NO SOY DUEÑO DE INUYASHA. PERO SI SOY DUEÑO DE MIS HISTORIAS Y NO DOY PERMISO A NADIE A UTILIZARLAS.

HOLA DE NUEVO.

EN ESTE VIAJE LOS LLEVARÉ A UNA HISTORIA DIFERENTE, CON AVENTURAS, CONFLICTOS ROMANCE… UNA HISTORIA MUY DESDE EL FONDO DE MI IMAGINACIÓN. NO ES LA PRIMERA DE ESTE GÉNERO NI SERÁ LA ÚLTIMA, PERO ESPERO QUE SEA UNA DE LAS MÁS ENTRETENIDAS.

ABRAZO ENORME.

Capitulo 26

Kagome no pudo articular palabra alguna.

Sus piernas comenzaron a temblar.

Hakurei se borró de su mente y nada más importó.

De pronto se encontró de pie, frente al Daiyoukai que la veía con sus ojos ardientes y que iban desde sus ojos a su boca. Notaba el movimiento en el que demostraba sus intenciones de besarla en cualquier momento.

Sesshomaru se acercó un poco más, de nuevo tomó sus brazos suavemente y fue acercando su rostro al de ella.

Lentamente y observando la belleza de la joven que paulatinamente cerraba sus ojos.

Ya casi estaba allí.

Ella no luchaba para quitárselo y simplemente iba elevando su carita hasta que sus labios estuvieron a su alcance.

Y entonces…Sucedió

La boca del Inu suavemente se posó sobre los labios carnosos de Kagome y apenas succionaba.

Se apartó un poco para ver su reacción y lo que vio fue tan adorable que no tardó en besarla una vez más, pero esta vez su boca se movió de un lado a otro para apartar los labios de la joven y cuando ella apenas abrió la boca él supo que era el momento de profundizar su beso.

La succión sensual era suave, dulce y ella también respondía.

Su instinto provocó que su lengua invadiera la boca de la mujer, sin darse cuenta de por qué lo había hecho pero no lograba detenerse, era tan delicioso…

Sin separarse, caminaba arrastrando delicadamente a Kagome a apoyarse contra la glorieta.

No tenía escape, y la rodeó con sus brazos.

Luego, separándose un tanto pero no demasiado le susurró sensualmente

-"Ese fue tu primer beso…"

La joven sonrojada sonreía tímidamente, Sesshomaru continuaba

-"Ahora quiero el mío"

Kagome lo miraba emocionada

El Lord ajustaba sus brazos a su alrededor y su voz sonó apenas como un suspiro, un secreto

-"Bésame… Mujer…"

Y Kagome obedeció

La boca femenina cubrió la del macho y su lengua se apoderó de su interior. Acariciando suavemente la cavidad del Inu, ella besó, saboreó y profundizó su beso aún más, atreviéndose a tomar de los cabellos de la nuca al Daiyoukai que sintió que se doblaron sus rodillas y lo abandonaron sus fuerzas.

La intensa pasión que experimentaba el Daiyoukai por primera vez en su vida lo hizo temblar, debilitarse, casi desfallecer y eso lo sorprendió, lo confundió e hizo que se apartara de repente.

Su mirada extrañada estaba fija en ella.

Qué le había hecho la sacerdotisa para que sus piernas le fallaran en ese momento?

Daiyoukai pura sangre y una ningen lo ponía de rodillas?

No comprendía, qué extraño poder tenía ese…Beso que se sintió tan… Pero qué delicioso había sido.

Kagome se preocupó por la reacción de Sesshomaru. Acaso lo había hecho mal? No debió tomar sus cabellos?

Pero por Kami que ella no había querido hacer nada malo.

Sabía que a Inuyasha le dolía que le jalen del cabello pero…

La mirada de sorpresa del macho la alarmó

Lo habrá ofendido Tal vez?

Su rechazo a los humanos habrá hecho que el Inu se apartara de ella de esa forma y que la viera con la mirada de extrañeza?

No quería averiguar, temía saber la respuesta! Necesitaba huir.

-"Lo- Lo siento…"

Sesshomaru no lograba decir nada, solo la miraba incrédulo

-"Yo…"

Reverenció apenas, se giró y se alejó corriendo

El Inu desconcertado aún paralizado de éxtasis la vio correr y aunque deseó alcanzarla, no pudo hacerlo.

Qué maravillosa sensación el beso humano si es recibido de alguien que te atrae tanto como la Miko a él.

Se sentía como adormecido, flotando en un sueño

Pero el golpe que sintió en la nuca lo despabiló.

-"Pero qué idiota eres! Ve tras ella!"

-"Inu…Yasha?"

-"Quién más! Ve!"

El Inu estaba confundido pero logró recobrar la compostura

-"Ir tras ella?"

-"Pues ella huyó imbécil!"

Kikyo se sumaba

-"No ve como corrió avergonzada? ¿Qué fue lo que le hizo?"

-"Mik-Miko?

-"Si!"

-¿Cuánto hace que están allí?"

-"QUÉ IMPORTA! Ve con mil demonios!"

-"VAYA MI LORD!"

Kagome entró corriendo y doblando aquí y allá terminó dentro de un recinto oscuro y enorme.

Las gigantescas estatuas de piedra luna iluminaban el lugar.

A los costados se veían innumerables rollos y manuscritos acaso era una biblioteca?

Los enormes ventanales le mostraban el horizonte apenas visible y la enorme luna

¿Dónde estaba?

No le importaba, solo quería desaparecer.

Caminando hacia el enorme sillón largo cercano a la ventana se sentó allí mirando hacia afuera.

Apoyó sus brazos en el gran respaldo y bajó su cara para apenas mirar hacia afuera y esconder un poco su pena entre ellos.

Sesshomaru buscaba el rastro de energía sagrada.

Condenada mujer ¿Cómo era posible que se escondiera tan bien?

Elevando su youki, dentro del palacio el reiki del monje Miroku, del anciano Hiten resonaban con él afuera la Miko de Inuyasha y en los alrededores los sagrados del Este, pero la energía de Kagome no respondía.

Buscó por todo el palacio, los jardines las caballerizas y demás sitios, ayudado por los primos de Kagome que intentaron ayudar sin alarmar al anciano.

Nada.

Sango un tanto enojada se cruzaba de brazos y los miraba reunidos en las escalinatas debatiendo acerca de dónde podría estar.

Ella conocía a Kagome como nadie

Kikyo le había comentado acerca del beso y la huida. Ella no estaba feliz con Sesshomaru porque desconfiaba de las razones de la huida de la sacerdotisa, pero pensando fríamente un poco, si Kagome lo había besado, era porque le gustaba y no podía negar aquello.

Tendría que ser fiel a su cariño por su prima y ayudar.

-"Deberían dejar de buscar, si ella no quiere ser encontrada, no podrán encontrarla"

-"Taijiya"

-"Kagome aparecerá sola cuando se le quite la rabia, la pena, la vergüenza o lo que sea, siempre es así"

Los humanos asentían mirándose entre ellos, Inuyasha resoplaba, y Sesshomaru no entendía demasiado.

-"Si lo que la hizo huir no es demasiado grave…"

Miraba con desconfianza al Daiyoukai

-"Se le pasará en unos días"

¿Qué? Unos Días? Sesshomaru no quería esperar unos días! Quería verla de inmediato!

-"Sin sentidos, este Sesshomaru la encontrará"

Y sin esperar más se dio la media vuelta y se alejó dejando a todos negando con la cabeza y suspirando

-"Keh! … Idiota"

Dentro de palacio, caminaba sin rumbo hasta que llegó al altar recordatorio de su padre y allí sin quererlo se detuvo a mirar su imagen.

-"Otousan…Encontré aquello que encontraste tú, pero al parecer lo estoy perdiendo cuando ni siquiera lo entendí del todo, se escurrió de mis garras como el agua del río"

La luz de las velas y el aroma de la salvia quemándose, su padre parecía mirarlo y Sesshomaru sentía un gran vacío formarse en su interior.

Tal vez era mejor esperar hasta que la joven apareciera cuando a ella le pareciera conveniente o se calmara..No tenía idea de lo que hacer.

Nunca tuvo una relación seria y menos con una hembra ningen, no sabía cómo abordar este problema.

Suspirando reverenció y se retiró.

Fue atravesando corredores hasta sin intención llegó a su estudio.

Entró

Se sirvió un vaso de sake que colocó en su escritorio

Se fue a sentar en su sitio.

Acomodó sus cabellos hacia atrás con sus dos manos y resopló agotado.

Bebió de un trago su sake y se echó hacia atrás en su asiento para quedar de frente al ventanal que le mostraba un panorama asombroso.

-"Miko?...Ka- Kagome?"