Kaito logró llegar al sitio donde estaba Miku pero este se encontraba resguardado por Akaito, su primo que estaba ahí para evitar que ella se fuera, actualmente los dos estaban el uno frente al otro.

- Akaito… esto no está nada bien, no entiendo por cual razón tienes algo contra mí, pero debemos regresar, es importante para nosotros… para Miku-san, su sueño está en juego.

- Yo igual estoy haciendo esto por mi sueño, así que no puedo dejar que pases. – Respondió el pelirrojo, Kaito no podía perder demasiado tiempo, mientras más tardaba, más pasaría el tiempo y el concierto se llevaría a cabo sin ellos.

- Deberías entenderlo, esto es prácticamente secuestro, sí te descubren, no saldrás impune de algún modo ¿acaso es lo que quiere la tía?

- Yo estoy dispuesto a sacrificarlo todo por mi objetivo, al contrario que tú. – No había caso en dialogar de algún modo con él, Kaito no quería llegar a lastimarlo pero no había otra opción.

- Bien… sí no quieres liberarla por tu cuenta, tendré que abrirme paso. – El peliazul comenzó a correr para pasarlo, aprovechando su velocidad pero Akaito no se lo permitió, sujetándolo del brazo y entonces arrojándolo contra la pared, haciendo un fuerte ruido.

- ¡¿Eh!? ¿Qué fue eso? – Miku escuchó que algún impactó con fuerza, pero no tenía idea de qué es. – Qué está sucediendo ahí?

- Ah… eso dolió. – Kaito volvió a levantarse, si a la primera no podía hacerlo, entonces la siguiente sería, de tal modo corrió nuevamente solo para recibir el mismo resultado, cayendo al suelo.

- Es inútil, incluso cuando éramos pequeños, nunca me ganaste en fuerza.

- Eso lo sé… pero ahora no puedo rendirme, no mientras Miku-san esté ahí, llorando. – Kaito lo volvió a intentar, en cada ocasión Akaito lograba alcanzarlo y tirarlo al suelo, llegando a un punto donde empezó a lastimarse, pero eso no permitiría al peliazul el abandonarla, ha hecho bastante junto a ella como para dejarla atrás, quiere que cumpla su sueño… que ambos puedan estar en el gran escenario. Actualmente estaba sucio y agotado, apenas y lograba respirar, del mismo modo el pelirrojo empezó a sentir el agotamiento.

- Te digo que no puedes… tienes que abandonarla… - Expresó Akaito, sin embargo el peliazul negó con la cabeza. - ¿Por qué eres tan terco? Es solo alguien más que conoces, una compañera.

- No… - Kaito se levantó en aquel momento. – Miku-san es más qué eso, durante todo este tiempo que la he conocido he logrado ver varias facetas suyas, es una chica bastante alegre, inocente y amable que quiere llevar sonrisas al mundo, su sueño es genuino… ella tiene un aura que me hace querer apoyarla a que lo cumpla… - Miró fijamente a los ojos a Akaito. – Ella tiene que pararse en ese escenario y cantar, transmitir sus sentimientos hechos canciones a todo el mundo, tiene que darse a conocer mejor a todos… ella tiene que mostrarles su sonrisa, yo… quiero ver eso, deseo verla triunfar.

- ¿De qué estás hablando? Le estás cediendo la fama a ella.

- No hago eso… porque yo igual voy a crecer junto a ella, nos pararemos en el mismo escenario y cantaremos, es más que una compañera, más que una amiga, así de importante es Miku-san para mí y no dejaré que nadie le arrebate su sueño, nadie. – Kaito empezó a correr nuevamente para superar a Akaito.

- ¡Es inútil, esta industria no es tan amable con nadie! – El pelirrojo estiró las manos para atrapar a su primo, en ese momento Kaito chocó siendo aprisionado pero eso no detuvo a este, que continuó avanzando a pesar de estar preso. - ¡¿Qué!?

- ¡Miku-san, sí me escuchas, vine a salvarte!

- Eh… esa voz. – La peliverde comenzó a levantar la vista, escuchando la voz que lo estaba llamando. – Kaito-kun… ¡Kaito-kun, estoy aquí!

- ¡Iré por ti, espérame! – Continuó ejerciendo fuerza a pesar de que Akaito continuaba reteniéndolo.

- Esto no puede ser posible… ¡Qué haces!

- Te lo dije… ¡Esto lo estoy haciendo por Miku-san, por lo que siento hacia ella! – El peliazul continuó avanzando, empezando a superar a su primo en fuerza el cual no podía continuar sujetándolo, sus brazos comenzaron a ceder.

- ¡K-Kaito! – El pelirrojo no quería dejarlo pasar, estaba peleando en aquel momento por su sueño, por la meta que quería alcanzar, dejarlo ir era rendirse a todo el trabajo que ha hecho. – Y-Yo dije… ¡Que no pasarás! – Sacando fuerzas, Akaito sujetó con fuerza el brazo izquierdo y entonces arrojó a su primo contra la pared.

- ¡Agh!

- ¿Q-Qué fue eso? – Miku escuchó un golpe fuerte, pensaba que Kaito estaba en problemas. – Tengo que salir de aquí… - Ella comenzó a moverse de un lado a otro, en un esfuerzo para poder levantarse al menos e ir hacia él, pero su estado actual no le permitía hacer nada, ella apretó los dientes. – (¿Por qué no puedo hacer nada? Kaito-kun se está esforzando para rescatarme y yo…) – Empezó a sentirse desesperada, no quería que todo termine así. – Un milagro… al menos que suceda algo bueno al final… - Y en aquel momento se abrió la puerta, ella levantó la vista, encontrándose con algo que ella no esperaba. - … ¿Qué haces aquí?


El peliazul hizo esfuerzo para levantarse, Miku seguía atrapada y no podía rendirse, no hasta llegar hasta donde está ella.

- Ya te lo dije, mi voluntad es mucho más fuerte, yo tuve que batallar solo para alcanzar el sitio donde estoy ahora. – Explicó Akaito. – No es nada comparado contigo, que tu talento es algo natural, fuiste rápidamente reclutado y ahora eres una estrella, un idol, no entiendes el gran esfuerzo que he hecho para lograrlo.

- … Dices que no lo entiendo… pero sí, lo entiendo muy bien. – Él empezó a levantarse. - ¿Acaso te sentiste abrumado cuando me escuchaste cantar? Si yo pude tomar este camino es gracias a alguien que me dio el impulso, porque yo lo admiraba más que nadie, porque lo escuché cantar, me esforcé practicando horas, entoné mi voz para alcanzar ese tono, esperando que él pudiera alegrarse al saber que puedo cantar al mismo nivel que él, eso era todo lo que yo quería… que me reconociera. – El peliazul lo miró fijamente. – Solo quería eso… que te alegraras de que yo igual puedo cantar tan bien como tú. – Akaito retrocedió en ese momento, sus emociones comenzaron a descontrolarse.

- C-Cómo que tú… querías mi reconocimiento…

- Es lo que escuchaste, lo que siempre quise es que cantáramos juntos, por eso fue que, al saber que te alejaste, me dolió bastante porque nunca tuve una respuesta a ese motivo.

- Y-Yo… - Akaito bajó la mirada al suelo, no entendía que estaba pasando, como si de repente todos los motivos de su trabajo duro fueran invalidados en un solo instante.

- Yo nunca quise esto, que te distanciaras y luego tomaras este camino, este no eres tú, solo quiero… que podamos estar en el mismo escenario, como la familia, los amigos que somos.

- Kaito… - Akaito apretó su puño con fuerza. – Yo… ¿realmente tomé la decisión equivocada?

- Akaito-kun. – Escucharon una voz adicional, ambos voltearon a ver al costado, encontrando una sorpresa ahí.

- Miku-san… - Kaito se alegró de verla, ahí estaba la peliverde, y no estaba sola. – Meiko-san igual…

- ¿Qué puedo decir? Esta mocosa no puede hacer nada sin mí. – Se jactó la castaña desviando la mirada, aunque obviamente ella no estaba siendo totalmente sincera.

- Akaito-kun. – Miku se acercó al pelirrojo, fue ahí que tomó las manos de este. – Realmente pienso que no eres alguien malo, lo sé por cuanto te has esforzado, lo que haces en el escenario no es algo que pueda conseguirse en poco tiempo, yo igual paso horas practicando así que entiendo muy bien cuando alguien se ha esforzado para alcanzar cierto nivel… sí bien hay talentos, estos no simplemente son lo único que nos hace crecer, hay que desarrollarlos para poder elevarlos a un nivel mayor.

- … Tú… - Akaito bajó la mirada en aquel momento, se dio cuenta del error que había cometido. – Como pude hacer todo esto…

- Akaito- Ahora el peliazul se acercó a él. – Se pueden enmendar los errores del pasado y empezar de nuevo… hagámoslo juntos, así en un futuro podremos pararnos en el escenario, como iguales… tal y como en los viejos tiempos. – Akaito vio a su primo a los ojos, recordando aquel rostro tan inocente y lleno de vida de cuando eran niños, sintió un par de lágrimas recorrer sus ojos.

- … Sí… me gustaría… - Sonrió en ese momento, al igual que Miku y Kaito.

- Que bien que lo hayamos arreglado Kaito-kun.

- Claro que sí… gracias a ti Miku-san, he logrado recuperar un valioso vínculo.

- Ejem. – Escucharon a Meiko carraspear su garganta. – Sí, muy bonito todo pero tienen que recordar algo, el concierto final empezará en pocos minutos.

- … ¡Es verdad! – Gritó Miku. - ¿Q-Qué hacemos? Estamos muy lejos del estudio y no podremos llegar a tiempo, la gente se decepcionará.

- Jeje, tienen suerte de que me adelantara a la situación y llamara a un uber hace tiempo, llegará en un par de minutos. – Expresó Meiko, alegrando a los dos.

- ¡Yay, gracias Meiko! – Agradeció la peliverde, causando que Meiko se sonrojara y desviara la mirada.

- ¡N-No lo hago por ti! Esto es por mi futuro ¿entendiste?

- Claro jeje…

- ¿Qué harás ahora Akaito? – Preguntó el peliazul a su primo.

- Yo… me quedaré aquí, a pesar de todo fui participe de este secuestro, pero no volveré a cometer el mismo error, ya en un futuro tomaré el camino correcto y entonces… espero que podamos estar en el mismo escenario. – Estiró su puño, Kaito sonrió e hizo lo mismo, chocando con este.

- Por supuesto, te estaré esperando.

- Ya llegó nuestro transporte. – Avisó Meiko, así los tres fueron a la entrada.

- Nos vemos Akaito-kun, la próxima vez estaremos en el escenario. – Se despidió Miku.

- Por supuesto, los esperaré. – Vio a los tres salir en aquel momento, al estar solo, el pelirrojo soltó un suspiro. – Pasará mucho antes de que pueda cumplir esa promesa…

- Realmente eres una buena persona. – Lapis apareció en aquel momento, teniendo una gran sonrisa en su rostro. – Akaito-san, lo hiciste bien.

- … Ya me preguntaba donde estabas… le diste la dirección para que viniera ¿no?

- Bueno… la verdad es que no me gusta mucho la forma en la cual nuestra compañía trabaja, así que estaba pensando en presentar mi renuncia y entonces buscar otro sitio donde mostrar mi canto.

- Esa no parece ser una mala idea, me gustaría acompañarte. – La peliazul se puso feliz.

- ¿En serio? Entonces vamos juntos, seguro encontraremos nuestro lugar.

- Claro, aunque tardemos bastante, no nos vamos a rendir, hasta estar en el mismo escenario que ellos. – Akaito sonrió por debajo.

- Vámonos entonces. – Estiró su mano, el pelirrojo le respondió tomándola.

- Salgamos de aquí. – Así los dos se fueron del edificio. Un rescate fue hecho, con Miku ya liberada, empezaron a hacer su camino de vuelta al estudio para el concierto y también creyendo que muy pronto podrán ver a Akaito nuevamente, ahora como un compañero más que comparte la misma pasión que ellos, lo esperarán el tiempo que sea necesario.


Quedaban solo un par de minutos para que empezara el concierto, los que se quedaron atrás se estaban prepararon para salir, al menos con ellos tenían qué hacer el tiempo necesario para que puedan volver los demás.

- ¿Ya están listos? – Preguntó Roswa.

- Claro, no hay problema. – Respondió Teto, ya podían salir en cualquier momento para empezar.

- Espero que puedan regresar a tiempo… - Expresó Haku por debajo.

- Lo harán, hay mucho en juego después de todo. – Respondió Neru. – Por ahora nuestro trabajo es dar lo mejor de nosotras ahí afuera.

- Y es lo que haremos. – Respondió Gumi. – Por nuestros amigos.

- Ya vamos a empezar. – Anunció un miembro del staff, todos asintieron.

- Buena suerte a todas. – Animó Roswa. En el escenario las luces se apagaron y la gente se emocionó, fue así que una luz se encendió, apareciendo IA en el centro.

- Sean bienvenidos todos al final del evento, vamos a darlo todo con un concierto, espero estén listos. – La gente acompañó el sentimiento, la pelirrosa se preparó entonces, ella empezaría el concierto con su canción.

"Reproduciendo: IA – Six Trillion Years and a Overnight Story.

Na mo nai jidai no shuuraku no

Na mo nai osanai shounen no

Daremo shiranai otogibanashi

Umaretsuita toki kara

Imiko oni no ko toshite

Sono mi ni amaru batsu o uketa

Kanashii koto wa nanimo nai kedo

Yuuyake koyake te o hikarete sa

Shiranai shiranai boku wa nanimo shiranai

Shikarareta ato no yasashisa mo

Ameagari no te no nukumori mo

Demo hontou wa hontou wa hontou wa hontou ni samuinda

Shinanai shinanai boku wa nande shinanai?

Yume no hitotsu mo mirenai kuse ni

Daremo shiranai otogibanashi wa

Yuuyake no naka ni suukomarete kiretetta

Hakidasu you na bouryoku to

Sagesunda me no mainichi ni

Kimi wa itsu shika soko no tatteta

Hanashikakecha dame nano ni

"Kimi no namae ga shiritai na"

Gomen ne namae mo shita mo nainda

Boku no ibasho wa doko ni mo nai no ni

"Issho ni kaerou" te o hikarete sa

Shiranai shiranai boku wa nanimo shiranai

Kimi wa mou kodomo janai koto mo

Narenai hito no te no nukumori wa

Tada hontou ni hontou ni hontou ni hontou no koto nanda

Yamenai yamenai kimi wa nande yamenai?

Mitsukareba korosarechau kuse ni

Ameagari ni imiko ga futari

Yuuyake no naka ni suukomarete kiretetta

Hi ga kurete yoru ga akete

Asobitsukarete tsukamatte

Konna sekai boku to kimi igai

Minna inaku nareba ii no ni na

Minna inaku nareba ii no ni na

Shiranai shiranai koe ga kikoete sa

Boku to kimi igai no zen-jinrui

Aragau ma mo naku te o hikarete sa

Yuuyake no naka ni suukomarete kiretetta

Shiranai shiranai boku wa nanimo shiranai

Kore kara no koto mo kimi no na mo

Ima wa ima wa kore de iin dato

Tada hontou ni hontou ni hontou ni hontou ni omounda

Shiranai shiranai ano miminari wa

Yuuyake no naka ni suukomarete kiretetta.

La gente disfrutó con la canción de IA, mientras Roswa estaba a un lado en el escenario cuando recibió un mensaje proveniente de Kaito, entonces sonrió.

- (Lograron rescatar a Miku-san… espero que logren llegar a tiempo y que igual, los demás también lo consigan.) – Con el concierto iniciado, era poco el tiempo que tenían para poder regresar a continuar, antes de que este termine.


Ninja Britten 11: El choque entre ambos fue inminente, igual sea para rescatar a Miku, Kaito lo tuvo que enfrentar.

El primer rescate ya ocurrió, igual que Akaito los deja ir y al menos ya cambia, dándose cuenta de lo que hizo para irse con Lapis, ya el concierto inicia y el tiempo corre, para el siguiente cap veremos el próximo rescate. Saludos.