CAPÍTULO 9: REENCUENTRO DIVINO
Laia reconoció la determinación de la santo de Athena y sobreponiéndose a sus heridas, se puso en guardia de nuevo.
-De acuerdo Pictor, te has ganado mi respeto al sobrevivir a mi técnica. Por eso terminaré con tu vida de forma rápida. Esta vez… ¡Te quitaré los cinco sentidos! "Stygian Promise" (Promesa de Estigia)
El puño de la Avernal expulsó un golpe hacia su oponente, quien salió volando al recibir el golpe.
-Dile adiós a tu olfato
-Esta mujer… -dijo Li en el piso - Al igual que yo parece estar determinada a ganar pero… ¿Por que? ¿Por que razón luchas así?
-¿Que? - la peliverde se sorprendió al escuchar a Li-.
-Nadie sin una motivación que salga de su corazón podría tener tal fuerza al luchar. Dime ¿Por qué proteges a Perséfone?
-¿Por qué peleo?-…
La pregunta retumbó en la mente de Laia, recordando algo que tras siglos en el Inframundo había olvidado.
FLASHBACK
-Lo siento, su madre no mejorará.
-Por favor, debe haber algo que se pueda hacer -gritó Laia desesperada-.
-Solo le queda encomendarse a los dioses, jovencita.
El hombre salió de la humilde casa y Laia repitió aquellas palabras "Encomendarse a los dioses"
Así, fue al Templo del bosque Eleusis y bebió el Ciceón que le ofreció aquella hermosa mujer de cabellos oscuros y rizados. Consagró su alma al servicio de la reina del Inframundo a cambio de la salud de su amada madre.
FIN FLASHBACK
-Mi madre se curó de la enfermedad, aunque… Unos meses después murió en un accidente. Ni siquiera pude estar con ella cuando partió.
-Que tonta…
-¿Que dijiste? -preguntó Laia furiosa-.
-Hiciste un pacto con el diablo a cambio de un espejismo -afirmó Li poniéndose de pie- La hora de morir de tu madre había llegado y te prometieron su cura solo para que les sirvieras.
-Perséfone le dio a mi madre una segunda oportunidad, no tuvo nada que ver con que mi madre muriera después.
-Apuesto a que tu madre habría preferido morir mientras sostenías su mano en vez de esa segunda vida que tanto alardeas pero al parecer estás cegada por la devoción a la falsedad de tu diosa.
-¡Maldita! Me aseguraré de que dejes de decir tonterías quitándote el habla "Stygian Promise".
Li se mantuvo firme frente al ataque, deteniéndolo con su mano.
-Lamento decirte que la misma técnica no funciona 2 veces con un Santo de Athena.
-No, no puede ser...
Un extraño remolino oscuro se había formado bajo los pies de Laia y no la dejaba mover.
- Entiendo tu lealtad hacia quien salvo a tu persona más preciada pero solo fue una mentira, es hora de que te liberes de esa promesa "Supermassive Black Hole" (Agujero Negro supermasivo)
La técnica tragó a la Avernal, devolviendo únicamente su armadura en forma de object.
-Ahora podrás reunirte con tu madre, Laia de Estigia…
- 0 -
Saori había despertado asustada sin entender en dónde estaba o por qué había sido sacada de su casa. Confundida, se acercó con dificultad a una ventana, forzando la cadena con la que estaba sujeta.
-Parece un lugar boscoso -pensó al observar la maleza que rodeaba el templo- y hay algunas estatuas.
-Por fin despertó -una mujer de cabello oscuro y rizado abrió la puerta y la tomó bruscamente del brazo- Vamos, su hermana está impaciente.
La niña fue llevada a una habitación llena de aromáticas flores, donde sonaba una suave melodía. Una mujer alta y esbelta de cabellos color otoño se dio la vuelta para verla.
-Así que eres tú, Athena.
Saori guardó silencio mientras Perséfone recibía una hermosa copa con ambrosía.
-Es extraño verte después de tanto tiempo, en especial en ese cuerpo humano. Jamás entendí por qué hacías esto, renacer y vivir como un simple mortal pero en realidad no es asunto mío. De no ser porque tu existencia en la Tierra se ha vuelto mi mayor problema.
-No se de lo que está hablando. Yo no soy la persona que usted cree.
-¿Es eso cierto? -preguntó furiosa Kore, tomándola del mentón- ¡Reconocería tu impuro cosmos aunque te escondieras bajo cualquier fachada!
-¿Que es lo que quieres con Athena?... Conmigo. -Añadió la pelilila vacilante-.
-Quiero que esta pelea entre tu y Hades termine. Desde que esto comenzó, milenios atrás, el que alguna vez fue un atento esposo se convirtió solo en un vago recuerdo. Ahora solo permanece dormido en los Elíseos y despierta para luchar en tu contra sin tomarse el tiempo para estar a mi lado.
-Entonces dile que pare, que detenga estas guerras absurdas por la Tierra.
La mirada encendida de la diosa del Inframundo intimidó ligeramente a Saori que aun pensaba en cómo salir de ahí.
-¡Él la merece más que tú! es su derecho. Zeus te eligió por ser su hija predilecta y porque alguna vez fuiste una diosa fuerte, enérgica e imparable. Pero ahora, tu divinidad ha sido empañada por los mortales y los dejas mancillar el regalo que se te otorgó.
La niña de cabellos lilas bajó la mirada sin saber cómo responder a aquello.
-Ha sido suficiente, muchos de nosotros los dioses lo hemos pensado pero pocos se han atrevido a desafiarte por temor a encender la ira de Zeus. Sin embargo, estoy segura que incluso nuestro padre esta hastiado de tanto conflicto y ahora yo, que también soy su hija, tomaré la Tierra en nombre de Hades.
-¿Que piensas hacer? -preguntó Saori en tono desafiante-.
-No tengo interés en dañar la Tierra, después de todo, es un lugar preciado para mí. En cuanto a los humanos, estoy segura que mi amado esposo tendrá buenas ideas, será mi regalo para él. Pero tu… Querida hermana, tu si estas en mis planes.
Perséfone hizo un movimiento con su mano para indicar a sus guerreras entrar.
-Purifíquenla y vístanla adecuadamente. Serás el mejor sacrificio de todos, hermanita.
Saori observó a las mujeres que se acercaron a ella con paños húmedos y comenzaron a quitarle la ropa mientras ella intentaba liberarse pidiendo ayuda.
- 0 -
En el bosque, Shaina y Geist corrían por aquel interminable sendero.
-Has estado muy callada -dijo Shaina a su amiga- ¿Pasa algo?
-No… Solo no he querido quitar la atención de tu amiga.
-¿En serio? -preguntó la cobra en tono de molestia, deteniéndose- ¿Estas molesta por Ibis? ¿En que te afecta esto? La conozco desde que éramos unas niñas.
-¡Creí que yo era tu mejor amiga!
-Lo eres pero… Ibis es diferente. Ella es… Mi familia- afirmó la peliverde y continuó ante la molesta Geist- No lo entiendes pero gracias a ella sobreviví en el orfanato donde nos conocimos…
FLASHBACK
-Miren, ella es la que rompió el jarrón con flores de la directora, por ella nos castigaron a todas. Démoselo una lección
-No, esperen, fue un accidente.
"Aquellas niñas, eran mayores que yo y me molieron a palos con toda la furia que sus lamentables vidas les daba, fue entonces que..."
-¡Ya basta! Déjenla ahora mismo. No quiero que la vuelvan a tocar ¿entienden?
"Ibis me defendió aun sin conocerme y a partir de ese día me tomó bajo su resguardo. Me enseñó a defenderme, a sobrevivir. Yo hice todo lo que me decía, la respetaba y admiraba pero lo más importante fue que me hizo sentir parte de una familia, aún en aquellas precarias condiciones en las que vivimos. Hasta que…
-¡No, no quiero ir con ellos!
-Esto es lo mejor. No podemos quedarnos aquí para siempre, sabes cómo terminaremos si lo hacemos.
-¡Pero yo quiero ir contigo, no dejes que me lleven lejos!
-Shaina -dijo Ibis pacientemente- Se que posees un corazón fuerte y que te convertirás en una guerrera formidable, jamás dudes de ti. Ahora vamos y encontremos nuestro camino.
FIN FLASH BACK
-Después de aquel día no volví a tener noticias de ella; a pesar de mis temores, conseguí completar mi entrenamiento y tener un lugar entre las guerreras del Santuario, tal como Ibis quería. Sentí que lo hacía en su memoria.
-¿La diste por muerta así sin más?
-Eso creí. No había nadie que me diera algún indicio de ella, solo supe que había ido a entrenar a Suiza al dejar el orfanato, pero nunca pude averiguar si había sobrevivido. Es por eso que ahora que la he encontrado… Por fin puedo sentirme completa.
La pelinegra se quedó un poco pensativa, pero finalmente dijo:
-Lamento haberme portado como una tonta, me sentí desplazada pero ahora entiendo, Ibis fue para ti, lo que tu eres para mí. Desde que te conocí, admiré tu fortaleza y espero algún día ser un poco como tú.
Geist siguió de nuevo el camino, dejando a Shaina sorprendida por aquella pequeña confesión. Ambas se habían conocido en el Santuario y rápidamente habían congeniado pero nunca pensó que su amiga sintiera esa clase de admiración por ella. Apretó el paso para alcanzarla pero se dio cuenta de que había alguien observándolas.
-Geist ¡Cuidado!
La cobra se lanzó para cubrir a su amiga, siendo alcanzada por aquel misterioso ataque.
-¡Shaina! -La pelinegra volvió sus pasos- ¿Estas bien?
-Si -dijo tocándose el costado del abdomen- El golpe solo me rozó.
-¿De donde vino el ataque?
-Fu fu fu, lamento haberlas interrumpido pero empezaba a aburrirme su parloteo.
Una mujer alta y esbelta salió desde los árboles ante la mirada sorprendida de las santos femeninos.
-¿Quien eres? -preguntó Geist evidentemente molesta-.
-Mi nombre es Iara del Tártaro, una de las 8 Avernales al servicio de la diosa Perséfone y estoy aquí para detenerlas, santos de Athena.
Geist dio un paso al frente en señal de querer luchar pero su amiga la detuvo.
-No… Debemos llegar al templo cuanto antes, es posible que esa niña esté en peligro. Yo me encargaré de ella, tu sigue adelante.
Geist dudó por un segundo pero sabía la clase de guerrera que era la peliverde, por lo que accedió.
-Confío en ti -dijo mientras comenzaba a caminar- nos veremos en el templo.
Al darse cuenta de esto, la Avernal intentó dar alcance a Geist pero se vio sorprendida por Shaina que comenzó a lanzarle golpes.
-¿De verdad crees que esta clase ataques te servirán conmigo?-preguntó Iara sonando decepcionada-.
-Tal vez no, pero conseguiré darle tiempo a mi compañera de seguir con la misión y ese es mi mayor objetivo.
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