Capítulo 23

4 años después de que se marchara Jin.

Haiden ahora tenía 10 años, y ya era uno de los mejores de su generación junto con sus demás amigos. Muchos creen que ellos serían la segunda generación de prodigios que había asistido en la academia, ya que la primera había sido la generación de Jin quienes muchos se habian graduado a temprana edad. Y él no podría estar más orgulloso de sí mismo por este logro, ya que oficialmente en tres días más se graduaría de la academia.

Y lo que aún era mejor es que Jin por fin regresaría en cualquier momento ya que había pasado los cuatro años que había estado en su viaje de entrenamiento. Por lo que la estaba esperando con impaciencia en la entrada de la aldea junto con Kakashi y su padre.

No tuvieron que espera más cuando una figura femenina se acercaba a la distancia, al principio no la había reconocido ya que la figura estaba cubierta con una larga capa negra que se desvanecía ligeramente en rojo y que estaba algo rasgada al final, además de que traía puesta la gran capucha estilo de bruja y sin eso no fuera suficiente también traía puesta una máscara de cráneo en su rostro que ni siquiera se le veía los ojos ya que parecía que tuviera cuencas vacías con dos pequeñas luces saliendo de ellas. Además de esa aura de poder que desprecia lo hacía temblar levemente, No más le faltaría la guadaña para ahora asi ser la muerte.

Si Haiden no hubiera reconocido su vez juraría que la misma muerte se le había parecido frente a el para llevárselo ahora asi luego de esquivara en varias ocasiones.

-¡hola Sakumo-Sensei!.-saludo Jin alegremente.

-¿J-Jin eres tu?.-pregunto Sakumo algo nervioso ya que la chica si que daba algo de miedo vestida de esa manera.

-si, lo soy.-dijo Jin algo divertida mientras se quitaba la máscara y se bajaba la capucha mostrando asi su cabello ahora más corto hasta su media espalda con el lado derecho semi trenzado, asi como un rostro más juvenil dejando atrás la apariencia de niña. –Es un gusto volver a verlo.- sin más la pelirroja lo abrazo sorprendiendo al mayor por un momento antes de regresarle el abrazo.

-bienvenida de nuevo Jin.- dijo Sakumo feliz.

-es bueno estar de vuelta.-dijo Jin antes de separarse.

-¡Jin!.-gritaron los dos pequeño peli gris que se lanzaron abrazarla.

-hey chicos es bueno volverlos a ver.-dijo Jin abrazado a los dos como pudo. La pelirroja había extrañado mucho a los dos chicos, había extrañado los momentos en que los tres veían películas juntos o jugaban juegos de mesa, asi como entre muchas otras cosas más que hacían juntos para pasar el rato y divertirse.-y los dos están mucho más grandes que la última vez que los vi.-y era cierto Kakashi ahora le llegaba a la altura de su cintura mientras que antes apenas llegaba hasta un poco debajo de su cadera, y Haiden sí que también había crecido ya que le llega hasta un poco más debajo de su pecho.

-y también me he vuelto más fuerte, en unos días me graduare de la academia.-dijo Haiden con una sonrisa.

-yo también, los Sensei dicen que si sigo asi me graduare antes que los demás.-dijo Kakashi con orgullo.

-¿en verdad?.-pregunto Jin sorprendida.

-asi es.-dijo Sakumo orgulloso pero con una mirada de pesar que ninguno de los dos niños vio pero si Jin quien entendió porque estaban asi. Ya que una gran parte de el estaba muy orgulloso de que sus dos hijos sean considerados un prodigios y que uno de ellos ya estaba a punto de graduarse temprano de la academia, pero otra parte de el estaba muy preocupado por eso ya que uno de sus niños sería enviado en poco tiempo al mundo real de un ninja de la aldea, lo que significa que la muerte siempre lo estaría asechando en cada esquina, un solo error y ya jamás volvería a ver a su hijo, y nada de reconocimientos que le dieran o lo orgulloso que estaría de el cómo ninja se lo traerían de vuelta.

-valla, sin duda serán grandes ninjas algún día. Y esto merece un premio.-dijo Jin tratando de distraer a su antiguo Sensei de sus pensamientos.

Ante esto los dos chicos se emocionaron por sus posibles regalos, Jin solo se rio y les dijo que se los daría después ya que necesitaba llegar a su departamento para desempacar pero antes tenía que ir a la oficina del Hokage para dar aviso de su llegada, a lo que Sakumo estuvo de acuerdo y les dijo que ellos se marcharían para dejarla hacer sus cosas pero no sin antes invitarla a cenar con ellos en ichiraku en la noche a lo que la pelirroja acepto gustosa ya que había extraño mucho el ramen de su puesto favorito.

Luego de despedirse de ellos Jin fue directamente a la oficina del Hokage, la reunión con el fue rápido ya que solo se iba presentar ante el para dar conocer su regreso y que de nuevo el Hokage le entregara du diadema ninja y la pusiera de nuevo como un Jōnin activa de la aldea ya que entes de irse tuvo que dejar su banda ninja con el Hokage por protección por si se llegara a meter en problemas no involucrara a la aldea en ellos. Después de salir de la oficina del Hokage se dirigió hacia su departamento para dejar sus cosas, al llegar vio que todo estaba igual que como lo dejo aunque algo más polvoriento, al ver que las ventanas estaba selladas y las cortinas corridas, Jin uso su magia para limpiar rápidamente su departamento ya que le daba algo de flojera hacerlo a la antigua, en menos de 10 minutos todo el lugar estaba muy limpio y brillante, a lo que la pelirroja suspiro de alivio.

Al entrar a la cocina y ver los estantes vacíos al igual que su refrigerador el cual acaba de volver a conectar, sabía que tenían que hacer una compra de víveres urgentes. Pero antes se daría una ducha, ducha que duro casi una hora, en esos momentos agradecía infinitamente haber dejado suficiente dinero a Sakumo-Sensei para que le pagara la luz y el agua, y no se la cortaran por falta de pago. Al terminar se vistió con su ropa normal (de la cual tenía varios cambios) antes de colocarse sus protecciones y su capa para luego salir de su apartamento de nuevo para comprar los viveros pero antes iría a un lugar.

Asi que dirigiéndose ahí rápidamente llego al campo de entrenamiento, al llegar pudo ver a la distancia una figura sentada bajo la sombra de su árbol favorito, Jin no pudo evitar sonreír de alegría y felicidad al reconocer ese cabello rubio, de hecho podría reconocerlo en un mar de cabello rubio. Al aparecer no se había dado cuenta de cuánto tiempo se había quedado parada como idiota mirando que no se dio cuenta que el rubio había sentido su presencia y se había volteado a verla y que la estaba mirando con sorpresa e incredulidad al verla frente a el.

-hola Minato, estoy de vuelta.-dijo Jin sonriendo.

El rubio rápidamente se levanta de donde estaban sentado, y tarda mucho e ir hacia la pelirroja darle un gran abrazo.

-bienvenida de nuevo Jin.-dijo Minato feliz de por fin tenerla de nuevo en sus brazos, la había extrañado mucho todos estos años. Preguntándose a cada momento como estaría, si estaría bien o no.

O lo peor si había encontrado a alguien mejor que él y decidiera quedarse con esa persona en lugar de regresar, entre otros pensamientos oscuros o inseguros que tenía sobre ella. Por lo que para no pensar mucho en ello, se dedicó a entrenar intensivamente todos estos años para mantenerse distraído y también para no quedarse atrás cuando la chica regresara.

Cuando se separaron Jin por fin se dio cuenta que Minato había crecido y no solo de altura que ahora le ganaba por una cabeza a pesar de que ella también era algo alta, sino aparecer había ganado más musculo al notárselos aun con su playera de manga larga azul y su chaleco Jōnin, además su cabello había crecido más dándose un toque más atractivo.

-"se ha vuelto muy guapo, bueno siempre lo ha sido pero ahora..."-pensó Jin mirando con atracción al rubio.

Sin darse cuenta que dicho rubio también la miraba de igual forma hasta de algún modo los dos se dieron cuenta de sus miradas y terminaron sonrojándose.

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Después de platicar por unas horas con Minato y de haber ido a surtir su despensa vacía, se había hecho de noche por lo que Jin se dirigió directamente hacia Ichiraku donde se encontraría con la familia Hatake, pero cuando llego ellos ya estaban ahí esperándola en una de las pequeña mesas del puesto en lugar de sentarse en la barra como la mayoría de las veces lo hacían. Luego de saludar al viejo Teuchi, aunque no estaba tan viejo en realidad, y haber pedido sus órdenes se pudieron a charlar.

-¿Cómo estuvo tu entrenamiento? Si fue productivo.-pregunto Sakumo curioso.

-estuvo muy bien, pude mejorar más de lo que pensé y sin duda si fue muy productivo aunque creo que todavía me falta aprender algunas cosas más.-dijo Jin sonriendo con algo de misterio.

-hey Jin-Onēsan ¿viajaste mucho y aprendiste mas estilos de pelea?.-pregunto Kakashi curioso y emocionado por saber las aventuras a la chica mayor.

-se podría decir. Conocí algunas personas que me enseñaron alguna que otra cosa, pero mayormente me mantuve alejada de las aldeas prefiriendo acampar en el bosque.-dijo Jin.

-oh, entonces tuviste un viaje aburrido.-dijo Kakashi decaído y decepcionado.

-oye no fue tan aburrido como suena. En algunas ocasiones ayude a las personas y en una de esa ayuda que ofrecí a cambio me apagaron con enseñarme el arte de la espada y su camino a seguir.-dijo Jin modificando algo de su viaje por lo que los otros no lo notaron.

-me enseñarías, seria genial manejar una a la perfección.- dijo Haiden.

-si yo también quiero saber.-dijo Kakashi.

-si quieren, pero han de saber que no soy una experta en eso ya que prefiero otras armas.-dijo Jin encogiéndose de hombros.

Su plática fue interrumpida por la llegada de su comida, Jin al ver y oler el delicioso aroma del ramen practicante se le hizo agua a la boca por lo que no perdió tiempo en cavar en el plato para gran diversión de Sakumo. Al a mitad de su cena Jin se acordó de los regalos que había traído, algunos los había hecho mientras que otros los había comprado. A Kakashi le había traído libros escritos de Jiraiya pero no lo pervertidos ya que ni loca le estaría comprado algo asi a un niño, sino los de sección infantil que era de aventuras y esas cosas, ya que había visto que al niño le gustaba ese tipo de libros, además de eso también le dio un collar de lazo negro con un dije de un perro que amo de inmediato y varios Kunai y Shurinkens que le compro para que practicara su tiro. A Haiden le había traído un Tantō especial que mando hacer para él, asi como también le dio un pergamino con alguno Jutsus de rayo y fuego que copio de unos pergaminos de la biblioteca de la bóveda ya que no quería sacar el original. Mientras que su antiguo Sensei le había traído varios libros de recetas de diferentes países asi como una caja con diferentes tipos de bebidas tanto alcohólicas como no de diferentes países, algo que sin duda le gusto al peli gris mayor.

Al terminar su cena y haber pagado la comida, todos se despidieron antes de irse hacia sus respectivas casas.

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Tres días después

-¿Qué yo que?.-pregunto Jin con incredulidad.

Hace unos minutos atrás el Hokage la había mandado a llamar, Jin al principio creyó que comenzarían a darle misiones de nuevo pero nunca imagino que era para esto que la llamarían.

-quiero que seas Sensei de un equipo Gennin.-dijo el Hokage serio.- eres una gran ninja Jin, no tengo duda de que serás una gran maestra para alguno de estos equipos. Además eres de los pocos Jōnin que quedan libres en este momento.-

-¿pero que hay de las misiones que me mandarían?.-

-bueno si hay alguna en la que tengas que ir, tus Gennin tendrán que entrenar solos mientras regrese o podrías también pedirle algún Jōnin que te remplace temporalmente mientras regresas. De cualquier forma eres una de las mejores calificadas para esto.-

-y-yo…-dijo Jin sin saber que más decir, por lo que solo suspiro con resignación y sin mas ganas de discutir que ya que desde unos días a comenzado a sentir punzadas en su cabeza, no sabía si era consecuencias de haber hecho eso tan pronto unas semanas antes de regresar a la ladea .- está bien, ¿puedo saber qué equipo tendré?.-

Hiruzen sonrió contento.-por supuesto.- dijo mientras le tenía un papel donde decía los nombres de sus futuros estudiantes.

-equipo 11: Hatake Haiden, Sarutobi Ryoma y Senju Riku.-dijo Jin sorprendía leyendo en voz alta.

-asi es, el director de la academia junto con los demás Sensei fueron los que hicieron los equipos antes de enviarme los papeles. Hoy será la graduación y mañana se anunciaran los equipos a los graduados, por lo que se requerirá que mañana pases a recoger a la academia a los Gennin que estarán bajo tu mando desde mañana.-

Después de unas indicaciones más Jin se despidió del Hokage antes de retirarse de la oficina.

No podía creer que desde mañana seria oficialmente una Sensei, una Sensei de un equipo Gennin y no cualquier equipo sino uno en el que estaba a un niño que consideraba su hermanito y que en su interior estaba segura de que se trataba en realidad de su viejo mejor amigo renacido, y si por eso no fuera poco otro de los niños era parecido al caso de Haiden aunque esta vez era su viejo amigo Neville, y en definitiva no podía ser una coincidencia.

Ya sería el maldito colmo que Ryoma resultara ser otra reencarnación de alguno de sus antiguos amigos.

-"si no puedo tener tan mala suerte ¿verdad?".-pensó Jin.

…

…

….continuara…