Miku y Kaito ya se encontraban en camino para ir a la reunión de la familia de este, como ella se ofreció a acompañarlo, buscaría que se divierta, de igual modo Miku esperaba saber más sobre la relación entre él y Akaito.

- Ya estamos cerca de mi casa. – Avisó el peliazul. De antemano habían pasado la noticia a Roswa por lo que ambos tenían esos días libres para ir a la reunión, de ese modo caminaron hasta llegar a una casa. – Aquí estamos.

- Es muy sencilla. – Expresó la peliverde.

- No hemos tenido problemas con ello. – En ese momento se asomó un rostro.

- ¿Oh? Pero sí es nii-san ¡Ey! – Era una chica de cabello azulado corto igual que Kaito solo que con puntas más alargadas, aquella chica bajó, teniendo una blusa blanca sin mangas y una falda amarilla con zapatillas. – Ya estás aquí.

- Keiko ¿no deberías estar preparando tu maleta?

- Ya terminé. – Su mirada se posó sobre Miku. - ¿Y ella?

- Es quien les dije que vendría con nosotros, mi amiga de la agencia.

- Eh, esto… soy Hatsune Miku, un gusto. – Ella hizo una reverencia, Keiko quedó un poco asombrada hasta que entonces puso una sonrisa traviesa.

- Jeje nii-san, quien diría que traerías a una chica al viaje familiar ¿acaso no es tu novia para presentar al resto?

- ¡¿N-Novia!? – La peliverde se puso totalmente roja en ese momento, Kaito le dio un pequeño golpe en la cabeza a su hermana menor.

- No digas esas cosas Keiko, no hay que causar malentendidos.

- Oi… lo siento jeje. – Sacó la lengua. – Me presento, soy Shion Keiko, soy su hermana menor, un gusto.

- Igualmente… - Tomó la mano de la peliazul, agitándola ella con fuerza. – Wuah.

- Lo siento Miku-san… Keiko es alguien un poco… hiperactiva.

- Nii-san, solo me gusta divertirme. – Ella hizo un puchero. – Aunque no esperaba que trajeras a alguien menor de trece años.

- Esto… Keiko-san, tengo dieciséis. – Respondió Miku, sorprendiendo a la hermana.

- ¿En serio? Pareces joven, resulta que yo igual tengo dieciséis, somos de la misma edad. – Expresó emocionada, Miku no podía entender porque la confundió con alguien menor, entonces su mirada se posó en el pecho de Keiko y este era grande, en comparación al de ella, tres rayas de pesimismo se formaron en su frente.

- Ya entiendo…

- Es mejor que empecemos a subir todo, ve a cargar tu maleta. – Expresó Kaito, su hermana menor respondió, yendo a la puerta.

- Ya hablaremos más Miku-chan. – Se despidió con una sonrisa entrando a la casa.

- Lamento eso Miku-san, puede ser algo agobiante. – Se disculpó Kaito, la peliverde negó con la cabeza.

- No es por nada, me alegra saber que tienes una hermana que te quiera y no se preocupe por ese tipo de cosas, en cambio yo… pasé cierto momento complicado explicando que iría a este viaje. – Ella desvió la mirada con rostro de agotamiento, de solo recordar cuando hizo la llamada a su casa y la reacción de Mikuo.

"Flashback"

Miku había llamado a su casa desde su celular para avisar que iría en un viaje con la familia de Kaito, esperó unos segundos hasta que tomaron la llamada.

- Miku, es raro que llames. – Respondió Mikuo al otro lado. - ¿Hay algo que necesites?

- Bueno… la verdad es que quiero avisar algo, si pudieras pasar la noticia a nuestros padres.

- Claro ¿Qué quieres que les avise?

- Yo… iré a un viaje a las montañas.

- Oh, eso es normal ¿es un trabajo de tu agencia?

- Bueno… el caso es que… Kaito-kun me pasó la invitación para ir a la reunión de su familia y yo acepté. – Respondió, durante esos segundos no hubo respuesta alguna de su hermano mayor. - ¿onii-chan?

- ¡Como que viajarás con ese sujeto! – Su voz fue tan fuerte que tuvo que alejar la bocina. – Por qué vas a un viaje con un chico, no sabemos que pueda hacer, podría aprovecharse de ti y…

- ¡Onii-chan, Kaito-kun no es de esa forma! – Reclamó Miku con molestia.

- Es que eres demasiado ingenua, no sabes cuando un hombre podría engañarte, además de que no confío en ese niño bonito, es demasiado amable para mi gusto.

- En serio onii-chan, eres un caso, ya lo decidí y no cambiaré de opinión así que dile a nuestros padres.

- ¡E-Espera Miku, no cuel…! – Y colgó en ese momento, la peliverde soltó un suspiro.

- Realmente es increíble. – Frunció el ceño.

"Fin del flashback"

- … Jeje, tu hermano sí que te quiere mucho si reacciona así. – Respondió Kaito con una sonrisa algo afligida.

- Es demasiado sobreprotector, solo es un viaje con un amigo. – Cruzó los brazos en molestia, el peliazul acarició la cabeza de Miku.

- Pero eso demuestra cuanto le importas, la familia siempre quiere protegerse sin importar que pase, lo cierto es que yo podría hacer lo mismo si una persona se acerca con malas intenciones a Keiko.

- Kaito-kun… tienes razón… - Miku ahora se sentía un poco mal por responderle a Mikuo de esa forma. – Ya me disculparé luego con él. – Kaito sonrió al ver como Miku haría lo correcto, en ese momento Keiko se asomó por la ventana.

- ¡Nii-san, ayuda a subir las cosas!

- Ya voy. – Miró a Miku. – Ya vamos a preparar todo. – Ella asintió y de ese modo entraron a la casa. En el proceso ya pudo conocer a los padres de Kaito que eran ciertamente iguales a él, amables y de cabello azulado, tal parece que es un rasgo familiar, la madre incluso bombardeó de preguntas a Miku sobre su relación con su hijo, dejándola toda avergonzada y a lo que Kaito tuvo que intervenir. Al final ya habían subido todo al vehículo y ahora era el momento de partir, ya todos estaban dentro.

- Muy bien, es momento de ir a las montañas. – Avisó el padre, encendiendo el auto y entonces comenzó a manejar, así comenzaron a moverse para salir de Tokio, en dirección a la reunión familiar.


El auto estaba recorriendo la carretera, durante el trayecto Miku habló acerca de su carrera como idol y de como le encantaba cantar, además de todas las ocasiones que Kaito le ha ayudado y ha sido amable con ella.

- Eso es bastante lindo~ - Expresó la madre. – Gracias por ser amigo de Kaito todo este tiempo.

- Al contrario, yo debería estar agradecida con él, es una de mis tantas inspiraciones para continuar haciendo lo que me gusta.

- Nii-san, deberías aprovechar realmente, Miku-chan es una buena chica, no solo es linda, también es amable y de un buen corazón, no me molestaría que fuera mi cuñada. – Le susurró Keiko a su hermano, este solo soltó una risa nerviosa mientras se rascó la mejilla.

- Ya estamos cerca. – Avisó el padre. A la lejanía se podía observar las montañas, tanto Keiko como Miku observaron por la ventana, asombradas por el paisaje.

- Es hermoso… - Comentó la peliverde. Era un sitio de acampar ya preparado con una explanada verde, arboles frondosos y un lago el cual se extendía, claro que todo era dentro de los límites, ya entrar al bosque en sí era peligroso pero estaba cercado para evitar que la gente se salga. Ya entonces llegaron al estacionamiento donde se bajaron, empezando a bajar sus cosas igual.

- Kaito, vamos a encargarnos de esto, las chicas pueden ir a ver. – Exclamó el padre, en ese momento Keiko tomó la mano de Miku.

- Vamos Miku-chan. – De ese modo se llevó arrastrando a la peliverde corriendo sin que esta pudiera decir nada, Kaito simplemente sonrió por debajo. Las dos chicas comenzaron a ir más allá en el sitio de acampada, aún era de día por lo que todo se observaba claramente, los árboles cubrían todo el sitio, Keiko empezó a saltar por todos lados. - ¡Cuantos árboles y son grandes!

- Es cierto. – Miku cerró los ojos, escuchando los sonidos de la naturaleza, las aves cantando, el ligero viento soplando en su rostro. – Es un sitio muy acogedor.

- Tal parece que esta montaña es el lugar preferido para hacer senderismo debido a que se encuentra a una buena altura, una lástima que no tengamos equipo de senderismo. – Keiko soltó un suspiro.

- Parece que te gusta hacer estas cosas ¿no Keiko-san? – Preguntó Miku.

- Jeje, yo hago lo que puedo mientras pueda, es mi forma de vivir, así que si puedo hacer algo, me empeñaré en ello. – Miku estaba algo sorprendida por la filosofía de la peliazul, ella realmente era como un espíritu libre y que puede expresarse sin problemas.

- Eso es bueno, yo no creo poder ser alguien así…

- Claro que puedes. – Exclamó Keiko. – Solo tienes que lanzarte al frente y listo, ya lo estarás logrando.

- Pero no todos tienen la misma facilidad que tú, si bien estoy cumpliendo mis sueños ahora mismo, aún existen algunas cosas por las cuales no me atrevo a actuar…

- … Miku-chan. – Keiko sujetó a la peliverde de los hombros. – Créeme cuando te digo que no soy buena en estas cosas serias, prefiero divertirme y sonreír con todos, pero si puedo decirte algo… no es necesario que te apresures a actuar, en ocasiones también es bueno tomarse su tiempo hasta que estés lista, todos tienen su propio ritmo después de todo.

- Keiko-san… es cierto. – Ella sonrió, no necesariamente tenía que apresurarse a hacerlo. – Lo decidí, voy a esperar hasta que esté lista para actuar.

- Bien hecho, ya pronto espero que seas la novia de nii-san. – Y en ese momento Miku quedó paralizada.

- Eh… esto… ¿desde cuándo?

- Desde el inicio, es obvio que te gusta mucho~ - Canturreó de forma divertida, Miku se cubrió el rostro el cual estaba expulsando humo de lo roja que estaba. – Descuida que no diré nada más, solo te desearé suerte.

- Sí…

- Chicas, vamos al sitio, ya llevaremos todo. – Llegaron los padres y Kaito en ese momento. Ya entonces todo el grupo avanzó por el sendero durante un tiempo hasta que finalmente llegaron al sitio de acampada y entonces vieron a mucha gente reunida, Miku quedó asombrada.

- (No cabe duda que son familia de Kaito-kun…) – Ella no podía observar a más que a pura gente de cabello azul, la genética de la familia Shion era asombrosa a sus ojos.

- ¡Pero sí ha llegado Kaito! – Muchas personas se acercaron a ellos, todos sus familiares lo saludaron.

- Pero quien es esta chica, acaso es tu novia. – Y las preguntas volvieron a hacerse, Miku pasó un mal rato respondiendo a todo y aclarando las cosas, ya entonces en un sitio alejado se encontraba una figura que les observaba, Akaito simplemente estaba cruzado de brazos, mirando a Miku.

- Esa chica…


Ya con toda la familia reunida, empezó la fiesta, estaban puestas las asaderas donde colocaron carne y verduras y los mayores también empezaron a beber, mientras todos los primos de Kaito se acercaban a hablar con él y Keiko, Miku se sentía un poco fuera de lugar al no pertenecer realmente a esa familia.

- (Esta reunión sí que la están disfrutando todos… ahora me da algo de pena el haber pedido que me traigan cuando no tengo nada qué hacer aquí…)

- Ey Miku-chan, ven a que te presentemos a todos los primos. – Exclamó Keiko, ella fue sacada de sus pensamientos y entonces se acercó a todos. – Todos, ella es Hatsune Miku, la amiga que nii-san trajo.

- Wow, es la verdadera, he escuchado todas tus canciones.

- Es genial como apareces en la tele.

- Me encanta tu estilo, es hermoso.

- Eh, esto… jeje, gracias. – Ella no esperaba que todos los primos empezaran a llenarla de cumplidos, ya observando, realmente eran familia de Kaito, igual de amables.

- Es genial que dentro de la familia tengamos dos idols igual, Kaito y Akaito. – En ese momento Miku abrió los ojos.

- ¿Y él? – Preguntó.

- Parece que se alejó, le encanta estar solo. – Respondió uno de los primos, Miku bajó la mirada, quería su oportunidad para hablar con él respecto a la relación que una vez tuvo con Kaito.

- ¿Puedes cantar para nosotros? – Preguntó uno de los primos, Miku no esperaba que le pidieran cantar, en ese momento ella sonrió y guiñó el ojo.

- Esperen hasta esta noche~ - Respondió, haciendo que todos se emocionaran, Keiko y Kaito veían como Miku se llevaba bien con ellos lo cual les alegró.

Así pasó el tiempo, Miku empezó a convivir más con la familia de Kaito pero en ningún momento llegó a encontrarse con Akaito de algún modo, antes de darse cuenta ya se había hecho de noche y entonces las estrellas empezaron a brillar.

- Que hermoso… - Exclamó Keiko con ilusión, todos comenzaron a observar el cielo estrellado, todo un espectáculo natural.

- Realmente lo es… - Miku cerró los ojos, en ese momento ella empezó a moverse de un lado a otro, todos comenzaron a verla.

"Reproduciendo: Hatsune Miku – Star Story"

sora ni ukabu tsuki no you ni

te o nobashite mo kimi o tsukamenai

yami no mukou fureru mirai

sakende mite mo koe wa todaete

itsuka tsutawaru ka na

kaze ni noseta kotoba

sora o koete hoshi o koete

kimi ni todoke kono messeeji

toki o koete hikari koete

kimi ni utau Star Story

muon no yoru tooku kanata

wazuka ni nijimu kimi no nukumori wo

kanjitotte hoo o yosete

sonna negai mo todokazu ni ite

itsuka tsutaetai no

subete kometa uta o

sora no hate e hoshi no hate e

kimi ni todoke kono messeeji

yoru o koete hikari koete

kimi ni sasagu Star Story

sora o koete hoshi o koete

kimi ni todoke kono messeeji

toki o koete hikari koete

kimi ni utau Star Story

Al finalizar la canción todos aplaudieron a Miku la cual estaba feliz, Keiko se acercó a ella.

- ¡Eso fue asombroso Miku-chan! Tienes una hermosa voz.

- Jeje, no es nada.

- ¿Quieres comer algo? – Preguntó Kaito.

- Claro, me gustaría… - En el momento que iba a responder llegó a ver algo, una cabellera rojiza. – Esto, lo siento, antes debo de ir al baño. – Así se fue a perseguirlo, si era Akaito, necesitaba hablar con él de frente. – (Donde se ha ido.) – Al momento en el que iba a dar la vuelta en aquella sección de los baños, la sujetaron del brazo. - ¡Aaaah!

- No hagas ningún ruido. – De repente fue acorralada, Akaito la tenía presa contra la pared de la entrada a los baños, teniendo su rostro muy cerca. – No entiendo que haces aquí…

- Y-Yo… estoy acompañando a Kaito-kun porque lo necesitaba pero igual… quiero hablar contigo.

- No tengo nada realmente de lo cual hablar contigo, solo estás fastidiando. – Él la apartó en ese momento. – No deseo relacionarme contigo.

- Akaito-kun… ¡Quiero que me digas que pasó entre Kaito-kun y tú! – Finalmente pudo decirlo, en ese momento el pelirrojo se detuvo. – No entiendo que fue lo que ocurrió para que dejaran de ser amigos, él me contó que antes se divertían juntos pero eso se detuvo de un momento para otro, deseo saber que pasó.

- … Eres una entrometida. – Akaito en ese momento miró fijamente a la peliverde. – No es algo lo cual debas de saber.

- ¡Pero Kaito-kun no está feliz! – Respondió ella de regreso. – No lo dije fijamente pero es obvio que desea que vuelvan a ser amigos, solo tu sabes que pasó, por eso quiero que lo arreglen de alguna forma.

- Eso no sucederá… estoy completamente decidido a superarlo como artista y entonces cuando sea más famoso, él caerá olvidado. – Fue todo lo que dijo antes de irse, Miku se quedó ahí sola, mirando al suelo en arrepentimiento.

- Pero eso… no es bueno…

- Miku-san ¿ya terminaste? – Kaito llegó en ese momento pero al ver el rostro triste de la peliverde, se preocupó. – Miku-san ¿pasó algo?

- … Nada, estoy bien. – Ella se forzó a sonreír, algo de lo cual Kaito sabía que no estaba bien, por alguna razón ella no deseaba preocuparlo. – Volvamos con los demás, ya quiero comer esa carne asada.

- … Claro. – Así los dos volvieron, pero hubo preocupación en ambos. En Miku por el hecho de que no pudo hablar claramente con Akaito y no le gustaba que haga todo eso por hundir a quien es su familia y por parte de Kaito porque algo pasaba con Miku, ya esa reunión familiar continuaría lleno de dudas para ambos.


Ninja Britten 11: El plan de Meiko no le salió, todo por su orgullo jaja, ya ahí ella necesitará trabajar mejor las cosas para evitar verse envuelta en otro trabajo de ese tipo.

Ya este cap tuvimos a Miku y Kaito yendo a la reunión familiar de este último, ella pudo conocer a toda su familia y al menos se llevó bien con ellos, ya respecto a Akaito, puede que lo haya visto pero no pudo sacar la información que quería, es más, la dejó con más preocupaciones y Kaito se dio cuenta de que algo anda mal, ya en el siguiente cap veremos más de la reunión y qué pasará al respecto, hasta el próximo cap. Saludos.