®The witch and the beast es propiedad de Kousuke Satake


1

No debes tocar a Guideau. Bajo ningún concepto debes romper esta regla. Podrías perder la cabeza literalmente.


Misha observó a Guideau de soslayo. Se sentía surreal. Pensar que una chica tan menuda, apenas unos pocos centímetros más alta que ella, podría hacer tal cosa, escapaba de su comprensión. Pero Misha confiaba en Ashaf, así que se apegó a sus indicaciones.

Aquel conocimiento no había salido de la nada. Ashaf había sido testigo de la muerte de esos aldeanos el día que conoció a Guideau. No mucho después de ello descubrió que chocar contra ella no era el único modo de perder la cabeza.

Ocurrió al final de uno de sus entrenamientos más duros y difíciles. Guideau había sido herida, pero la bestia no parecía demasiado preocupada. Para cuando el ejercicio terminó, la herida se había abierto, y un fino hilillo de sangre corría por su brazo. Ashaf acabó por notarlo, y una mirada indescifrable se asentó en sus ojos.

—Estás herida —dijo con calma—. Bajó la mirada, inspeccionando el daño, y luego, sin decir palabra, le cogió la mano.

El mago apenas pudo reaccionar. Logró esquivar el ataque a su cabeza arqueando la espalda en un ángulo casi imposible. Gotas de sangre volaron con el repentino asalto, mientras Guideau empuñaba su mano dibujando una parábola invisible en el aire.

—¿Qué demonios haces? —siseó a la defensiva, sosteniendo su mano herida con la otra.

Ashaf estaba sin aliento, el entrenamiento del día pasándole factura. Se enderezó, se sacudió el traje, y levantó sus manos mostrándole las palmas en un gesto vulnerable, como expresándole que no era una amenaza.

—No voy a lastimarte —le aseguró tranquilamente—. Solo quiero ayudar. Puedo curar esa herida.

Guideau lo contempló fijamente, con una mirada que denotaba desconfianza. Dejo caer su brazo a continuación, y habló con firmeza.

—Está bien —aceptó. El ceño fruncido y el tono descortés presentes como siempre—. Solo que no me toques sin avisar.

Ashaf exhaló, y sonrió de esa manera enigmática suya.

—Por supuesto —aceptó—. Preguntaré la próxima vez. ¿Me permites?

Extendió su mano, y Guideau le ofreció la suya.

Sanó en segundos.


Me agrada el personaje de Misha. Espero poder ver más de esa dinámica entre ella y Guideau.

Esta es una nueva historia, traducción del original en inglés. Será un three-shot inspirado en el capítulo 28.5 del manga. Yo la verdad no recuerdo haberlo visto la primera vez que leí el manga, pero el sueño me vencía así que es probable que lo haya pasado por alto. Pero en fin, leí ese capítulo, y se me ocurrió escribir sobre las 3 regas que Ashaf le menciona a Misha, con un poquito de humor por aquí y por allá.