— ¡Antonioooo! ¡Si ni siquiera has escuchado lo que tengo que decir! ¿Por qué no le das una oportunidad a mi propuesta?
— No, tienes mucho peligro.
— ¡Si aún no he dicho nada…! —se quejó Francis, llevándose una mano al pecho, desolado.
— Y no hace falta. Te conozco de sobras. Cuando pones esa sonrisa del diablo sé que no tramas nada bueno. Hace muchos años que somos amigos y unos cuantos que somos pareja. Esa mueca trae consigo ideas de bombero.
El rubio jadeó y se tapó la boca con la mano. Su actuación era digna de Oscar, por supuesto, pero por desgracia a Antonio siempre le quedaba la duda de si su novio iba en serio o no. Si estaba indignado y no le dedicaba la atención que deseaba, se convertía en un problema monumental. Lo vio darse la vuelta y notó que sus hombros temblaban, como si llorase. La madre que lo parió. Gruñó entre dientes y se frotó la sien. Ya se estaba arrepintiendo y aún no había dicho nada.
— A ver… Explícame ese plan tuyo.
Francis entornó ligeramente el rostro, dejando ver unos ojos acuosos. Se cubría la boca con una mano y eso le hizo sospechar a Antonio que sonreía.
— ¿Estás seguro?
— No, pero te quiero y eso es una cruz.
— Verás, he tenido una idea muy interesante. Se trata de unos disfraces que he comprado. El tuyo tiene una falda tan corta… Con el culo respingón que tienes, te va a quedar de lujo.
— Por encima de mi cadáver —interrumpió Antonio. Su semblante parecía tranquilo.
— ¡Es una falda! —refutó Francis, inflando los carrillos.
— Cualquier cosa menos eso.
El rubio seguía enfurruñado.
— ¿Cualquier cosa?
— Cualquier cosa menos eso.
Y de repente sonrió condescendiente, superior, con una sorna que hizo que Antonio se diera cuenta del error que acababa de cometer. Una mano aferró su muñeca antes de que se pudiera alejar demasiado.
— Es gracioso que propongas eso, cariño mío. Porque tengo otra idea mucho, mucho, MUCHO mejor. ¿Nos ponemos a ello~?
— Mierda.
Prompt fictober 2022, día 5: No, cualquier cosa menos eso.
