
- Busco algo que está en el inframundo y que me pertenece.-Respondió emi mientras sus pequeños dedos pasaban por cada cuenta que formaba el collar de la piedra.- Es una lástima que haya decidido destruir esta valiosa joya que Inu no taisho le entrego hace ya algún tiempo. El demonio responsable que avergonzó a su raza, el responsable de la humillación de la más hermosa daiyoukai que he visto. Dígame, ¿Qué se siente ser cambiada por una humana?
Irasue esbozo una ligera sonrisa, de nuevo estaba su patético artimaña para desviar el tema de conversación en un vago intento de hacer que un ligero brote de ira floreciera de ella, sintió que casi iba a reír pero opto por mantener su postura. Realmente, emi estaba determinada en hacerla enfadar y en ese momento, en medio de una conversación que parecía no tener final, se dio cuenta de algo en su manera de actuar.
-¿Acaso no eres capaz de repararlo por ti misma o no puedes regresar a dónde perteneces?- Pregunto irasue con el propósito de guiarla a responder una sola pregunta que tenía en mente, era obvio que no podía volver al inframundo sino ya lo hubiera hecho y no estaría perdiendo el tiempo en buscar la forma de hacerlo.
Emi solo rio un poco más, le empezaba a resultar divertida la charla y quería saber hasta dónde iba a llegar el demonio.
-Veo que intentaste usar a colmillo sagrado a tu favor pero no te ha resultado tan enriquecedor como aparentaba ser.- concluyo irasue.
-La espada de tu hijo.- Dijo emi en medio de una sonrisa.-Colmillo sagrado parece tener vida propia pero se ve influenciado por los absurdos sentimientos de su propietario. Sin embargo, no se preocupe que su hijo y esa espada van a ser de gran utilidad.
-Y colmillo de acero, es todo lo contario. Un medio demonio que necesita de esa espada para mantener sellada su sangre demoniaca.- dijo irasue con el propósito de revelarle su evidente conocimiento a su visita en la aldea humana.
-Así que, sabes que tengo la espada de ese hibrido.-Dijo emi.- ¿Y también sabes que tengo el báculo del sirviente de tu hijo? Iba a tomar a hiraikutsu pero resulta que es un arma totalmente inservible.- Respondió con cierta diversión, el conocimiento del demonio sobre sus actividades le era fascinante y quería saber cuánto más sabía.
-Dime emi ¿Cuánto tiempo te queda de vida en la tierra como para poder necesitar que tres armas demoniacas hagan lo que tú misma no puedes hacer?- Esta respuesta hizo que a Emi se le borrara la sonrisa.- Y por tu reacción, veo que necesitas ganar más tiempo antes de consumirte y volverte polvo como la bestia que dejaste cerca de los humanos. Es una pena, este mundo debe consumirte más rápido que la primera vez que viniste. Debe ser una tortura tener tu otra mitad bajo las puertas del infierno y no poder llegar para poder completarte, tienes todas las herramientas para ir al inframundo pero ni siquiera puedes acercarte sin volverte escombro.- Sentencio irasue y supo que dio en el clavo cuando emi la miro fijamente.
Por primera vez, emi estaba realmente seria y toda la fanfarronería desapareció en cuestión de minutos. Su curiosidad se esfumo, la mujer demonio demostró saber mucho más que cualquier demonio y esto no le agrado para nada. Ella se levantó del trono de irasue y se acercó lentamente al demonio, quedando frente a frente con la diferencia de estatura que ni se molestó en corregir. No iba a gastar energía que necesitaba para amenazar a un demonio que podía derrotar con gran facilidad, según ella.
-No juegues con fuego, te quemaras.- Dijo emi en una sola respuesta, combinadas de tantas voces mezcladas que era una clara amenaza hacia irasue que ahora estaba en terreno hostil.
Irasue en cambio no se inmuto, solo veía como había dado con la respuesta a su pregunta y algo que le inquietaba a emi. La albina no sonrió pero finalmente tenía entre sus manos algo sumamente importantes, emi había dado la respuesta de cómo puede ser destruida y mucho más.
-Veo que estoy en lo cierto, no tienes todo bajo tu control. Ya es evidente que lo vas perdiendo conforme como va pasando el tiempo, tal como sucedió con la humana. Habías conseguido tenerla bajo tu control pero el desgate te consumió hasta el punto en que tuviste que dejarla ir para poder sobrevivir:
"Flash back cap 18: parecía que todo volvía a caer en la plena oscuridad, escucho y vio a la mujer hablar.
-Por ahora, dejare que sientas la libertad de no estar atada a mí pero recuerda que perteneces a este mundo y algún día volverás a mí. Aquí es en donde te quedaste y aquí es donde siempre te quedaras atrapada.- La vio sonreír y de su boca broto todo un líquido negro aún más espeso que iba quemando su boca y caía al suelo haciendo una leve humareda- Rin, mi querida rin. Ya puedes despertar..."
-Igual sucedió con El lord del sur, tu patético intento de manipularlo te obligo a armar un enfrentamiento entre mi hijo y ese demonio para poder recuperar las energías que necesitabas con suma urgencia:
"Flash back cap 8:..Cada vez brotaba más sangre y el sureño cayo arrodillado al suelo mientras gritaba de dolor al sentir como su cuerpo empezaba un proceso de putrefacción acelerado en vida.
—¡ME TRAICIONASTES! —Gritaba a todo pulmón mientras más se descomponía. —¡MALDITA!"
-Aprovechaste el dolor de mi hijo para fortalecerte:
"Flash back cap 9: —es… es…—jaken había tomado el aire suficiente para poder gritarlo —¡RIN! ¡La encontramos!—rápidamente fue a la pequeña fosa con varias lagrimas recorriéndole las mejillas e iba buscando el cuerpo pero no había nada en el— ¡¿Dónde está?! ¡ESOS INMUNDOS SE LA LLEVARON! Yo…—Miraba el interior vacío y reacciono— Así que aquí la trajo el amo…
—Jaken."
-Y cómo olvidar a la sacerdotisa y tu juego infantil:
" flash back cap 2:… kagome corría frenéticamente por el bosque guiándose de vez en cuando por los relámpagos que iban iluminando la zona. Corría a todo pulmón mientras esquivaba las ramas que la golpeaban cuando estas eran agitadas por el viento, se abría camino cubriendo su rostro con su mano y esquivando los grandes charcos de agua que se habían formado entre las raíces de los árboles.
— ¡NIÑA, VUELVE!— gritaba casi desesperada mientras la perseguía en medio de la tormenta."
-emi, tu desesperación te llevo a cometer graves errores. ¿Eres consciente de eso?
Emi no respondía, solo la miraba y no le quitaba la vista de encima.
-Te debilitas como tu querida mascota y no dudo que tu futuro no sea el mismo que esa bestia.- dijo con mucha gracia irasue- Dudo mucho que de alguna forma entregues tu otra mitad a algún ser viviente para poder permanecer aquí ya que quien lo obtenga tendrá el poder absoluto de ti, te volverías su esclava sin poder evitarlo ya que esa es tu maldición.
En este punto, emi sonrió nuevamente y rio. Rio de una manera única, fuerte y bastante clara entre tantas voces mezcladas. Esta acción alarmo un poco a irasue porque hasta ahora emi estaba realmente seria y hasta casi preocupada pero ahora había cambiado de actitud, algo que irasue estaba pensando en que algo se le había escapado.
-Dirás una de las tantas.- Dijo emi entre risas.-Mi señora, le puedo asegurar que no me he desintegrado porque tengo ciertos seguros en la tierra que garantizan mi supervivencia hasta que recupere lo único que es de mi importancia.
Irasue iba a hablar pero opto por acallar y la miro con desprecio, algo no iba tan bien como había supuesto. Iba pensando y recalculando todo la información que poseía hasta ahora sobre este ser que…
-Hay tantas muertes y tanta vida, tanto dolor y sufrimiento. Tanto odio y amor.- Decía entre risas.- No necesito que precisamente mueran para poder recuperarme, absorbo mucho más cuando están vivos.
Irasue en ese momento, recordó a cada víctima…
- Usas la vida de tus victimas como garantía de tu existencia y los consumes para que tu energía no se degaste- Dijo muy seria.
Emi empezó a acercarse aún más a irasue y sonreía mientras la daiyoikai retrocedía de apoco. Sonreía ampliamente, tanto que estaba segura que su presencia en su palacio no era solo por ir en busca de una respuesta a como abrir las puertas del inframundo…
-Es mucho más que sus simple almas y sangre, resulta que el dolor trae un degaste para el ser vivo pero es tan beneficioso de energía para simple seres del inframundo que son como el pan de cada día. Ustedes nacieron del dolor y sufrimiento de humanos, no somos tan diferentes.- Decía emi mientras seguía avanzando.- pero como mencionaste, sin mi otra mitad me voy desintegrando.
- ¿De cuántas vidas dependes?- pregunto irasue fríamente mientras retrocedía.
Emi rio mientras de sus ojos brotaban lágrimas negras.
-Mi señora, la vida puede ser solo un instantes o tan larga como uno lo desee…- Dejo de avanzar y extendió su brazo para abrir su mano dejando que la piedra meidu quedara colgando- es solo cuestión de tiempo y en estos momentos, veo que ahora va comprendiendo lo que sucede y me alegra mucho porque eso significa que ya sabe lo que va a pasar a continuación…- dijo emi muy divertida.
En ese momento, la piedra se fragmento aún más. Se iba sobrecalentando rápidamente que un humo espeso empezó a brotar entre las grietas y solo basto un segundo para que estallara en mil fragmentos destruyendo por completo la piedra que una vez inu no taisho había entregado a irasue.
- Esto es muy divertido, mi señora.- Rio mientras dejaba caer los restos de la piedra.- lástima que esta información que usted tiene no podrá ser compartida hacia su hijo…
Irasue la miro y estaba por sacar su arma cuando sintió una pequeña presencia de un niño que estaba detrás de ella pero antes lo escucho decir:
-Lo siento…
Y ya no tuvo tiempo, el corazón de irasue ya había sido atravesado por el arma filosa de emi.
-¡Inuyasha, abajo!- Dijo kagome antes de disparar una de sus flechas a unos centímetros del hibrido mientras que el collar no respondía, estaba asustada y muy preocupada por inuyasha que no encontraba forma de controlar la sangre demoniaca que fluía rápidamente por sus venas.
El collar se había tornado de un color blanco, igual que las demás armas y supuso que esto era obra de emi pero había algo raro en inuyasha. Nunca estuvo tan violento como hasta ahora y nunca le habían visto necesitar descansar como si buscara recuperarse entre cada ataque y que fuera seguido.
Momentos atras, sango que hasta ahora acompañaba a kagome, estaba pensando en ir a buscar a los muchachos luego de que pasara varias horas desde que se habían ido pero vio de lejos el regreso del hibrido y desgraciadamente fue la primera en ser atacada por inuyasha a solo unos metros.
La exterminadora que estaba esperando el regreso de ambos para ir por sus hijos ya que los había dejado en un lugar seguro con kohaku y shippo luego del ataque de Emi, estaba en el suelo con bastante sangre e inconsciente.
Desde entonces, kagome estaba completamente sola contra su esposo que no quería lastimar bajo ninguna circunstancia, veía que la personalidad de inuyasha había desaparecido y el collar solo estaba de adorno. Sin embargo, esperaba que tuviera alguna especie de lucha interna por tratar de recuperar control de sí mismo pero nada. Lo observaba desde lejos, ahí parado como estático después de varios ataques contra ella y ahora reposaba luego de que se lanzara sobre ella hacia su garganta que kagome rápidamente pudo esquivar.
-¡Inuyasha, no te rindas!- gritaba kagome desesperada y otra punzada en su vientre hizo que se doblara un poco del dolor pero iba a aguantar por el bien de ella y de su bebe. No era momento de ser débil, tenía que defenderse ella y su pequeño no nacido.
El hibrido poseía los ojos más negros que jamás había visto, varias lágrimas negras a veces brotaba de ellos y era cuando su ira se incrementaba más. Su rostro blanco, sus colmillos crecidos y sus garras negras iban detrás de ella por alguna razón que desconocía.
Kagome agarro un flecha más y la coloco en el arco para tensarlo, apuntando hacia el hibrido que parecía que volvía a estar en movimiento. En eso, vio que el cuello del hibrido tenía un líquido negro viajando por sus venas y la imagen del día en que emi clavo su afilada arma en el corazón de inuyasha vino a su mente.
-¡Idiota!- Le grito al hibrido pero la verdad se insultaba a si misma ya que ese día se había jurado que había llegado a tiempo y ahora se daba cuenta que no fue así.
Apunto su flecha sagrado directo al corazón de hibrido, tal vez así podía purificar lo que fuera que estuviera controlando al hibrido y liberarlo. Su pulso temblaba porque eso significaba hacerle daño, no deseaba hacerlo pero no tenía otra opción. El tiempo en que el hibrido se quedaba reposando se estaba agotando y debía actuar ya…
Sin embargo, algo cayó del cielo y como si lo hubiera lanzado desde algún lugar incognito entre la nubes del atardecer. Una vieja espada que claramente conocía se quedó clavada en la tierra, colmillo de acero no solo se quedó fija en el suelo mientras un líquido negro brotaba de la hoja sino que latía como si estuviera llamando a inuyasha.
La espada cuanto más llamaba al hibrido, más iba consumiendo a su alrededor. Fue haciendo un circulo negro a su alrededor que se expandía más y más. El hibrido fijo sus ojos en la espada y lentamente se fue acercando a ella para tomar la espada, eso significa que perdería a inuyasha para siempre.
-¡NOO!- kagome cambio rápidamente su objetivo por clavar la flecha en el suelo entre la espada y su esposo, formando una barra de energía pura para evitar que tomara la espada pero así como sucedió con emi que parecía que nada le afectaba, sucedió exactamente igual con inuyasha.
El hibrido se acercó, atravesó la barrera como si no hubiera nada de por medio y extendió la mano para tomar la espada. Kagome tiro el arco al suelo y corrió para evitarlo, lo empujaría si era necesario hasta se le cruzo la idea que lo mejor sería sellarlo como hizo kikyo años atrás solo para mantenerlo con vida.
-¡INUYASHA, NO TOMES ESA ESPADA!- grito kagome entre lágrimas, entre la desesperación a estar a escasos metros de El pero algo la detuvo cuando sujetaron su muñeca. Sintió como una mano sujeto y jalaron desde su muñeca hacia atrás, evitando que continuara corriendo hacia el hibrido. También sintió como ese agarre se intensificaba obligándola a frenarse completamente cuando tuvo la intención de luchar para zafarse, el hormigueo de la sangre que empezaba a circular poco en la zona se hizo presente de manera rápida al ser cada vez intenso el agarre.
Kagome se dio vuelta para pelear contra la persona que la había frenado pero la impresión de ver a la anciana kaede sujetándola con lo mismo ojos negros que poseía inuyasha hizo que su sangre se helara, solo tuvo tiempo para separar un poco sus labios al intentar pronunciar el nombre de kaede cuando la fría hoja de un arma muy filosa alcanzaba atravesar su pecho.
La anciana la había apuñalado y enterrado toda la hoja en su corazón, solo la soltó cuando retiro el arma y la sangre comenzó a salir de su pecho. Kagome bajo la vista a su pecho que solo tuvo tiempo para llevar su mano al sitio donde estaba la herida antes de caer de rodillas al suelo mientras el hibrido empezaba a agitar a colmillo de acero con su nueva transformación que claramente iba a lanzar su nuevo ataque contra ella…
Levanto su mirada de la herida y la dirigió a kaede que poseía la misma mirada fría que inuyasha…
Ahora, ya era evidente que no tenía opciones…
-Perdoname…-Dijo entre lágrimas y sintiendo el sabor de sangre en su boca- Hijo…
Buenaassss...
Valla manera de retomar la historia pero ahorita les doy contexto de lo que va a pasar a continuacion:
Irasue tenia conocimiento de "Emi" y eso lo deje claro en varios capitulos atras pero no tan asi como para poner a emi contra la pared, ahora emi se siente totalmente aprisionada contra la pared y cree que podria haber mas personas/demonios que posea esta informacion. Por la tanto, buscara la manera de hacerse mas fuerte y atacara a todos los que pueda con desesperacion antes de que su tiempo se agote (Por eso el nombre de este capitulo es "Quedandose sin tiempo")
Las cosas se van a complicar aun mas para emi, efe XD.
Y entre en medio del lio que se viene, estara la explicacion de la muerte de rin.
Bueno, muchas gracias por leerme y estare actualizando :)
